1972 año santo de pastoral - diócesis de san juan de los ... · oremos al pastor de pastores, por...

123456789012345678901234567890121234567890121234567890123456789012345678901212345678901212345678901234567890123456789012123456789012123456789012345678901234567890121234567890121234567890123456789012345678901212345678901212345678901234567890123456789012123456789012123456789012345678901234567890121234567890121234567890123456789012345678901212345678901212345678901234567890123456789012123456789012123456789012345678901234567890121234567890121234567890123456789012345678901212345678901212345678901234567890123456789012123456789012

San Juan de los Lagos, Jal. Agosto de 2002 Nº 241

PastoralPastoralPastoralPastoralPastoralBoletín de

Revista Diocesana Mensual

1985

1989

1972

1982

1995

Jubileo 20002002

Año Santo

CELEBRACIÓN DE LA

Centro Diocesano de PastoralMorelos 34.Apartado Postal 21Tel. (3) 785-0020 Fax. (3) 785-0171Correo-E: [email protected] San Juan de los Lagos, Jal.

Responsable:Equipo Diocesano de Pastoral

Diócesis de San Juan de los Lagos.

XI ASAMBLEA DIOCESANA DE PASTORAL:

Alocución del Sr. Obispo .............................................................................................................. 1

Crónica de la XI Asamblea Diocesana de Pastoral .................................................................... 3

Reseña de nuestro proceso de Planeación Pastoral .................................................................. 5

Reunión del Consejo Diocesano de Pastoral ........................................................................... 20

Mesas redondas por decanatos y equipos diocesanos ............................................................ 21

Ponencia: El Fenómeno Urbano................................................................................................. 22

Ponencia El Fenómeno Urbano II. ............................................................................................. 32

Ponencia: Eclesiología a la Luz de los últimos Documentos de la Iglesia ........................... 33

Reflexiones por mesas redondas ................................................................................................ 39

Respuestas de Mons. Martín Rábago ......................................................................................... 40

Lectio Divina: Atenas, “Una ciudad llena de ídolos” ............................................................. 46

Acuerdos Finales .......................................................................................................................... 51

2 NUEVOS OBISPOS ALTEÑOS:

Circular del Sr. Obispo................................................................................................................ 52

Nombramiento del Sr. Obispo José María de la Torre Martín ............................................... 53

Dos Nuevos Obispos Alteños ..................................................................................................... 54

Brindis en la convivencia con el Presbiterio de San Juan ...................................................... 57

Misa de agradecimiento y despedida ........................................................................................ 58

Crónica de la elección y Consagración Episcopal de los Nuevos Obispos ......................... 60

Ramillete Espiritual para Mons. José Ma. de la Torre ............................................................. 68

Homilía del Sr. Cardenal Juan Sandoval ................................................................................... 69

Mensaje Final del Sr. Nuncio Giusepe Bertello ....................................................................... 73

Alocución Final de Mons. José María de la Torre Martín ....................................................... 74

El Obispo tiene una triple manera de Servir ............................................................................ 76

Los Escudos de los nuevos Obispos Auxiliares ........................................................................ 80

25 Obispos nacidos en la Región de Los Altos. ....................................................................... 82

VARIOS:

Onomásticos, Defunciones y Aniversarios de Ordenación de Agosto ............................ 84

Agenda de Agosto .............................................................................................Contraportada

XI Asamblea Diocesana

pág. 1Bol-241

Alocución del Sr. ObispoEEEEENNNNN ELELELELEL INICIOINICIOINICIOINICIOINICIO DEDEDEDEDE LALALALALA XI A XI A XI A XI A XI ASAMBLEASAMBLEASAMBLEASAMBLEASAMBLEA D D D D DIOCESANAIOCESANAIOCESANAIOCESANAIOCESANA DEDEDEDEDE P P P P PASTORALASTORALASTORALASTORALASTORAL

1.- SALUDO Y BIENVENIDA1.- SALUDO Y BIENVENIDA1.- SALUDO Y BIENVENIDA1.- SALUDO Y BIENVENIDA1.- SALUDO Y BIENVENIDAIniciamos hoy nuestra XI Asamblea Diocesana de

Pastoral, en la que nos detendremos a reflexionarsobre nuestro proceso de Planeación hacia el IV PlanDiocesano de Pastoral. En este proceso descubrimoslogros y dificultades para valorar aquéllos y afrontaréstas con el propósito de encaminarnos con mayorseguridad, guiados por el Señor de la historia, haciauna verdadera nueva evangelización, poniendo en elcentro a Jesucristo, “el mismo ayer, hoy y siempre”(Heb 13,8).

Sean bienvenidos hermanas y hermanos laicos,hermanas y hermanos religiosos, que con ejemplarentrega han colaborado para hacer más patente el reinode Dios en la historia de nuestra diócesis. Bienvenidosjóvenes seminaristas que, siguiendo un exigente lla-mado, quieren ser los sacerdotes del tercer milenio quenecesita nuestra Iglesia particular para lograr un en-cuentro cada vez más profundo con Jesucristo, el únicosalvador. Bienvenidos hermanos sacerdotes, ejércitoaudaz de próvidos colaboradores del Obispo diocesanoen la singular y ardua tarea de hacer presente a Cristo

cabeza, pastor y esposo de la Iglesia, buscando laperfecta coherencia entre la Palabra que predicamos yel testimonio de nuestra vida.

2.- 30 AÑOS DE VIDA2.- 30 AÑOS DE VIDA2.- 30 AÑOS DE VIDA2.- 30 AÑOS DE VIDA2.- 30 AÑOS DE VIDADIOCESANADIOCESANADIOCESANADIOCESANADIOCESANA

El próximo día 29 celebraremos 30 años de laerección canónica de esta Iglesia particular de SanJuan de los Lagos. En esta Asamblea daremos graciasa Dios porque en su admirable providencia nos hapermitido crecer cuantitativa y cualitativamente, dela mano de María la Virgen fiel, que ablanda loscorazones como lluvia que empapa la tierra, para queéstos se abran a la siembra del Evangelio y a sutiempo produzcan frutos maduros de salvación.

Recordamos agradecidos a los señores Obisposdon Francisco Javier Nuño Guerrero, don José LópezLara y don José Trinidad Sepúlveda Ruiz-Velasco,quienes con su abnegado pastoreo han conducido aesta porción de la Iglesia hacia una vida más intensa-mente cristiana y han dejado estructuras sólidas sobrelas que ha sido posible construir la comunión eclesial.

Entre tantos signos de madurez de esta jovenIglesia diocesana, el día 19 del presente hemos reci-bido la alegre noticia de que uno de nuestros herma-nos presbíteros ha sido nombrado Obispo Auxiliar deGuadalajara, por el Papa Juan Pablo II. Valoramos elaporte que en 22 años de ministerio sacerdotal Mon-señor José María de la Torre Martín ha hecho ennuestras tierras. Pedimos a Dios que en la nuevaencomienda apostólica el Padre Chema siga siendopastor fecundo y visionario para el bien de Guadala-jara y de la Iglesia universal. Oremos al Pastor depastores, por intercesión de la dulce Virgen de SanJuan, para que así sea.

3.- DIOCESIS MISIONERA3.- DIOCESIS MISIONERA3.- DIOCESIS MISIONERA3.- DIOCESIS MISIONERA3.- DIOCESIS MISIONERAAl calor de la Eucaristía y del regazo maternal de

María, han madurado en la fe y en la vocaciónmuchos hombres y mujeres nacidos en esta Diócesisy que ahora se encuentran en tierras de misión, dandogratis lo que gratis han recibido; compartiendo el


pág. 2 Bol-241

mayúsculas.Hay muchos hermanos nuestros que sufren dolores

en el cuerpo, limitaciones en su mente, esclavitud acausa de adicciones diversas, carencia de los bienesmás elementales para llevar una vida digna, falta deoportunidades en el campo laboral y educativo, super-ficialidad en la fe, vacío de valores y ausencia de unafamilia que les brinde razones para vivir y para seguirluchando.

Todos ellos han de ser destinatarios privilegiadosde nuestra caridad pastoral; o tal vez algunos de ellosestán siendo los más eficientes evangelizadores con suelocuente testimonio silencioso....

5.- AÑO DE LA SANTIDAD5.- AÑO DE LA SANTIDAD5.- AÑO DE LA SANTIDAD5.- AÑO DE LA SANTIDAD5.- AÑO DE LA SANTIDADLa próxima visita pastoral del Papa a México tiene

como fin principal la canonización de Juan Diego y labeatificación de los mártires de Cajonos. Nos alegraenormemente el que un indígena de estas tierras mexi-canas sea declarado santo por el Sumo Pontífice y seapuesto como modelo de virtudes. Juanito, el máspequeño de los hijos, elegido como íntimo confidentede la Madre “del verdaderísimo Dios por quien sevive” (Nican Mopohua), será invocado en toda laIglesia como intercesor ante Dios.

El Santo Padre, en su Carta Apostólica “NovoMillennio Ineunte” (Nos. 30 y 31) nos dice que lasantidad no es privilegio de algunos, sino tarea de todoslos bautizados. Somos hijos de un Padre santo; herede-ros en la fe de santos mártires como Pedro, Toribio,Tranquilino, Sabás, Román y Julio. Somos impulsadospor la fuerza del Espíritu Santo a llevar el fermentotransformador del Evangelio a todas las personas y atodos los lugares.

Invito a todos los participantes en esta Asamblea ya todas las comunidades aquí representadas a tomar enserio esta exigente llamada a la santidad, que es voca-ción fundamental y universal.

Declaro inaugurado en esta Diócesis de San Juan delos Lagos el año de la santidad, que ha de inspirarnuestra vivencia cotidiana de la fe, nuestros programaspastorales actuales y los que nos propongamos para elaño 2002 – 2003.

La Virgen Santa María, Nuestra Señora de SanJuan, nos enseñe a ser dóciles al Espíritu y fielesservidores de la voluntad de Dios.

gozo del Evangelio con quienes tienen hambre defelicidad plena, que sólo se sacia con las Palabras devida eterna.

Llegue hasta ellos el fruto de nuestra oración ysacrificio, para que no desmayen ni se den por venci-dos aunque tengan que afrontar carencias, rechazo oindiferencia.

Que su ejemplo nos impulse a continuar abiertos ala necesidad de Evangelio que experimentan muchasregiones del mundo entero. Que los frutos del XCONIAM, recientemente celebrado en nuestra Dióce-sis, se traduzcan pronto en presencia juvenil, alegre yactiva de muchos misioneros enviados desde nuestraDiócesis.

Que Jesucristo, el enviado del Padre, sostenga elpropósito de los padres José Ramón y Alberto, quienesdentro de dos meses comenzarán su preparación inme-diata antes de partir a la misión en la Diócesis de Laï,en el continente africano.

4.- EL PAPA, EJEMPLO DE ENTREGA4.- EL PAPA, EJEMPLO DE ENTREGA4.- EL PAPA, EJEMPLO DE ENTREGA4.- EL PAPA, EJEMPLO DE ENTREGA4.- EL PAPA, EJEMPLO DE ENTREGAHASTA EL ÚLTIMO ALIENTOHASTA EL ÚLTIMO ALIENTOHASTA EL ÚLTIMO ALIENTOHASTA EL ÚLTIMO ALIENTOHASTA EL ÚLTIMO ALIENTO

Dentro de un mes y escasos días por quinta ocasiónlos mexicanos gozaremos nuevamente de la presenciadel Papa Juan Pablo II, quien nos fortalece en la fe consus enseñanzas y nos impulsa a la lucha con su admi-rable ejemplo.

Despierta una cierta ternura y filial compasión elver al anciano Vicario de Cristo moverse con fatiga yexpresarse con dificultad; pero siempre con la firmevoluntad y el entusiasta empeño de que los hombres ymujeres de todo el mundo le abramos las puertas alRedentor.

El Sucesor de Pedro, parece, como dice un himnolitúrgico de vísperas: “labriego al fin de la jornada...atardecido de cansancio... romero al filo de la tarde...”

Quienes, con él a la cabeza, queremos ser portadoresde Evangelio hemos de inspirarnos en su ejemplo paraasumir la cruz no como elemento decorativo o acceso-rio, sino esencial en la obra evangelizadora de la Iglesia.

El Verbo Encarnado y Redentor habite entre noso-tros (Cfr. Jn 1,14); habite en nosotros, para que ya novivamos nosotros, sino sea Él quien viva en nosotros(Cfr. Ga 2,20) y llegue con nosotros a todos nuestroshermanos.

La cruz no es meta de nuestra programación pasto-ral como tampoco lo fue en la obra redentora de Cristo;pero sí es método, es camino insustituible para llegar yhacer llegar a nuestros hermanos a la META con


pág. 3Bol-241

Nos anima también la participación entusiasta delos seminaristas. Tarde o temprano, ellos tomarán laantorcha y continuarán la hermosa aventura de losque dejaron todo por seguir más de cerca a Jesucristo.

Nuestra XI Asamblea está en la continuidad delcamino que, hace un año, emprendimos llenos deilusiones. En ese entonces teníamos el propósito deencontrarnos con Cristo, sabiendo que él nos animaa vivir esta nueva etapa de nuestro proceso pastoral.Entusiasmados por tal encuentro decidimos remar«con Cristo, mar adentro».

Hoy, después de un año de trabajo, es buenodirigir nuestra mirada a la orilla de este mar, con laesperanza de ver actualizada la presencia del resuci-tado, y seguir escuchando su voz. Probablemente noshaga la misma pregunta que les hizo a los apóstoles:«muchachos, ¿no han pescado nada?» (Jn 21, 5).

Crónica de la XI AsambleaDiocesana de Pastoral

LUNES 24 DE JUNIO

Son las 9:30 de la mañana del lunes, todo estápreparado para dar inicio a la XI Asamblea Diocesana,listos los materiales (carpetas, folleto, pluma, gafete);el auditorio de la Casa de Pastoral Juan Pablo II, elescenario de dicho evento.

Comienzan a llegar los primeros agentes de pasto-ral, las inscripciones están listas para llenarse. Se vey se nota un ambiente de alegría y de mucho entusias-mo por parte de todos. Los seminaristas como siem-pre se volvieron a pulir con la ambientación, queestuvo muy alegre y participativa, se notó el interésque le pusieron y el mismo interés que mostraron losasambleístas.BIENVENIDA DEL VICARIO DE PASTORAL

Bienvenidos a esta XI Asamblea Diocesana dePastoral. La Iglesia es aquí y ahora en que, represen-tantes de nuestra Iglesia Local, significamos la fami-lia reunida en torno al Padre y Señor de la Vida.

Saludamos con gozo a nuestro Pastor y Obispo,Mons. Javier Navarro Rodríguez, que con su tinopastoral ha sabido conducir el rebaño que Dios leencomendó.

Bienvenidos todos los sacerdotes. Los que abrenel surco para depositar la semilla del Evangelio entodas nuestras comunidades diocesanas.

Nos alegra la presencia de Religiosas y Religio-sos que, a través de sus carismas y vivencia radicalde los consejos evangélicos, han enriquecido anuestra diócesis ofreciendo un testimonio creíblede que el Reino de Dios comienza aquí en la tierra,aunque tenga su plenitud más allá del tiempo y delespacio.

Cómo gratifica ver a tantos laicos que, desdediversas trincheras, luchan por conservar lo másgenuino de los valores humanos y religiosos en lafamilia, en las parroquias, en los decanatos y en losdiversos grupos, asociaciones y movimientos. Nues-tra Iglesia local no sería lo que es, si ustedes no fueranlo que sus antepasados les enseñaron a ser.


pág. 4 Bol-241

Estamos aquí para responder con humildad alSeñor. Nuestros planes, siempre limitados por lafragilidad humana, tal vez no han rendido los frutosque esperábamos de ellos. Y entonces, no tenemospor qué extrañarnos de que el Señor nos diga:«Echen la red a la derecha de la barca y pescarán»(Jn 21, 6).

Esa voz del Señor queremos descubrirla en la vozde nuestras parroquias y decanatos. En la voz de laspersonas que, por su capacidad de reflexión y expe-riencia de vida, han bregado y pescado por esos maresde Dios, para alimento de las comunidades a quienessirven.

Hoy podemos decirle a nuestro Señor que nuestraIglesia local le agradece la invitación que hizo a unode nuestros miembros, al P. José María de la Torre,para que siga navegando mar adentro. En otros ma-res, pero en la misma barca. Con otras redes, pero lamisma confianza y entusiasmo. Con otros apóstoles,pero con la misma misión. Llegando a otros puertos,pero en la misma tierra. Descubriendo otros horizon-tes, pero con la misma brújula. Colocándose en otrascoordenadas, pero siempre bajo el mismo cielo. Queel Dueño de la mies confirme en la fe al P. Chema paraque también él confirme a su hermanos.

Y nosotros, por nuestra parte, seguiremos lanzan-do las redes con la esperanza, no muy lejana, de poder

bajar a tierra y encontrarnos al Señor resucitado quenos espera «con un fuego encendido, con un pescadoencima, y pan» (Jn 21, 9). Que no nos extrañe si, enun futuro no muy lejano, Jesús nos dice como a losapóstoles: «Traigan algunos pescados de los queacaban de sacar» (Jn 21, 10). Y entonces podremossentarnos a la mesa de la fraternidad para gustar elbanquete que el Señor nos ofrece. Mientras llega esedía, sigamos remando «Con Cristo, mar adentro».

ORACION INICIALFue dirigida por el Pbro. Luis Carlos García Rea,

donde se encomendó a Dios el trabajo de este día y detoda la asamblea para que nos enviara su Espíritu ynos iluminara para seguir junto con Cristo mar aden-tro. Se introdujeron algunos signos tales como laSagrada Escritura, el III plan diocesano de pastoral, elcirio y la estola. Después se hizo una lectura de lapalabra de Dios y se hizo una breve reflexión dirigidapor el Pbro. Juan de Jesús Fuentes.

RESEÑA DE NUESTRO PROCESODE PLANEACION PASTORAL.Después de un receso, continuó el P. Muñoz

Porras con una reseña del proceso de planeación queha llevado la Diócesis con vistas al IV Plan Diocesa-no de Pastoral. Dicha reseña estuvo apoyada en elsiguiente material que se ofreció a los asambleístas:


pág. 5Bol-241

a) Elaboración del marco referencialMarcos: Histórico, de Realidad y Doctrinal- En el aspecto social (global - Específico)- En el Aspecto eclesial (Global - Específico)

b) Diagnóstico Pastoral- Hechos significativos - Indicadores - Causas -Efectos - Urgencias - Líneas de acción

c) Prioridades pastoralesAspectos de la realidad o sectores de la poblaciónque consideramos claves para impulsar nuestro tra-bajo pastoral.

d) Objetivos Pastorales- General y Específicos

e) Criterios de AcciónPolíticas y Estrategias (generales y específicas)

f) OrganizaciónLos equipos y otros recursos necesarios para im-pulsar el plan - Organigrama - Manual de funcio-nes

g) Programación- Curso de acción para cada nivel de Iglesia- Curso de acción para cada equipo de trabajo- Programación anual para niveles de Iglesia y Equi-pos de trabajo.

h) Evaluación- Evaluación anual de cada programa- Evaluación del Plan.Este es el mismo camino que deseamos recorrer parala elaboración de nuestro IV Plan Diocesano de Pas-toral.

- i -

NOS HEMOS ESTADO PREPARANDO PARA EN-TRAR EN UN PROCESO DE PLANEACIÓNPASTORAL

1. Reunión del CDP (21 - 26 de agosto 2000)Se propone una posible “plataforma de lanza-

miento” enunciando un presupuesto, unas conviccio-nes teológicas, unas preguntas fundamentales, unpropósito, un lema, un tema, una línea pastoral, unproceso, una metodología y una clave pastoral.

2.- Reunión del CDP (12 - 14 de octubre 2000)Se afina la propuesta inicial, tratando de desglosar

cada uno de los enunciados propuestos para entendermejor sus dimensiones teológicas y pastorales. Elresultado fue una primera redacción de la propuestageneral.

3.- Nov - Dic 2000 (Consulta Decanal)La primera redacción de la propuesta general se

pone a consideración de los decanatos para que seaenriquecida con las aportaciones de los mismos.

4.- Reunión del CDP (18 - 20 de enero 2000)Se presenta la segunda redacción de la propuesta

general, incorporando a ella las aportacionesdecanales.

Se nombran encargados provisionales para elmarco referencial (Marco Histórico = PP. JaimeGutiérrez y Juan Carlos González; Marco de Reali-dad = Sr. Cura José Luis Aceves; Marco Doctrinal =P. Emiliano Valadez). La misión de estos encargadosserá integrar los equipos respectivos, teniendo encuenta a las personas propuestas y aquellas que sepuedan agregar.

Se toma el acuerdo de nombrar un encargado encada decanato para cada uno de los marcos. Su misiónserá coordinar las actividades respectivas en su pro-pio nivel de Iglesia (el decanato).

RESEÑA DE NUESTRO PROCESORESEÑA DE NUESTRO PROCESORESEÑA DE NUESTRO PROCESORESEÑA DE NUESTRO PROCESORESEÑA DE NUESTRO PROCESODE PLANEACIÓN PDE PLANEACIÓN PDE PLANEACIÓN PDE PLANEACIÓN PDE PLANEACIÓN P ASTORALASTORALASTORALASTORALASTORAL

IntroducciónIntroducciónIntroducciónIntroducciónIntroducciónUN CAMINO YA RECORRIDOUN CAMINO YA RECORRIDOUN CAMINO YA RECORRIDOUN CAMINO YA RECORRIDOUN CAMINO YA RECORRIDO


pág. 6 Bol-241

5.- Reunión por comisiones (febrero - abril 10)De manera independiente, y en distintas fechas, se

reúnen algunos de los integrantes de cada comisiónpara los respectivos marcos.

Se analiza cómo se han realizado estos marcos enlos tres planes de pastoral.

Se eligen los coordinadores diocesanos de cadauno de los marcos para el IV Plan Diocesano dePastoral (Marco Histórico = P. Juan Carlos González;Marco de Realidad = P. Juan Martín González; Mar-co Doctrinal = P. Javier Rodríguez).

Se empiezan a perfilar las líneas generales de loque podría ser el futuro marco referencial.

6.- Reunión plenaria de comisiones (25 de abril)Se presentan los equipos de cada uno de los

marcos con sus respectivos coordinadores.Se dan a conocer los eventuales avances que se

han dado en cada uno de los marcos.Se reúnen por separado las comisiones de cada

marco, para elaborar un posible proyecto de acción.De ahora en adelante, los coordinadores de cada

uno de los marcos formará parte del Equipo Diocesa-no de Pastoral, así como del CDP.

Después de varias consultas nos queda más clarala visión teológico-pastoral de nuestro proceso. Veá-moslo.

- ii -

TENEMOS UNA VISIÓN TEOLÓGICO-PASTO-RAL HACIA EL IV PLANDE CARA AL PASADO nuestra pastoral deberá

entenderse a sí misma como memoria histórica.DE CARA AL PRESENTE nuestra pastoral es un

desafío.DE CARA AL FUTURO nuestra pastoral es un

proyecto que, esperamos, cristalice en un IV PlanDiocesano de Pastoral.

1.- PARTIMOS DE UN PRESUPUESTOEl trabajo pastoral es la participación, aquí y

ahora, en la misión salvadora de Jesús el Cristo,continuada en la Iglesia y por la Iglesia hacia todo elmundo, dentro de un determinado contexto histórico.

2.- TENEMOS 4 CONVICCIONES TEOLÓGICASa) La misión de la Iglesia, siendo un don de Dios, es

también tarea y responsabilidad de todos y cadauno de sus miembros.

b) El Espíritu de Jesús el Cristo, está presente en todala comunidad de la Iglesia.

c) Nuestro futuro Plan de pastoral tendrá que ser elreflejo de lo que Cristo inspira en los miembros denuestra comunidad diocesana (personas, institu-ciones, niveles de Iglesia, consejos, equipos, etc.).

d) Creemos que hay un plan divino de salvación, delcual la Iglesia es servidora.

3.- NOS HACEMOS TRES PREGUNTAS FUNDA-MENTALES

a) ¿Hacia dónde camina el pueblo de Dios que se nosha confiado?

b) ¿Cómo está respondiendo nuestra acción pastoral?c) ¿Cuál debería ser la acción pastoral de cara al tercer

milenio?

4.- TENEMOS UN SOLO PROPÓSITOAnunciar, celebrar y vivir el Evangelio de Jesu-

cristo entre los hombres y mujeres de hoy, a partir desus gozos y preocupaciones reales para que, de ver-dad, sea para ellos una buena noticia de vida plena yen abundancia.

