el ultimo grumete de la baquedano

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I

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del Noroeste recost6 a' la'nuve

. .

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del Noroeste recost6 a' la'nuve

. .

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@que] Ierrad iifio, c

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y o t ~ u el golpe de *a en el casco del b w e .

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h

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marinos habian sido devor Talca!huano, un niiio de dos

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griduldiam~, eene crtribuciunes especiaGs y es may resp@ada p a tdos en el buque.

a,.liiifio ~lejandro, que desconoeia 10s regla- men!tos de nav&aci6n en un buque de guerra, no

* -i&k~a!.'--orden6 el-camcmdante de rondcr. '

El 'Tatotolo", hermoso peno policial, rncmcw-ia 'del buwe e rjnfaltable acmpdcmte de la ronda,

vi&a ladrar. '~Ab'jahdro se levanf6 d6 entre 10s rollos, doe

fomitlos nicrrineios mcmhuron can sus b e t h u s :y lo tomaron de lbs brazas. a 9uz del furol apareci6 un niiio de regu-

!l& wttdurcr, delgado y nehdo, de,card pdrlida,. redihck, nark un poco a, de ojos *s,

1-s; una eabelle- 'ra'calor!'crastcdio cldao corhpletciba la @ura de un dolescente atl&co, viva, fuerte, per0 con data melancufia, ein SI .WIO de stls ojos.

. espen&cx esta sorprdva Wta. ,

\ m a d - , p6ro bondad

- 24 -

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1 I

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Quedn bajo l a tomlu *El conandante Wder6n em WL c a p i h de

n&u alto, ~JOKIO, morenu, con em' aspect0 bona- (I

&& de 10s' v b j a maxinos que han mxmido mu- &os mar-, visto mudhas cosa y madads mu-

a

de la &mara, tapizada de df@bra, ccrn una mesa de fina madera y cubierta de una carpeta de felpCr 3

roju, grades sillones y lhparas potent- ~

d6 &lo con el %gundo y el niiio.

le hablara con cod-

lh conrandcm.te 'hizo retifar la ronda y se

Con &.e severo, per0 bondadoso, 10 pidi6 que

El niiio, despuh de la dura

buepo como a1 m6jor a l e su vida, la

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4

r De PO, pudo ver un mar verdi?, fIorecido de olus regulares, que reventcrbcm en espiuna, empu- jadas por dn fresco ent to que da'ba de'

vela. La nave, siempre escoraip .m'a velozmente surccmdo el Wano Pa&co; c m

y jcrrcicrs, sd oy6 el ehillido de cabos que se aobran, 1- velas verticales que quedan entre la palos

o hacia el centro del buque, y&e

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tres palos, de proa u popa: trinquete,

a personal compite con 10s ot rzpana m t e n e r en mejor estado’el crpccrejp y v&maen de SLI palo iy para ser 10s me’jores y primeros en las maniobras de la nauegaciiin a vela. Se &vi- den en guardias, y, nocihe y dia, permanentemen- le, hay un grupo de gnunetes y mariner- a1 pid de cada palo, listos a 10s silbatos de 10s contra- ‘maestres que ordenan 1- maniabras de esta de- liiada ncnregacibn.

su primera‘ guar- dia nkturna, un el Pacific0 habiu calmado sus furias.

a formar! -grit6 etes y marine-

roa que les correspondia guardiq subieron al pueirrte. I - - El mar estcrba en calrna, la luz,de la hndt re- v ~ k & entre las pequeficrs olas y una brisa del Qease crpenas inflcibu bs b q ~ e s , juanetes, jar- cia, vergas y ’cuchillas.

de la c a l r ~ ~ ~ , se dormuiban dguna mangas,& sire que bajaban caremdinadas por

.- A

-42-

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IF-

&&.&.&

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I

b8 ~ ' f l b l ' ' . Y nada en fcr h-

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t

a. c

la-marina

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! ;i ...

-58-

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I

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un sonbbulo, caminaba sbbre el tbaupr6s y, an- tes que cayera a l mar, le grit&

”A1 dia siguiente contb lo sucedido Q mis com- Meros ; me miraron con curiosidad, como si no me encontrarw eh mi sano juicio; per0 luego lleg6 el patrbn y confirm6 mi relato.

“Vamos u ver si es cierto lo del paiiol con el candado 4 j e ; y lbcrjamos a la bodega. Encon- tr6 la misteriosa puerta, p r o Ilena de telardas, sin mue’stra de haber sido abierta.

“-1Esta es la puezta! .-xc1mi6; t d o s la mi- raron asombrados; nadie se habia dado menta, antes, de ella. Descendimos POT la escalerilla a la roda, por el mismo camino que habia recorrido con el fantasma o visi6n. Llegamos, alumbrdmdo- nos con un f a d , basta unos tambores antiguos de brea vieja, endurecida por 10s criios, come piedra. Los retiramos con gran esfuerzo, y ulli virnos la pequefia puerta cenada con el enome candado.

1 -

i ”Con una bmeta rompimos el mecanismo del candado y a tirones abrimos la puerta ajustada a su marc0 POT 10s aiios.

“Agachbdonos, penetrmos, el patr6n y yo, ea esa e’specie de cubichete casi metido en !a mis- ma roda, como una carlinga.

_ _

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I -

!&:,,% . * -n-

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i

05 mbs viejoB; se emendieron las luces, y 10s con 10s ojus bien

costadas como si

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imiento aumentd

os ojos y mirccrla de

en el Me, uno est6 mirando

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-iLos foques y trinqueitilla segu

pconehb! -continu6 otro.

Eran eomo las cuatro de la maiiana. 50s ma- rineros y grumetes que les correspondia reempla- zar a sus compccfieros se jcrperaron con sus ence- rados y subieron por grupos hacia la cubierta. En-

niiio, con dos comp una de las escotas.

&, le correspondia

st510 grades marinos podian desdiarlo &i. Las mares dhicas l a pawba velomnsnte y con

. .

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facilidad; pero cuando llegaban ias ires caracte- risticas mares grmdes, la velocidad disminuia, se

y las cruzabci con el revent6n dae una de ellas sobre a cubierta, que era barrida de proa a popa. Era 51 momento d.e peligro; 10s grumetes se aferraban a1 suelo para no stir arrastrczdos: por el golpe de mar.

