cinco sentidos del periodista kapuscinski

8/3/2019 Cinco Sentidos Del Periodista Kapuscinski

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R Y S I A R D

"C I N S K I



R y s z A D, ,

l O S C I N C O S E N T I D O S D E L P E R I O D I S T A

( e s t a r , v e r t a i r , c o m p a r t i r , p e n s a r )

FONDO DE CULTURA ECONOMICA

FUNDACION PARA UN NUEVO PERIODISMO IBEROAMERlCANO

FUNDAC!ON PROA



Kapuscinski, Ryszard

Los cinco scnridos del perioJistil (e~tar, vcr, oi l", compar-

til', pcnsar) / Ryszard K apnsciriski. - M exico: Fundacion

para unNucvo Pcriodismo Iberoomcriccno, Fundacion Proa,

FeE,2003

90 p. ; 26 x 17 em - (Colee. Nuevo Periodisrno)

ISBN 968c16·70914

1. Pcriodismo l. r II . SC I"

t.c PN4775 Dewey 070.4 Kl29c

o mccanico, sin c! conscnr imiento por cscr ito del editor.

Sc prohibe fa reproducc.i6n toral () parcial de esraobra -s-incluido

cl discno tipografico y de porrada->, sea cual rucre d mcdio, elcctronico

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Presidente de 1< 1FN!']: Gabriel Garda Marquez

Director de la I'NI'I: Jaime Abello Bmtfi

Director de In Colecci(m Nuevo Periodismo: Tomas Eloy Mart inez

Recopilacion y pr()[ogn: Oscar Escamilla

Edlcion: Gablida Esquivada

D iseno : R /4 . P ab lo R uH o

!5UN: 968-16-7091-4

Edid6n no venal

lm preso en Mexico > P,·inied til MeXICO



P R O l O G O

En noviernbre de 1994' Gabriel Garcia Marquez convoc6 a un grupo de amigos

en Cartagena de Indias y les hablo de Ia pobreza que aquejaba al periodismo la- .

tinoamericano. "Cuando empece en ese oftcio --dijo- tuve grandes maestros

que no m e perdonab an un adjetivo fuera de lugar, Los jovenes de ahara escri-

ben'a Ia buena de Dios, Nadie tiene tiempo para ensenarles."

Asf nacieron la idea de la Fundacion para un Nuevo PeriodisnlO y la

, idea de sus talleres, que nueve anos despues suman centenares. Las leccio-

nes de los maestros de la Fundacion quedaron en la memoria y en las no-

tas de los jovenes que asistieron a esos curses, y se transfiguraron en algu-

nos de los mejores textos que han aparecido despues en los periodicos del

continente, Los talleres seguian siendo, sin embargo, infinitas riquezas

abandonadas en los cementerios de las grabadoras, de los videos 0 de las

relatortas mas 0 rnenos fieIes que los reflejaban.

Un ana arras, advertimos que la mision inicial de la Fundacion podia

irradiarsc a traves de libros que esruvieran al alcance de los periodistas que no, '.

habian asistido a los talleres y de los Iectores cornunes interesados en la com-

pleja trama de talento, riesgo, investigacion y conciencia que se mueve detrasde la escritura de la noticia mas simple. E1p lan de una coleccion de libros

avanzo hasta convertirse en cuatro series: los Libros del Taller, los Ensayos,

las Amolog tas y los Dialogos, que iran apareciendo a razon de cuatro a cinco

por ano, gracias a la hospitalidad y a la comunidad de interests mtelectuales

que unen a la Funclaci6n can el Fonda de Cultura Economica.

En este primer volumen de los Libras del Taller, de distribucion gra-

tuita, uno de los mas grandes periodistas delultimo medic siglo, Ryszard

Kapuscinski, concentra en poeas paginasla sabiduna de un oficio que eli el

se con funde can la propia vida, Esas mismas razones y pasiones seran el se-

1 1 0 cornun -estamos seguros-> de todos los libros de la coleccion.

TOMAs ElOY Mi\RTiNEZ, septiembre de 2003.



I N T R O D U ( C I O N

RETHAI' DEUI IICUE.IIO

OSCAR ESCAMI LLA

Conoci a Ryszard Kapuscinski en octubre de 2002. Lo vi aparecer en el

lobby de un lujoso hotel en e1 centro de Buenos Aires cuando salio del

ascensor. Llevaba puesta una carniseta azul clara de manga corta.ipantalo-

nes de dIU de un azul tan profunda que casi eran grises yunos zapatos ne-

gros de amarrar de diseno colegial. Camino hacia los que estabamos en la

salita de espera y nos saluda con afecto de amigos de toda 1av ida.

Tenia la inquietud de ver como era ftsicamente Kapuscinski, pues co-

mo muchos lectores tarnbien habra moldeado a voluntad laimagen y perso-

nalidad de uno de mis escritores preferidos. Para entonces ya habia letdo

los unicos Iibros suyos traducidos al espanol, de los 21 que ha publicado:

E I E m p er ad o r, E I Imper io , La gu erra dd j~ ttbo l, E l sh a, .E ba no y uno mas, que

recoge charlas que dio en Italia, titulado L os cin ico s n o sirven p ar a e ste oficio.

De tal manera, la imagen que tenia de Kapuscinski se remitia a las Iotos de

las contraportadas de sus libros, a su escritura y a esa manera suya de ver e l

mu?do. Pero ahora que 1 0 tenia enfrente notaba que estaba m a s viejo que en

aquellas fotos y que en sus ojos grises habfa una expresion particular.

Era una mirada cambiante, casi camaleonica, A veces la Iijaba en su

interlocutor mientras 1 0 examinaba de arriba abajo y de abajo arriba, como

5 1 se tratara de la.requisa de un experto en seguridad aeroportuaria; luego

detema sus pupilas en las del otro y prestaba atencion a 1 0 que este deda.

Si en Ia charla surgia una historia fascinante, la mirada de Kapuscinski se

volvia de nino y le centellaba de puro asombro.

Par instantes apartaba los ojos de quien estaba hablando y, sin per-

der el paso de 1a conversacion, los clavaba en cualquier otro. Entonces

bajaba la cabeza, levantaba las cejas y observaba pm encima de sus lentes

para decir, sin decirlo: "tEntiendes 1 0 que dice? Cierto que es interesantc".

Luego sonreia.

Habta mementos en que concentraba 5 1 . . 1 mirada en una escena can

tal fuerza que parecia que con ella podia traspasar la punta metalica de.

7



una boveda para saber que habta adentro. Yen orras ocasiones, como ocu-

ni6 al final del taller, sus ojos podtan rdlejar los fuegos artificiales de su

interior cuando 1 0 sorprendian con una pregunta 0 con un acto que remo-

via sus sentirnientos.

Perc no me f~je solo en sus ojos: tambien en sus pequenos pies, Ynofui el unico. Alguien me dirta despues que no habia imaginado que ~m

hombre cuya vida transcurrio en su mayor parte carninando el mundo tu-

viera unos pies tan pequenos.

Me costa trabajo figurar a esc hombre blanco avanzando con esos pe-

quenos pies hacia la fila de nines ncgros que recogfan agua en el extreme de

un barrio miserable en Lagos. () recienternente Ilegado a l aeropuerto y cami-

no al centro de Vorkuta, en Rusia, bamboleandose ~n un autobus atestado de

personas tan envueltas en abrigos de piel, para protegerse del frio, que pare-

dan capullos meciendose apretujados que de vez en cuando 10pisaban.

A diferencia de Ia rnayoria de sus lectores, tuve yo la oportunidad de

amp liar mi vision del escritor, y nunca dejo de sorprenderme. Recuerdo

que el dta que Io conoct en e l lobby del hotel, tras el saluda Kapuscinski

regreso a su cuarto a ponerse una gorm de beisbolista color caqui y unos

lentes oscuros que ajusto en la parte superior de sus gafas, Can esc atuendo

se integro a1grupo que iba a vet un partido de futbol en la cancha del Boca

Juniors, Ia Bornbonera. Al regresar alguien le dijo que en Buenos Aires se-

cuestraban mucho, "jpero mucho!", segun contaban los despachos noticio-

50S de agendas de prensa y las notus de television que habta vista. Cuan-

do la persona deja de quejarse de la inseguridad argentina, Kapuscinski la

torno por el antebrazo y giro hasta que ambos quedaron frente a una venta-

na par Ia que se vela la calle, A continuation el maestro Ievanto la mano de-

recha y , juntando los dedos, dibujo el marco: "Seguramente -d~jo--i uno

se queda mirando un buen rato par esa ventana vera los secuestros que us-

ted dice ... Si ve alguno, no dude en denunciarlo".

Esta senala primera de una sene de lecciones que nos darta el maes-

tro a 10 largo del taller para rcporteros de America Latina, motivo p O T el

cual estabarnos en Buenos Aires. Las siguientes las distribuyo en raciones

para cada uno de los 16 periodistas, los cuatro oyentes y los invitados que

nos reunimos 1 a segunda sernana de octubre con el .

En los cinco dtas e 1 maestro habio de 1a globalizacion, de los onge-

nes del Nuevo Periodismo, de las Iormas mestizas de relatar donde todos

8 L O S C IN C O S E N T I D O S D E t P E R I O D I 5 T A



los generos parecen rnezclarse, de su metoda de trabaj 0 en la construcci6n

de El Emperador , de Ia dignidad del rcportero, del respeto por el otro que

decide abrir Ia puerta de su casa para contarnos su vida y del doble taller.

Respondio a las preguntas que le hicimos yatendio con interes los relates

de cada participante sobre como hizo el texto que presento en el taller. Enlos almuerzos nos canto histories y escucho las nuestras, y 1).05 die una

buena cantidad de utulos de libros para leer,

Se despidio de nosotros con lagrimas en los ojos un viemes caluroso

despues de que toclos le escribieramos mensajes y le firmasernos la camisa

blanca que llevaba puesta. Tras una corta intervencion para hablar del pe-

riodismo local, cent} el taller diciendo con voz entrecortada: "Espero que

nos encontrernos en Iuturas ocasiones. [Muchas gracias!" Los que esta-

bamos alh nos levantamos de nuestros asientos y 1 0 aplaudimos por largo

rata, algunos llorando ernocionados, y tl apenas nos miro can ojos de nino

sorprendido al que Ie acaban de dar un regale que no esperaba.

EI texto que sigue recoge los conceptos que Kapuscinski ofrecio en

el taller que dicto entre el 7 Yel 11 de ocrubre de 2002, en Buenos Aires,

Argentina, organizado POt la Pundacion para un Nuevo Periodismo lbe-

roamericano (FNPl), el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y la

Fundacion Proa, A esc material se agregaron iruervenciones del gran

maestro en otro taller, realizado en la sede de la ItNPI en Cartagena de In-

dias, Colombia, con el apoyo del BID, en octubre de 2000, yen una con-

Ierencia q~e dicto el 8 de rnarzo de 2001 en la Universidad Iberoameri-

cana de Mexico.



P A R T E I

. 1 1 0 F I C I O



LOS PERiODISTAS

Y l.OSTRABAJADORES

DE LOS HEDIOS

Hace 50 anos este oficio se vela muy diferente a como se percibe hoy. Se

trataba de una profesion de alto respeto y dignidad, que jugaba un papel

intelectual y politico. La ejercia un grupo reducido de personas que obte-

man el reconocimiento de sus sociedades. Un periodista era una persona

de importancia, adrnirada. Cuando andaba par i. a calle, todos 1 0 saludaban.

Algunos de 10$mayo res politicos del mundo contemporaneo empe-

zaron 5Dcarrera como periodistas y siempre se sintieron orgullosos de ella.

El britanico Winston Churchill trabaj6 como corresponsal en Africa antes

de convertirse en uno de los grandes estadistas del siglo xx; 1 0 mismo 5U-

cedio a algunos escritores como Ernest Hemingway, por ejemplo, Estes

grandes hombres siernpre reconocieron que sus carreras comenzaron en el

periodismo, y nunca dejaron de sentirse periodistas. Pero eso cambio en

los ultimos 20 anos, a partir de una trernenda transforrnacion en, las prac-

ticas de este oficio.

El periodismo escrito conternporaneo reprcsenta apenas una reduci-da pardon del gran mundo de los medics. En ese campo, que ademas se

halla en perpetua expansion, nosotros, los periodistas graficos, ocupamos

escaso Iugar. Cada dta es mayor el nurnero de quienes se emplean en L a te-

levision, especialmente entre los medias audiovisuales, A cllos se les apli-

ca Ia denorninacion de m ed ia wo rh er , yaque eso son trabajadores de los

medics masivos,

A diferencia de aquel periodista de hace 50 anos, este trabajador de

hayes una persona anonima. Nadie 1 0 conoce, nadie sabe quien es , Eso se

debe a} cambio mas importante que sucedio en sus rutinas de trabajo: el

pro due to final que crea un trabajador de los medics masivos no es de su .

autona sino que constituye el resultado de una cadena de gente como el

que participo en la construcci6n de una noticia. Cada noticia que se erni-

E L O fl (I O 1 3



te por CNN ha sido trabajada por 30 040 personas anonimas; tanta genre

participo en el proceso de transformer el.material que no se puede estable-

eel' un autor de aquello que finalmente se via en la pantalla de television.

Como consecuencia, en esta profesion se perdio algo tan central como

el orgullo de 1 0 personal. Ese orgullo implicaba tambien la responsabihdad

del periodista por 5D trabajo: el hombre que pone SD nombre en un texto

se siente responsable de 10 que escribio. En carnbio, en la television y en

las grandes cadenas multimedia, de igual modo que en las fabricas, esta

responsabilidad personal ya no existe.

Al misrno tiempo, la relevancia de los medics crece a medida que avanza

el siglo. Los jovenes pericdistas que hoy se desernpenan en el pequeno te-

rritorio de la prensa escrita van a trabajar en una civilizacion donde nues-

tra tarea importara cada dia mas por dos razones: la primera, porgue es una

profesion a traves de 1acual se puede manipular a la opinion publica; la se-

gunda, porqUe los mecanismos de los medias construyen un mundo vir-

tual que remplaza al mundo real.

La manipulacion de los modes en que piensa la gente, una practice

de enorme dtfusion, se emplea en numerosos senndos y medidas. Ya no

existe la censura como tal, con. excepcion de ciertos paises; en su lugar se

utilizan otros mecanismos -que definen qu e destacar, qu e omitir, qu ecarnbiar- para manipular de manera mas sutil. Eso imports a los pcdero-

50S de este mundo, siempre tan atentos a los medios, porque ast domman

la imagen que dan a conocer a la sociedad y operan sobre la mentalidad y

la sensibilidad de las sociedades que gobiernan.