5.- NOS CENTRA UN TEMA“El encuentro con Cristo vivo nos compromete a

la conversión, comunión y solidaridad con todos”


pág. 7Bol-241

El tema es la idea principal en torno a la cual seorienta toda una obra. Encontrarnos con Cristo, pre-sente en las personas, en el tiempo y en el espacio denuestra diócesis, es el asunto principal en torno alcual gira nuestro proceso de planeación.

6.- NOS ANIMA UN LEMA“Del encuentro con Cristo vivo a la solidaridad y

caridad con todos”

Un lema es el principio que pretende regular eimpulsar la conducta, el comportamiento, la convic-ción más profunda personal o grupal hacia un findeterminado.

7.- DESEAMOS SEGUIR UNA LÍNEA PASTORAL“Iglesia Misterio, Comunión y Misión”

La línea pastoral significa la dirección generalhacia la cual se encaminan los esfuerzos y las accio-nes de la Iglesia, ya sea a nivel personal, grupal ocomunitario.

8.- QUEREMOS DESENCADENAR UN PROCE-SO PASTORALEl futuro plan deberá ser una serie de EVENTOS,

realizados con una MÍSTICA, para consignarse en unDOCUMENTO.

El proceso pastoral, en este contexto, se refiere ala sucesión de etapas, lógicamente encadenadas, quenos permitan conseguir los objetivos que nos propon-gamos en nuestro proceso de planeación pastoral.

9.- DESEAMOS ADOPTAR UNA METODOLOGÍASalir al Encuentro de Jesucristo, Profundizar el

encuentro y Proyectarlo en compromisos.

La metodología hace referencia al modo o manerade realizar las cosas. En este caso, el modo o métodoque se propone consta de tres momentos del “encuen-tro”, ligados a tres misterios de nuestra fe: salir alencuentro-Encarnación, profundizar el encuentro-Redención y proyectar el encuentro-Pentecostés.

10.- CONTAMOS CON UNA CLAVE PASTORALEncuentro con Cristo vivo

La clave pastoral hace referencia a aquello quetiene importancia decisiva en la elaboración de nues-tros proyectos pastorales.

2.4 Mayo 2001 - Reunión CDP

Se definen los contenidos y dinámica de la Asam-blea Diocesana de Pastoral, así como las comisionesy responsables de las mismas.

2.5 Junio (25 - 29 - 2001 - X ASAMBLEADIOCESANA)1.- OBJETIVO: Encontrarnos como Iglesia

Diocesana con Jesucristo vivo, presente ennuestro proceso pastoral, para reavivar elespíritu de la Nueva Evangelización ante losdesafíos del tercer milenio.

2.- TEMA: El encuentro con Jesucristo nosimpulsa a vivir una nueva etapa de nuestroproceso pastoral.

3.- LEMA: Con Cristo, mar adentro.

4.- CONTENIDOS: Importancia de la memoriahistórica - Evaluación de nuestro procesopastoral - Desafíos de la Iglesia latinoameri-cana (Megatendencias) - La centralidad dela Palabra de Dios en la evangelización deltercer milenio - La contemplación de fe y laacción pastoral - La Nueva Evangelizacióncomo proyecto pastoral- Importancia de laplaneación pastoral

5.- ACTITUDES: Participación comprometida,responsable y con sentido de Iglesia.

III

DESPUÉS DE LA ASAMBLEA...A ELABORAR EL MARCO REFERENCIAL

1. Agosto 27 - Septiembre 1° - 2001 - Reunión CDP

- Partiendo de los aportes de la Asamblea, se opta porretomar los aspectos tratados en el Plan Global delCELAM (megatendencias o signos de los tiempos),como "materia prima" para elaborar nuestro marcoreferencial en su aspecto social.

2.- Septiembre (Santa Ana)

- Se reúnen los coordinadores diocesanos del marcoreferencial.

- Toman acuerdos sobre los contenidos y metodolo-gía del material que se va elaborar.


pág. 8 Bol-241

3.- Octubre (11-13) 2001 - Reunión CDP- Se presenta el material que consiste en 29 temas

agrupados en las 10 megatendencias o signos de lostiempos.

- Se explican en general los contenidos y la metodo-logía de los temas.

4.- Noviembre 17 - 2001 (Santa Ana)- Se reunen a los equipos del marco referencial

(Marco Histórico, de Realidad y Doctrinal).

- Los convocados fueron, al menos 30. No participóninguno de los representantes de tres decanatos.

- Explican contenidos y metodología de los temas.

- Se presentan y afinan las fichas de trabajo.

- A cada representante decanal (de los que asistieron)se le entrega un disquet con las fichas de trabajo,indicando las modalidades que debe hacer a partirde las sugerencias de esta reunión.

- La comunidades empiezan a trabajar los 29 temas.

5.- Enero 17-19 de 2002 - Reunión CDP- Se realiza un control pastoral al interno del Consejo

para calibrar el tratamiento de los 29 temas.

- Se llega a la conclusión de que no se podrá cubriresta etapa en el tiempo previsto (Junio de 2002).

- Se toma el acuerdo de aplazar las fechas (sep-oct.asambleas parroquiales. Nov: asambleas decanalesy feb: asamblea Diocesana).

- También se ve necesario hacer un control pastoralya no sólo al interno del Consejo, sino en toda ladiócesis.

- Se propone dar a conocer los resultados de estecontrol pastoral en junio de 2002 (fecha previstapara asamblea diocesana).

6.- Mayo 23-25 de 2002 - Reunión CDP- Se definen contenidos, dinámica y participantes de

la XI Asamblea Diocesana.

- El Señor Obispo, a partir de las sugerencias delConsejo Diocesano, Anuncia que la línea pastoralpara el período 2002-2003 será "EL AÑO DE LASANTIDAD", y para el período 2003 - 2004 será"EL AÑO DE LA EUCARISTÍA"

IV

LA XI ASAMBLEA DIOCESANA- Se hará una reseña del proceso de planeación.

- Se darán a conocer los resultados del control pasto-ral diocesano.

- Se enriquecerá el marco referencial, en su aspectosocial, con el tema del urbanismo.

- Se empezarán a vislumbrar algunos elementoselcesiológicos que nos ayuden a formular nuestromarco referencial, ahora en su aspecto eclesial.

- Se presentará el equipo base para la elaboración delmarco referencial en su aspecto eclesial.

V. DESPUÉS DE LA XI ASAMBLEA1.- Agosto 26-31 de 2002 - Reunión CDP- Se hace la evaluación del programa del CDP- Se presenta la evaluación de programas decanales y

equipos diocesanos.- Se presenta el informe económico de equipos

diocesanos.- Se afina la programación 2002-2003- Se presenta el proyecto de elaboración del marco

referencial eclesial (equipo base). Se da una prime-ra apreciación en el CDP.

- Se presenta un proyecto para asambleas parroquia-les y decanales.

- Según la situación de cada parroquia, a partir deseptiembre (mes de la Biblia) se empiezan a cele-brar las asambleas parroquiales. (Esto ayudaría alacompañamiento de los coordinadores diocesanos).

2.- Octubre 10-12 de 2002 - Reunión CDP- Mes de la familia.- Se continúan las asambleas parroquiales.- Eventualmente se afina proyecto para asambleas

decanales.3.- Enero 16-18 de 2003 - Reunión CDP- Se presenta y se afina la primera redacción del

marco referencial en su aspecto social (29 temas).- Se prepara la XII Asamblea Diocesana de Pastoral.- Se presenta proyecto sobre la elaboración del marco

referencial eclesial.4.- Febrero 10-14 de 2003

XII ASAMBLEA DIOCESANA DE PASTORAL

- Se presenta la primera redacción del marcoreferencial en su aspecto social.

- Se presenta el proyecto de la elaboración del marcoreferencial eclesial.


pág. 9Bol-241

- Se recogen las aportaciones de la Asamblea.

5.- Marzo-Junio de 2003

- Se empieza a recoger información sobre el marcoreferencial eclesial, según contenidos, tiempos ymetodología que se proponga.

6.- Junio 23-27 de 2003

REUNIÓN CON MIEMBROS DE EQUIPOS DIO-CESANOS ¿XIII ASAMBLEA DIOCESANA?

- Se presenta la segunda redacción (¿definitiva?) delmarco referencial en su aspecto social.

- Se hace un control pastoral (o se presenta la primeraredacción) sobre el marco referencial eclesial.

- Se explica en qué consiste el diagnóstico pastoral.

7.- Julio de 2003 - Diagnóstico Pastoral

En los Consejos parroquiales se determinan: - He-chos significativos - Indicadores - Causas - Efectos- Urgencias - Líneas de acción sobre el marcoreferencial en su aspecto social (¿también en eleclesial?).

8.- Agosto 2003 - Continúa el Diagnóstico

- Se realiza el diagnóstico pastoral a nivel decanato.

- En la reunión del CDP se hace el Diagnóstico a nivelDiocesano.

9.- Septiembre 2003 - Prioridades y Objetivos I

- A nivel parroquial se determinan las prioridades yobjetivos parroquiales.

10.- Octubre 2003 - Prioridades y Objetivos II- A partir de las prioridades y objetivos parroquiales,

se determinan las prioridades y objetivos decanales.- A partir de los objetivos y prioridades decanales, se

determinan los objetivos y prioridades diocesanas.

11.- Noviembre 2003 - Criterios de acción I

- Se elaboran las políticas y estrategias a nivelparroquial.

- Se determina la vigencia del IV Plan.

12.- Diciembre 2003 - Criterio de acción II

- A partir de las políticas y estrategias parroquiales, seelaboran las políticas y estrategias a nivel decanal.

13.- Enero 2004 - Organización y Curso de acción I

- En la parroquia se determinan los equipos de trabajoque ve necesario que existan en ese nivel.

- Dichos equipos hacen su curso de acción.

14.- Febrero 2004 - Organización y Curso de acciónII

- A partir de los equipos propuestos en las parroquias,se determinan los equipos que se ve necesario queexistan a nivel decanal.


15.- Mayo 2004 - Reunión CDP

- A partir de los equipos propuestos a nivel decanal,se determinan los equipos que debe haber a niveldiocesano.


- Se elabora el organigrama y manual de funciones

16.- Agosto 2004 - Reunión CDP

- Programación 2004 -2005 de cada uno de losnuevos equipos de trabajo.

- Se presenta la primera redacción del IV Plan Dioce-sano de Pastoral.

- Eventuales enmiendas.

17.- Adviento 2004¿Promulgación del IV Plan?


pág. 10 Bol-241

El Pbro. Jaime Gutiérrez, presidente de decanos, hizo la presentación de los resultados del control pastoralen coordinación con tres de los representantes decanales.

Administrador

Sello


pág. 11Bol-241

Administrador

Sello

Administrador

Sello


pág. 12 Bol-241

Administrador

Sello


pág. 13Bol-241

Administrador

Sello


pág. 14 Bol-241

Administrador

Sello


pág. 15Bol-241

Administrador

Sello

Administrador

Sello


pág. 16 Bol-241

Administrador

Sello


pág. 17Bol-241

Administrador

Sello


pág. 18 Bol-241

Administrador

Sello


pág. 19Bol-241

Administrador

Sello


pág. 20 Bol-241

Inmediatamente después de la comida, el P.Porras citó a reunión a los miembros del consejopara elaborar las propuestas de relevos en lasdiferentes comisionesdiocesanas y ofrecerlas alSr. Obispo. Participaron 48 integrantes, votandosolamente sobre los candidatos que postularon 7decanatos y estos fueron los resultados:

1.- PARA EVANGELIZACIÓN Y CATEQUE-SIS (Actual: P. José Luis González Pérez)

Juan Martín González, con 21 votos de 48 posi-bles. El candidato más cercano es Juan deJesús Fuentes con 10 votos de 48 posibles.

2.- PARA EDUCACIÓN Y CULTURA (Actual:Sr. Cura Juan Martín González Dávalos)

Juan José Saldaña, con 24 votos de 48 posibles. Elcandidato más cercano es Juan de Jesús Fuen-tes, con 8 votos de 48 posibles.

3.- PARA FORMACIÓN DE AGENTES LAI-COS (Actual: Sr. Cura Ramón Pérez Mata)

Javier Rodríguez, con 18 votos de 48 posibles. Elcandidato más cercano es Raúl Gómez, con11 votos de 48 posibles.

4.- PARA PATERNIDAD RESPONSABLE YMÉTODO BILLINGS (Actual: Sr. Cura JuanRoberto Chávez Botello)

Felipe de Jesús Fonseca, con 9 votos de 48. Loscandidatos más cercanos son Gerardo Díaz yCarlos de la Torre, ambos con 8 votos de 48posibles.

5.- PARA PASTORAL LITÚRGICA (Actual: P.Fernando Varela Gamiño)

Francisco Escobar, con 26 votos de 48 posibles.El candidato más cercano es Juan de DiosMontaño, con 7 de 48 votos posibles.

6.- PARA PASTORAL FAMILIAR (Actual: P.Miguel Arízaga Ocegueda)

Gerardo Díaz, con 20 votos de 48 posibles. Elcandidato más cercano es Felipe de JesúsFonseca, con 8 votos de 48 posibles.

7.- PARA ASESOR DE POBRES Y MARGI-NADOS (Actual: Sr. C. Francisco EscobarMireles)

Luis Carlos García, con 24 votos de 48 posibles.

8.- PARA SEMINARISTAS EN FAMILIA (Ac-tual: Miguel Angel Aguiñaga O.)

Juan Francisco García, con 12 votos de 48 posi-bles. El candidato más cercano es FernandoMuñoz, con 10 votos de 48 posibles.

9.- PARA PASTORAL VOCACIONAL (Ac-tual: Guillermo Huerta Muro) (Confrontarcon los candidatos del N° 8: Seminaristas enFamilia)

Mauricio Velázquez, con 13 votos de 47 posibles.El candidato más cercano es Juan FranciscoGarcía, con 7 votos de 47 posibles.

10.- PARA PASTORAL URBANA (Actual: Sr.Cura José Luis Aceves González)

Juan Francisco Navarro, con 16 votos de 48posibles. El candidato más cercano es José Her-nández Rojo, con 10 votos de 48 posibles.

RETROALIMENTACION SOBRE LOS RE-SULTADOS DEL CONTROL PASTORAL

Reunión del ConsejoDiocesano de Pastoral


pág. 21Bol-241

1. CONCLUSIONES DECANALES Y DE GRUPOSDE TRABAJO SOBRE EL DESEMPEÑO REAL DELTRATAMIENTO DE LOS 29 TEMAS DEL MARCOREFERENCIAL EN SU ASPECTO SOCIAL.

1.1 Hace falta motivación, información e interesarsemás, especialmente los sacerdotes, como principales agen-tes del proceso de pastoral. (Decanatos: 1,2, 5, 6, 7 y 9.Grupos: Laicos y Seminario.

1.2. Hemos ampliado la base de nuestro proceso depastoral, pero creemos que necesitamos capacitar a losagentes para involucrar a más personas (campesinos,profesionistas, estudiantes, políticos, maestros, universi-tarios, marginados, migrantes, grupos de barrios, etc.).Nos felicitamos porque la mayoría de nuestras comunida-des respondió este instrumento de trabajo. (Todos losdecanatos y grupos)

1.3. Descubrimos un mayor número de personas quese han interesado en el proceso, de los sectores másrepresentativos de nuestras comunidades. Destacamosespecialmente religiosas, jóvenes. (Decanatos: 1, 2, 4, 6.Grupos: Religiosas y laicos)

1.4. No supimos o no pudimos aprovechar el tiempo ylos espacios para reflexionar los temas. (Dec. 3, 4 y 8)

2. CONCLUSIONES DECANALES Y DE GRUPOSDE TRABAJO AL COMPARAR EL DESEMPEÑOREAL DEL TRATAMIENTO DE LOS TEMAS CONLAS ESPECTATIVAS QUE SE TENIAN AL RE-FLEXIONARLOS EN LAS COMUNIDADES.

2.1. Constatamos que se han tratado con creatividadlos 29 temas (como lectio divina, o por bloques, en granparte de los consejos parroquiales y decanales). Sinembargo, señalamos que no todos han tratado todos lostemas. (Decanatos 2 al 5 y seminario)

2.2. Los temas nos han motivado a la reflexión,oración, conocimiento de la realidad, coherencia entre fey vida, compromiso y a la participación, pero falta sentir-nos más Iglesia, comprometidos con nuestra realidad.(Todos, excepto el decanato 3)

2.3. Algunos vimos esta tarea como algo opcional ypor eso no logramos las expectativas que se tenían.(Decanatos 2, 5, 7, 9 y seminario)

2.4. Los tres momentos del marco referencial nos hanayudado a tener una visión amplia del pasado, del presen-te y del futuro. (Decanatos 1, 8 y laicos)

2.5. Estamos empezando a llegar, aunque no comoquisiéramos, a las personas no muy involucradas en losprocesos pastorales. (Decanato 10 y religiosas)

3. CONCLUSIONES DECANALES Y DE GRUPOS DETRABAJO SOBRE LAS MEDIDAS QUE SE PROPONENPARA SUPERAR LAS FALLAS QUE HEMOS TENIDOAL TRATAR ESTOS 29 TEMAS.

3.1. Los presbíteros somos los principales agentes delproceso de pastoral. Por eso es necesaria su asesoría, capaci-tación y acompañamiento. (Decanatos 2, 4, 5, 6, 7, 9, religio-sas, laicos y seminario)

3.2. Queremos seguir viendo con este trabajo pastoral, lapresencia de Dios como presencia de Dios en el presente,pasado y futuro. (Decanatos 1 y 4)

3.3. Que los agentes de pastoral sí reflexionemos todos lostemas y nos capacitemos para saber adaptarlos a los sectoresque faltan. (Decanatos 2, 3, 8, 9, religiosas, laicos y semina-rio)

3.4. Poniendo todos más interés, disponibilidad y deseosde trabajar. Que trabajar en el proceso de pastoral sea priori-dad en las comunidades, para poder llegar a más personas,aprovechando los espacios y tiempos para reflexionar lostemas. (Decanatos 2, 3, 4, 6, 7, 9, laicos y seminario)

3.5. Que el consejo parroquial dé apoyo metodológico alas comunidades religiosas. (Seminario)

MARTES 25 DE JUNIO DE 2002

Un nuevo día ha comenzado y todo está listo para elsegundo día de nuestra asamblea. Los asambleístas estánllegando y se nota mucha alegría y disposición para realizarel trabajo asignado. Comienza nuestro segundo día de activi-dades encomendando a Dios todo el trabajo que el día de hoyvamos a realizar. Comenzamos con una Lectio Divina elabo-rada por el Padre Arturo Muñoz que lleva por título: “Atenas:Una ciudad llena de ídolos”, para que así nos introdujera enla temática del día de hoy que se hablará sobre el fenómenourbano.

La ambientación y la alegría se nota en todas las personaspresentes. Después de haber encomendado a Dios nuestrotrabajo y haber realizado una breve reflexión a la luz de laPalabra de Dios sobre nuestra realidad. La ambientacióncorrió por cuenta de los alumnos del seminario mayordiocesano de San Juan de los Lagos. Mucha alegría y muchoambiente se vivió en dicho momento.

El Padre Guadalupe Muñoz Porras nos presenta los resul-tados del trabajo realizado ayer por los equipos de trabajo.

El Padre José Luis Aceves, encargado de la PastoralUrbana en nuestra Diócesis nos hace una breve introduccióna lo que es el fenómeno urbano y nos explica la metodologíaa seguir. Esta charla correrá a cargo de Alfonso VietmeierFranke (Alemán).

Mesas redondas pordecanatos y equipos diocesanos

Por la tarde se reunieron los decanatos y grupos diocesanos detrabajo para retroalimentar la presentación de los resultadosdel control pastoral. Estos fueron los resultados:


pág. 22 Bol-241

Ponencia: El Fenómeno Urbano


pág. 23Bol-241


pág. 24 Bol-241


pág. 25Bol-241


pág. 26 Bol-241


pág. 27Bol-241


pág. 28 Bol-241


pág. 29Bol-241


pág. 30 Bol-241


pág. 31Bol-241


pág. 32 Bol-241

Al final de la charla se abrió un foro para preguntasy dudas. Termina la conferencia y se le hace unpequeño presente a Alfonso, luego el Sr. Cura JoséLuis Aceves cita a junta a las 3 de la tarde a los depastoral urbana y da algunas indicaciones prácticaspara el día de mañana. Es hora de ir a comer ydescansar un momento al mismo tiempo que otrosaprovecharán para descansar.

RESULTADOS DEL TRABAJO EN GRUPOSSOBRE EL FENOMENO URBANO.

1. APORTES PARA ENRIQUECER NUES-TRO MARCO REFERENCIAL EN SU ASPEC-TO SOCIAL

1.1 Influencia negativa de medios de comunica-ción social (mal uso, falta de conciencia crítica,deshumanización de relaciones). (Todos los decanatosy grupos, excepto el 5 y el 9)

1.2 Choque cultural por el fenómeno de la migra-ción (fiestas, año nuevo). (Decanatos 3, 4, 7, 8, 10,religiosas, laicos y seminario)

1.3 Constatamos que la despersonalización esconsecuencia del relativismo y subjetivismo de mo-delos de vida, de comportamientos, de maneras dife-

rentes de ser y de sentir. (Decanatos 1, 2, 4, 5, 8,religiosas y seminario)

1.4 La realidad urbana y su atención pastoral es unreto para la evangelización de nuestra diócesis.(Decanatos 3, 7, 9, religiosas y laicos)

1.5 Algunos agentes de educación están impar-tiendo una educación antirreligiosa y carente de va-lores que influye en una cultura “light”, fácil y sinmoral.

1.6 El fenómeno urbano ha rebasado la ofertapastoral de la Iglesia y ésta sólo se ha conformado consatisfacer la demanda de servicios religiosos.

2.- APORTES QUE AYUDAN A IR DEFI-NIENDO ALGUNOS ASPECTOS DE NUESTROMARCO ECLESIAL (ANTE EL FENÒMENOURBANO ¿CÒMO DEBERÌAMOS RESPON-DER EN LA PARROQUIA, EN EL DECANATOY EN LA DIÓCESIS?)

2.1 Comprometernos en formar cristianos madu-ros en su ambiente y en su edad para que vivan enconstante testimonio y conversión, actualizándolos ycomprometiéndolos con el espíritu de la nueva evan-gelización. (Todos los decanatos, excepto el 10)

2.2 Comprender la pastoral urbana como conjuntointegral y diversificado que responda a los diferentesambientes. (Decanatos 3, 4, 6, 7, 8, religiosas yseminario)

2.3 A la parroquia le toca potenciar lo humano,fraterno, solidario y no sólo oferta de servicios.(Decanatos 1, 2, 7, 8, 10, religiosas y seminario)

2.4 Una nueva eclesiología, interpretando los sig-nos de los tiempos en la realidad urbana. (Decanatos1, 4, 6, religiosas y laicos)

2.5 Buscar espacios nuevos para ejercer la acciónpastoral que van más allá de las instancias e instala-ciones administrativas. (Decanatos 2, 3, 5 y 6)

MIERCOLES 26 DE JUNIO

El último día de la asamblea comenzamos con la celebración dela Santa Misa.

PonenciaEl Fenómeno Urbano II.


pág. 33Bol-241

PERSPECTIVAS ECLESIOLÓ-GICAS EN EL MAGISTERIO POS-TERIOR AL VATICANO

INTRODUCCIÓN.En el mes de Febrero del Año 2000

se celebró en Roma un Congreso In-ternacional sobre la aplicación delConcilio Vaticano II, organizado porel Comité para el Gran Jubileo. ElCardenal Joseph Ratzinger pronuncióuna profunda y extensa relación sobrela eclesiología de la ConstituciónLumen Gentium. De esa conferenciaentresaco algunos párrafos que meparecen iluminadores para conocer la evolución de laeclesiología en los años posteriores al Concilio:

“El Vaticano II quiso claramente insertar y subor-dinar el discurso sobre la Iglesia al discurso sobreDios; quiso proponer una eclesiología en sentidopropiamente teo – lógico, pero la acogida del Conci-lio hasta ahora ha omitido esta característica deter-minante, privilegiando algunas afirmacioneseclesiológicas; se ha fijado en algunas palabrasaisladas, llamativas, y así no ha captado todas lasgrandes perspectivas de los padres conciliares”. Ycontinuaba destacando cuáles eran algunas de esasafirmaciones aisladas y llamativas: “Han quedado enla conciencia de la gente algunas palabras clave: laidea de Pueblo de Dios, la Colegialidad de los Obis-pos, la revalorización de las Iglesias Locales frente ala Iglesia Universal, etc.”