Noche horrenda. El ser human0 se reduce a in frdtlgil juguete de 10s elementos y ~610 el herois- no no le permite' ,entregarse prontamente a una muerte que 5e espera.

+En tres bordadas mdts aeo que alcanzare- mos ci dolbEar Tres Montes! -dijo lei comandanie, miranda su reloj.

-iPm6 la hora en que' podia mainar, y la cosa sigue peor! -exclam6 el dficial de guardia.

+La direcci6n del vienio no cambia! - 4 h r - el aficial de ruta.

que encerrado en la ratoneba del entrepuente.

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Y. dos timoneles, con gran fuerza, dieron mel- tas a las cabillas de la rueda, -y la nave empez6 visar hacia ese lado.

- - - iC~ar lrxs esootas de bibor!

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parecia que' iba a hacerse trims. L a barca se debatia sin velocidad y, por 10

tanto, sin direcci6n entre Ias grandes o b . Los ins- tuntes eran terribles; *el momento, e l mCrs peligroso ' de la nmegacicin.

Pronto el pitifoque, fcrque y trinquetilla deju- ron de flamear, y en su Eveno empekaron a recoger el viento por el lado de estribor, el buque fu6 vi- rando hacia babor, el resto del-velamen empek6 a tomar viento y par de nuevo, escorado, en su currera, a medi contra el viento.

Los marineros y grumetes, dekpu6s de War y amarrm sus escotct's, se agazaparon dme nuevo so- bre el suelo de la c rta en espera del thrmino de ese' suplicio.

Pronto Alejandro c amifento y opin6 que era preferible morir descrmsando en el entrepuent,e que' sufrir 10s motes de esa nodhe ho- rrenda en la Imbierta, Empapado, el frio empz6 ci minar su merpo de muchacho de 15 aiios, y, p c o a poco, fu6 lentrmda en ese estado de' incmici6n <en que se quiebran la voluntad mCrs bleroica y el espiritu m& vigoroso.

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miano, sin0 un mundo de montdas enlquekidas 'que bailaban &relldmdose unas 'con otras. El vien- to uullaba y bramaba a ra ta , el aguacero como si otro mar se descargcxra encima. lh v cuando, algo corn0 uno$ lgritos lacerantes, deros, estehttjreos. salia de 3as kcanad

a y viento: &a la YOZ de la tempestad.

-iPrepararse p&ra vir= por avante! 1 mismo movimiento anterior. Los hodre# cc estos y 10s &&os listos.

bor. (El mismo flame0 de foques,

proa y qu,eriendo hacer zozobr mismos instantes hlgidos con la muerte' a1 frente.

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amen t6 sus furias; el buque awmzaba-6n mala forma. El estruendo de la tempestad era (horrisono.

De pronto un hombre se ciestac6 lentre h s jar- cias del mlayor y trep6 como un mono hacia la verga trabadta.

enso, contempla- D a como po'dia el acto de ese valicente.

Toda la tripulacibn, e'

A veces cwilaba como si fuera a caer a1 mar; p r o esperalbcr que pasara el balunce y en la otra v i d a caprovechaba de trepar un poco mCrs .

De siibito, un resplandor ilumin6 su cara. El andante hcrbia ordenado 'que iluminaran la

6 con m&s seguridad; su cara era noble y a elL peligro.ser;enamente', sin una mueca

El lcomandante y '10s oficiales contemplaban, emocionados, dede [el puente de mando, la ma- niobra del marine'ro.

kya con el reflector.

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=car un cuqhillo marin

n cab0 manila. . luz del reflector;

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F R A N C I S C O A. O L O A N E

cera bordada, “La Bcrquedano” dobl6 el Cab0

del Golf0 de Penas, en capear el temporal.

maniabra, entrcrba a ”palo seco” en la guarecida bahia de Puerto Refugio, que quedta en 1 Norte del Golfo.

lo sesperaba una huella trdrgica: el transporte de la Armada “Valdivia”, ekacallado aiius alates en una roca marina desconocida, mostraba su popa en la superficie, como una triste advert’encia a sus compaiieros de flota.

iLa gloriosa corbetu hcrbia te’nido un hijo rndrs en la primera e tqa de su ruta; pero habia perdido otro muy querido. iEl libro bitbcora consignaba la misma tripulaci6n del dia !de su partida dle T cahuano: trescientos hombres!

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destrozos de la

'La Bquedano" des-

como brazos cddos; en la ques, semejando =os frent,e a lo;; eniferfnos

ara la mar!

para que no penetre la brc x (gUsano que horada

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ndo de 10s barcus). Estcx no se hunde s azos -termin6 el gxunete. -jNo saldremos hasta repar& 10s de

tos; tal vez hasta pasado maiiana! -corn

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berlo conseguido, cay6 a1 mar,

-. iCorneta, toque silencio! lccstimero toque d,e silencio resC++

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permaneciaon f irmes, c

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llorno una bandera que lleva ,el n&re del b co, se la deja lflotcmdo a 1.a deriva, porque seri irnposjble continua persiguiendo a las otras

- ace las corrientes y 10s vientcrs y es muy difh

nuado, de +arias dim mastrd muy lejos. "Oeneralrnente, cada cazador 'trae de

cuatro ballenas, a veces logs cmarlas en un

espera el buque-in insignfa, y enza antes sucede, se tapa la cma

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!

un inmehso potre d a a1 "Uhile", rioso aenltinela de es0s mares.

0. En la lej mdo tmbilbn G

se oy6, de pronto, la

-

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ei de la bodega d

nct dmndcmdo su herida con el arp6n y su espole- ta abierta corn0 cuatro anzuelos ,en s w entraiias.

-Rara vez sucede esto; genekalmlente, apenas se sienten heridas, arrancan sumergidas 4 i j o el piloto a 10s cpumetes.