Can respecto ala construccion del mundo virtual, es valioso recordar

que hasta 30 0 40 anos atras hombres y mujeres conociamos la historia que

nos ensenaban en las escuelas y a traves del relato de nuestras familias, dos

vertientes que Iormaban parte de la memoria colectiva de las sociedades a

las que pertenectamos. Hoy, en cambio, con el desarrollo de los medics,

vivimos en un mundo donde la historia se ha vue1to doble, donde convi-

ven dos histories simultaneas: aquella gue aprendimos en la escuela y en

la familia, de manera personal, y Ia que nos inculcan los medics, que fija-

1 4 l O S C I N C O I E N T I G O S D E l P E R J O D /S T A



mos -a veces subconscientemente-e- a traves de la television, la radio, los

metodos de distribucion electronica. El gran problema se presenta cuando,

con el riempo, esta acumulacion de construcciones de los medics nos ha-

ce vivir cada vez menos en la historia real y cada vez mas en la ficticia. Es

1ap rimera vez que alga asf ocurre a Ia humanidad. Enfrentarnos un feno-

rneno cultural del que no sabemos cuales podran ser sus consecuencias.

La revolucion de los medias ha planteado el problema fundamental

de como entender el mundo. Converticla en una nueva fuenre de Ia his to-

ria, la pequena pantalla del televisor elabora y relata versiones incompeten-

tes y erroneas, que seimponen sin ser contrastadas con Fuentes autenticas

o documenros originales. Los medios se multiplican a una velocidad mu-

cho mayor que los libros con saberes concretes y solidos.

Como ejemplo tenemos los tragicos acontecimientos que tuvierori

lugar en Ruanda en 1994. Una de las masacres mas grandes del siglo xx su-

cedio durante tres meses en un pais pequeno y desconocido, muyadentro

del enorme continente de Africa, de estructura sociologies fiUY complica-

cia, can una historia cultural y etnica peculiar que muy pocas personas co-

noctan, Tambien es muy poca la gente que sabe 10 que realmente paso alh:

algunos academicos, algunosespecialistas en asuntos africanos. Un grupo

muy redueiclo que quedo ciertamente asombrado de 1aIalsedad can que se

dio a conocer el horror que vivio Ruanda cuando la noticia se difundio por

el mundo.

Miliones y millones de personas en todos los continentes aprendie-

ron una historia irrealde esos acontecirnientos a traves de las noticias quemostro la television. Esa construccion ficticia fue la (mica historia que eo-

nocimos, la (mica que hubo y quedo, porque las voces alternativas -los

pocos libros que aparecieron sobre Ruanda de antropologos, sociologos y

otros especialistas- no pueden ofrecer 1amisma accesibilidad que los me-

dios masivos. La gente comun conoce la historia del mundo a traves de los

grandes medias.

Como esa, cada vez mas historias virtuales ocupan el lugar del mun-

do real en nuestro lmaginario. Esas manipulaciones nos alejan de. las h15-

torias y problemas reales que suceden en las diversas civllizaciones. Vivi- ..

mos en un mundo de lamas culturas que solamente un reducido grupo de

especialistas es capaz de entender y aprender algo d e 1 0 que esta pasando.

El resto accede al discurso fragmentado y superficial que los gran des me-

H t)fJ C!O 1 5



dios condensan en un minute: se trata de un problema que seguiremos su-

friendo rnientras las noticiasmuevan tanto dinero, esten influtdas por el

capital y cornpitan como procluctos de los duenos de los medias.

HO$OYROSJU~TO

A LOS OTKOS

Sin embargo, nada mas alejado del sentido basico del periodismo. Lo que

nosotros hacemos no es un producto, ni tampoco una expresion del talen-

to individual del reportero. Tenemos que entender :tue se trata de una obra

colectiva en la que participan las personas de quienes obtuvimos las infor-

maciones y opiniones con las que realizamos nuestro trabajo. Por supues-

to que un periodista debe tener cualidades propias, pero su tarea va a de-

pender de los otIOS: aquel que no sabe cornpartir, dihcilmente puede

dedicarse a esta profesion.

EI periodismo, en mt opinion, se cncuentra entre las profesiones m as

gregatias que existen, porque sin los otros no pcdernos hacer nada. Sin la

ayuda, la partictpacion, la opinion y el pensarniento de otros, no existirnos.

La condicion fundamental de este oficio es el entendimiento con el otro:

hacemos, y somas, aquello que los otros nos penni ten. Ninguna sociedad

moderna puede existir sin pertodistas, pero los periodistas no podemos

existir sin 1asociedad,

De alli se deriva que una condicion fundamental para ejercer estecflcio consiste en ser capaz de funcionar en conjunto can los otros. En la

mayor pane de los casas nos convertimos en esclavos de situaciones don-

de perdernos autonomia, donde dependemos de que otto nos lleve a un lu-

gar apartado, de que otro cledda hablarnos acerca de aquello que estamos

invesrigando. Un periodista no puede ubicarse par encima de aquellos COn

quienes va a trabajar: al contrario, debe ser un par, uno mas , alguien como

esos otros, para poder acercarse, cornprender y luego expresar sus expec-

tativas y esperanzas,

E l mejor camino para obtener informacion pasa por 1a amistad, de-

cididamente. Un periodista no pued€. hacer nada solo, y si el otro es la uni-

ca Fuente del material en que luego habra de trabajar, es irnpresciudible sa-

ber ponerse en contacto con ese otto, conseguir su confianza, lograr cierta

1 6 W I « s e c S E H T l D O I ntl H R I O D I I 1 A



..~;. '.

empana con < ' : 1 . Durante rni experiencia profesional tuve muchos amigos

que carecian de esra disposicion de haeer amigos entre la gente, y tuvie-

ron que dejar el periodismo p()l·que no pudieron hacer mucho.

Esta caracteristica vicne acompanada por uno de los misterios de

nuestro oficio: que pasa cuando el otro tiene una vision sesgada de los he-

ehos, 0 intenta manipularnos con su opinion. Para prevenir esto, no existc

receta alguna, porque todo depende de las situaciones, que es como decir

de un menton de cosas. La unica mcdida que se puede tomar, si tenemos

el tiernpo, consiste en junta! la mayor cantidad de opiniones, para que po-

dames equilibrar y hacer una seleccion.

Por ultimo, conviene tener presente que trabajamos can Ia materia

mas delicada de este mundo: la gente. Con nuestras palabras, can 10 que

escribimos sabre ellos, podernos destruirles la vida. Nuestra profesion nos

lleva par un dia, 0 acaso par cinco horas, a un Iugar que despues de traba-

jar dejarnos. Seguramente 11050troS nunc a regresaremos alli, pero la genre

que nos ayudo se qnedara, y sus vecinos leeran 10 que hemos escrito sobre

ellos. Si 1 0 que escribirnos pone en peligro a esas personas, tal vez ya no

puedan vivir mas en su lugar, y qui e n sabe si habra otro sitio adonde pue-

dan ir,

Par eso escribir periodismo es una actividad sumamente delicada.

Hay que medir las palabras que usarnos, porque cada una puede ser inter-

pretada de man era viciosa par los enemigos de esa genre. Desde este punro

de vista nuestro criterio etico debe basarse en el respeto a la integridad y la

imagen del otro. Porque, insisto, nosotros nos vamos y nunea mas regresa-mas, peH) 10 que escribimos sabre las personas se queda con cllas per el res-

to de su vida. Nuestras palabras pucden destruirlos. Yen general se trata de

gente que carece de recurs os para defenderse, que no pucde hacer nada.

l.A FORttAEUGM!

DEL CAZADOR FURT~VO

Junto a esa sensibilidad es valioso mantener una actitud humilde sohre 10

que hacemos porque en esta profesion la experiencia no se acumula. A di-

ferenda de otras actividades, donde en ocasiones es posible afirmar que al-

guien ha conseguido mucho, en el pertodisrno nunca sabemos en realidad

H O f! C l O 1 1



que hacer, como actuat, como escribir. En cada articulo, cada reportaje, ca-

da cronica, siernpre estarernos ernpezando de nuevo, desde cero. Ni siquie-

ra los libros que escriblmos escapan a esta regia: ninguno nos va a servir

rnucho para el que sigue. Siempre estarernos al principio, nunca podremos

estar contentos.

En esta profesion los estudios nunca se acaban. En medicina, .en in-

genierta 0 en administracion se puede decir que, en algun punto, las carre-

ras terminan; en periodismo esto no es asi porque este oficio se ocupa de

nuevos datos, nuevos hechos y nuevos problemas. Mientras el mundo pro-

gresa y se mueve, nosotros estamos dentro de e50S cambios porque la socie-

dad espera que lleguemos a ella para que contemos que esta pasando, pa-

ra que interpretemos que quiere decir la novedad. Eso nos imp one la

obligacion de estudiar, perrnanentemente y de todo. El periodista es un ca-

zaclor furtive en todas las ramas de las ciencias humanas.

Antropologta, sociologia, ciencias politicas, psicologia, Iiteratura.,

Debemos estudiar cualquier disciplina que necesitemos, porque nuestra

profesion es transparente: todos ven como escribimos, es decir, como estu-

diamos, como investigamos, como reflexionamos, Y ellector vota cada dia

sobre nuestra suerte profesional. No cada cuatro 0 sets alios, como les su-

cede a los presidentes, sino cada dia.

El lector es una persona activa, con sus opiniones y sus preferencias,

que compra el periodico y pierde su tiempo Ieyendonos porque confia en que

alii va a encontrar respuestas a sus preguntas. 51no las halla dejara de leer

el periodico 0 al periodista; pern si las encuentra quedara muy agradecidoy con el tiempo empezara a reconocer nuestros nombres. De ese modo eons-

truimos nuestra posicion en este oficio.

LOS COHTEXTOS

DE HUESTROS TEXTOS

Pew no s610 los periodistas dependemos de 10$ otros para escribir y para

que nos lean: tambien el texto periodistico depende, como ningun otro, de

su contexte. E1 texto periodistico funciona en su plene valor en deterrni-

nada ubicacion y en determinado momenta; en otros pierde muchos de sus

valores automaticamente,

1 8 LO ~ ( IN to m TID QI D El P H10D IS TA



.:~~-.----;.-

En primer lugar existe el contexte de la revista 0 el periodico para

Loscuales fue escrito. Cada medio tiene sus principios y Iilosoftas; tambien

riene caracteristicas formales que permiten que ese tcxto periodtstico se

comprenda rnejor a la Iuz de un editorial 0 de otros textos que expliquen

antecedentes, informaciones complementarias 0 interpretaciones que que-

daron Iuera, ya que no es posible decirlo todo en un articulo. ..

En segundo lugar cuenta el tiempo: los textos escritos haec tres, cua-

tro 0 cinco rneses no tienen el mismo valor que d de ayeL Eso es irreme-

diable. Por esc varies escritores y periodistas tratan de salvar sus escritos

de esa extincion publicando libros, un soporte que cia a los textos la posi-

biltdad de evitar Ia matanza del tiempo.

Tarnbien los lectores consntuyen el contexte de un texto periodts-

tico. Al escnbir nos preguntamos a quien dirigimos un articulo, 51.el lec-

tor de un texto sabre el presidente lingo Chavez es un vcnezolano, sena

una estupidez Ilenarlo de detalles que seguramente conoce. Para quienes

vivimos en otKOS parses, al contrario, esos detalles son indispensables si

queremos discutir sabre el articulo.

PO' ultimo, un articulo se inscribe en el conjunto de los textos que

produce su autor. No podernos decir macho de un periodista por un uni-

co texto. Hay que relativizar la crttica, porque un texto es una muestra u -

mitada, pequena, de un periodista.

E l O F I C I O 1 9



P A R T E II



DE i.e YERDADEROIt1.0 UITERESAM'fE

Nuestro oficio comenzo a cambiar como consecuencia de 18.revolucion tee-

nologica que permitio transmnir la noticia de mancra facil e inrnediata. Los

canales electronicos hicieron posible que las noticias viajaran rapidamente

y sin problema de un lugar a otro delmundo, en una trans formaci on radi-

cal: decadas arras, lograr que en el periodismo Ia noticia llegara a su destino

final era en sf eI terna para una cronica. Egon Erwin Kisch, corresponsal

checo-alernan de principles-del siglo xx, un clasico de nuestra profesion en

el ambito mundial, escribio en sus mernorias que el trabajo de enviar la no-

ticia en ocasiones resultaba mas fascinante que el reportaje mismo. Con la

revolucion tecnologica este tema deja de existir.

Pero hay una segunda razon para el cambio de nuestro oficio, acaso

Ia m as irnportante: que la noticia se convirtio en un bum negocio. Este

acontecimiento tiene suma importancia, ya que al descubrimiento del

enorme valor economico de Ia noticia se debe 1allegada del gran capital a

los medias de cornunicacion. Normalmente el periodismo se hacta por am-

bicion a par ideales, pero de repente se advirtio que la notlcia era uegocio,que.permina ganar dinero pronto yen grandes cantidades. Esc cambio to-

talmente nuestro ambiente de trabajo.

Cuando el gran capital Ileg6 a nuestra profesion configura redes de co-

municacion masiva que dividieron el campo de 1 8 . noticia en dos sectores des-

iguales: los grandes multimedia y los pequenos medics margmados. La direc-

cion de esos grandes multimedia quedo en manos de personas que no venian

del periodismo ni se iriteresaban en esta profesion, sino que Ia veian como una

mera herramienta, un instrumento para obtener ganancias altas y rapidas. Por

es o los reporteros carecen de un lenguaje comun con lascabezas de los medias,

administradores de negocios que ni siquiera dominan el vocabulario del oficio.

Eso creo una brecha entre los duenos y gerentes de los medics y no-

sorros, los periodistas, porque ellos persiguen otros interests y objetivos.

L O S H E ~ I O S n



Hoy , al cronista que llega de hacer una cobertura su jefe no le pregunta si

la noticia que trae es verdadera, sino S 1 es interesante y S 1 la puede vender.

Este es el carnbio m as profunda en el mundo de los medios: el rernplazo

de una etica por otra.

Nuestra profesion siernpre se baso en la busqueda de la verdad: el va-

lor de la noticia 0 del texto era dar cuenta de la verdad. Muchas veces la

informacion fu ncio no com o un anna en la lucha polit ica, pOI la influencia

y por el poder, Pero hoy, tras el ingreso del gran capital a los medics rnasi-

vos, esc valor fue remplazado por la busqueda de 10 interesante 0 10 que se

puede vender, Par verdadera que sea una informacion, carecera de valor si

no esta en condiciones de interesar a un publico que, por otro lado, es ere-

cientemente caprichoso.

