revista del ismp n° 18

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REVISTA D EL

DEL

(Bodas de Plata de la Institución)

ENERO - MARZO 1960 ..

LIMA PERU

(Cortesía del Bañco Comercial del Perú)

© 1935 - 2015 Instituto Sanmartiniano del Perú. Todos los derechos reservados.

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Primera Junta Directiva del Instituto S,aninart-iniano del Perú

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• ( 16 de abP! de 1935)

Presidente: :t.Ji.e~ lio~o¡~o:

Sr. Rafael Larco Herrera E;~iad9r,de la __ Jil:g~n.tina en ¡el ¡Perú., Sf. Ap.tonig Mo~a y Ár~:UiP

Vioe-P-residentes: Srs. Dr. José Gálvi:iz . y

Secretarios:

Tesoreros:

Bibliotecario:

Vocales:

Dr. Luis Alayza Paz Soldán Señc;>res Dr. José M. Valeqa y Ricardo Cavero Egúsquiza Señores Dr. Luis Felipe Paz Soldán e I1wenier-o A~rto Alexander In~ierq Pascual Saco Lanfranéo

Dr. ArJuro Pérez f iguerola Dr.. Hor;.acj,o H. Urteaga Dr. Víctor Criado y Tejada Dr. Luis E. Valcárcel Dr. Carlos A. Romero Comandante Carlos Dellepiane Coronel Manuel C. Bonilla Dr. Juan Bautista de Lavalle Dr. Osear Miró Quesada Dr. José Jiménez Borja Sr. Manuel Benvenutto Murrieta Ingeniero Fernando C. Fusch Sr. Pedro Ruiz Bravo Sr. Remigio B. Silva Comandante Ernesto Salaverry Dr. Edmundo Escomel Dr. Luis Espejo Sr. Carlos Gabráel, Saco, Dr. Evaristo San, Cristó.val Ingeniero Juvenal Monqe.

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REVISTA •

DEL

INSTITUTO SANMARTINIANO DEL

P.ERU (Bodas de Plata de la Institución)

ENERO - MARZO, 1960 LIMA. Perú.

(Cortesía del Banco Comercial del Perú)


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Indice

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EDITORIAL . . . ·. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 4 REUNION PREPARATORIA del Instituto Sanmairtiniano dél Perú 7 EL COMITE ORGANIZADOR del Instituto Sanmartinianb del Perú 8 PROGRAMA CONMEMORATIVO DEL 259 ANIVERSARIO del Ins-

tituto Sanmartiniano del Perú . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 9 "SAN MARTIN Y LA PERUANIDAD". Conferencia del S::-. Manuel

Vegas Castillo. Presentación del Sr. Luis Lama . . . . . . . . . 11 LA SOLEMNE CEREMONIA DEL INSTITUTO SANMARTINIANO

DEL PERU. {Discursos de los señores Ricardo Cavero-EgÚsquiza, Dr. Luis Alayza Paz Soldán, General Ernesto Florit. Generdl Carlos A. Salas Dr. José R~bio Rolando y Horacio Portela) . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . : . . 33

ANTE EL MONUMENTO AL GENERAL SAN MARTIN. (Discursos de los señores' Osear Guzmán Marquina, General Ernes-to Florit y Oswaldo García Piñeiro) . . . . . . . . . . . . . . . . . . 56

HOMENAJE DEL PUEBLO DE HUAURA. ©iscursos de0

los señores · Juan Barrera, Dr. José Torres Muga- y Dr. Alberto Cabrera). 64

HOMENAJES A LOS, GENERALES FLORIT ': SALAS. (En el "Instituto Mariscal Castilla", en el "Museo Histórico-Militar", en el "Instituto Cultural Peruano-Argentino" y Condecoraciones -en el Ministerio de Guerra) ... · . . . . . . . . . . . . . . . . . ; . . . 75

ALOCUCIOÍ'-TES RADIALES ~De los señores García RoselL Casa-na v l\1acera) . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .. ·. 85

VEINTICrÑCO AÑOS DE LABOR SANMARTINIANA; por César García Rosell . . . . . . .- . . . . . . . . . . . . . . . . . . .. . . . . . . . 92

CONGRATULACIONES INSTITUCIONALES (Sociedad Geográfica de Lima, Sociedad Bolivariana de Lima, Sociedad Fundado-: res de la Independencia, Conceio Provincial del Callao y Centro Argentino de Urna) . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 94

EL EMBAJADOR FELIPE YOFRE: UN -FERVOROSO SANMARTI-NIANO, por Teodoro Casana . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 98

EL DOCTOR JUAN B. LASTRES .. . . .. .. . .. . .. . . .. .. . .. . 101


,,,. General José de San Martín (Ó]foo de fackes Maoco, propiedad del Dr. Pedro Ugarteche)


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'-' REVISTA DEL

1 n s t i.t u t o S a n m a r t i n i a n o d e 1 P e rü· Año XVI Enero - Ma.rzo c!e 1930 N<? 18

EDIT O RIAL V

Es éste un número extraordinario de la Revista del Instituto Sanmartiniano del Perú. Contiene todo lo referente a Ja conmemoración del 259 aniversario de la fundación de dicho Instituto, con las actuaciones y ceremonias rea/Iza.das durante una semana, del 20 al 26 de febrero del presente año, incluyendo conferencias, discursos, charlas radiales, drtÍculos periodísticos, etc., piezas todas de profundo contenido históri-co, digna.s de difundirse ampliamente.

La Revista, con la misma edad del Instituto Sanmartiniano del Perú, nació en 1935 .. hace 25 ai'íos. Es cierto que en el curso de su existencia ha tenido explicables paralizaciones durante algunos períodos. Pero, siempre que ha salido a luz, ha sido para cumplir en forma cabar su alta misión de divulgar la obra docente de la entidad.

La celebración de las Bodas de Plata del Instituto SaJJ.martiniano del Perú ha tenido amplia repercusión. Numerosas son las notas congratulatorias recibidas, con elogiosas referencias sobre nuestra obra cultural y nacionalista, procedentes de instituciones, autoridades y personas pa.rticulares de Lima, de provÍncias y también del exterior, a las que agradecemos debidamente, apreciando en todo lo que dichas re.ferencias representan como expresión de reconocimiento y de estímulo.

El Instituto, presidido con innegable acierto y brillo por el Sr. Rí-cardo Caverc Egúsquiza, se siente patriótica y espiritualmente satisfe· cho de la labor desarrollada en este lapso de 25 años. Sus asociados, ya sea en la Junta Directiva, en comisiones especiales o simplemente en forma aislada, todos, en general, han colaborado con verdadero entusiasmo para irradiar a todo el ámbito de la:. República el ideal sanmar-


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Jiniano. Seguros estamos de que, con la experiencia adquiriqa, alcanza-remos un mayor grado de superación, en la nuev~ etapa de labor qu~ .se inicia.

Entre las numerosas delegaciones concurrentes a nuestra festiví-dad, la República Argentina se hizo representar por cios de s·us más distinguidos jefes militares, dirigentes de prestigiosas instituciones históiicas de Buenos· Aires: los señores generales Ernesto Florit y Carlos A .

..Salas, quienes, du.rante su permanencia en Lima, aparte de intervenir en todos los actos programados, pronunciando enjundiosos discursos, -Íueron agasajados en varias iTJ.stituciones y en no pocos hogares de familias distinguidas · de nuestra sociedad.

De este modo, la forma solemne en que hemos celebrado el 25!' , -aniversario de la fundación del Instituto Sanmartiniano del Perú ha, te

nido la virtud de poner en evidencia, una vez más, no sólo el culto .que con verdadero fervor suele rendirse a San Martín en el Perú, sino, tam.bién, la buena disposición amistosa de lós peruanos hacia los argentí;. JlOS.


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REUNION PREPARATORIA DEL. INSTITUTOSANMARTINIANO DEL PERU

23 de Febrero de 1935

En Lima a los 23 días del mes de Febrero de 1935, siendo las 6 de la tarde _y previas cita.dones, hechas en los diarios de la Capital, tuvo lugar en el local de la Sociedad Geográica de lJima una reunión d e intelectuales, miembros del cuerpo diplomático, del ejército y de nu¡¡:peroso público, unidos todos en común sentimiento de gratitud y admiración al Generalísimo Libertador D. José ide San Martín, bajo la ¡presi~ dencia del Dr. José Pacífico. Otero, presidente del Instituto Sanmartiniano de Buenos Aires e inspiradm de la reunión en referencia.

El Dr. Otero, después de explicar la finalidad y actividades del Instituto Sanmartiniano de Buenos Aires, insinuó la conveniencia de establecer una insfüución en Lima con fines análogo·s: . Agregó qué aJ nacer la convocatoria no le ha guiado otro propósito que el de lanzar la. idea de la creación del citado Instituto a fin de que en esa forma, se rinda culto en el Perú a la magna obra del Generalísimo D. José de San Martín, glorificando su memoria, ya que nuestro país constituyó el punto culminante de su noble campaña libertadora, realizada en la América del Sur.

Después de un ligero cambio de ideas y de considerarne que los señores Dr. Luis Alayza Paz Soldán y Dr. José Gálvez, por ser miembros correspondientes del Instituto Sanmartiniano de Buenos Aires, son los indicados para integrar el Comité Provisional encargado de organizar el Instituto Sa.nrnartiniano del Perú, con la correspondiente, Junta Di~ rectiva, se acordó encomendarles tal misión, a~esorados por un -secretario, para cuyo cargo se designó al Sr. Ricardo Cavero EgÚsquiza, Miembro Activo de · 1a Sociedad Geográfica de Lima. '

Finalmente el Dr. Otero dió lectura a una extensa e interesante conferencia sobre San Martín y la · Peruanidad, dándose luego por terminado al acto. E_ran las 8 p.m. (Firmado). Luis Alayza P. S., José Gálvez, Ricardo Ca.vero Egúsquiza.

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PROGRAMA ANIVERS~RIO

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CONMEMORATIVO• DEL 259 DEL INSTITUTO SANMARTINIA

NO DEL PERU

Sábado 20 de Febrero; Hora 7 p.m.; Local: Cotabam.bas 494.

Conferencia del Sr. Manuel Vegas Castillo, Diréctor de Cultura ,del Minis·terio de Educaei6n Pública y MiE~mbro de la Directiva del Instituto Sanmartiniano del Perú, sobre: "San Martín y la Peruanidad" •

.. Martes ·23 de Febrero; Hora· 7 p.m.; Local: Cotab~as 494.

Actuación Solemne en el Instituto de acuerdo con el siguiente pro'9"I'ama:

l.- Himno Nacional del 'Perú; , 2.- Discurso del Sr. Ricardo Cavero Egúsquiza, Presidente Activo de

la Institución; 3.- Palabras del Dr. Luis Alayza y Paz Soldán, Presidente Honorario

Vitalicio del Instituto; 4.- Palabras del Gral. Ernesto Florit, Presidente del Instituto Nacio

nal Sanmartiniano de la Argentina; 5.- Palabraz del Gral. Carlos A. Sqlas, Presidente del Instituto Argenti

no-Peruano Mariscal Castilla de Buenos Aires; &.- Palabras del .Dr. José Rubio, Ministro de Educación !Pública; 7.- Palabras del Sr. Horado Portela, Encargado de Negocios de la Re

pública Argentina; 8.-Himno Nacionail. de la Argentina.

Jueves 25 de Febrero; Hora 11.30 a.m.; Plaza San Martín.

A . Ceremonia en la Plaza San Martín, coincidiendo con el 1829 aniversario del nacimiento del Libertador, de acuerdo con el siguiente programa:


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l.- Colocación de ofrendas florales; 2.- Himno Nacional del Perú; 3.- Discurso del Dr. Osear Guzmán Marquina, Presidente de· la Aso

ciación Nacional de PeriOdistas del Perú y Miembro Activo del Instituto;

4.- Discurso del Consejero de la Embajada de la República Argentina,,. Sr. Oswaldo García Piñeiro;

5.- Himno Nacional de la Argentina. B.-Hora: 1 p.m.-Círculo Militar del Perú.

Vino de Honor del Instituto a los delegados argentinos Generales Ernesto Florit y Carlos A. Salas.

Viemes 26 de Febrero.

Ceremonia en la Histórica Casa de Huaura, desd.e cuyq Balcón, el General San Martín proclamó la Independencia. En dicha ceremonia, pronunciarán discursos los ·señores: Juan li.arrera Grados, Alcalde 1del Distrito de Huaura; doctor José Torres Muga, Presidente del Instituto Sanmartiniano de Huacho; Dr. Alberto Cabrera, Profesor del Colegio Nacional de Huacho; Gral.~ Ernesto Florit; Presidente del Instituto Sanmartiniano de Buenos Aires; y Horado Port.ela, Encargado de Negocios. de la República Argentina.

CHARLAS POR RADIO NACIONAL DEL PERU

Sábado 20 de Febrero: Sr. César García Rosell, 29 Vicepresidente del Instituto, a las 5 y 45 p.m ..

Domingo 21 de Frebrero: Dr. Teodoro Casana, Secretario del Ins-tituto, a las 5 y 45 p.m. .

Lunes 22 de Febrero: Sr. César Ma!cera, , Miembro Activo del ' Instituto, a las 5 y 45 p.m.

Banco Comercial del Perú En recuerdo de nuestra Indepe11.deneia


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SAN MARTIN Y LA PERUANIDAD ¡

CONFERENCIA DEL SR. MANUEL VEGAS CASmLO

• El día sábado 20 del mes de febrero de 1960, el señor Manuel

Vegas Castillo, Director de Cultura, Arqueología e Historia, del Ministerio de Educación Pública, y Vocal del Instituto, sustentó en. el local de Cotabambas 4194, una conferencia sobre "San Martín y 1a Peruanidad', iniciando el programa de conmemoración del 25<? Aniversario de la fundación del Instituto Sanmartiniano del Perú.

Llenaban la Sala de Actos numsrosos diplomáticos, Jefes de los Instfü1tos Armados, periodistas y escritores, delegaciones de las instituciones. culturales y patrióticas y público en general.

El Presidente abre el acto.

El Presidente clel Instituto; Sr. Ricardo Cavero Egúsquiza, abrió el , acto, manifestando que con e.sta actuación oo comenzaba a dar cumplimiento al programa conmemorativo de.l 25<? Aniversario de la "fu.ndación del Instituto Sanmartiniano del Perú. Anunció la conferencia del Sr. Manuel Vegas Castillo, Director de Cultura, Arqueología e Historia del · Ministerio de Educación Pública, sobre el sugestivo tema: "San Martín. y la Peruanidad". Manifestó que de acuerdo con la práctica estableci- -da, hará la prese"utación del orador el Presidente de la Comisión de Con-· ferencias del Instituto, en este caso el señor Luis Lama, calificándolo como uno de los más altos valores del periodismo y de la literatura danuestro país. '


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Saludo a los Generales Florit y Salas.

Di)o el Sr. Ca.vero Egúsquiza que se complacía. en anunciar que en ese momento honraban la sala con su presencia dos personalidades .argentinas: los señores, General Ernesto Florit, Presidente del Instituto Nacional Sanmartinit no de la Argentina, y General Carlos A. Salas, Presidente del Instituto Argentino-Peruano Mariscal Castilla de Buenos Aires, con sus gentiles esposas, quienes, han venido especialmente invita,dos, a participar en el desarrollo del programa de conmemoradón de l as Bodas de Plata de nuestro Instituto. "Doy, pues, - dijo finalmente - en nombre del Instituto y en el mío propio, la bienvenida a tan. di..stinguidos visitantes, deseándoles una grata permanencia en nuestra cfa1-<lad".

:Impone las P~ Sanmartinianas al Sr. V eqas Casüllo.

Luego de invitar al Sr. Vegas Castillo a acercarse al estrado . el President-e le imp'liso las Palmas Sanmartinianas, diciéndole: "Le entrego ·esta distinción, a la que se ha hecho Ud. a'3creedor por la obra histórica valiosa que viene usted realizan'do a través de tantos años y por el .apoyo que ha prestado siem,pre a nuestra Institución desde el alto caigo que desempeña Ud., como Director de Cultura, ArqueologÍa e Hisioria, del Ministerio. de rEducación Pública.

El público aplaudió calurosamente.

DISCURSO DEL SR. LUIS LAMA

:Señores: Nuestro dinámico Presidente, del Instituto Sanmartiniano, ·Dn. Ri

·cardo Cavero EgÚsquiza, me ha concedido "el alto honor, de que sea yo, quien haga el proemio a la interesante confru-encia, que pronunciará en seguida, nuestro distinguido consoc:io, Dn. Manuel Vegas Castillo. Y digo proemio, porque quien, como el disertante de hoy, tiene tan dilaiada, profícua y hermosa labor intelectual, no necesita en realidad, pre:sentación, y menos ante tan selecto auditorio, porque sú obra es el más ·elocuente, testimonio, de los méritos que lo adornan.

"San Martín y la Peruanidad", ha titulado Vegas Castillo a su trabajo, y tratándose del Instituto Sanmartiniano, ningún tema puede ser mejor acogido, que divulgar, como s,e está haciendo lucidamente, desde ·esta alta tribuna, la vida, la obra, y los hechos del soldado de Yapeyú, a. lo largo de su fructífera existencia ,de Libertador, y de· creador de Rep úblicas democráticas. Así, a traV'és del erudito trabajo de nuestro con-


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fe!'e.nciante, con la galanura y fluidez que caracteriza a Manuel V,ega.s Castillo, vamos a conocer el pensamiento de San Martín," corf respecto . a la peruanidad, este noble sentimiento, que ha movido en todo tiempo las grandes empresas nacionales, pero que sin embargo, adolec~, en los tiempos que corren, de cierta frialdad, por lo qi.te precisamos robustecerlo, y engrandecerlo, . como se engrandece, y se robustece, el amor· filial, ) v

Es sabido, que la conquista del PE)rÚ, y puede afirmarse sin. ambages, que la conquista de América, tuvo entre otros, tres aspectos esenciales; tres características· al parecer disímiles, pero qúe en el fondo .se complementan, pues son, tres modalidades fundamentales, que, en mi concepto, pueden sintetizarse así: el triunfo de la espada, el triunfo de la cruz, y el trfunfo del trabajo. Junto con los conquistador&s guerreros, llegaron a nuestras tierras lós propagadores de la fe católica, y

al lado de éstos y de aquellos, vinieron los trabajadores. Unos eran hombres de coraza, otros ~ sotana, y los demás de chaqueta. Los piimeros esgrimían la intimidación, los segundos la: persuadón, los terceros la picota. Los guerreros conquistaban súbditos·, para el reino de Castilla; los sacerdotes, ganaban el reino de Cristo, los trabajadores lograban tierras para la importada civilización. Los primeros, iblandía.n la espada, parapetados tras su coraza, los seg00dos exhibían la cruz, escudánd~se en el dogma. Unos fundaron ciudades, otros erigi!eron templas. Los conquistadmes abrieron con su espada surcos de sangre, por donde se licuaron lqs caudales de un imperio en derrota. Los evangelizadores, por su parte, trazaron con la cruz lós derroteros, de una re-ligión inmarcesible, que se mantiene enhiesta a través de los siglos. Unos y otros, por encima de las humanas flaquezas, de las ambiciones

· bastardas y de los egoísmos insatisfeohos, nos legaron, empero, . una nueva cultura, una nueva raza, y una nueva religión.

Estos aspectos, además, determinaron la fusión, la aproxi,mación, la asimilación ,digamos, de las dos razas, a pesar de sus opuestas, y a_

vetes contradictorias orientaciones, y dieron a la postre, como dorado fruto. un mestizaje que desde entonces nos caracteriza, como descendientes de dos grandes culturas. Conviene, en este punto, recalcar la tendencia de afirmación de los valores autóctonos-, que caraderizó a la posterior orientación de la. política colonial española; pues lejos de destruír una raza, como la incaica o de borrar toda su civilización, como lo· hicieron en otras comarcas conquistadores de otras razás, donde ¡primó, el factor territorio, ·sobre el capital humano, España y -sus huestes, en cambio, al entroncarse con nuestros nativos, afümaron los derroteros.


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de su civilización, y de. su raza, sobre la consanguinidad, que es, mucho más fuerte, y mucho más perdurable que todos los triurúos materiales. De allí, puede decirse, que nació la peruanida.d.

Afianzada en un glorioso pasado s8C1:J:lar, que impuso su huella indeleble en gran pjlrte de nuestra América, y rflspaldada en una raza de ·conquistadores, en cuyos _ dominios, según la célebre frase, no se ponía el · sol, la preuanidad tuvo, desde sus remotos orígenes, un decurso prestigioso de alcurnia y ,señorío, cuya trayectoria debemos inculcar en la conciencia, no sólo de nuestros hermanos, sino incluso de nuestros vecinos. Como raza rectora en el Continente, · la incaica ejerció sus dominios, y determinó sus directivas políticas, desde Quito ·hasta el Maule, y desde el Pacífico hasta el Amazo~as, llegando as.:imismo, con su civilización, hasta la Polinesia, como se ha comprobado después. Luego ,amalgamada con los conquistadores hispanos, se formó, a pesar de las humanas flaquezas, la nueva raza, o sea el mestizaje, que desde sus comienzos, dió frutos definidos que han descollado en todos

. los campos del saber, del pensar y del serrtir, no sabiéndose que admirar más, si al conquistador o al conquistado, ni tampoco se puede aürmar ciértamente, donde termina -la conquista, ni donde comienza. el mestizaje, que tanto brillo y señorío nos da.

Ocurre con este entroncamiento indo-hispano, lo que con la posesión material de los territorios. Todos sabemos, la tremenda influencia · hispánica que presentan, las grandes metrópolis incaicas, que redbieron los primeros impados golosos de los conquistadores venidos de ultramar ,que después, como en el caso humano, afirmaron spbré las pétreas construéciones del período megalítico, la armonía d9 la arquitedura española ,en cuyo caso, no sabemos tampoco cuál preferir: si la base eterna que .Se anraiza al suelo, con majestad de señorío, o la finura y belleza de la línea hispana, ciue se eleva al cielo en afán de eternidad. Ambas, en todo caso, d efinen una época, una civilización, una cultura y una clara y profunda fusión de dos grandes razas rectoras.

Tal sugiere, la sóla enunciación de la conferencia, que luego nos ofrecerá el sapiente histori.ador, y ameno escritor, Manuel Veg9-s Castillo, a través de un meditado y erudito trabajo, como se c·aracter!zan todas sus producciones. Y o solamente he querido verter, en este breve proemio, una mínima parte de lo ·que la peruanidad sugiere, cuando se la estudia en sus múltiples aspectos, tal como lo está haciendo, con el sincero aplauso de la ciudadanía, nuestro Instituto Sanmartiniano, merced a la atinada dirección de su actual · Presidente, Ricardo Cavero


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.Eg-.ísquiza. Ahora Vegas Castillo, . nos trae uno de esos aspectos. o sea el que se refiere al Santo de la Espada, durante su breve pero, impe::-ecedero paso por nuestra tierra, y que en la pluma, la palabra: y la e dición, de nuestro V ocal, cobra relieves inusitados. Con ustedes, señores, nuestro amable conferenciante.

CONFERENCIA DEL SR. MANUEL VEGAS CASTILLO

Señores:

Agradezco, ante todo a mi dilecto amigo y portaguión del estandarte sanmartiniano en el Perú. doctor Ricardo Cavero-Egúsquiza, la pre-: !erencia que ha querido darme con la iw_pos.ición primigenia de la\S Palmas Sanmartinianas y el honor que me ha concedido al designarme sustentante de esta Comerencia.

:E:x1preso, también, mi gratitud a mi distinguido presentador y cocorreligionario, don Luis Law.a, por la forma gentil en que se ha referido a mi jerarquía intelectual para justificar mi intervención en el Progran1a de celebra:oión de las Bodas de Plata del Instituto Sanmartiniano del Pe-rú,

Conmemoración histórica de trascendencia internacional es la que celebra el Instituto Sanmartiniano del Perú al cumplir sus bodas de plata como encargado de una sacratísima y patriótica misión: la de •enaltecer con la lámpara votiva de su perenne homenaje ,la memoria del primero de nuestros libertadores, ·la exaltación del hombre. inmaculado que, como dijo el crítico, tuvo la inflexible unidad del g~o mis~ y para cuyo enfocamiento seria menester bajar a los abismos, interroqar a las mol~s de graniio y pedir a los arcanos la explicación de su gran¡deza. y la reverencia al paladín que, en la eclosión triunfal de la liber~ tad de un pueblo· que no fué el suyo, supo identificarse con él, reconociendo ·SU condición de porta-estandarte de la cultura americana ry, lejos de abrumarlo y desconcertarlo con un sistema arbitrario y dictatorial, lo puso pa:ternalmente en la senda de Ún ptrogreso futUro incalculable, lo sometió a la democrática conducción de un Congreso nacional, lo deió en las in~nos de los peruanos más capaces y rhás dignos _de recoger su herencia y lo dignificó con la más notable y copiosa e:xipetlición de pautas gubernamentales, que fueron desde la creación de los símbolos patrios hasta la estructuración de los tribunale; de justicia, desde la formación de las fuerzas ármadas hasta el planteamiento de los organismos culturales, · desde la organización del sistema hacen-


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dario ·hasta la reglamentáción y capacitación de la industria y el comercio, desde el levantamiento de censos y planos topográficos hasta la emancipación del colaborador elemento negro y desde la libertad de, la expresión hasta la abolición de las penas h1:J.millantes, la nacionalización de la noblezg. y el resguardo del derecho de los extranjeros, como factores indispensables en la forja de una nación de probable intervención en los futuros destinos de la humanidad.

En esos veinticinco años de . indeclinable devoción y de constante rendimiento, el Instituto Sanmartiniano del Perú, bajo la dirección de.hombres señeros. que se hicieron indis¡pen;ables por su acendrada con· vioción de que el credo del Caudillo del Honor y la Nobleza deb~ ser un punto ápice en el fulgor d e nuestras glorias, ha extendido el fervor sanmartiniano a todos los ámbitos de la República, ha comulgado con la hostia santa de la fraternidad argentina, h a rremomorado en innumerables actuaciones, ias hazañas de esos centauros que vinieron desde el Plata para ayuqarnos en la tarea trascendental de conquistar el derecho, de una patria libre y, sobre todo, ha tratadtí de imponer, desde los reductos en que el país ha reclamado su colaboración, esa admirable doctrina que escribió con su ejemplo el Capitán de los Andes en la dirección de los pueblos que le tocó libertar y en la que puso, como el taumaturgo de Asís en su religión de caridad: el amor sobre el odio, el perdón sobre . la ofensa, la armonía sobre la discordia, la fe sobre el error y la esperanza sobre la desesperación . .

En esos veinticinco años, es posible y hasta seguro que no sean cuantiosas nueslrr'as conquistas materiales a pesar de que disponemos deun magní'fico terreno para el edificio del futuro en ,una de las más amplias y centrales avenidas de la capital y no obstante de que una ejemplar campaña de glorificación, se cristaliza en los obeliscos de Chancay, San MateoY Muquiyauyo. Pero nuestra labor e·spiritual ha sido fructífera y enor-

. me y se condensa en la atracctón a nuestra.s filas de todos los peruanos, sin distinción alguna, que, luego de exaltar a los paladines de la Expe-

' dición Libertadora en las conmemoraciones clásicas de nuestras fiestas. iulias, no han vacilado en sumarse a la campaña de enaltecimiento que tiene su foco en este Instituto, desde donde irradia sus destellos a los. cuatro puntos de la rosa náufü:a nacional e ilumina las conciencias con esos atributos que justificaron en el paladín yapeyuano, el mote honroso y merecido que le impusiera un compatriota insigne: "El Santo de la E&pada".