De manera particular el Cardenal centra sucuestionamiento en interpretaciones reduccionistas,derivadas de la concepción de Iglesia como Pueblode Dios. “En una primera fase de la acogida delConcilio, junto con el tema de la colegialidad, domi-na el concepto de pueblo de Dios, que, entendido muypronto totalmente a partir del uso lingüístico políticogeneral de la palabra Pueblo en el ámbito de la

teología de la liberación, se compren-dió a la luz de la palabra marxista depueblo, como contraposición a lasclases dominantes y en el sentido de lasoberanía del pueblo que ahora, porfin, se debería aplicar a la Iglesia...poco a poco estos fuegos artificialesse han ido apagando”.

Estas palabras críticas del Carde-nal habían sido antecedidas por elanálisis realizado en el Sínodo de losObispos de 1985, a veinte años de laconclusión del Concilio Vaticano II.Se trataba de realizar un exámen delos frutos del Concilio en su primer

período de aplicación. Hay afirmaciones que preten-den rectificar algunas interpretaciones teológicas yalgunas prácticas pastorales que abusivamente sedesprendieron del Concilio. “Una lectura parcial delConcilio ha hecho una presentación unilateral de laIglesia, como una estructura meramente institucional,privada de su misterio... ¿no les hemos dado ocasiónpara ello, hablando demasiado de renovar las estruc-turas eclesiásticas externas y poco de Dios y deCristo?” (Sínodo – 1985, Nº 41). “La misión prima-ria de la Iglesia bajo el impulso del Espíritu Divino espredicar y testificar la buena y alegre noticia de laelección, la misericordia y la caridad de Dios. “LaIglesia se hace más creíble si hablando menos de simisma, predica más a Cristo crucificado y lo testificacon su vida... el anuncio sobre la Iglesia, como lodescribe el Concilio Vaticano II, es trinitario ycirstocéntrico” (Sínodo 1982, Nº 2).

El año de 1988 se emitió la Exhortación conclusivadel Sínodo sobre los Laicos con el título de “Voca-ción y Misión de lo s Laicos en la Iglesia y en elMundo” (Christi Fideles Laici). Todo el esquemateológico y el enfoque pastoral de este documentorefleja el anhelo de retomar las grandes intuicionesdel Concilio, pero proponiéndolas en una nueva

Ponencia:“Eclesiología a la Luz de los últimos

Documentos de la Iglesia”(Mons. José G. Martín Rábago)


pág. 34 Bol-241

perspectiva que permita superar los reduccionismosy las desviaciones detectadas en los años posterioresal Concilio.

Aunque se trata de un documento que presentaprevalentemente la vocación y misión de los laicos,su propuesta es bastante más amplia y prácticamentese convierte en un punto de referencia obligado paraconocer la evolución que ha tenido la eclesiología enel último magisterio eclesiástico.

ECLESIOLOGÍA DE LA CHRISTI FIDELES LAICI.

El documento señala con claridad que quierenutrirse de las enseñanzas del Vaticano II, considera-do como una “Renovada efusión del Espíritu dePentecostés”;reconoce sin embargo, que ahora hayun contexto cultural nuevo y que se presentan nuevosdesafíos al trabajo pastoral: “Nuevas situaciones,tanto eclesiales, como sociales, económicas, políti-cas y culturales”. El esquema que ahora se presentay que quiere servir de instrumento integrador de laeclesiología del Vaticano II, así como de guía dejerarquización de las afirmaciones conciliares, essumamente simple, pero rico en consecuenciasteológicas y pastorales.

Toda la temática está desarrollada en tres capítu-los:1) La consideración fundamental de la Iglesia

como misterio de salvación.2) La integración de la diversidad a la luz de la Iglesia

como comunión.3) La tarea salvífica de la Iglesia, frente al mundo,

desde la perspectiva de la relación “Iglesia –Misión”. No es mi propósito exponer todos los apartados

de este rico documento, solo pretendo subrayar algu-nos aspectos, a mi modo de ver, de singular relevan-cia y consecuencias pastorales.

CAPÍTULO PRIMERO: LA IGLESIA COMO MISTERIO.

Durante el Concilio Vaticano II el obispo deRatisbona, reconocido por su prudencia, hizo estasabia afirmación, hablando a los obispos del Conci-lio: “Queridos hermanos, en el Concilio ante tododebéis hablar de Dios; este es el tema más importan-te”. La exhortación Christi Fideles Laici testifica,con preocupación, que en los últimos 20 años des-pués del concilio, hay una persistente difusión de laindiferencia religiosa y del secularismo. Dice así: “Elhombre actual, embriagado por las prodigiosas con-

quistas del desarrollo técnico científico... se olvida deDios, lo considera sin significado para su propiaexistencia, lo rechaza poniéndose a adorar los másdiversos ídolos” (Nº 4).

El tiempo que vivimos nosotros, se puede decirque ya no es un tiempo de ateísmo, por cuantoateísmo significa una postura en la cual alguien demanera convencida -diría- a veces apasionada, de-fiende su convicción de la no existencia de Dios, peroel clima cultural que vivimos ahora, que es un climaen el fondo que no permite el apasionamiento por lafilosofía ni por las ideologías, es un clima que nopermite por tanto el crecimiento de los ateísmos en elmomento presente. Tal vez lo que hoy tenemos y quees peor que el ateísmo, es el indiferentismo, que estanto como decir simplemente: Dios no interesa, nisiquiera como problema, por tanto no hay por quéproponerse el problema de si existe o no existe Dios.La vida se desarrolla y los asuntos se arreglan sintener una preocupación de esa naturaleza. Diría puesque el ateísmo requiere de una atmósfera y de unoxígeno que hoy no hay y por eso no hay tampoco esaclase de árboles.

Dice Christifideles Laici:Frente a esta realidad pues del indiferentismo,

urge resaltar, más que la cuestión de las estructuras,el carácter sobrenatural de la Iglesia, entendida comomisterio, subrayando su origen trinitario y toda sudimensión trascendente que nos coloca en perspecti-va de fe. Cuánto necesitamos subrayar esta afirma-ción: La Iglesia no la podremos entender ni tampocotendremos la capacidad de explicarla si no la envol-vemos en esa atmósfera que es la única en que laIglesia mantiene su propia identidad, que es la pers-pectiva de la fe, para no convertirla en una instituciónmás de las muchas que existen de carácter social,político, económico. La manera como se enjuicia a laIglesia, por quienes manejan los medios de comuni-cación, ya lo sabemos, que no puede situarse en esaperspectiva de fe. Los juicios que elaboran quienesmanejan los medios de comunicación son de caráctera veces puramente político, social o económico y laIglesia desde esa perspectiva aparece desfigurada.Que ellos lo hagan así, pero nosotros no lo podemoshacer así. Para nosotros es indispensable. La Iglesiano puede compararse ni confundirse con institucio-nes de carácter social o político. La Iglesia no existepara sí misma, sino que es el instrumento de Dios parareunir a los hombres y llevarlos al conocimiento deCristo y a la participación de la vida divina.


pág. 35Bol-241

Desde esta perspectiva de la Iglesia como misterioentenderemos también la evolución que muy espe-cialmente en el magisterio del Papa Juan Pablo II hantenido varios llamamientos, muy específicamente enel Novo Millennio Ineunte. Recuerden cómo el Papaha estado -diría yo que- machaconamente insistién-donos en que la vocación de todos en la Iglesia es a lasantidad, “como la primera y fundamental vocaciónque el Padre dirige a todos en Jesucristo por mediodel Espíritu". Esto está tomado de ChristifidelesLaici (16). Luego vengo a las palabras del Papa JuanPablo II. Ya me refería hace unos momentos a NovoMillennio Ineunte, cito un pequeño párrafo: “Todoslos cristianos están llamados a la plenitud de la vidacristiana y a la perfección del amor. Más aún, lavocación a la santidad debe ser el fundamento de laprogramación pastoral”. Esto puede ser que hacealgún tiempo nos pareciera extraño. Hubo momentosen que, cuando se habló mucho de la programaciónpastoral, pues se hablaba sobre todo de metodologíasy de técnicas, de muchos recursos que son útiles, deninguna manera el Papa señala que no tenga querecurrirse a eso, pero sí hay que reconocer que a vecesno sabíamos dónde meter esta vocación fundamentalde la Iglesia que es la que debe de iluminar y aglutinaral fin y al cabo todos los proyectos: La vocación a lasantidad.

Sí, lo digo, el Papa no está en contra del uso detécnicas y metodologías eficaces en la programacióndel trabajo pastoral, pero debe haber un polo deatracción y referencia en todo plan pastoral: “Cristomismo, al que hay que conocer, amar e imitar, paravivir en él la vida trinitaria y transformar con él lahistoria” (N.M.I., 29).

Desde esta perspectiva se rescatan formas de viday valores que en algunos momentos del posconciliotendieron a diluirse o a tenerse en menor aprecio,como el significado de la oración y de la contempla-ción. La manera como en algunas partes se secularizóla celebración de la liturgia. De nuevo cito al Carde-nal Ratzinger en la conferencia a la que hice alusión.Es fuerte el cardenal, no cabe duda en estas afirmacio-nes que hace: “muchos liturgistas están ocupados enlograr que la liturgia sea cada vez más atractiva parala gente, más comunicativa, que la gente participemás activamente y no han tenido en cuenta que, enrealidad, la liturgia se hace para Dios y no paranosotros mismos”.

En el documento conclusivo del Sínodo paraAmérica se afirma: “Hay que preguntarse si una

pastoral orientada de modo exclusivo a las necesida-des materiales de los destinatarios no haya termina-do por defraudar el hambre de Dios que tienen lospueblos, dejándolos así en una situación vulnerableante cualquier oferta supuestamente espiritual” (Nº73).

Bueno, nosotros no tenemos un periódicodiocesano como ustedes. Tenemos un periódico pro-pio de las diócesis que formamos la región bajío, sellama El Observador. Y vi una nota que me parecióinteresante y que quería comentárselas. Dice ésto:"SEGÚN el investigador de un diario de Sao Paolo,la reducción del número de católicos en las principa-les ciudades de Brasil". -Está volviendo la atenciónsobre las negativas consecuencias de la politizaciónen la Iglesia-. "En efecto, el estudio realizado por elcentro de estadística religiosa e investigaciones so-ciales sobre el avance del censo nacional del 2000,los católicos en Brasil, representaban el 83.8% de lapoblación en 1991 y acualmente suman 73%. Lo queimplica una disminución del 10%". -Es mucho, en unpaís que tiene tantos millones de habitantes-. "Segúneste estudio, la tendencia predominante es la deatribuir la pérdida a la rápida urbanización del país.Sin embargo, el investigador señala que existen obis-pos que consideran que la razón está en el proceso depolitización sufrido por un sector importante de laIglesia en Brasil. En efecto, el investigador de esteperiódico, cita al obispo Mons. A. Castaño, paraquien una de las principales razones de la caída delcatolicismo fue la exagerada politización de la Igle-sia en el Brasil durante los últimos 30 años. Elperíodo predominante de influencia de la teología dela liberación de inspiración marxista creó una posi-ción excluyente, apartando de la Iglesia a los sectoresmedios, a la que los pobres no entendían. El trabajode la teología de la liberación por medio de lascomunidades eclesiales de base se centró principal-mente en las periferias de la ciudad. No deja de serirónico que la mayor pérdida de los fieles ocurra enese mismo ambiente". Eso es lo que señala estaencuesta.

Bueno, en México a lo mejor hay que hacer unestudio más amplio, pero el estado de la república quetiene un índice más bajo de católicos en este momen-to es Chiapas, donde sabemos que, efectivamente seintentó una forma de trabajo pastoral que quedatodavía por evaluarse más ampliamente. Quizá seríaimprudente o no sé si injusto achacar este fenómenosolamente al tipo de evangelización, pero es un hechoque nos debe ayudar a reflexionar.


pág. 36 Bol-241

CAPITULO SEGUNDO: LA IGLESIA COMO COMU-NIÓN.

En este capítulo se ponen las bases teológicas paraalcanzar la unidad orgánica dentro de la diversidadcon que el mismo Espíritu enriquece a la Iglesia deCristo. Se trata de una comunión que no construimosnosotros, sino que nos viene regalada. Esto tambiénes importante, un plan de pastoral, ¿qué otra cosapretende, sino construir la comunión?. Pero sí debe-mos saber claramente que en la comunión, nosotrossomos colaboradores de quien es el verdadero artíficeque es el Espíritu de Dios. La comunión en la Iglesiaes la unidad con que Cristo unifica consigo mismo yde manera vital a todos los bautizados que pasamosa ser propiedad del Señor, como los sarmientos estánunidos a la vid. Se trata de una comunión que esreflejo de la vida íntima del amor del Padre, del Hijoy del Espíritu Santo.

San Juan presenta la base para reflexionarteológicamente sobre la comunión cuando dice en laprimera carta: “Lo que hemos visto y oído os loanunciamos a fin de que viváis en comunión connosotros. Y esta comunión nuestra es con el Padre ysu Hijo Jesucristo” (I Jn. 1, 3).

Y luego recordar el concepto de comunióneucarística en San Pablo: “El cáliz de bendición quebendecimos ¿no es la comunión con la sangre deCristo?; y el pan que partimos ¿no es la comunión conel cuerpo de Cristo?. Porque el pan es uno, aún siendomuchos, somos un solo cuerpo, pues todos participa-mos de un único pan” (I Cor. 10, 16-17). Aquítenemos una dimensión de comunión, en clave decomunicación, de anuncio de Cristo según San Juany de participación eucarística según San Pablo.

Esta consideración es clave para la ejecución deun Plan de Pastoral, porque está a la base de laintegración y de la organicidad. Todo plan de pasto-ral en último término, ¿qué pretende?. Lograr efec-tivamente la integración de los diferentes agentes yésto no se consigue sólo a base de presiones, a base decartas circulares del obispo, sino que es productoantes que nada de la conversión y de una actitud conla cual los diferentes actores asumimos el papel quenos corresponde en la Iglesia de Cristo.

Cada miembro encuentra su relación con todo elcuerpo y ofrece su propia aportación; nadie puedejamás cerrarse sobre sí mismo, aislándose espiritual-mente en la comunidad.

Si no logramos primero una sólida espiritualidadde comunión, no alcanzaremos el éxito deseado en la

programación pastoral, y cito literalmente al PapaJuan Pablo II en Novo Millennio Ineunte: “Antes deprogramar iniciativas concretas hace falta promoveruna espiritualidad de comunión. Espiritualidad decomunión es saber dar espacio al hermano, llevandomutuamente la carga de los otros, rechazando lastentaciones egoístas que continuamente nos acechany engendran competitividad, ganas de hacer carrera,desconfianza y envidias. No nos hagamos ilusiones:sin este camino espiritual, de poco servirían loselementos externos de comunión” (N.M.I., 43). Esaes la enseñanza del Papa Juan Pablo II.

Claro, tener una espiritualidad de comunión vadirigida sobre todo a los agentes, a las personas, perotambién nos lleva a revisar las estructuras que estánal servicio de la pastoral de comunión o pastoralorgánica. De entre todas ellas solo quiero referirme ala Parroquia que es la expresión más sensible de lacomunión eclesial. Así lo dice Christifideles Laici:“Creemos simplemente que la antigua y veneradaestructura de la parroquia tiene una misión indispen-sable y digna de gran actualidad. Sin embargo, lospadres conciliares han considerado atentamente lasituación de muchas parroquias, solicitando una de-cidida renovación de las mismas” (CH.F.L., 26).

Esto ya fue en el año de 1985. De entonces paraacá, la insistencia en diferentes documentos del ma-gisterio sobre la necesidad de una renovación de lasparroquias, viene convirtiéndose prácticamente comoen un motivo dominante.

Ecclesia in America, el documento sinodal, diceasí: La Parroquia, nacida en ambiente rural, sufregrandes desafíos en el ambiente urbano y no se puedeconservarla sin transformaciones; de lo contrario sevolverían “inadecuadas y las posibilidades de acciónapostólica resultan notablemente reducidas” (E. inA., 41). Las exigencias de la continua movilidadhumana a causa del trabajo, de las relaciones sociales,del deporte, del esparcimiento, hacen indispensableque las parroquias tengan mayor flexibilidad en loreferente a los límites territoriales, que estén másintegradas con las parroquias vecinas y con otrasinstituciones de carácter diocesano.

Ahora se hace preciso reconocer que “muchasfunciones de irradiación religiosa y de apostolado deambiente en el campo cultural, social, educativo,profesional, etc., no pueden tener como centro opunto de partida la parroquia” (CH.F.L., 26). Elnuevo Código de Derecho Canónico ofrece tambiénnuevas modalidades de organización parroquial que


pág. 37Bol-241

deberían ser valoradas y ensayadas con valentía yprudencia, sobre todo en los grandes centros urbanos.

La transformación de la parroquia requiere indu-dablemente la transformación de la figura del párrocotradicional: “Hoy se requiere la figura de un pastorque en primer lugar tenga una profunda experienciade Cristo vivo, espíritu misional, corazón paterno,que sea animador de la vida espiritual y evangeliza-dor capaz de promover la participación” (E. in A.,41).

CAPÍTULO TERCERO: LA IGLESIA Y LA MISIÓN..

De la teología de la Iglesia como comunión laexhortación Christi Fideles Laici nos conduce a laconsideración de la Iglesia al servicio del evangelio:“Es el único e idéntico Espíritu el que convoca y unela Iglesia y el que la envía a predicar el evangeliohasta los confines de la tierra” (CH.F.L., 32). “LaIglesia tiene que dar hoy un gran paso en la evange-lización; debe entrar en una nueva etapa histórica desu dinamismo misionero” (CH.F.L., 35).

Resulta altamente inspirador para el trabajo evan-gelizador de la Iglesia las palabras de la Exhortación:¡El hombre es amado por Dios!. Este es el simplísimoy sorprendente anuncio del que la Iglesia es deudorarespecto al hombre. La palabra y la vida de cadacristiano pueden y deben hacer resonar este anuncio:¡Dios te ama, Cristo ha venido por ti; para ti Cristoes Camino Verdad y Vida!” (CH.F.L., 34).

No sería una respuesta evangélica por parte de laIglesia, si frente a los retos que proceden de la nuevacultura, cediéramos al pesimismo o la tentación desolo criticar, con una cierta nostalgia por un pasadomás claro, más ordenado. La respuesta verdadera nopuede consistir solo en condenar y denunciar, sinomas bien en evangelizar nuestros tiempos, los tiem-pos modernos, desde ellos mismos. Se requiere unasana actitud de discernimiento para evangelizar alhombre moderno, para descubrir lo que nos estádiciendo en su soledad y saber leer, desde el evan-gelio, los anhelos, los temores, las esperanzas queestán presentes, más que en el lenguaje, en la pro-fundidad existencial de este hombre contemporá-neo.

La evangelización que la Iglesia debe ofrecer seráuna respuesta al planteamiento que se hace todo serhumano: ¿Cómo realizarse en la vida? ¿Cómo seaprende el arte de vivir? ¿Cuál es el camino que llevaa la felicidad?. Evangelizar es mostrar ese camino, esenseñar el arte de vivir; precisamente Jesús se nos

hace presente como el camino que lleva a la felicidad.La pobreza más profunda es la incapacidad de ale-gría, el tedio de la vida considerada absurda y contra-dictoria. La incapacidad de alegría supone y producela incapacidad de amar; y el arte de aprender esteamor solo lo puede comunicar quien tiene la vida:Jesús que es el Evangelio en persona.

La Iglesia ha evangelizado siempre; evangeliza enel momento actual, pero hoy hay muchos hombresque no encuentran en la evangelización la respuestaconvincente a sus preguntas fundamentales. Por esohoy se hace indispensable una Nueva Evangelizacióncapaz de llegar a quienes no tienen acceso a laevangelización clásica y a quienes hoy piden unnuevo lenguaje y una nueva manera de acercarse aellos.

Ciertamente debemos usar de modo razonable losmétodos modernos para lograr que se haga accesibley comprensible la voz del Señor; pero estemos aten-tos: No queramos que se nos escuche a nosotros; loque debemos querer cuando evangelizamos, es elbien de las personas dando espacio a Aquél que es lavida. No podemos ganar nosotros a los hombres;debemos obtenerlos de Dios y para Dios. La palabradel anuncio debe estar siempre impregnada de unaintensa vida de oración.

¿Cuál es la situación que prevalece en nuestrapatria mexicana en el campo de la evangelización?.La Carta de los obispos mexicanos “Del Encuentrocon Jesucristo a la Solidaridad con Todos” señalaque hay avances, como el hecho de que hay unmayor número de laicos que participan en comuni-dades, hay iniciativas, hay movimientos y responsa-bilidades pastorales... Sin embargo se constata quemuchos católicos mexicanos carecen de la expe-riencia del encuentro permanente con Jesucristovivo; no tienen una adecuada formación de la doc-trina cristiana; viven sin suficiente compromiso enla transformación de la sociedad. Carecemos depropuestas adecuadas de evangelización kerig-mática, acordes a las nuevas situaciones. La super-ficialidad ha llevado a asociar la vida cristiana conel cumplimiento de ciertos ritos, en particular con laasistencia a la misa dominical. Se aumenta el divor-cio entre la fe y la vida: hay quienes, especialmentejóvenes, han perdido el sentido de la fe y no tienenla comprensión cristiana básica de la vida (cfr. Nos.104-109).

Ciertamente este planteamiento nos lleva a revisarcon valentía nuestras propuestas evangelizadoras.


pág. 38 Bol-241

No es cuestión sólo de cantidad, sino de calidad.Necesitamos mejorar las formas de evangelizaciónque permitan profundizar el encuentro permanentecon Cristo. Necesitamos desarrollar propuestascatequéticas que repercutan en los ambientes endonde se mueve la mayoría de las personas, sobretodo en zonas urbanas (cfr. Carta Nº 110).

La evangelización cuando cala en profundidadlleva a la conversión que significa dejar de vivir comoviven los demás; dejar de sentirse contento realizan-do actos que son ambiguos, deshonestos o positiva-mente perversos, solo porque así se comportan todoslos demás. Convertirse significa comenzar a ver lapropia vida con los ojos de Dios; no buscar el juiciode la mayoría sino el juicio de Dios.

La conversión personal tiene también evidentesrepercusiones sociales. Si vivimos una vida nueva, laofreceremos a los demás, la anunciaremos a los otroscon quienes buscaremos crear un espacio, una comu-nidad de vida nueva. Una conversión puramenteindividual no tiene consistencia.

Lo que no debemos permitir es que, ante losretos que hoy plantea la evangelización del hombrecontemporáneo, nos dejemos vencer por el des-aliento o la desesperanza. El hombre al que nostoca llevar el evangelio es, al fin y al cabo, un serhumano que necesita el mensaje de salvación. Lased de eternidad puede estar debilitada, pero nomuerta, porque siempre en la condición humanaqueda la necesidad de saciarse no solo de lo que secompra y se vende.

Quienes hoy se han alejado de la Iglesia o nomuestran interés por el anuncio del evangelio sonobjeto de un cuestionamiento: ¿qué tan profundaexperiencia alcanzaron de Cristo?. Tal vez sea conse-cuencia de no haber tenido sino una evangelizaciónhecha por medio de palabras incomprensibles, o quellegaron sólo a la inteligencia pero no al corazón; talvez sea la reacción de quienes han asistido a liturgiasque no les han transmitido mensajes de amor, que noles han permitido descubrir el gozo de vivir la vida deDios. La evangelización que hoy se exige, requiereno quedarse sólo en el campo del discurso, sinocolocar al ser humano en experiencias que le permi-tan superar el afán por el consumir, el tener, eldisfrutar. Evangelizar hoy supone poner al hombreen contacto con ambientes donde aprenda el signifi-cado de valores como la misericordia, la fraternidad,la esperanza, etc. Evangelizar supone crear pequeñascomunidades donde se celebre la fe y se haga posible

una respuesta comprometedora desde la escucha dela palabra de Dios.

Evangelizar supone ciertamente la transmisión decontenidos doctrinales y dogmáticos, pero que almismo tiempo penetren en el corazón; nos estamosrefiriendo a una evangelización que no se reduzca aofrecer sólo respuestas académicamente sólidas o agrabar en la memoria contenidos dogmáticamenteperfectos; nos referimos a crear ambientes donde laadhesión a la persona de Jesús inunde el corazón;“Que el amor al prójimo no quede en palabrasbonitas, sino que se transforme en una verdaderapasión por el otro y su bienestar; que la fidelidad setraduzca en una entrega sin condiciones hasta queduela” (Informe del CELAM – Año 2000 – Nº 266).

CONCLUSIÓN.