Asi se ha trivializado el valor de la palabra. EI problema actual de la

comunicacion no es que se escarnoree Ia verdad sino que la palabra ya no

tiene el peso de antes. Errla epoca cornunista Ia prensa sovietica tenia cua-

tro p<iginas, y si en ellas aparecta algun articulo entice, alguien iba a un

campo de concentracion. Cada palabra tenia valor de vida 0 rnuerte. Aha-

ra se puede escribir sabre cualquier cosa y, en un contexte de sobreabun-

dancia y entretenimiento, a nadie Ie importa, En Polonia la prensa escribe

que un ministro es un mentiroso y nada pasa, el ministro sigue hacienda

10 que quiere, Finne en Sll puesto.

UfMAOCUPlluuol~fCUALQU1UERA

Ahora que la informacion es una mercancta bajo las lcyes del mercado, es

decir, desunada a obtener una rentabilidadmaxima y apuntar al monopo-

lio, los antiguos heroes del periodismo han sido rernplazados, en buena

mcdida, por un nutrido numero de esos anoriimos rrabajadores de los me-

dias que ya mencionamos. Hoy el soldado de nuestro oficio no investiga

en busca de la verdad, sino can el fin de hallar acontecimlentos sensacio-

nales que puedan aparecer entre los ntulos principales de su medic.

Recuerdo la prirnera conferencia de jefes de Estaclo de Africa, cele-

brada en 1963. Uegaron periodistas del mundo entero para cubrirla: nos

reunimos unos 200 enviados espcciales y corresponsales de los grandes

2 4 L O I C I N C O I E N T I O O I D E L P W O D IS T A



diarios. agencias de prensa y cadenas de radio, Tambien habta varies reali-

zadoresde cronicas cinematograficas, pem no recuerdo equipos de televi-

sion. Habia autenticos maestros de L a pluma, expertos en los problemas de

determinados p ars es . H o y tengo la impresion de que aquella gran reunion

de reporteros del mundo fue el cierre de una epoca en la que el periodis-mo se vivta como una noble vocacion a la que las personas S8 enrregan ple-

namente y para toda L a vida.

Hoy miles y miles de personas recopilan y hacen circular informs-

clones, }' tam bien se han multiplicado las escuelas de periodismo que ana

tras ana lanzan a nuevos ejecutores de esas tareas. Sin embargo, el perio-

dismo ha dejado de ser una miston y muchas de las personas que trabajan

en los medios 10 consideran una ocupacion como cualquiera otra, que bien

pueden abandonar para ingresar a una agenda de publicidad 0 ser corre-

dar de bolsa.

LAS OFBCnU'tS

DEL PODER

Con los hombres de negocios en ellugar de los romanticos buscadores de

la verdad .que antes dirigfan los medias, algunos carnbios se hicieron visi-

ble? a los ojos de quienes conocian desde antes las redacciones de los dia-

rios 0 los estudios de la radio y la television.

En el pasado los medios se instalaban en edificios de segunda catego-ria y disporuan de espacios estrechos y mal acondicionados donde se afana-

ban los periodistas, casi siernpre mal vestidos y sin dinero en el bolsillo.

Hoy un canal de television perteneciente a las grandes cadenas ocupa sun-

tuosos palacios Ilenos de marmoles y espejos, pOl' cuyos silenciosos pasillos

el visitante es conducido par deslumbrantes asistentes. En estos ambitos se

concentra el poder que antes ostentaban 5610 los jefes de gobiemo.

Actualmente el poder esta en manos de quien posea un estudio de

television, un diario, una radio. En el mundo contemporaneo, tener me-

dias de cornunicaclon significa tener poder. POT eso los que se sublevaron

contra los regnnenes antidemocraticos en Europa y Asia no trataron de LO -

mar las sedes presidenciales 0 parlamentarias, sino que fueron directamen-

te a conquistar los canales de television.

l O S M E OW S 2 5



Esta enorme y creciente influencia de los medics, en particular elec-

tronicos, se ha advertido mejor que en otro ambito en el mundo pohtico,

que Iucha por tener mas presencia en el publico general a traves de los me-

dios de cornunicacion. Las elecciones en los Estados Unidos constituyen

un buen ejemplo de como los medics masivos influyen no solo en la pre-

sentacion sino en el maneja de 13vida pohnca, Alli se ve con claridad co-

lUO los politicos se ajustan a las dernandas de los medias de comunicacion,

Y como esa influcncia es un anna de doble fila: a veces les da buenos re-

sultados, y a veces males. Es una herrarnienta complicada.

LA HUNANU.~A.D

Y l.OS "EDIOS

Sin ignorar ese aspecto, quiero senalar que en las discusiones sobre el po-

der de los medias se dedica dernasiada atencion a cuestiones como las le-

yes de mercado a la audiencia.ymuy poca a los aspectos humanos. No soy

un teorico de los medias sino un periodista y escritor que desde hace 40

anos elabora y consume informacion, y desde esa experiencia advierto un

problema de proporciones. Creo que la afirrnacion -bastante generali-

zada- de que toda la humanidad vive pendicnte de los-medics es desme-

elida. Incluso wando hay acontecimientos, como la inauguracion de los

juegos Olimpicos, que llegan a 2000 millones de personas, hay que admi-

tir que esa cifra consttruye una tercera parte de la poblacion del planeta.Otras transrnisiones de la television sabre grandes acontecimiemos

pueden ser vistas por 10 0 20 par ciento de los habitantes de la Tierra: rna-

sas enonnes de gente, evidenternente, pero por cierto no toda la humani-

dad. Hay cientos de millones de seres que viven totalmente aislados de los

medias 0 que entran en contacto con ellos 5 61 0 cada muerte de obispo.

Me toc6 vivlr en muchos lugares de Africa donde no hay television,

radio ni periodicos. Existen tambien grandes extensiones de Asia en las cua-

le s la television Iunciona solam ente dos 0 cuatro horas 0 .1dta. E n Mong ol ia ,

5 1 bien ha y emisoras, los televisores que tiene 10.gente son tan. males que no

pueden rccibir las senales de los programas. Y recuerdo que cuando Leonid

Brezhnev gobernaba 1 8 URSS, en Siberia no se interfenan los programas que

emitian las radios occidentales: nadie los escuchaba p O Y falta de receptores.

2 6 L O S C I N C O m n o o l D E L PERfO~lm



Gran parte de la humanidad vive aislada de los medias y no tiene que

preocuparse por la manipulacion de la opinion publica 0 por el efecto que las

series saturadas de violencia pueden producir en la educacion de sus hijos.

Adernas, en muchas partes del rnundo la television tiene como unica fun-

don divertir, par 10 cual los tclevisores se encuentran ante todo en bares y

restaurantes. La gente suele ir a tamar una cora y mirar de reojo el apara-

to, y a ninguno siquiera se le ocurre esperar que los prograrnas sean series

oeduquen, como tampoco nosotros esperamos sernejante cosa de una fun-

cion de circe.

Esa equivocada identidad entre los medics y el mundo condujo a un equi-

voco mayor: a rnedida que su negocio se hacta mas grande e importante,

los medics empezaron a encerrarse en una vida propia y desvinculada de

la rcalidad. S1 antes la prensa tenia par fin reflejar el mundo, ahora los

grandes medics se limlran a reflejar su mundo compitiendo entre enos. Ya

no les interesa tanto 10 que sucede afuera, sino que los demas medias no

se les adelanten, que no publiquen algo que e 1 1 0 s no tienen.

Una gran rnanada de trabajadores de mcdios se mueve,como un

grupo, de un lugar a 0(1'0 del mundo, creando una brutal centralizacion de

la noticia. para cornpetir entre S I los medias andan siempre en banda, co-

mo resuhado de 1 0 cual cada uno mira a1 otro y ninguno mira al mundo.De aht que, si en el mundo ocurren varios acontecimientos a la vez, los me"

dios s610 cubren un hecho: el que atrae a la manada.

Mas de una vez fui miembro de esa rnanada -10 describi en mi li-

bro La guerra delfutbol- y vi de que rnanera funciona. Recuerdo 1acrisis

generacla por la toma de rehenes norteamericanos en Teheran: aunque na-

da sucedta en la capital de Iran, miles de enviados especiales de medics del

mundo perrnanecieron alh durante rneses. Esa misma manada se traslado

an as despues a1 Golfo Persico, durante la guerra, aunque 10$ norteameri-

canos no dejaban que nadie se acercase a1f rente; en ese mismo momento

sucedian cosas terribles en Mozambique y en Sudan, pero a nadie Ie im-

porto porque la manada estaba en Kuwait e lrak. Algo similar ocurrio en

Rusia durante el golpe, en 1991: el mundo ignore los acontecimientos au-

lO S M E OiG S 2 7



tenricamente importantes, las huelgas y manifestaciones en San Petersbur-

go, porque los enviados de los medias esperaban que alga ocurriese en

Moscu, y no se movian aunque 1acalma era casi absoluta.

PEONES HAHEJADOS

A DeS'l'AMC:~A

EI desarrollo de las tccnicas de comunicacion -sabre tad a la teleforua mo-

vil y el correo electr6nico- cambiaron radicalmente las relaciones entre

los rrabajadores de los medias y sus jefes. Antes el corresponsal de un dia-

rio, de una agenda de prensa 0 de una emisora disponia de gran libertad y

podia desarrollar su iniciativa personal; el buscaba 1ainformacion, la selec-

cionaba y la elaboraba. Actualmente, y cada vez en mayor proporcion, esos

enviados Sf: han convertido en simples peones, cuyos jefes mueven a tra- .

ves del mundo des de una central que puede estar en el otro extreme del

planeta.

E50S jefes, por s1.1parte, disponen de informaciones mediadas pOl'

muchas fuentes, y pueden Iormarse una imagen de los acontecimientos 1 1 1 U y

distinta de la que tiene el reportero en ellugar. En el vertigo de la compe-

tencia por la noticia, el jefe no puede esperar pacientemente a que el re-

portero rermine 5 1 . 1 labor: por eso le informa a distancia sobre el desarrollo

de los acontecimientos que el enviado esta viendo y 1 0 unico que espera re-

cibir de. el es la confirmacion de la imagen que han construido en Ia ofici-na central. En deflnitiva, el terna que se cubre es remplazado por los pro~

blernas del mcnsajero. Lamentablemente, como se quejaba el canadiense

Marshall McLuhan, el medio esel mensaje.

Cuanda estuve en Ruanda, durante Iarnatanza de 1994, note que

muchos periodistas, de tan conectados con su central pOl' telefonos y co-

nco electronico, no vetan 1 0 que pasaba en el lugar, Llamaban a sus jefes

en Nueva York, Lonclres 0Madrid, quienes les decfan que necesitaban con-

firrnar esta u otra noticia que les habta llegado. Yano eran reporteros: 56-

loseguian ordenes de LUlOS jefes que ni siquiera sabian donde quedaba

Ruanda. Pew en mi experiencia los mejores reportajes se escriben cuando

la oficina central ni siquiera sabe donde esta uno. Siernpre trate de huh de

esa gcnte que 110 conocia la realidad del lugar donde me encontraba.

2 8 L O S ( I N C O m m O Q I D E P f R I O D IH A



De manera adicional, Luanda los medics se cierran sobre sf mismos

y remplazan el problema de la sustancia par el de la forma, sustituyen la fi-

losofta por la tecnica. Los debates se reducen a como cditar, como relatar y

como imprimir; se discute sabre tecnicas de edicion, sobre bases de datos y

la capacidad de los discos duros. No se habla, sin embargo, del meollo deaquello que quieten editar e imprimir, Haee anos, viviendo en ~exico, me

hice amigo del corresponsal de una cadena de television norteamericana.

Una vez 10encontre filmando unos choques entre estudiantes y polictas en

la calle, y le pregunte que. estaba sucediendo. "No tengo 13.menor idea", me

respondio sin dejar de filmar. "Yo solamente estoy rodando. Me limito a

captar las imageries, las cnvio a 1acentral y ahi hacen 1 0 que les pareee can

el material. n

Ese cs un problema acuciante de nuestra profesion: a los periodisras se Ies

da muy poco tiernpo para juntar la informacion can que escribiran la no-

ticia 0 la cronica. Si se quiere hacer las casas bien, can la profundidad que

requiere el ejercicio de esta profesion, hace falta contar con tiempo. No se

pucde mandar a un periodista a un lugar pOl' un dta y esperar que logre

una vision real de las cosas. He aht Is. lucha permanente entre los edltores

y los reporteros: unos conslderan que es suficiente un dia de investigaci6n

para producir un articulo; los otros sabemos que eso no es posible.

Corne en toda tarea creativa -como para pintar un cuadro, filmar

una pelicula, componer una obra musical, escribir un libro- se necesita

ticmpo. La disponibilidad de tiernpo nos permite hablar con mas gente,

leer mas documentos, observer mas, pensar mas: trabajar en serio. Del otro

lado, resolver las casas en poco tiempo conducea lasuperficialidad y la fal-

sedad, desgraciadamente abundantes en nuestra profesion. A veces los lee-

teres se preguntan: "LQUe dice este tiro? iC6mo pudo escribir algo ran ale-

jado de la realidad?" Y no ha y manera de aclararles que la responsabilidad

no recae en el reportero, sino que las condiciones en las que debio hacer

su traba]o tienen la culpa de esos resultados.E l periodista se halla b ajo la presion de jefes que le dicen que si no

tiene material de portada, 1 0 sacan. Yoestoy en contra de esa clase de prensa

l O S M E D W S 2 9



sensacionalista, porque pasa par alto que un periodista es un ciudadano

que, como cualquier orro, debe velar por el bien comun. No debe mover-

nos 5 61 0 1aresponsabilidad profesional, sino tambien la ciudadana que nos

hace preguntarnos si 10 que hacemos es buena ,para nuestra comunidad,

para nuestra nacion.

Para pear, la practica del periodismo es tan feudal que ha y que espe-

rar alios y aries, a conseguir dena posicion profesional, para darse ellujo

de decir: "No cuenten conmigo para hacer semejante trabajo en un dta".