Y aquí nos tenéis, señores, después de cinco lustros de pleitesía honorable, más animosos que nunca, más devotos de la doctrina deI

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i;-...::-:-e::-o de alma blanca, más dignificados por su grandeza moral y -r"s :-asueltos a propagar su credo de serenidad y abnegación, sus manc=-;e tos de unión nacional y confraternidad internacional y SU paTaC.::,;::!a providente de sufrir ':/ renu.11ciarlo todo en provecho y beneficio de las acciones que favorezcan al mayor número, 4en el ejercicio ple-

y generoso del precepto bíblico que hace del hombre una imagen y se:neianza de Dios.

Aquí nos tenéis, satisfechos de la obra cumplida y decididos a co ... Jinuarla hasta conseguir que las aras de homenaje a los campeones

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que vinieron del Sur haciendo escolta al Capitán de los Andes, pros-peran en todo el teatro de su actuación y, muy especialmente en los lugares donde cumplieron los más notables episodios de la guerra de la independencia y donde sus hazañas se rubricaron con su ·sangre . como sucedió en la costa septentrional y en la sierra central, en cuyos escenarios apenas quedan sfüos que no están perennizados por alguna acción singular protagonizada• por un militar argentino, con tan viva y alucinante sugestión que, como ya lo he dicho alguna vez, la imaginación capta, con nitidez impresionante que, haciendo coro al rugir de la!> olas en el inquieto océano, al ulular del v;iento en la soledad del arenal o al córtante flagelo del ambiente andino, patrece escucharse todavía el toque del clarín de un granadero qué, en el médano yermo de la costa o en el abrupto · diagráma de la serranía y recortando su silueta sobre el azul del firmamento, continúa llamando al combate (POr la libertad en una sobre.exitación de heroisrno y de gloria.

Aquí nos tenéis, enaltecidos por nuestra fe sanmartiniana y orgullosos de abrir los brazos y el cmazón a los hombres de la tierra del prócer, que tiene, dentro de su patria, la misma misión nuestra y el mismo espíritu de reverencia hacia esas figuras insignes, que constituyen los lazos más firmes de la íraternidad internacional y la amistad indestructible entre la Argentina y el Perú.

Con este exordio, que se encargará de .ampliar y oficializar en la Actuación Solemne quien tiene el derecho, por su talento, su aduar ción y su cargo, a la representación integral de nuestro ce111tro, quiero, señores, solicitaros el ahorro de los minutos que me dedicáis en generosa atención inmerecida para entrar de lleno en el desarrollo del tema de mi conferencia que, según reza el Programa, se sintetiza en este simple, pero laborioso título: "SAN MARTIN Y LA PERUANIDAD".

Antes de abordar directamente este problema, que tanta influencia tuvo en la evolución de la patria naciente, séame permitido, sin,embargo, hacer una evocadón sucinta y rápida 'de los aconte.cim1entos se-


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culares e históricos que han servido de base a la estructuradón de la compenetración espirit{rei entre el Perú y la Argentina. Compenetración que se remonta a las épocas legendarias del Imperio, cua!'.do el

. décimo Inca Yupanqui, incorporó .a sus estados, la región nor-occidental de la actual Retública del Plata. Compenetración que SE? i9-tensifka en los primeros tiempos de la conquista, quando los gavilanes de E::¡paña salieron del Perú ~n plan 1 de dominadón_ sobre los territorios de la Pampa, con la colaboración de esa legión de misioneros que, con San Francisco Solano a la ca:beza, nos dieron el pres'tigio de incorporar a la -religión cristiana a millares de americanos 'semibárbaros, ·y la gloria cultural de llevar desde la ciudad de Santa Rosa y por obra del violín del bienaventurado de Mcntilla, la primera e:rriliajada musical . peruana a la Amérka del Sur. Compenetración que se acentúa más aun en la etapa ;virreinal, cuando la Audiencia de Lima recibía acatamiento de todas la>S demás de ,esta parte del mundo, consideradas co:mo simples pretoriales. Co:rrmenetración que se robusteo cuando í31 Virreinato del Perú imponía su autoridad y extendía su dilatada jurisdicci.én ha.sta las regiones de Tucumán, Buenos Aires y Paraguay y las auxiliaba con todo el poder y la riqueza que le e~an características y que se traducían ya en las remisiones del contingente metálico para la solución de sus . problemas o ·ya en el aporte de otros socorros, encaminados a rechazar los ~petitos conquistadores de otras dominantes naciones del Viejo Mundo. Compenetración que se sustenta indeclinable y digna, cuando los dos estados compitieron en la categoría virreinalicia y cpmpartieron, con Bl

- Virreinato de Nueva Granada, la autori!dad, el dominio y la representación de la metrópoli en todos los territorios de la América Sud~Occidental. Compenetración que llega a su climax en la etapa de la liberación, cuando las dos naciones empeñaban sus arrestos en la. conquista de la emancipación y desarrollaban sus campañas con paralelismos indirectos; pero ~simultáneos e interdependientes, propiciando la aparición de colaboradores peruanos en la gesta argentina, como lo fue-

. ron Alvarez Thomas y Luzuriaga, y la eclosión de la intervención argentina én la pugna peruana, como lo foé la Expedición Libertadora con esa gallarda constelación de capitanes, que acompañaron al Santo de la Espada ' en la epopeya magnífica de nuestra libertad.

Y no quiero olvidar otros acontecimientos, tan sugestivos como aquellos, en la demostración indiscutible de esa bendita compenetración. Se sabe( por ejemplo, que el Sol de los Incas fué acuñado en las primeras monedas- ,argentinas y se- perennizó en su escudo, por c,bra del artífice cusqueño Juan de_ Dios Rivera -por cuyas venas cocría la s·an-


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,_,,, ::a os antiguos monarcas imperiales- en el desempeño de la co- - -= que la Asamblea de 1813 encomendó al espíritu creador del di, -=.:o por San Luis don Juan Agustin Donado. Se sabe, " asimismo, ~-= ;;: Congreso de Tucumán, con el lidernto de Belgrano, discutió la :;-:JE.::i..:dad de restaurar el Imperio de los Incas, sum~ndose a esta ini~ . hombres de la talla de Güemes y .el propio San Martín, que al - "'"~:r e l rechazo de otros eminentes argentinos, que les inculparon =... "~ do de propiciar el advenimiento de una monarquía con ojotas, ::.:: :e::mnciaron, sin e mbargo y , en el caso de San Martín, concretaron 22 ':npatía en la instauración de la Orden del Sol. Y se sabe;. final==::..e -y ahí está la canción inmortal pa:ra refrendarlo- que el propii :=~ o Nacional Argentino acoge esos sentimientos cuando expresa li·~ente en una de sus estrofas:

"Se conmueven del Inca las tumbas y en ·Sus· pechos revive el ·ardor, lo que ve renov~do en sus hijos de ;la Patria el antiguo esplendor".

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Con tales antecedentes se justifica que los dirigentes argentinos y , particularmente _el Capitán de los Andes, no obstante su educación europea -y quizás por eso mismo, ya que el primer jefe que tuvo en

vida militar fué el limeño ,don Fermín de Carvajal, Conde de la · ón ... -, se justifica -repito- que esos· hombres y ese libertador

:.rvieran del Perú el concepto más alto y comprendieran, por consecuencia que, siendo el Virreinato nuestro el prip cipal florón americano de la Corona de España, donde estaban las mejores fortificaciones del continente, los soldados más aguerridos y la nobleza más ilustre•, la independencia de las colonias IE:3ultaría un mito s inó se abatía ·ar.tes ese centro de dominación, donde residía la clave integral del problema de 1d inde¡pendencia continental. Desde. entonces el Perú fué ¡para ellos -y singularmente para San Martín -el principal motivo de sus preocupaciones, la indiscutible méta de sus esfuerzos y la dorada ambición de sus sueños.

No voy a insistir sobre las circunstancias que dieron carácter a la formación del Ejército de los 'Andes ni a los acontecimientos qu,e inmorta_lizaron la campaña de Chile porque están al margen del tema da esta disertación. Me basta con referirme a la Expedición Libertadora en la que, haciendo escolta al libertador argentino, llegó al Perú, en los meses finales del año 1820, una constelación de soldados magníficos


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en la que descollaron los nombres de Guido, Pringles, Alavarado, Ne-cachea, Suárnz y muchos otros·, predestinados a la ejecución de hazafü1a increíbles, desde la rotura de ]as puertas de bronce del Real Felipe, que cerraJban la entrada del Callao, hasta la conquista del lauro victorioso deJunín, que prepar& la gesta de Ayacucho y cimentó la libertad del Continente. No es mi propósito referirme en .ajustado análisis a la gloria de esos hombres, para cuya labor sería menester la frase consagradora de Plutarco, ni alimento la esperanza de avivar l'a reverencia que por ellos sienten la pos.terida.d 'coin el precioso enfoque a.el rol que cumplieron en nuestra epopeya libertaria. Apenas si voy a refrescar vuestro memoria haciéndolos pasfil en el ecran imaginario de un .fugaz desfile. como lo reclama es.ta aotuación, dedicada a la peruanidad que lograron reafirmar en el corazón de los habitantes de la tierra de los Incas, se'cundando al libertador argentino,, que fué el primero en encender esta antorcha luminosa de ·sobreestimación, que debe ser la norma del Pe. rú entero hacia la consecución de sus gra;'.;!des y maravillosos destinos.

Luego de arribada la Expedición Libertadora a las playas del Sur y cuando todos los esfuerzos se concentraban en el inmediato éiesenvol-. vimiento de la campaña, que la había conducido al mismo centro de la dominadón española, fué Tomás Guido -el ex-compañero de Mariano Mo:;eno en la misión diplomática de la Grfill Bretaña -el primero. que supo descollar en ,su doble personalidad de militar y hombre de talento, como edecán del General San Martín y como representante del bando patriota en las conferencias de Miraflores, para continuar dmentando, en un derroche de actividades al servicio de un país que no era· el suyo, la prestancia que iba a conducirlo a la Gobernación de las fortalezas del Callao, a la Consejsría de Estado, a los minis:terios. de Marina,. Guerra y Gobierno· y a la jefatura del estado mayor del ejército li'bertador.

Vino i~mediatamente y en cronológica evocación, el teniente Juan Pascual Pringles que, desobedeciendo una orden superior para eludir·· la lucha, ilustró las playas de Chancay con . su denuedo y arrogancia sentando el principio de que los soldados argentinos habían venido al Perú a combatir, pero no a rendirse, consigna espartana que consagró el propio general en jefe otorgándole una condecoración y contribuyen-. do al esplendor de su carrera, que siguió arrebatando laureles en despliegues memmables de valor y constancia, hasta intervenir en la ibatalla de Ayacucho con sus preseas de coronel y con el pecho constelado· de medallas.

No seré yo quien juzgue la trayectoria del gene:ral Rudesindo


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aquel salteño iLustre que ayudó a San Martín ~- organizar eJ .:r: ,.-3 Sjército de los Andes y arranc6 la aureola inmortal en el PiIBO ::.=:. 3::r-3ío, durante 1a campaña de Chile. Fué el general Alvarado el ~ ;::r::=:... que entró a Llma, el que protegió el cambio de bandera del :::e-=- w Numancia, el segundo j.sfe de una de las expediciones: de Al.-~:;:: de Arenales a la .Sierra y el directo~ de la Ca:r1ipaña de Interme=:::s, que terminó con las batallas de Torata y Moquegua, donde el há·-~º compensó el contraste y pudo arrancar expresiones justificativos. :..: :;:::_ pio Libertador Bolívar, que fueron al extremo de manifestarle su cs;;o::i.ánea admiraoión y las eQ°I?resiones d~ su íntimo aprecio.

Y cerrando la rememoración de· los argentinos de la independen::::a, nos encontramos con las vigorosas1 personalidades de Mariano Neccchea e Isidoro Suárez -los preS.estinados de Junín- que, como CQ-

-i,.ndante en jefe de la caballería, el prim~ro, intervino activamente en . ....,,, ...3 batalla y cayó herido de siete lanzadas dando ejemplos de valor y :ubricando con 1su sangre stu sacrifclo o su victoria; y, icomo coro.ne! 'el "Húsares del Perú, el s~gundo, cambió el curso de la historia y

convirtió en denodado triunfo una derrota casi consumada. Necochea arr<mcó la admiración del propio Bolívar y justificó ampliamente sus títulos de valiente entr.e los valientes y caballero sin ·taoha y sin miedo, siguió prodigando eminentes servicios a la implantación de la 'R~líca y, al ser comprendido en una conspiración contra el poder bolivariano, devolvió sus despachos de general con la declaración expresa de que no quería llevarse del Perú más que sus heridas. SuáJ.re;z;, ¡por su parte, se impuso al destino y legó el nombre de "Húsares de Junín" a. los bisoños reclutas peruanos, que consumaron la proez,a de batir a la o rgullosa caballería rnalis~a dictando el prólogo de la cap itulación de Ayacucho.

No menos ejemplares fueron las actuaciones de otros jerifaltes sanmartinianos, sin olvidar a los marinos que, con Lord Cockrane; nos proporcionaron a ese ilustre fundador de nuestra Marina de Guerra, Martín Jorge Guise, que compartió honores y sacrificios con otros extranjeros eminentes, como Alvarez de Arenales, Brandzen, Althaus, Bo·gado· y algun,os· otros, y con un cortejo menor de argentinos entre los que descuellan los nombres de Greg9rio de las Heras, Martínez, Con-O.e, Beltrán, Prudán, Millán, Espinoza de los Monteros y muchísimoS' más.

No obstante la e~elsitud de estos hombres, San Martín -siempre respetuoso por los peruanos y deseoso de expresarles. lo que represen·taban en su espíritu- incluyó en su cortejo guer;rero a muchos hombres nu¡::¡-stros ,entre los que se encontraban:-Toribio de Luzu.riaga ocu-


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pando el más alto cargo después del general en Jefe, el chancayan_o Andrés Reyes con la clase de capitán, el ínclito Vidal con una misión preparatoria ,el limeño Remigio Silva que ha pasado a la historia con el mote honorable, de "El Peregrino de la Libertad", el Vicario General Castrense Cayetano Requena y colaboradores tan eficientes como Juan !la--

"' doy, N. Turgay; Juan Velasco Pedro José Cornejo, Agustín Lerzundi y

algunos más. Y no quiero referirme a los homenajes a la peruanidad,. que hizo el Capitán de los Andes en su campamento de Huai.rra con demostraciones de excepcional interés para todos los que acudieron a. engrosar sus filas y entre los que se contaron los favoritos de la gloria -política, predestinado.s a dirigir los destinos de la República' en posteriores épocas. En esta etapa de su acción libertaxia dió otras pruebas de su inclinacion y preferencia por todo lo peruano, princi~ian1cio. por el hecho de escoger a Huaura como epicentro de su campaña emancipadora. Mucho se ha escrito sobre la situación de este pueblo para merecer el honor de convertirse en su cuartel general, no obstante quepoco tardó en demostrar su ·inconvenienc':ia por razones estratégicas y

de salubridad. La historia no lo dice, señon~s; pero mucho he cavi-lado yo sobre el problema para llegar a la conclusión terminante y definitiva de qú.e San Martín quiso rendir un tardío, pero fervoroso ho-·menaje a los Duques de San Carlos, que fueron dueños de la casa histórica de Huaura a donde fiió .su residencia y entre cuyos representan-tes descolló con ¡particulares atributos,' el famoso don José Fer.mín, aquel limeño insigne que fué su primer . jefe en las guerras del Afrioa y ba-jo cuyas enseñas conquistó ::¡us galones de subteniente, cuando el pe

ruano asombró por su heroísmo a los mariscales de Francia y los dejó pasmados con su muerte gloriosa '?n la Ermita de Roure.

Otra muestra del aprecio del General Sc¡n Martín ¡por todo lo p~

ruano, la tenemos en la primera medida que adoptó al entrar a Lima, en julio de 1821 y que consistió en comunicarse epistolarmente con el. Ayuntamiento pidiéndole la consulta pública con la. voluntad popular para decidir 'los futuros destinos del Perú. "Espero que Vuestra Excelen-cia - le solicita al ,alcalde- convoque una junta general de vecinos. honrados. que rs¡presentando c::l común de los hapitantes de esta _capi tal, expresen si la opinión general se halla decidida por la independencia". Se comprende al instante, que tal consulta resultaba inútil porque su presencia en Lima se justificaba, precisamente, par su determinación de hacer la libertad del Perú, quisiéralo o no lo quisiera la opinión pública. Pero San Martín sólo deseaba demostrar con esa consulta que considernba importantísima la decisión peruana porque eran.


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-- ~:-t.:.a."los, y nada más que ellos, los que tenían derecho a decir la: -=-==. palabra y dictux la resoiución suprema.

?ero íué solamell'te el 3 de agosto de 1821 ,al constituir su go· - :_-:: protectora!, cuando San Mairtín dió la prueba más elocuente y ·; =-- :i-.ra de su amor al Perú y propició el advenimiento de la palabra ~-==-..:c..'lidad, al designar al sabio don José HipóljJo Unán~e como su _ ~ de Hacienda, que lo era también de Instrucción y que, como di-.c ¡_::i historiador,_ "había hecho, sin él advertirlo, del triángulo atormen~~:::i que es la superficie del Perú, una especie de concepción religio~ a Patria, y ésto, en medio de los tiempos _en que los peruanos ti-.i.acanse con orgullo, los españoles de América". La trayectoria de

:.:-::cá.."lue en toda su grnndeza integral, .es una,línea peruanísima en la ::::r!is cabal acepción de la palabra: creador, durante la Colonia, del An-·:eatro de lima, la Escuela de Medicina y los estudios sobre la Mater

nidad, íué por su espíritu peruano hasta la eminencia, que se permitió excusarse de recibir el título de Marqués del Sol con que quiso honrarlo el monarca Femand~ VII. Pero fué en el escenario político donde oficializó esa credencial ,peruanista, ya que representó al elemento peruanb en el primer organismo d el Gobierno Protectoral del General San Martín, integrado1 por e1 argentino Monteagudo y el colombiano · García del Río. Su gestión hacendaria, que comprendía también la instrucción pública, como ya lo hemos dicho, sirvió para demostrar esa cualidad porque, como lo expresa el historiador José de la Riva-Aqüero, sus páutas de administración fueiron de una atrevida sobrestimación nacional, principiando por la primera emisión de papel moneda y continuando por e,sa serie de disposiciones, que beneficiaron a la agricultura, la industria, la irrigación, el comercio y la mineria, con la circunstancia de su olímpico desdén por los estancos, los monoplios y el trillado recurso de las nuevas contribuciones.

San Martín vió en Unanue el tipo representativo del hombre culto del Perú y el más alto exponente de la peruanidad. Por e.so le rindió los mayores homenajes ,se honró con su colaboración y lo ccnvirtió en su consejero predilecto. Su devoción personal llegó hasta el punto

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de que cierta vez creyendo haberlo ofendido en un Consejo de Mi-nistros, no vaciló un instante y lo enalteci6 con ~sta esquela que, en esos tiempos ,era la condecoración moral más alta a que un hombre podía aspirar, proveniendo de un gobernante como el Prot~ctor:

"Antes, ahora y cuando no tenga más destino que el de un particular, digo y diré que el viejo honradísimo y virtuosísimo Una-


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nue, es uno de los consuelos que he tenido durante mi admüüstración. Guarde usted este testimonio sencillo y veraz, no porque usted lo necesite; s~nó porque sus hijos sepan el honrado padre a que pertenecen y del que era, es y será y tendrá honor en serlo, su mejor amigo.-· San Martín".

"' Fué Unanue, pues, el portaestandarte de la peruanidad y el que justificó la consideración de San Mar'tín por todo lo peruano, que se concentra en esa legislación copiosa y fecunda del Protectorado.

La personalidad de San Martín, como legislador de la patria, respalda.da por eminencias intelectuales, como Monteagudo, Gaircía del Río, y espe9ialmente Unanue . es una de las más esclarecidas y. providenciales de América; pero lamentablemente, es también una de las menos enfocadas por el juicio de la posteridad, para completar el conocimiento de la ec:losión del héroe, incomprensible todavía por su grandeza., por su .abnegación, por su generosidad y poc su volu...-1tario renunciamiento en el apogeo de su gloria, y :más incomprensible aun por la

t. austeridad catoniana que, como un dan complementario, derramó a raudales sobre los pueblos que redimió con su espada y que lo llevó hasta la perfecta identificación con sus destinos con la atención e~licable quo hub~ese desplegado un estadista de · la propia tierra.

Acababa de hollar el suelo de Pisco al frente de ese lucido corte-, ·jo de soldados, que integraban su ejército expedicionario cuando con

fiando en el triunfo de sus planes, expidió el 21 de octubre de 1820 un decreto creando la bandera. y el escudo del Perú, . para des.1errar los símbolos recordatorios de su dilatado período de· opresión. Y su previsión --desvirtuada después por la mutación dei tiempo y el cambio de los hombres --encontró los e¡rnblemas que mayor influencia podían tener en el espíritu nacional, en los colores representatiyps de la paz y de la guerra, y el sol saliendo por detrás de :unas sierras escarpadas,

· que se elevaban sobre un mar tranquilo, restauración de los atributos y elementos que presidieror¡. en pretéritos siglos la grandeza milenaria del Imperio de los Incas.

Desde su cuartel general de Huaura promulgó, cuatro meses después, su Reglamento Provisional, desÜnado a regularizar la administración de los departamentos que se habían pronunciado por la causa patriota y que, no obstante La limitación impuesta por los acontecimientos de la guerra, fué la primera piedra que sirvió PMa sostener el edificio político de la República.

Pero es en el Poder, cuando el título de Protector lo invistió coo


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- ~-;::s--a autoridad,- donde San Martín reveló su conte4tura de forja---- ~ =aciones y su capacidad de libertador de pueblos. La sola enu-=:.c-o-=.:::::=. de las disposiciones que dictó para encauzar la marcha de la -=-=.=.=:e nación, bastan para perl:ietuar esos altísim os prestigios. En los '""'-:=~::s rne,ses de su paternal y laborioso gobierno, realizó una labor --::.:::.::3. y de organización que asombra por sü p!evisora eficacia y --= :o;;s-..tltaría increíble sino estuvie se refren'dada por su inserción en las ;-=.:i;35 oficiales de la época. Estableció la alta Cámara de Justicia, ~~ amplitud a la Cámara e.e Apelaciones de Truiillo y enalteciendo

¿:=. s-~ origen la gestión controladora del Poder Judicial. Propició la =---mcatoria del Himno Nacional del !PeirÚ para alimentar la llama del =o:.= 'smo en el espírHu de los pueblos. Estableció el primer cuerpo =.¿ so dados r"ativos, dándole el nombre de "Legión Peruana de la :;:_=:,:lia" y reservándole el eminente privil~gio de servir de modelo a _::s demás por su valor en los combates y por su d!isciplina en las ac~ ::-:6ldes de la paz. Abolió la Constitución Española para bor:rar todo -.as...'.gio del período de la ~ominación. Decretó la inviolabilidad del =::::tlcilio para asegurar el derecho de propiedad de los ciudadanos. ? :.::idó un s.istema hacendari.o en el que marchaban a la par, la .econo-~ ... la claridad y la exactitud. Reglamentó los distintivos y uniformes :::::_·ales para sustentair la d ignidad de los cargos públicos. Derogó el .:::;puesto del Tributo liberando al elemento indígena de una carga de-_ cretada por la arbitrariedad como signo de prepotencia y señorío. Y ::.:.ndó la Biblioteca Naci,anal para popularizar la instrucción y permitir ~ pensamieajo la libre información .a cuyo efecto y dando Un. nuevo · e jemplo de generosidad, le hizo el precioso legado del acervo literario, que lo había acompañado en las épocas de su educación en España, sus actividades organizadoras en Argentina y sus expedici0nes y campañas en Chile.

En los meses finales de 1821 continuó dando pruebas de su habilidad administrativa y se prodigó en iniciativas admirables. Estructll-ró el Reglamento Provisional de Comercio a fin de facilitar las ·opera~ones mercantiles y asegurar la prosperidad del país•. Concedió honores, medallas y divisas a los guerrilleros peruanos, Q-ue secundaban la acción del ejército regular con sus valerosas intervenciones en una pugna de exterminio. Plantificó la Junta Conservadora de la Libertad de Imprenta para desarrollar el talento y auspiciar la colaboración literari.a en el progreso de la causa pública. Abrogó las penas humillantes con e l empeño de-evitar el empecinamiento criminal propidando a los hombres una estimación más elevada de sí mismos. Resguardó el derecho


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a los extranjeros bajo la protección del Gobierno y las leyes. Instituyó la Orden del Sol para exaltar el patriotismo y premiar el mérito ·y las virtudes dudadanas. Suprimió. el Tribunal de Minería decretando en su. reemplazo una Dirección General de Bancos, adelantándose a las nor mas financieras que pros¡peraban . en su epoca. Reglamentó los grados. . .._ militares de_ las fuerzas de tierra y mar para desterrar los establecidos. por el régimen colonial. Y nacionalizó los títulos de Castilla auspiciando con moderación y sabiduría su extinción .en el sistema' democrático del nuevo Estado.

En 1822 y cuando sus esfue,rzos le anunciaban la consumación desu obra y en su espíritu comenzaba a florecer la resolución inquebrantable d e abandonar el escenario político para dejar al pueblo ,J a Lliber-· tad de escoge¡r, con sus propios personeros, la ruta más acorde C'on los. intereses nacionales, no creyó cimentada su labor sin decretar otras med idas, encaminadas a ese fin. Fundó la Sociedad Patriótica de Llma con la misión de discutir todas las cuestiones relacionadas con el bien público en materias políticas, económicas y 'científicas. Impulsó el alistamiento de todos los ciudadanos en los cuerpos cívicos dispensándoles el goce del iueio militar. Ordenó el levantamiento de. censos y planos topográficos para compulsar la pob lación y extensión de las departamentos y poder asignarl.es la correspondiente representación parlamen· taria. Y convocó el primer Congreso Constituyente para establecer la definitiva forma de Gobierno y expedir la Consfüución Política de la República. En la sesión inaugural de esta asamblea, que tuvo por escenario el local de la' Regia y Pontificia Universidad Mayor de San Marcos, sorprendió a todo el país con el gesto magnífico de re'Signar el Mando Supremo delegándolo en el Congreso Soberano y en el Pueblo, para ausentarse definitivamente cubriendo con un ropaje de austera circunspección y abnegado renunciamiento, la estupenda obra que como. legislador había realizado en el Perú. . ' ·

Pero todos sabemos que no se limitó a esta acción leg~slativa la intervención de San Martín en la moral del nuevo Estado. Por encima de ella y corroborando mi afirmación de que fué él, con su innegable admirac1ón por el iPerú y por su respeto al prestigio de sus hombres representativos, quien auspició la raíz fecunda de nuestra peruanidad, considero yo la influencia que tuvo sobre los dirigentes peruanos y el ascendiente extraordinario qúe ejerció sobre su contextura sico lÓgica hasta. el punto de que la grari mayoría de ellos debieron a .su intervención en la gesta sanmartiniana sus mejores timbres de gloria. Para com-


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_-..:::.a: esta afirmación sólo quiero ofrecer al<JWlaS citas al ilustrado au:=...-.::o: .