' El buque ernpez6 a recoger el &le %I lmedida que avanzaba, disminuyendo su unda proporcio-

A1 Cccercmst$, se vi6 alqo que rondcrba dre- d d o r del cet6ceo muerto; dos chorros levantaron de nuevo y d.eqxreci

-fEs un balI~enccto, la balle'na es

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+-

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lortuwos, en med

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“hombre a1 agua”,

1 maestro, un subaficial crcordes de Icx excelente ban tos hombres ~ e n t ~ ~ b ~ ~ n her- der, cerca de tre

diosa, impresionornte, c u p eco rep t ian sonora- mente 10s ancones, corn0 si de todas esas solecia-

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as corrientes marinas.

-Hq tenemos ejercicio dme tiro, mi cupith.

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a una gequefia ensenccda en forma de -herradura y ecih6 mdas.

Sorpresivamente, a1 otro lado pezaron a pasar a la cuadra de 1, boyas, como pequefios bcsrriles, banderols roja, y que 'h&ian un bote-motor que se adelant6 a la mrhta.

Las boyas, qute eran 10s blancos para turn el tiro, pasaban arrocstmdas por el vienit0 y la corrienie a bbccstan mmiobd y, r+id

. tlro di6 /la orden:

a la pequeiia boya. koquillon aI brlcmco eon dos tiros, saltar la banderols destrozmdo el

nuxnerusas boyas con sus derolcrs. &as 6rdenes sei wepitieron m&s en8rgica- rkente y 10s &cones de la copbeta empezaron icr disparar rkpidamente. .

~ . Las columnas de agua cedian. Los sa- ' vidores dd lcts piwas de a no bfen coloca-

bcm el proyectil en la rechmcara, t i rdan el cordel

.,.

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En menos de dos minutos, la flotilla de b

till'eros; p r o un caii6n F e d 6 solo, IdisparCmd €1 oleaje del canal subia y bajabcr. a la boya;

10s proyectiles I e v a n t a h columnas de aqua en su base smisrna y cuando envuelta en espupla @cpa- recia despuk, volvia a surgir enbra, con su ban- dera al tope. El cafi6n seguicr disparando con sus cntilleros, ansiosos de ihacer desaparecer 'we fr&-

bierta; per0 era s6lo la bemderola; el pequeho apenas visible, s e p i a dn la superficie. El director de tiro orden6 cesar el fuego

lmco era y a tan diminutoque hacia imposibb la

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3e oyeron l a mismas voces de eria ehqxxz6 a atronar el canal.

ponia en mil calores vivos en la enfrcslfias del hie- lo, y mflejaba esa luz coma si innumerables xefle tores p'qefios ilurninaan la nmegaci6n da t bello barco. Bello, per0 peligroso; un &oque c 81 Ihundiria cualquier barco.

La corbeta, a todo adm, vir6 un poco par dirigir todos sus caiiunes de M o r hacia el t6m pano, p una detonagicjn atran6 el canal. El buqu escuela hub& idisparado una andannda que him escorarse COEO cucrndo nmegscba a vela.

Los proywtiles prenetraron en el co-r;az6n del tbmpano y despub de unos sepndos esstalltnon, haciendo volar a 'la gigcmtesca m m de' hielo, des.

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I

liziccr sus ejerdcios /reglamdntarios y bartren CQII

10s t6mpanos que hacian peligrar la navegaci6n de otros barcos. % dlecir, prepararse como buque

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A BAQUEDANO nas ropas y vive-

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R A N C I S 0

ad despuhs de un rnes de viaje

ia y pensarido en la omem que lte habia hecho CI su madre: encontrar

sula de B~unswick, a p ca de nieve, corn0 si

completamente bla

ar, frente a UJS gi-

entes nacionalidad*es.

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Cor? 10s ccrfionuzos reglamentccrios Ia visita de lax autoridades naval- y e dante! de la Plaza. ,

E1 &a siguiente era domingo, y- en iccque

especial al mediodiu: e

bare0 de la eorbeta

i4nto de la ban

1- gorras blancas de 1- apuestos "manag (mcxrineros de la Armada).

+AI hornbro, armasI IA la der&a, c6n si6n por escuadrccs! jI)e frmte, mar!. . . - -ode

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El pfiblico taplaudia el paso de 10s marinos que de el coraz6n $de' la patria llegaban dr la lejana

ciudad, y lo que r n k les llamaba la ateenci6n e r a

mayor con su guaripola vergia en las equinas.

:orno si fueran duraznos en p aahares, estaba repleta de g marinos.

L a compafiia present6 a m a s y luego desfil6

ciones del p~blico. Hub0 grmdes festsejos durante una semana;

en todas partes 10s jhenes grumetes y cadetes er ivbilosamente' recibidos.

A1 final de esa semana, un grumete muy jo- -en, adolescehte dn, ponia la siguiente carta en

I

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tes dlel viaje, terminaba

"Aqui, en esta ciu es hermoso y blanco. Hemos visitado las grandes estancias donde pastorean 10s dos millones de ovc- jas que dicen tiene toda la Patagonia; hemos visto 10s frigorificos donde congelan la carne que man- dan a1 Norte del pais y a Europa, principalmente; hemos visto c6mo juega la gente en patines de

Wadre, he recorrido iodo iincones en bus ca de mi hermano, y nadie me ha dado una noticia, En 10s Registros de la Gobernaci6n Maritima apa-

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P

u 10s Gltimos barcos f

, dijo Q Alejcmdzro: " del dcmtcrsmal Fd

la cruz en tierra, y me dijeran v e nadie ha

. --jHace much .f -dijo un grumete una tarde ten que la niev4 c denciosamente tapizcmdo la cubierta y engr do fant&ccrmente la jarcicrs.

10s canales cmdhos.

olas y r a r k corrientes la zaxmdearon d

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"L A

cabro pasajero del t6mpano. --jEsto ya es el fin del mundo 4 i j o a c e

bedo-; cuando pasemos por el canal Murray v e r6-n c6mo las corriehtes c k b i a n , 10s Pobos no les terrien a 10s hombres y las estrellas en las noches parece que se pudieran dcanzar con la mano!

"La Bquedano" visit6 Q Ndvarino, Gendegaia, Kanccsaka, las Isla Lenox, Picton y Nue algunos esf omados pobladores llevan una

Todo es fiero all2 el mar, las montaiias enor- m2es, el viento, la nieve, la naturaleza toda. AC en verdd , el mundo en esa tierra c'hilenct.