Esto s610 se 10puede perminr aquel periodista que ya tiene un nornbre he-

cho; el periodista que esta empezando, en cambia, no puede elegir adonde

ir 0 sobre que quiere escribir,

Como consecuencia de esas rutinas de trabajo, la ignorancia de los envia-

dos de los medias sabre los acontecimientos que han de describtr y co-

mentar a veces resulta chocante, Durante la huelga que se produjo en

1981 en Gdansk, Polonia, de la que nacio el sindicato SoJidaridad, la mi-

tad de los periodistas que llegaron de todo el munclo para cubrir el hecho

ni siquiera sabian en que parte del globo se hallaban exactarnente. Menos

ann sabian sobre Ruanda los que cubrieron la tragedia de 1994: muchos

se encontraban.por primera vez en Africa y abundaban los que habian 11e-

gada a bordo de aviones de las Naciones Unidas, sin la menor idea de don-de se encontraban 0 las causas del conflicto: Pew la culpa no es de los re-

porteros, como bien me dernostro un carnara del equipo de enviados que

una gran reel de television norteamericana rnueve por el mundo. ' ' ' :Que

pueden exigir de mi -me dijo- S 1 en una sola semana he filmado en cin-

co parses de tres continentes?"

Lo cierto es que la.trernenda centralization de la noticia redujo mu-

cho nuestro conocimiento de este cornplicado mundo en el que vivimos. A

pesar de su enorme diversidad, de la enorme cantidad de problemas y dra-

mas que contiene, nuestro espectro se reduce a si va a haber guerra contra

lrak o no va a haber guerra contra Irak. Tanto se empobrecio nuestra rna-

nera de entender el mundo, que no solo sabemos apenas una 0 dos casas,

sino que -10 pear de todo- las sabernos maL

3 0 L OS C I N CO S E NT l O O $ D E l P H IO l J lm



Haec un tiernpo, invitado por la Universidad de Nueva York, viaje a

los Estados Unidos para participar en una conferencia sobre globalizacion.

Los nortearnericanos presentesse preguntaban si iba a haber guerra contra

Irak, discutian las posibilidades del conflicto, Pero .ninguno sabia donde

queda Irak, quienes son sus vecinos, cuanta gente vive alh, emil es la COID·

posicion etnica, cuales son sus problemas, cual es Ia capital. Nadie. Cono-

dan el nornbre: Ink. Cuando se les preguntaba algo del pais mencionaban

el Islam, al que se referian como una religion unida.

Si a esa gente se les preguntasc cual Iue la mas dura y terrible guerra

de la segunda parte del siglo xx, danan diferentes respuestas. Ignoran que 13

mas cruel y sangrienta, y practicamente la ultima guerra entre Estados, ocu-

rrio entre Irak, precisamente, e Iran, en Ia dccada de 1980. En el enfrenta-

miento entre dos paises islamicos murieron casi dos rnillones de personas.

Los nortearnericanos desconocen que los conflictos mas duros ocurren dell-

tro del mismo Islam rno del Islam hacia [vera. Que la fuerza del fundamen-

talismo 0 del Ianatismo religiose se dirige contra sus propios gobiernos y no

contra el mundo de los blancos. Que C50S Ianaticos Iundamentalistas consi-

deran a sus gobiernos grandes enernigos del Islam, traidores de su Ie ,

Esas y otras cornplicaciones del munclo contemporaneo no son co-

nocidas. La television no las ens efta, sino que, al contrario, las simplifica,

las reduce a unas palabras. La manipulacion de las noticias en los medics

impide el desarrollo de historias como esa y nos convierte a todos en pri-

sioneros de .un lenguaje reducido, pobrc y limitado. Con ese lengua]e no

podremos entender, escribir '! reflexionar mucho, porque esconde 10masimportante del mundo contemporaneo que es su creciente complejidad.

Vivimos en un mundo en el que cada dfa participan mas y mas ele-

mentes, un mundo que crece continuamente. Cada a110 sumamos 80 mi-

Hones de nuevos seres humanos, 55 mlllones de ellos nacidos en el Hama-

da Tercer Mundo. Al rnismo tiempo producimos mas de todo: mas caches,

mas aparatos de television, mas botellas de agua, mas zapatos. Y asi corno

tenemos mas millonarios, tenernos tarnbien mas pobres. La caractenstica

mas sobresaliente de las sociedades contemporaneas consntuye e l proble-

ma mas grande del siglo XX I , la tragica paradoja de nuestra civilizacion: el

crecuniento agudiza las desigualdades sociales.

No sabemos como romper ese vinculo, que hacer para que el desa-

rrollo sea mas justa y de 1ugar a una sociedad mas humana. Sucede que Ia

L O S ~ lE D i () S 3 1



desigualdad no es un heche novedoso. La encontrarnos en todos los nive-

les de 18.organizaci6n social: existe en la familia, donde la situacion del

hombre suele SCI" mejor que la de la.mujer y los nines; existe dentro de ca-

da pals, donde ha y regiones ricas y regianes pobres, tanto en las naciones

desarrolladas como en las subdesarrolladas; existe enlos continentes, don-

de conviven patses ricas y pobres; existe en el planeta, donde e.svisible la

desigualdad en los hemisferios.

WEft II. IESSABER

En 1adecada de 1930 el gran teorico de la psicologia del arte, el aleman Ru-

dolf Arnheim senalo en su libro -El cine coma arte-, de manera prole-

tica, que la gente confu~de el mundo generado por las sensaciones can elmundo creado por el pensamiento, y cree que ver es 1 0 misrno que enten-

der, Sin embargo, no es ast. Y mas aun: la creciente cantidad de imageries

que nos atacan constanternente, a1contrario, limita la relacion con la pala-

bra hablada y escrita y , par consiguiente, el dominic del pensamiento,

Arnheim tambien escribio, tiempo mas tarde, que la television seria

un examen para nuestra sabiduna: podna enriquecernos, creta, pero al

rnismo tiempo podna aletargarnos, Tenia razon. Can mucha Irecuencia en-

contramos personas Clueconfunden ver con entender. Oimos, por ejemplo,

a una pareja q u e discute; "No, quertdo, no tienes razon. Lo que dices es

falso". Y el 0tro responde: "LComo que no tengo razon? iSi 10 he visto en1a television l" Es ta identificacion, POy 10 general inconscieute, entre ver

-un acto del dorninio de las sensactones-s- y saber 0 entender-c-actos del

dominic del pensamienro=- es un clemente basico en la manipulacion de

la genre, que la television sabe aprovechar, En la dictadura funciona la cen-

sura; en la dernocracia results mas adecuada la manipulacion. Y el blanco

de esas agresiones siempre es el mismo: el hombre de la calle.

Analicemos elproblemade lapobreza, seguramente elmas grande de los

que se sulren en nuestro planeta, terminada la Guerra Pna, y veamos como

10 tratan las grandes rcdes de television. La prim era manipulad6n Ilevada a

cab o consiste en presentar la pob reza como uno de sus smtomas: el elrama del

hambre. Sabemos que dos terceras partes de la humanidad vive en Ia miseria

provocada por una division injusta del mundo entre ricos y pobres; en cam-

3 2 l O S C IN C O I E N T l O O ) D E L P t R IO O I > T A



bio, el hambre aparece solo de vez en cuando yen territories aislados, porque

suele ser un heche de dimension local que, ademas, can frecuencia cuenta en-

" tre sus fuentes asociadas can cataclismos naturales como la sequia 0 las inun-

daciones, 0 provocados par el hombre, como los enfrentamientos y las guerras.

Para combatir el hambre se envia a los territorios carenciados, demanera masiva y mediante operaciones internacionales de gran envergadu-

ra, los excedentes de alimentos de que disponen los paises rices. La televi-

sion muestra esas operaciones de liquidacion del hambre, como las que se

realizaron en la decada de 1990 en Sudan y Somalia, en sus coberturas es-

pectaculares sabre el drama del hambre, pem sin decir siquiera una sola

palabra sabre la necesidad de acabar la miseria global.

El segundo truco que se aplica en la manipulacion del tema de 1 4 1 1 1 1 .1 -

seria consiste en presentarla en determinados contextos, como programas

de caracter etnografico 0 turistico que muestran riucones exoticos -para

las culturas que seconsideran centrales- del mundo. Asi, a la rniseria se

le idenrifica can el exotismo: tiene el valor de un heche curiosa, una ca-

ractenstica de deterrninados lugares, cast una atraccion runstica. Estas ima-

genes de 1a miseria abundan particularmente en los canales de television

especializados en viajes, como Discovery Channel.

Al mismo tiempo que el desarrollo de las cornunicaciones ha conectado atodos los puntas del planeta entre 51 , las noticias internacionales ocupan

menos espacio en los medias. Las desplazan la informacion local, las notas

sensacionalistas, los chismes, Ia informacion utilizable. Es decir que cuan-

do la tecnologia hace posible la construction de una aldea global, los me-

dias reflejan el mundo de manera superficial y fragmentaria, centrados

apenas en las visitas de los presidcntes y los atentados terroristas. Nos to-

ea vivir en tiempos paradojicos.

Pero quiza por eso mismo es necesario ser objetivos y justos, y poner

en perspectiva esta revolucion de los medios que, ademas, se encuentra en

plene desarrollo. Se rrata de un Ienomeno nuevo, demasiado nuevo para

que la civilizacion humana haya podido generar los anti cuerpos que COlTI-

batan sus patologias como la manipulacion, la corrupcton, la arrogancia.

L O S M E D I O S 3 3



La literatura que estudia la comunicacion e.s muy critics; tarde a

temprano influira, al menos de mantra parcial, en el desarrollo de los me-

dias. Por otra parte, tenernos que reconocer que mucha genre se sienta

frente al televisor porque espera ver exactamente 10 que se Ie ofrece: genie

sausfecha de sf -como describio el gran filosofo espanol Jose Ortega y

Gasser, en su libra La rebeH on de las masas- y en particular de sus gustos

y preferencias.

En este punta, creo, nos conviene ser liberales. No soy entusiasta del

entretenimiento que rernplaza la informacion, pero reconozco que tiene

tambien derecho a existir pOI'que mucha genre husca en los medias un mo-

menta de diversion y no de ciencia seria. A veces los periodistas exigimos

a la television cosas que Ill.gente comun le pick: esperamos que la televi-

sion nos ensene, que nos muestre el rnundo. Pero a otras personas I n tele-

vision les sirve para ir a un bar cerca de su casa y tornar cerveza can los

amigos mientras ven el partido de futboL

Una gran parte de Ill.humanidad no tiene ambiciones intelectuales,

sino que aspira a pasar su vida mas a menos de buen modo. Esa gente de-

sea divertirse, y esto no se les puede negar. Par otra parte, no debernos

omitir que junto a las malas conviven muy buenas estaciones de television,

que no buscamos por cierta flojera de nuestra parte. Porque tambien es

dena que a veces acusamos a los medios para justificar el letargo en que

se encuentran sumidas nuestras propias conciencias, nuestra [alta de sel1-

sibilidad e Imaginacion, nuestra paslvidad.

Pero sobre todo es importante rescatar que, por ser el mundo de losmedics muy complejo y diverse, una red con muchos niveles, junto a la

basura y la falsedad conviven estupendos programas de television, exce-

lentes emisoras de radio y esplendidos diaries. Los medias tienen tambien

aspectos positivos, porque en sus redacciones y esrudios trabajan perso-

nas meritorias, sensibles y de gran talento; gente convencida de que el

projimo es muy valioso .y el planeta en que vivimos es un lugar apasio-

nante que merece ser conocido, comprendido y salvado. Esa gente suele

hacer su trabajo con abnegacion y entrega, con entusiasmo Y Espiritu de

sacrificio, renunciando a las cornodidades, al bienestar e incluso a la se-

guridad personal, Su unico objetivo es dar testimonio de aquello que nos

rodea y mostrar la cantidad de peligros y esperanzas que encierra nuestra

experiencia.

3 4 L O ~ C I N C O m TiD OS e E L P t R lO D ll T A



LOS BUENOS HEII!UOS

HO HAM NUERYO

Felizmcnte en 11:1iversidad y la paradoja de nuestro planeta y nuestro

ticmpo hay Espada para muy buenos pertodicos, emisoras de radio Y1'ro-gramas de television. El periodista consciente de su labor enfrenta una

cornpetencia dramaticamente mas grande que antes, es cierto; pero creo

-y deliendo con energia este punto de vlsta- que un hombre ambicioso y

esforzado, capaz de tratar a los otros como sus amigos y no como sus ene-

migos, puede desarrollarse y conocer el exito.

En cada pais importante encontramos periodicos de alnsimo nivel

profesional: l:e M o nd e en Francia, La Repubbl ica en ltalia, E I Pa is en Es-

pana, The I n d e p e n d e n t en el Reine Unido 0 F ra nk fu rte r A llg em e in e Z eitu n g

en Alernania, par enumerar apenas un punado, Ni un solo periodico de

buena calidad hacerrado hasta el memento, a pesardel panorama que

ofrecen los medics masivos. Eso tiene una explication sencilla: sus Iecto-

res son fides, y hasta crecen en numero. Es decir que en las sociedades

contemporaneas existe un grupo de gente que se interesa por este mundo,

que quiere saber y entender algo de sus historias, y eso basta para mante-

ncr el optirnismo.

Lo mismo se aplica a las emisoras de radio y a los programas de te-

levision de gran calidad projesional, Hay excelentes medics de comunica-

cion esperando que superemos nuestra flojera, el movimiento autornatico

de encenderel televisor y ver 10 que se nos ofrece, y que pongamos en

practice la voluntad inteligente de buscarlos. Los medics requicren una ac-

titud activa de nosotros, una actitud de interes que nos permita coprodu-

cir esa comunicaci6n.

l O S M E D IO $ 3 5



P A R T E I I I .



LA "EZeIlA CREATIVA

El Nuevo Periodismo, que clanombre a la Pundacion de la que somos hues-

pedes en este taller, nacio en la decada de 1960. Norman Mailer, Truman

Capote y 'rom Wolfe, entre otros escritores nortcarnericanos, crearon este

nuevo genera, que se clio a conocer can el nombre de N e w J o ur n al is m , por-

que luego de anos de trabajo -varios de ellos, inclusive, wino correspon-

sales de guerra en el Pacffico- l.legaron a 1a conclusion de que el lengua-

je periodtstico tal como 10 concebian los dianos no era capaz de reflejar la

realidad en todos sus matices.