Ignacio Alvarez Thomas, el ilustre arequipeño que llegara has1a ~ ....,..:ección Interina de las Provincias Unidas del Río de la Plata, fuá ·- gran amigo de San Martín. y ·eil pr.imero en p~oporcionarle elemen. - _ Dé · cos para el desiarrollo de .sus vastos planes, conquistando la gra~=d de las generaciones por esa conducta. Toribio de Luzuriaga, el ...:::_~e ihuara.sino, aportó su colabor~ción a la obra del caudillo de la ....:......~:iad, procediendo de esté hecho la fama que lo condujo al_ rango ¿g lugarteniente de la Expedición Libertadora y a ocupar situaciones de P::vilegio en el escalafón ,militar. Francisco Vidal, inmortalizado con el ::onroso título de "El Primer Soldado del Perú", conquistó su fama de

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-..aliente en la campaña de Chile al lado de Lord Cockrane, para desen-•olver, bajo la égida · dél ilustre argentino, la carrera que iba a condu:::'_rlo has1a el Mando Supremo. Andrés Reyes siguió el mismo rumbo y fué el propagador incansable de la causa patriota, labrando .ese ;presi. tigio destinado a encumbrarlo hasta la presidencia del Senado y el gobierno de la república. Hipóltio Unánue, el sa:bio ariqueño -que fue-· ra después el forjador político del Estado- inició ·su actuación en la. vida pública secundando al Protedor en sus directivas gubernamentales. y sentando el renombre que en la etapa bolivariana, le reservaba el derecho de constituirne en el mentor de los campeones de la libertad y en el inspirador de sus normas administrativas. Y, al lado de estas. figuras insignes, muchísimas otras q ue en los albores de la emancipación, brillaron con propias ejecutorias; pero debiendo fil prócer argentino la influencia' espiritual que las co:r<virtió en grandes auxiliares de la libertad, vaierosas conductoras de la guerra, honora:bles cauteladoras, de las finanzas· públicas y creadoras ilustres de la patria.

San Martín no se limitó a propiciar la actividad militar ejercitando las capacidade¡; que lo habían Cl'.J.bierto de gloria en los campos de Chacabuco y Maipú. Con menos de 4 mil hombres y frente a un adversario, que ·se desplegaba por todo el Virreinato con más de 20 mil soldados aguerridos y bien equipados, tuvo la lucidez necesaria para comprender, corroborando su amor por los peruanos, que estaba en la. obligación de ser prudente procurando evitar sa:criHcios inútiles y :r:>ropiciando la idea de consumar la independencia con el mayor ahorro,, posible de efusión de sangre. Persiguiendo este propósito encontró los medios adecuados para imponerse al enemigo desarrollando una campaña estratégica, que tardó poco tiempo en darle una situación depredominio. Ocupó la parte septentrional del territorio y monopolizó


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-los abastecimientos. Así pudo conquistar la capital, proclamar la inde·pendencia, despachar audaces expediciones a la Sierra, rendir las forta· lez~s del Callao y enviar divisiones de auxilio para contribuir a la libertad de la Gran Colombia. la E:iqiedición Alvarez de Arenales propició la independencia de Ica, Castrovirr.eina, Huamanga, Huanca'Yo, Jauja y Tarma; mientra~ las intendencias y partidos del norte proclamaban,

:por su parte, la libertad regional en memorables oportunidades: Truiillo lo hizo el 29 de diciembre procurando timbres republicanos a dos personajes de la nobleza; Lambayeque disputó este honor el 31 consa,goando a eminentes ciudadanos, entre los que se encontraba Iturregui, el hombre predestinado a mitigar las amarguras del destierro de San Martín en las tierras de Francia; y Piura hizo lo propio en enero de 1821 _poniendo al servicio de la causa libertaria la región septentrional del _país. ¡Todos estos pueblos obtuvieron democráticas ejecutorias del gran libertador, atento siempre a las expresiones colectivas y espontáneas,

_ -en las que cifraba principalmente la coronación de sus esfuerzos. Y es que San Martín, la encarnación" más acabada del hombre

--argentino paternalmente ligad0 al hombre peruano por un cúmulo de -.glorias seculares y eternas, supo legarnos sin proponérselo quizás, pato como un presente a la peruanidad, la concreción de todas ;SUS. grande-2as, _ya que fué grande por sus campañas, por su gestión legislativa y -gubernamental, por su providente actuación de forjador de la libertad y por la acción particuliM, noble y generosa de su espíritu, que lo hd!l -convertido en el símbolo más perfecto del gobernante heroico, desprendido, abnegado y paternal.

¿Cómo c;orrespondió el Perú a ese legado de moral suprema? Ante su negativa de continuar en Lima en el ejercicio del poder

militar, premunido de las más amplias facultades, el Congreso de 1822 ·1e concedió el título de "Generalísimo de sus Armas", que luego fué .ampliado por el de "Fundad~r de la Libertad del Perú", con la facultad de _poder usar la bandera bicolor, dis tintivo del jefe -del Estado. Se ordenó que en toda la nación se-le rindiera los mismos honores que corres·pondían al Poder Ejecutivo y que en Lima se ie erigiese una estatua al término de la guerra. _Y, finalmente, se le concedió una pensión vita· licia teniendo cuidado en advertk, para no herir su delicadeza. y evitar el rechazo, que se le comparaba con Washington el padre de la li.bertad norteamericana. Mientras tanto la noticia de su alejamiento se propagó como un reguero. La capital de la República, prime¡ro y luego, todas las ciudades del país, lamentaron, profundamente su ausencia voluntaria y sorpresivq y se acongojaron con su alejamiento del Gobier-


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no, que había dignificado con el tesoro de su magnífica moral. No_com• prendían que un vencedor en el apogeo de su fama ocultara, como dice Vicuña Mackenna, ~la aureola de su frente con el manto del vía· j.ero y abandonara Llma, más como un peregrino que como un hijo de la victoria. Pero este era otro legado- y así lo Cjlmprendieron todos" - de San Ma.rtín a la peruanidad, que permitió a lá causa patriota el caro· bio de rumbo y que se hizo carne en la convicción del libertador argentbo, cuando comprendió, allá en la histórica Conferencia de Guayaquil, qu& dos caudillos no podían .ser el punto de canversión de la libertad de un pueblo, como dos estrellas no podían constituir el centro de un sis-tema planetario. . . .

Y pasaron los tiempos. La epopeya de la libertad se consumó en Ayacucho interviniendo en sus episodios muchos de sus antiguos. compañeros de aventura y de gloria. El, mientras tanto, probaba y apuraba hasta la:s heces el amargo cáliz del ostracismo confundido con el hombre común de la hosp~talaria nación francesa. Su recuerdo se atenuó aparentemente con la deslumbrante aparición de otros bizarros paladines; aunque permaneció, agazapado y 1latente, en el fondo de las· almas y en la profundidad de las conciencias. Con la implantación de la República, muchos mandatarios peruanos demostraron oficialmente-este singular estado anímico, como lo hizo el Presidente Orbegoso cuando, en abril de 1826, declaró peruanos de nacimiento con OlpCiÓn a to-

. dos los empleos, a los generales, jefes, oficiales y demás autoridades civiles, que vinieron en el ejército libertador a las órdene.s del Generalísimo San Martín. Su pensiÓI). le fué satisfecha en concordancia con las. penurias del Tesoro y muchas remesas sirvieron para mitigar sus estrecheces y hasta para adquirir la finca de G:rend Bourg, como lo asevera el escritor argentino Domingo Faustino Sarmiento. La mayoría de· los historiadores ha sostenido sin fundamento alguno y guiándose por simples deducciones, que cuando San Martín'-decidió en 1830 abandonar Bélgica para establecerse en París, compró su residencia de Grand Bourg, gracias a la ayuda generosa de su amigo, don Alejandro Aguado, Marqués de las Marismas. Quien conozca, auque sólo sea someramente, la contextura moral del héroe, tiene que sorprende:rse por esta ' aseveración, que tiene t<J.nto de suposición antojadiza, corno de gratuito · insulto a la honorabilidad y !fectitud de conciencia del Capitán de los. Andes. San Martín no era un hombre acomodaticio, que se avenía a recibir las dádivas conmiserativas de nadie, y , mucho menos, del hombre al que lo ligaba vínculos de amistad indestructible. Es posible que el Marqués de las Marismas haya favorecido a San Martín aliviando su


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precaria situación con el adelanto de alguna suma a cuenta de_ sus pensiones, pero nunca le regaló dinero porque la altura moral del prócer en desgracia, no lo hubiese admitido. El propio señor Aguado declaró derta vez, refiriéndose a un amigo de ambos: "San Martín y e~te amigo han sido 105' únicos que no me han pedido la bolsa" afirmactón que el prqpio San Martí~ .corroboró en su testamento, cuando afirmó solemne y categóricamente que "nunca debió un real a persona alguna".

En los meses ;promediales del año 1839, el jefe de la Confederacion Argentina, don Juan Manuel de Rosas ofreció a San Maatín 1a re¡presentación diplomática de .su Patria ante el Gobierno del Perú, propuesta que el Libertador rechaz0 con esta explicación: "Si una buena voluntad, un vivo "deseo de acier1.o y una lealtad, la más pura, fuesen sólo necesqrias para el desempeño de tan honrosa misión, he aquí todo lo que yo pudiese ofrecer para servir a la República; pero S. E. , el señor Gobernador, conocerá como yo, que estos buenos deseos no son suficientes. Hay más y este es el punto principal en que, con sentimiento :fu.Qdo mi renuncia. Al conferirme S. E. tan alta misión, tal vez ignornba o no 1uvo presente que, después de mi regreso de Lima, el primer Congreso del Perú me nombró Generalísimo de sus Ejércitos, . señalándome al mismo tiempo, una pensión vitalicia de 9,000 pesos anuales. Esta circunstancia no puede menos que resentir mi delicadeza pensando que tendría que representar los intereses de nuestra República ante un Estado a quien soy deudor de favores tan generosos, y que no todos me supondrían c;:on la moralfdad necesaria para desempeñarla con la lealtad y honor". ,

Sintetizando puedo asegurar que la pensión peruana fué pagada hasta el último centavo, quedando un saldo de 164 mil pesos, que sus herederos hicieron efectivo después de SU muerte~ ·Según liquidacio!rí practicada en ,)861 por el Mintstro de Hacienda, José Fabio Melgar. ¡Y aquí interviene el Mariscal Ramón Castilla -la otra cumbre de la peruanidad- cuya relación con San Martín ha consignado la historia con trazos memorables, que son como cancio.nes de gesta para el honor -y la gratitud del Perú!. ·

Mi ilustrado auditorio recordará que Castilla asumió el poder en abril de 1845 sucediendo a los .períodos -relámpago de Domingo. E1ías, Justo figuerola y Manuel Menéndez. Cuando mediaba el tercer año de .su administración dirigió al gran desterrado una comunicación, que la historia no ha encontrado todavía y que mereció una extensa respuesta, portadora de la gratitud del próce~ po:r su preocupación para poner al


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<lía los pagos de la pensión peruana. El 13 de noviembre volvió a suscribir una segunda carta, en la que consignaba estos datos, que son luminarias de gloria para 'el prestigio del Perú: "Todas las liquidaciones de las oficinas de Hacienda, hechas de la asignación que tiene usted señalada en el Teso:ro Peruano -le dice a San Martín ..-han sido mandadas reconocer en el acto como una deuda nacional, y si alguna hubiese pendiente dispondré que .se haga lo mismo para cumplir los deseos que sobre esto me manifiesta. . Desde que mando el país -agrega_ha recibido el apoderado de usted, cada mes, de manos del Habilitado de la Inspección General, su haber, -que no dudo habrá remitido a usted". Carta memorable que en su último párrafo contiene una hidalgai y emocionar¡_te sugestión: "Con gusto vería -termina el mandatario peruano- la elección que hiciera usted del Perú para pasar en él, de un modo tranquilo y en medio de verdaderos amigos el último tercio de su vida, si se resolviese a dejar la Europa, teatro de escándalos y desórdenes".

Pero ya el prócer estaba herido de muerte p_or las dolencias que iban a llevarlo a la tumba, como él mismo lo expresaba en el epistolario oficial: "A la avanzada edad de 71 años --confesaba- con una salud ~nteramente arruinada y casi ciego por la enfermedad de cataratas, esperaba, aunque contra todos mis deseos, terminar en este país una vida ·acahcosa" .- Poco a poco sus• males se fueron acentuando y el 17 de agos!o de 1850 el Gran Libertador rindió su tributo al destino y se hundió en la noche del misterio insondable ...

La noticia tardó en llegar al Perú hasta noviembre, cuando el propio Castilla, recibió una carta, de Mariano Bakarce, hijo político del héroe, portadora de la infausta nueva. Inmediatamente decretó solemnes exequias a cumplirse el 15 de ese mismo mes y año; pero desde el Ju-· nes 11, Lima vivió días de congoja y duelo, que se acentuaron con el clamor de las campanas y el estruendo de disparos que la artiilería del Fuerte de Santa Catalina efectuaba ininterrumpidamente cada quince minutos. Los hec_!ios del glorioso Capitán consfüuyeron el tema de las conversaciones. Y todos los sectores de la · capital tomaron las disposiciones convenientes para hacerse presente en el funeral. Espectáculo impresionante fué el que dió el pueblo capitalino al acudir en masa y ostentando luto riguroso a los funerales. Las tropas de los batallones "Callao", "Junín", y "Ayacucho", con su artillería y bandas militares, formaron en la plaza, hasta que apareció el cortejo presidencial, integrado por todos los funcionarios de la administración, ministros de Estado, autoridades y corporaciones. Las calles centrales de Lima se atestaron


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de un público emocionado y reverente, que se desbordaba por las vías, de acceso y hormigueaba en los balcones, porta.les y centros de la plaza principal. La catedral imponía por su severo aspecto, por la escogida concurrencia que la ocupaba totalmente, dentro de la cual primaba el concurso de las dan..as del gran mundo, rigurosa. y espontáneamente enlu-tadas. El monumento funerario fué un despliegue de arte y significa- ción a cuyos lados ondeaban los colores de las banderas del Perú, Chile y Argentina. Los solemnes oficios los presidió, casi con lágrimas: en los ojos, Mon~eñor de Luna :¡:>izMro, Arzobispo de Lima, que había disfrutado de la amistad del héroe durante su es1ada en nuestra Patria. Y la oración fúnebre corrió a cargo del párroco del Atunyauyos, Juan Bautista Guzmán, que trató de e~edirse del mejor modo sin rayar a la altura que demandaba el acontecimiento. San Martín no había encontrado aún ni ha encontrado hasta ahora su Choquehuanca.

Resumiendo señores, me permito afirmar -creo haberlo demostrado en el desarrollo de esta conferencia-._ que el Libertador San Martín alimentó nuestra peruanidad con el concepto altísimo que tuvo de los. hombres de esta_ tiena, con las pautas gubernamentales que estructuró y puso en práctica en los primeros años de la República, con la doctrina de moralidad que nos deió como norma inviolable de una gran-deza futura, con las premisas de abnegación suprema y generos~ad inigualable que le permitieron cumplir entre nosotros la misión de un padre y con los ejemplos de renunciación y apartamiento que tuvieron la suficiente realidad para,digmática para coh stituirse en deberes sacratísimos e ineludibles al ponerse en juego los altos intereses de la Patria .. "Cuando creyó que no era necesaria o se desconocía su tutela -anota Vicuña Maokenna- dijo un adió eterno al suelo que había redimido y

se fué a amarlo en silencio más allá del mar ... "

Tennina. el acto.

Al terminar su conferencia, el Sr. Vegas Cas1illo fué calurosamente aplaudido por la concurrencia.

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Banco Comerciali del Perú. Al Instituto Sanmartinian0> del Perú en su'S Bodas de Plata.


LA SOLEMNE ACTUACION DEL INSTITUTO SANMARTINIANO DEL PERU

La actuación central conmemorativa de las Bodas de Plata del Instituto Sanma:iiniano deJ Perú, consistió en una sesión iiolemne realizada en el Salón ,de Actos~ de la entidad, el día martes 23 de febrero, a las 7 ip.m., bajo la presidencia del Sr. Ricardo Cavero EgÚsqu¿~~-

. El señor Presidente de la República estuvo representado por el Edecán, Teniente Coronel Díaz Tizón.

Concurrieron, además, !as señores Mmis.tros de Guerra, General Víctor Tenorio Hurtado y de Educación, doctor José Rubio Rolando; el Decano del Cuerpo Diplomático, Embajador del Uruguay, señor Eugeni .. Martínez Thedy; otros Embajadores y miembros de la representación extranjera.

También, ocu¡paban asientos en e l estrado, el Encargado de Nego- . cios de la República Argentina, .Sr. Horado Portela, el Presidente Honorario Vi'talicio del . Instituto Sanmartiniano del Perú, doctor Luis Alayza Paz Soldán, el Pres1idi:¡nte del Instituto Nacional Sanmartiniano de la Argentina, General Ernesto Florit, el Presidente del Instituto Argentino-Peruano Mariscal Castilla de Buenos Aires, General Carlos A. Salas, el Senador de la República, General Carlos A. Miñano y el Director de Cultura del Ministerio de Educación, Sr. ManueÍ Vegas Castillo.

' La Sala, totalmente llena, estaba ocupada por jefes y oficiales de las fuerzas armadas, -miemibros de instituciones ~lturale.s y patrióticas, destacadas personalidade¡s de las esferas sociales y público en general.

Se inició el acto con el Himno Nacional, ejecutado por la Banda del Regimiento Guardia Republicana, siendo _coreado po~ los asistentes.

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DISCURSO DEL PRESIDENTE DEL INSTITUTO SANMARTINIANO DEL PERU, SR. RICARDO CAVERO EGUSQUIZA

El Sr. Ricardo Cavero EgÚsquiza, pronunció luego, el siguiente

discurso: "' Señor Representante del Presidente de· la República; ~ -· Señores Ministros de Guerra y de Educación Pública; Señor Decano del Cuerpo Diplomático; Señor Encargado de Negocios de la República Argentina; Señores Embajadores y Miembros del Cuerpo Diplomático; Señor Presidente Honorario Vitalicio d el Instituto Sanll1;artiniano del Perú; · Señor Presidente del Instituto Nacional Sanmartiniano de la Argentina; Señor Presidente del Instituto Argentino-Peruano Mariscal Castilla de

Buenos Aires; Señores Jefes y Oficiales de los Institutos A.rmados; Señores Presidentes de las Instituciones Culturales, Patrióticas e His.

tóricas; Señoras; Señores:

Celebramos •esta solemne sesión, bajo los mejores auspicios, conmemorando el vigé1simo quinto aniversario de la fundación del Instituto Sanmartiniano del Perú.

El 23 de febrero de 1935 se realizó, en el antiguo local de la Sociedad · Geográfica de Lima, una reunión de intelectuales, diplomáticos y militares, unidos todos en común sentimiento de admiración al Generalísimo Libertc¡dor, don José de San Martín, bajo la presidencia,. del :i:>restigioso historiador, doctor José Pacífico Otero, Presidente del Instituto Sanmartiniano de Buenos Aires, quien, con su gran espíritu de Jniciativa, cual misionero de cultura y . de civismo, vino a .fundar esta Institución, convencido de que "los peruanos como los argentinos tienen pendiente con San Martin una deuda, no del bronce, ni del mármol, ni del lienzo, sino del espíritu".

-En •aquella reunión, en que fue exaltada con emoción patriótica, "- por varios oradore:s ,la figura egregia del General San Martín, estable

ciendo qU:e Lima constituyó el punto culminante de¡ su gloriosa campaña emancipadora, quedó designado el Comité fundador del Instituto Sanmartiniano del Perú, compuesto en la siguiente forma: señores, doctor

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Luis Alayza Paz Soldán, doctor José Gálvez y Ricardo Cavero EqÚsquiza-.

De·sde entonces y elegida, poco después, la primera Junta Direc~ tiva" la Institución ha venido realizando su tarea de glorificar las virtudes del General San Martín, de fomentar a través de su figura, el sentimiento cívíco de la ciudadanía y de estrechar, más aún, los vín.cu]os, espirituales existentes entre el Perú y la República Argentina, patria deI Libertador.

Se -Cllimple, pues, una etapa de _la obra sanmartiniana, realizada: en forma .incesante, con sencillez, .pero con dignidad y patriotismo, concitando no sólo el consenso, sino el respeto y la adhesión de la peruanidad.

Primitivamente, el Instituto tenía carácter académico, y lo conS'tituían solamente historiadores e intelectuales de reconocida importancia. Pero, pos1:eriormente, en vista del interés que despertó su acción: en todo el ámbito peruano, huhp de dársele, también, sentido cultural y patriótico, a fin de que pudieran ingresar a formar sus filas todos aquellos qué demostraran verdadera devoci6n sanmartiniana. Es así ,como• en nuestros registros figuran alrededor de un millar de asociados, todos ellos representativos de diversas actividades del país.

El Instituto Sanmartiniano del Perú es una corporación absolutamente• privada . e independiente. Sin embargo, por la naturaleza de su acción patriótica, histórica y cultural, por la noble finalidad en que se ins-

' pira, por la calidad de sus asociados y por la repercusión ·que ha alcan-zado su existencia, ha quedado, implícitamente, incorporado dentro de la vida nacional, dentro del rol oficial, dentro de la acción administrativa e institucional del Estado.

Así, por ejemplo, la Resolución Suprema de fecha 18 de noviembre de 1948, que declara "Día do San Martín" al 17 de ·agosto, aniversario del fallecimiento del próce:r. establece, entre otras disposiciones, que el Instituto Sanmartiniano del Perú organizará anualmente la ceremonia conmemorativa de ·ese aniversario en la plaza San Martín, en coordinación con las· instituciones oficiales y culturales correspondientes, con la cbncurrencia de colegios y escuelas de la ciudad.

En el Tratado Cultural, celebrado el año próximo pasa.do, entre los gobiernos de.} Perú y la Argentina, se considera la colaboración de esta Instifuto para el cumplimiento de la cláusula que se refiere a actos y ceremonias a realizarse anualmente el 8 de setiembre, instituído oficialmente "Dfa de la Amistad Peruano-Argentina", por ser esa fecha anl-

, versaría del Desembarco de la Expedición Libertadora en Pisco.


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Además, este Instituto ·se ha convertido ,automáticamente, en Cenlro de consulta sobre asuntos relacionados con la vida del General San Martín y con todo cuanto se refiere a la historia de la Independencia. No son pocos, a propósito, los informes que se emiten por nuestras comisiones sobre consultas, no sólo de origen l:>artiC4J.ar . sino, también. <ie las oficinas del Estado.

Realizamos actuaciones y ceremonias en forma principal, de acuer·do con el Calendario Anual del Im;tituto. en las siguientes fochas: 2.5 -de febrero, Aniversario del nacimiento del General San Martín; 25 de mayo, Día de la Revolución Argentina; 9 de julio, Aniversario de la De·claración d e la Independencia de los Provincias Unidas del Río de la Plata; 28 de julio, Aniversario de la Independencia Nacional del ]Perú; 17 ·de agosto, fecha del fallecimiento del Protector; 8 de setiembre, Des•embarco de la Expedición Libertadora en Paracas, y el 27 de noviembre, en

'·que, desde el histórico Balcón de Huaur~, se dió el primer grito de In-.dependencia.

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Estas y otras actuaciones, muchas de ellas solemnes y eminente-mente académicas, se han visto, a través de 'los años, no pocas veces, ])restigiadas por la presencia de jefes de Gobierno, Ministros de Estado. Embajadores, Presidentes efe misiones especiales extranjeras y otras al·tas autoridades oficiales, diplomáticas y militares. En cuanto se refie--xe a público, en general, nunca nos ha faltado. Siempre, nuestros actos :se han visto concurridos, llenando salones o plazas de bote a bote.

Precisamente, aquí cabe recordar que, más de una vez, algÚn ·personaje, admirado del numeroso público asistente, me ha formulado la ·siguiente pregunta: ¿Qué hace usted para reunir eri estas ceremonias tanta gente? Mi respuesta era sencilla y fácil: Nada hago yio ni na-0.ie hace nada Lo hace el propio San Martín. Su atractivo natural, la -devoción sfocera, el fervor sanmartiniano profundo que existe en el Pa-rú.

En el anhelo de ampliar lá acción del Instituto hacia todo el terriiorio del Perú, se ha procedido a formar · filiales en provincias, existiendo, en pleno funcionamiento, las de Pisco, Chiclayo, Ica, Huacho, Hliau-xa, V égueta, Tacna, Jauja, Arequipa, !quitos, Moyobamba y otras ciuda·des, a cuyos presidentes o delegados que han concurrido a esta ses1ón, ;saludo cordialmente.

Publicamos, además, una Revista que recoge la obra gloriosa de '.San Martín y demás héi:oes de la Emancipación Americana, cuyos magníficos episodios apasionan y enorgullecen a todo buen patriota.

El Instituto, en su afán de perennizar hechos heroicos ejemplariza-


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dores de nuestra historia; mandó erigir en Chancay un obeli:;ico a la me-moria del Teniente argentino Juan Pascual Pringles, quien, enviado por el General San Martín, desde Huaura, el 27 de noviembre de 1820, en misión de ipatrullaje, al encontrarse en el •lugar denomina9o "Pescadores" con la fuerza adv,rrsaria, cübrióse de gloria, junto con el pelotón de soldados que comandaba. Tanta admiración produjo el valiente gesto de arrojarse al mar, que rescatados por .su persecutores, con la garantía de respetarles la vida, la propia autor}dad militar española hubo de obsequiarles medallas mandadas acuñar con la siguiente inscripción: "A los. vencidos, vencedores en Pescadores".

San Martín, igualmente, dis!')uso que Pringles y sus acompañan'tes llevasen al pecho un escudo celeste con la siguiente leye;;ida borda-. da en blanco: "Gloria a los vencidos en Chancay".

También, el Instituto Sanmartiniano del Perú levantó en San Ma·teo, un obelisco que recuerda un episodio histórico por dettnás aleccionador de las compañas de 1824, denominado "El sorteo de Matucana" ~ En aquel lugar, des oficiales argentino5', domingo Millán y Manuel Pru.dán, en sublime gesto de heroísmo, fueron fusilados, después de haber reclamado, ellos mismos para sí, tal sacrificio, en defensa de sus coro-pañeros, para evitar el sorteo de muerte a que se iba a someter a la ofi_ciali.dad patriota prisionera, como consecuencia de la fuga de dos de sus jefes. Pidió Millán la última gracia: Vestir de parada con su compañero, y frente al pelotón de arnabuceros, exclamó sereno y magnífico: He vencido a los españoles en San José, en San Lorenzo y Suipacha. y he peleado contra ellos en todos los campos de . batalla; he estado -en Casas Matas prisionero", y, abriéndose la casaca, dijo con voz de· trueno: ¡Al peche! ¡Al pecho! Una detonación cortó los últimos ecos. de esta marcial arenga: "Juntos cayeron los dos mártires - dice Alay~za Paz Soldán - juntos se elevaron a la gloria, y sus< nombres un.idos' hoy equivalen a !os cantos ·de toda una epopeya.

En el pueblo de Muquiyauyo, comprensión de .la provincia de, Jauja; colocamos, también, una placa en memoria de Bruno Terreros, et cura coronel peruano, quien cambiando la sotana por la · cascca militar puso en jaque al enemigo en los campos de batalla ganando la gloria_ en la misma contienda emancipadora.

Una de las iniciativas que viene dando resultados z antajows en la acción cívica de divulgación sanmartiniana que realiza este Instituto,. es el concurso escolar sobre la hisitoria del Libertador, ins.tituído hace

_ algÚn tiempo, con varios premios pecuniarios y menciones honros.:i.s. Es. ;notable el incremento de postulantes que cada año se presentan al "llu-


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dido concurso, dando no poco trabajo a la Comisión correspondiente y

a la Junta Directiva, cuyos miembros prestan su colaboración entusias·tamente.

Gran parte de esta obra, desarrollada con patriotismo, con de.sinterés, con eficacia, conesponde, señores, ·~ los 14 años en que el dootor Luis Alayza Paz Soldán ejerció la presidencia del Instituto, a cuyo funcionamiento entregóse por ·entero de 1935 a 1948, dándole personalidad, brillo y prestancia: Esta consagración nacionalista, acreedora a la gratitud de la patria, que, desde luego, no debe extrañamos en el caso del doctor Alayza Paz Soldán, es característica de su espíritu, heredada quizás de sus antepasados, forj1adores de nuestra nacionalidad. Ella está est~reotipada en cada una de las jornadas de su vida, acentuándose, especialmente, en su actuación pública y en su producción lite-raría.