Volvi6 la co2beta a recorrer e!sa parte. "Beagle" y baj6 por el canal Mur rq , donde l c r ~

rientes son peligrosas y dbundan las lbkrias. Como en 10s g r a d e s momentos, una inaiiana i6 la orden de izar todo el velamen: la corbeta

iba a visitar el Gran Cab0 de Horncrs, y el coman- dante queria ktacerlo como corresponde a un gran marino y a un gran velero.

L a nqve empez6 a surcar las enomes olas y, a n v q a d o de zm largo, se l a g 6 mar &era, curno

- 123 -

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L

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I M O G R U M E T E (DE "LA BAQUEDA'NO

Acabcrba Idme decir Nestas frases el sargento car- ntero, cumdo ilas grandes olas etmpezaron a en- 3

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dism patinando sobre la superficie helada. Muy de tarde' en tardp asornaban lo

de a l g h gran l o b , que rompia el hielo monstruoso manicpi que queilsrara 10s cristales de una gran vidriera.

A1 dia siguiente, el oficial de ruta ordenha: -iNo es prudsente seguir @IS adelante; el ca-

cmtar lm respectivas cartas de na-acibn! afiana, a prirnwa bora, deben partir dos comisio-

hldrogr6ficas -orden6 el cumandante CI su

I k ~ ~ d r E ~ m d o con sus catalejos, un oficial, de

--jAlgo se mueve all6 en el iondo del canal,

1 pow rato se confimaba la suposici6n: una

ronto, exclm6:

n c a n m gue manzdn!

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0 1

flotilla de cinw canoas se aeerc canom emn mejor constrddds que las lde 1 dios alacalufek, 'm6s esbeltas y ll~evaban

ro estas

arc[ la vela. -ism yugcmes! -continub el aficial-. Apren-

en a leer en dos meses; mando 10s primeros na- vegantes 10s descubrieron eran dred ce mil almas, de Ias qud &ora d l o

acerearon a1 costado del huge rcrstrm morenos y oneses, se d a t a

-iWay un blanco entre ellos! -p~~firi6 el ofi

--yPuede ser a1qh-1 m'o evcrdido del presidio o de ~su&icc, o bien a1gGn mentumro

uscador de ora que se ha qtl-edado entre la in

re blanco se e y por ella mnbi6 an-, cubierto con

aba la cara blanca de un howbre corpulento,

diw! -comentb un oficial.

acerc6 a la @mal

un traje de piel& de nutria.

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ante; le !darernos I

s lcomo otros indios; no recibimos sna, sin0 que laScomprcrmos; pa-

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-

boca como si de s6bito hubitera descubierto algo 'enorme, y s610 atin6 a exclamar:

-iA lo mejor es 61! -&Qu& te pasa? -'- dijo, asombra

-iAndo bu indo a mi hermano M cpmete .

parti6 a1 Sur Bace muchos &os, cuanao yo era pequeiio! -dijo el igrumete revelando ,el secret0 que tam'bihn era causa de su viaje.

Ante la intrans I del visitan dante orden6 'que' se le cambiaran viveres por pie- les, bajo el control dlel Teniente Contador, para venderlas en e'l Norte y mejorar el rancho o com- prar algo para el bienestar 'de la tripulaci6n. Grno asirnisrno, si calgfin tripulante queria venderles ro- pas, d'ebia hacerse !ant sos con 10s indigebas.

1 salir de la c6 Silva se cuadr6 ante tante, y le dijo:

-iPermiso, mi sy estle honibre!

El oficial 'accedi6 con un movimimento dte cabe-

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EL U L T I M O GRTJMZTE DE "LA SAQUEDRfiO' '

-iBueno, si es asi, lo dire! -dijo el ccnzador-: llctmo Manuel Silva Cceres! -iMi hsermano! --grit6 Alejandra,

dose a abrazarlo. L a esceha que presenciaron 10s tripulantes

que estcrban cerca fu6 patetica. Los dos bemanos &&an dbrazados con la m6s profunda lernocich.

Manuel se separ6 un poco, y Icon el entrecejo ceriido de emoci6n, contemp16 la cma de' su joven hbermdno, 'clayas lbgrimas rod&an por su rostro, y le dijo:

-jPor eso, crllg~ Taro me pas6 cuando te en- contre en el porfal6n; a1 verte, la cam de mi ma- dre se me vim a la KQ~XIIQ~~CX! iBero j m & pens4 qu-e 26 pudiera ser el pequeiio lejandro que dej6 un dia en Talcahumo!

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DE LWS UTRIAS”

verbs el secreto.

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junto a su herrncma, 'La flotilla de cinco

extrcgfio y aventurero hermano, ya que la corbeta iba a estm anclada una s rnzma en ese *lugar,

Simple y corta la: u

a mi pobre vieja cont?dmdole mi drecisi6n. "Vine aqui desde puerto Habelton. .Alii 1'0s in-

ios eran explotados canallescarnente por un ex presidiario que capitanecba una banda de bus

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....

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otras aves que nos gustan muchisirno. No te mer- ques, por &om, a1 “Youghouse”; 10s nihos ya es- ten encerrados, qunando, y est6 proh3bido rados.

L a animaci6n que ‘habia eh la tolderid corp pondia, en verdad, a la ceremonia que se prepa- raba.

Lleg6 la noche, y quince canoas fueron ocu- padas por hombres, mujeres y a lqnos niftos.

A1 grumete l6 llmaron la atentcih unos largos palos idle cuyo extremo se amarraba Una enorme bola de junco seco y otras pajas, empapadas en unci especie de espe’rma o aceite. Cadcr canoa lie- vaba t1;es de estos hisopos.

La flotilla se intern6 mar adsentro, surc6 un estrecho canal interior y desernboc6 en una gran bahia.

Manuel y AI iban en la canoa abria la marcha.

De pronto, a a1 de Manuel, todm tripulaciones dse ICE canoas se agacharon, y remeros b ~ g a b m asi, diestra y sigilosamente.

-iAg&hate y no hagas ruido! -dijo d mete.