Ustedes se disponen a revisar el camino pastoralque han llevado en estos últimos años. Ciertamente lasituación actual ha cambiado enormemente en losúltimos tiempos. Hoy la Iglesia se enfrenta al reto deevangelizar a un hombre inmerso en una sociedadindividualista, utilitarista y permisiva. Hay que acep-tar las realidades concretas como retos, es decir comosituaciones cargadas de una fuerte provocación quenos obligan a pensar de otro modo, nos exigen tomardecisiones inaplazables y nos piden respuesta efica-ces. Los retos pastorales exigen serenidad, audacia ycreatividad.

Debemos hacer planes pastorales alimentados porconvicciones hechas de esperanza. Dios confía ennosotros, Él nos necesita; pero también dependerá denosotros mismos, de nuestra capacidad de tomardecisiones sabias, de nuestra eficacia colectiva parala reflexión y la búsqueda, de la acción concertadadentro de una espiritualidad de comunión.

“Si se mira superficialmente a nuestro mundo,impresionan no pocos hechos negativos que puedenllevar al pesimismo. Más éste es un sentimientoinjustificado: Tenemos fe en Dios Padre y Señor, ensu bondad y misericordia... Dios está preparando unagran primavera cristiana de la que ya se vislumbra sucomienzo” (Redemptoris Missio, 86).

León, Gto., 24 de Junio del Año 2002.

+ José G. Martín RábagoObispo de León.


pág. 39Bol-241

APORTES DECANALES SOBRE EL TEMADE LA VISION DE LA IGLESIA A LA LUZDE LOS ULTIMOS DOCUMENTOS

Al terminar la ponencia de Mons. Martín Rábago,hubo nuevamente reunión por decanatos y grupos detrabajo para elaborar los siguientes aportes, ideas,comentarios, dudas y reflexiones sobre el tema, mis-mos que fueron planteados al Sr. Obispo de León::

DECANATO 3:

Que si puede ampliar la explicación de la frase: Laliturgia es más para Dios que para el hombre.

¿Por qué en este tiempo hemos de hablar más deDios que de los hombres, según la sugerencia hechapor el obispo de Ratisbona a los cardenales?

La pastoral orgánica, ¿es el único camino derenovación y actuación del sacerdote en el momentoactual, o hay otros?

¿Cómo debe ser la relación entre los sacerdotes deuna misma ciudad?

DECANATO 4:

¿Cómo superar la cri-sis eclesiológica manifes-tada en la indiferenciaprovocada por laglobalidad y la novedad?

DECANATO 5:

¿Cómo hacer para lo-grar que las parroquiassean misterio, comunióny misión?

¿Cómo detectar queya está secularizada unacelebración?

¿Cómo hablar de Diosque es amor, sin descui-dar de su justicia divina?

DECANATO 6:

¿Cómo superar elactivismo en una Iglesia

de comunión y participación? Es necesario reunirsepero, ¿cómo combinar ésto?

¿Cómo evangelizar las instituciones y organiza-ciones sociales?

DECANATO 7:

La visión de parroquia, como que ya se estáquedando atrás, ¿qué propone para las parroquiasexistentes y en proceso de formación?

DECANATO 9:

¿Cuáles son las características propias de la espi-ritualidad de un sacerdote y un agente de pastoraldiocesano?

DECANATO 10:

La renovación de las parroquias en los retos delnuevo milenio, requieren de la unidad de los párrocosy vicarios, ¿cómo conciliar ésto en las diferentesformas de formación y generacionales?

RELIGIOSOS:

¿Cómo ayudar al pueblo que no tiene acceso paratoda esta informacióneclesiológica?

Ante los retos deltercer milenio, ¿quépasos debemos con-siderar para crecercomo Iglesia?

VICARÍA DE LAICOS:

Dentro de unaevangelización post-conciliar, ¿cuál es latarea de los grupos,asociaciones y movi-mientos?

SEMINARIO:

Nuestra realidadcambia constante-mente, ¿cómo respon-der a esta situación?

Reflexionespor mesas redondas


pág. 40 Bol-241

Al terminar de plantearle las preguntas surgidasen los grupos, el Sr. Obispo de León respondió:

"Bueno, yo voy a intentar más bien algunas res-puestas generales, porque evidentemente cada pre-gunta tiene su dosis de dificultad y creo que nitenemos el tiempo ni yo la capacidad para respondertodo. Algunas preguntas quiero referirme de maneramás directa.

¿CÓMO EXPLICAR LA FRASE DE QUELA LITURGIA ES MÁS PARA DIOS

QUE PARA LOS HOMBRES?

Yo creo que necesitamos enmarcarla en su verda-dera significación. ¿Qué es realmente la liturgia, sinoel acto de culto que el hombre tributa a Dios? Es unade las expresiones más eminentes de la religión.Evidentemente que la liturgia involucra al hombre,porque la liturgia está hecha para que el hombre seponga en comunicación, viene de la palabra, del actoreligioso, religión es religare, comunicar al hombrecon Dios, pero estamos hablando de la finalidad,¿qué es lo que la liturgia pretende realmente?. Laliturgia pretende darle a Dios lo que se merece, peroen la medida que nosotros tributamos a Dios el honorque se merece, finalmente somos nosotros mismoslos que acabamos transformándonos porque nos co-locamos en el lugar que nos corresponde comocreaturas. Es un acto de verdad, no somos nosotros elcreador, somos las creaturas. Hacer una auténticaliturgia, testificando nuestra dependencia y evidente-mente alabando, pidiendo, dando gracias a Dios, esoes lo que también transforma desde dentro la vida delhombre. La frase tiene la significación especialmenteen aquellos lugares en donde la litugia ha perdido susentido de encuentro con Dios para convertirse másque nada en un acto sociocultural, donde puede darseel caso de que el que preside tenga una preocupaciónprincipalísima de sobresalir, de hacer que caiga laatención sobre él mismo, convirtiéndose en actor,convirtiéndose en la persona que de alguna maneraaprovecha la cátedra o el altar para ser especialmenteél honrado, reconocido, venerado por una comuni-

dad. Ese es el sentido que en último término quedaríacomo enjuiciado críticamente a la luz de esta afirma-ción.

¿POR QUÉ LA INSISTENCIA DE HABLARMÁS DE DIOS EN ESTOS ÚLTIMOS TIEMPOS?

Una pregunta que, me parece, va al fondo de lacuestión, dicho un poco a la carrera. Yo creo que larazón es múltiple. Por una parte, como decíamos,porque es una manera de responder al reto del indife-rentismo que hoy es bastante evidente. Si en untiempo la cultura misma nos empujaba a tener sensi-bilidad para descubrirnos como creaturas y percibirla presencia de Dios en nuestra vida, hoy ya no es así,sabemos que vivimos en el contexto de lo que sellama la cultura de la posmodernidad y una de lascaracterísticas de la posmodernidad es precisamenteel pragmatismo, el indiferentismo, el confiar y ponertoda la seguridad en la ciencia y en la técnica. Siqueremos dar una respuesta a este problema, nopuede ser sino subrayando la necesidad que tenemosde Dios para finalmente no convertirnos nosotrosmismos en cosa, en último termino la capacidad quetengamos de subrayar la importancia y la presenciade Dios en nuestra vida es lo que nos humaniza anosotros. Una sociedad sin Dios es en último términouna sociedad deshumanizada. Entonces, la insisten-cia en subrayar la presencia de Dios es en últimotérmino por la urgencia de humanizar esta culturaposmoderna que nos lleva a ser simplemente consu-midores y como piezas de una fábrica para producircosas. Y, ¿por qué hablar más de Dios hoy?. Porqueya señalaba que de hecho algunas corrientes posterio-res al concilio Vaticano II, insistieron tanto en unadimensión horizontal como si la Iglesia estuvierallamada principalmente sólo a ser transformadora delas estructuras y de las sociedades, que finalmente seacabó por perder la dimensión propiamente religiosa.Diríamos pues que es una especie de reacción a lo queyo decía el excesivo énfasis en la dimensiónhorizontalista con la pérdida de la dimensión verticalque es indispensable. De alguna manera creo que la

Respuestas deMons. Martín Rábago

A LAS INQUIETUDES DE LOS GRUPOS DE TRABAJOA LAS INQUIETUDES DE LOS GRUPOS DE TRABAJOA LAS INQUIETUDES DE LOS GRUPOS DE TRABAJOA LAS INQUIETUDES DE LOS GRUPOS DE TRABAJOA LAS INQUIETUDES DE LOS GRUPOS DE TRABAJO


pág. 41Bol-241

ley del péndulo frecuentemente está presente en lahistoria y también en la espiritualidad, hay momentosen los cuales el péndulo se inclina mucho en unsentido fundamentalmente individualista, angelicaly otras veces en un sentido opuesto y nos lleva sobretodo a poner énfasis en el campo de la transformacióndel mundo y con detrimento de los otros valores. Eslo que dicen, la ley histórica de la tesis, antítesis ysíntesis. Entonces la insistencia en volver a la dimen-sión de misterio y descubrimiento de Dios pretenderegresar el péndulo a un punto de equilibrio.

LA PREGUNTA DE SI LA PASTORALORGÁNICA ES LA ÚNICA.

Yo no dudaría en decir que sí. Y por una razónmuy sencilla: Porque no hay pastoral auténtica queno sea eclesial. No hay pastoral orgánica que no seala expresión en acción de la vida misma de la Iglesiay no hay Iglesia si no es comunión en el cuerpo deCristo. Cualquier pastoral por tanto que sea indivi-dualista, aislada, no es simplemente entrar por uncamino de ineficacia, no es entrar por un camino queniega la verdad misma de la Iglesia en su constituciónconforme al proyecto de Dios. Por eso yo no dudaríaen dar una respuesta totalmente afirmativa.

¿CÓMO DEBE SER LA RELACIÓN ENTRE SACER-DOTES DE UNA MISMA CIUDAD?

Pues de comunión, evidentemente. Ahora, paraeso se necesita crear estructuras, no basta con quedigamos: Pues nos que-remos mucho tú y yo,somos compañeros yde vez en cuando nosencontramos. La co-munión, si no se con-vierte en una realidadconcreta, tangible, quepueda ser percibida,que tenga pues recur-sos eficaces, puedequedar en un vago sen-timiento que, final-mente no tiene ningu-na trascendencia en lavida. Entonces la res-puesta es: Los sacer-dotes de una ciudad,deben intensificar re-cursos que maduren lacomunión tanto en el

aspecto espiritual, como en el de relaciones humanas,como de proyectos pastorales.

¿CÓMO SUPERAR EL ACTIVISMO?

Bueno, una cosa es el compromiso pastoral y otracosa es el activismo. Sabemos que la palabra'activismo' tiene un sentido peyorativo, de exceso.Les pongo una descripción de lo que puede ser unsacerdote afectado por el activismo: Un sacerdote X,que ha perdido la capacidad de encontrarse con suscompañeros, que ha perdido el gusto por un tiempopara sí mismo, para leer, para la oración, que no tieneninguna oportunidad para un poco de descanso enunas vacaciones legítimas, que está sometido a unambiente de estrés constante, que está acosado por unprograma o una agenda totalmente saturada y queacaba finalmente por deteriorarlo en su salud física ypsicológica. Y frecuentemente una persona que viveasí ni siquiera se da cuenta de que en el fondo no estárespondiendo al proyecto de Dios. Ayer nada menosme tocó tener una reunión con el grupo de sacerdotesmayores de cuarenta años de ordenados y trabajába-mos este tema y decíamos que a los sacerdotes quetenemos más tiempo de ordenados, se nos inculcóuna mentalidad de que teníamos que estar siempre alpie del cañón y que el sacerdote que era auténticamentesacerdote era un hombre que estaba las veinticuatrohoras del día a disposición de la comunidad y que nohabría posibilidad de safarse de los compromisos nihorarios porque eso era de alguna manera aburguesa-


pág. 42 Bol-241

miento. Y de alguna manera ésto repercutió en unaactitud de que si alguien en algún momento se tomabaun tiempo para descanso, para convivir con suscompañeros, podría provocar hasta una especie deremordimiento, como decir: Estoy traicionando mivocación sacerdotal. En el fondo esto es un activismoy es un activismo que destruye y es un activismo queno permite al sacerdote vivir inclusive con una saludpsicológica para poder tener también amabilidad,bondad, un trato cordial con la gente. Va afectándoseel sistema nervioso y nos va convirtiendo poco a pocoen personas agrias, agresivas en nuestro trato, difíci-les en nuestras relaciones. Ese es el producto delactivismo. Entonces hay que superar el activismo,pero no la disposición para el trabajo. El cardenalMartini decía, hablando a los sacerdotes de Milán:Miren, más vale que al principio se excedan entrabajar, para que luego les digan 'cálmale un poqui-to', y no que ya comiencen tan cansados, que seanecesario decirles: 'Oye, éntrale con ganas, ¿no?'.

¿CÓMO SUPERARLAS INSTITUCIONES SOCIALES?

Bueno, pues ésto es más difícil. Las institucionesson muy diferentes. Instituciones son los partidospolíticos, los sindicatos, la verdad es que yo no meanimaría a dar una respuesta a esta pregunta que esmuy amplia y lo único que diría es que se necesitatener la valentía de acercarse a esos centros dondefinalmente se toman las decisiones que repercuten enla vida social. Creo que a muchos de nosotros, sacer-dotes, se nos ha educado principalmente para eltrabajo en ambiente de parroquias y muchas veces -no hago un juicio sobe la situación concreta de estepresbiterio porque honestamente no tendría capaci-dad para hacerlo y mucho menos generalizado-, peroyo percibo que a veces de parte de nosotros lossacerdotes hay un cierto temor o timidez para acer-carnos a esos centros de decisión y poder presentar elevangelio sin quererlo imponer, pero al mismo tiem-po con la valentía de quien lleva una convicción. Aveces faltan sacerdotes por ejemplo para animarse air al mundo universitario. Hay un cierto temor dedecir: 'Pero yo qué puedo decir, yo qué puedo hacer.A mí mandenme a una parroquia y yo en la parroquiame moveré muy bien.' ¿Te animarías a ir a un lugardonde se reúnen políticos para animarte a dialogarcon ellos y transmitirles el mensaje del evangelio?¿Te animarías a ir a un sindicato y transmitirles loscriterios básicos de la dotrina social de la Iglesia? ¿Noserá que nos falta también -así lo pienso- más arrojo

y más capacidad para acercarnos a esos lugares que,si no son evangelizados, van a repercutir negativa-mente sobre el ambiente de la sociedad?. Desde luegoen el seminario la capacidad para prepararse paraesos ambiente. Yo recuerdo, cuando era rector en elseminario de Guadalajara, que se hizo una visitaapostólica a todos los seminarios y se preguntaba:¿Qué apostolados realizan los seminaristas? Y larespuesta fue que principalmente se hacía apostoladoen ambientes rurales y de periferia, pensábamos quecon eso estábamos muy bien. Y la respuesta de Romafue: Está muy bien que preparen a los jóvenesseminaristas para atender ambientes de periferia yambientes rurales, pero urge que preparen tambiénpara acercarse a ambientes urbanos de clases mediasy altas, donde también tienen necesidad de la Palabrade Dios y donde hay que preparar sacerdotes capacesde dialogar con esas personas que tienen decisionesimportantes en la vida de la sociedad.

¿CÓMO DETECTARQUE UNA LITURGIA ESTÁ SECULARIZADA?

Pues yo diría que una liturgia está secularizada siefectivamente al terminarse el evento preguntára-mos: ¿Tuviste la experiencia de haberte acercado alSeñor? ¿Percibiste la voz del Señor? ¿Hablaste con elSeñor? Yo preguntaría si a veces ciertas liturgias enlas cuales se utilizan muchos elementos para que lagente cante y brinque y aplauda y al terminarse todoeso, la pregunta: Después de todo eso, ¿tu fe se hatransformado? ¿pudiste de veras decir al Señor lo quenecesitabas decirle?

¿CÓMO HABLAR DEL AMOR DE DIOS,SIN SEPARARLO DE LA JUSTICIA?

Esta es una pregunta interesante. Dios es amor,pero el amor también requiere que prediquemos lajusticia divina. Yo creo que en ese sentido nos lopresenta Jesucristo nuestro Señor. El Dios que Jesu-cristo nos presentó es evidentemente Padre y Cristono solamente habló de Dios como Padre, sino quepuso muchos signos concretos a través de los cualespudimos detectar que El venía especialmente a con-vocar a los pecadores, comió con los pecadores,prefirió estar cerca de publicanos y prostitutas. Estosgestos son la mejor revelación del amor preferencialde Dios por los pobres, por los alejados y por lospecadores. Sin embargo, no podemos ocultar el sen-tido de la justicia divina a través de lo que llamaría-mos el temor de Dios. Sabemos que el temor no es elmiedo. Nadie tiene necesidad de aprender a tener


pág. 43Bol-241

miedo. Aprendemos el miedo instintivamente. Yo nocreo que sea necesario enseñarle a un niño a tenermiedo ante un peligro, eso es instintivo. El temor deDios es la expresión de alguien que amando no quierecausar pena, tristeza a aquel a quien amamos. Es laactitud de un hijo que amando efectivamente a supadre, no quiere causarle la pena de comportamientoque contradicen su condición filial. Tenemos queinculcar el temor de Dios bajo este aspecto que no esde la amenaza, que no es simplemente del Dios quetiene la espada en la mano para caer encima denosotros, pero sí de una conciencia sensible y delica-da que no quiere dañar una relación filial con Dios.

¿CÓMO RESPONDERA UNA SITUACIÓN CAMBIANTE?

Pues yo creo que la respuesta a una situacióncambiante es estarnos constantemente revisando,como lo están haciendo ustedes. Hoy los planes depastoral no creo que sea prudente hacerlos a períodosmuy largos, períodos de diez años, por ejemplo.Porque un plan que se hizo para ahora y hasta dentrode diez años lo vamos a revisar, probablemente ya elmundo cambió y ya no es eficaz, hay que estarconstantemente revisándose. Y yo creo que una dió-cesis que quiera estar respondiendo eficazmente a lassituaciones, necesita tener lo que llamaríamos unacomisión o secretariado, o como quieran llamarle dereflexión, no solamente una comisión de planeación,sino una comisión de reflexión, cuya función esprecisamente estar detectando los signos de los tiem-pos y estar previendo hacia donde se mueve el mun-do, para estar también buscando respuestas antes deque el problema se presente. Yo tengo que decir queen el ambiente de mi diócesis he querido lograr éstoy todavía no lo tengo, pero lo siento como unanecesidad. Tener efectivamente un equipo formadopor laicos, religiosos, religiosas y sacerdotes quetengan una función de detectar el tipo de respuestasque se están dando, la situación del mundo y previen-do -como digo- la evolución futura para poder ade-lantarnos a los problemas antes que se presenten.

¿CÓMO SUPERARLA CRISIS DE INDIFERENCIA?

No hay más que evangelizar, pero yo les decía enla reflexión que hice, no es cuestión sólo de cantidadde evangelización, si damos una evangelización enun lenguaje, en un estilo incomprensible, que no caleen el corazón de las personas, que no deje la experien-cia de una respuesta a las preguntas que están en lo

interior del corazón del hombre, no vamos a superarel problema de la indiferencia. Pongo un ejemplo:Estamos frente a una sociedad que es muy relativista,la indiferencia se traduce en un relativismo moral.¿Cómo hoy se decide qué es bueno y qué es malo?Generalmente a través de encuestas. Vemos en latelevisión que aparecen las preguntas: ¿Cree ustedque el aborto es bueno? llame a tal número. ¿Cree quees malo? llame a tal número. Y finalmente dicen alterminar el programa: ¿Ya ven? la mayoría de lagente dice, el 65%, que el aborto es bueno. Eso quedaen el ánimo de la gente con la convicción de queentonces sí es bueno, porque si la mayoría de la gentedice eso, así tiene ser. Eso es lo que se llama unasociedad que se maneja con criterios de consensosmínimos y de una ética relativista. Pero la preguntaes: ¿Por qué la gente piensa así? ¿Por qué la gentetiene este tipo de concepción o de tipo moral? Hayalgo que nos está diciendo que la moral que lepredicamos ha sido una moral que en realidad estáalejada de sus verdaderas preocupaciones, que nece-sitamos predicar una moral que se basa en el evange-lio, pero que toma en cuenta al hombre en estasituación concreta. El aborto, ¿por qué se da?. Yopuedo decir simplemente: Todas las mujeres queabortan han cometido un pecado muy grave y estánexcomulgadas, y es cierto, hay una pena de excomu-nión para quien comente, claro, ya se entiende quevoluntaria y libremente el aborto. Pero la pregunta es:Con la condena y con la excomunión, ¿estoy respon-diendo al problema moral que tiene esta persona?¿Alguna vez nos hemos preguntado si acaso la Iglesiatiene una propuesta que evite que se den los abortos?¿Nos hemos preocupado por ejemplo por una pasto-ral familiar donde sea posible que las jovencitas no seexpongan a los riesgos de las violaciones o a relacio-nes prematrimoniales antes de tiempo? ¿Hemos esta-blecido una pastoral familiar adecuada? ¿Tenemoscasa donde recibir a las mujeres que van a ser madressolteras y a las cuales estamos condenando solamentecon la excomunión del aborto? Es decir, la supera-ción de la indiferencia consiste en darnos cuenta de sisomo sensibles a los problemas de esta sociedad parano solamente condenarla, sino para darle una res-puesta que vaya a sus verdaderas preguntas.

¿CUÁLES SON LAS CARACTERÍSTICASDE LA ESPIRITUALIDAD DEL SACERDOTE

Y DE LA GENTE?

Pues yo creo que esto sí lo saben. Las caracterís-ticas de la espiritualidad del clero diocesano es


pág. 44 Bol-241

específicamente lo que nos trae Pastores Dabo Vobisy pues sería mucho entrar en una relación de todo loque trae PDV. Lo que yo quisiera especialmenteseñalar en cuanto al clero diocesano es la espiitualidad

de pertenencia. El sentir que efectivamente forma-mos parte de una familia que es el presbiterio y actuaren consecuencia. Yo veo que muchos religiosos sesienten como muy honrados en decir que pertenecena una congregación X: salesianos. Ya hablan de todossantos salesianos que hay, los que van a beatificar oa canonizar, tienen todas las noticias de todo lo quesucede en el mundo de los salesianos. Así debería sertambién la espiritualidad del sacerdote diocesano:Conocedor de su diócesis, de su historia, de susalegrías, de sus éxitos y de sus fracasos, conocedor delos demás hermanos sacerdotes, gozarnos con loshermanos sacerdotes que tienen algún triunfo y sentirtristeza por los que están abatidos. Formar unapertenencia no sólo teológica o especulativa, sino dehecho, en la vida. Esto es uno de los elementos quePastores Dabo Vobis subraya fuertemente.