En las funciones de Ministro de Estado y desempeñando honrosas misiones diplomáticas y delegaciones ante diversos certámenes internacionales de carácter intei'ectual, económico o social, el Dr. Alayza Paz Soldán prestigió siempre el nombre del Perú.

Como escritor nos ofre·::e las expresiones de su talento y de su vasta cultura. Ha publicado librós en los que deja entrever la huella profunda de su tendencia nacionalista. Después de la primera fase de su producción, o sea la de carácter extrictamente literario, constituída por "Dau el Kamar", "León Garabán" y otros libros, entra en la etapa de la madurez intelectual ,de la p:roducciórÍ seria, de la obra de fuerte envergadura, y es entonces que escribe "Mi {P.aís", colección de mérito histórico y geográfico que, en sobrio y sugestiv:o estilo, presenta al Perú en sus proporciones exactas, con.s•agrando a su autor, como uno de los más altos valores de la cultura peruana. ·

Esclarecidas ,personalidades nacionales y extranjeras, se han pronunciado sobre la importancia de esta obra. Entre ellas, Víetoc Andrés Belaunde, con admirable acierto, emite el siguiente juicio: "Mi Paí.si'', libro de Alayza Paz Soldán, es el 'Tacundo del Perú".

Por todo ésto, por su tesonera, enérgica e· inteligente acción, reconocida por todos, es que, cuando el Dr. Alayza Paz Soldán hubo de retirarse de la presidencia del Instituto para dedicarse a altas funciones de Estado, se le designó Presidente Honorario Vitalicio. Y es por eso, también, que ahora, que el Instituto· cumple sus Bodas de Plata, la Directiva le ha conferido las P~lmas Sanmartinianas, decidiendo que en esta solemne oportunidad se le haga entrega, en la seguridad de que así se le rinde un homenaje muy merecido, pidiéndoJe, •a la vez, que conti-


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núe prestando a · la Institución el concurso · de su inteligencia, de su patriotismo y de su prestigio ·de historiador y de sanmartiniano.

Hecho el recuento de la obra del Insfüuto, no he de seguir adelante, sin dedicar en esta solemne ocasión, un emocionado homenaje a la memoria de tantos homb,res que han pasado a la eternidad y que estuvieron vinculados 11,a la existencia de este Instituto, como José Pacífico Otero, inspirador de su creación, como el poeta José Gálvez, su vice-presidente que desapareció cuando desempeñaba, por segunda vez, la presidencia del Senado, como el Embajador Felipe Yofré, que en esta misma sala pronunció en 1958, un magistral discurso en la memorable sesión en que fue incorporado en su calidad de Miembro Honorario Nato, de acuerdo con el artículo 3<? de los Estatutos. Es de justicia recordar, también, a todos los colega.si fallecidos en estos últimos 25 años y que han formado nuestra Directiva, o han sido simplemente miembros activos, como Luis Felipe Paz Soldán, Ernesto Montagne, Edmundo Escomel, Ernesto Salaverry, Enrique D. Tovar, Miguel A. Martínez, Gerardo Dianderas, Fausto Figueroa San Miguel, José luis Salmón, Luis A. Solart, Pío Max Medina, Manuel G Bonilla, Aurelio García Godos, Ricardo J. Vásquez, Horado Urte-aga, Alberto Salomón, Federico Moore, Felipe Gonzáles del Riego, Juan B. Lastres, Arturo Lecca, Juan Vicente Nicolini, Eduardo Recavarren Ulloa, Gerardo Uzátegui, Carlos Gabriel Saco, Manuel Bonilla (hijo), Adrián Cañas, Romano Espinoza Cáceda, Ester 'festini de Ramos Ocampo, Odavio de los Heros, Carlos Hurtado, J. ,Elfos W alter Mannheimer, Armando Oyague, Tomás Azpilcueta, Luis Palma y Alberto Rosell Dulanto, quienes, con tanta devoción y exquisita se-nsibilidad espiritual, prestaron su contribución al esfuerzo sanmartiniano.

Creo de 1mi deber informar que la Embajada de la Rep:ública Argentina ha secundado en todo momento nuestra labor. Su colaboración moral y su palabra de aliento, que nosotros agradecernos debidamente, han sido y son decididas, entusiastas y siempre enaltecedocas.

Nuestras iniciativas han encontrado, invariablemente, favorable acogida en las esferas oficiales. Tanto el -Ministerio de Guerra como el de Educación, no;:; han :prestado apoyo, cuando hemos recurrido a ellos. Este apoyo se hace u~ tanto más ostensible, ahora que se h~lla ad frente de la Cartera de B:iucación el doctor José Rubio. lliplicable, si se tiene en cuenta que es Miembro Activo del Instituto. Fervoroso sanmartiniano, ha prestado su colaboración a nuestra obra, sin reserva alguna, primero en las épocas inciales y, luego, cuando desempeñó con tanto acierto la Dirección del Colegio Nacional Dos de Mayo del Callao, haciéndose acreedor a nuestro reconocimento.


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Asisten a nuestras celebraciones, como invitados especiales, con :sus gentiles esposas, dos personalidades argentinas: El General Ernesto -Florit y el General Carlos A. Salas. El primero ha de~empeñado altas -y honrosas funciones en su patria, entre ellas la Intendencia de Buenes _}\.ires. En la actualida.d, es 'Presidente del Insfüuto ¡Jacional Sarrmarti_niano de la Argentina, entidad fraterna de la nuestra, consagrada allá a la patriótica obra de divulgar las virtudes y ejemplos de nuestro comúr! libertador y con la cual mantenemos la más frecuente y cordial relación. El segundo, figura ampliamente conocida acá, pues fué Agregado Mili-tax a su Embajada, es_ Presidente del Instituto Argentino-Peruano Maris·-cal Castilla, de Buenos Aires, creado con el nobilfsimo fin de rendir culto en la República del Plata a aquel prócer peruano, Libertador también, que en la hora de la angus<tia y de la vejez, supo tender su malno gene-rosa al Gran· Capitán de los Andes.

Los dos, el General Florit y el General Salas, ambos historiadores ·de mérito indiscutible, a quienes hemos enviado en reciente oportuni·dad las Palmas Sanmartinianas, pertenecen al mismo Ejército de cuyas iilas emergió aquel famoso Regimiento Granaderos a Caballo que comandado por el General .San Martín vino, hace 139 años, con coraje y

-visión de estratega, venciendo la distancia y las barreraS' geográficas de la época, para ofrendarnos ese don preciado de la libertad.

Recibimos, pues, a tan distinguidos huéspedes, con afecto, con saiisfacción por sus singulares dotes personales, porque son buenos ~migos del Perú y porque vienen de ese gran país aTgentino, de li:m¡pia Jüstoria, cuna de Mitre, Sarmiento y Alberdi y. que, por su cultura, por su riqueza y por el espíritu laborioso de su pueblo, sigue un caimino ·firme hacia los más a-ltos destinos, dentro del concierto de los pueblos ·del orbe.

Nuestro Instituto, que está formado, por ciudadanos bien intencionados, estudiosos de la historia unos, y fervorosos de la patria y de la pe:uanidad todos, conserva y exalta la memoria del General San Martín, inspirado en los más nobles ideales d_g justicia, de gratitud, d~ moral. de cultura y de patriotismo. Hace~os cátedra de su vida y de sus gloTias, como una m1sión sagrada. tratando de llegar 0;_1 pueblo peruano, a sus insti:tuciones, a sus colegios y escuelas, porque en su ¡persona se •encierran todos los valores espiritualeS'; por que constituye un hermoso -ejemplo de virtudes cívicas; porque fue "héroe en la guerra como en la paz"; porque fue "grande en la adversidad como en el triunfo; porque es el · símbolo de esa porción de hombres patriotas y valientes que obtu-


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vieron "el triunfo moral de las libertade;s1 americanas y el triunfo material de la Emancipación de medio continente".

Más, la labor de este Instituto no se circunscribe sólo a la difusión de esta conciencia sanmartiniana. Su radio de acción ·es má,s. amplio aún. Abarca la glorificación de todos los próceres y héroes de la Em.ancipaciÓn, especialmente de los peruanos como Castilla, Gamarra, Luzuriaga, Salaiverry, San Román, La Mar, Nieto, San Miguel, Alvarez Thomas y cien más que se· formaron militarmente en los. Ejércitos Libertadores y cuyas ,acciones hemos destacado repetidas. veces y seguirem~s destacando en esta tribuna. '

También, exaltamos aquí con unción cívica a las figuras de Bolívar y Sucre, guerreros eximios que en las gloriosas jornadas de Junín y Ayacucho, sellaron definitivamente la Independencia del iPerú_ y de América; y de Francisco Miranda que organizó dos expedícines pa-

. ra libertar a Venezeula y a todo .el continente y que, infortunadamente, corrió la misma suerte de sacrificio de todos los pT€cursores d? la Independencia, en que se incluyen, honroS:árnente, peruanos como Vizcardo y Guzmán, Túpac Amaru, Aguilar y Ubalde, Pardo figueroa, Silva,. Zela, los hermanos Angulo, los curas Béiar y Muñecas, el brigadjer García Pumacah ua, etc., ek.

No olvidamos, tampoco, a Bernardo de O'Higgins y la ayuda po. sitiva que Chile prestó a la Expedición Libertadora de San , Martín.

Especialmente, consideramos en nuestra acción a Simón Bolívar,. el Libertador de cinco naciones y cuya grandeza histórica, · ha sido mu-· chas veces tema propicio de conferencias en este escenario, en el que hemos honrado su figura con admiraéión.

La liberadón americana ha sido hecha con .sangre, con heroísmo, con triunfos y derrotas, con dolores y lágrimas, y San Martín y Bolívar son los ;principales protagonistas de tan magna epopey;a. Por eso, siempre que se trata de ella, no se puede prescindir de ninguno de los dos prqceres. El uno, hér!Je del sur, y el otro, héro-e. del norte, para los dos' constituyó· el Perú la rheta de su misión libertadora, como que éste país fué el más poderoso baluarte de la dominación colonial. La acción de ambos se complementan y los dos tienen · su sitio de privilegio, que no puede despertar rivalidad al_guna. La glori.Q.. ·alcanzada por ellos es justa e inconfundible. "Los dos están en la - inmortalidad de la historia" y a ambos debemos pleitesía y gratitud por igual. "Vidas pa~las fueron las. suyas - dice el maestro colombiano Posada - Grandes ambos son, como son grandes el Orinoco y el Plata, inmensa es


su gloria como inmensas son las tórridas llanuras y las pampas australes'".

Baio el techo de esta vetusta casona, de honros·a tradición nacional, funcionamos en unión del Centro de Estudios Histórico-Militares y

del Instituto Mariscal Ramón Castilla, presididos éstos por el General " Felipe de la Barra.

Los sanmartinianos tratamos aquí de que florezcan todas las ideas de acercamiento, de concordia y de cultura, y trabajamos en un ambiente de tolerancia y comprensión, sin- otra mira que el interés sagrado de· la patria, cuya grandeza estriba, precisamente, en la armonía de sus hi-· jos.

Con este espíritu, también, con frecuencia, remarcamos en nuestra obra e1 sentimiento hispanista del General San Martín, en el convencimiento pleno de que no puede ni debe existir en los paíseis iberoamericanos, predisposición alguna contra la Madre Patria que nos legó . su sangre, su religión, su lengua y todas las virtudes de su noble estirpe; pues, las luchas que se libraron contra ella, no oóedecieron .sino. a la necesidad de satisfacer h!stificados y nobles ideales de ernpncipa-ción, por los que los mismos españoles habían combatido denodadamente poco antes, en S'U propio suelo, en íntima y fraternal solidaridad con elementos americanos.

Bien es verda9 que para San Martín, según afirma 01ero, la patria no era lo peninsular o lo ibérico. La patria era lo indígena, lo ame-ricano, el cielo y el q.mbiente donde se despertó a la vida. Por eso sir-

- vió la causa de la Independencia Americana, no sólo con su espada, sino, también, con el ejemplo de su desinterés, de su grandeza moral, de su sacrificio sin cuyas nobles acciones, la soberanía alcanzada en estecontinente, no hubisra podido ser efectiva y duradera.

Nuestra deuda de gratitud a San Martín, no sólo se deriva, pues, de la libertad que nos <lió. en memorable gesta hist~rica, sino, también, de la acción que realizó en el Perú. Durante ·el tiempo que estuvo en sus manos el gobierno de este país, hizo obr·a constructiva. Organizó la administración pW:(lica, creó instrumentos culturales, fomentó la edu-cación, refon;nó e-1 sistema penal, declarando la abolición de tributos y privilegios. En general, sentó las bás•es más firmes de nuestra fortrna.-ción nacional.

He aquí, señoras y señores, la razón de la existencia del J;hstituto Sanmartiniano del Perú.


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Entreqa de las Palmas Sanmartinianas al Dr. Alayza

Invitado el Dr. Luis Alayza Paz Soldán a acercar~e a la Mesa de Honor, el Presidente, Sr. Ricardo Cavero Egúsquiza, le impuso las Palmas ·Sanmartinianas ;i la::;,. que se ha hecho acreedor por su amplia e inteli.gente labor que ha realizado en favor de la Institución.

Hubo nutridos• aplausos en la Sala. Luego, el doctor Luis Alayza Paz Soldán, pronunció el siguiente

·discurso:

DISCURSO DEL DR LUIS ALAyzA PAZ SOLDAN

.Señores:

Jamás pude sospechar que mi modesta labor en la creación del ]nstituto Sanmartiniano del Perú, me proporcionaría alguná vez honores tan altos como )os que · en este día estoy recit?iendo: esta noche son las l'almas Sanmartinianas, con que nuestro instituto en solemne actuación, me condecora. En la mañana de hoy, he recibido la Gran Cruz de la

·<)rden Sanmartiniana, con que el noble y esforzado go~ierno del Plata :ha querido distinguirme.

Muchas veces he declarado, y ahora lo reitero, que la-creación del 1nstituto, más que mía, fué obra de mis colegas, y nació de una insinua,ción del gran historiador argentino José Pacífico Otero, a cuyos manes rindo homenaje. Solicité y obtuve la cooperación de nuestro gran poeta y estadista José Gálvez para la redacción de los Estatutos, y conté em iodos los momentos, . durante los casi catorce años que presidí la institu- ' 'Ción, con la valiosísima ayuda del Sr. Ricardo Cavero EgÚsquiza, lleno, ayer como hoy, d A patriótico entusiasmo, quién, generosamente me brindó el aporte de su claro talento, espíritu ·organizador y dinamismo in<eansable, unidos a la sagacidad y don de gentes, al que tantos éxitos de- . bimos.

Al renunciar la presidencia fue elegido para reemplazarme, por -unanimidad de votos, el Sr. Ricardo Ca vero Egúsquiza; y a partir . de •ese momento comenzó la institución a desarrollar rápidamente, alcanzando su extensión actual en toda la República, y hoy ha llegado a una altura y esplendid.ez que bien podéis verificar, por la solemne reunión ·de esta noche.

Doy las gracias al Instituto Sanmartiniario del Perú, a su tantas ve·Ces mencionado Presidente actual, a la Junta Directiva y a los miera-


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bros adherentes, por el recuerdo, materializado en la honrosa imposición_ de LAS !PALMAS SANMARTINIANAS, que ofrendan al compañero que, por razón de sus años comienza ya a apartarse, poco a poco, de las ac- · tividades públicas y oficiales. ~

Quiero decir algo, no sé cómo expresarlo, de mi emoción al ver " entre nosotros al General Carlos Alberto .Salas, viejo amigo nuestro, tan

popular y querido en eL Perú como en su patria. Por el digno co..."'1.ducto del General Ernesto Florit, a quien conocí_

esta mañana, considerándome, desde ese momento amigo fraternal, por-· que estamos unidos a través de la inmortal figura de San Martín envío, como homenaje·, mi saludo .ai esforzado gobierno del Piata, y . la p;ro-- · testa de mi inolvidable recuerdo de sus grandes hijos, el Gran Capitán. de los .A!ndes, que nos <lió · 1a libertad y se ciñó no ·a su voluntad de soldado triu.11fador, sino a las leye:s, para garantizar los derechos individuales de 'los ciudadanos del Pe rú; y el Dr. Ro~ue Sáenz Peña, gran

. señor y destacado juris1a, que quiso ser soldado para pele-ar junto con. · los nuestros en la gloriosa ·acción del Morro de Arica, y que, años más tarde, en elocuentísimo d iscurso pronunciado en la Plaza Bolognesi de Lima, con motivo de la erección del mopumento al héroe del Morro, la-mentóse del egoísmo de la patria peruana, que no quiso aceptar su sangre y su vida cua.r;do él sumóse al viejo Coron~l. del último cartucho y a S'llS compañeros de sacrificio.

Permitid, señores, que sueñe un viejo. Déieseme soñar que en. este día ,para mí doblemente memorable, 23 de febrero de 1960, he recibido la visita ,P.n espíritu, de nuestro libertador, el General San Mar- · tín, que ha querido rer mmerar con un tesoro invalorable, el pequeño óbolo que en mi pobreza pude ofrecerle. Otras intervenciones:

Luego, intervinieron otras personalidades, pronunciando los si-· guientes discursos:

DISCURSO DEL GENERAL ERNESTO FLORIT

Señoras y Señores:

En este fausto aniversario del INSTITUTO SANMARTINIANO DEL PERU, me cabe el alto honor de tra.er el saludo y el homenaje afectuosos del INSTITUTO .NACIONAL SANMARTINIANO de la República Argentina; fraternal abrazo de hijos de un !J1ismo ideal, de glorificación del prócer común y de gratitud y amor hacia su venerada memoria.


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En el acto realizado el 23 de febrero de 1935 ,en la Sociedad Geográfica, del cual surgiera la creación de este Instituto, se halló presente el Doctor don José Pacífico Otero, fundador y entusic¡:sta primer pre-sidente del Instituto Sanmartiniano de Buenos Aires -antepasado ilustre del actual LNSTITUTO NACIONAL SANMARTINIANO argentino~. Como autor .de la idea inici'ál, el doctor Otero contempló con satisfacción evidente la aceptación de su feliz inkiativa, en ,el país donde culminara la:. carrera del libertador San Martín y al que tanto amara éste.

¿Y cómo no sentirse henchido de orgullo en circunstancias se:meiantes? Surgía a la vida una institución que se apoyaba sobr.e la sólida base del más puro sentimiento de patria y de solidaridad americana y que, por lo tanto, estaba llamada a perdurar y a realizar, en el tiempo, obra espiritual provechosa. La celebración de hoy así lo cQlmP,rueba.

Es que las instituciones que se levantan sobre fundamentos de la más sana moral y que no se apartan de los e~evados objetivos que determinaron su itinerario de marcha, no desarr~llan una actividad espectacular, pero efímera, sino una acción perdurable e intensa, como la luz de los astros que, ademáis de emanar de su ·propia naturalezJ "intrínseca, es capaz de penetrar a través' de distancias siderales.

Los institutos sanmartinianos son de esta calidad. Al amparo de los manes del au~tero general. son entidades modestas, como él, pero, también como él. perseverantes y serenas en su acción. Han nacido para investigar y mostrar la verdad histórica sanmartiniana, para difundir la doctrina moral sanmartiniana y para hacer honrar y glorificar la memoria veneranda del patriota desinteresado, que sólo obró animado por el ideal magnífico de la libertad americana; ·ellos adelantan en sus propósitos paso a paso, teniendo como actor primordial de su ¡persistencia ' en el tiempo y de su eficacia real, un gran afán constructivo, sin desvia-ciones que distraen ni desmayos que retardan.

Consideran que la personalidad del prócer es tan clara, tan definida, tan rectilínea que, para su gloriifcación popular, basta y sobra la verdad histórica presentada sin ropajes ditirámbicos, para que mejor llegue y s~ grabe en todas las mentes por igual. Recuérdese: nació en América, se formó en España. supo de la lucha de América por su libertad e independendq.c y, "abandonando su fortuna y sus esperanzas", vino a sumar sus calidad€s de guerrero y de gooornante al lado de sus compatriotas, sin- más interés ni más prmrecho que el de alcanzar la libertad e independencia de su patria americana.

Nunca jamás qu~so intervenir en las luchas fratricidas, dándonos


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-con ello la más importante y la menos aprendida por nosotros de sus lecciones cívicas: " ... jamás derramaré la sangre de mis codipatriotas y sólo desenvainaré mi espada c.ontra los enemigos de la idependencia de Sud Am€rica".

Como todas las demás enseñanzas de su vida .~iemplar, los iri.stiflJ.tos sanmartinianos deben esforzase por inculcar en el espíritu ciudadano tal lección, que es norma segura de progreso social y de educación cívica superior.

Ella forma parte de la "doctrina moral sanmartiniana, que en estos momentos constituye la base principal del plan de acción del INSTITUiO NACIONAL SANMARTINIANO y que, a título personal, me permito .someter a la consideración del INSTITUTO SANMARTINIANO DEL PERU, como una contribución fraterna y de bien común.

· Es indudable que la doctrina moral de San Martín, encuadra per-1ectamente en los planes de educación de los pueblos, porque concurre a formar ciudadanos probos, idóneos y dignos del eje:rdcio de todos sus derechos, después de ;'repararlos para cumplir responsablemente con su deber ;para consigo mismos, para con la familia y para con la sociedad, Es, por lo tanto, una doctrina fortalecedora de. la independencia de los pueblos, desd_e que, al inducir a la formación de individuas capa.ces de bastarse a sí mismos - es decir, independientes -, contribuye a aumentar la suma. de Ciudadanos enemigos decididos de 1oda esclavitud.

De este modo, los institutos sanmartinianos se convierten en entidades activas de bien general, colaboradoras del estado y merecedoras de su apoyo. Con tal fin, bajan a1 "Padre de la Patria" de los altades en ·que la pasión suele colocarlos y, al mostrarlo en toda su verdad de hombre con errores, y de hombre con aciertos de virtuoso, consiguen que la grandeza de . su obra crezca en esplendor y las eris.eñanzas de su vida ejemplar se hagan más accesibles, al común de las gentes.

Tal es, al menos el1 criterio que .sustenta el INSTITUTO NACIONAL SANMARTINIANO de la República Argentina, criterio que, al imponerle 1a consiguiente norma de conducta._ no da lugar a que él se distraiga en digresiones que lo aparten de su elevada función.

- Por otra parte y conforme al americanismo de San Martín, los institutos - sanmartinianos concurren a la mayor. vinculación, armonía y

conocimiento de los1 pueblos de América, arn,1dando la amistad y afianzando los lazos de paz: nuestra presencia en este acto y en tierras peruanas es una de las formas en que se manifiesta tal acción.

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S. y S.: La gentil invitación del INSTITITTO SANMARTINIANO DEL PERU -que el de Buenos Aire!? agradece muy cordialmente-, !Para concurrir a los actos en celebración de sus bodas de plata, no solamente nos, tomó de sorpresa, sino también, en p}ena suspensión anual de activida- · des. A pesar de ello, hemos logrado traer para él algÚn presente signi-ficativo. '"' ,

En primer lugar, la réplica de la bandera del "füército de los Anr· des", que bordaran patricias mendocinas encabezadas por Remedios Escalada de ·San Martín, que el ejército juró el 5 de enero de 1817 y que llevó a su frente en la histórica travesía de la cordillera andina y ·en la. victoriosa jornada del 12 de febrero de 1817, en Chacabuco.

Además y por especial encargo de S. E. el señor Secretario de Guerra de mi país, junto con su saludo y sus felicitaciones· calurosas, traigo e.sta réplica del famoso "corvo" de San Lorenzo, que el f:jé:rdto· Argentino dedica al INSTITUTO SANMARTINIANO DEL PERU, en tan. señalada oportunidad y en prueba de alta estimación.

SEÑOR PRESlDE.NTE: Me es grato p'oner ambas prendas. bajo la. custodía del ilustre INSTITUTO SANMARTINIANO DEL PERU, en la se-guridad de que habrá de recibirlas y guardadas como testimonio elocuente de la solidaridad de los sanmartinianos peruanos y argentinos,. hermanados ·en la comunión de un mismo e1evado ideal: la glorificación. del Libertador Don José de San Martín.

Por último ,el INSTITUTO NACIONAL SANMARTINIANO, deja en. esta placa rememorativa la expresión de su presencia en tan jubilosas circunstancias y la entrega al señor Presidente con un grito de fraternat amor: ¡VIVA LA REPUBLICA DEL PERU!

DISCURS:O DEL GENERAL CARLOS A. SALAS


-- Con honda emoción, después -:-de 10 años de ausencia materia}> de Lima, subo a esta calificada y prestigiosa tribuna para participar delos regocijos sanmatínianos.

Esta vez vengo desde la ribera occidental del Plata , y en representación del Instituto Argentino Peruano Gran Mariscal Ramón Castilla, a estrechar en un cálido abrazo al Instituto Sanmartiniano del Perú, que festeja sus 25 años de labor patriótica espirtiual.

- Durante la última mitad de éste cuarto de siglo, he sido actor testigo material y espiritual de la brillante labor que el Instituto Sanmarti-


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niano del Perú, bajo la sabia, fecunda y eficaz dirección de 'Ricardo Cavero Egúsquiza viene re<tlizando; ora desde la presidencia que asumiera _en 1948, en el marco del Perú, ora desde Brasil y Arg.entina donde un accidental destino diplomático le tocó cumplir.

- Por causas que no son de l caso citar en e~e gran día de fie~ ta, y con la más eficaz ayuda de Luis Alayza y Paz Soldán, de Ricardo ~ Cavero EgÚsquiza, de Femando Gamio Palacio y de José Rubio, en junio de 1948 se volvieron a abrir las puertas de par en ;par de ésite Insti-tuto que estaban entornadas desde un tiempo atrás. ·

- Al noble impulso de estos cuatro abanderados del sanmartinialrlsmo, se sumaron muchos otros nombres valiosos que, por la apretura material del tiempo, no los citaré, pero cuya colaboración fué muy eficaz para el éxito del Instituto.

- E~pero no puedo silenciar entre ellos, el del coronel Bonilla que nos arrebató la muerte.

- - Viejo y meritori61'o1dado, fe.cundo historiador, esforzado trabajador del ,sanmartinianismo a qruien la vida no le <lió ,el tiempo suficiente siquiera, para que esos ojos que ya no ven hubieran visto la aurora de este gran día que festejamos.

- Como testigo ¡presendal de la labor sanmartiiana de los años sión tremenda que provocó tu partida de esta casa y de ésta tierra.

- Dios te guarde en su infinita misericordia, que nosotros no te olvidaremos jamás en el resto de los pocos días que nos quedan ya para juntarnos contigo.

- Como testigo presencial de la labOT ,sanmartiniana de los años 1948 y 1949. en que tuve. el placer de vivir entre vosotros y de la realización d esde entonces hasta hoy que la segUÍ atento desde el Plata, debo decir que gracias al pensamiento y acción de Ricardo Cavero, Fernando Gamio Palacio, Jos'é Rubio, Coronel Gambetta, Alberto Sabogal, Cañas y Delgado, General Zenón Noriega, General Matto, Eva Castañeda, entre muchos otros, se concreto:

1 Q) La instalación permanente aunque bajo un techo prestado, del Instituto -Sanmartiniano, en ·esta vieja casona.

29) La asignación d@l valioso terreno de la avenida Alfonso Ugarte para la realización del sueño de su sede -definitiva, casa propia.

3Q) La org.anización, por primera vez en Lima, de los actos de recordación de la muerte del coloso, el 17 de agosto de cada año - fasto nacional.