En primer lugar porque ese lenguaje, que en general sigue manejan-

do el periodismo diario tradicional, es muy pobre: ernplea tan s610 un pro-

medio de mil palabras. Con ese vocabulario, ciertamcnte, no se puede dar

cuenta del mundo en su riqueza. Otra razon que impulse esta renovacion

es que las frases del periodismo tradicional se Iimitan a construcciones

muy conservadoras: "Hoy en la tarde elPresidente de la Republica llego al

aeropuerto, donde fue recibido por miembros de su gabinetc", casas asi,

que se puedcn escribir automaticamente, casi durmiendo. E s c lenguaje do-

mina la prensa diaria porque tiene el valor de ser eficaz y rapido, pem se

trata de un conjunto restringtdo de Erases que en el Iondo resulta demasia-

do superficial y limitado, y no nos permite movernos 0 avanzar.

Can estas convenciones aceptadas en el periodismo resulto raro en-

contrar un articulo sabre un presidente que comcnzara con una observa-

cion sobre las estrellas, 0 una vieja historia sabre los nos de montana. Pe-

ro estos periodistas, movidos par Ia necesidad de promover un cambia, y

hasta una revolucion, 10 hactan, Su objerivo consisna en introducir otro

lenguaje y otros medias de expresion. La Iuente a la que recurrieron en

busca de recursos para hacerlo Iue 'Laliteratura de Iiccion. El periodismo

que deseaban hacer no cabfa en la formula de la noticia, sino que quisie-

ron tratar de profundizar nuestro conocimiento del mundo, para hacerlo

mas rico y plena. Como los pintores cubistas, comprendieron que una for-

a !w no H R ! O O ! S M O 3 9



rna lleva en S 1 muchas formas y trataron de mostrarla desde varios puntos

simultaneamente.

Asf fue como el Nuevo Periodismo nacio de la cornbinacion de dos

ambiros hasta esc momenta diferentes: uno, los acontecimientos y las

personas reales que nutrian al periodismo tradicional: el otro, las herra-

mientas y tecnicas de la ficcion que enriquectan la descripcion de esos

acontecimientos y personas. Las obras que resultaron de esa mezcla

constituyeron esta nueva clastficacion que conocemos como Nuevo Pe-

r iodtsmo.

Uti GE~ERO CGM

GRAHDES PRECURSORIEm:

Esta fusion creativa reconoce antecedentes irnportantes, La literatura del

siglo XIX , la de la novela clasica, abunda en estas Iormas. Los escritores de

ficcion y los poetas de aquel entonces, par ejemplo, a1adverrir que sus ge -

neros principales no Ies pcrmiuan reflexionar sabre aquello que quertan

decir, escribieron ensayos, Poetas como W. H . Auden, T. S. Eliot 0William

Wordsworth escribieron ensayos. Y no 5610 la poesia presento la conrradic-

cion de SCI' un genero muy rico y al misrno tiempo muy limitado: tambien

los grandes escritores de ficcion fueron a1misrno tiempo reporteros; de he-

cho es dificil encontrar a1guno que junto a sus obras de ficcion no realiza-

ra tambien cronicas.

Honore de Balzac -un reportero que viajaba, hablaba can la gente.

y buscaba documentos- en su obra L os c hu an es nos entrega un perfecto

libra de rcportajes. Johann Wolfgang von Goethe, el gran poeta, escribio

Viajes italianos, una coleccion de cronicas de viaje, Relatos de un cazador,

de Ivan Turgueniev, es un texto ejemplar para quienes haeen Nuevo Perio-

dismo; 10 mismo puede decirse de Mem.or ia s de. la ca sa de lo s m uer to s, de

Fedor Dostoievski.

Tambien podemos mencionar algunos nornbres del siglo xx, pem

pocos, porqne Ia lista podna volverse interminable. George Orwell escri-

b io varies reportajes clasicos: Homenaie a Catalana es un b uen caso. OlTO

grande digno de men c ion es el italiano Curzio Malaparte: nadie puede Ila-

marse periodista si no ha leido 5U Iibro Kapu t t . Otro autor del Nuevo Pe-

4 0 lO S [ [ ! l (O S E NT I D OS D EL P E R IO D IH A



riodisrno fue el britanico Bruce Chatwin, autor de En Patagonia; cerca de

el podrta citar al frances Jean Baudrillard y su libra America. Y,m as recien-

temente, no quisiera omitir el nombre de nuestro amigo Gabriel Garcia

Marquez, en particular su Noticia de un secuesrrc.

DE LAS IUi:SCRUit'UOMlES

AI. EHSAYO

Tras hi incorporacion de esa mezcla de personas y acontecimientos reales

can 105 rccursos de la narrativa, otro carnbio importante transform6 el con-

tenido de nuestro trabajo. Sucedi6 cuando los generos televisivos nos ro-

baron Ia descripcion de imagenes,

Antes, con el fin de contribuir a que el lector imaginase, la recons-

truccion del universe visual ocupaba un lugar importante en la literatura.

Perc la television lleg6 y se convirtio en la gran ladrona de nuestras ima-

genes Iiterarias. Ya no puclimos abundar en descripciones: los lectores po-

dian ver en la pantalla de su televisor aquello de 10 que les hablabarnos.

Aunque los lenguajes televisivos sean llmitados, no podemos cornpetir con

elias en esc punto.

E1vacto que gener6 esa sustraccion de recursos se lleno tncluyendo

en textos elementos del genero ensayo. En la television todo transcurre en

unos quince segundos: vee, por ejernplo, que un tanque avanza, Perc no

se pOT donde avanza, ni pOT que 10 hace, ni que significa 10 que esta suce-diendo. La television informs can imagenes rapidas y cortas fuera de con-

texto, y con ello en los seres perisantes despierta el interes de saber que es

10que estan viendo. Esa curiosidad crea un puente entre 1a television y la

prensa escrita, cuando el hombre tnte ligente cornpra eI diana al ella si-

guiente para encontrar las explicaciones de 1 0 que estaba ocurriendo la tar-

de anterior en la pantalla de su televisor.

En el periodico ese hombre puede detenerse a releer, volver al texto

las veces que quiera para reflexionar y bus car explicaciones. Precisarnente

por ese motive cornpro el diario. Es cierto que no hablo de un lector cual-

quiera, sino de aquel que piensa. Pew para ese hombre e1Nuevo Periodts-

mo presenta nuevas valores e importancia, porque es un genera capaz de

inforrnar y tarnbien de explicar, comentar, provo car su reflexion. Es decir

E L N UE V O P E R lQ DiS ( 1 ( l 4!



que en este memento e.lvalor de nuestros texros funciona en conexion con

el periodismo en otros soportes: se ha creado una nueva dimension en el

mundo de los medics, muy positive, donde las distintas ramas se nutren

reciprocamente.

Para quienes hacemos esre Nuevo Periodismo, las fundones ensayis-

ticas de pensamientc y opinion nos caIgan can nuevas obligaciones. Por-

que para decide algo nuevo a esos hombres y mujeres pensantes que com-

pran el periodico con expectativas de encontrar explicaciones y estnnulos

a 1areflexion, lo s periodistas debemos ser den veces mas sabios que ellos.

Eso nos impone la tarea de estudiar continuamente.

POR CADA pAGnlA ESCRIT.A,

ellEN LEiDAS

Todo 10 que escribo esta precedido de enormes lecturas. Yoleo mucho por-

que estoy convencido de la importaucia de profundizar todo 1 0 que se pue-

da en el Lemasabre el que debo elaborar un texto. Vivimos en un mundo

de enorme produccion intelectual, donde se han escrito montones de li -

bros sobre todos los ternas. Escribir sin conocerlos, 0 sin siquiera saber de

su existencia, revela una acritud muy ingenua. Sicmpre hay expertos en

esos asuntos acerca de los cuales nos toea escribir, y eI valor de su trabajo

es incalculable para el nuestro.

Si vamos a hablar de fenomenos sociales, por ejemplo, debemosconstruir el enfoque de una manera amplia: la filosofia, la antropologta, la

psicologta de esc fen6meno. No podemos adentramos en el campo social

y politico sin antes leer mucho; eso es indispensable no s610 para no caer

en descubrimientos hechos por otros, sino porque la lectura previa da fuer-

za a nuestra prosa. Si un autar se siente inseguro acerca del objeto de su

trabajo, inmediatamente 51 1 escritura deja ver esa Ialta de confianza, La

Iuerza de la prosa viene de nuestra seguridad.

Personalmente creo que existe inclusive una proporcion entre la lee-

tura previa y la buena escrirura: para producir una pagina debimos haber

leido den. Ni una menos, Antes de escribir cualquiera de mis libros, lei

un os doscientos sabre cada uno de sus temas. En algun sentido, escribir es

la menor parte de nuestro trabajo.

4 2 L O S C IN C O I t N T lD O S Otl ~ t R I O O l m



aORRAR

LOS l.iMITES

El Nuevo Periodismo se desarrollo en la epoca que llamarnos posmoder-

nista, y una de sus caracteristicas ha sido borrar paulatinamente los hmi-

tes entre los generos. Su contexte de aparicion y desarrollo fue .ta crecien-

te aparicion de libros cuyos generos de pertenencia resultan diffciles de

pre cisar, ya que mezclan varios entre tapa y contratapa.

El clasico de ese nuevo fenorneno se llama Trisres t r op ico s y fue es-

crito pot eJ antropologo frances Claude Levi-Strauss. Este libro contiene en

realidad cinco libros diferentes, combinados de tal manera que solamente

despues de leerlo advertimos su complejidad y nos preguntamos que clase

de obra es. En sus paginas conviven estudios antropologicos sabre varias

tribus indigenas del Brasil con reportajes sabre las aventuras del viaje, con

un ensayo sobre las civilizaciones, con un diario personal... Otro antropo-

logo, el norteamericano Clifford Geertz, un especialista en los problemas

de la cultura moderna, publico un ensayo bajo el titulo G e n er os c o nf us o s,

la rt;f igul 'aci6n d el p en sa m ie nto s oc ia l.

Como estes textos combinadas, muchos otTOS decretaron el fin de

las fronteras entre los generos. No solo en nuestra profesion: este Ienome-

no cultural de difuminacion de los limites expresivos aparece tambien en

las fines plasticas, la rmisica y otras ramas de la actividad espiritual e in-

telectual del hombre. Sus antecedentes se rernontan a principios del siglo

xx, cuando can la aparicion del cine,pOl'

ejernplo, se ternio queesta nue-va disciplina, nacida de una nueva tecnica, terminara con otros medics de

expresion como la pintura. Sin embargo, no resulto asi. Tampoco sucedio

esc cuando surgi6 la radio y una vez mas se dijo que esta novedad terrni-

naria con todo 1 0 anterior; ni cuando la expansion masiva de los televise-

res, en la decada de 1960, desperto profecias similares e igualmente erro-

neas,

Ahara se dice 10 mismo de internet, que en mi opinion tampoco ter-

minal'S. can nuestros medias establecidos. Creo que los modes de expre-

sion humana se hac en mas y mas diversos, pero 110 por eso se liquidan en-

tre si. Al contario, creo que se apoyan. La television no termino con la

literatura, sino que a traves de una nueva modalidad de promocion le per-

mitio construir un mejor mercado.

E L N U EV O P EI U O D IS M O 4 3



En la actuahdad,la Iiteratura se mueve en dos direcciones opuestas.

Una de esras ramas pod ria merecer el nornbre de literatura de television,

ya que esta mtegrada par novelas para mere ados grandes, con fuertes .tra-

mas -l1enas de conflicto, ernocion y vioiencia-e-, que constituyen 90 por

ciento del mercado de hbros. La otra rama, mas pequena e importante, es

la literatura de creacion, reflexion y ensayo, una literatura ambiciosa cu-

yo clasico ejernplo es la novela de Thomas Mann L a m o nta 11a m d gica . Su

historia es muy debil, nada sucede en sus paginas: cucnta la vida de unas

personas encerradas en un edificio, que no se mueven. Perc, capitulo a ca-

pitulo, Mann va construycndo un ensayo sobre el tiernpo, el comports-

miento humane, la vida en el mundo contemporaneo. La historia se utili-

za arenas como un esqueIeto sabre el eual montar esta estructura de

ensayo.

En este escenario se cncuentran el Nuevo Periodismo y la litcratura

de ficcion, aunque nuestra practica profesional cotidiana nos ubique lejos

de semejantes arnbiciones, ya que debernos ocupamos de historias dadas

por los aconrecirmentos reales e inrnediatos. Pero aun con esas caractens-

ticas estamos ante un nuevo fenomeno, Iiterario y periodistico, del que te-

nemos que ser conscientes para intentar encontrar nuestro lugar, No por-

que arnenacemos a algunos de los generos periodtsticos que confluyen en

esta nueva [or111<1 de escribir sobre hechos y hombres reales utilizando las

herramientas de la literatura; igual que el cine, In radio 0 !a television, el

Nuevo Periodismo simplemente se surna como orra forma de expresion.

Perc debernos ser conscientes para no dejar de ser, precisamente, una rama

del periodismo. En America Latina, Ia idea de Gabriel Garcia Marquez con-

siste en apoyar el desarrollo del reportaje sin convertirlo en un genera lite-

rario. Hasta ahora, nos encontramos en una etapa de experimentacion y

prueba. Tenemos que esperar, tranquilamente, e l . desarrollo de este genero.

Durante rnuchos 81105 me desempene como corresponsal para una agenda

de prensa, el trabajo m as duro y diftcfl que puede tocarle en suerte a un pe-

riodista, porque se trabaja las veinticuatro horns del dia. Esa dedicacion tan

intense me enfrento a Ia falta de tiempo y canales para rnis ambiciones per-

4 4 l O S ( I ~ C O s m l D o s D E l P F . R 1 0 D I S I A



sonales como autor, Tenia que cubrir aquello que me pedian, sin poder es-

capar: en el pericdismo, como en cualquier otra profesion, hay que hacer

las casas que nos mandan,

Para solucionar este problema, es decir, para poder escribir y tam-

bien cumplir con rnis obligaciones de correspcnsal sin sentirme frustrado,

, cree conscienternente una situacion de esquizofrenia: trabaje en dos talk-

res de manera simultanea.

Escribir para una agenda de noticias es un trabajo duro, de gran ten-

sion y nerviosismo, puntuado pOl' emregas al jefe, que pide noticias cortas

POt aquello de los costas, e] tiempo y la competencia. Se hace un periodis-

mo formal y pobrc, de no mas de ochocientas palabras. Una tortura. Pero

se puede tolerar S 1 uno escoge para S 1 un nicho independiente, un espacio

para escribir aquello que excita la propia voluntad yambicion. En este otro

taller, las cosas se dicen en otro lenguaje, se enfocan bajo otra mirada, se

componen segun otros criterios.