Para terminar, porque hay otras preguntas que yanos llevarían más tiempo. Hay una pregunta sobremovimientos, asociaciones y grupos. Esto me parecemuy importante. Es un fenómeno propio de los tiem-pos que estamos viviendo, que se están multiplicandolos grupos, movimientos y asociaciones. Las asocia-ciones tradicionales están entrando en un ambientecomo de crisis y están surgiendo nuevos movimien-tos, no sé, cualquiera conoce el movimiento de reno-vación cristiana en el Espíritu Santo; pues en algunossectores de la Iglesia ahora está muy fuerte un mo-

vimiento ligado completamente a los legionarios,que es el regnum Christi; en ambientes europeos,comunión y liberación; otros movimientos que sonmuy conocidos aquí en la región, cursillos, movi-

miento familiar cristiano, etc. El Papalo ha señalado muy claramente, queson una verdadera riqueza del Espíri-tu a la Iglesia y yo pienso que unpárroco que tuviera como criterio apa-gar todos los movimientos, yo diríaque no está procediendo en la línea enque está soplando la acción del Espí-ritu. Si parece a veces que hay algu-nos párroco que dicen: En mi parro-quia ningún movimiento, en mi pa-rroquia sólo el que yo diga. Comoque es una actitud excesivamente cen-tralizadora, y tal vez autoritaria, ¿no?.Pero el riesgo de los movimientos estambién que frecuentemente, voy adecir una palabra muy fuerte, ustedesbusquen la manera de acomodarla,

frecuentemente son como las transnacionales, es de-cir, que no se sienten ligados propiamente ligados aun compromiso diocesano, sino que obedecen auto-ridades que están fuera de la diócesis, inclusive fueradel país. Y entonces no son sensibles a los proyectospastorales que tiene la diócesis o la parroquia ytrabajan al margen en una acción paralela, lo cualhace difícil la conjugación orgánica de una pastoraldiocesana o parroquial. Yo a veces les digo poco enplan de broma, cuando visito algún movimiento:Oigan, pues yo creo que tiene más influencia aquíentre ustedes 'Susi' y 'Suchi', que son las que dan lasórdenes, más que el obispo, porque están atentos a loque dijo en la última reunión 'Susi' o quién sabe quiény es casi como palabra de Dios. Están atentísimos alas indicaciones que vienen del nacional o del inter-nacional. Bueno, pues un movimiento debe de saber-se insertado en la Iglesia y no en una Iglesia abstracta,sino en una Iglesia concreta. No existe la Iglesia enabstracto, sino particularizada, donde yo la puedopercibir. Eres miembro de un movimiento en laIglesia diocesana de San Juan de los Lagos, aquítienes qué conocer tú el plan diocesano de San Juande los Lagos y tienes qué buscar que la identidad detu movimiento (cursillos, movimiento familiar cris-tiano, etc.) entre en conjunción con el proyecto pas-toral de tu diócesis. Y si en algún momento hayconflicto entre las dos fidelidades, debe prevalecer lafidelidad diocesana, porque antes que otro, eres mo-


pág. 45Bol-241

vimiento de la Iglesia concreta que es la diócesis. Nodigo que sea fácil, ¿eh?. Se trata de algo que cuestatrabajo. El Papa, en las reuniones que ha tenido variasveces con los diferentes movimientos, en una actitudcomo de un papá que tiene que poner orden entre loshijos que se pelean, dice: Los movimientos debenvivir siempre una actitud de respeto y docilidad a lospastores. Luego dice a los pastores, dice a los sacer-dotes: Hermanos obispos, queridos hijos sacerdotes,juzguen cordialmente a los diferentes movimientos.Cordialmente significa no con la frialdad de quienjuzga sin interés, sino desde el corazón. Juzguen conamor, para que tengan también capacidad de com-prender y alentar. Es como lo que decía San Pablo:Júzguenlo todo y quédense con lo bueno. No debe-mos ser simplemente los que vamos a apagar accio-nes que el Espíritu de Dios realiza, no es tan sencillo,lo sé que cuesta trabajo, pero ese es el criterio. Porúltimo:

¿CÓMO CONCILIAR LA INTEGRACIÓNENTRE PÁRROCOS Y VICARIOS?

Hermanos, la única respuesta que les puedo dar:Conversión. Si no nos convertimos, todo es inútil. Laconversión que significa la capacidad de todos losdías estar disponibles -como decía el Papa- para nohacer que caigamos víctimas de la envidia,competitividad, del afán de hacer prevalecer nuestraspropias ideas, que es lo que muchas veces nos impidey nos obstaculiza. Yo, al hablar con los sacerdotes, lesdigo ésto a los sacerdotes y espero que los laicos nose escandalicen de lo que voy a decir, porque ustedeslos laicos que están aquí son personascomprometidas, pero les digo ésto: Creoque frecuentemente la fuente de sufri-mientos mayor que tenemos los sacerdo-tes, no procede de las relaciones quellevamos con los laicos, que son siempreen general comprensivos hacia nosotroslos sacerdotes, que suelen participarnoshasta de sus bienes, que saben muchasveces como en el caso de los hijos de Noéque cuando vieron a su padre que se habíaembriagado y lo vieron desnudo, con unsentido de pena y de respeto -como dicela Biblia- cubrieron con un manto susvergüenzas. Muchas veces así procedenlos laicos frente a las deficiencias quetenemos nosotros los sacerdotes, los lai-cos que están cerca saben ser comprensi-vos, nos perdonan, saben disimular nues-

tros defectos. A veces la fuente principal de sufri-mientos viene de las relaciones mismas entre noso-tros, que nos falta también esa madurez para aceptar-nos, para perdonarnos. Quien tiene la autoridad es elpárroco, eso es evidente, pero una autoridad al estilode Cristo Buen Pastor, que no es impositiva, que noes déspota. Todo lo demás al revés de lo que dice SanPablo en la primera carta a los Corintios: La caridades comprensiva, etc. Esa es la relación que debemosllevar. Se ha hecho difícil a veces la relación por elconflicto generacional, las relaciones entre sacerdo-tes más grandes de edad y más jóvenes de edad.Necesitamos reconocer que todos tenemos un lugarimportante en la Iglesia. El Papa ha invitado muchoa ésto, el joven, que entienda que su juventud, sudinamismo se necesita en la Iglesia, pero no menos-precie al sacerdote de más edad; y el sacerdote de másedad, que entienda también que reconozca que tieneque seguir aprendiendo cosas. El que causa proble-mas no es el viejo por ser viejo, sino el viejo anqui-losado, el viejo que no se renueva, el que se acostum-bró a repetir siempre lo mismo y si alguien trae algodiferente, éste «anatema sit». Ese es el que en realidadpuede provocar conflictos. Hay viejos prematura-mente avejentados, porque puede darse el caso dealguien que tiene 40, 45 años, que es muy joven, peropuede tener una mentalidad ya cerrada y causa con-flictos. Y hay personas de 70 años que mantienen unamente joven, todavía están ágiles y abiertos y nocausan problemas. Todos tenemos que convertirnos,comenzando con nosotros los obispos. Muchas gra-cias por su atención.


pág. 46 Bol-241

LECTIO DIVINA

Atenas, “Una ciudad llena de ídolos”(HCH 17,15-34)

mejor vista panorámica de la catástrofe (cf. Jon 4,5).Nosotros, conociendo la realidad en que vivimos,podemos exclamar como los discípulos de Jesús:“Señor, ¿a quién iremos? Tú tienes palabras de vidaeterna, y nosotros creemos y sabemos que tú eres elSanto de Dios” (Jn 6,68).

En medio de tanta confusión, relativismo y pro-puestas efímeras, urge una propuesta nueva y segura,trascendente, de vida eterna. Hay que presentar elverdadero rostro del ‘Dios desconocido’ (Hch 17,23),Jesucristo. ¿Cómo? Esta es nuestra búsqueda.

El texto neotestamentario que vamos a leer, medi-tar y orar podría darnos alguna pista.

1. Lectio. Leemos y comprendemos la Palabra ensu contexto

Una persona lee pausadamente Hch 17,15-34.Durante un breve silencio, cada uno de los asistentesvuelve a leer el mismo texto en particular, consultan-do las notas de pie de página de su biblia. Después sepuede complementar con lo siguiente:

Los Hechos de los Apóstoles pueden definirsecomo la ‘historia general de los orígenes del cristia-nismo en historias particulares y relatos representa-tivos’; es una narración dramática de episodios suel-tos. Se trata de una historia teológica.

Técnicas del género literario de los HechosLucas, el autor de los Hechos de los Apóstoles,

nos ofrece todo su trabajo con la siguiente presenta-ción: sumarios, relatos y discursos.

Sumarios. Son breves resúmenes de la vida de lacomunidad (2,42-47; 4,32-35; 5,11-16; 8,1b-3). Sonuna reflexión teológica.

Relatos. Son una selección de sucesos, centradaen los personajes más representativos, para mostrar larevelación de Dios en la expansión del cristianismo.

Discursos. Suelen colocarse dentro de los relatos.En ellos se presenta el mensaje salvífico, tomando encuenta la situación de los destinatarios.

INTRODUCCIÓN

Cuando San Agustín resume su concepción socialen dos esquemas intuitivos: la ‘ciudad de Dios’ y la‘ciudad del mundo’, habla de este último esquemacomo de una realidad opuesta al orden querido porDios. La ciudad del mundo está edificada sobre unorden humano; puede tener el aspecto de una magní-fica organización; puede ser capaz de grandes reali-zaciones, pero mientras su esencia entera esté volca-da en los bienes de esta tierra, de los cuales ansíagozar en vez de usar para un fin más noble, más alláde las apetencias puramente humanas, para un fin queestá en Dios, pertenecerá aún a esta tierra; en el fondono será más que desorden y sus valores serán enrealidad pura ilusión. La ciudad de Dios, en cambio,consta de hombres que entran en el eterno orden deDios.

Podemos decir, con San Agustín, que hoy estamosmuy afanados en construir la ciudad del mundo.Vivimos un tiempo caracterizado por una razón dé-bil, por un pensamiento débil, donde la explotacióndel deseo nunca satisfecho es lo más importante. Losmercados consumistas alimentan el deseo, últimoreducto de la subjetividad debilitada. La postmo-dernidad es experimentar sin freno el alocamiento, lalibertad sin condiciones. El espíritu de la postmo-dernidad, que está invadiendo nuestras ciudades yhasta nuestras comunidades rurales no tiene nada queofrecer a los pobres, solamente se ha quedado en unapropuesta para narcisos autosatisfechos y gozadores.La gente de nuestro tiempo quiere vivir fuera de loslímites que le impone la razón, la norma, la religión,la moral. Es el otro extremo del positivismomodernista, que buscaba en la razón la justificaciónde todo.

Nuestras ciudades están hoy ‘llenas de ídolos’, loscuales tenemos que ir identificando y poniéndolesnombre. Da la impresión de que algunos profetaspostmodernos han perdido la esperanza, están cansa-dos y se han sentado, como Jonás, a ver la destrucciónde Nínive debajo de un árbol esperando solamente la


pág. 47Bol-241

NUESTRO TEXTO

El texto que hoy nos ocupa es un relato quecontiene un discurso de Pablo en la ciudad de Atenas.

Tratemos de reconstruir nuestro texto fijándonosen los datos que él mismo nos aporta. Nos podemosayudar de las siguientes preguntas.· ¿Cuál es la situación que encuentra Pablo en Ate-

nas? (v. 16).· ¿Cuáles escuelas filosóficas estaban representadas

en Atenas? (v.18).· ¿Con qué otras perso-

nas Pablo entablabaconversación en Ate-nas? (vv.17.18).

· ¿Cuáles son lasreacciones de losatenienses ante lapresencia y la pro-puesta de Pablo? (cf.vv. 18-20; 32.34).

· ¿Qué significa la cu-riosidad que tenían losatenienses y cómo laaprovecha Pablo?

· ¿Cómo califica Pablo alos atenienses?

· ¿De qué habla Pabloen su discurso a los atenienses? ¿Qué era lo quepretendía Pablo con su discurso, y cuál fue lareacción final de sus oyentes?Ahora prestemos más atención al discurso de

Pablo. En él, aplica muy bien las partes esenciales deldiscurso antiguo, que son las siguientes:

a) El exordio, que pretende ganarse la simpatía de losoyentes (vv. 22b-23a).

b) La proposición y la narración, que es la presenta-ción del tema que se va a tratar, y la explicaciónmás amplia de dicho tema, respectivamente (vv.23b: “lo que adoráis sin conocer, eso os vengo yoa anunciar”).

c) Demostración y pruebas (cf. vv. 24-29). Estaspueden ser:Pruebas no artificiales: son suministradas desde

fuera del mismo discurso retórico (testigos, juramen-tos, pactos…).

Pruebas artificiales: constituyen el objeto mismode la retórica (signos, argumentos, ejemplos).

d) La conclusión, que recuerda al oyente los puntosprincipales y lo invita a tomar decisiones (cf. vv.30-31).Intentemos reconstruir el discurso de Pablo en

Atenas atendiendo a las partes del discurso retóricoseñaladas arriba.

El exordio es magistral. Es un cumplimiento cortésque se transforma en crítica, y sabe percibir un valorprofundo. Se percibe también el ansia de una religiosi-dad frustrada: los atenienses tenían tantos dioses que yano les satisfacían. Ello los llevó a invocar al Dios

‘desconocido’, al que trataban de llegar a través de suignorancia y frustración confesadas.

En su discurso, Pablo habla del verdadero Dioscontraponiéndolo a las concepciones paganas. En suargumentación resalta los puntos siguientes:a) Dios creó el universo; por tanto, su presencia no se

agota en templos construidos por hombres, ni tienenecesidad del culto que se le da (vv. 24-25).

b) Dios creó al hombre y le colmó de sus beneficios;por tanto, es absurdo equipararlo a objetos mate-riales, como las estatuas (vv. 26-29).

c) Dios deja pasar lo que proviene de la ignorancia delos paganos que no lo conocían; sin embargo, unavez que les es anunciado, los llama a la conversión,en la perspectiva del juicio (vv. 30-31).Atenas, con sus templos (Hch 17,16, sus filósofos

(17,18) y su curiosidad y afán de novedades intelectua-les (17,18b-21), era el centro espiritual del helenismopagano y símbolo de la cultura griega.

Es el primer encuentro no tanto con el paganismo,que ya había tenido lugar en otras partes, sino con la


pág. 48 Bol-241

cultura pagana, con los representantes de la élitecultural del tiempo: estoicos y epicúreos.

Estamos ante un discurso hábilmente preparado;es un ejemplo de inculturación que, sin embargo, noquita nada a la originalidad del mensaje cristiano. Apesar de que Pablo usa elementos de la cultura de susoyentes, citando incluso a poetas griegos, del mismomodo que citaba las Escrituras cuando se dirigía a losjudíos, no hace un discurso de filósofo, sino deprofeta. Anuncia a un hombre resucitado de entre losmuertos, que permite vencer la ignorancia en la quecayeron durante siglos naciones enteras, es decir, laidolatría.

Pablo se alinea con los más grandes filósofos ypoetas que habían criticado la idolatría, pero dice loque no podían decir ni los filósofos ni los poetas: esposible llegar a la verdad a través de un hombre,acreditado por Dios con la resurrección de entre losmuertos; un hombre que será también el juez final,esto es, el criterio del bien y del mal. Frente a unanuncio tan poco «racional», el auditorio, comosiempre, se divide. Muchos se van con una sonrisaen los labios, mientras que otros se adhieren alanuncio. Es el misterio de la libertad y condiciónhumanas.

Se ha discutido si el discurso, es decir, el intentode inculturación, fue un éxito o un fracaso. Delmismo modo que se ha discutido si, después de esteintento, cambió Pablo sus modalidades de anuncio.Sin embargo, parece que la intención de Lucas hasido ofrecer el ejemplo de un modo de presentacióndel kerygma a los paganos cultos. Los resultados sonlos esperados, dado que la Palabra de Dios divide loscorazones y las mentes. Con todo, hasta en la brillantey, en conjunto, superficial Atenas nace una comuni-dad cristiana: eso es lo importante para Lucas. Hayque recurrir a todas las modalidades de anuncio parapredicar a Cristo.

El discurso intenta encontrar los mayores puntosde contacto entre una concepción religiosa paganaseria, representada por filósofos y poetas, y el mensa-je cristiano. Se puede hablar a partir de Hechos 17,27,de un cierto conocimiento natural de Dios, parecidoal de Rm 1,19-21 y Sb 13,1-19, cercanos a ideasestoicas. Pero toda esa situación humana previa, auncon sus rasgos positivos, todavía es calificada comotiempo de la ignorancia (Hch 17,30), y hay queanunciar la revelación definitiva de Dios. Ese puntocentral está constituido por Cristo resucitado (Hch17,31) y el juicio que conlleva la actitud de acepta-

ción o rechazo ante él. Aquí se llega al final de lasanalogías y se plantea la opción de la fe personal enel Señor Jesús. Todo lo anterior puede valer y ayudar,pero en un momento determinado es preciso decidir-se y comprometerse frente a Cristo resucitado.

2. MEDITATIO.LA PALABRA ILUMINA NUESTRA VIDA

Se puede volver a leer el texto. Confrontándonoscon la Palabra de Dios, pensemos en nuestra vida y ennuestro ministerio. Nos podrían ayudar los siguientescuestionamientos.

Una ciudad como Atenas puede representar muybien a muchas de nuestras ciudades, a nuestrosareópagos modernos. ‘Atenas estaba llena de ídolos’:· ¿Cuáles son las aportaciones del marco referencial

de la realidad sobre las condiciones actuales por lasque están pasando nuestras ciudades? ¿Cuáles sonlos problemas más graves que necesitan ser atendi-dos por la pastoral urbana? ¿Cuáles son sus causasy sus tendencias?

· ¿Cuáles son los ídolos presentes en nuestras ciudadesy comunidades? Ponles nombre a cada uno de ellos.

· ¿Cuál es el ‘culto’ que se les da a esos ídolos actualesque señalas?

· ¿Podríamos decir que todavía hoy el Dios verdaderorevelado en Jesucristo sigue siendo desconocido enalgunos sectores de nuestras ciudades? ¿Qué tipode personas necesitan una mayor evangelización ycatequesis?

· ¿Por qué se dice que este episodio de Pablo enAtenas es un modelo de la inculturación del Evan-gelio?

· ¿Qué ‘filosofías’, ideologías o mentalidadessubyacen en la gente de nuestras ciudades? ¿Qué eslo que está alimentando esa situación y comporta-miento?

· El contenido esencial del discurso de Pablo es bienconcreto y definido: Habla del ‘verdadero Dios porquien se vive’ (cf. v. 28). ¿En qué temas insistes confuerza en tu ministerio pastoral? ¿Crees que lo quedices y haces, tomando en cuenta la condición ysituación de los diversos destinatarios, es lo másimportante, lo esencial y fundamental del kerygmacristiano?

· Pablo, en su discurso, buscó los puntos comunes decontacto para presentar el mensaje cristiano. ¿Cuá-les son, en nuestras ciudades y comunidades dehoy, esos puntos que harán posible el diálogo entreel Evangelio y la cultura?


pág. 49Bol-241

Una constatación:

“El fenómeno de la urbanización continúa cre-ciendo también en América. Desde hace algunoslustros el Continente está viviendo un éxodo constan-te del campo a la ciudad. Se trata de un fenómenocomplejo, ya descrito por mi predecesor Pablo VI.Las causas de este fenómeno son varias, pero entreellas sobresale principalmente la pobreza y el subde-sarrollo de las zonas rurales, donde con frecuenciafaltan los servicios, las comunicaciones, las estructu-ras educativas y sanitarias. La ciudad, además, conlas características de diversión y bienestar con que nopocas veces la presentan los medios de comunicaciónsocial, ejerce un atractivo especial para la gentesencilla del campo.

La frecuente falta de planificación en este procesoacarrea muchos males. Como han señalado los Pa-dres sinodales, ‘en ciertos casos, algunas partes de lasciudades son como islas en las que se acumula laviolencia, la delincuencia juvenil y la atmósfera dedesesperación’. El fenómeno de la urbanización pre-senta así mismo grandes desafíos a la acción pastoralde la Iglesia, que ha de hacer frente al desarraigocultural, la pérdida de costumbres familiares y alalejamiento de las propias tradiciones religiosas, queno pocas veces lleva al naufragio de la fe, privada deaquellas manifestaciones que contribuían a sostener-la. Evangelizar la cultura urbana es, pues, un retoapremiante para la Iglesia, que así como supo evange-lizar la cultura rural durante siglos, está hoy llamada allevar a cabo una evangelización urbana metódica ycapilar mediante la catequesis, la liturgia y las propiasestructuras pastorales” (Ecclesia in America 21).

Una reflexión“La ruptura entre Evangelio y cultura es sin duda

alguna el drama de nuestro tiempo... La nueva evan-gelización pide un esfuerzo lúcido, serio y ordenadopara evangelizar la cultura. El Hijo de Dios, al asumirla naturaleza humana, se encarnó en un determinadopueblo, aunque su muerte redentora trajo la salvacióna todos los hombres, de cualquier cultura, raza ycondición. El don de su Espíritu y su amor vandirigidos a todos y cada uno de los pueblos y culturaspara unirlos entre sí a semejanza de la perfecta unidadque hay en Dios uno y trino. Para que esto sea posiblees necesario inculturar la predicación, de modo que elEvangelio sea anunciado en el lenguaje y la cultura deaquellos que lo oyen. Sin embargo, al mismo tiempono debe olvidarse que sólo el misterio pascual deCristo, suprema manifestación del Dios infinito en la

finitud de la historia, puede ser el punto de referenciaválido para toda la humanidad peregrina en busca deunidad y paz verdaderas. El rostro mestizo de laVirgen de Guadalupe fue ya desde el inicio en elContinente un símbolo de la inculturación de laevangelización, de la cual ha sido la estrella y guía.Con su intercesión poderosa la evangelización podrápenetrar el corazón de los hombres y mujeres deAmérica, e impregnar sus culturas transformándolasdesde dentro” (Ecclesia in America 70).

El discurso de Pablo en el Areópago de Atenasofrece un modelo insuperable a aquellos que, todavíahoy, se sienten impulsados a evangelizar las culturas,o bien, a inculturar el Evangelio. Y lo es por lossiguientes motivos: Primero, porque sabe encontrarel punto justo de inserción del nuevo mensaje en lasituación cultural que encuentra. No es solo una‘captatio benevolentiae’, sino una delicada y valienteoperación de injerto entre dos mundos diversos, entredos mentalidades opuestas. En segundo lugar, por-que Pablo sabe conducir la religiosidad-ignoranciade los griegos a aquella necesidad natural de Dios quees connatural a toda criatura humana y que la empujaa buscar a Dios, andando como a tientas. En fin,porque, a tiempo oportuno, Pablo presenta el evange-lio, el anuncio de Cristo, muerto y resucitado: es aesto a donde él quería llegar, porque es lo fundamen-tal del kerygma. Vale decir, sin embargo, que Cristo,muerto y resucitado, es para Pablo no solo unrehabilitador del pasado y del presente, sino que estambién aquel que, aún hoy, se presenta en el hori-zonte de la humanidad. De hecho, él es ‘aquel queviene’, y vendrá a ‘juzgar la tierra’. Es en él en quienel mundo de hoy debe hacer su opción.

El cristianismo es también pensar la fe y compro-meterse místicamente en todo campo, es decir, llevarla ‘locura’ de la cruz y la alegría de la resurrección atodos los ambientes.

“Para poner remedio a la mentalidad relativista,cada vez más difundida, es necesario reiterar, antetodo, el carácter definitivo y completo de la revela-ción de Jesucristo. Debe ser, en efecto, firmementecreída la afirmación de que en el misterio de Jesucris-to, el Hijo de Dios encarnado, el cual es ‘el camino,la verdad y la vida’ (cf. Jn 14,6), se da la revelaciónde la plenitud de la verdad divina” (Decl. DominusIesus, 5).

El Espíritu Santo hará la auténtica hermenéutica delas palabras del Señor y de la realidad de nuestrasciudades, para que los apóstoles de hoy puedan cami-


pág. 50 Bol-241

nar a través de la historia con la ‘mente de Dios’, consu modo de ver y de juzgar, de sentir y de obrar.

La comprensión del verdadero sentido de las co-sas, de la historia, de los acontecimientos, de lasrealidades de nuestros pueblos y ciudades está reser-vado a los que tienen el Espíritu de Jesucristo resuci-tado.

Pero es necesario que el Espíritu pueda hablar. Latradición ha hablado de la necesidad de disponer deun corazón «purificado» para comprender las cosasde Dios tal como son sugeridas por el Espíritu. ElOriente cristiano ha meditado largamente sobre labienaventuranza: «Felices los puros de corazón, por-que verán a Dios». La visión de Dios y de sus obras,la comprensión de las palabras de Jesús, su actualiza-ción a las distintas situaciones en diferentes momen-tos de la historia personal o general, están reservadasa aquellos que dejan hablar al Espíritu, en un corazónpurificado, progresivamente liberado de los apegos ycondicionamientos mundanos. Las épocas máscreativas para la fe han sido las épocas en las que senos obligaba a la liberación interior, a la oración, a lasantidad. Es en los santos donde las palabras delSeñor se realizan al máximo. A ellos es a quienes seda la comprensión profunda de las cosas de Dios, asícomo una comprensión particular del momento his-tórico. Conocer la realidad según Dios es algo distin-to al conocimiento necesario típico de la racionali-dad: es dejar que el Espíritu hable en un corazóndesalojado de las cosas demasiado terrenas.

3. ORATIO. LA PALABRA SE HACE ORACIÓN

Oremos con el Apocalipsis:

Lector 1: “Luego vi un cielo nuevo y una tierra nueva,porque el primer cielo y la primera tierra desapa-recieron, y el mar no existe ya.

Lector 2: Y vi la Ciudad Santa, la nueva Jerusalén,que bajaba del cielo, de junto a Dios, engalanadacomo una novia ataviada para su Esposo. Y oí unafuerte voz que decía desde el trono: ésta es lamorada de Dios con los hombres.

Todos: Pondrá su morada entre ellos y ellos serán supueblo y él, Dios-con-ellos, será su Dios. Yenjugará toda lágrima de sus ojos, y no habrá yamuerte y no habrá llanto, ni gritos, ni fatigas,porque el mundo viejo ha pasado.