Silenciosmnent@, la quince eanoas o “mas”

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sacando una mano

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de lellos por el pescuezo y 81 xrlo adentxo; per0 la

pqueiios garrotes, asestaban c

estibados

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fantbsticcrmente' las sonbras de ~aquella pida de detieos, graznidus y chillidm d

La algarabia crecia y decrecia con las llam njunto, el rumor que habia rot e fu6 disminuyendo a medida

y hmanos.

que disminuia la luz de lcfs antorchas. Por Glt usaron para a lu rnb~a la

m s muertus, que flotaban sobre

cargadas de ptijarw muertos; 10s indios comenta- ban, jubilosos, la caceria.

tenemos en "El +Parais0 d~ las Nutrias"! -dijo Ma- nuel a su hermano, mientras ten la negruras del cielo se oian d n 10s aleteos de millares de mes ccsustadas por la caceria. Algunos lomos relucien- tes 3ubicw huyendo entre 10s peiiiascos del acanti- lcrdo; ercm nutrias cuyo sue50 (habicr &do tam- W n 'turbado.

A1 dia siguiente, la tolderia estaba dd fiesta:

Las canom iniciaron el regreso complet

-1Esta es una de las buenas pajare

noche se iba a abrir'el "Yougrhouse" ar 10s ritos que convertirian a 1

nes en. uddtos. 'Manuel rhizo que prepararan un pato de rio

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salvados del di- luvio empezcxron a disp

tamn de su carne,

n hats formar de nuevo la gra raza yagmcr

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entramdo las mujeres y hombres a la gran carpa de cuero del I'Youghouse". En el intekior, una fo- ga'ta que corria en el centro y a lo largo ilumi- naba siniiestramente el sombrio recinto. Lejos de la fogata, una rueda de niiios de mks o menos doce afios contemplaban, sentados en cuclillas y con las

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51 riteria, y 10s pasos-

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U E C A N 0"

A1 separ or d rca de Ia costa: era un t6mpano que se hecbia

volcado en el mar. Los dos hermanos se valvie'r~n a mirarl -@ornos C O ~ Q 10s tcj.mpanos! --excla

vox baja Mmuel--. jLa vida nos da vuelta a veces y nos cambia totalmnentle de forma!

3 la plccya. el cazador 'le alcanz6 a Idecir:

A1 subir a la canoa AZejandro. de

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La conversaci ar en el cuart Maria, en Talcahuano

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Luego narr6 el encuentro con Manuel en IUS

hermuno, parte de la verdad. De pronto, .le vinieron a la mehoria llas Gltimas

palabras de su hermano, y dijo: -iMadre, sesos thmpcmos que vi en el Sur son

como 10s hombres; el m a , corn0 Ia vida, les ihuce dar muchas vueltas y siempre aparecen eh la su- perficie con distintus tormas!

Y se chalcmz6 en brazos de su madre, sollo-

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Escobedo! -~Qu6 le pasa? -prepat6 Alejandra -iEstdc en el Hospital Naval de Plcrva Ancha,

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0 GRUMETE DE "LA BAQUEDANO"1 AiSi, mi surgento! -respondi6 el gru

echando la muno lgtle le tendia mar, p agaah6 la ccrbeza

DQS generaciones se despedicm sobrd el re

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Pavo: El pasajero clandestine, que viaja sin pagar pasaje Escorado: Ladeado, inclinado por efecto del viento en las

Coy: Hamaca en que duemen 10s mccrineros. Gallo: Sentido figurado de hombre. PistoIeros: Niiios que vagan en la bahia de Talcahuano

y viven de 10 que les dcm en 10s bmcos. Garrafa: Tiesto g r a d e en que se reparte la comida. Taraxit: Boca. La chancha: Apodo familiar que 10s marinos de Ia Ar-

Chile dieron a1 buque-escuda corbeta "General Ba

Ccyfcr: B d l o canastillo $en lo alto del mhtil, donde se

velas.

mada quedlano".

Desguazar: Desmantelar un b u p e cuando est6 viejo Cautiles: Fcxforescencias del mar en soche de luna Tang&: Mladero p r donde dweienden 10s mcrYinoro de la esccrlera.

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do a Samaria enid,.

me creo que e Aquella mujer paisana, rbpondiendo, dijo asf: pb'que me pedis a mf,

ndo yo samaritana;

aqwi, a veces, se congrega; al,ver tantas alrnas ciegas

s610 gente mundana

nte de este pueblo impio,

el pais se lo niegan. agua Jesds le pidi6, en Samaria, a una mujer;

' y ella le dio de beber '

1 punto le declar6, ' hasta que la sed quit&,

Antonio Espinoza

que no WIO con quien to* siempre se rinde un cobiw&-

j-jetra no saix naide

61 mar a bafiarme,

aquel que a las damas

en. r n mi grandeza,

YO soy aquel 1

le^ equivoco la p b b z a b a a ,

ha sido tanta mi ciencia, que no sabem la respuesta; se me rinden dos planetas

go andar de cabeza,

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el Seiior nos aliments, J

su santa grada nos cria; dijo la Virgen Marla que de Di& somos p r & g ofrece p r el pecado esa corona que time; y asi’ el Sefior nos as su trabajo le ha costad

‘Dig0 que esta planta destinada a su servicio,

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I estando de fuego cubrid Seiior, Abreme la{ puerta,

dijo Santa Magdalena; Lucifer no siente pena

qer st aquel fuego eterna

s les tomard balance,

clarnar a Dios que se acuede;

la pasa,pard el Infierno; para el pecador no es bueno pasar por esa amargura; s e n dice la Escritura es un peladero eterno.

UR calabozo'oscuro; infierno es muy seguro

* el demonio, muy alegre,

tres inmensos candados

dtl alma que se condena, if= con ella cuenta,

VERSO POR PRQFETAS

para correx' a1 maldito, fberte POT un arenal.

Hombre, si era cristiano, ' para vivir en el mundo, lo decia San Facundo, no viuui tan soberano; porque el inejor escribano la advirti6 a. 10s monar y el que a la ley no se atr tendri que ser castigdcio; . dijo Cafn: condenado, este cuerpo pide huasca.