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49) La concurrencia de 4800 niños de las escuelas públicas de Limá, los institutos militares, 120 banderas y la palabra del gobíerno frente a la estatua deil Fundador de la Independencia del IJ;erú.

59) Las grandes actuaciones• en Lima, Callao, Pisco, Paracas y

Huaura. "' 69) La expansión del movimiento sanmartiniano a los pueblos del

Perú por medio de sus filiales. 79) Las conferencias de Cavero Egúsquiza, en Río de Janeiro y

Buenos Aires para hacer conocer la obra sanmartiniana en el Perú. 89) Se logró la g~nerosa contribución de los colegios de Lima, en

especial de la Escuela Ré¡pú:blic'a Argentina, del colegio Divi:no Maestro, del colegio 2 de Mayo del ;Callao, del de La Merced, entre otros.

- Esta es una apretada síntesis de lo que yo ví, de la brillante labor de Ricardo Cavero, José_ Rubio, Femando Gamio, Coronel Gambe

-tta y otros esforz:ados y destacados abanderados, a quienes expreso mi gra.n admiración, y rindo mi justiciero hom~riaje a su patriotismo, talento y trabajo por una causa patriótica y espiritual cual ninguna otra.

- Al irme de Lima a fines de 1949, a estos abanderados del sanmartinianismo en el Perú les pedí perseve rancia en la obra, sin importarles las naturales divisiones internas, la incomprensión de sus grandes ·objetivos, los egoismos, la injusticia, u otro pago ingrato.

- A Ricardo Cavero, Femando Gamio, José Rubio, Néstor Gambetta, Manuel Bonilla, Eva Castañeda, le s dije al despedirme:

"Como luchadores de las primeras horas es menester mantener al tope la bandera del Sanma:rtinianismo en el Perú. Ella debe ondear iiJ.bilosa y viril ,en su afán de uñir a los pueblos de ésta América.

-- No deiéis arriar jamás esta bandera, y si a pesc;i.r de vosotros, alguna vez os viérais precisado a arriarla, tenéis en vuestra tienra, en vuestra thistoria, y en las puertas de la ciudad de Lima, tres ejemplos vivos de la fe y de amor a una causa para imitarlos:

- Haiced lo de Falucho en la :puerta del Rea:l Feli.pe, envolveos la bandera para morir, que sus colores sean la mortaja histórica que señale una causa;

~ O bien imitadlo a :Pringles y a. Alfonso Ugarte, picad vuestro caballo y arroiáos al mar como ellos en Pescadores y en Arica, para que las olas s.ean el mausoleo eterno de sus pliegues sacrooantos.

- Señores, por fortuna y por el esfuerzo de los abanderados, no llegó y creo no llegará la hora de rendir la bandera. Por el contrario, la b;rillante labor de 12. años que llevan deSa.rrollando Cavero, Rubio, Gamio y un. conjunto de ilustres peruanos, permite presagiar un creciente

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~xito del Instituto y en estas bodas de plat~ hago votos por su fortaleza y expansión. - - Señores: El Instituto Ramón Castilla de Buenos Aires y la gran

legión de Castillistas, que se formó ya en el Plata, me pidieron fuer~ intérprete de su cariñoso y emocionado abrazo para los ~anmartinianos del ~erú y ésta noche lo transmito con gran fervor y honda emoción.

DISCURSO DEL MINISTRO DE EDUCACION, DR. JOSE RUBIO

El doctor José Rubio, Ministro de Educación Pública, en emotiva improvisación, se refirió a la fecha que se conmemoraba, otorgando especial significación a la presencia de los. Generales Ernesto Fiorit y Carlos A. Salas. En forma especial, se refirió a éste último, diciendo: "Es un leal y viejo amigo del Perú y gestor del Instituto Argentino-Peruano Mariscal Castilla de Buenos Aires y de su Monumento erigido en esa ciudad".

Et Ministro de Educación Pública. Dr. José Rubio, destaca en su discurso' la importancia del Instituto Sanmartiniano del Perú.


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Reflrléndóie, luego, a párrafos dél discurso del Genera'.l Salas,, ,evocó· "las inolvidables mañanas anuales realizadas en homenaje a la Afqenüna .en la· vieja casa del Ool.egio Nacional ·2 de Mayo del Callao. Cu.ando mas de mil voces de escolares cantaban el Himno Argentino óon la misma· emo~ión eon qú.e cantaban el Himno de su propia patria''. Remarcó el Dr. Rubio la honda y sinéera amistad entre Perú y Argentina "forjada -:<J.ij~ no sólo .a travi3s de la gesta de la emancipación y en los episodios triunfales de la Independencia, sino; también, en horas de dolor y angustia para el Perú, cuando la noble figura de Sáenz. Peña se sumó a nuestra causa".

Destacó la acción que ·realiza el Instituto Sanmartiniano del Perú y demostró su satisfacción por la importancia que hª a1canza9,o, como. certtro de ciVismo y de cultura en el pq.Ís y como coadyuvante ¡positivó de la obra de co.nfra:teinidad peruano-argentina.

Después de otras referencias, glosó el Dr. Rubio, la última parte del discurso del Dr. Alayza, manifestando:"' "Y o también qiliero que se· me permi_tq soñar un poco eri esta hora de celebración solemne del 23' de febrer-o ·de 196'0. 'Pero, soñar no recibiendo la visita, en espíritu, del Llbertad:0r, sfrro, al e6nlr-ürió) volando con el pensamiento hasta la tumaa qµe gaqrda los l:e·stos 'del noble hHo de Yapeyú; de aql1el hombre,. erue ·ei genio tle BenJJ11m:ié, ha 'perennizado en bronce y piedra en la mejor .plaza de lima a pócas cuadras de esta casa". "Trasportarnos allá

.~ontinuó el Dr. Rubia- llevándole ·el saludo fervoroso de este pueblo. P.:tra ·decir1e ·que el Perú 'no ha olvidado la· qrandeza de su glotiai y Ja npbleza de sus hechos. Para entregarle el testimonio de nuestra gratitud y nuest:o afectó. Para dejarle nuestra promesa de seguiT siendo,. cómo él ntis lo 'enseñó ,siempre buenos y siempre justos. El Perú recuerda y vénera a s¡u libertador, General , San MartÍn, símbolo eterno da modestia y de pureza, expre-sión ·cabal de abnegación y de heroísmo, lécción cl.e d'esintetés y <le nobleza, "Santo de la Espada", grande entre" 10s más m-a.ndes de la Historia". ·

DISCURSO DEL ENCAitGADO DE NEGOCIOS ARGENTINO. Slt HORACIO PO~TELA


He 'aqu4 que :q:ie cortesponde._ el honor de hacer uso de la palabra· en este acto y evocar a1 'héroe. Tanto se ha dicho de él, ocupa tan grande espacio en el escenario de nuestra común historia, que difícil""'

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lUente pudiera yo llevar mi pb,J.ma por derroteros ine~lorados, en forpia original, que pudiera expresaros todo lo que mi patria ve en e(:>te prócer, todo lo que representa como lazo de unión con los países hermanos del Continente, así como entre nosotros los argentinos, por aquellos conceptos ~suyos, que más que conceptos son principios y más <¡ue principios inamovibles de conducta y norma de vida, son debe:res que nos rigen como innatos ;signos de una personalidad integrante de nuestra propia personalidad.

Para los argentinos hablar de San Martín, referirse a su trayecto.ria, seguirle en su marcha emancipadora, revivir sus hazañás, apreciar .i:;u valor, aquilatar sus méritos y recoger sus enseñanzas, es adentrarse en el pasado americano y en especial trasladarnos con la mente y el .corazón a este Perú que él tanto amó.

Pero evocar a San Martín en Lima, cuyos cerros milenarios fueTon testigos de la gesta magna, es para los argentinos un 1tanto sobreco-gedor, porque aquí culminó la Historia y aquí ondeó en su mano -que $Upo de todas las intelll!P6riGs-= el blanco y el rojo de una Enseña de Libertad .

.El Encarqado de Neqocios Arqentino, Sr. Horaclo A. Portela. leyendo su discurso.


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Puso en el Perú la planta con firme decisión con el al'ma ll~na de esperanzas, nacidas bajo el sol ibérico, desarrolladas entre las ccr rrientes fecundas de la Mesopotamia argentina, en los llanos ae Chaca-buco y de Maipú, y maduradas bajo el Sol Inca a cuyo3 rayos renova-· dos y ardientes ethibió los laureles de los hermanos del Sur.

Evocar a San Martín en Lima, es como mirar en derredor desde· una cumbre. . . Escribió aquí una página en el liibro de la humana gran>-< deza y ·Se marchó luego hacia la inmortalidad -como aquellas figuras· alegóricas de ·la Gloria- entre el flamear de banderas: los colores augustos de los pendones de Castilla, el refulgente emblema del Virrey· primero, los colores vic toriosos del Perú y las enseñas chilenas y argentinas que él consagró en lo alto de la Cordillera donde - como alguien inspiradamente dijo - "los potros de los granaderos · de la epo-peya las tachonaron de estrellas" ...

San Martín para los argentinos es un símbolo. Así está dicho, todo. Su evocación nos vincula, algunas veces con patriótico interés, .., otras veces con asombro, otras con gratitud y siempre con profunda. emoción, al medio Mundo en que actuó: los milenarios bosques de las. Misiones; los riscos de las escaramusas españolas; el mar azul que nos lo trajo de Eurc¡pa y copió en su inmensidad sus pensamientos y su futuro; el río Paraná y el Convento de su primera victoria americana; Cuyo, donde forjó sus cañones y templó el ánimo de sus guerreros y el

. patrioti.smo de sus contemporáneos; los Andes - en la parte más alta. del Continente - donde los cóndores altivos le vieron cruzar meditando, libertades; Santiago, que le recibiera - después de Chacabuco - con revolotear de ponchos, cohetes, campanas y arcos de arrayán; Perú -donde lleg-~a p~r el ~céano, sum\J.ndo a _ las ondas eterna·s el estremecimiento de la marcha titánica y donde vivió las horas solemnes de la. ·culminación de sus hazañas; y otra vez el mar océano y otra vez el mar de Francia, frente al cual, después de toda una vida consagrada al amorde los pue-blós, rememora antes de partir para siempre, cumbres, !POl-vo de lua.1.a, morriones entre cascos de cabalgaduras y metralla, vítores y congresos emancipadores ...

Es con profundo agradecimiento que la Embajada Argentina sei

hace presente en esta recordación y en este homenaje. Señor Presidente del Instituto Sanmartiniano: Decid a nuestros queridos hermanos del Perú que siempre esta

remos juntos mientras conservemos la misma veneración por el Héroe_ Muchas gracias.


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EL PRESIDENTE. AGRADf:CE LOS OBSEQUIOS ARGEN11NOS

El Presidente; Sr. Cavero EgÚsquiza, en breve y emocionada improvisación, agradeció al Ejército argentino y al Instituto Nacional Sanmartiniano por los obsequios traídos por el General Ernesto Florit para el Instituto Sanmartiniano del Perú, consis1entes en'Una Réplica del Sable Corvo del General San Martín, una· Réplica de la Bandera de los Andes y una Placa recordatorh, tallada en bronce, diciendo qu.e dichas reliquias las conservará el Instituto como un preciado galardón y como el más hermoso estímulo para que dicha institución continúe en la brega sanmartiniana y en la grata tarea de aproximación espiritual entre dos pueblos hermanos: el Perú y la República Argentina.

HIMNO NACIONAL ARGENTINO

Seguidamente, la Banda de Músicos ejecutó el Himno Nacional Argentino y el Presidente 1.evantó la Sesión.

Banco Comercial del Perú Al servicio del País


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ANTE EL "'MONUMENTO- DEL GENERAL SAN MARTIN

El día 25 de febrero del presente año, se realizó una importante ceremonia al pié del Monumeynto del General José de San Martín, de esta capital, de a911erdo con el programa de · celebración de las Bodas de Plata del Instituto Sanmartiniano del Perú, coincidiendo con el 1829 Aniversario del nacimiento del Libertador.

Aparte del Presidente y miembros del Instituto organizador, estuvieron presentes en este ado una delegación de la Municipalidad de Lima, altos representantes del Cuerpo Diploreático, de los Institutos Armados, de las instituciones patrióticas y culturales y numeroso público.

Primeramente ·Se colocaron por las principales autoridades,' sendas ofrendas florales al pié del Monumento.

En seguida se ejecutó el Himno Nacional del Perú, por la Banda de Músicos del Regimiento Guardia Republicana, siendo coreado por los asistentes

DISCURSO DEL DR. OSCAR GUZMAN MARQUINA

El doctor Osear Guzmán Marquina, Presidente de la Asociación Nacional de Periodistas y Miembro Activo del Instituto Sanmartiniano del Perú, pronunció el siguiente disc•urso: , Sr. Encargado de Negocios' de Ja República Argentina, Dr. Horacio Por-

tela; Sr. Presidente del Instituto Nacional Sanmartiniano de Argentina, Gene

ral Ernesto Flórit; Señores Miembros del Cuerpo Diplomático; Sr. Presidente del Institut.o Argentino-Peruano Mariscal Castilla de Bue

nos Aires, General Carlos A. Salas; Sr. Presidente del Instituto Sanmartiniano del Perú, Dr. Ricardo Cavero

Egúsquiza; Señores Representantes del Municipio de Lima; Señores Jefes y Oficiales de los Institutos Armados;

"


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'Señores Presidentes de las Instituciones Patrióticas y Cultural~; Señoras y Señores:

Para el creyente católico, ningÚn acto le acerca más a su credo que cuando, al pié del altar, recibe la santa comunión; para el ciudadano

" peruano, ningún otro acto le acerca más a su Credo nacionalista y, por -ende, americanista, que cuando se identifica con el .espíritu sanmarti~

niano. Por ello, señores, al hablar desde esta ara lo hago compenetrado

.de su el-evado sentido, y respondiendo, con elevada complacencia cívica, a la designación que al efecto ha hecho generosamente de mi :persona, el Presidente del Instituto Sanmartiniano del Perú, Doctor Ricardo •CaV'ero E.gúsquiza. Y lo he de hacer como militante sanmartiniano y

·como Presidente de la Asociación Nacionai de Periodistas del Perú. En todo recuento histórico advertirnos que las más de las . grandes

:figuras del mundo han alcanzado celebridad y gloria, en la realización de determinados hechos ya ~~: guerreros, científicos: o políticos. Apa. .. .renternente esta afirmación puede aparecer obvia, supérflua y hasta intrascendente. Pem nó lo es si repararnos qué lp. verdadera valorización ·de 'los actos humanos se sustenta no, en los hechos· mismos:, sino en -los .Propósitos que los inspiran. Y es, precisamente, a la luz de esta adveriencia que podernos admirar, en toda su plenitud, los augustos propósitos que insipiraroin al genio de Don José de San Martín en la guerra de la Independencia.

San Martín no es el guerrero que se vale de la estrategia para arrasar y conquistar campos y ciudades; San Martín no es el político que .se vale de la ciencia y de su talento para extender sus territorios ni imponer sus idecilogías; San Martill, en fin, no es el ególatra que sacrifica a esperanzas de pueblos parn acrecer sus dominios; San Martín empleó su estrategia, su política y su talento, como medios, como recursos, para alcanzar la causa libertaria.

Animado de ese espíritu es que triunfó en los nevados picos y que venció en el anchuroso océano. Pero su gloria no radica, precisamente1 en estos hechos de suyo trnscendentales; no señores, su gloria ·está en los propósitos que animaron esa cruzada; es decir: en su .. Jdeal puramente libertario y su afán por la libre determinación de los pueblos. Ello explica su a~titud en el Perú, así como que rehusara a la Presidencia de Chile, y S'U ausencia de Mendoza ,cuando su nombre ,empe'ZÓ a jugar en la política. Leopoldo Lugones ha dicho, con evidente acierto, que San Martín terúa dos blancuras: la de su espada y la de


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su corazón; nosotros podríamos agregar con plena justicia, que San Martín tuvo, igualmente dos ideales albos: la de independizar a los pueblos y la de .posibilitarles su autodeterminación.

Y ese ideal, que implicaba no sólo el sacrificio sino hasta el renunciamiento personal, se hace más evidente si consideramos, que

"' ahora, ouando el mundo hace alarde de conquistar el espacio, hay 'to-davía pueblos que viven de rodillas e impedidos de poder expresar su propia determinación como lo lograra San Martín hace mucho más deun siglo.

Considero, por todo ello, que uno de los acuerdos más justos queha tenido el Congreso Peruano. a través de toda su vida, es cuando otorgó, o diríamos mejor, reconoció oficialmente a José de San MartÍn el título de Fundador de la Libertad del Perú. Igual acierto evidencia Vicuña Mackena cuando considera a San Martín el Primer Ciudadano de América.

Digamos ahora, unas cuantas palabras sobre el periodismo peruano y San Martín. Conocida es la trasc'ikndental misión que cumjpliÓ la prensa peruana dUrante la campaña de la Emancipación.- San Martín que, naturp.lmente, era amante de la difusión de las ideas, del periodismo, trajo en su Expedición Libertad.ora una imprenta que ayudaría a la autonomía política de nuestra nación. Es así que podemos considerar como la primera hoja dell periodismo de la Patria "Boletfu del Ejército Unido Libertador del Perú", que redactara Bernardo Monteagudo y cuyo primer número se imprimiera en Pisco el 5 de Octubre de 1820.

La era de la libertad de prensa en el Perú se inicia mediante •expreso mandato de San Martín, :por Decreto del 13 de Octubre de 182'1; "sanciono esa libertad, dice San Martín, porque reconozco el derecho: que tienen los hombres de pensar, de hablar y de escribir libremente".

El espíritu sanmartiniano a favor de la libertad de imprenta así como su admiración por los hombres de prensa se advierte, si observamos,. que precisamente, en su primer gabineté figuraron tres periodis1a.s:: Hipólito Unanue, Juan García del Río y Bernardo Monteagudo.

Señores: Cuando San Martín estuvo voluntariamente desterrado, un conti

nente y un b~éano lo separaban de Castilla; sin embargo, sus espíritus se aproximaron al alientd de los más puros ideales y devino así una amistad invariable.

Y, en e.s1as horas, cuando San Martín desde ya, vive en la gloria~ . y distante por los siglos de los siglos, el pueblo peruano monta guardia permanente al pié de este · Símbolo, no sólo como manifestación de gra~


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titud, sino muy significativamente, como expresión finne y decidida de defender los principios de libertad política y de libertad de prensa que él nos procuró.

Podemos asegurar, por eso, a la f~rvorosa inquietud sanmartiniana del General argentino Carlos A. Salas, que la bandera sanmartiniana , jamás será arriada en el Perú, porque al izarla hemos cortado los extr~ mos de la driza para anudarlos. con los lazos argentino-peruanos, de modo que mientras más tiremos de ella, más se estrecharán nuestros sen-timientos.

DISCURSO DEL GENERAL ERNESTO FLORIT

Luego el General Eme,sto Florit, Presidente del Instituto Nacional Sanmartiniano de la -Argentina se manifestó en la siguiente forma:

Señores: E;sta heqnosa estatu~ del general San Martín habla muy en alto

de los nobles sentimientos .y de la ihidalga condición de los peruanos; no en va.ño se pro9uce en ellos la extraordinaria simbiosis de dos razas de la más altiva pcosapia; sólo los grandes de corazón saben agradecer, aumentando aS'í el brillo de sus blasones.

Seis años de constante empeño y firme voluntad fueron necesarios para q:ue el gran americano pudiera tener la inmensa satisfacción de arribar a estas tierras, impulsado por su entera convicción estraté-gica de que en ellas encontraba la solución definitiva deJ problema de la emancipación de Hispano-Améri:C:a.

Fueron seis años de contrariedades de todo orden que dilataban el momento deseado; séis años ·de querer demostrar la bondad de su proyecto de · expedición militar. sin ser comprendido por la mayoría de sus conciudadanos; seis años de luchar contra la adversidad y contra las. tropas del poder colonial entronizadas en Chile; de buscar la manera de salvar la tremenda pobreza de los gobiernos; de resistirse a ser absorbido por la vorágine de la anarquía; de sufrir los embates de la enferm~dad que agobiaba su cuerpo, pero que no abatía su espíritu; de consolidar la disciplina de sus tropas .... ' acabando por dar el "mal ejemplo" de su sublime desobediencia al gobierno de Buenos Aires, único. procedimiento para poder realizar la expedición libertadora del Perú.

Al cabo y en colaboración con O'Higgins, pudo materializar su. sueño y arribar a Pisco y asombrar a IFezuela y amenazar al poder colonial en su propio torreón inexpugnable.


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Mas, no vino como nuevo. Atila en son de conquis'ta ni s.u eiércffo expedicionario sembró el espanto con s;us des.manes ...

- . ' - "¡Compatriotas!" llamó el héroe a ]os peruanos, para advertir~

les desde el primer momento, que venía a tenderles la mano amiga y no a cambiarles dec tirano; que venía a demostrar la necesidad de la ·emancipación y la falsía de bs promesas virreinales.

"¡Compatriotas!: vosotros conocéis por experiencia la verdad de lo que os digo... Yo vengo a acabar de poner término a esa época ·de dolor y humillación; és.te es el voto del Eiército Libertador que tengo la gloria de mandar y que m~ ha acompañado siempre al cam:Po de batalla ansioso. de sellar con su sangre la libertad del nuevo mundo".

, Y en prueba de la sinceridad de sus sentimientos y de sus propósitos, amoriesta así a los bravos de aquel Ejército Libertador; " ... :acordaos que vuestro gran deber es consolar a la América y que no venís a hacer conquistas, sino a libertar a los pueblos_. . . Los peruanoS son nuestros herim:anos y amigos: abrazadli s como a tales y respetad sus derechos, como respetásteis los de los chilenos, después de la baialla de Chacabuco".

' Luego y por lo mismo que sabía lo terrible que es la guerra y lo doloroso que s~n los combates, 0bra y maniobra de modo de no; tener que librar batalla, a pesar de las severas críticas de sus mismos subordinados; pero, obra y maniobra ·de Jal modo que, al final ,entra a Lima, •en -la histórica ciudad de Lima, triunfador de la batalla incruenta sin .combates y aquí, bajo los ya gloriosos pliegues de la bandera bicolor qi.+e creara en Pisco, proclama la libertad e independencia del :Perú, el 28 de julio de 1821.- Por eso, más tarde, pudo encabezar -su solicitud <le permiso para residir en Europa. "Don José de San Martín, General del Estado y fundador · de su libertad ... "

Y en es1a Lima secular de sus. ambiciones gloriosas gobierna con -humanidad, administra oon -honradez, legisla sensatamente, promueve el progreso del país, atiende a la salud pública, impulsa la ilustración general, funda la. Biblioteca Naciorial (después tan célebre y por ello más lamentable el que haya sido destruida~por el incendio de 1943) y adopta el Himno Nacional Peruano.

¡No ha venido como Atila, ha venido como compatriota· y p_roce-,¿e como tal!.

"Los males de lá guerra --iha dich0- han afligido siempre. mi -corazón, porque no bysco la victoria para satis~acer miras privadas, sino para establecer la independencia de mi patria y cumplir los deberes

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que el destino y la naturaleza me han impuesto". Mas, los realistas son. muchos, los libertadores muy pocos y las escaramuzas no bas1an para alca:r,IBar el tritmfo final; es preciso libl'at la batalla decisiva que impone la situad6n de la guerra, para la cual cuenta con la superioridad moral necesaria, pero n0 'Con la superioridad material ,que haga seguro eL é-xi~, ya. que un fracaso sena de fatales consecuencias.

A tal fin recurre al afortunado libertador del Norte y, tras la his--, 'tódca entrevista, apártase del camino de éste, para librar de obstáculos su marcha victoriosa: por encima de su persona está la libertad de la patria! ...

Al partir, el Congreso Consfüuyente lo llama "primer soldado de· la libertad", lo nombra "Generalísimo de las Armas del Perú" y le impene el título de "Fundador de la libertad del Perú"; San Martín retribuye tantas distinciones declarando: " ... si algún día se viera atacada. · la libertad de los peruanos, disputaré la gloria de acompañarlos, ¡paria defenderla como ciudadano~ , y completa su pensamiento, didend0 "Que· el cielo presida a vuestros de-stinos y que éstos os colmen de felicidad Y paz".

Amor con amor se paga!

San Martín amó al Perú y el Perú ama a San Martín. !Este ibelle> monumento y esta numerosa concurrencia ·así lo consagran y es para. nosotros, connacionales orgullosos de tan ilustre varón, una satisfacción mm.ensa reconocer el sincero amor peruano hacia el fundador de, su li

, bertad y ver ese amor conV'ertido hoy en base firme de la ·amistad peruai;i.o-~rgentina, fraternal y perenne.

Como una ·constancia más, pero muy elócuente, de este amor,, citemos el final de la carta -del 11. IX.1848, con que San Martín contestara a la "muy <!-Preci:able y franca" del 13 de mayo anteJior, que le·escribre-ra el Presidente del Perú., Gran Mari<scal D. Ramón Castilla:

"Al demostrar a Ud. mi agradecimiento por los sentimientos que "me manifiesta en su carta., reciba Ud., m-i apreéiable General, mis vo".tos sinceros porque el ·acierto presida a todas sus deliberaciones, per"mitiéndome al mismo tiempo tenga la honra de titularse amigo de Ud. "su servidor Q.S.M.B .. TOSE DE SAN MAR!I'IN". ,

El Instituto Nacional Sanm"artiniano de ' Buenos Aires deposita , y

coloca esta placa al pie del héroe ,común, haciendo votos porque la fe1i-cidad anhelada por él para el pueblo peruano, sea una realidad permanente, para la mayor grandeza d~l Perú y la mayor gloria de America._


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liNTERVIENE EL DOCTOR MAX ARNILIAS

En nombre del Concejo Provincial de Lima, el doctor Max Amillas Arana, uno de los más c~nspícuos miembros de esa Corporación, agradeció en breve~ y elocuentes palabras• al qeneral Florit y al Instituto Sanmartiniano de Buenos Aires, por la Placa Recordatoria obsequia· da y que quedó adherida al Moruumento del Libertador.

DISCURSO DEL SR. OSWALDO GARCIA PI&EIRO

El señor Oswaldo García Piñeiro, en qombre de _la Embajada de .Argentina, como Consejero de elle., inició su discurso emitiendo concepr tos de lealtad al Libertador San Martín y expresando el reconocimiento de su país al Instituto Sanmartiniano del Perú. Se refirió a la obra que durante 25 años viene llevando a cabo dicho Instituto y, luego de exponef. otras ideas, manifestó ·lo siguiente:

Culto sanmartiniano es milicia sin estrépito; es espíritu en vue· lo y acción; es conciencia de la prudencia y la humildad, claves de .la satisfacción privada y de la paz pública: aquella como un logro de la filosofía íntima; esta - la humildad - un triunfo de la disciplina cristiana.

La tradición límpidq, ,traída por los cauces del tiempo, y el respeto a los mayores, a los padres del hogar histórico, son las normas que deben regir la conducta del ciudadano, en estos paises ávidos de un asentimiento firme en el Hmo de la historia.

La esencia de estos pueblos está en la conservación de esas antiguas tradiciones que son históricas pero son también, y sobre todo, morales: San Martín fundó un orden moral, basado en el respeto a la condición humana. pues sabía que los países son estructuras frágiles, si no •Se apoyan en una realidad espkitual. Y ese orden moral, el que debemos proclamar en estos tiempos y en nuestros países, es que debemos acercarnos al culto de esos grandes hombres no para satisfacer porciones peleznables de nuestra vanidad, sino para integrar, cori modestia, con· decisión, con un ideal que no sepa de ausencias ni de distracciones, esa milicia casi religiosa que debemos a los grandes hombres, los fundadores de nuestras patrias, maestros en la virtud y en la acción, intachables en su devoción al deber.