Ast genere dos arnbitos separados: en uno escribia las paginas que

me perminan ganarme el pan, un trabajo que en ocasiones puede resultar

poco creative, muy mecanico; en el otro, me dedique a aquello que desde

mi punto de vista 10 merecia. En Africa, en Asia, en America Latina, con

esa realidad tan rica, tan colorida, cret que vaha In pena contar esa vida tan

diferente a In europea; como eso no cabia en los cables de la agenda de

prensa, mientras mis colegas se iban al bar a tomar whisky yo 1 1 1 . C encerra-

ba a elaborar notas que luego se convertinan en lihros,

Hay que juntar y guardar los materiales que nos irnportan. Todo de-be estar docurnentado: informaciones, testimonies, ideas. Un problema M-

sico de nuestro rrabajo es que desaparece a1 dta siguiente, que 10 olvidamos

pronto. En este oficio, a medida que los anos pasan nos vamos quedando

con las manos vacias. En cambio, si guardamos documentos, en el futuro

podrernos revisar ese material ast conservado y tornar la decision de hacer

un trabajo personal de excelencia.

Quiero subrayar esta idea: en nuestra profesion, el exito se basa en

mantener dos talleres. Es decir, en tener una doble VIda, viviren estado de

esquizofrenia: ser un corresponsal de agenda -0 un redactor de periodi-

co- que cumple ordcnes, y guardar, en algun pequeno Ingar del corazon

y de la mente, algo para sf, para la propia identidad, para las ambiciones

personates.

H N U EV OmlD D lH lO 4 5



Eso no significa dedicarnos mas a un taller que a otro: no hay dos

criterios, sino dos ambitos. A todo 10 que hagarnos en nuestra profesion

debemos dedi carle 1 0 mejor de nosotros, desarrollarlo de la mejor manera

posible, Cada texto, para el periodico 0 para el libra, tiene que ofrecer el

resultado de nuestro maximo esfuerzo y nuestra maxima habilidad. Noexisten divisiones en el plano de los criterios: un periodista con talento '1

arnbicion no escribe males textos. La dilerencia esta en las tecnicas: para

informar en un despacho de agenda sabre la actividad de un ministro no

haee falta poner en juego nuestra imaginacion 0 nuestros conccimientos

de fllosofta, pero para hacer Nuevo Periodismo, sf.

"AHERAS

DE ESCRIBIR

No tengo recetas fijas a tecnicas de trabajo prestablecidas porque no las

ha y en el campo de la creacion, y alii se inscribe el periodismo escriro. Es-

te trabajo, en sus manifestaciones mas arnbiciosas, requiere de una actitud

individual creativa, de las propias fonnas de contar y hacer las casas, Esa

es Ia riqueza de nuestro oficio: cada uno tiene que desarrollar sus propias

maneras de encontrar IDS ternas y las maneras de expresarlos.

En general, el camino hacia un texto es misterioso. La estructura He-

ga, ocurre: uno anda pensando como hacerla y , de repente, vislumbra una

idea, Cada caso es particular. Yonunca se como vay a escribir un libra; masbien busco la primers palabra, y cuando 1atengo escribo la primera oracion,

y cuando la tengo escribo Iasegunda, y entonces la tercera, y asi. No defi-

no previarnente una estructura a seguir para construir el texto de determi-

nada manera, Antes de sentarme no tengo Ia menor idea acerca de como

voy a encarar el texto, Por eso en ocasiones inclusive me extrana 10 que es-

cribo. Y al dia siguiente -0 en el rnismo momento- olvido 1 0 que he

puesto. Veo rnis textos como S 1 los hubiera escrito un extrano. A veces en

las entrevistas alguien me pregunta: "En su libro listed escribio esto", y yo

le pregunto: "LYoescribi eso?"

Nunca leo las cosas que escribo, y en una ocasion tampoco las es-

cribi. Me refiero a L os cin ico s n o strven p a ra e st« o fic io . EI contenido de ese

libro se acumulo durante una vlsita que hice a ltalia, invitado par una

4 6 L OS ( I ~ C O S EN TID m D E l ? f R iO DJ S T A



revista, para dar algunas conferencias. Una editora de esa publicacion,

Maria Nadotti, junto 10 que dije y publico todo en un libra, Yo 10 lei des-

puesde publicado.

Ni siquiera supe que ella iba a hacer un libra; nunca nadie me pre·

gunt6. Como di las confercncias en ingles, y luego las tradujeron al italia-

no, ellibro no existe en polaco;lo mismo sucede con otro libra de entre-

vistas, que realice can un escritor hungaro, que nunca fue publicado en mi

lengua.

Tampoco puede saberse nunca, segun un metoda general, emil es Ia

mejor forma de transmitir nuestro conocimiento de una persona, un Iugar

o un heche. (La creacion de un ambiente, la seleccion de una historia par-

ticular, una descripcion racional llena de datos? Una vez mas, se trata de

algo muy subjetivo. Tampoco aquf existe una regla general: cada uno tie-

ne su propia manera de entender, de reflextonar y de escribir, Par esc exis-

te la Iiteratura: si fuese todo igual la literatura no existirta.

En mi experiencia, cuando escribo no pienso si el texto va a ser una

novela, un reportaje 0 un ensayo =-sin mencionar que, par otra parte, hoy

todos se mezdan-, sino que reflexiono reiteradamente sabre aquello que

observe, en busca de la manera mas adecuada de describirlo.

Parto tarnbien de una advertencia: todo 1 0 que escribimos es, siem-

pre, apenas una aproximacion. E1ideal que nunca se puede alcanzar, ni si-

quiera se puede definir, Nunca sentirernos que aquello que escribimos fue

exactamente 10 que queriamos deck Siempre habra un margen de decep-

cion. En cierto senrido, todo libro es una derrota: aunque los lectores 10F consideren una obra magnffica, para un escritor un libro trae 10.derrota,

pOl'que denriende muy bien que 10 que dicen sus paginas no es exacta-

mente todo 1 0 que el pensaba expresar.

Adicionalmente, nunca se sabe por que un libro es bien recibtdo por

los lectores y por que otro, at que tambien considerarnos bien escrito, pa-

sa sin que nadie 1 0 quiera leer. Nos movemos en un ambito inseguro y mis-

tcrioso. Pero en la lucha par aproximarse a esc ideal abstracto, imposible

de definir, que es el trabajo literario, en el Nuevo Periodismo no se esco-

gen conscienternente unas estrategias, sino que se sigue cierta intuicion.

Claro que siempre padecemos el peligro de fracasar, alga que da terror al

escritor porque un libro mal escrito es una tragedia de Iaque no se puede

volvo' arras.

4 8 l O S C l* CO S f M T ! D O S D E l P £R IO O II TA



I\USTUITAS «lASES

DE i.IBROS

El primero de 11115 libros consiste en las notas periodisticas que yo enviaba

como corresponsal de agenda; eseprirner torno existe solamente en el ar-chive de la agenda. Perc cada vez que regresaba de mis viajes terua la im-

presion de que 1 0 que habra escrito en esas noticias era muy superficial,

muy pobre, muy limitado. Para reflejar todo 10que yo senna, vivta y expe-

rimentaba tuve que buscar otros medios de expresion, y ast fue como co-

mence a elaborar mis reportajes, La profunda insatisfaccion ante 1 0 que ha-

bta heche en la urgencia del trabajo de corresponsal me lanzo a buscar un

metodo mejor para narrar, un modo de superar 1aexpresividad del lengua-

je de la agenda de noticias.

Publique veintiun ntulos hasta el memento, todos escritos a mane.

No son muchas paginas porque escribo de manera sintetica: eso hace que

111isibros no sean largos. Algunos inclusive son apuntes de tipo filosofico

y psicologico, Lapic1ar ium, de los que he publicado cinco tomos en Polo-

nia, y me encuentro trabajando en el sexto. Al cornienzo, como senale, pu-

blicaba colecciones de articulos hechos previamente para medios. En cier-

to memento, los periodistas observamos que ya hemos acumulado una

buena cantidad de notas, y hacemos una seleccion de las mejores para edi-

rarlas en un soporte mas durable como es el Iibro. Pero tarnbien ha y otro

tipo de libra para] os que trabajamos en esta profesion, y es aquel que se

escribe de modo original, pensando en su concerto, su estructura, su (ons-truccion. El primer libra que hice de esta manera fue el octavo que firme,

En los volumenes de recopilacion mtente hallar un metodo que evita-

se la seleccion mccanica. :Esefue el origen de L a g ue rr a d el fu tb oL Una edito-

rial polaca me propuso publicar una coleccion can mis reportajes de guerra,

. y euando escogi los textos me quede insatisfecho con el metodo de compila-

cion: entregar chez reportajes, y punto, me parecta poea cosa; senti que debra

dar can el modo de convertir esa operacion casi irreflexiva en una estructu-

ra Pensando, se me ocurrio la posibilidad de mezclar, entre los reportajes

elegidos, un texto sabre los Iibros que no podna escribir. Halle entonces el

segundo nivel dellibro. Luego tuve la idea de incluir tambien otros libros no

escritos, e hice el tercer nivel. Fue asi como se fue construyendo capa a eapa

La gucna del jLi l lJol, que lleva varios textos escritos y no escritos,

E l N U E N m iO O l l M O 4 9



LOS CAMIHOS

DE LA IIITUICIOH

Los libros originales plantean, mucho mas aun que los volumenes de reco-

pilacion, una serie de problemas para los que no existen rcspuestas defini-

clas. Al contrario, alimentan una constante discusion porque enellos OCU-

pa un lugar importante algo tan indefinible como el gusto particular del

autor, Eso es 10 que decide: el sabor que va naciendo a su escritura. El ins-

rinto Ie dice a quien escribe: "Eso se puede". La intuici6n le dice: "No, no.

Por aqui no va la cosa". E1autor sigue sus camtnos a menudo inconscien-

ternente, p O T puro gusto. Esas sutiles elecciones son las que deciden sabre

este tipo de literatura.

No hay reglas para esta clase de trabajo y 50)0 los lectores deciden

1uego 5 1 el autor cometio un error en el camino que tome. Eso, a su vez,

deterrnina el tiempo de perrnanencia del libro. Si los lectores juzgan que el

autor cornetio algun error, el libra desaparece inmediatamente.

A veces las decisiones que torna el autor 1 0 Bevan adonde no imagi-

naba. En el caso de El Emperador, por ejemplo, no escribi la vida de Haile

Selassie. E 1 no aparece en el libro. Lo que aparece es el modo en que el po-

der cambia a los hombres: como se alteran los comportamientos del hom-

bre que entra en la pohtica. Siguiendo mi instinto , en lugar de escribir un

libro sobre Haile Selassie me ocupe de los mccanismos psicologicos detras

del poder, del funcionamiento de las instiniciones y los hombres que las

dirigen. Y fue justamente por eso que el libro ha sido traducido a veintetdiornas y se 1 0 edita constantemente en los Estados Unidos: los ejecutivos

de las grandes corporaciones norteamericanas encuentran en este libra as-

pectos de sus organizaciones, orientaciones sabre 10 que sucede en la ins-

titucion a la que pertenecen.

EI E m p e r a d o r fu e adaptado como pieza teatral y cuando Iui a su es-

treno en Londres me encoritre con 1adirectora del teatro envuelta en lagri-

mas. Le pregunte que le pasaba, y supe que lloraba porque la habian heche

renunciar a su cargo. Volvi a decirle: "Pew, Lpor que?" Y ella. me respon-

dio: "Ryszard, cuestiones de poder. Figman en tu Emperador . LPor qu e me

1 0 preguntas entonces?" El libro, en definitiva, encontr6 sus lectores a tra-

ye s de ese camino que segut por intuicion: hablar sobre los mecanisrnos

del poder, no sabre aconrecimientos ni sabre personajes.

5 0 lO l C I N CO I E N T l O O > D E L m lO OI ST A



HUSTOIUA DE

,6"EIl EHPERADOR.'

Hace casi treinta anos, en 1975, escribi El E m p e r a d o r : poco despues de la

revolucion etiope, cuando cub ria diariarnente esos eventos como corres-

ponsal de prensa. Conoci al emperador porque conoct Etiopia, viajando

constantemente desde el pais vecino en el que estaba instalado. Eso fue

central para decidirrne a encarar ellibro: conocer muy bien la realidad del

pais. Nunes comienzo un libro si no he estado familiarizado con su asun-

to durante por 10 menos unos veinte anos () si no le he dedicado unos tres

an os a trabajar en particular sabre su terna.

Por eso cuando comence con el proyecto de £1 E m p e r a d o r ya llevaba

rnucho conocimiento acumulado sobre Etiopia: habia estudiado el pais du-

rante trece 81105, habra visto al ernperador varias veces. No necesite hacer en-

trevistas especiales, En realidad, nunca en mi vida he entrevistado a alguien,

en el sentido (stricto del genero de la entrevista. No se c6mo se hace una en-

trevista. Mucha de 1 0 que escribo sabre 1 8 0 genre viene de observarla, de pres-

tar atencion a su cornportarniento, de explorar los detalles pequenos como

su cara, 0 sus ojos. Y de hablar con ella, pew no de entrevistarla.

Las personas con las que hable conocian al emperador y me conta-

ron toda su historia, y esos fueron los relates que fuego junte para hater el

libro. A diferencia de La n ech e d e T ta te lo lco , donde Ia mexicana Elena Po-

niatowska haec un catalogo de diferentes testimonies sabre diferentes mo-

mentes de esa neche, un documento de cronicas, yo construi una estruc-tura de relates. Pew no puse los nombres de quienes contaban -inclusive

cambie las miciales, para no cornprometer a nadie- porque para la genre

hablar fue muy peligroso. Nuestras conversaciones sucedieron durante la

revolucion, cuando esaspersonas vivian escondidas. Tambien yo corn el

peligro de ser descubierto durante esos encuentros, Pero asi es nuestro tra-

bajo: se corren riesgos,eso es parte del oficio.

Para dar enema de los cambios psicologicos que se preseman en El Empera-

dol', a mcdida que el pcder corrompe al hombre, el periodisrno nos ofrece

E L N U E V O P E R IO D ! > M O 5 1



herramientas con [as cuales mirar de cerca. Asi advent que, por definicion,

e1hombre que sufre los electos del poder es inocente como aquel que de

repente sufre gripe 0 tuberculosis. No podemos acusar a un hombre por

cnfermarse: es una victima. Y los politicos S011, completamente, vtctimas

de la influencia del poder.