'De qu$ te sirve la ciencia entre 10s saljios y letrados, que vivis tan engaiiadb para tener experiencia; ,

de quC sirye1 la condencia, - no sabiendo agrovechar; lo dijo el rey Baltazar cuando su plan escribi6;

ando el cuerpo pide huasc

me la puedes negar; o el ap6stol San Juan: tee el poder de Cristo;

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care0133 mis poesias con el mis mejor anciano;

soy rado ni escribano, soy jureroln2 en la vida,

VERSO AUTOR

Yo vengo de Cala-Cala at ;Encalado gad, pot ver l a encalicadorc pa.&? por Calicalt.

LI verdadero terrenal &evado en lo m4s alto,

10s coros de santos

Yo’vi la santa mansidn, cuando mi Dim ,la form6, y adonde la coloccl con toda su pdornacidn; vi ‘la ciencia de Salomdn, entre plumarios y autoyes;

vide arder, sin cesar, . tambikn vi a las pecadores pedir el perd6n a gritos; y bajk con Jesucristo por ver 10s encalicadores.

Yo vi el Viejo Testamento contra 10s’ textas modernaa, vi a1 demonio, en el Infierno, en contra de 10s mandamient vi a1 Sedor en su aposento

porque antiguq soy, y otro en el mundo por dar €e de mi v past por CalicaM.

ea el Infierno, las llamas; &i&n vi .las alpas malas que en ,un castigo flamean; ppr el mundo, dando idea, ---- vengo de Cala-Cala.

pi& lo que nunca han

es lo que key reparado; no sC si lo han rabonado

easi como de& no

-Este animal no es rasado, no es over0 ni es eswro, de su co lo~ no hay ningupo

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'qp ids la ' ni es tordilla, ni es banwso encafiamado; cdmo lo vide e m h a d o me pareci6 ser rosillo.

- Este animal,. de soberbio, solo se ha fatalizado, se criarfa enramado Sefioras y caballeros, que no salia a1 rodeo; ' clavelitos -colorados, el que andaba en este empleo le hey corrido una n t p

a todos 10s hacendados; .no lo ha podido encontrar;

ni uno contesta me ha d 4 alzado habia de estar,

la kspuesta es lo que espe$ &te nunca vdida gente;

no trae carne ni cuero, L: sin perilla y sin sefial. para que mejor se e n t i 4 que asi se pierde una h;

6: -1 verlo tan espantoso, por causa de un ma' -*'

I r - - -- I-- -- - no es vaca ni cal

' lo vine a hallar, con la muerte

.L 4 Fueron diez conocedores,

VERSO DE LOS BOLSEROS185

Cuidhdo con 10s bolseros hacen el disimula

\

Q quien 10s seca primero.

Yo ehto a1 que bolsea ' y en tomar largo se apuka, a1 poco rat0 ge cura y a1 que ha gastado lo odea; y a1 poco rat0 pelea con su mismo compafiero; defikndanme, caballeros, si algo,digo lo conpario, pues tener es necesario cuidado con 10s bolseros.

Muchos, aunque tengan plata, mediola6 no saben gastar, $rque les gusta bolseav y en eso no mL lo pasan;

Muchos andan ag por v q si bolseo c

si alguno 10s maltrata ' y como 'moscos se entr

"Aplicane a1 animal vacuno que tiene ambos costillares de ud lomo y del de la barrip; por lo mal hay aguaneses news, &guan dt., 'tom0 I, pAg. 33).

. dd~. @ p l f h a la chica, moneda de medip centavo o m circvld en LB

20s vasos que estdn tomando, ' porque estdn como alquilados

- En la chingana dike

para empinarse 10s "gbs del licor que se les d& . en elegantes cafb andan bolseros aseadc y lb pasaq regalados en tiempos ds ponchb ea y de ahf no hay quizn porque est& coni0 alq

. - I.

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P

c i f

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' .

Juan Reyes Quiroz VERSO DEL CANTOR VIAJERO

Yo en Buenos Aires cant&, me tocaron el Lo CaE las mlisicas en Espafia, las clavijas en Ailhut; la guitarra en San lost y el son en El Mostazal; la pima en Cocaldn, la segunda en Lagunilla; la requinta en Melipilla, 10s bordones en Chillin.

Yo mucho remoli en &Zatpo en una fiesta en Lo Cuevas, la data estaba en Codegua

I &mer0 en Mdlarauco; medias144 en Coltauco

las paw& en Idahue;

I

me puse las. bendiciones; el cura, en Los Paredones, 10s padrinos en Pomaire; yo me celebrC en Quiqcuhue y mi esposa en Los Parranes.

1 vine estaba en Codahue,. ' Seiiores y caballeros, el agriardiente en Coquimbo;

mktelas. en t o s Guindos, d'cauFeo16, en El Almahue.

anduve de sur a norte. past5 por el pueblo de El Monte, , , hube de saltar a Penco; en ese lugar de Tenco, viviendo estuve en Colina; para d sur de la Argentina tambiCn hube de paw, I

y de ahi vine a parar a las Islas Filipinas.

4

/

Josk Nmmo VERSO DE PRLESENTACION Y DESAFIO

I mar enfurecido, n 10s criticadores, n .a1 frente, cantores, s e n explica la Qistoria; '

despub de estar en la Gloria bait al ma? enfurrcido.

AnduVe con el rey David y en el cielo fui perdido, per0 a h no me han conocido duando al Purgatorio fui; -

y p a de gran .talent0 -

I

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tantar a lo'divino.

81 fue.el que naci6 sin madre pub de que hijo ha nacido,

sclbic$ a1 cielo, afligido a,'habiar con el Santo Padre; yo nunca le,temo a naide porque soy cantor ladino; yando iiba p r el caminc me top6 con 10s pastores, y le digo a 10s cantores: yo Soy el cantor hornino.

'

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i ; : . . ,

p c p e a mi no cuAntos l i b p s que fueron esaituradog, si te tenis por letrado aqui tu historia cantai. animal past6 primero,

o en mi sabiduria, rque ningtin ser existia todito el mundo entero; ____ ___ __ ,--imer aguacero,

dime, si me contestai; cuantas estrellas en el cielo h me dirb, pues, de tal suerte, y para darle la muerte si es p s i b l e lo maneai.