Sefiores: '

No olvidemos nunca, si queremos ser dignos de aquellos hom-

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bres, que su lección de heroísmo y patriotismo se fundaba en el cumplimiento del deber como quehacer natµral. Todo lo que sea ajeno a. -esos fines, es fraude que cometemos a su sagradas memorias. Señores:

En nombre del Gobierno y Pueblo argentinos ,,¡indo homenaje al Instituto .Sanmartiniano del Perú.

IIlMNO NACIONAL ARGENTINO

Se cenó el acto con el :Himno Nacional Argentino cantado por lós a sistentes a los acordes de la Banda de Músicos del Regimiento Guardia Republicana.

Banco Comercial del Perú Al grande entre los grandes de la Historia


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HOMENAJE DEL PUEBLO DE HUAURA Dando término al programa conmemorativo de las Bodas de Pla

ta del Instituto Sanmartiniano del Perú, se llevó a cabo el 26 de febre. ro de 1960, una significativa ceremonia en el ¡pueblo de Huaura.

Concurrieron además de las autoridades de Huacho y Huaura el Enc?J"gado de Negocios de la República Argentina, Ministro Horacio Portela, los Presidentes de los Institutos Sanm~tinianos de Argentina y deI Perú. señores General Ernesto Florit y Ricardo Cavero EgÚsquiza. También, estuvieron presentes los Agregados y demás funcionarios de la. Embajada Argentina, los Presidentes de las Filiales sanmartinianas de Huacho y Chiclayo, señores Dr. José Torres Muga y Dr. Manuel Arellan°' y Ramírez de Montenegro y otras personalidades.

Después de que la Comitiva hizo la visita ·al histórico Balcón, desde el cual, el General San Martín dió el primer grito de Independencia, se llevó a cabo la solemne sesión en el salón del Concejo Distrital de· Huaura.

En primer lugar ·se leyó el Acta del Concejo declarando huéspe-des ilustres a los señores Florit y Portela y, otros miembros de la Emba--pada Argentina. · ' . · ,_ ' -

En seguida se ·desarrolló la actuación, pronunciando el Alcalde,. Sr. Juan Barrera Grados, el- Presidente del Instituto Sanmartiniano de· Huacho, doctor José Torres Muga y el profesor Dr. Alberto Cabrera, los· siguientes discursos :.

DISCURSO DEL ALCALDE DE HUAURA, SR. JUAN B~

Señor Encargado de Negocios de la República Argentina y miembros de la Embajada:

Señor Presidente del Instituto Sanmarfuiiano de la Argentina: Señor Presidente del Instituto ·sanmartiniano del Perú: Señor Presidente del Instituto Sanmartiniano Filial de Huacho:


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Dignas Autoridades Provinciales y Distritales: Respetables Damas: Señores Concejales: Señores:

En nombre del Conce jo Municipal que presido y del histórico pueblo de Huaura, doy la más cordial y efusiva bienvenida a las ilustres p ersonalidades que nos honran con su visita, en la oportunidad de celebrarse las Bodas de Plata del Instituto Sanmartiniano del Perú.

Para nosotros es un timbre de orgullo que dentro del programa conmemorativo de tan grnto acontecimiento, se haya considerado esta visita a Huaura; distinción que seguramente se debe a la fe liz circunstancia de que fué 'nuestro pueblo el escenario de episodios tra21cendentales d e la gesta emancip adora de América y que desde este Balcón legendario el Generalísimo don José de San Martín proclamó por primera vez nuestra !~dependencia l~acional el 27 de Noviembre de 1820, fecha de permanente evocación y de imborrable recuerdo.

Este Concejo Distrital se complace en declarar "Huéspedes Ilustres de Huaura", al señor Encargado d e Negocios de la República Argentina, doctor Horado Portela. y miembros de _la Embajada; al señor Presidente del Instituto Nacional Sanm artin.iano de Buenos Aires, General Ernesto Florit; al señor Presidente d el Instituto Sanmartiniano del Perú, doctor Ricardo Cavero Egúsqu iza y distinguid os miembros de la Junta Dire ctiva del mismo Instituto, cuya presencia tan honrosa como significativa nos llena de intensa satisfacción y compromete nuestra más sincera gratitud.

Cumplimos ta,mbién un grato deber al expresar nuestra cálida felicitación por su 259 Anive rsario al Instituto Sanmartiniano del Perú, que tiene la elevada finalidad de trabajar por que se mantenga siempre

'vivo el culto al incomparab le Libertador de cinco naciones; poT que se recuerden y conmemoren dignamente las fechas más ·saltantes de su vida y de su obra, y por que se robustezcan cada vez más los lazos de amistad fraterna que unen a la hermc¡.na República ATgentina con la nuestra.

Consecuentemente ,esa noble misión es también cumplida poT to- · \ das la-s filiales del Instituto e inspirándonos en ella e l Concejo y los habitantes de Huaura recordamos y celebramos siempTe los hechos que se relacionan con la gesta libertaria y la acción abnegada de ·su máximo Jefe el Generalísimo don José de San Martín, en cuya memoria leván-tase su Busto en la Plaza que lleva su nombre inmortal. Pero e.ste ho-


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menaje, por ser pequeño, no guarda relación con la grandiosidad de la obra que realizó nuestro Libertador; y es por ello que me pernúto aprovechar de la ocasión para expresar el ferviente deseo de los hijos de Huaura de· que mediante la generosa acción conjunta de las altas Au·· toridades del Gobremo Argentino y las del m,iestro, sea posible que se erija un Monumento al Generalísimo don José de San Martín y que en este recinto se forme el Museo Sanmartiniano, donde eS'tén concentradas las reliquias que evocan todo un glorioso pasado .y constituyen herencia sagrada de la magna obra del Santo de la Espada.

Encontrándose presente el señor Encargado de Negocios de la República Argentina, quiero valerme también de esta oportunidad para traer a la memoria el nombre del que fuera Excelentísimo Embajador doctor don Felipe Yofré, tan prematura· como inesperadamente desaparecido hace poco y a quien tuvimos la suerte de conocer y tratar cuando ·vino como invitado de honor el año pasado a las fiestas conmemorativas del 27 de Noviemqre. Pudimos entotices apreciar su .ascendrado esp íritu sanmartiniano a la vez que su singular don de gentes, su talento y su verbo elocuente, inspirándonos una gran simpatía. Por eso, me permito pedir que, haciendo un breve ·paréntesis en la satisfacción que nos deparan es1os momentos, todos de pie guardemos un minuto de , silencio en homenaje a la memoria del ilustre-ex-Embajador doctor Felipe Yofré.

(Los circunstantes se pusieron de pié). Agradezco en nombre del Concejo y en el mío propio a los di~

tinguidos visitantes, a las nobles damas, autoridades y demás personas que con ·su presencia se han dignado realzar esta sesión oolemne. · Y, para terminar, formulo los mejores votos por la creciente prosperidad del Instituto Sanmartiniano del Perú, por la permanente grandeza de la hermosa nación del !Plata y por el mantenimiento indisoluble de la hermandad peruano-argentina.

DISCURSO DEL PRESIDENTE DEL INSTITUTO SANMARTINIANO DE HUACHO. DR. JOSE TORRES MUGA

Señores:

Al cumplir el Instituto Sanmartiniano del Perú, sus Bodas de Plata, institución que desde su fundación viene dedicando sus energÍas al culto fervoroso de la Patria y a di.fundir las santas virtudes y gloria del


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:Padre de nuestra independencia, Generalísimo Don José de San Martín, no sólo en Lima, sino en varios sectores de nuestro territorio; su filial -Oe Huacho, tiene hoy la grata satisfacción de recibir en su seno al distinguido General Ernesto Florit, Presidente del Instituto Nacional Sanmartiniano de la Argentina, que henchido de .entusiasrJ.o y de inquietu· des sanmartinianas, desde el Plata, ha llegado a la ciudad da los ¡Re.yes·, a realzar con su presencia esta fiesta y a confirmar la sincera amistad que une a estas cl.os patrias del Libertador, amistad que a través del tiempo, se acrecienta y vigoriza.

El Instituto Sanmartiniano de· Huacho, os dá, señor General, su .bienvenida a este santuario de la libertad, porque fué en .esta Villa de Huaura y desde ese histórito balcón que acabáis de visitar, que el Gran

·Capitán de los Andes, lanzara a los pueblos del Perú la primera proclama de su Independencia el día 27 de Noviembre de 1820, y desde su plaza mayor y al tañido de su legendaria campana, al sonar de. los tambores y clarines del ej.ército l:'..bertador, el patriótico pueblo de Huaura, en desbordante entusiasmo, entonara un himno de fé a la primera aurofa de la libertad ..

.Saludo y doy la bienve~'lida al Sr. Horado Portela, Encargado de _ Negocios de la Argentina, como así mismo a los señores miembros de

la Embajada, que en peregrinación patriótica han· venido a este histórico pueblo donde se ferió nuestra Independencia; el que albergó a lás huestes libertadoras en sus fértiles campiñas; que fué el guardador de todos los secretos del plan de campaña del Libertador; y a donde convergieron los patriotas de todos los sectores del Perú a ofrecer al Gran Capitán de los Andes su sangre y sus bienes, en aras de la libertad. Y fué en este pueblo de Hua.ura hace 139 años, que los granaderos argentinos y los patriotais ¡peruanos, amalgamados en ese ideal sublime de luchar por la emancipación hispano-americana, sembraron la simiente de esa gran amistad que une a los pueblos del Perú y de la .Argentina.

Respetuosamente saludo a las distinguidas damas que han tenido la- ger¡.tileza de visitarnos, dando con su · belleza, esplendor a esta fiesta sanmartiniana y aromatizando el ambiente con el perfume de sus virtudes cristianas.

Señor General Florit: Al retornar a' vuestrá patria, os pido ' digáis al generoso pueblo· argentino, como a su digno y patriótico gobierno, que desde este histórico santuario de la Emancipación Hispano-Americana, los sanmatinianos del Perú le enviamos el más cáli<,lo mensaje de . admiración, cariño y gratitud y la firme promesa de mantenemos siem-


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pre unidos, guiados por la gloria de nuestro Padre Común, Don José de· San Martín, en salvaguarda de nuestra nacionalidad, · de nues!ra:s instituciones y de nuestra democracia.

Felicito muy sinceramente al Dr. Ricardo Cavero EgÚsquiza, Presidente del Instituto Sanmartiniano del l?erú, como a los demás miembros de. esa institución, por el éxito que han alcanzado las fiestas conmemo-rativas de las Bodas de Plata de la Institución y expreso mi agradeci-' miento por haber consignado :en el programa, l_a visita a es-ta histórica villa de Huaura, de la Delegación de la República hermana de la Argen-.tina. Expreso asimismo, mi agradecimiento al Alcalde de Huaura, Sr. Juan Barrera, que con gran emoción sanmartiniana ha contribuído a la. celebración de este acto.

Distinguidos visitantes: .., El Insfüuto .Sarµnartiniano de Huacho, os expresa su más profundo·

agradecimiento por vuestra visita, y que a vuestro regreso llevéis un. grato recuerdo de ésta histórk:a vÚla~de Huaura, que como he dicho anteriormente simboliza ·el santuario de la Emancipación Hispano-America- _ na, como asimismo el recuerd? de ese_ inmenso mar que habéis contem- plado en el Viaje, que hace 139 años, guiado por una, estrella de fé y dejando una estela de libertad y gloria, surcara el Gr'an Capitán de los. Andes, acompañado de dos grandes patriotas, hijos de esta provincia de Chancay, Andrés de los Reyes y Francisco Vidal, llegando a estas. playas portando el inmaculado estandarte de la libertad y ostentando

_ en su espada los gloriosos nombres de San Lorenzo, Chacabuco y

Maipú.

Al conmemorarse las- Bodas de Plata del Instituto Sanmartiniano-del Perú, su Filial de Huacho, rinde su más cálido homenaje de admi- · ración y gratitud al Gran Capitán de los Andes, fundador de tres nacionalidades, quien no tuvo más ambición en su espíritu, que el inmenso· deseo de que la causa -de la Emancipación Americana culminara con el triunfo, permanéiendo siempre fiel a sus ideales, en la; hor~s de la vic-toria y de la adversidad y en el crepúsculo de su vida.

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DISCuRSO DEL DR. ALBERTO CABRERA

:Señor Doctor Horacio Portela, Encargado de Negocios de la Embajada de la República Argentina,

Señor General Ernesto Florit, Presidente del Instituto Sanmartiniano de la República Argentina, ,,

~eñor Alcalde del Concejo Distrital de Huaura, Señor Subpr~fecto de la Provincia de Chancay, :Señor Doctor Ricardo Ca.vero Egúsquiza, Presidente del Instituto Sanmar

tiniano del Perú,

Señoras, Señores:

Si la Historia tiene valor como rama del conocimiento no es sin <duda, a causa de ser mero relato de los hechos del pasado; sino a vir-íud de .ser fuente de cultura en la cual ha de beberse el sorbo milenial de la elaboración material y ':9spiritual del hombre desde aquellos tiem-pos en que apenas puede vincularse ai haciha. de piedra y al trazado .rupestre del bisonte hasta e_l presente.

¡Cuánto runor y sa~lficio en esta trayectoria! ¡Cuánta maravilla ·en este precioso acervo de contenido estructurado - como 'anota el colombiano Mantilla Pineda - "con ell temor y la esiperanza, con el do-1or y el placer, con la angustia y la euforia, . con las conmociones bes'tiales y los transportes divinos, con la vida en tensión y la conciencia ·vigilante".

Es este modo de mirar la historia el que nos brinda el conocimien·to. del hombre eri su propio yo, en relación con su tiempo, su ambienie y su sociedad y en referencia a la creación de instituciones tutelares ·que hacen posible su avance generoso e interminable. Porque merced al legado del pasado es dable valorar el presente y escrutar el porve

nir. Ciertamente, el hombre justifica .. su existencia a virtud de su obra

<0n bien de la humanidad~ Poco importa que el aporte sea minúsculo; basta el esfuerzo que se etpprenda para hacer lo aún no hecho, para :rehacer lo hecho de manera equivocada, o para perfeccionar lo hecho, que ayer fuera perfecto y que ya hoy es imperfecto. En las institucio·nes de cultura, esta voluntad de hacer está dirigida a tales fines; ellas · buscan la reverencia a los valores del pasado, · señalan los caminos de :su emulación en el presente y, siguiendo la trayectoria generosa de -esos valores, proyectan la visual hacia el mañana. Estos y no otros son


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los miramientos y fines del Instituto Sanmartiniano al que tenemos el honor· de ¡pertenecer, cuyo día de onom~stico estamos celebrando C?n e'3-tos actos y cuyo sólo nombre evoca los copceptos más caros de nuestra. civilización: la libertad, lq justicia, la fraternidad.

Ha tocádo~, ¡por buena vol1111tad hacia mi modesta peropna porparte del Presidente del Instituto Sanmartiniano del Perú-Filial 9.e Huacho, deciros alguno,s palabras que PllePal1 hacer un número más en la programación de actuaciones que se ha querido organizar con motivo, de conmemorarse el 25Q aniversario de esta preciada Institución 'perua--1.1ª· Recojo el mandato y, dentro de los estrechos límites de mi inex-perto y, por ende, defectuoso verbo, trataré de cumplir con esta difícil y · a la vez sagrada misión.

Vidas hay tan ca!l'as a la humanidad' que, genéración tras gene-racióp, se erigen en símbolos perennes e inmarcesibles, en faros de lla-. ma ~nextinguible, en confalones gigantes e inarriables de los pueblos. Fµe una de estas vidas la del Santo de la l:spada ,si se me permite utilizar la fervorosa expresión del escritor Ricardo Rojas.

Si el no:rnpre qe don José de San Martír¡. tiene su sitial de prefe-rencia en otros pueblos de esta parte del mundo que es América, es aquÍ, en el 'Perú, donde ha sabido conquistar con su acendrada genero--sida,d un altar predilecto entre los manes de la Patria. Qi.ie la empresa.. li.pertadora d13 este. país de milenaria historia hubiera fracasado, di·rigida._ por San Martín, poco hUJbiera importado; no hubiera ello sido óbice pa-·

ra que nuestra ~ratitud con el esforzado Capitán de los Andes no seperennice. Nos hubiera bastado .saber con cuanto amor y cuanta fe· pronunciara, al decidir la suerte, en Argentina, aquellas proféticas pala-·_ bras: "Se acerca el momento en que yo debo seguir el camino que Il!e· llama; voy a emprender la gran obra de dar libertad al Perú". :Nos hu-biera bastado con tenerlo entre nosotros diciéndonos' en aquellas horas-: de crisis y 9e gloria: "Vengo para satisfacer la espera, de todos aquellos qµe deseen la libertad del país que ·les dió a luz y ser goberlna·<los por sus propia_s leyes".

Acaso cometa error al recordaros algunos acontecimientos que· conooéis aún ~ejor que yo; pero es que para los peruanos ellos tienen ~l saber de la po~sía, o el canto tradicionales, que quisiéramos repetir" y escuchar a cada .instante. · La sola presenoi~ de la esouadra lj;pe.rtadora en n~stros mareS;.

f!nriQ qe aliento poderoso a los patriotas na,Gi~males, eliminando toda he;-


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, siiación y despertando el optimismo y la esperanza. Pero San Martín romántico, soñador y poético habría de ir aún más lejos: habría de crear el bicolor que serviría de símbolo de la nueva patria. Con ello despertose aún más el ,sentimiento nacional. El acrecentamiento del fervor tuvo su estallido cuando la escuadra fondeó en aguas de Hµacho; mientras en Huaura había de surgir la fuerza primordial del grandioso movimiento militar y político que empezó a inquietar la seguridad de los rea-1is1as hasta origina~ la disensión puesta de manifiesto en Aznapuquio con la destitución de Pezuela por La Serna.

En Pisco, San · Martín había rehuído la guerra directa y recomendado la catequización de las fuerzas realistas, política que secundaron peruanos como Riva Ag1iero y Pérez Tudela, aparte de la juventud carolina dirigida por Sánchez Carrión 'Y Rodríguez de Mendoza, de la que se sabe que, cumpliendo la ·afirmación posterior de otro gran argentino, don José lngeniems, cuando señaló que el impulso hacia lo mejor sólo cabe esperarse de los es¡píritus jóvenes ,trabajó con audacia incluso en la conversión del famosó qatallón Cantrabria que tenía como comandante al mismo hiio político de Pezuela, a quien no se pudo convenc~r en los días de Aznapuquio, l como señala uno de nuestros escritores. Del mismo modo, fernandino5 y sanmarquinos habrían de ganar a la noble oCausa al batallón Numancia.

Por tal sendero. en comunión de ideales, habría de llegarse a pasos largos al lwro soñado de 1a libertad en el i?erú. El norte la iría proclamando con los pronunciamientos sucesivos de Lambayeque, Trujillo, Piura, Cajamarca. Todo el país se estremecería en espera de pronunciamientos similares. Nacerían figuras como la de Sánchez Carrión, "El Solitario de Sayán", a quien la historia le tenía reservado un papel de tribuno excelente, que .se embriagarían con los vapores libertarios. Días aquellos en que la misma ilustración habría de inquietarse en aras de la acción renovadora. Como apunta Villavicencio, "el nombre · má~ gico de San Martín resuena como una esperanza en los oídos y se mezcla en las oraciones de las mujere.S y los niños que creen .que la causa de San Martín en la cauS'a de Dios".

El Libertador no fue únicamente un guerrero de experiencia y de talento. Ideólogo -dotado de sagacidad y hombre dotado de altp sentido diplomático, supo recurrir al empleo de los resortes morales como fuerzas combativas. As í lo demuestra su conducta .serena y alturada con La Serna en lps momentos de Punchauca y en tantas otras ocasiones. No fue, tampoco, el hombre de cuartel que no conoce los llama· dos más dulces de la existencia. Romántico en esencia, sin caer en el


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desborde de la pasión ni el derroche sensual; habría de dar origen al surgimiento de la leyenda de una "Protectora", como se dio en llp.mar a cierta dama -segÚn refiere el autor antes citad0- ante quien tal vez

-desciñó la espada y la casaca militar .para hacerla escuchar los latidos -de su corazón impulsados por las alas de Cupido._

Es grande ra.::orrer las páginas de la Historia destinadas a la na-, rración de aquellos días. Cuando . Cochrane se apodera del mur, los

peruanos organizan el sistema de guerrillas que habría de apurar el alejamiento realista de la Capital. Galgas, hondas y maderos cumplieron con fe y amor su delicada tarea, a despecho de las despiadadas réplicas del .señor La Serna. Para eso los patriotas estaban constantemente conectados a don José de San Martín. Por eso él no tuvo necesidad de apretar el gatillo una vez siquiera para ingresar a Lima con triunfo y fiesta auténti'camente nacional, pues. sabía el pueblo que por primera vez la Casa de Gobierno abría sus puertas a un gobierno que buscaba la autodeterminación de sus destinos. Así en el tabladillo de la plaza principal, agitando el bicolor por é:l.. mismo ideado, San Martín nos 'habría de legar el más preciado don del hombre, que supo conquistar con el cerebro, -con el corazón y con el_ brazo: la libertad, pues --como decía Ange l Osori~ ¿de qué vale la vida si nos la ihan de . dar sin libertad?

¿Hubiéramos querido que San Martín fuera peruano, o quisiéramos que hubiera sido un peruano el que realizara tan tremenda hazaña'? Infantil o mezquino sería Úetender que el acto hubiera tenido por este cambio mayor relieve aún. Los límites políticos, cambiantes en los momentos de la his'loria, no resisten las amplitudes unitarias del espí .. ritu. Hoy más que nunca, peruanos, argentinos, chilenos, uruguayos, brasileños, etc., nos damos cuenta y estamos convencidos de la unidad de nuestra historia. Igual raza nos define, iguales ideales nos inquietan, igual pan compartimos en la mesa fraternal. Somos una familia que ama su ancestro común y labora, unida, por la conquista de un mañana mejor para el gran hogar en que se invoca a las figuras legatarias de nuestras instituciones, en comunión que, a la vez, ha de dar firutos a la historia. Ya se ha dicho, por eso, que . es pueril detenerse a pensar si fue o no necesario el protectorado, desde que -en horas de crisis se vivía en rauda mutación. El Estatuto de Huaura, expedido por San Martín, significa la eclosión del primer ordenamiento jurídico peruano. No hubo dictadura extralimitada; hubo concentración autoritaria neces·aria en el momento. Má.s tarde la Constitución de 1822. Cabe repetir


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que del protectorado nacieron instituciones hijas de la autonomía, como la libertad y, empleando una frase de actualidad, la justicia social rnis:ma.

Tampoco tienen nu.da que ver las ideas monárquicas del Héroe, _pues su desinterés- jamás pudo ponerse en -duda. Las mismas discusiones en el seno de la "Sociedad Patriótica", en que e~ autor del acta de la Independencia, don Manuel Pérez de Tudela, volcara l~ opinión en fa·vor del republicanismo, demuestran el espíritu tolerante del Llbertadqr. El propio apasionado Monteagudo habría ·de suscribir Decreto por el cual se reconocía ya la libertad de pensamien to al librar de toda san-ción a los miembros de esa Sociedad por las ideas que pudieran expre

:sar. También Washington había sido tachado de federaliS'ta por los demócratas. Y ambos se _retiraron con desinterés en las horas de fu,rbu-1encia por las emules del gobierno. Por eso, Emil Ludwig iha podido decir que "sólo los ideólogos pueden pretender que un hombre de acción manteng~ siempre su objetividad y no sea personal". Por eso,_ ·nuestro González Prada ha s "eñalado que "el mayor inconveniente de -los pensadores es fi'gurarse que ellos solos poseen el acierto y que el ·mundo ha de carhinar por donde ellos quieran y hasta dond\:l ellos or'denen" .

• Señores:

Normalmente, cada generación marca su nota peculiar en el pro·-ceso histórico; p ero no todas las generacione¡:; --cOOio anota Francisco Ayala- "realizan una experiencia histórica de igual intensridad"; unas dan origen a acontecimientos que h acen época; otras son propicias para aprovechar las conclusiones que aquellas suelen aportar y otras, en fin, son infecundas. Es en las primeras en las que han de surgir los guías y creadores de los pueblos.

Es obligación de hombres e instituciones tener pendiente la mirada hacia el futuro sólo mientras se evoca a estos guías y creado.:res. 1.a Historia no se agota. Busca la verdad y la encuentra, _también, pe manera inagotable. Hace poco, Juan Manuel Zapatero ha encontrado datos que rectifican ciertos conceptos acerca de los tiempos en que San Martín viviera en España y de su obra en la península. Algui~n acaba de descubrir, entre nosotros, el documento que sería su testamento. Así se hace el acervo cultural. Así se construye en bien del hombre del mañana.


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La Institución que nos agrupa no es, pues, una simple asociación de <liletantes; harto justificada está su existencia; su tarea es noble y necesaria. Sólo_merced a la tradición y el amor a\ la raza, los pueblos. han escrito páginas bellísimas en la historia. Sólo merced a ello puede dec'irse con Vasconcelos, el Maestro recientemente desaparecido: "La. ventaja de nuestra tradición es que posee mayor facilidad de · simpatía. con 19s extraños. Esto explica que nuestra d'Vilización, con todos sus defectos, . puede ser la elegida para asimilar y convertir en un sólo ti.PO a todos los hombres".

Muchas gracias.

·PALABRAS DE LOS SE&ORES GENERAL noRIT y PORTELA

El GE:neral Ernesto Florit, .en breve improvisación, se refirió al significado de la acill.lac:ión, a la importancia que iiene Huaura en la historia de la Emancipación peruana, y a la ~heroica acción del General San Ma·rtín. Subrayó la tradicional amistad peruano-argentina y termtnó agraqedendo la manifestación.

El Ministro, señor Horado IPortela, en su calidad de Encargado de Negocios de la República Argentina, cerró el acto, con un conceP:. . tuoso discurso de agradecimiento a las autoridades y al pueblo q.e Huaura por tan significativo como gentil homenaje.

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Banco~ Comercial del Pení Gloria a nuestro héroes


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HOMENAJES A LOS GENERALES FLORIT Y SALAS, DELEGADOS ARGENTINOS

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Especialmente invitados por el . Instituto Sanmartiniano del Perú. -han concurrido a las ce}ebraci~nes de las Bodas de...Ela.ta de esta enti·dad, los señores Generales argentinos Ernesto Florit y Carlos Alberto Salas. •

Ambos jefes militares, que se hallan en situación de retiro, lhan ·desempeñado importantes funciones .

. El General Ernesto Florit, actualmente Presid~nte del Instituto Nacional Sanmartiniano de la Argentina, fue Presidente de la Comisión .de Repatriación de Prisioneros del Chaco; Presiidente de la Comisión -Demaréadora de Límites entre Paraguay y Bolivia; Asesor Militar de la ·comisión Demarcadora de Líímites entre Paraguay y Bolivia; Asesor Mi. litar de la Comisión Argentina a la Conferencia del Desarme; Director _y Organizador del Uceo Militar "General San Martín" y también Inten dente de Buenos Aires.

El ·General Carlos A. Salas en la actualidad Presidente del Ins-tituto Argentino - Peruano Maris(:al Castilla de Buenos Airés, ha sido SUb-Jefe del Estado Mayor del Eiército; Sub-Director de la Escuela Na~ donal de Guerra; Camandante _de la Sta. Región Militar; Jefe del Esta-do Mayor General del Interior, y Agregado Militar en el Perú.


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Los indicados visitantes, durante su permanencia en Lima,, han desarrollado amplia actividad y han ,sido objeto de diversos agasajos. en las esferas oficiales, culturales y sociales.

EN EL INSTITUTO MARISCAL CASTILLA

El día sábado 27, a las l~ horas, se llevó a cabo una actuación.. académica organizada por el Instituto "Libertador Ramón Castilla" y el.