Los hombres no nacen politicos; cuando nacen, son ninos ..Y como

nines normales van a la escuela y juegan, sin distinguirse de los demas ni-

nos. Es cuando crecen y se convierten en adultos que en cierto memento

deciden entrar en el mundo de 1 3 pohtica. Si observamos a uno de esos

hombres de cerca, veremos c6mo cambia su comportamiento, como co-

mienza a actuar de manera diferente, como Sf: transforma su vocabulario,

como adquiere nuevos modos de caminar, sentarse, mirar al otro ... Vere-

mas, en smtesis, como este hombre se convierte en un hombre diferente,

de modo tal que si alguien que 1 0 conocia desde antes 1 0 encuenrra, se pre-

gunta: "L Perc que le sucedio a este hombre?" Paso que entre en la polttica

y cambio de personalidad.

Su (mica salvacion consiste en salir del mundo de la polttica. Con el

tiempo, si cambia el gobierno y este hombre deja la sede del gobierno 0 el

parlamento, pcdra volver a su vida normal, ser un hombre comun otra vez.

Mientras habite el mundo de la politica sera un hombre artificial, un hom-

bre politico. Afuera sera alguien como los demas, que uno puede encon-

trar en una cafeteria hablando C01l los amigos, que sale a pasear can los

nietos, Sobre esto quise ocuparrne en E! Emperador ; sabre como la pohtica

construye la personalidad del hombre.

lEMGUAJE

Y ESYRUCYURA

En ese libro no existe la ficcton. Todos los hechos y las personas que alli

aparecen son reales. Mis (micas mvenciones en E 1 Emperadcr fueron ellen-

guaje y la estructura.

Ellenguaje, en particular, fue una creacion deliberada que, ademas,

me exigio investigar 1ahistoria de la lengua polaca. Quise subrayar con vo-

ces arcaicas que el autoritarismo era una forma caduca de ejercicio del po-

del', y para eso debt coristruir un vocahulario a partir del estudio de la lite-

5 2 lO S O N CO 5E NT I 0 0 I .D £L P E R IO O I S T ~



··:.:f;~~1~?~.

ratura polaca de 10$ siglos XVI Y XV]). Para escribir esc libro hice primero

otro: un diccionario de palabras antiguas, perdidas y olvidadas, especial-

mente con el fin de enfauzar que 1 3 manera autoritaria de conducir un pais

como si fuera propiedad del gobernante es, en el mundo conternporaneo,

una expresion arcaica,

La segunda decision consciente de ese Iibro fue la estructu~a sobre

1aeual construirlo. Si 1 0 publicaba tal como ocurrio, enteramente y con to-

dos sus documentos, habrtanecesitado unos cuarenta y des tomes, bastan-

te mas que las demo veinte paginas en las que quedo. Pero en semejante

extension nadic, nunca jarnas, 1 0 habnaleido. Y , 1 0 que es mas importan-

te, no habria sido, como sucede con cualquier texto, un proceso de selec-

cion. Como dije antes, s610 se puede realizar un buen articulosi se dispo-

ne de cien veces mas documentos y notas por cada pagina que vayamos a

publicar, S1tenernos veintiocho veces mas, todavia no estamos preparados.

Esc es 10 que le da Iuerza al texto: la certeza y la exactitud son su po-

der. As1, si alguien me objeta que no coloque esto 0 aquello, puedo decir-

le que descarte esa informacion conociendola, porque esa fue mi decision

para !a estructura de l libro. Yo elegi. Muy diferente es la situacion, en ter-

minos psicologicos y profesionales, de un autor que recibe esa cntica sin

conocer Ia informacion ornitida. Eso 10 pone en una posicion de debilidad

Irente al otro. Quien escribe s610 10 que tiene no es un periodista buena.

H N U E V O P E R IO D I I M O 5 3



P A R T E I V .



DOSTEOaiAS

PARA Uti FENonEHO

Nuestro mundo se globaliza cada dta mas, y cada dta mas se debate este

proceso dentro del cual vivimos. Dado que no se trata de una transforma-

don que nos deje afuera, es importante cntender en que consiste la globa-

Iizacion. Comprenderla nos permitira afrontar mejor que esta pasando en

nuestras sociedades contemporaneas.

Tal vez crecmos que la globaltzacion no es asunto nuestro, ya que las

tareas diarias e inmediatas nos ocupan tanto que no nos dejan tiempo pa-

ra pensar sobre 1 0 que succde mas alla de nuestra casa, nuestra ciudad 0

nuestro pais. Sin embargo, otras personas tienen tiempo para esas reflexio-

ncs y ternan decisiones que ciertamente nos afectan a todos.

Dos teorias principales se ocupan del Ienomeno de 1a globalization.

Una sostiene que la globalizacion no representa algo nuevo bajo cl sol; la

otra, que es el mas trascendente Ienomeno reciente en nuestras sociedades.

La primera teorta, perteneciente a la escuela historica, sostiene que

la globalization comenz6 en los mismos origenes de nuestra his to ria ,

cuando elnombre se pregunto que habta m as alla dellimite de su mirada.

A!. caminar por la tierra empezo a cornprender que ellugar y L a sociedad

donde vivia cran solamente una parte de una totalidad mayor. As! quiso

avanzar sabre aquellos territories y seres que estaban fuera de su alcance

inmediato.

Segun Ia escuela historica, la globalization constituye una parte na-

tural deb sociedad humana. Sus primeros representantes fueron los grit-

gos y su segunda ola importante sucedio can los viajes de descubrimiento

que ernprendio Cristobal Colon, cuando Europa Sf expandio mas alla de.

sus fronteras e inaugur6 los quinientos anos de la aventura colonial.

Vale la pena mencionar, si hablamos sobre interes en el planeta, queIa civilizacion europea siempre se ha interesado en el mundo en mayor me-

dida que otras, Otras civilizaciones centraban su interes en ellas mismas,

L A G lO B A U ZW O N 5 7



carectan de ambicion par conocer 1 0 que se hallaba Iuera de sus Ironteras.

La civilizacion china, por ejernplo, consideraba que 3U mundo conocido

constituta el centro de la Tierra y que nada exisna mas a n a . En miles de

anos las civilizaciones africanas no construyeron lin solo barco: nunca les

intereso 10 que sucedia Iuera de su s fronteras. Solamente Ia civilizacion Cll-

rope a desarrollo este interes y estas arnbiciones globales. Los viajes de Co-

Ion son una confirmaclon de este heche.

La otra importante escuela de pensarniento 50b1"e Ia globalization,

que sostiene que se trata de un fenorneno nuevo en la historia humana, se

basa en rres argumentaciones:

1) La globalizaci()n como fenomeno se cornenzo a debatir reciente-

mente cuando 1 0 1 Guerra Frta llego a su fin. Esa division, que partie at mun-

do en Occidcnte y Oriente, se extendio durante 1a mitad del siglo )1.,)(, des-

de el final de la segundo. Guerra Mundial hasta principios de la decada de

1990; es en esc momento, cuando esa particion mundial desaparece, cuan-

do la totalidad del globo pudo comenzar a pensarse. El mismo concepto

tiene origen en esc periodo: la palabra globalizacion fue introducida a fi-

nales de Ia decada de 1980 par el sociologo britanico Roland Robertson, el

primero en urilizar el termino en sentido moderno.

2) La revolucion electronica liquido des obstaculos que impedian el

camino hacia eSft proceso de globalizacion: el espacio y el tiernpo. Supe-

rados estos dos escollos, se abrio ante los hombres Ia posibilidad de cornu-

nicarse globalmente. As! fue como en el transcurso de los ultimos den

anos la familia humana rue pasando por instancias como la sociedad dernasas hasta llegar a esta sociedad global 0 planetaria.

3) La victoria de las vertientes neoliberales dentro del sistema capi-

talista resulto fundamental para e 1 proceso. El neoliberalisrno tiene por

fundamento la proyeccion de las reyes de mercado sobre todos los aspec~

tos de nucstra vida, de 1 0 cual se puede seguir que In Iibertad de comercio

no implica otra cosa que el fin de todas las fronteras. Asi es como el Jibe-

ralismo contribuyo a que pudiera Iuncionar este sistema global.

Esas tres condiciones perrniten que los defensorcs de esta teoria con-

cluyan que Ia globalizacion es un fen6meno nuevo, can una antiguedad de

unos diez anos, del que nos encontrarnos en sus albores, Todavta ni siquie-

ra entendemos l11uy bien en que direccion nos Ileva este carnbio global ni

podemos min definir este pericdo de transicion en el que vivimos.

5 8 tO I C l N C f I S E NT W O S D E l P f R l O D lH A



un TERNUgO

MAiUPUI.ABI.E

Mas alla de esras caracterizaciones, personalmente ereo que 1 0 mas impor-

tame alrededor de este fenomeno es distinguir las dos formas en que existe:

como proceso y como ideologta. Saber discriminar el modo en que se ha-

bla de globalizacion es muy importante, ya que se suck manipular rnucho

este termino.

Ciertos procesos revisten un caracter global, como par ejemplo el

desarrollo de nuevas tecnologtas, las forrnas de comunicacicu social 0 el

funcionamiento de 1a econorrna. En esos y orros aspectos varnos a seguir,

indudablemente, en esta direccion. Sin embargo, el termino globalizacion

se ernplea tarnbien como ideologia, bajo e l aspecto de una formula magics

para resolver en el futuro todos los problemas de los seres humanos que

habitarnos cste planeta. Se dice que no habra mas sufrimiento por hambre,

pobreza 0 desigualdad porque todos nuesrros problemas se resolveran f d -

cilmente a medida que se vaya fortaleciendo la globalizaci()n.

Hace unos rneses discuti sobre esto con el politologo norteamerlcano

Francis Fukuyarna. Me extrano s1..1manera de pensar: con toda seguridad

y enfatica certeza sostuvo que los problemas que afligen a este mundo se

pueden resolver Iacilmente con la globalizacion. E sa es la rnanera en que

1a globalizacion se utiliza como una ideologia: construyendola como nueva

utopia positive, que anula cualquier otra posibilldad de pensar en otro orden

mas humane para las sociedades de este mundo.Sin embargo, la globalizacion es un Ienomeno contradictorio, q u e

muestra dos caras distintas: es un rio de integracion de toda la tecnologia,

del mundo financiero, de los medios de comunicacion, pero simultanea-

mente es otro rio en direccion opuesta, que lleva a la desintegracion con

conflictos etnicos, can ambiciones regionales, con tendencies particulates,

en una gran corriente que vive y se desarrolla en contra de la misma glo-

balizacion. POY el memento sabemos que algo esta pasando y tenernos una

nueva conciencia de 10 global en ternas como el agua y la contaminacion;

no obstante, las fuerzas que participan en este proceso no h , U 1 hallado aun

105 limites de sus contornos; todavia son Ilotantes, indeftnidas, irnprecisas.

Qucda pendiente 1 3 lucha par utilizar este Ienomeno para nuestros intere-

ses y fines.

u G l O B A U l A C H i u 5 9



EL E5YADO

EM:LA NIRA

E1desarrollo de este proceso globalizaclor pone enpeligro la organization

basica de la vida pohtica moderns: el Estado. Todas las sociedades contern-

poraneas se articulan a partir de Estados: en estes momentos hay unos dos-

cientos, de los wales treinta y cuatro tienen rnenos de medic millen de ha-

bitantes, e l tamano de una pequeria ciudad e1.1ropea.Se trata de Estados

neocoloniales, practicamente, que existen solamente con la ayuda finan-

ciera de otros Estados y otros organtsrnos financieros_Esa es la tendencia

del mundo contemporaneo: la de multiplicar estes Estados debiles,

Ala vez, la globalization profundiza las desigualdades entre Esta-

des, ya que pone en crisis a los del llarnado Tercer Mundo. S610 las socie-

clades economicamente fuertes pueden resistir la globalizacion, ya sea porel tipo de instituciones que poseen a por sus tradiciones pohticas. Los

otros Estados -que son, ni mas ni menos, los de America Latina, los de

Africa, los de Europa Oriental y los de Asia- se yen afectados par la glo-

balizacion.

La glcbaltzaciou debilita al EstacIo moderno a traves de un movi-

miento cloble: desde arriba y desde abajo. Desde arriba, el Estado sufre 105

ernbates de las corporaciones y los organismos intemacionales, cuya fuer-

za aumenta can este proceso, como resultado de lo cual cada vez mas las

decisiones fundarnentales sabre el futuro de una sociedad se taman fuera

del Estado que 1 3 organize. Esas decisiones =-todas globules, tod.as abstrac-

t35- se generan en instituciones intemacionales que, para mayor grave~

dad, no han side elegidas dernocraticamerite: ninguno de riosotros ha par-

ticipado en Ia seleccion de las autoridades del Banco Mundial 0 del Fonda

Monetario Internacional. Enfrentamos as! una especie de autoritarismo

oculto, que produce como efecto colateral una grave enferrnedad de la de-

mocracia modema: el creciente desinteres de las masas en la politica. La

cantidad de votantes ~no hablo de un pais en particular sino del mundo

en general- decrece cada vez mas: las personas no creen ya que puedan

influir sobre 10 que pasa en sus gobiernos, De este modo entrau en crisis

las democracies de los Estados debiles.

Si los sistemas totalitarios europeos se basaban sabre la organizad6n

de rnasas para apoyar sus principios fundarnentales, este sistema autorita-

6 D , l O S ON{ l ) l E N m O S D E l P E R I O D I H A



rio dernocratico Iunciona al reves, en base a1 total desinteres de las masas.

Cada quien puede hacer 10 que quieta, bajo I s . condicion de que no se in-

terese en la politica. Con un Estado debihtado de esta manera, sabre nues-

tras vidas influyenlas instituciones que estan por encima de los Estados y

manejan este mundo: organismos como el Banco Mundial, pero principal-

mente las grandes corporaciones internacionales. Al mismo tiempo, el Es-

tado sufre un movimiento de desesrabilizacion desde abajo. Existen fuerzas

que trabajan can el objetivo de derribarlo: 1 .05 divers os tipos de nacionalis-

mo, regionalismo, xenofobia, racismo y fundarnentalismo.

Ast presionado desde arriba y desdc abajo, e1 Estado se va transfer-

mando en una mstitucion simbolica, como las banderas y los himnos, can

progresivamente menos poder,

LA PRnVATIZACIOIM

DE LA YIOI.EMC;A

~Como llegamos a este escenario donde el emblerna de la organizacion de

nuestras sociedades mcdernas sufre la corrosion de distintas fuerzas, y sus

debilidades se revelan crecientes? Adcmas de las raZOl1CS poliricas y econo-

micas ya citadas, existe una causa fundamental que debemos considerar: el

Estado perdio el monopolio de Ia violencia.