' Cuhtas fueron 1as.neblinas convertidas en nublados,

nace un agua cristalina junto a un hermow rebaiio; en preguntar no me engafio porque yo tengo memoria; dime si hay Infierno o Gloria si ta tenis por tan galto.

VERSO POR LA MUSICA DEL CIELQ \

voy a poner una mira de encordadura romana.

Las voces del guitarr6n se oyen en el Purgatorio, lo toca el Angel Custodio en la celestial mansi6n; en la pensi6n del Seiior donde la Virgen se afana, ahf tocan una campana en 10s tronos de Eliseo;

3 hacen dos mil postureos pa' cantar esta semana.

Se dye tocar un armonio en el p n o de la Fenicia sale Maria Santisima, y apostdica de adorno; el palacio de 10s Catonios. s e n dice un serafin; q u i a le tbcaba el clarfn era el ap6stol Sim6n; gozo esta vida en que estoy y la otm que vu a venir.

pa' cantar esta sernclna y la otra que vu a venir.

.

,

tocan un maitfn a celestial mansi6n;

a' celebrar a1 Sefior . .

open tocar en el Cielo, lebran a1 Verdadero

el gran palacio estrellada de la reina soberana,

+

, . trbno de las deliciqs;

iguana, por mtigua \

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N POR PROFETAS

ahora la, digo aqpf:; vengo de a p e & reg8

Elevado en tanta a1

o aquel hijo tan fino ha sido de 10s mejores;

j ssoy el poeta lampino. QuC fue lo que Bios despuds que el mund

'yo soy sabip de ate mundo

San Judas y.Sm Ce volvieron a renacer; yo desaffo, tambikn, a 10s cantores horninos

canto con el Rey Salom6n tambidn con el Rey David;

VERSO POR PROFECIA

ra tu buen talent0 bien tu instrumento

se encomi&dan. a y yo lo digo en e1

punto de profecfas

y 10s que en el infi eso no lo sabe naid

en un Ipadero san Pedro Bernardino;

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Zn tierras de CanaQn

40s secretos de Salombn muchos sabios no sabrin; en que altura estarin 10s astros del firmameilcv sale el sol en su aposente cuando el dia esti aclarando; si queris seguir cantando, afina bien tu instrumento.

Cruz santa, si yo quisi'era, por medio de la despeafa,, n i n e n cantor me vencfa en toda la tierra entera; ni en la alta cordillera donde se para el nublado; ni con el viento enco

. dijo a1 monarca Davi aba el profeta Daniel aquf est& el tor0 enjaulado .

VERSO POR PROFECIA

, y con entoqacibn traspuesca vo me' est$ atormentando. me estfs qtornzentadu,

estar cantando y estar Ilorando.

Yo ciencia y talent0 tuve ctigo' porque tengo

dime, tu sabidurfa, hombre, t6 quC la hiciste, y nunca te arrepentiste de perder la salvacibn; y morir sin confesih no ha&ii'dolor' mas triste.

Yo nunca he sido estudiado porqde, nunca estudiC, solo yo me conform& leyendo el Libro Sagrado; yo no soy muy preparadQ,- se la estoy explicando; vi a un padre I predicando, haciendo gran oraci6n; y me causa admiraci6n

as partes donde anduve; ciencia a mi no acude

duve en las estrellas

a1 paraiso de Adin,

~

abias cornersando tra de 10s plaoetas, , estar cantando y estar Ilorando.'

j 161 (

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hmtu que meriende y cene.

Pidi6 la herencia y se fue a unos paises extraiios, conoci6 su desengaiio, . vuelve a su casa otra vez; es tanta su desnude

que el hambre me

ue nuide lo conocfa,

decfa aquel infeliz; de 10s manjares que h este hombre quiere almorzar

El padre lo abrazaba en ese mismo momento; con bellotas me sustento en el pais donde estaba; el otro hennano preguntaba: herniano, de d6nde vienes; a1 instante se previene sin saber lo que le pasa;

' ' sacruvento de : ?salen como de

de ufi convent0

miracidn y espanto.

einos de los cielos

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prque F$M el robarse Eo

Sacramento del altar, & cosa muy religiosa, donde Maria r e p a I

en el trono angelical; se arrodilla el sacristan y despuh de rezar tanto, un dolor que yo no aguanto, le he 'clamado a1 Salvador; y mdrir sin confesi6n causa admiracidn y esbanto.

la misa es grandeza, cristiano que reza

s mandamientos, primero; en el alto magisterio

un trono colocado; n 10s que han llegado la &%a es muy buena,

I

ERSO ORIGINAL CON DOBLE CUARTETA POR LA PASION

uisiera ser como el Eoro Cuando tengo pena, canto orque callada no aguanto, dijo Cristo en el Huerto:

%do tengo pena, canto, aicen que Dios es muerto ndo tengo gusto, lloro. el dia del Viernes Santo; ,

un dolor que ya no aguanto, le dijo a la madre amante; del Calvario en adelante . hizo a Cristo adoraci6n; y canto por la Pasi6n

ha de tener por delante, cualquier parte que cante

kv que echar la introduccih. t

yuisiera sey con0 el loro. 8

J&uaisto lo decia,

e e3 Nuevo Testamento; rantando por padecimiento,

a es la ley del cantor.

. q u e callado no aguanto (3 le dijo a 10s judios, a(pbia$o y escupido por orden del rey Pilato; y aM le dieron maltrato v a@ agonipante,

~ 1 ' mismo instante B la Ma&e Divina: corona de espinas

1246 ha de tener por delantc. I

en cualquier parte que cante. ,

Cuando tengo gusto, lloro, El le dijo a 10s soldados, fue escupido y azotado r a la rei% dC sus sicomoro; dijo Maria: yo lloro de ver a mi hijo en prisih, y le dijo el Buen Ladr6n bien dobles serin,tus penas; en velorios y en novenas hay que echar la introduccidn.

Bello madero bendito, macetita de lim6n yo te cant6 este versito por la sagrada Pasi6n; yo cumplo mi devocich aunque muy bien no lo har secumple la profecfa; del sabio que est4 diaendo; y el que no nace sabiendo se encornendark a Maria.

'

-

I . .. ' I

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."