General Ernesto Florit

Centro de Estudios Histórico Militares del Perú, en el local de la primera de las instituciones. En ella ·se entregaron al General Ernesto Florit, presidente del Instituto Sanmartiniano de la Argentina, y al General Cárlos 'A. Salas, presidente del ,;Instituto Argentino-Peru~no Mariscal Castilla" de Buenos Aires, diplomas de honor concedl· dos por el Instituto "Libertador Ramón Castilla" del Perú. El primero · de ellos, ade· más, fué incorporado como miembro co-rrespondiente del CEHMP.

La actuación fué ofrecida en nombre- · de las dos instituciones por el General Felipe de la Barra, quien después de saludar a los generales argentinos<,. hizo w . breve elogio de las figuras históricas de

Sa:n Martín y de Castilla, d~stacando la vinculación que ambos tuvieron desde el momento en que el entonces joven Castilla se presentó at Protector para servir .en el Ejército Patriota, a la llegada de la Expedición. Libertadora, y años después cuando desde la primera magistratura del país tiende su mano cordial e intercambia con.es¡pondencia con el Libertador y Generalísimo, haciendo olvidar al !Prócer los días amargos. que casi siempre sufren los grandes hombres.

Expresó luego que los diplomas y distinciones que se entregaban no constituyen simplemente actos de protocolo o de fútil gesto social,.

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sino que eran un nexo de unión institucional, arraigando espíritu de coo

Gen~al ' Carlos A. Salas

peración maincomunada, y que se 'traducían en el intercambio de fuentes históricas o de nuevas' investigaciones acerca. de la vida y hechos dé las preclaras figuras de San Martín y Castilla, y conjuntamente de personajes que actuaron cerca de ellos, participando en los grandes aicon-tecimientos de la liberación y Cbnstitución :política de nuestras naciones. Exip~esó lue-go que, a raíz del I Congreso Nacional deHistoria, organizado por el CEHMP en 1954,.

· ya ambos institutos habían tomado contacto con el Sanmartiniano de ~la Argentina in-

" tercambiando documentación.

Disciirso del GeneraÍ Ernesto Florit

El General Ernesto Florit expresó su agradecimiento con el si-güiente diseurso: Sr. General D. Felipe de la Barra, Presidente del Instituto Libertador Ra

món Castilla y del Centro de Estudios Histórico-Militares.

Señoras, Señores:

Cuando alguno de mis nietos me pregunte, en su encantadora cu-. riosidad infantil, qué es gentileza, abuelo?, no habrá de cohibirme en. lo más mínimo la ·respuesta, pues le diré: "gentil es sinómino de perua-· no y gentileza una a;sociación de peruanos". •

Desde la invitación para realizar este viaje - que podemos denominar "Viaje al País de las Maravillas" -· hasta este acto !:le hoy, deL Instituto Libertador Ra.món -Castilla y el Centro de Estudios HistóricoMilitares del Perú, todo abono en favor de mi definición. de gentileza pues no hemos dado un paso ni hemos vivido un minuto en que n,o. tengamos motivo de agradecimiento, por una atención, una delicadeza o una demostración de afecto de los peruanos.


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Puede:t:i Uds. estar seguros que el recuerdo de estos felices días pasados en tierras peruanas, será imborrable -en nuestros espíritus y sus comentarios ulteriores servil'án para acrecentar la simpatía que los argentinos sienten hacia esta bella y heroica nación peruana.

Señor General; Señores:

Recibo y agradezco con..'!lovido los títulos qué me ha discernido la gentileza peruana, por intermedio del Instituto Libertador Ramón Castilla y del Céntro de Estudios Histórico-Militares, honrándome mucho más allá de· mis. merecimientos; pero, recibo· y agradezco con profunda emoción los diplomas de honor dedicados al Instituto Nacional Sanmartiniano, porque entrañan una especie de renovación simbólica de la mano amiga que el Gran Mariscal tendiera a su viejo General de 1821, en los últimos años de su existencia.

Señores. Muchas Gracias. (,,

Intervención del General Carlos A. ~

El General Carlos A. Salas, en conceptuosas y emocionadas frases, agradeció la distinción otorgada al Instituto Argentino-Peruano Mariscal Castilla· de Buenos Aires. que preside y luego, entregó por su parte;-ofras distinciones a instituciones y personajes peruanos, en nombra del Instituto Peruano-Argentino Mariscal Castilla de Buenos Aires.

Aqradece el Dr. Fernando Gamio Palado

Finalmente, el doctor Ferñando Gamio Palacio agradeci6 en nombre· de todas las personalidades favorecidas, las distinciones entregadas por el General Salas. ,.

• Asistentes al Acto

Asistieron a la actuación el Minstro de· Guerra, General Víctor Tenorio H., el Encarg:o de Negboios de la Embajada Argentina, sr. Ho-racio· Por:tefo1 generales, contralmirantes y oficiales de los Institutos Armados, así .como los miembros de la Junta Directiva de ambas · in8tituciones.


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En el Museo Histórico-Militar

_ Posteriormente, fueron invitados a...rn.bos generales a visitar el Real Felipe del Callao y el Museo Histórico-Militar que funciona en la miSIJlla antigua Fortaleza.

Después de recorrer las diversas Salas del Museo que· llevan las designaciones de Independencia, Dos de Mayo, Zarumilla, Castilla, Bo~ognesi y Cáceres, en la:s cuales observaron minuciosamente las diversas reliquias y armas existentes, ·así como óleos de próceres de la Independencia y !PartiCulanmente de los que actuaron en el Real Felipe del Callao, los visitantes recorrieron los monumentales tÓ~eones del Rey y de la Reina y otras partes de la Fortaleza. Fueron atendidos l~ visitantes por el Presidente del CEHMP, General Felipe de la Barra y miembros de la Comisión · Directiva, recibiendo finalmente e jemplares de la Monografía Histórica del Real Felipe del Callao y Guía del Museo Histórico-Militar.

EN EL msmuro CULTURAL PERUANO-ARGENTINO

En el Instituto Cultural Peruano-Argentino, se realizó el viernes 27· de febrero, la sesión solemne destinada a incorparar como Miembros de honor al General Ernesto Florit, Presidente del Instituto Nacional . Sanmartiniano rd~ la !República· Argentina, y al General Carlos A. Salas, Presidente del Instituto Argenti.no-Peruano Gran Mariscal · R.amón Castilla, de Buenos Aires.

Discurso del Dr. José Jacinto Rada

Se inició la sesión con el discurso que pronunció el Presidente del Instituto, Dr. José .Jacinto Rada, quien ·dijo lo siguiente:

Vien~n hacia nosotros es1a noche para honrarnos dos ilustres mensajeros de las · floridas riberas del Plata, que están en Lima como huéspedes de honor del In~tituto Sanmartiniano del Perú, en ocasión de sus felices bodas de ;plata, que nues.tro Instituto ha festejado y fe~eja Jubilosamente porque conoce de su labor tesonera. y empeñosa a través de sus cinco lustros de su fecunda existencia.

Nuestra pal¡;i.bra de congratulación hacia el Instituto ·Sanmartiniano es franca, sincera y cordial, porque ella tiene la inmensa dimensión de la fraternidad por una obra semejante a la nues~ra, de nuestro ap laiuso clamoroso y entusiasta por los bieñes que viene realizando en su obsecuente devoción hacia nuestro Libertador el General San Martín.


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i.os .miembros de esta casa de cultura,. que tengo el honor de pre- . siclir, han querido presentar a Vos, Señor General Florit, y a· Vos Geheral Salas su elocuente y f~ternal &iludo de bienvenida y de conside· raros como . miembros de honor de eSlte Instituto, haciendo a vosotros partícipes de nuestras emociones e inquietudes en los ideales de confra-

~ . térnidad espiritual que nos une a vuestro gran país.

Esta distinción que os otorga el Instituto .es no sólo porque formájs parte del cuadro de honor del Ejército Argentino, heredero de los hidalgos granaderos de _San Martín, sino porque vos, señor General Florit, sois el Presidente del sagrario en que se guardan con amor -Y con ternura las reliquias· escritas de la, historia de nuestro Libertador y

en donde se .enaltece y magnifican día a día los dogmas del evangelio sanmartiniano, y , a vos; señor General Salas, que r.epresentáis a nos~ tros ante el auténtico puéblo argentino, que ha seguido conociendo y amánd~ a nuestro país por Vuestra acción intelectual, tesonera, patriótica y abnegada, desde la presidencia del Instituto-.. Argentino-Peruano Li~rtador Ramón Castilla, que nosotros formamos en Buenos Aires un día feliz del mes de octubre de 1952 cuando ejercí la Embajada del Perú en Un momento crucial de nuestras relaciories diplbmáticas y cuya Junta DiréGtiva f~e integrada por ilustres personalidades de los más diversos matices ideológicos de la sociedad argentina.

Es por eso para mí, propicia ocasión para proclamar en Lima en está casa amiga obsecuente de vuestro país el homenaje a vuéstra per· sona, nuestro aplauso y reconocimiento público por vuestra obra peruanfsta desinteresada y romántica, noble, desprendida y constructiva, que os ha conducido a que hósotros os declari:lmos ' ciudadanos honornrios de nuestro país en Buenos Aires, en donde vuestra hermosa casa, vuest.ro corazón y el de vuestra hermosa ccm:pafí.era, la señora de Salas tienen abiertos loS' ventanales de la grata hospitalidad para todos los peruanós, que ven eh vuestro hogar la prolongación de nuestra propia patria.

Sin más representacióri que la de mi amor y vocación sanmartinia· na de ayer, de hoy y de mañana, vengo eri deciros señores general,es, en nombre del calificado grupo <le ' caballerosi, que integtan nuestra Junta Directiva, eh la que están representados los más diversos sectoreS' de la sociedad peruana, ·cuán grande es nuestro regocijo de teneros en esta casa 1peruana de cultura én que si no halláis la riqueza burocrátic'a de las cosas intrascendentes y 5'Llperpuestas, ni el boato de 'los pºalacetés d:e Lima señorial, hallaréis! en cambio, el ambiente de pureza y de amor por las cosas del espíritú.

Se refirió, luego el Dr. Rada, a la obra que realiza el Instituto que preside y terminó con las siguientes expresiones:


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Recibid señor general Florit, · el diploma que os acredilta como Miembro de Honor de este 1nstituto, como demostración evidente da que vuestras altas cualidades de sanmartiniano esclarecido son igualmen-te peruanistas. .

Y vos, señor general Salas, que sois desde }),ace tiempo nuestro Miembro de Honor, recibid, igualmente, nuestro homenaie de consocios y ~le amigos peruanos a un peruano ilustre que enarbola a los vientos de Buenos Aires, el pabel1ón de nuestro país como si fuera el emblema mismo de nuestra patria. Recibid este recuerdo permanente del afecto y reconocimiento· de todos nosotros por vuestra hermosa labor perua.nista".

Las palabras del Dr. Rada fueron eri.tusíastamente aplaudidas por la concurrencia.

Habla el Gen~al florit

Luego el General Flo;it expresó que para él era un honor inolvidable recibir el Diploma y la honra de pertenecer en lo sucesivo a este Instituto del que se tenía el más grato concepto en Buenos Aires y que estaba dirigido por un ilustre peruano corrio era el Embajador Rada, que con tanto brillo había representado al Perú en la República Arg~ntina Agregó que para él y su esposa estar en Lima, en ocasión del jubileo de plata del Instituto Sanmartiniano, era la realización de un sueño que habían incubado desde la niñez; que para eUos Lima era una hermosa ciudad señorial llena de encantos y que las atenciones y cortesías de que se les había rodeado habían superado las más promisoras esperanzas. Señaló en se~da que todo en el Perú, que habí.a conocido, respiraba un rico ambiente sanmartiniano y . que la figura klel egre

gio Capitán de tos Andes era la guía de nuestros destinos de hoy y de mañana; y que el recuerdo de su grata estada en Lima sería el más bello y el más grato de su existencia.

La concurrencia aplaudió las palabras del General Florit.

Interviene el General Salas

Acto seguido habló el General Salas, para decir en frases emocionadas cuán profundos eran sus sentimientos al reencon"trarse con viejos amigos en un ambiente de tan alta jerarquía como era el de esta sesión ' solemne, preparada por el Instituto Cultural Peruano-Argentino, para recibir con calor fraterno a dos Generales argentinos; dijo que quería incidir, como ya lo había hecho en actuaciones. anteriores, un cálido


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homenaje de simpatía al Embajador Dr. Rada, por la espléndida obra cultural que había realizado en Buenos Aires, cuando ejercía con brillo la Embajada del Perú en la Argentina en donde había fundado el Instituto Cultural Argentino-Peruano Libertadnr Mariscal Ramón Cas1illa, institución que constiiíuía en Buenos Aires una antena viviente de las ondas fraternales que unían a nuestros dos países; que desde esa tribuna se proclamaba por voces autorizadas y prestigiosas, los sentimientos argentinos hacia el- gran pueblo del Perú y que esa obra constructiva daba a diario lo_s más halagüeños frutos, no sólo enalteciendo las figuras históricas peruanas sino realizando actos cívicos de homenaje a los próceres peruanos y argentinos al mismo tiempo, como Alvarez 'I'homas, Luzuriaga y Darregueira, Necochea, Alvarez de Arenales y tantos otros que se confunden bajo la bandera de la confraternidad peruanóargentina; que el nombre del Mariscal Ramón Castilla entrañable amigo del Libertador presidía los actos de una hermosa escuela en Buenos Aires que de continuo se le rendía los homenajes a que era acreedor; que agradecía mucho las frases encomiables del Dr. Rada sobre su labor peruanista; que en efecto él se enorgullecía de amar al Perú y de hacerlo querer por doquier, ya que su vida en Lima cuando ejercía la agregaduría militar le había permitido conocer las hermosas esencias del pueblo perua:no, al que admiraba por su patriotismo y por su espíritu trabajador y por su amor al libertador; que vinculado al Perú por su historia y por su hondo afecto se sentía identificado con la bella trayectoria petuana que conducía al P,erú a ocupar un sitial de honrosa preferencia en los destinos del Continente.

El General Salas, fue aplaud1do calurosamente.

hnprovisación del Dr. Carlos Enrique Paz Soldán

Luego, el Dr. Carlos Enrique Paz Soldán·, improvisó un saludo cordial a los ilustres huéspedes, haciendo una remembranza de la obra de San Martín en el Perú y relatando episodios y anécdotas de algunos próce_res argentinos y peruanos del último siglo, elogiando al mismo tiempor la obra cultural del Instituto.

Recepción a la CoÍlcu.rrencia

Acto seguido, el Presidente ofreció _un recepción a los distingui'dos visitantes y a la concurrencia, brindando una copa de champaña! por la inalterable amistad peruano-argentin0:.


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CONDECORACIONES EN EL MINISTERIO DE GUERRA

El señor Ministro de Guerra, General Víctor. Tenorio Hurtado. et 29 de febrero de 1960, hizo entrega a los Generales Salas y Florit, en su Despacho, de la Condecoración de la Orden Militar Oe Ayacuoho, en el grado de Gran Oficial.

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Estaban presentes altos jefes del Eiército y los presidentes' del Centro de Estudios Histórico-Militares y del Instituto Sanmartiniano del Perú;señores General Felipe de la Barra y · Rl.cardo Cavero EgÚsquiza.

Al imponerles las insignias ,el Ministro Tenorio pronunció un breve discurso refirié ndose a los méritos de dichos militares argentin93 y destacand~ los vínculos espirituales existentes entre el Perú y la República Argentina.

Habla el General Salas

EI general Carlos A. Salas, en elocuente improvisación agradeció el homenaje, subrayando la importancia histórica de la Condecoración Militar de Ayacucho y haciendo recuerdos de su anterior permanencia :en Lima, en los años 1948 y 1949, durante los cuales logró vincularse c9n numerosos miembros del Eiércit? peruano, con quienes continúa ,manteniendo indisolubles y fraternales lazos de amistad.

Luego, el General Ernesto Florit, pronunció el siguiente discurso: - .

Discurso del General Florit

En la historia militar de Hispano América hay hombres y hay nombres, tan s ignificativos que, cuando se los menciona con mención patriótica, el . espíritu sobrecoie de emoción y de admiración, ante la evidencia de nuestra pequeñez ,de nuestra humilde obra humana, frente a tanta grandeza: San Martín, Chacabuco y Maipú; Bolívar, Boyacá, y Carabobo; Sucre y Ayacucho.

En Chacabuco y Maipú se inicia la reacción de los independientes antes tan maltratados por la adversidad. · Boyacá y Carabobo introducen la desmoralización de las filas realistas, al hacerles vislumbrar la derrota final inevitable. Ayacucho es la gran victoria consagratoria de la


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Emancipación hispano-americana y donde el heroismo peruano afrontóla más ruda prueba, resistiendo brevemente el mayor peso del pode-roso ataque enemigo y permitiendo así la acción decisiva de la dere-cha triunfadora. Gloria a aquellos valientes peruanos cuya firmeza de ánimo y de cor~n constituyeron el sólido puntal de la victoria.

Señor Ministro: Camaradas: Este breve exordio sólo tiene por ob-jeto explicar cuáles son los sentimientos que me agitan en estos momentos, ctlando el gobierno del Perú me impone estas bellas insignias de 0

la Orden Militar de Ayacuoho. Para mi ,soldado americano y de la libertad, en el ocaso de la vi

da, implica un galardón precioso, pero inmerecido, por el extraordinario significadq que1 acuerdo al nombre de Ayacucho, como brillante he-cho de armas de la gesta de la Independencia y como culminación 'mag--nüica del plan continental de San Martín. '

Por ello, y en las circunstancia·s actuales - en momentos de una celebración sanmartiniana, en las bellas ti~rras del Perú y en_ medio de· esta reunión de militares de un país sinceramente amigo y amigos verdaderos ellos mismos - no tengo palabras suficientes para agradecer la emoción y la felicidad que me regala el Perú, en hidalgo y qeneroso, rasgo de su nobleza tradicional.

, Gracias, pues; muchas gracias y con ellos mis votos más fervien- tes por la grandeza_ del Perú, por el bienestar de los peruanos y por la_ ascendente trayectoria de su heróico Ejercito. -

1

Agasajo a la Concurrencia

Terminado el anterior discurso, que fué muy aplaudido, la concurrencia fue agasajada por el ·señor Ministro, de Guerra con una copa. de champagne, departiendo los oficiales generales peruanos, en abiar~- ., ta y franca camaradería, con Jos delegados militares argentinos.

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Banco Comercial del Perú Al hJ,io predilecto de los Américaa


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ALOCUCIONES RADIALES (De los señores García RoseIL Casana y Macera)

De· acuerdo con el programa respectivo, pronunciaron discursos -alusivos a la celebración de las Bodas de Plata del Instituto Sanmartiniano del. Perú, en la Estación de Radio Nacional, los días 20, 21 y 22 <le febrero, a las 5 y 45 p.m~ los señores César García Hosell, íDr. Teo<loro . Casana y César francisco Macera, miembros distinguidos de la Jnstitución.

CHARLA DEL SR. CESAR GARCIA ROSEU.

::Estimables radioescuchas:

Hace 25 años un grup9 de intelectuales e historiógrafos peruanos ·se reunió en Lima para fundar el Instituto Sanmartiniano del Perú; y .aún cuando el proyecto ya germinaba en la mente de muchos compamotas_ nuestros, se aprovechó de la presencia en Lima del doctor José 'Pacífico Otero, para echar las bases de esa institución que habría; de -adquirir, con los años el prestigio y la importancia con que todos le .conocemos. ,.,,.--

Era Otero un eminente historiador argentino. Había dedicado ·to~a una vida · a rehacer la historia escrita del Gran . Capitán de los An,des. Su obra, verdadero monumento a la memoria del General San :Martín, era y seguirá siendo la más completa y la más veraz de las que ·se han publicado en América, y, seguramente, insuperable hasta hoy. Había llegado a Lima siguiendo su largo peregrinaje por los luqares -que había recorrido en sus campañas libertadoras el General San Mar'tÍn; y por esto se halló entre nosotros ese año de 1935,, e~ que surgió, <eon el padrinazgo de Otero, el Instituto Sanmartiniano.

No fueron muchos los hombres intelectuales que se agruparon


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para fundar el Instituto. Muchos ya han pagado su tributo a la naturaleza, en el cuarto de siglo trascurrido. Pero es justo mencionarlos para rendir ante su nombre . el testimonio de nuestro afectuoso '.recuerdo y la expresión de nuestra gratitud, .porque gracias a ellos, a la ayuda valioso que supieron 8restar ·en la fundación del Instituto, el proyecto pudo convertirse en realidad, y lo que es más importante, sobrevivir por encima de las dificultades inciales. Recordémos los nÓmbres del General Carlos Dellepiane, el historiador militar de extraordinarias condicioneS' de investigador, al doctor Miguei A. Martínez, el biágrafo de Castilla, a Carlos Gabriel Saco, erudito del período sanmartiniano, a Carlos A., Romero, tan notable como bibliófilo, como bibliotecario, y a todos aquellos que tuvieron fe en el Instituto Sanmartiniano del Perú y_ trabajaron por fortalecer las bases tan sólidas Y. duradera~ en que descansa.

De esa misma fe, vigorizada con los primer.os éxitos, compartieron fos fundadores d.el Instituto que hoy pueden celebrar las Bodas de Platá de la Institución. En primer lugar, ~ el sitial de honor mencionaremos el nombre del Dr. :Luis Alayza y Paz Soldán, el más ilustre y brillante de los fundadores del Instituto, el hombre generoso y comprensivo que se,dió por entero a esa gran labor de darle vida y levantar el prestigio de nuestro Centro, con dedicación verdaderamente sanmartiniana, sin egoísmos de círculo, con espíritu, para hacerle sitio a los de- · más, y lo .que es más ho~oso, lo más di; no, lo que debe decirse en. honqr del Presidente Honorario Vitalicio del Instituto, editando con su propio e·sfuerzo las publicaciones de la institución.

Sólo así, con el esfuerzo, con el entusiasmo y con la ofrenda material de sus fundadores es que el Instituto ha I?Odido desarrollar esa grande y fecunda labor de que todos somos testigos, reavivando, en el. espíritu público, sentimientos nobilísimos hacia la figura egregia del Gen81ral San Martín, promoviendo ceremonias conmemorativas y · homenajes al gian soldado argentino qu~ nos brindó· su ayuda en nuestras luchas de la Independencia Nacional, erigiendo bustos y obeliscos re:" cordatorios de las hazañas cumplidas por !Os soldados del Eiército Libertador; organizando actuaciones patrióticas ~o solamente en Lima, al pie de la estatua ecuestre del Capitán de los Andes, sino en provincias,. donde, también, se guarda gratitud al grande y heroico guerrero, y, sobre todo, esas anuales peregrinaciones a la ensenada de Paracas, donde tuvo comienzo la epopeya sanmartiniana.

En 25 años de trabajo constante, '.mucho se ha hecho. Es justo decirlo. · Pocas son lai:¡ instituciones que habrán tenido, en los últimos cinco_ lustros, una actividad tan intensa, tan constante y tan fecunda; Y qu& .

...


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no sólo se ha reflejado en el campo de la historiografía suramericana, sino que ha contribuído a fortalecer los lazos que nos unen a la patria del general San_ Martín. En este sentido. es notable la labor realizada por el Instituto Sanmartiniano, verdadero lazo de unión entre los argentinos y los peru_anos, que si algo puede ünirlos en el -devenir del tiempo y del espacio, es s.u común venHación al vencedor d;' Chacabuco_, al solidado de San Lorenzo, al caudillo del paso de los Andes, al creador de los Granaderos de los fa.ndes, y, quien, para nosotros, es Prntector de nuestra libertad, libertad que él proclamó un 28 de julio.

/

Hoy que se han creado nuevos vínculos de orden cultural y america-nista entre el Perú y Argentina, y en que debemos celebrair, conjunta-. mente, aquí y allá el Día de la Amistad peruano-argentina, yo creo que le corresponde al Instituto una gran labor en el futuro, que ?imente sus prestigios pasados, y lo prepara para cumplir la tarea magna que le señalan sus estatutos, y la finalidad de sus propósitos.

Muchas g;acias, amables radioescuchas:

CHARLA. DEL DR. TEODORO CASANA ·

Radioescuchas:

Celebramos el 259 aniversario de la fundación del Instituto San-martiniano del Perú.

Es una institución de honda raigambre en la conciencia nacional. Su ley es la Patria. Su lema, San Martín. Patria y Libertad son los ?os remos de su nave de acción, loo

dos brazos de su fuerza, los dos faros de su trayectoria. Hace 25 años y como si fuera ayer.

Nació con vitalidad robusta por los· supremos esfuerzos -ideales del e$_Píritu: Mantener siempre encendida la antorcha de su fé cívica honrando y glorificando la memoria de nuestros padres y libertadores, cuya obra inmortalizó la Epopeya de San Martín.

Perú y Argentina son así latidos de un mismo corazón: SAN MARTIN.

Argentina y Perú son así rayos de un mismo sol: LIBERTAD. El Instituto Sanmartiniano del Perú tiene en la semblanza de San

Martín la in'spiración de sus deberes y l~ fuerza de su oración. I


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El culto a los héroes libertadores es incienso y oración como mand'ato de la· historia y deber de cada generación.

1778. San Martín nació en Ya:peyú, Argentina, el 25 de Febrero da.

Y nació cuanido las armas de España aseguraban su soberanía y ¡;,

dominio en dos mundos, porque España fué escogida por Dios para redimirlos por las leyes de Jesús.

Su existencia fué como la floresta de su tierra: hermosa y fecunda, ideal y acción, soberanía y . destino.

No !Ilació para conquistar la gloria sino para defender la liber-tad. ·

Fué su vida un himno de cumbre como su muerte un eco cfe si-glos.

La misma Naturaleza, bella y hostil, a:oeró su espíritu para ser fuerte en la lucha y grande en la adversidad.

Su niñez en Yapeyú fué como límpizt,o arroyo, como capullo de flor abrHeña, como una Lumbrarad a de aurora, como un divinal arpegio,

...-porque era alegría y esperanza, porque iba a ser soldado y libertador. Su tez bronceada y sus ojos de águila revelaban que había nacido

avisorando los ,destinos de América. Su juventud fue fuente creadora de energía y carácter. Ei> que la religión lo elevó por encima de la miseria y la medio

cridad para "ser o no ser nada". Llegó a ser hombre con alma de roca y vuelo de cóndor. No tuvo una ambición fmstránea de ser lo que no fue y murto

para ·vivir el 17 de Agosto de 1850 en Boulogne-sur-mer (Frnncia). Su vida fué un evangelio de cívicas virtudes; su muerte, un ac

cidente del tiempo; su tumba, una lámpara votiva de gloriosa eternidad. Nos dejó como herencia el don ¡precioso de la libertad que es la

esencia de nuestra vida como Nación. ¿Habrá patrimonio más grande? Leonidas en el Paso de las Termópilas y Aníbal en la roca de

los Alpes no escribieron con sus hazañas la epopeya que rµbricó San Martín en la cúspide de los Andes.

Nunca fue tan bella la bandera de la libertad flameando en la. cima más épica del globo. Era la bandera argentina, que obsequiaron al Caudillo las damas de Mendoza: blanca como la nieve, oeles1e como las bóvedas del firmamento.

Ninguna .bandera llegó más alto en este Bemisferio. Washington y Bolívar tuvieron que levantar sus pupilas de águi-


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Ja para admirarla y saludarla, porque era bandera de libertad y demo·cracia.

César y Napoleón se esb"emecieron en sus tumbas cuando el Gran Capitán de los Andes, emulando sus proezas, pudo decir también: .LLEGUE, VI, VE'NCI.