Lector 1: Entonces dijo el que estaba sentado en eltrono:

Lector 2: Mira que hago un mundo nuevo. Y añadió:

Todos: Estas son las palabras ciertas y verdaderas. Yano habrá noche; no tienen necesidad de luz delámpara ni de luz del sol, porque el Señor Dios losalumbrará y reinarán por los siglos de los siglos”(Ap 21,1-5; 22,5).

Preces:Todos los hombres, animados por el Espíritu, son

impulsados a buscar a Dios y una salvación quesolamente puede venir de lo alto. Mientras contem-plamos la acción del Espíritu, oremos diciendo:

R/ Abre, Padre, el corazón de tus hijosal Espíritu de la verdad.

Por la Iglesia, para que con un solo corazón y unasola alma, sea fermento de unidad en la edificacióndel Reinado de Dios. Oremos.

Por los hombres y mujeres de nuestras ciudades,para que acojan al Dios de Jesús que es la respuestaíntima al sentido de la vida. Oremos.

Por nuestras ciudades y comunidades rurales, paraque encuentren espacios de oración y contemplacióndel ‘verdadero Dios por quien se vive’. Oremos.

Por cuantos anuncian la Palabra de Dios, para queafronten con valentía y madurez evangélica los nue-vos retos que les impone la urbanización y extraigandel tesoro evangélico palabras nuevas de esperanza,sobre todo para los jóvenes de hoy. Oremos.

Señor, las propuestas que se nos hacen son múlti-ples. Las comunicaciones nos inundan hoy de men-sajes multiformes y contradictorios. Con frecuenciano sabemos hacia dónde orientarnos. Concédenos uncorazón desprendido y vacío de las cosas temporalesy superfluas que nos esclavizan para dejarte hablar ati; concédenos un corazón humilde y sencillo paraescuchar tus palabras de vida eterna, y la palabras detu Iglesia, que orientan nuestra vida. Sobre todo, hazque no estemos condicionados por las indicaciones ypropuestas del mundo, sino que busquemos en todotu voluntad y la vivamos con amor. Si queremos serluz del mundo, debemos proponer soluciones ilumi-nados por la luz que viene de ti. Unas veces medianteel proceso de un delicado discernimiento; otras, me-diante la certeza que da el hacer tu voluntad.

Padre, que nos haces descubrir cada día cosasnuevas sobre tu amor por nosotros, danos la fantasíay la valentía del Espíritu para que lo que tú nos revelasen tu Hijo Jesucristo transforme nuestra vida. PorCristo, nuestro Señor.Se puede terminar con el canto

‘Señor, ¿a quién iremos?’


pág. 51Bol-241

Acuerdos Finales

Continuó el P. Porras con los acuerdos finales dela asamblea:

“Al querer iniciar nuestra elaboración del marcoeclesial, creo que podríamos plantearlo como: ¿QuéIglesia queremos construir en nuestra Diócesis? Sinduda la que Cristo quiere. Y ¿cuál es la que Cristoquiere? La que llena diversas características queahora Monseñor Rábago con tanta claridad nos hadelineado. Le agradecemos por eso y hacemos votospara que el Señor lo siga iluminando en la conducciónde la diócesis hermana de León. Lo queremos hacersiempre a nuestra manera sencilla, una religiosa anombre de nuestra Diócesis va a expresarle nuestroagradecimiento, además de nuestras oraciones, tam-bién con este pequeño detalle”.

Agradeció una religiosa:“Bueno, Sr. Obispo, de verdad sinceramente le

agradecemos todas sus aportaciones que nos dio.Sabemos sinceramente que todo lo que usted nos haplanteado en estos momentos va a ser de muchariqueza para programar nuestro próximo plan pasto-

ral y que en este pequeño detalle sabe usted que vanprincipalmente todas nuestras oraciones porque esta-mos unidos con usted en una comunión espiritual.Gracias”.

Concluyó el P. Porras:“Una última cosa que quisiéramos tener en cuenta

en cuanto a los acuerdos. Sencillamente los hago deesta manera. Vamos a seguir estudiando los temas denuestro marco de realidad social teniendo en cuentalas aportaciones de los resultados del control que yatenemos ahí. Vamos a empezar a preparar nuestromarco eclesial. Y ya Monseñor Rábago nos ha dadomuchos elementos de gran valía en este sentido. Unode los objetivos de esta asamblea era presentar elequipo base para que empezara medio a trabajar y asentar precisamente las bases de este marco eclesial.No fue posible por varias razones. Nuestro Sr. Obis-po en la homilía ya decía que en estos días estátratando de hacer algunos cambios en los serviciospastorales, cambios que han surgido en parte por lasaportaciones

2 Nuevos Obispos alteños

pág. 52 Bol-241

Circular del Sr. Obispo

OBISPADO DE SAN JUAN DE LOS LAGOSAPARTADO NUM. 1SAN JUAN DE LOS LAGOS, JAL. 47000

que, para que se capte la preocupación de cadacomunidad parroquial en concreto, por dejar unahuella de su agradecimiento a Dios y de su cariño alos nuevos Obispos, cada una de ellas lleve unamanta grande que señale su propio nombre y elmotivo que la hace presente.

Aunque la labor ministerial de Mons. José Maríaha sido muy conocida y disfrutada a nivel diocesano,creo conveniente recalcar que su servicio ha dejadosiempre el sabio testimonio de un sacerdocio vividoen entrega auténtica a Jesucristo y a su Iglesia.

Yo sé que un medio general y atinado paraagradecer al Todopoderoso por el beneficio que nosha hecho, y para que sea siempre una realidad lasantificación y fecundidad ministerial de Mons.JOSE MARIA y de Mons. RAFAEL, será nuestraoración sostenida por ellos.

La celebración litúrgica de la OrdenaciónEpiscopal, tendrá lugar en el Auditorio «BenitoJuárez» -con sede en Guadalajara, Jal.-, el día 16 delpróximo mes de Julio, a las 11:00 de la mañana.

San Juan de los Lagos, Jal., 20 de Julio de 2002.

Obispo de San Juan de los Lagos.

ASUNTO. ANTE UNA GRATA NOTICIA,SE HACE UNA ENCARECIDA INVITACION.

Circular No. 6/02A TODA LA FAMILIA DIOCESANAIncesantemente hacemos patente al Señor nues-

tro profundo agradecimiento por el Don misteriosoy excelso del Episcopado en su Iglesia y, ahora, nosllenamos de gozo en esta Iglesia particular, ante lanoticia oficial enviada por la Santa Sede, en la quese nos anuncia que el Santo Padre, Vicario deJesucristo en la tierra, ha nombrado Obispos Auxi-liares del Emmo. Sr. Cardenal D. Juan SANDOVALIÑIGUEZ, Arzobispo de Guadalajara, a Mons.RAFAEL MARTINEZ SAINZ, hasta ahora Vica-rio General de esta misma Arquidiócesis, y a Mons.JOSE MARIA DE LA TORRE MARTIN, hastaestos días, Asesor de Pastoral en la Catedral-Basí-lica de esta ciudad.

No deja de ser significativa para esta Diócesis deSan Juan de los Lagos, la grata coincidencia casiexacta, del acontecimiento que estoy comunicandoa ustedes, con la ya muy próxima (29 de Junio)celebración del 30 ANIVERSARIO DE LA EREC-CIÓN DE ESTA DIOCESIS. Brota espontánea unadeducción: tiene que ser prevalente dentro de losfestejos pertinentes, el hecho de que uno de susmiembros haya sido preconizado Obispo en unafecha tan cercana al día 29 de Junio.

A fin de que nuestra solidaridad diocesana semuestre expresiva una vez más, es un vivo deseomío que todo el presbiterio, a ser posible, se hagapresente en la Ordenación Episcopal de los Sres.Obispos antes nombrados y, además, que se hagauna hábil promoción en manera que cada comuni-dad de religiosas (os) y seglares de la Diócesis, sevea representada en dicha celebración. Me ocurre


pág. 53Bol-241

Nombramiento del Sr. ObispoJosé María de la Torre Martín

Juan Pablo obispo, siervo de los siervos deDios, al amado hijo José María de la Torre Martíndel clero de la diócesis de San Juan de los Lagosy actualmente rector de la pastoral de la IglesiaCatedral, elegido obispo auxiliar del prelado de laarquidiócesis de Guadalajara y titular de Panato-ria, salud y bendición apostólica.

La distinguida Iglesia de Guadalajara, quesobresale de las comunidades mexicanas, acude anuestra solicitud, y con gusto nos apresuramos a atenderla, para quesiga promoviendo la vida espiritual con gran fruto, ya que el venerablehermano nuestro Juan, cardenal de la santa Iglesia romana SandovalIñiguez, arzobispo de esta sede, ha solicitado otro colaborador en elministerio apostólico que le auxilie en las necesidades pastorales,recurrimos a ti, amado hijo con gran confianza para encomendarte esteencargo, ya que sabemos que posees la conveniente ciencia y estásbien ejercitado en el ministerio pastoral.

Por tanto, tomando en cuenta el parecer de la congregación para losobispos, por nuestra autoridad apostólica te nombramos obispo auxi-liar del arzobispo de Guadalajara y te honramos con el título dePanatoria, para que goces a la vez de todos los derechos y deberes queestán en consonancia con tu destino y tu estado según las prescripcio-nes de los cánones sagrados. Por esto podrás recibir la ordenaciónepiscopal por un obispo católico fuera de la ciudad de Roma y anteses necesario que hagas la profesión de fe y emitas el juramento defidelidad a Nos y a nuestros sucesores según las fórmulas establecidasque procurarás enviar a la Congregación para los obispos debidamenteordenados.

Por lo demás, amado hijo, te ayudarán mucho los oficios que hastaahora has desempeñado. Por lo mismo, juzgamos que estás capacitadopara realizar cosas mayores solicitando el auxilio de lo alto y dejándo-te guiar por el mismo Ordinario para que así se fortalezcan la fe y lapiedad y también abunden las obras dignas de aprobación.

Dado en Roma cerca de San Pedro el 19 del mes de Junio del añodel Señor 2002, XXIV de nuestro pontificado, Juan Pablo II.


pág. 54 Bol-241

1. Monseñor José Maríade la Torre Martín

Campesino, obrero, maestro.Ahora nombrado Obispo.

• Arnold Omar Jiménez RamírezSu Santidad Juan Pablo II, tuvo a bien nombrar

como Obispo Auxiliar de la Arquidiócesis de Gua-dalajara al Padre José María de la Torre, convirtién-dose en el primer sacerdote en ser elevado al gradoepiscopal desde que se fundó la diócesis de San Juan,hace 30 años; aunque no el primero de estas tierrasalteñas, fructíferas en vocaciones sacerdotales.

De origen sencillo y pueblerinoJosé María de la Torre Martín nació en el seno de

una familia humilde, sencilla, cristiana, en Pegueros,Jalisco, el 9 de septiembre de 1952. Es el último deocho hermanos, de los cuales tres se consagraron aDios, uno en el clero secular y dos como hermanosmaristas. Vivió pocos meses en su natal pueblo,hasta que sus padres decidieron establecerse enTepatitlán, Jalisco, en donde recibió los Sacramen-tos de iniciación cristiana.

Estudió en el Colegio Morelos de los hermanosmaristas, semillero de decenas de sacerdotes, y fueen ese tiempo cuando sintió el llamado de Dios:«Son dos los momentos específicos en los que yopodría señalar que me impulsaron al Sacerdocio -comenta el Obispo electo- uno es el testimonio demi madre, fiel devota de la Virgen del Carmen, yque nos acercaba continuamente a la Eucaristía.Entonces yo veía a los sacerdotes y me llamaba laatención el ser como ellos; el otro momento fuecuando murió un sacerdote anciano y en ese enton-

ces los colocaban en ataúdes muy pomposos; re-cuerdo que mi papá me llevó a ver al difuntosacerdote y me acercó a verlo; esa imagen se mequedó muy grabada».

De seminarista a obreroA la edad de once años ingresó al Seminario

Diocesano de Guadalajara a la sección Secundaria,conocida como San Martín. En ese entoncesTepatitlán pertenecía a la Arquidiócesis de Guada-lajara, y los aspirantes al Sacerdocio emigraban a laciudad para la formación. En Guadalajara cursótoda Humanidades y Filosofía, en donde tuvo comomaestro al ahora Arzobispo tapatío, Cardenal JuanSandoval Íñiguez.

Al separarse la región de los altos de la diócesistapatía en 1972, se incorporó a San Juan de losLagos y presentó un proyecto para tener una expe-riencia obrera: Se trataba de conocer de cerca larealidad de la gente necesitada; entonces laboró enuna fábrica de pantalones. Esta experiencia es unade las que ha marcado la vida pastoral del ObispoElecto José María, en la que se ha distinguido por sucercanía con las personas, con sus superiores, porsu capacidad de diálogo en todos los ámbitos.Recibió el Orden del Diaconado el 15 de abril de1970; su generosidad lo llevó a la diócesis deCiudad Obregón a prestar su servicio pastoral comodiácono, ya que en aquellas zonas se adolece devocaciones sacerdotales.

La ruta de la formaciónEn 1982 fue enviado a Roma a especializarse en

Pastoral Juvenil en la Universidad Salesiana, ypermaneció en la Ciudad Eterna hasta 1985. A suregreso, ha desempeñado varios cargos en la Dióce-

DosNuevosObisposAlteños


pág. 55Bol-241

sis de San Juan de los Lagos: fue Vicario en laParroquia de San Juan Bautista (de 1985 a 2001);fue Asesor del Presbiterio y de los agentes depastoral, Vicario Diocesano de Pastoral, miembrodel Consejo Diocesano de Consultores y en diciem-bre del año 2001 se le encomendó la Dirección dela Pastoral en la Catedral Basílica de San Juan de losLagos. En la diócesis se ha distinguido por ser unsacerdote servicial, que se sabe dar a querer. Losobispos diocesanos han confiado mucho en él.

Orar por los nuevos obisposMonseñor José María de la Torre asumirá muy

pronto su labor como Obispo Auxiliar de Guadalaja-ra, trabajando al lado del señor Cardenal Juan SandovalÍñiguez; ante la nueva responsabilidad que le enco-mienda la Iglesia se siente tranquilo, sorprendido«porque Guadalajara es una diócesis que exportaobispos y pocas veces los importa».

Está seguro de que habrá mucha gente que pidapor él: recuerdo que hace unos días- comentó- fui aSanta Ana de Guadalupe, en donde nació SantoToribio Romo y se me acercó una niña de apellidoMartín con su catequista y me dijo: «Padre, le quierodecir una cosa: es que se hizo una “rifa” de todos lossacerdotes de la diócesis entre los niños y las perso-nas de Santa Ana, porque Quica, la hermana de SantoToribio, oraba mucho por los sacerdotes y nos pidie-ron recobrar esta misión de orar por los sacerdotesexpresamente, y a mí me tocó orar por usted». Estoyseguro de que la gente de Guadalajara hará oraciónpor su servidor; en estos momentos recuerdo laspalabras de Su Santidad Juan Pablo II: “Si alguno deustedes experimenta la llamada del Señor a entregar-se totalmente a Él para amarlo con un corazón indi-viso, que no se deje detener por la duda, por el miedo.Que pronuncie su propio sí sin reservas fiándose deÉl, que es fiel a todas sus promesas”».

2. Mons. RafaelMartínez Sáinz

“Quiero estar cercano a todos”

• Jesús Carlos Chavira CárdenasMiércoles 19. Mes: Junio. El repiquetear del telé-

fono era constante y pertinaz. Cada llamada era unafelicitación. Algunas eran de fieles o sacerdotes deGuadalajara; otras más, provenían de Ocotlán, Jalis-co, de donde fue párroco por 28 años.

Tras contestar el teléfono, una sonrisa se esbozabaen su rostro al escuchar la voz amiga, y exclamaba:“Ora por mí para no irla a regar”.

Así pasaron más de cinco llamadas. Cada unasonaba al minuto de la otra. Fue necesario solicitar ala recepcionista del Arzobispado de Guadalajara que,por un momento, no le comunicara más personas.Sólo así fue posible continuar y concluir el diálogocon aquel hombre de Iglesia que, el próximo 16 dejulio, será consagrado como nuevo Obispo Auxiliarde Guadalajara.

Este era el ambiente que envolvía la oficina deMons. Rafael Martínez Sáinz, donde fungió comoVicario General de la Arquidiócesis desde 2001, asícomo miembro del Consejo Presbiteral y del Colegiode Consultores. En ella concedió a Semanario laprimer entrevista de su vida con un medio de comu-nicación.

Para él, la noticia fue el lunes 10Ese miércoles apenas se hacía público su nombra-

miento. Sin embargo, habían pasado nueve días de suvisita a la Nunciatura Apostólica. Aquel lunes a las10:00 a.m., Mons. Giuseppe Bertello le confirmó,escueto, una noticia que sospechó desde el momentoen que el Cardenal Juan Sandoval Íñiguez le informóque era necesario acudiera con el representante delPapa en México.

“Recibí la noticia con miedo. Me da miedo equi-vocarme. Pero confío mucho en Dios Nuestro Señory en el Espíritu Santo que me va a guiar”.

Con 42 años como sacerdote y 67 de edad, Mons.Rafael Martínez será el mayor de los Obispos Auxi-liares. Sólo es dos años menor que el CardenalSandoval. Por esta razón dice que comentó al Nuncioque “ya estaba viejo para esas cosas”, a lo cual Mons.Bertello respondió: “La experiencia es la que vale yes la que hemos tomado en cuenta”.

Sabe trabajar en equipoSi alguien puede constatar la experiencia pastoral

de Mons. Martínez Sáinz es el también Obispo Auxi-liar Mons. Benjamín Castillo Plascencia: “Don Ra-fael fue mi párroco cuando estuve de vicario en laParroquia del Señor de la Misericordia, en Ocotlán.Es un hombre muy servicial, trabajador, de muchainiciativa. Es queridísimo por aquella comunidad. Esun hombre muy valioso. Sabe hacer equipo, delegarresponsabilidades y apoyar. Además, es un granamigo que sabe impulsar la vida comunitaria. En su


pág. 56 Bol-241

tiempo, se logró formar una verdadera comunidadsacerdotal en su Parroquia. Es un hombre que sabetomar decisiones, sabe corregir y orientar. Va a ser ungran obispo. Tiene don de gobierno”.

Además de Ocotlán, Mons. Rafael Martínez estu-vo ocho años en Tecoaltitán, pueblo de Zapotlán delRey. Ahí fue su primer destino. En aquel tiempoviajaba constantemente a Guadalajara como auxiliarde la caja del Obispado. Posteriormente fue designa-do a San Miguel del Espíritu Santo por cinco meses.Actualmente era párroco de la Madre de Dios desde1998.

El Cardenal Juan Sandoval descubre en Mons.Martínez “un talento notable, inteligente y tambiénuna grande capacidad organizativa. Lo ha manifesta-do en las obras que ha hecho cuando ha sido Pastor dealguna comunidad. Ha sido un hombre emprende-dor”.

De Roma viene…Cabe indicar que nuestro entrevistado convivió

siete años con el Cardenal Sandoval en el Colegio PíoLatino-Americano, cuando el Purpurado tambiéncursaba sus estudios en Roma. Ambos eran parte delcentenar de sacerdotes mexicanos que estudiaban enla Ciudad Eterna, y de la comunidad de 15 presbíterostapatíos.

De aquel entonces, el Cardenal Juan Sandovaltiene vivo el recuerdo de la visita que realizó juntocon Mons. Rafael Martínez al Monte Albernia,cercano a la ciudad italiana de Asís, donde SanFrancisco recibió los estigmas. “Estuvimos en unconvento y convivimos tres o cuatro días. Pudecontemplar en él a un hombre muy piadoso, unhombre muy de Dios”.

Fue en Roma donde Mons. Rafael Martínez reci-bió la Ordenación Sacerdotal el 25 de octubre de1959, por Mons. Antonio Samore, miembro de laSecretaría de Estado del Vaticano. Fue compañero deordenación de Mons. Ramón Godínez Flores, quienfuera Obispo Auxiliar de Guadalajara y, actualmen-te, Obispo de Aguascalientes.

En la Ciudad Eterna obtuvo la licencia en Teolo-gía Dogmática y en Doctrina Social de la Iglesia en laPontificia Universidad Gregoriana.

Hijo de Arandas y del barrio de Santa TereOriundo de Arandas, Jalisco, Mons. Martínez será

el tercer Obispo que surge de aquella tierra alteña,

después de Mons. Adolfo Hernández Hurtado y Mons.Jacinto Guerrero Torres, respectivamente ObispoEmérito de Guadalajara y Obispo de Tlaxcala.

Un año después de aquel 29 de septiembre de 1935en que vio la luz por vez primera, dejó Arandas yemigró a Guadalajara junto con su familia por moti-vos de trabajo de su padre, ubicándose en el barrio deSanta Teresita.

Ahí vivió su infancia y conoció al Padre RománRomo, hermano del Santo Mártir Toribio Romo. Suejemplo sacerdotal motivó al pequeño Rafael a entraral Seminario a los 12 años de edad. Su internado lovivió en la antigua casa donde hoy es el Instituto deTeología, también en “Santa Tere”. Fue recibido porel Padre Avelino Sánchez, por Mons. Antonio Saha-gún –hoy Obispo Emérito–, y por el coadjutor Mons.Santiago Méndez Bravo –actual Rector de la UNI-VA–.

Su vida seminarística la vivió en todas las casasque tuvo el Seminario: Santa Teresita, Reforma,Antonio Bravo, San Sebastián de Analco, San Martíny Chapalita.

A favor de los hombresMons. Rafael Martínez reveló que el lema para su

Escudo Episcopal será el mismo de su OrdenaciónSacerdotal, tomado del capítulo quinto de la Carta deSan Pablo a los Romanos: “A favor de los hombres”.

En este sentido advierte que del trabajo episcopalle atrae el contacto con las comunidades parroquia-les, la gente y los sacerdotes. “Para mí es muyimportante apoyar y animar a los sacerdotes, a losagentes de pastoral y a los fieles en general. Siemprehe pensado que es muy necesario que todos nossintamos y experimentemos cercanos al Obispo.Quiero estar cercano a todos”.

Señala que el principal reto que ve en la tareaepiscopal es la evangelización y el testimonio cohe-rente. Por ello, a través de este medio pide la oraciónde la grey tapatía porque “siento que es un trabajomuy difícil”, dice.

No obstante, durante el diálogo con él, percibi-mos paz, tanto en su rostro como en su voz. Sólo alrecibir alguna llamada de felicitación su miradarevelaba un cierto nerviosismo. Al terminar la entre-vista, el teléfono volvió a repiquetear con júbilo. Sinduda, para Mons. Rafael Martínez Sáinz, la cercaníade los amigos hará inolvidable aquel día miércolesde 2002.


pág. 57Bol-241

Chema, Padre Chema, Monseñor José María:Hace treinta años que el buen Dios quiso que esta

porción de su pueblo empezara a caminar comoIglesia local. Hoy se me ha invitado a dirigirme a ti,intentando ser portavoz de nuestro presbiteriodiocesano.

Treinta años son buenos para muchas cosas. Sonbuenos para recordar que, mucho antes, el admira-ble labrador preparó la tierra, abrió los surcos ydepositó en ellos las semillas de su Verbo.

Treinta años atestiguan que cuatro Obispos hanvelado pacientemente la semilla. Han cavado laga-res. Han construido torres. Han visto, ilusionados,la lluvia que empapó la tierra y se han alegrado alcontemplar los huertos floridos.

Treinta años también son buenos para cosechar.Los frutos están maduros y el vino se ha añejado. Yse hace presente el Dueño de la Viña. Observó atodos los labriegos en plena faena y se fijó en tí. Yte invitó a trabajar en otro campo de su misma viña.

Como siempre, las viejas historias de profetas sehicieron nuevas: «Soy tartamudo», diría uno. «Soyun muchacho», gritaría otro.«Soy un hombre de labios im-puros», terciaría uno más. Y,como siempre, el Dueño de laViña resultaría campeón. Nodigas: «Soy un muchacho, quea donde yo te envíe irás». «Yopondré mis palabras en tuboca».

El desenlace siempre hasido el mismo: «Tú me sedu-jiste», reconocería uno. «Túeras más fuerte que yo», de-claraba otro. «Tú lo sabes todo.Tú sabes que te amo», decía elprimer Papa. «Porque tú lodices», respondiste tú, PadreChema, con la certeza serenade que Dios es el bueno.

Justo cuando levamos anclas para remar maradentro, tú tendrás que explorar otros mares, sa-biendo que la brújula es la misma, y el mismocapitán, y la misma barca empujada por mismoviento del Espíritu.

Nosotros rogaremos al Dueño de la mies paraque prepare la tierra y puedas abrir surcos, deposi-tar semillas de vida eterna, y cuidar la cosecha hastaque el Dueño del campo se presente para dar la parteque le toca a cada uno.