Page 175: El ultimo grumete de la baquedano

Pa’ m& cachdl@, un

. 10s perros de 10s horninps. ,

Pili10 es el instructor, perro de gran valentfa, que corre con energia para pillar a1 traidor; dicen que es de lo mejor, huele a1 malvado de lejos;

on en El Portezuelo, vuelta a Los Quilos,

.

Ya est& el nhmero completo de IQS ricos perros zorr&os,

salir gananaoso. Vender cam, a buen precio.

Page 176: El ultimo grumete de la baquedano

yo recibo estos consejos de mis nobles compaiieros, dijo 0 .c

el hi1

,.P"O 'eno, el

Anoche en d gallinero 'do el zorro en p a n pesquisa, *

Manuel sali6 en canriisa UI busca de que1 ratero;

muerte pa' ti prefiero,

estos pecros tan n o m h corren en todo tmeno, si quieren ver p k w bu que ladran como ayer batieron 10s MorocolsO con El

VERSO ROk EL JUDI<

[email protected] la casa santa, , y por orden de Jehova ataja en JerhaUn, se ataja en Jerusaldn. ataja. en todos 10s santos en Jesucristo tambidn. ' Todo el mundo dl ha

'

Ya salic5 el Judfo Errante

sin descansar un segundo por 10s Iugares distantes; a1 Seiior quiso quejarse y a las cumbres se kvanta, la gente de verlo se espanta en 10s caminos fragosos; por ordeh del Podexoso se ataja en la casa santa.

I ;Los huracanes del viento . no le pondrhn el atajo,

J correri de rfo abajo - Bin tener habitamiento; y 10s grandes elernentos nunca lo pocErAn vencer; muchos dicen que Samuel rod0 el mundo lo andari,

como el mejor 'andarin . a darle la vuelta a1 mundo, andarA este desgr

despuds de ser ca .y despuds que anduvo t;

se ataja en todos Eo

dl maldice hasta

k

',k"priatjto. perro #nrrro.

IjpMairuro. par0 'ZOlTero.

' ?wyiaaao. PerrP zonrro. ~-~~oroco. .Pam'mrrcrq. -

qWn. Par0 wrrero.

*Varr> ychado ak Loyca, 0 Hondo Quilp y M@ud

/

Page 177: El ultimo grumete de la baquedano

palabras compuestas son cosas que duran; una, hermosura ,

En IPS pampas de A y en 10s palacios de ahi querian- levantar una imagen igual a (Dios; a1 del Cielo no igual6, mas como estaba brilJand0, sus colores iban dando en el altar tan bonito; y les dice Jesucristo que se estaba recreando.

,

Cbndo el Sefior baj6 al mundo, digante que vino a , hacer, , me'aeo que vino a ver si santo quedaba alguno; como ea tan lindo y tan 'pur0 aquel divino Seilor,

' con su fragancia y olor ate mundo juzgarfa; c6mo naci6 de Maria Eiendo de Ea primera flor.

VERSO HZSTQRICo A LQ DZVZNO POR SGNSOP'

y ahora ciego y no veo, tengo un dolor, iay de mi!

Cuan!o yo vista tenia

4

1 injtrumkito en mi fuerza me miraba, ' to con frened: - ? . con 10s giganies historiaba

aingutlo me acoilletia;, fue tanta la valentia, ' por eso me hallo postrado,

. y d e mi Dios fui dotado ' ' con grande fuerza y talento;

yo tengo, en mi pensamiento, un sentinpiento morado.

Cuando-el pel0 me cortaron y lleg6 )aqui el enernigo, . , a dewengarse conmw y 10s ojos me sacaroni a mi esposa le entregaroo

,

I

Page 178: El ultimo grumete de la baquedano

me ha de crecer un agrduio carmesi,

W I N O POR SALOMON

bendita, te dird

porque queria tener . 10s grados de SaloMni-

escrito en un papel: &s hombres y una mujer asdata &r el mundo errantes,

hay campros un mom&, ”-- que Io sigan a1 instand: dijo un rnoderno ignoranh si a Sansbn lo hallan pr

AdAn, siendo nu nunca dio con Sa

Sdneca, el mis sabido, dio a saber su parecer,

, nus dej6 noticias de 61 por dopde andaba navegando;

Lo andan buscando en 10s air dos hombres y una dujer, @os preen tan -p r tl .IIO les da noticias naide?., dijo la rnujer vasiable , no paso ~ adelantg le devuelvo a1 instante

*

VERSO POR EL APOCALIPSIS

- es una ciudi-

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ella respondi6 que no; *el padre tambiCn habl6: mi hija es criada en matorrales, p r fuentes y manantiales B andar solita se obliga; para que este hombre no diga que andai por 10s romerales:

PambiCn encontr6 en un praeE0, el pastor a la pastora, y le dijo: aquf, sefiora. le present0 su ganada; el joven qued6 admirado de hallarlit. en el montecillo le present6 un carnerillo, Iicitndole: no me extrafio;

un joven para casarse, yo voy pAra mis rebafios, y a1 tiempo de prepararse pastando el alfilerillo. .

mAnotado tambien ooll Ugerv wianta al Cantor Ismael Pizarro Sandoval, del ~ ~

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le han borrado su nombre;

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les dirk c6mo es la mrri '

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suMa 61 ceno cantando; ', en eso &pa su'vida; . 7 p r costumbre anda hilando

tambib come c I

su elevada altura estra gran claridd; c

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Manuel Gallardo y Josk Nwarro VRRSOS POR UNA MISMA .CUARTETA

Techador, techa tu choz

azucena y arrayPn, c6ndor que alumbra el i m F - - , lo cuida buen jardinero en un jardfn delicioso; dijo mi Dim poderoso: techa tu choza, chocero.

hfanarel Gallardo.

Ep el JordPn, con cuidado, las estrellas relumbrantes alumbran el jarah fragante,

- en el espacio azulado; . prestan su voz a1 variado

con una Iuz presurosa; esa es la plaga espantosa, lo decfa una doncella; resplandeken las estrellas con romero, flor y rosa.

y la flor de la pasi6n Horece de afio en aiio; pa' recordar a1 rebafio, las margaritas preciosas, son las flores mb lujosas , con sus perlas y marfil; matizadas con' jazmfn, cot) romero y flor de rosa.

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