No fué conquista de pueblos para subyugarlos. Su misión foé una cruzada homérica de justicia. Tuvo como fuerza motriz de su pensamiento la solidaridad del

'-Continente, con igualdad jurídica de cada nación. / No fué otro su ideal ni otra su visión de guerrero y estadista. Juzgó que sin la independencia del Perú no era sólida ni menos

-segura la independencia de América; y aunque la em:Presa era gigantesca y macisa como el granito de la cordillera, brava como la tem¡pestad, :fulmimmte como el rayo, nada ni nadie lo detuvo en su camino de •0cumbre y abismo, porque él no quería gloria sino libertad.

La libertad y la iguald.ud son los atributos esenciales de la demo-.-cracici.

Pueblo sin libertad es cuerpo sin alma. La libertad es la expresión de su soberanía, la virtud más· suhU

·me de su espíritu; la flor más hermosa de sus prados, la joya más rt,ca de sus arcas, el astro más luminoso de su cielo.

Este ideal fué la espada de San Martín. Su vocación por la libertad y su inquietud por la iu51icia consa

~qraron su vida al servicio de las grandes causas y fué grande entre los .grandes y más grande de ' los grandes argentinos.

San Martín fue Hombr~Misión. El héroe forjó su personalidad en el yunque del Deber. Bailén fué ej.e:cu1oria de su a.«:pada y el romance de su ins:pLra-

0ción para emprender la jornada libertadora de su patria. Su decisión fué rápida e irrevocable. En 1812 llega a Buenos Aires y se incorpara al Eiército de las

-Provincias Unidas. Organiza el Regimiento Granaderos a Caballo y

·triunfa en San Lorenzo marcando el punto de partida de su carrera triunial en América.

Más tarde, . como Intendente de Cuyo ,organiza el Eiército Liber-i ador y en Chacabuco y Maipú liberta a Chile.

Renunció honores y ,privilegios de orden económico y político. No le envaneció la fama ni le cautivó el poder. Tuvo para: Ja blasfemia y la envidia un g.eneroso desdén. Grande y fuerte avanzó a la tierra de los Incas y desembarcó en


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Paracas el 8 dE)' Setiembre de 1820, creando en aquella legendaria !ba. hía nuestra bandera: blanca como el amor de-nuestras madres, roja co

mo la · sangre de nuestros héroes. Ella presidió la proclamación de nuestra independencia el 28 de

Julio de 1821, fecl¿,a augusta que cel~bramos con alborozo y óptimism0> reafinnando nuestra fé en los venturosos destinos de la Patria.

San Martín organizó el Estado y nos dió himno y bandera para gobernamos por la justicia de nuestra causa, que Dios defiende.

Nos ens-eñó así a amar a la Patria, porque la Patria es el ¡primwsus¡piro y el último latido del hombre.

El Instituto Sanmártiniano del Perú, rinde su más fervoroso homenaje a la figura e;póruma del Gran · Capitán d e- los .A:nd:es. Libertador de Argentina, Salvador de Chile y Protector del Perú.

ALOCUCION DEL SR. CESAR FRANCISCO MACERA

Radioéscuchas: ..

Agregaré un lauro a ·la estatua del prócer en este 25 aniversario del Instituto Sanmartiniano. Un breve wsaje de su vida muy poco conocido, pues entiendo que un documento casi inédito que comprueba slgnificativ~ente la modestia y la diafanidad de esa gran alma, es el

. mejor homenaje que puede tributársele. . ' Aprovechando de esta gran audiencia que me eSC'.UCha, a través

de Radio Nacional del Perú, voy a pediios un minuto de atención comprensiva y afectuosa para el documento que voy a revelar.

Me :refiero al testameqfo de San Martín .en Pisco, fechado a los 21 días de la epónima llegada de la escuadra libertadora a Para.cas, que como ustedes recuerdan ocurrió .el 8 de setiembre de -1820'. Este testamento vio la luz públioci por primera vez en mi libro sobre el Libertador

-editado en Buenos Aires, ·en 1950, y que se titula: "San Martín, Go-' bernante del Perú". Como este libro no ha tenido difusión sino en. círculos de especialistas, el tes_tamento que voy _ a leer estoy seguro que constituirá una novedad para la mayor parte de las personas que me escuchan. Helo aquí:

"Si la sue:rte de la guerra me hieciere fenecer en ella o bien caer prisionero, prevengo a Ud. que el baúl que contiene mis papeles reservados; como igualmente mi catricofre, le serán entregados a mi apoderado, don Nicolás Peña, para que éste lo remita a mi mujer, en Bue-


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nos Aires. La plata labrada que tengo en el buque de su mando · será repartida entre Ud. y el Capitán Erescano en toda propiedad; los demás efectos, excepto mi librería, que deberá entregarse igualmente a Peña, serán repartidos entre la guarnición y la tripulación de la goleta. Dios guarde a Ud. muchos años. Cuartel G€neral de Pis~o, setiembre 29 de 1820. Firmado: José de San Martín. Al Comandante de la Goleta 'Montezuma, don Jorge Young".

Documento sereno que pinta al Libertador · en la intimidad. El sabe que deja a los suyos un nombre inmortal. ¿Qué valor pueden tener al lado de ello las platerías y los demás objetos materiales? Reserva para su mujer un consuelo espiritual: sus papeles reservados, de los que ella sabría hacer discreto uso. ,sus libros, y un recuerdo que para nadie tendría más valor: las uniformes que contiene el catricofre, las prendas personales. . Hay una entrega completa al destino en este testamento redactado en la soledad que rodea al gran jefe, cuando sólo las primeras acciones se han iibrMo con éxito, y con sus ,4.718 hombres debe enfrentar a las tropas realistas compuestas, solamente en Lima, de 471 oficiales y 7,472 individuos; en el Callao, lZ.6 oficiales y 2,311 soldados, y en el resto del Virreinato, y Guayaquil al Alto Perú, dos terceras partes de estas fuerza.s reunidas. ¿Cómo no iba a suponer .San Ma.Ttín que pedía perea3r en esa guerra o caer prisionero, cuando él, antes que con tropas estaba armado de una idea?. El doaumento es de severidad espartana. Casi nada posee; los bienes de un viajero. Aquella platería le fue obsBquiada en Chile, y como .se ve, dispone que en caso de su muerte, la re¡partan Jorge Young, el comandante de la goleta, y el capitán Erescano, su ayudante de abordo, en recuerdo, sin duda. de la:s atenciones que mereció de ellos. Pero eil más importante ángulo del testamento es sin duda el recuerdo de su esposa, U!). asunto del cual no habla, pero que no lleva consigo en las soledades de S'll

pensamiento. Riva AgÜero decía de San Martín que era "frío, reflexivo. sereno, juicioso, ilustrado y circunspecto", y Macy Graham, su gratuita enemiga, describe en un pasaje curioso, cuando él dijo en Santiago, de regreso del Perú; que sólo había traído consigo el estandarte de Piza:rro, con el cual conquistó el Imperio de los Incas. Su posesión fuesiempre considerada como signo de poder y autoridad: "Yo lo tengo ahora", y al decir esto, ::e irguió cuán alto era y miró a ·SU alrededpr con un aire de soberano.

En última instancia, quien ama la gloria sólo aprecia objetos glo-riosos.


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VEINTICINCO A:ROS DE LABOR SANMARTINIANA

por CESAR GARCA ROSELL

(De "El Comercio", del 8 de Febrero de 1960)

Dentro de· pocas semanas •más, el 23 de febrero el Instituto Sanmartiniano del Perú celebrará sus Bodas de Plata, culminando así, en forma brillante, una labor americanista de 2~ años de afanes y trabajos .. incesantes y sobre todo meritorios para estrechar los lazos morales y espirituales que unen a:l Perú con la República Argentina, bajo el signo promisor de la Epopey,a Sanmartiniana. Justo es pues que ante el aniversario-que se ·acerca, recordemos las etapas inciales del Instituto fundado en 1935, por un grupo de historiadores e intelectuales peruanos. ' .

El investigador argentino don José Pacífico Otero, luego de ha-ber esiablecido en su patria el Instituto Sanmartiniano de Buenos Aires~ vino al Perú, en peregrinaje espiritual en busca de la adhesión y el apoyo de los intelectuales peruanos, para abrir ~n Lima, la capital tan vinculada a la memoria del Héroe, un Instituto análogo que se éncargara de mantener en el espíritu público el culto a San Martín y trabajar porque el recuerdo de las grandes jornadas .que_ echaron las bases de la independencia nacional se mantuviese siempre vivo y latente en el corazón y en la mente de los peruanos, sobre todo en el de las jóvenes -generaciones.

Fue un selecto grupo de escritores, periodistas e intelectuales peruanos que se reunió bajo la presidencia, tan honrosa y tan fecunda, del Dr. Luis Alayza Paz Soldán. Grupo pequeño, por su número, pero grande por 'el ¡propÓsito en que se inspiraba. Comenzó desde entonces la -tarea silenciosa, constante, tenaz y abh egada de exaltar la obra y la memoria del Generalísimo San Martín, divulgando sus grandes hechos y

la valiosa ayuda militar y política que prestó para lograr ·nuestra independencia.

Muchas iniciativas se han puesto en práctica y se 1han :realizado /


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diversas celel?raciones anuales vinculadas con la epopeya sanmartiniana Y el Instituto tiene ahora cerca de _mil asociados, contando con numerosas filiales provinciales. ·

Esa labor del Instituto, ha sido en gran part~ acometida y realizada con ejem¡plar tenacidad y talento por el Dr. Luis Alayza Paz Soldán. quien recibió una institución naciente, sin recursos, con escaso per~ sonal, sin mayores· pos ibilidades materiales ¡para cumplir la gran ·ta:rea. que se le impuso. Consagrando todo su entusiasmo, todo su vigoroso espíritu nacionalista, su gran deyoción espiritual por el próce;r argentino, hizo d~l Instituto un organismo viviente, activo, fecundo, con prestigio dentro y fuera del Perú. La Re~ista del Instituto fue obra de su generosidad y de su entusiasmo. Allí están sus discursos·, sus ensayos históricos, sus convicciones americanistas. Por eso cuando hubo de dejar la presidencia del Ins'tituto parn cumplir altas funciones de Estado, se le d esignó, con tc::tla justicia, Presidente Honoraxio Vitalicio de los sanmartinianos del Perú.

Hoy el Instituto actúa bajo una presidencia igualmente activa y

honrosa, la del. Dr. Ricardo Cavero Egúsquiza, fundador también de la Institución. Antiguo Secretario y Vicepresidente de ella, desde los primeros momentos no ha cesado de prodigarle _ su entusiasmo y su capacidad organizadora. Son casi 10 los años que el doctor Cavero EqÚsquiza ejerce el cargo de Presidente con los inevitables intex-Valos de su labor dLplomática en el extranjero. Ha colaborado siempre en forma constante y eficiente con el doctor AI.ayza, compartiendo en muchas iniciativas, de los trabajos y de los proyectos del Instituto. Será pues, bajo la directiva de este distinguido escritor que la Institución celebre sus Bodas de Plata.

BllDCO Comezcial del Peri Al vencedor de Chaeabuco y MalpÚ


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" CONGRATULACIONES 1 NSTITUCIONALES

Con motivo de sus Bodas de Plata, el Instituto Sanmartiniano del Perú, ha rncibido numerosas notas de felicitación de instituciones na'cionales -y extranjeras, de representantes del Cuerpo Diplomático y de personalidades simpatizantes de la entidad. a todas las cuales hemos agradecido en su oportunidad.

Los oficios que transcribimos a contiIJUación, procedentes de algunas prestigiosas instituciones científicas, culturales y administrativas, constituyen verdaderas expresiones de aliento que el Instituto Sanmartiniano del Perú acoge y agradece debidamente.

SOCIS>AD GEOGRAflCA DE LIMA

1- Lima, 24 de febrero de 1960. Señor Presidente del Instituto Sanmartiniano del Perú. Me es altamente honroso dirigir a Ud. la presente comunicación

para trasmitirle las felicitaciones de la Sociedad Geográfica de Lima, al cumplirse la:S Bodas de Plata del Instituto Sanmartiniano del Perú, cuya importante actividad al servicio · de la cultura histórica nacional es de todos conocida. -

Nuestra institución ha podido seguir con verdadera. complacencia e interés patriótico, la incansable labor que ei" Instituto que Ud. dignamente preside ha realizado en el campo de la historiografía ¡peruaná, exaltando la memoria de los próceres que fundaron la independencia nacional y contribuyendo a cimentar los lazos que nos unen. a la República Argentina. Una labor de tan nobles 'propósitos no puede menos que merecer el reconocimiento nacional.

Al presentar al Instituto Sanmartiniano del Perú, por _intermedio de la digna persona de Ud., los saludos y congratulaciones de la Sociedad Geográfica de Urna, en esta grata · oportunidad . en que · el Institu-


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1o celebra el veinticinco aniversario de su creación, y especialmente los .del suscrito, ofrezco a Ud. los .sentimientos de mi más alto aprecio.,

Muy atentamente, Emilio Romero

Presidente.

SOCIEDAD BOUV ARIANA DE IJMA

Lima, 25 de Febrero de 1960.

Señor Dn. Ricardo Cavero EgÚsquiza Presidente del Instituto Sanmartiniano del Perú Ciudad.

Señor Presidente: 'l

Tengo el honor de dirigirme a Ud. con el fin de presentarle, en n ombre de la Sociedad Bolivariana de Lima, nuestros saludos y felicitaciones al cumplirse 25 años de la fundación del Instituto Sanmartiniano del Perú.

Nuestra Sociedad, dedicada como ese Instituto a mantener vivo el culto a los fundadores de la libertad de América, admira la labor realizada en el Instituto de su digna presidencia y se asocia sinceramenie a la conmemoración de esa fecha jubilar.

Acepte Ud., Señor Presdente, junto con nuestra felicitación, las seguridades: de mi más alta y distinguida consideración.

Andrés A. Aramburú Menchaca Presidente.

SOCIEDAD FUNDADORES DE LA INDEPENDENCIA

Lima, 7 de Marzo de 1960'. O. N<> 1881 Señor Dn. Ricardo Cavero EgÚsquiza Presidente del Instituto Sanmartiniano del Perú Ciudad. S. P. En la sesión de Junta General Ordinaria que nuestra Beneméri

ta Sociedad celebró el 5 de los corrientes. fué aprobada, con votación


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unáni!l'le, una tan acertada como oportuna iniciativa del señor Crl. Né&-tor Gambetta B., · ler. Vice--Presidente de la Junta Directiva en .ejeToicio,_ para expresar cálidas y cordiales congratulaciones al Instituto Sanmartiniano del Perú, así por la reciente conmemoración de sus Bodas de ·Plata Institucionales, como por las brillantes y lucidas cer,emonias con es·e-

" motivo realizadas, que han servido para patentizar elocuente-mente su importante obra de vinculación peruano-argentina, a tr·avés del culto común a la noble y egregia figura del Gran Capitán de los Andes.

Acuerdo, que vivamente complacido llevo a conocimiento de Ud. y del Instituto de su digna Presidencia, valiéndome de la oportunidad para renovarle el testimonio de mi deferente consideración y estima.

Dios guarde a Ud.

Contralmirante A. P. Juan Frandsco Torres Matos 1 Presidente.

"

CONCEJO PROVINCIAL DEL CALIAO

Oficio N9 262

Señor Dn. Ricardo Cavero EgÚsquiza ~ Presidente del I_nstituto Sanmartiniano del Perú

Ciudad. '--

Con la más alta complacencia me dirijo a Ud. con el objeto deexpoosarle nuestra más dlta congratulación, por 1el memorable acontecimiento de la celebración del 25<? aniversario de la fundación del Institu-to Sanmartiniano del Perú, institución que, a través de cinco lilstros, ha desarrollado una eminente la!bor de exaltación de la figura prócer del

' Generalísimo don José de San Martín y una cruzada, cada vez más flo--reciente, de cordial amistad entre el Perú y taRepública Argentina. Hemos vivido con emoción patriótica todas las horas solemnes ce la Semana Sanmartiniana y, por eso, queremos rubricarla con un cariñoso· a¡plauso y una sancera e:xiprooión de simpatía, formulando votos por que-, su .gestión ·sanmartiniana continúe por senderos de mayor relieve es-piritual, vinculando, así, la memoria del Gran Capitá~ de los Andes a la -gesta de los patriQios y héroes peruanos, quienes, como San Martín,..


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no tuvieron otro ideal que el pensamiento y acción de Patria y Libertad.

Perm~tame reiterarle mi felicitación, como también a todos los miembros y socios que lo acompañan en las funciones direcfrvcas de la

' ~ Jnstitución, ofreciéndole, con toda sinceridad, la más amplia colabora-ción de la Alcaldía del Callao para continuar solemnizando la Epopeya de la Libertad con fé patriótica y espíritu sanmartiniano. ,

Dios guarde a Ud.

Contralmirante Tomás M. Pizarro Alcaldie.

(

CENTRO ARGENTINO

Lima, 25 de Febrero de' 1960.

Dr. Dn. Ricarclo Cavero Egúsquiza Presidente del Instituto Sanmartiniano del Perú

<.

Ciudad.

Constituye un gran acontecimiento, al que se adhiere con todo isu entusiasmo nuestra Institución, el hecho de que se celebra el veinticinco aniversario de la fundación del Institu to Sanmartiniano del Perú, que a través de todo este tiempo ha sembrado y cultivado la' semilla de la her.mandad americana, guiado por los ideales del Libertador y

·por el patriotismo de los hombres que se han sucedido en &'U dirección. Reciba por lo tanto ·en esta significativa fech¡¡. nuestra calurosa ·

felici\ación, y el sincero deseo de que los años venideros siga...11 siendo testigos de una obra que admirarán y de la qué recibirán innumerable·s beneficios las generaciones próximas.

Hacemos .propicia la oportunidad para reiterarle las seguridades <le nuestra más distinguida consideración y estima.

José Vilallonga Pmsidente.

Carlos Resoa.gli Secretario.


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EL EMBAJADOR FELIPE YOFRE: UN FERVO. ROSO SANMARTINIANO

El 31 de Enero de 1958, asumió las altas funciones de Embajador Extraordinario y Plenipotenciario de la República Argentina en el Perú, el Ecxmo. señor Dr. Felipe Yofre Hueyo.

Sr. Dr. Felipe Yofré Hueyo, Embajador de la Re,,ública Argentina. Fallecido el 11 de enero de 1980.

Casi dos años vivió cbn nosotros, como miembros de una misma familia de común destino.

Amigo y caballero, por encima de todo; hombre de vasta cultura y diplomático de fina inteligencia: Todo lo hizo b ien.

No sólo cumplió su misión contribuyendo a robustecer los vínculos históricos de amistad entre el Perú y Argentina sino que cultivó 1'a ciencia y iamó el arte con delicada y aristocrática vocación.

Su hogar fué una escuela de hidalguía y felicidad por la Jey del amor.

Luchó en todo terreno con s-erena con-vicción de sus ideales democráticos e irre-nunciable lealtad a sus sentimientos cristianos. Le inquietaron siempre los problemas de su patria y se p reocupó intensamente por los destinos de América. La libertad y la, cultÚra fueron para él, remos de · su idsal, brazos de su lucha, faros de su gloria.

Su devoción sanmartiniana encendió llamaradas de entusiasmo por la exaltación de la figura epónima del Libertador de Argentina, Salvador de Chile y Protector del Perú: SAN MARTIN. Y a través dG todo , acontecimiento sanmartin:iano, no omitió instante algun9 para reverd-ecer los laureles del Gran Capitán de los Andes y dar mayor fuerza es-

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piritual a la cordialidad del Perú y Argentina. Su deber c1v1co y su gestión diplomática las hermanó con vivo interés por la cultura argentina y la cultura peruana. Los monumentos del Imperio Incaico y las obras de arte de la Epoca Colonial, así como la Epo:qeya de la Libertad, embargaron su espíritu ·COn indesmayable fervor y exquisita sensibfü· dad.

Como hombre de pensamiento no dió al protocolo . la rigidez que, muchas veces, lo aparta de la verdad y la sinceridad. Tuvo · el don singular de dar a cada uno lo suyo y de poner cada cosa en su lugar. Afrontó serias dificliltades de tiempo y opiniones; pero supo que el éxito de toda empresa no es obra de pusilánimes. Abrió su camino por sí mismo en la dirección de su destino y no se contentó con seguir el que. otros dejaron trazado, porque grandes verdades lo llevaron a mejorarlo y ensancharlo con nuevas perspectivas. Peleó en las batallas de la vida con decisión de triumfar y triunfó por su propio ecluerzo y con sus . propios méritos hasta su postrer suspiro. Venció a la muerte con _el recuerd9 perenne de su memoria. /

En s;u casa argentina era un peruano y en el hogar peruano, un argentino.

Es que nosotros tenemos en el corazón a la Patria de Sax1 Martín y Sáenz Peña; y los argentinos que viven en nuestra Patria, saben que nos une un vínculo de sangre hermana, que fué torrente de libertad. Sean cuaies fueren las contingenciaS' políticas de los hombres de Estado, nada enerva los supremos latidos del alma cuando los hombres de mentalidad robusta, como Felipe Yofre Hueyo, sienten y comprenden que los valoreS' dél espíritu son más intensos y fecundos que Ja mera sensación de los sentidos ¡por una acción efímera.

El Dr. Felipe Yofre Hueyo, fué Miembro Honorario Nato del Instituto Sanmartiniano del Perú y trabajó con nosotros con sencillez, con optimismo, con infatigable constancia, con ideas esencialmente americanists:i.s. Nunca dejó de matizar la austeridad de una conversación académica con alguna chispa de buen humor. La amenidad de su trato era expresión de su cultura. . ·

Recibimos el Año Nuevo en los salones de la Embajada Argentina. Había un ambiente de distinción y familiaridad, que la gentil dama argentina, señora María Cristina Bonorino de Yofré, esposa del ilustre Embajador, hizo más grata por la finura de sus atenciones. ¿Quién iba a pensar que una vida de 50 años, se truncaría pocos días después? ... El Dr. Yofré es sometido, con feliz éxito, a tina intervención quirúrgica; pero la ciencia no pudo salvarlo de otra complicaciqn. El 11 de Enero,


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a las 2 de la mañana, falleció en la Clínica Internacional. La irn¡ponente manifestación de duelo que se tributó a sus ¡res,..

tos y el homenaje a su memoria con los honores de Ministro de Estado ) -

demuestran que el D.r. Felipe Yofre Hueyo, realizó en el Perú una obra de hondo contenid~ amerkainista y una misión vibrante de cordialidad peruano-argentina.

Los convenios de comercio, cultura y amistad que. suscribió en la Cancillería del Perú nos dejan una luminosa estela de su brillante misión diplomática; y en Lima como en Asunción {Paraguay), su obra de acercamiento será siempre lábaro de virtudes inmortales como' signo de amor entre los pueblos que aman su libertad.

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TEODORO CASANA, Secretario del Instituto Sanmartiniano del Perú. _.

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Banco Comercial del Perú Al senkio de Ja cultura


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EL DOCTOR JUAN B. LASTRES

Ha fallecido a mediados del mes de enero del presente año de 1960, el doctor Juan B. Lastres, distinguido médico peruano, Teniente Coronel de la Sanidad del Ejército y uno de los más altos valores de la ciencia y de la cultura.

El Instituto Sanmartiniano del Perú, a cuya Junta :Directiva perte

Dr. Juan B. Lasfl'es

neció el extinto, le rinde su más sentido homenaje en esta página.

Nació en Chiclayo en 1902. Se recibió de Bachiller en Medicina en 1928, con la tesis: "Consideraciones sobre los fundamentos de las principales clasificaciones de las nefropatías, en especial la alemana de Volhard-Fahr". Bachiller en Ciencias Naturales en 1920. Médico Cirujano el 29 de marzo de 1928.

Fue Jefe d e diver:sos servicios en numero.sos hospitales. Al fallecer desem:peñaba la Jefatura del Servicio de Neurosiquiatría del Hospital Militar desde 1939.

Catedrático auxiliar de AntropoloqÍa an la Facultad de Ciencias (1938).

Catedrático principal de Semiología y Clínica Propedéutica {1934-46). Catedrático principal titular de Historia de la Medicina desde 1946.

Se graduó de Doctor en Medicina en 1935, con la Tesis: "Investigación del pasado nervioso peruano".

Fundó en 1929 la "Revista Médica Peruana", con los Drs. Ovidio García Rosell y Mauricio Dávila. Esta Revista actualmente es el órgano oficial de la Asociadón Médica Peruana.


°41 · i..

Historia de la Medici¡i.a que S'.e celebró en Madrid. Realizó su primer viaje a Europa en 1935, visitando Hospitales y

Clínicas de España, Francia, Inglaterra, Bélgica, Alemania e Italia. La Sociedad de Benefice_ncia Públic.ca, de. Limq_ le~ e_ncarnó vi$_it<lf los servicios para Toxicómanos. Hizo stages en las Clínicas de los Profesores Marañón, Jiménez Díaz, (Madrid); Guillain, Laignel Lavastine, Sergent, Laruelle, Umber, Pende y otros.

En su segundo viaje realizado en 1938, trabajó al lado de Laignel Lavastine, Guillain, Villaret, Lhermitte, Guy Laroche, Ritchet {hijo) y otros. Fué recibido en la Societé Francaise d'Histoire de. la Medidne.

En 1939, con e·l Dr. Carlos E. Paz Soldán fund6 la Sociedaki Peruana de la Medicina, colaborando en los A~~Jes de d.icha. ID.stU'J.d:~n durante muohos años.

Ha sido Delegado de la Academia Nacional de. Me:dicinq, anl& l.fl Corporación Nacional de la Viviendq., durante W q_ños. En 1948', {u,e miembro del. Concejo Provincial de Lima. Ostenta,ba. la condeiooJ'_aci.ón. d;e la Orden Militar de Ayacucho por el esfuerzo i,n;telect®1'. Ha te.nido, en diversas oportunidades los premios Bignon, Cayetano I:Iereid.i,a,, Un,6.nµ~,

'además de Medallas y Diplomas del Concejo Provincial de. Ltm~~-

Fué Director de la Bibioteca Central de la fq,gultad de Medicina de Lima, desde 1946.

En. su Cátedra de Historia de la_ Medicina, ha dirigido algu,pas te;. sis. Ha publicado numerosos libro:'l y monografías y ha.. pe::r:te.neciqo a. varias instituciones his:tóricas y científicas del país y, del extra_njero,.

Banco Comercial del Perú Al qloriot0 Capitán de los AndH


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Junta Directiva del Instituto Saniva:rtiniano del Perú

(23 de F obrero de 1960)

PRESIDENTE: ler. VICEPRESIDENTE: 2do. VICEPRESIDENTE:

S:r. Ricardo Cavero EgÚsquiza General lEnrique Pérez Alvarado Sr. César GarCía Rosell

SECRETARIO: Dr. Teodóro Casfuí~ PRO-SEORET.ARIO: Tnte. Crnl. Ale)andro Medina Valderrama

~ap. de _Fragata Juan E. Benites TESORERO: PRO-TESORERO: Tnte Cml. Rodolfo Corzo·

Dr. Santiago Mould Tá~ara BIBLIOTECARIO:

VOCALES: lngéniero .Pascual Saco Lanfranco General Felipe de la Barra Dr. Agustín de la Puente y Candamo Dr. C;u:los Mir6 Quesada -General Leonidas Gohzáles Honderman Sr. Manuel Vegas Castillo Dr. Juan B. Lastres (fallecido) General G.C. Daniel Matto Sr. Hemigio B. Silva Doctor Germán del Carpio Coronel Francisco Cebreros Dr. Alfonso Silva Negrón Dr. José A. Jiménez León.


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Cortesía

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Lib. é Imprenta "D. MIRANDA"-Azánqaro 858,


revista del ismp n° 18

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