La autoridad del Estado moderno se apoyaba sobre esemonopolio

que represcntahan sus fuerzas armadas, su pollcta, sus instituciones de co-rreccion, su armamento. Ahora, en este nuevo mundo, se multiplican las

fuerzas privadas, que ternan la forma de organizaciones criminales como.

el narcotrafico y el lavado de dinero sucio; de instituciones de seguridad

privada, que incluyen todo tipo de guardaespaldas; de mercenaries a dis"

posicion para las guerras de otros; de movimientos guerrilleros casi priva-

des (como sucede en las guerras africanas) 1 que disponcn de territories y

financiamiento propio, producto de las materias primas de esos territories

ocupados, que se pueden mover sin censura por internet y que Iuncionan

de modo independiente, como nuevas fuerzas sociales de violencia sobre

los que nadie tiene control.

La crecienteprivatizacion de nuestro mundo ha privado al Estado

del monopolio de In violencia y ha generado mecanismos independientes

L A G i O B A L l l A C 1 0 N 6 1



para su ejerdcio. Y estas instituciones privadas tarnbien son glob ales, El

mercado de bienes y servicios no ostcnta 1 0 1 exclusividad de la globaliza-

cion, sino que cste fenomcno alcanza perfectamente a la coercion, la vio-

Iencia yla inseguridad social.

BUROCRACIAS

GLOBAILES

Can tantas fuerzas armadas y de seguridad privadas, con tantos delincuen-

tes organizados nacional e internacionalmente =-rodos mecanismos fuera

del control del Estado=-, los gobiernos del rnundo conternporaneo pierden

poder. Como consecuencia de esta perdido, el poder de los dictadores y o .

no tiene posibilidad de existir,

Sin eI monopolio de la violencia en manos del Estado, los dictadores

son un caso del pasado. Entrarnos, pues, en una tendencia a la democratiza-

cion en todo el mundo, aunque muchas veces se trate apenas de una demo-

cracia proclamada, En rodo case, por el memento no existen condiciones

para que gohiernen dictadores, autoridades militares 0 civiles 0 represenran-

tes de partidos (micas: esa epoca ya termino, 0 esta por terminal'. Haec mu-

chos anos ya que no aParece un dictador nuevo en nuestro planeta, y cuan-

do surgen suelen.desaparecer, como prueba el ejemplo de los Balcanes.

Nos hallam os ante un Ienorneno politico historico que pone el po-

der en manes de una clase burocratica interuacional. Estes nuevas gober-nantes son gente agil, mny bien vestida, amable y sonriente como cortes-

ponde para aparecer en la television. Salvo excepcioues, esos son algunos

de los criterios de liderazgo en nuestro tiempo. No haec falta mas porque,

con el Estado en crisis luego de doscientos anos como forma de 'gobiemo

dominante, ahora nos gobiema otro tipo de poder cuyos centres se crean

y crecen fuera de las fronteras nacionales,

Ya nadie quiere ser jefe de Estado porque esa Figura retiene muy po-

ca luerza: el verdadero poder contemporaneo pertenece a los grandes gru~

pas financieros, a las gran des organizaciones multimedia, a las grandes ins-

tituciones internacionales. Desdenando las Ironteras de las naciones, estes

nucleos gobieman nuestro planeta con rnecanismos que profundizan aun

mas la debilidad de los Estados.

6 2 l O S C I N C O I E N T I O O I !lH P E R ! O O I H A



FRONTERA:

UMA PAIlABRA DEL PASADO

Frontera es una palabra 111U) ' arnplia: tenernos fronteras psicologicas, de ra-

za, de idioma. Y tarnbien, clare, tenernos las Ironteras de los Estados, que a

su vez presentan numerosas variedades. Frontera era generalmenre una li-

nea trazada para defender la identidad de un Estado 0 una civllizacion: por

ejernplo, el Imperio romano tenia sus lrmites, que dividfan el territorio en

el mundo propio y el mundo de los barbaros. Pero cuando hoy hablamos de

Irontera, el termino ya no tiene Ia utilidad que tenia para los romanos.

Varias razones explican que, en este mundo global, el termino se

perciba como algo del pasado. La primera es la revolucion tecnologica que

gracias a las comunicaciones de redes, el desarrollo de internet y la masi-

vidad del e-mail . logro superar todaslas frcnteras. La segunda son los flu-jos financieros que atraviesan el mundo. L a tercera, los grandes movimien-

lOS migratorios encarnados por aquellos seres humanos que dejan sus

tierras y rnarchan por necesidad a otros lugares mejor desarrollados, Este

proceso, POf el memento, no tiene otra solucion.

Pero tarnhien han cambiadolas caractensticas de las fronteras que si-

, guen existiendo como tales. Por ejemplo, en Europa la frontera entre el viejo

campo comunista y el occidental soha ser muy estricta, pero ahorase ha (on-

virtido en un escenario flexible de intensa actividad. Ysi viajamos por Africa,

basta ofrecer veinte dolares al guardia de cualquier Irontera para obtener 1a

visa automaticamente, algo que antes resultaba muy dilicil de conseguir.

Es decir que, cuando no desaparecio, el concepto de frontera se asi-

milo a 1 de negocio. Las l1neas que se trazan ac(Ualn~ente corresponden al

comercio, regulan el intercambio, 10 que da un nuevo Significado al anti-

guo terrnlno. La tendencia probablemenre sea que Ia frontera se vaya trans-

Iormando, con el correr de unos anos, en un hecho simholico.

DI:SPUI:S DEL

i I DE SEPTUU''tBRE

Perc acaso el interroganre principal que se nos presenta cuando hablamos

de este nuevo mundo global corresponda al escenario que se perfila des-

L A G L O S A U Z A C I . O N 6 3



pues de lOS ataques del 11 de sepriembre de 20CH a 1(,)5Estados Unidos.

Quisiera hater una breve inrroduccion antes de abordar el tenia, ya que en

mi opinion los nuevos problemas que enfrentamos hunden sus raices en el

fin de la Guerra Fda,

Tras el fin de este enfrentarniento entre el sistema de dicraduras y el

sistema democratico, aparecio la teorta que hizo famoso a francis Fukuya-

rna, sintetizada en su ensayo E l fin d e la h isto ria , Si In historia fue la lucha

entre las dictaduras y las dernocracias, ahora que unas cayeron y otras triun-

fawn nada mas habna que hacer, segun el politologo norteamericano. E1

resto de la historia humana sena bastante aburrido. Can esa base, la cul-

tura y la filosofta nnmdiales de la decada de 1990 dieron lugar a distintas

visiones acerca dela vida como entretenimiento: terminada la historia -es

decir, terminados los conflictos-s- no queda sino consume y diversion,

Los medics sirvcn a este principia, Un reconocido especialista en co-

municacion norteamericano, Neil Postman, publico Diver t i r se h aS le t m o ri r:

e 1 d iscurso pub l ico en la e ra d e ! show-bus iness , un l ibro sobre el abundante

entretenirniento que tenernos, y por que nos va a rnatar de risa, Diez anos

scguidos de desarrollo economico en centres dave del capualismo mun-

dial producen una enorme cantidad de bienes que se tienen que vender;

para eso, es necesario que el consume crezca, y el consumismo tranquilo

requiere entretcnimiento.

Pero lucia el final de 1 0 1 decada una nueva teorta sa116 a polemizar

con las nociones de Fukuyama y sus descendientes teoricos. Se trata de

la teorta de otro politologo norteamericano, Samuel Huntington, segun lacual la historia no puede terrninar, porque se hace con los seres human os,

Sin embargo, tampoco sera como la conocimoshasta la Guerra Fna: esta

nueva historia prcsentara otros conflictos, que no van a ser entre Estados

sino entre las ocho civilizaciones que, segun este autor, cxisten en el

mundo:

Debemos recordar que esta vision de la historia coneje en las civil i-

zaciones no es nueva. La desarrollo en el siglo xx el britanico Arnold Toyn-

bee en los tomos de su [am050 E stu d io d e la his tor ia . EI postulo que el re-

lato de lo~ acontecimientos de las sociedades no puede articularse dentro

de las naciones sino en marcos mas amplios: las diferentes civilizaciones.

Segun Toynbec, en la historia de la humanidad existieron rreinta y seis; se-

gun Huntington, actualmente conviven ocho.

6 4 l O I C IN C O ~ E NT 1D O I D H P H I O D I S T A



En la nueva situacion teorica que este autor postula, en Lalucha de

las civihzaciones tienen maxima importancia dos de ellas, porque se resis-

ten a someterse 0 . 1 sistema de 1 0 . civilizacion norteamericana: se trata de la

china y Ia musulmana, que presentan ciertas caracterfsticas por las cuales

los valores de Lasociedad norteamericana no pueden penetrarlas,

Ademas, (SLaS civilizaciones influyen en la existencia Iutura de la

sociedad norteamericana, cada una por una razon crucial. En el caso de

China, porque constituye 1a nacion mas grande y dinamica del mundo: es

tan poderosa dernografica y geograficamenre, tan arraigados se encuentran

sus valores de organizacion de trabajo y de progreso, que representa un pe-

ligro potencial para los Estados Unidos. La civilizacion musulmana, par su

pane, es peligrosa porque controla el 90 por demo del petroleo del mun-

do: entrar en conflicto can esta civilizacion implica, para la civilization

norteamericana, arriesgar sus fuentes externas de abastccuniento de petro-

leo )', par endc, ponerse en peligro.

Por ultimo, el mundo posterior al Ll de septiembre de 2001 puede

verse tambien a traves de una tercera teona, que pertenece al norteameri-

cano Joseph Nyc vamos bacia un mundo que repite, en dena mcdida, la

historia de Ia Roma antigua. Segun Nyc, vivimos en una nueva bipolaridad,

donde se oponen la nueva Rorna, encerrada dentro de sus hmites, y los bar-

baros. Perc, por cierto, este debate es tan vivo que cada rnes aparecen en el

mundo varios libros nuevas sabre la globalizaci6n; ya veran ustedes que

teona prefieren escoger, para 5U propio consume, a fin de entender nues-

tro tiempo.

Hay un aspecto de escala del pensamiento humano que, creo, conviene in-

corporar al debate sobrela globalization. Durante miles de anos la mente

humana se Iue conformando para resultar eftcaz en mundos chicos: vivla-

mas en comunidades y tribus muy pequenas, de. treinta 0 cincuenta perso-

nas, segun nos senalan los descubrimientos arqueologtcos. Era un mundo

de pequenas comunidades que se movian en busqueda de comida, tratan-

do de sobrcvivir, los vinculos se limitaban a la propia familia 0 [a tribu y

sus vecinos proximos. El hombre erda conocer todo el mundo porque co-

L A G L O BA U lA C lO N 6 5



nocia su comunidad; ignoraba que exisnan otras sociedades y moria can la

conviccion de que conocia a' toda la gente.

As! se creo la estructura de nuestra lmaginacion. Y de pronto, en los

ultirnos trcinta anos una avalancha de informacion, de imagenes, de da-

tos atac6 a nuestra mentalidad, que no pudo absorber y procesar tanto.

POf eso nos resulta 11111y problernatico abarcar los pensamientos globales.

Pero lamentalidad debe cambiar can la historia. Ya nadieconstruye calc-

drales, por ejemplo, porque representaban una idea de la imaginacion co-

mo campo ilimitado, que tuvo una determinacion historica y ha perdido

Sl1 vigencia; tampoco se compone musica como Ia del Medievo porgue

hoy nuestra irnagmacion es diferente a Ia que ternan los pueblos de ese

memento.

Yhoy este Ienomeno cambianre que es la imaginacion tiene que cam-

biar de escala, pasar del mundo chico al mundo grande. E1gran esfuerzo

que eso requiere no va a cumplirse de un dta al siguieute. FIe aqui el pro-

blema con que chocamos en la actualidad: no somos capaces de pensar en

esas escalas globales y planetarias, pero vivirnos en un mundo muy diversi-

Iicado, complicado e inestable donde facilmente nuestras cosas pueden

camhiar como consecuencia de hechos que no dependen de nosotros.

El hombre sabe que no riene influencia sobre las casas grandcs; se Ii-

mira a las pequenas porque entiende que las puede dornmar. Esa tenden-

cia a lirnitar el pensarniento es un simbolo de nuesrra incapacidad para

cornprender el mundo en que: vivimos, un mundo ya globalizado. Pensa-

mos que vivimos en una pequena aldea, en una calle breve, en una casa.En esos tarnanos se mueve nuestra irnaginacion. Esta es la principal de las

contradicciones de Ia mente humana.

to. LOCAll~ 1.0 GLOBAL

Y Ell PfifUGDIStiG

Como periodistas, la tension entre 1 0 local y 1 0 global nos toea particular-

mente. Para aquellos que trabajan en el centro del mundo, todo 1 0 que alh

sucede tiene autornaticamente valor central por sf mismo. Pew para los

que trabajarnos en la gran periferia es l 1 1 u y importante cntender que debe-

mos buscar 1 0 universal en cualquier tema, aquello que revela el mundo

6 6 l O S C iN C O S E U T lO O S D E L P E R lO D f S T A



entero en una gota de agua. Porque una gota de agua contiene al mundo,

pero hay que saber encontrar el mundo en una gota de agua.

Cada vez que nos proponemos escribir acerca de un tcma, debemos

pregunt:arnos que tiene de universal: cual metaiora, sfmbolo 0 signo que

nos permita pasar de 10 pequeno a 10 grande. Debemos hacer una rellexion

porque 5610 S1 cncontramos estc vinculo, este pasaje entre 10 local y 10 uni-

versal, nuestro texto tendra peso y valor. Solo <lsiel lector descubrira en

nuestro texto, junto a Ia historia concreta, un mensaje universal, una pis-

t< 1 que le ayude a descifrar las leyes del mundo.

LPor que algunos textos pucden vivir cien 31105 y otros textos rnue-

ren al ella siguiente de su publicacion? Por una diferencia capital: los rex-

tos que viven cien anos son aquellos en los que el autor mostro, a traves

de un pequeno detalle, la dimension universal, cuya grandeza dura. Los

textos que carecen de este vinculo desaparecen.

Conviene tener presente este requisite de universalidad tarnbien ala

hora de recoger el material, rnientras investigamos nuestros tcma. Es una

cuestion de talento, de intuicion, pero tarnbien de arnplitud de conciencia,

de sabiduria. Y, sobre todo, se nata de! secreta para que unos textos per-

duren y otros se pierdan en el olvido.

L A ~ lO B W lA ( I O N 6 7

cinco sentidos del periodista kapuscinski

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