Chema, amigo y compañero. Agradecemos tucapacidad que Dios te dio, y que tú compartistegenerosamente con nosotros, para contribuirorganizadamente en la construcción del Reino deDios en esta porción de su pueblo.

Monseñor José María, Obispo. Bien sabes quenuestra Diócesis será una casa con la puerta siem-pre abierta, con el pan caliente, el vino añejo, y unasilla más, para poder sentarnos a la mesa de lafraternidad siempre que quieras. Que Dios bendigatu ministerio.

Brindis en la convivenciacon el Presbiterio de San Juan


pág. 58 Bol-241

Misa de Agradecimientoy Despedida

SEÑOR OBISPO DON JOSE MARIA DE LA TORRE MARTIN.SEÑOR OBISPO DON JOSE MARIA DE LA TORRE MARTIN.SEÑOR OBISPO DON JOSE MARIA DE LA TORRE MARTIN.SEÑOR OBISPO DON JOSE MARIA DE LA TORRE MARTIN.SEÑOR OBISPO DON JOSE MARIA DE LA TORRE MARTIN.

Lic. David Noel Ramírez

«Ustedes no me han elegido;sino que yo soy el que los haelegido a ustedes y los he desti-nado para que vayan por todo elmundo y den fruto y su fruto seaduradero». (San Juan 15, 16).

Excelentísimo Señor ObispoDon José María de la Torre Mar-tín

Estimados Sacerdotes:Señoras y señores:Nos hemos reunido llenos de

alegría esta noche, para demos-trarle nuestra gratitud y admira-ción al Padre Chema, como cari-ñosamente, hasta hace un mes,lo llamábamos; por su entregagenerosa a Dios y a su Iglesia, demanera particular en nuestraDiócesis de San Juan de los Lagos, y específicamentepor su servicio en la Parroquia de San Juan Bautista.Entrega que no ha conocido tregua; entrega que noha requerido descanso para llevar el Evangelio pordoquier.

Este es un acontecimiento que debemos situarloen el campo del espíritu, de las cosas que atañen alalma. Lo decimos así, con sencillez, pero con granemoción, porque estamos a lado de un sacerdoteque ha trascendido, que ha dejado huella no sólo ennuestra Parroquia, sino en toda nuestra Diócesis.

A través de esta celebración, también queremosreiterar nuestra admiración y respeto a los sacerdo-tes. Ser sacerdote es ser vaso de elección, es serescogido entre los hombres para la realización deuna tarea de servicio, de genuina promoción huma-

na, que implica la renuncia de símismo; es, en pocas palabras,convertirse en otro Cristo. Es serguía, pastor, maestro, puente en-tre Dios y los hombres, entre loterrenal y lo eterno. Es tarea ycompromiso. Es lucha continuapor permanecer totalmente dis-ponible para Cristo y para el pró-jimo. Es seguir a Cristo «pobre,humilde y cargando con la cruz,para merecer la participación desu gloria». Es renunciar a unaposición cómoda y quizá irres-ponsable, para asumir una decompromiso y riesgo.

Si hemos de reconocer quelos sacerdotes no caen del cieloal azar, sino que nacen de unafamilia donde reciben de sus pa-

dres los primeros impulsos para encausar su voca-ción, queremos rendir homenaje a sus padres, espe-cialmente a doña Mariquita, que seguramente consu ejemplo y sus virtudes hicieron brotar en elcorazón del hijo, sentimientos de piedad y de renun-ciamiento personal que luego culminaron en elsacerdocio de su hijo.

Gracias, Padre Chema, por todas las leccionesque durante tu vida sacerdotal, día tras día, en lasdiferentes misiones que se te han encomendado ennuestra diócesis, nos dejas:

Primero, gracias por enseñarnos que para vivir aplenitud nuestra vocación, sea la que fuere,ante todo necesitamos alimentar con intensi-dad nuestra alma, como tú lo has hecho.


pág. 59Bol-241

Segundo, gracias por mostrarnos que jamás pode-mos vivir nuestra vocación, si no tenemos comonorma de conducta el seguir preparándonos yestudiando día tras día.

Tercero, gracias por contagiarnos de que la Iglesiade hoy necesita sacerdotes y laicos, que unansus esfuerzos con dirección clara, con estrate-gias definidas y acciones concretas, que sepantrabajar en equipo; es decir, necesitamos sacer-dotes y laicos más profesionales que se entre-guen sin titubeo al servicio de Dios, de suIglesia y del prójimo.

Cuarto, gracias porque a través de tus celebracio-nes eucarísticas nos dejas la lección inolvida-ble, que desde el Vaticano segundo, se hapromovido. Que un católico no puede concre-tarse en participar solamente de la Eucaristía,sino que debe escuchar la Palabra de Dios,meditarla y vivirla con pasión en las diferentestrincheras que le toca vivir según su vocación.

Quinto, gracias por tu celo, para ayudar a los másnecesitados y desprotegidos. Muestra de ello esla labor callada que has hecho en Cáritas. Milesde sanjuanenses y peregrinos han recibido apo-yo. Gracias, por tu trabajo constante y tenaz afavor de los que menos tienen. Esta actitud tuyanos recuerda lo que Juan Pablo II en su primeravisita, al ver la pobreza de nuestros hermanosindígenas en Oaxaca, nos dijo a los mexicanos:«Sobre toda propiedad privada grava una hipo-teca social». Nunca será aceptable llamarsecatólico y permanecer indiferente ante el dolory el sufrimiento humano.

Sexto, gracias por la amistad sincera que nos hasbrindado a todos sin importar nuestro nivelsocial o nuestra forma de pensar. Has sabidoofrecernos una amistad limpia y sincera, quizáporque sabes que la amistad es amor y fuerzaviva que se traduce siempre en una vocación deservicio.

Séptimo, gracias por ser un hombre con claridad deideas, reflexivo, profundo para emitir juicios.Esta manera de actuar tuya nos deja una granmoraleja: de que lo importante en la vida esvivir con prudencia, pero con firmeza, ante losprincipios, valores e ideales.

Octavo, gracias por ser un hombre siempre abiertoal diálogo, respetuoso de los puntos de vista de

los demás. Por enfrentar las diferencias siem-pre en armonía, esta actitud para nuestra Iglesiay para nuestra patria, es indispensable paraconstruir un futuro sólido para ambas Institu-ciones.

Noveno, gracias por tu preocupación por la forma-ción integral del tesoro más valioso de nuestraIglesia: los jóvenes, porque ellos son el futurode nuestra Iglesia. Tu labor como maestro en laPrepa San Juan y en el Seminario son reflejo deello.

Décimo, gracias por tu amor y lucha por la institu-ción de la familia. Eres un hermano extraordi-nario, pero sobre todo un excelente hijo. Me hatocado convivir algunas veces con tu familia yno hay duda de que aunque fuiste el más peque-ño de todos, tu liderazgo dentro de tu familia esindiscutible.

Para terminar quiero reiterarte, a nombre de todaesta comunidad de San Juan Bautista, nuestra gra-titud por todos estos años; por esta lección inolvida-ble de tu vida, por este testimonio vivo de tu fe, detu esperanza y de tu amor por los demás. Por estarenovación en nuestro corazón de los valores delEspíritu. Que Dios recompense plenamente tu bon-dad, tu entrega generosa, y que las generacionespresentes y futuras de sacerdotes sepan emular tuejemplo, para que nuestra Iglesia de San Juan sigasiendo una Diócesis que viva a plenitud su misión.

Estoy seguro, que la semana pasada, durante losejercicios espirituales que tuviste en Santo ToribioRomo, al final de ellos escuchaste las palabras deSan Juan que Dios te dijo el día de tu ordenaciónsacerdotal, aquel primero de junio de 1980, lascuales mencionamos al principio, y estoy seguro deque hoy, víspera de tu consagración episcopal, en lomás profundo de tu corazón te está diciendo Dios:

José María:«Desde la eternidad te elegí; te necesito. Nece-

sito tus manos para seguir bendiciendo, necesito tuslabios para seguir llevando mi Evangelio, necesitotu cuerpo para seguir sufriendo, necesito tu corazónpara seguir amando, te necesito para seguir salvan-do almas; continúa conmigo hijo, en este nuevamisión que pongo en tus manos».

Padre Chema, que Dios te bendiga.


pág. 60 Bol-241

EL PADRE CHEMA: OBISPO ELECTO

El miércoles 19 de junio fue anunciado por laNunciatura apostólica, el Arzobispado de Guadala-jara y en la Catedral de San Juan de los Lagos, queel padre José María de la Torre había sido electoobispo auxiliar para la diócesis de Guadalajara,junto con el Pbro. Rafael Martínez Sáinz, Vicariogeneral de Guadalajara.

El señor Obispo Javier Navarro dio la noticia enla misa conventual de nueve de la mañana, sorpren-diendo y alegrando a la diócesis alteña. Ese día a las12, las campanas fueron echadas a vuelo en laciudad episcopal.

Nacido en Pegueros el 9 de septiembre de 1952,el entonces niño José María, era el último de ochohermanos, tres de los cuales también han consagra-do su vida a Dios. Cuando era todavía chico, suspadres se trasladaron a Tepatitlán.

Ingresó al Seminario menor deGuadalajara, tras terminar su pri-maria en el Colegio Morelos deTepa. Eran los años renovadoresdel Concilio Vaticano II. Al crear-se la diócesis de San Juan de losLagos en 1972, el entoncesseminarista José María continuósus estudios en Monterrey. Prestóluego su servicio diaconal en Ciu-dad Obregón y fue ordenado sacer-dote el 1 de junio de 1980.

Los primeros años de su minis-terio sacerdotal los prestó en laSagrada Familia, de Tepatitlán yluego fue enviado por el señorObispo D. José López Lara a estu-diar la Licenciatura en PastoralJuvenil en la Pontificia Universi-dad Salesiana, de Roma, donde suaporte todavía es recordado por sus

maestros.A su regreso estuvo en la entonces Capellanía del

Espíritu Santo en San Juan y fue vicario de la parro-quia de San Juan Bautista hasta hace el otoño del2001, en que fue nombrado Coordinador para laPastoral Orgánica en la Catedral basílica. Junto conestos ministerios, colaboró como profesor en el Se-minario, en la Escuela Diocesana de Catequesis y enla Preparatoria Regional.

Pero sobre todo, el padre Chema es conocido yestimado dentro y fuera de la diócesis por su trabajocomo Vicario de Pastoral, desde que fue nombradotal por el señor Obispo José Trinidad Sepúlveda el 21de junio de 1991, al terminar la VI AsambleaDiocesana de Pastoral. Durante su encargo, el proce-so diocesano de pastoral se consolidó, y la madurezalcanzada se cristalizó en el III Plan de Pastoral.

Tanto entre los fieles como entre los sacerdotes, elpadre José María ha dejado una huella profunda;

Crónica de la elección y ConsagraciónEpiscopal de los Nuevos Obispos

Pbro. Juan Carlos González Orozco


pág. 61Bol-241

considerado hombre de viva inteligencia, amigo cor-dial y de fino trato, su natural emotividad lo hacíanuno de los sacerdotes más sensibles a los problemassociales y al sufrimiento humano. Todos recuerdansus celebraciones sin prisas, su modestia, su apasio-namiento, su preocupación por los pobres y losenfermos y su tacto pastoral.

Mientras la diócesis se disponía con entusiasmopara celebrar la consagración episcopal del únicosacerdote del presbiterio de San Juan de los Lagosque ha sido promovido al episcopado, el entoncesobispo electo hubiera preferido evitar las felicitacio-nes. El señor obispo Javier Navarro envió una circu-lar motivando a la asistencia a la misa de ordenaciónepiscopal, el 16 de julio en el Auditorio BenitoJuárez, en la ciudad de Guadalajara.

Con la ayuda de diversos especialistas y la periciadel señor Cura Alfredo García, el entonces padreChema diseñaba su escudo, con el lema «In Verboautem tuo», con la cruz franciscana potenzada y laestrella mariana; mientras tanto, las parroquias pre-paraban su tesoro espiritual, tanto en Guadalajara,como en San Juan.

MONS. JOSÉ MARÍA DE LA TORRE MARTÍN

Grata la sorpresa, «feliz coincidencia», como dijoel señor Obispo Javier Navarro, con el 30 aniversariode la diócesis de San Juan; casi como un signo de sumadurez. Aún así, el primer sorprendido por estenombramiento es el padre Chema; «¿por qué Guada-lajara, que conozco...? ¿por qué Guadalajara, dondehay tantos y virtuosos sacerdotes?». Además, con elSr. Sandoval que durante los años de seminario nofue fácil el entendimiento. Ciertamente ya de sacer-dotes, cuando fueron a dar-le las gracias, el padre Che-ma recuerda que los tratómuy amablemente; hastahoy existía una «relaciónde respeto, de aprecio, degratitud». Pero no más.

«Algo quiere decirnosDios con esto», reflexionael padre Chema. Como siGuadalajara y San Juan, dosdiócesis que se distancia-ron hace treinta años cuan-do nació esta última, estu-vieran llamadas a una cola-

boración más estrecha en la región pastoral, de mayorapertura. El cardenal es originario de Yahualica, donJavier Navarro, el obispo de San Juan, proviene delclero de Guadalajara; ahora el padre Chema del clerode San Juan, va a Guadalajara... Quiso uno ya mayor(Rafael) y otro de fuera, y lo quiso de San Juan.

LA INFANCIA EN TEPATITLÁN

Pero mientras el padre Chema se dispone a laconsagración episcopal, que tendrá lugar, Dios me-diante, el 16 de julio en el Auditorio Benito Juárez,repasemos los principales rasgos biográficos del obis-po auxiliar electo de Guadalajara.

Nacido en Pegueros del Sagrado Corazón el 9 deseptiembre de 1952, el “Padre Chema”, como todoslo conocemos, es el último de los ocho hijos de JoséMaría de la Torre (muerto en 1990) y María Martín.Sus hermanos son Adelaido, profesor jubilado, traba-jó con los maristas y los legionarios, vive en México;Rafael en Monterrey, profesor con los maristas, yajubilado, trabaja en los negocios propios; Rigoberto,ingeniero también en Monterrey; Olivia, fue casadacon un profesor que ya murió; Armando, marista,vive en Tijuana; José Luis, hermano marista enCocula; Bertha, en Gómez Palacio, casada.

Su papá, asociado con un tío, puso el molino y laluz en Pegueros; pero gastó todo lo que tenía en unhijo, enfermo de asma; tuvo que vender el molino, latroca y se fue a un rancho de administrador. Sus papássiempre vivieron en el rancho, entre Tepatitlán,Pegueros y la Capilla. José María vivió en Pegueroscomo cuatro meses, pero fue bautizado en Tepatitlán.Cuando tenía unos 4 años la familia se trasladó aTepa. No fue acólito, como se dice; en todo caso, lo


pág. 62 Bol-241

fue solo eventualmente. ¿Y cantor?; sus hermanoseran cantores y como no lo podía dejar, se lo llevabanal coro, tenía que andar con ellos. Cuando sus herma-nos dejaron de asistir, también el pequeño Chema sesalió.

EL PASO POR TRES SEMINARIOS Y LA EXPERIENCIAOBRERA

A los 11 ingresó al seminario de Guadalajara, almenor, luego un año en Tapalpa y dos en el mayor deChapalita. En el seminario de Guadalajara elseminarista Chema trató de responder a la problemá-tica de su tiempo. Durante los estudios de filosofía,durante un apostolado en San Pedro Tlaquepaque, sedio cuenta que entre ellos y los jóvenes de su edad nose podían entender, sus preocupaciones eran muydistintas; a los jóvenes les preocupaba el trabajo,conseguir casa, transporte, y divertirse, sin duda; losseminaristas se sentían en otro mundo.

Por eso decidieron aprovechar el año de magiste-rio para vivir una experiencia de trabajo manual, debuscar casa, dónde comer, etc. Esto no era del agradodel entonces rector del Seminario de Guadalajara,pero, con la autorización del señor Nuño, primerobispo de San Juan de los Lagos, algunos del primergrupo de magisterio de la diócesis de San Juan, afinales de 1973 salieron a Torreón: eran Chema,Emiliano, Pancholín y algunos más de Guadalajara.Un sacerdote les consiguió dos trabajos en el merca-do, dos en Cementos Mexicanos y dos más en unafábrica de pantalones. El seminarista Chema se fue auna maquila, donde trabajaban unas 200 mujeres yunos 20 hombres, la mayoría casados. Allá trabajó 13meses.

El señor Obispo Nuño, de vez en cuando, aprove-chando que había alguna reunión, enviaba a algúnsacerdote a visitar a los seminaristas obreros; llegó air José Luis Aceves, el señor Becerra, y otros más.

Al terminar la experiencia, como el rector deGuadalajara, Juan Sandoval, había quedado muyfastidiado con la experiencia obrera que le habíanpropuesto los seminaristas sanjuanenses, Mons. Nuñooptó por enviarlos a otro lugar para la teología. Pensóen Aguascalientes, pero una fuerte crisis en el presbi-terio de esa diócesis había destrozado el seminario yobstaculizaba su funcionamiento, por lo que fueronenviados a Monterrey.

En el seminario diocesano de Monterrey habíaprofesores y alumnos de todas las diócesis del norte;

recibir alumnos del sur les pareció una experienciaenriquecedera y fueron bien recibidos Moisés, Emi-liano y José María, los tres hoy sacerdotes. Desde1974 hasta 1975 estuvieron allá. Cuando ya estabanen el seminario de San Juan los padres Blas, Hugo yFelipe, que habían ido a estudiar, se regresaron ycompletaron sus estudios en San Juan.

Los compañeros de generación (Chavita, Chepe,Emiliano, Moisés, Chema) realizaron el año de servi-cio diaconal en el norte, en Ciudad Obregón: todo eladviento y la navidad del 1978, hasta cuaresma ypascua de 1979.

EL NEO-SACERDOTE

El padre Chema cuenta: «Cuando llegamos deCiudad Obregón, el señor Nuño me dijo: ’Tú te vas aPegueros... ¡No!, no puedes, porque tú eres de Pegue-ros’; él siempre me hizo de Pegueros; hasta puso enmis licencias que yo era de Pegueros. Por eso meenvió a la Sagrada Familia, en Tepa». El señorObispo les concedió una semana de vacaciones,después de las cuales deberían presentarse a susdestinos respectivos; unos quince o veintidós díasdespués iniciarían la preparación para ser ordenadosel 1 de junio de 1980, en lo que sería la últimaordenación general en catedral.

Esos eran los planes, pero apenas iban bajando lasescaleras, el padre Chávez, secretario de la mitra, leavisó que lo esperaba el señor cura de la SagradaFamilia en Tepa. Y mal acababa de llegar a Tepacuando el señor cura Rivera lo subió al Volkswagenpara llevarlo a la colonia Las Granjas, donde lopresentó a la gente y le encomendó la construcción deun centro de catecismo y de un templo si se podía; deallí a Las Colonias, y lo mismo; luego en el otroextremo, sobre un pedregal le encomendó la cons-trucción de la actual parroquia del Espíritu Santo.«Con todo este pedregal haces los cimientos. En elagujero que quede haces unas criptas, y con lo de lascriptas construyes el templo».

Después de la ordenación, tras suplir durante elmes de junio al padre de Huisquilco, se estableció enTepa en julio de 1980. Allí estuvo hasta agosto de1982, cuando fue enviado a Roma a estudiar Pastoralen la Pontificia Universidad Salesiana.

RUMBO A LA CIUDAD ETERNA

Unas semanas antes de partir, recuerda el padreJosé María, llegó a Tepa un sacerdote español; «me


pág. 63Bol-241

dijo una cosa que me caló: que los sacerdotes dioce-sanos, ordinariamente, son muy mediocres e igno-rantes, que tratara de resolver al menos en mí esaproblemática. Yo iba, pues, con el ideal del sacerdotesanto y sabio».

Luego vinieron las dificultades académicas enRoma; en primer lugar el examen de admisión no erade griego y latín, como se le había dicho, sino deteología; además, el obispo lo había enviado por dosaños, pero la licenciatura era de tres; «el señor LópezLara me dijo, ‘No, yo te mandé por dos años’.Entonces empecé a agarrar clases de tercero; para noregresarme con tan sólo ideas vagas».

El ritmo intenso de estudio acabó agotándolo; laatención a una capellanía de religiosas en Roma, enmedio de las inclemencias del tiempo, minó aún mássu salud. Un poco se recuperó con su estancia de dossemanas en un monasterio, a donde lo llevó unsacerdote amigo.

Ya para iniciar el verano de 1984 llegó una cartadel señor López Lara, obispo de San Juan, en la quele decía que, en vistas de que había mejorado desalud, había decidido que continuara el tercer año. Lasituación era desesperada, ¿cómo hacerle?: «No teníacentavos, ya había arreglado lo del boleto, no teníasalud, no tenía donde pasar el verano, no tenía asesor,no había escogido programa. Me dijo (el obispo) quele pidiera dinero al ecónomo, pero el ecónomo medijo que no podía hacerlo. Así que el verano lo pasénavegando: 22 días en una parroquia en Italia, 15 díasen España, 22 en otro lugar también en España, 15 enLondres y 8 días en Alemania, sobreviviendo a cam-bio de la misa».

Con todo, el padre Chema y otros más se organi-zaron para hacer del Colegio Mexicano un poco másfraterno, para que hubiera retiros, y para relacionarsecon el grupo latinoamericano. Y en 1985, tras hacerel examen en septiembre, en octubre regresó a Méxi-co. Entonces sus papás, que desde 1970 vivían enTorreón, se establecieron en Tepa.

LA PARROQUIA DE SAN JUAN BAUTISTA

El padre Chema suplió en el docenario de laVirgen de Guadalupe en Acatic al señor cura VicenteMagallón, a quien le había dado un infarto. El padreFelipe Salazar, que estaba en el Seminario y era elvicario de pastoral, le avisó que ya era miembro delConsejo Pastoral. El padre Chema llegó a San Juanenfermo de los bronquios, por lo que estuvo tres días

en Yahualica y regresó para las posadas en San JuanBautista. Como no tenía casa, se fue a vivir con unaprima; luego fue invitado a la casa de los padresPorras y Juan Navarro; al ver esto, el señor curaAurelio Olmos le ofreció la casa en la que viviría elpadre Chema por dieciséis años.

Dos años más tarde fue nombrado capellán delEspíritu Santo «sin dejar de ser vicario de la parro-quia» de San Juan Bautista. Para entonces, además,ya era profesor del seminario, encargado de la forma-ción del presbiterio y pertenecía al Consejo presbite-ral. Supuestamente la capellanía era para estar másdesahogado; la realidad era otra, pues debía ayudartambién en San Juan Bautista. «El señor cura Olmossalomónicamente me dijo: ‘Si te voy a pagar yo, metienes que obedecer; pero si te van a pagar delobispado y yo te necesito, voy a tener que pedirte defavor’. Como le dije que me pagarían del obispado,me respondió: ‘Bueno, entonces, si me haces favor,ven los sábados y los domingos’».

En el Espíritu Santo, dividió el barrio en sietesectores; en cada uno había dos o tres grupos dereflexión. Después el padre Emiliano quedó a mediotiempo colaborando en la capellanía. Era todos losdías ir desde el centro hasta el Espíritu Santo.


pág. 64 Bol-241

Antes de dejar la parroquia de San Juan Bautistaen 1992, el señor cura Olmos gestionó que el novicia-do adjunto al Espíritu Santo quedara desocupado y setrasladó allí como capellán. El padre Chema supodónde iba a quedar él durante la toma de posesión delseñor cura Felipe, en la cual éste dijo que Dejó alpadre Chema que era una gran responsabilidad, peroque se sentía reconfortado porque tenía de vicarios alos padres Francisco Escobar y José María de laTorre.

VICARÍA DE PASTORAL,EL GRAN JUBILEO, CATEDRAL

Profesor en la Preparatoria Regional de San Juan,asesor de Cáritas en la parroquia de San Juan Bautis-ta, profesor en el Seminario y otros cargos más, elpadre Chema fue, desde 1991 al concluir la VIAsamblea Diocesana de Pastoral, el Vicario de Pas-toral. Este fue uno de los cargos decisivos que desem-peñó en la diócesis, donde aportó lo mejor de su genioorganizativo, de su visión de las cosas y su búsquedaconstante de nuevos caminos, en fidelidad al magis-terio de la Iglesia.

Poco después fue puesto al frente de la comisióncelebrativa del Gran Jubileo, donde impulsó variosproyectos, como los santuarios jubilares, la memoriadel Jubileo y las celebraciones jubilares de apertura yclausura.

En septiembre de 2001 el señor obispo le pidióque se trasladara a la cate-dral, como capellán primeroy luego, supuestamente se-ría hecho canónigo; el nom-bramiento decía: «Coordi-nador para la Pastoral Orgá-nica en Catedral basílica».«Era una situación curiosa, -confiesa el padre Chema;prácticamente a todos leshablaba de ‘usted’, menos alseñor obispo».

OBISPO ELECTO

¿Cómo fue su nombra-miento? Monseñor José Ma-ría narra que el 10 de junio,en la Nunciatura Apostóli-ca, el Nuncio, después deelogiar al Papa, tan anciano

y con esas ganas de trabajar, le dijo que había sidoelecto titular de Panatoria y auxiliar de Guadalajara.«Ya qué me quedaba; si Tú me lo dices».

En la entrevista previa a su consagraciónepiscopal, sonriente, advertía que ahora no ha teni-do pesadillas, como cuando fue nombrado paraCatedral, tal vez porque conocía más de cerca laproblemática del santuario. Cierto, no podía dormir«en esos días que vives la soledad de que sabes, y nopuedes decirle a nadie». Pero una serie de signosprovidenciales lo sostuvieron, según contaba. Enlos días previos había llegado un e-mail que conte-nía un texto de Juan Pablo II en el cual el Papaexhortaba a los jóvenes: «Si Cristo los llama, notengan dudas ni miedo, respondan con entereza». Yluego, tal vez la oración; el seminario de Guadalaja-ra tenía un tesoro espiritual enorme desde abril,cuando ya se veía inminente el nombramiento dedos nuevos auxiliares. Y aquello de la niña en SantaAna, la tierra del padre Toribio Romo; allí una niñade cinco años se le presentó a decirle, toda apenada,que ella rezaba por él, que era el sacerdote por el cualle había tocado pedir.

«Así que antes de que me preocupe ya he encon-trado felicitaciones, promesas de oración, promesasde apoyo y amistad -decía. En Guadalajara me hanrecibido muy bien; voy sin miedo, además el equipode obispos nos están facilitando las cosas, ya hemostenido dos reuniones de gobierno».


pág. 65Bol-241

Para toda su familia el nombramiento fue tambiénuna sorpresa. «A mi mamá Emiliano le habló deRoma; ‘Dígale a Chema que ya le diga lo que le tieneque decir, que ya está autorizado, que ya se publicó’,-le dijo. Yo les pedí que dijeran a mi mamá que bajaraa la misa de las nueve, que el señor obispo iba a darun aviso importante; ahí se enteró».

«QUISIERA SEGUIR SIENDO SU AMIGO»

¿Algo ha cambiado después de la noticia? Elpadre José María notó una especie de distancia entreél y los hermanos sacerdotes. Nos cuenta que el díadel aviso (19 de junio), tras hacer una visita a laVirgen y rezar un responso, al regresar y encontrar alos empleados de catedral y a los sacerdotes, yaenterados de la noticia, advirtió que lo saludaban y seretiraban; el señor Obispo Javier llegó con el maria-chi, y acabaron quedándose nomás ellos dos con losmúsicos; «siento cierto distanciamiento, una soledadmuy marcada; si esto es un augurio no me gusta. Mevoy, los extrañaré, pero me llevo su amistad. Me voypero voy a regresar seguido; siempre me ha gustadoconvivir con los padres. Cuando estuve con el Porrashicimos un programa, cada 15 salíamos a comer conalgún padre».

En cuanto a su trabajo como obispo, está progra-mado: todos los lunes desayuno con los vicariosepiscopales de pastoral, cada 15 días con los decanos;lunes, miércoles y viernes en la Curia, a escuchar a losfieles. Por las tardes y los fines de semana visitapastoral, y confirmaciones. La encomienda específi-ca de Monseñor Chema es la Pastoral Orgánica yDiocesana, con los vicarios episcopales, los decanosy las comisiones de pastoral.

Reconoce que el ministerio episcopal no será tansencillo; el cardenal Sandoval les dijo: «San Agustínpor la mañana escuchaba a los fieles y por la tardeestudiaba y rezaba. Como pueden llegarte santos,pueden llegarte iluminados, locos y limosneros; unoste dirán que ven a la Virgen sonreír y al SagradoCorazón llorar. A todos habrá que atenderlos y queDios te ilumine para que todos se vayan esperanza-dos».

Y los preparativos continuaban. Que el solideo,que el escudo con el lema «Porque Tú me lo pides»(In verbo autem tuo), para aludir a la disposición deMaría, de José, de Pedro. Y los ejercicios que el señorcura Jaime Gutiérrez les predicaría en Santa Ana a losdos nuevos obispos auxiliares. En ellos estuvieron un

día cada uno de los señores obispos de la arquidiócesisy don Javier, para celebrar con ellos la Santa Misa.

Y como el mismo padre Chema dijo en la misa delmiércoles 26 en el marco de la XI Asamblea Diocesanade Pastoral: «Me llevo el buen sabor de la fraternidadsacerdotal y de los agentes comprometidos en laevangelización nueva; y quisiera llevarme también elcompromiso de que aquí pedirán por mí». Allí, pode-mos decir que todos formulamos ese propósito; y aestas alturas, en toda la diócesis de San Juan, como enGuadalajara, hay muchos fieles implorando al BuenPastor por la generosidad, la fidelidad y la fecundidaddel ministerio episcopal de los dos nuevos obisposoriginarios de los Altos.

Miércoles 3 de julio: la despedida del presbite-rio

Con una celebración eucarística y una comida degala en la que participaron alrededor de setenta sacer-dotes, el presbiterio de la diócesis de San Juan de losLagos despidió formalmente a Mons. José María dela Torre. El evento tuvo lugar en la Casa Juan PabloII, y fue programado la semana previa, por lo cual ypor coincidir con la ordenación sacerdotal de OscarGómez, en Lagos de Moreno, hubo relativamentepocos presentes.

Después de saludos, felicitaciones y una animadaconversación, inició la Santa Misa, a la que asistiótambién el señor Obispo Javier Navarro. Durante lahomilía, el padre Chema comentó las reflexiones delcardenal Martini sobre la pesca milagrosa, cuandolos doce, después de no haber pescado nada en todala noche, escuchan a Jesús que les indica echar lasredes a la derecha y Pedro le responde «porque tú melo dices (Sulla tua parola), lanzaré las redes». Esaexpresión en latín, será el lema en su escudo episcopal(In Verbo autem tuo).

Atinadamente el entonces padre Chema citó denuevo al cardenal Martini: «Para un cristiano nuncahay tiempo para la nostalgia, menos para la tristeza yel llanto; siempre es tiempo para la esperanza y elamor, el amor nunca pasa». Luego recordó que hacealgunos años vino Esquerda Biffet a impartir ejerci-cios al presbiterio; en aquella ocasión el especialistaen espiritualidad sacerdotal dijo que «la gracia nuevade la evangelización nueva es la fraternidad sacerdo-tal». En este sentido, observó Mons. Chema, que éstesería el mejor regalo que pudiera ofrecer el presbite-rio al señor Obispo, y la grandeza de la que éste


pág. 66 Bol-241

pudiera gloriarse respecto de San Juan; que segura-mente éste sería el don que extrañaría.

Antes de sentarse en «la silla eléctrica» para escu-char los consejos que pidió y le quisieran dar losconcelebrantes, citó las tres recomendaciones que lediera el señor cura Samuel: alejarse de los adulado-res, retirarse a los mentirosos y no juntarse con losnecios (en su versión nacional).

«Qué bueno que no se te ha subido, sigue siendosencillo», le dijo uno; «se llevaron al mejor presbíte-ro» comentó otro; luego le recomendó que hicieraequipo y le tomara afecto a don Juan Sandoval.Alguien lo previno contra el estrés; otro más leaconsejó cuidar su salud; no faltó quien subrayaraque el Señor lo había llamado para ser testigo antesque nada, o quien le sugiriera conservar su alegría, sucercanía con los sacerdotes y con los pobres. Mien-tras, el padre Chema tomaba nota diligentemente,desde su lugar de presidente de la Asamblea eucarís-tica.

Ya en la comida el padre Gregorio García coordi-nó las intervenciones de varios sacerdotes, entre ellosel padre Porras, quien anotó que “30 años de ladiócesis son buenos para recordar al labrador y a lossembradores, pero también son buenos para cose-char”; y nos comprometió a rogar al Dueño delcampo por el padre Chema, a quien el Señor llamó, yél supo responder «porque me lo dices tú». «Chema,amigo y compañero, agradecemos tu presencia y lacapacidad que Dios te dio».

Y después de brindar, vino la gran sorpresa: elseñor cura Eliazer Lara en nombre de los sacerdotesde la diócesis le entregó las llaves del carro queestrenaría el Chema, un Malíbu del año. MonseñorChema, sacerdote austero en su estilo de vida, nosabía qué decir, sólo sonreía y seguía amablementelas indicaciones de sus hermanos sacerdotes: «venpara acá», «súbete», «la foto».

Poco después los comensales se fueron retirando,tras despedirse del todavía padre Chema con un«hasta luego, nos vemos el 16 de julio».

LA ORDENACIÓN EPISCOPAL

Y ese 16 de julio, poco después de las 11 de lamañana entraron al recinto del Auditorio del Estadocasi 30 señores obispos, entre ellos el señor cardenalJuan Sandoval, quien presidiría la liturgia, el nuncioGuiseppe Bertello y el obispo de San Juan de los

Lagos, Javier Navarro. A su alrededor varios cente-nares de sacerdotes. En la procesión participaban loscandidatos al episcopado; Monseñor José María de laTorre iba acompañado del señor Vicario GeneralLuis Navarro y del Pbro. Emiliano Valadez.

«La Iglesia de Guadalajara se encuentra gozosa yagradecida por estos elegidos para ser sucesores delos apóstoles», dijo el Eminentísimo señor cardenalJuan Sandoval durante la homilía. Recordó que losobispos, a quien Cristo no llama siervos, sino amigos,han sido elegidos para predicar el evangelio, «sinrecortar la cruz de Cristo» (no olvidar el radicalismodel Evangelio).

Los exhortó a ser pastores cercanos, testigos ejem-plares y gozosos; recordó que el Sínodo llamó a losobispos «testigos de esperanza». En nuestro tiempo,añadió el cardenal tapatío, el obispo ha de ser defen-sor de la vida y de la familia, que van juntas; al mismotiempo ha de tener una atención especial para con lospobres: «muchos no alcanzan ni para lo más elemen-tal, no porque falten recursos, sino porque falta vo-luntad de compartirlos», aseveró. Ahí el obispo tieneuna tarea inmensa de convencer en favor de la justi-cia, porque «el que es egoísta no es cristiano, puesCristo nos enseñó a amar sin medida».

Les recordó que el obispo es centro de unidad dela Iglesia, nacida de Dios uno y trino; «hemos deluchar por mantener una comunión afectiva y efecti-va entre los obispos: ayudarnos, respetarnos, defen-dernos para que seamos ejemplo». Así mismo elobispo ha de ser muy cercano a los sacerdotes, ha deorar por ellos.

Una atención especial a los jóvenes, los «centine-las del mañana» como los llama del Papa. En estecontexto, el cardenal sorprendió con una frase audaz:«Si alguno no está atendiendo a la familia y a losjóvenes, está faltando gravemente», pues no necesi-tamos un cuerpo joven sino un corazón joven.

Después de la homilía Mons. Rafael y Mons.José María profesaron su fe, hicieron una serie depromesas eclesiales, y firmaron el documento sobreel altar. Luego vino la imposición de manos porparte del señor cardenal, de los dos co-consagrantesy de todos los obispos presentes. Como en todaordenación, se hizo la oración consacratoria propiade los obispos con la que se invoca la efusión delEspíritu Santo; luego, la unción con el santo crismaen la cabeza, después de lo cual se les entregaron los


pág. 67Bol-241

evangelios y las insignias episcopales: anillo, mitray báculo.

La celebración eucarística fue muy viva y emotivapor lo que significaba tanto para los dos nuevosobispos como para los familiares y las diócesis deGuadalajara y San Juan. El Obispo emérito de SanJuan, don José Trinidad Sepúlveda, miraba insisten-temente, tal vez con nos-talgia, hacia donde ungrupo de tepatitlenses le-vantaba sus estandartescon San TranquilinoUbiarco. El padre Fer-nando Varela buscabael mejor ángulo para susfotos, y el señor CuraAlfredo alzaba su vi-deo-cámara para noperder detalle. El Au-ditorio estaba salpica-do de pancartas de apo-yo a los nuevos obis-pos: de Ocotlán, deArandas, de Tepa, deSan Juan, de San Julián,de Ayotlán...

Al final, los nuevosobispos recorrieron el lu-gar, abrazando y bendi-ciendo a los fieles que,llenos de alegría y entu-siasmo, se acercaban abesar sus manos.

Antes de la bendi-ción, el Nuncio saludó alos familiares de los nue-vos obispos, especial-mente a doña Mariquita, la mamá de Chema; yexpresó su deseo de que «la alegría de este día laconserven a lo largo de su ministerio pastoral, que sealleno de bendiciones».

Luego tomó la palabra Monseñor Rafael, quienrecordó las personas que influyeron en su vocación:sus papás, el señor cura de Santa Teresita y hermanode Santo Toribio: Román Romo; recordó al párrocode San Ignacio Cerro Gordo, don José de JesúsHernández, a don José Salazar entonces rector delSeminario, y al Papa Juan Pablo II, figuras sacerdotales

que lo han inspirado. Así mismo pidió perdón por susofensas y malos ejemplos.

Monseñor José María de la Torre inició su alocu-ción como una oración dirigida a Cristo, comentandosu lema episcopal: «In Verbo autem tuo», que expre-san su deseo de ir con Cristo mar adentro; la frase«‘Porque tú me lo dices’ explica mi fragilidad y mis

torpezas; sólo porque túme lo dices regresaré aGuadalajara y echarélas redes. Confiaré unavez más en tu Palabra yecharé las redes». Ex-plicó que se inspirabaen aquellos que dijeron«Sí» a la Palabra delSeñor sin reservas,como María y José,como los santos y losmártires. Además, agra-deció a sus padres, ami-gos y familiares, sacer-dotes, feligreses, bien-hechores.

Pidió en su plegaria:«modela mi corazón...que tu Iglesia sea unrecinto de verdad y deamor, libertad, de justi-cia y de paz para quetodos encuentren en ellaun motivo para seguiresperando... Estoy entus manos, haz de mí loque quieras». Y con-cluyó: «Sagrado Cora-zón, en ti confío; por tulimpia Concepción y

belleza sin igual, cúbreme con tu manto, madre míade San Juan». Así inició su ministerio, con unaplegaria. En los días que siguieron fue recibido envarias ciudades para festejarlo; Pegueros el sábado27, San Juan de los Lagos el miércoles 24, Arandas...Y hay que añadir los festejos que le hiciera la parro-quia del Espíritu Santo el domingo 7 de julio, o laparroquia de San Juan Bautista el lunes 15 de julio; entodos, se han hecho votos de pedir por él y se ha hechofiesta. Y seguramente nuestra alegría y nuestra ora-ción no serán cosas de unas semanas.


pág. 68 Bol-241

Misas ................................................ 81’937Comuniones Sacramentales ............. 33’203

Visitas al Santísimo ....................... 8’968Rosarios ............................................ 14’964Jaculatorias ....................................... 42’564Horas de Trabajo .............................. 35’333Visitas a enfermos .............................. 2’943Sacrificios........................................... 7’430

Obras varias (Horas Santas, ComunionesEspirituales, Visitas a San Pedro Esqueda).... 21’235

Total: .............................................. 248’577

16 de Julio de 2002

Diócesis deDiócesis deDiócesis deDiócesis deDiócesis deSan Juan de los LagosSan Juan de los LagosSan Juan de los LagosSan Juan de los LagosSan Juan de los Lagos

Ramillete Espiritualpara

Mons. José Ma. de la Torre


pág. 69Bol-241

Excelentísimo Sr. Nuncio Giusepe Bertello, re-presentante del Papa en nuestra Patria.

Excelentísimo Sr. Nuncio Luis Robles, que sirvea la Iglesia en Cuba como representante del Papa.

Excelentísimos Sres. Arzobispos y Obispos.Queridos hermanos sacerdotes y seminaristas.Muy respetables estimadas autoridades civiles

que nos acompañan.Pueblo todo santo de Dios.Esta Iglesia de Guadalajara se encuentra gozosa

y agradecida, por estos dos nuevos obispos queDios le concede y el Papa nombra. Queremosdecirle al Santo Padre a través de su representante,el Sr. Nuncio Giusepe Bertello: Muchas gracias.

Y es que el obispo, donde quiera que esté,prescindiendo de sus limitaciones y pobrezas hu-manas, es un signo viviente de Cristo el Salvador.Donde está el obispo, ahí está la Iglesia. Donde estáel obispo, está Jesucristo sanando, consolando, en-señando y dirigiendo las comunidades cristianas.Por eso esta Iglesia de Guadalajara -como ya dice elPapa en el nombramiento de los nuevos señoresobispos- tan numerosa, tan llena de organizacionesde apostolado, rica en vocaciones religiosas ysacerdotales, necesita la presencia del obispo conmucha insistencia y generosidad como todos loexperimentamos.

¿Qué es el obispo?El obispo es en primer lugar un elegido. Hemos

escuchado en el evangelio de San Juan las palabrasde Cristo que son para todo discípulo, pero cierta-mente más para sus discípulos inmediatos queestaban con El en la última cena, de los cuales losobispos somos sucesores. No son ustedes los queme han elegido, Yo los he elegido a ustedes, no losllamo siervos, los llamo amigos porque les hecomunicado todo lo que he oído de mi Padre, y losmando para que den fruto, y les pido una cosa: Quepermanezcan en mi amor. Con estas palabras po-

Homilía del Sr. CardenalJuan Sandoval

dremos cumplir este envío y pasar adelante. Pero esnecesario abundar un poco más sobre lo que es elobispo.

Cristo lo ha elegido eternamente y luego lo haungido, lo santifica con el don del Espíritu Santo enplenitud. Jesucristo fue ungido por el Espíritu Santopara anunciar la Buena nueva, para curar y paraconsolar. Sobre El, retoño de el tronco de David,que reposó el Espíritu del Señor con todos susdones, de sabiduría, de ciencia, de inteligencia, deconsejo, de fortaleza, de piedad y del santo temor deDios.

Pues Jesucristo nuestro Señor trae este Espíritude manera plena a sus apóstoles para que caminenpor el mundo iluminando con la palabra del evange-lio, santificando con los sacramentos de los cualesellos son los ministros primeros acreditados y pas-toreando el rebaño de Dios, haciéndose modelos dela grey y entregándose continuamente a sus herma-nos.


pág. 70 Bol-241

Es pues, un ungido que lleva a plenitud delEspíritu Santo para predicar, para santificar y paragobernar al estilo de Cristo, es decir, sirviendo.

Como predicador del evangelio, el obispo debeser profeta, debe ser testigo y atalaya, que anunciala palabra de Dios sin recortes, sin acomodaciones,sin contemporizaciones. La dice con firmeza, conclaridad, con bondad y humildad también, invitan-

do a que las mentes de los hombres se abran a la luzdel evangelio y encuentren en Cristo su felicidad ysu salvación.

En este mundo –pienso yo– de tinieblas, en estemundo securalizado, no debemos olvidarnos en lapredicación de la exigencia evangélica radical, esdecir de renuncia a sí mismos para todo cristiano yde abrazarse a la cruz de nuestro Señor Jesucristo,mortificando los vicios y pasiones que están en elcorazón de todo ser humano. No hay que recortarlenada a la cruz de Cristo nuestro Señor porque la cruzes salvación.

Pastores del pueblo de Dios cercanos, compren-sivos que pastorean con la palabra del evangelio,pero más con el ejemplo de su vida. Como dijo SanPedro, haciéndose modelo de la grey para que lagrey lo siga gozosa y gustosa por ese camino de

felicidad, de paz interior y de luz que es el caminode Cristo nuestro Señor.

En octubre pasado se celebró en Roma el Xsínodo universal de los obispos y tuvo por tema, elobispo y lo que más resalto lo quiero decir ahora, esque el obispo debe ser en primer lugar un servidordel evangelio para la esperanza del mundo. Servi-dor del evangelio. Lleva en su mente y en su

corazón y en su corazón yen su boca siempre la pa-labra de Dios, iluminandocon ella y dando esperan-za a este mundo, del cualse ha dicho ya hasta lasaciedad, que es un mun-do inmanente, un mundodel aquí y del ahora, unmundo secularizado queno piensa en la vida eternani mucho menos en la re-surrección de la carne. Ynosotros, los que somosministros de Cristo, le pre-dicamos al mundo unaesperanza que no defrau-da, una esperanza que ilu-mina la existencia delhombre y le da sentido, laesperanza de una vidaeterna, que se funda en elhecho de la resurrección

de Cristo. Cristo resucitó de entre los muertos y haprometido a los que le sigan, le sean fieles, resucitartambién para la inmortalidad. El que cree en mítendrá vida eterna y Yo le resucitaré en el últimodía.

Ministro del evangelio para la esperanza delmundo.

Y señala el sínodo que la sociedad de muerte enla que estamos metidos, llena de tinieblas y oscuri-dades al hombre de hoy. Se expande la cultura de lamuerte y al obispo se le encomienda expresamenteen el sínodo que sea un guardián y defensor de lavida. Que se proclame siempre a favor de la vida ya favor de la familia, que es cuna y santuario de lavida. Están amenazadas la vida y la familia que vanjuntas y el obispo debe ser un defensor asiduo de lavida humana, ya que el hombre es el único ser en


pág. 71Bol-241

este mundo creado y querido por Dios por sí mismo.Las demás cosas son para el hombre y el hombre espara Dios.

La vida humana es sagrada desde su concepciónhasta su término natural y debemos proclamarlo,debemos gritarlo fuertemente en esta sociedad quemata impunemente a los indefensos y a los inocentes.

La familia ha sufrido grandes embates y noso-tros, si somos fieles al evangelio de Jesucristo,debemos defender la familia institución divina,origen, fuente y santuario de la vida del hombre.

Esta sociedad de muerte se trata también en otrafaceta terrible y es la pobreza de grandes muche-dumbres. Hay en el mundo poblaciones o sectoressociales totalmente marginados y desprotegidos.Mucha gente que no alcanza para las necesidadesfundamentales de comer y beber ni siquiera. Y noporque falten los recursos, sino porque falta lavoluntad de compartir. Y el obispo, ministro delevangelio, debe promover en el corazón del hombreel sentido de fraternidad, de compartir, de ayudar alos que no tienen. Tenemos ahí un trecho muygrande qué caminar en el tema de la conversión.Convertir a nuestro tiempo, a nuestros dirigentes, anuestros líderes, para que sepan realmente compar-tir las riquezas que se producen en la tierra y ajustenpara todos, es una tarea inmensa de los ministros delevangelio.

No nos contentemos con suavizar las cosas, conignorar las cosas, dejando que la gente viva egoís-tamente diciéndose cristiana. El que es egoísta no escristiano. Porque Cristo se entregó por nosotros ynos mandó amarnos unos a otros sin medida. Asíconstruiremos la nueva civilización del amor, en lafraternidad, en la justicia y en la solidaridad.

El sínodo habla también de un aspecto muyimportante del obispo sobre todo en lo que resultódespués de las aportaciones de los padres sinodales.Se resaltó al obispo como ministro y factor de lacomunión en la Iglesia. Debe ser centro de unidad,donde está el obispo se identifica a la Iglesia en lafe y en el amor. No divisiones, no partidos, la unidaden el amor de Cristo y en la confesión de un soloDios uno y trino.

Esta comunión, queridos hermanos, tiene suorigen en la Trinidad. Dios no es soledad, sinocomunión. Tres divinas personas que comparten

una sola naturaleza, una sola divinidad, una solaeternidad, una sola omnipotencia, una sola bondad.Y de Dios uno y trino nace la humanidad tambiénllamada a la comunión y de Dios uno y trino, comodice el Vaticano II nace la Iglesia. La Iglesia deCristo tiene su último origen en la Trinidad, y poreso el obispo es ministro de la comunión, que tienesu origen en Dios.

Se expresa esta comunión con todos los miem-bros de la Iglesia. Primero con el que es vicario deCristo en la tierra, el Papa Juan Pablo II, jefe delcolegio apostólico, del cual el obispo forma parte.Una comunión viva, de fe, afectiva y efectiva, quelleva a seguir sus indicaciones y a colaborar con élen todas las empresas que le encomienda al obispo.En el obispo nunca uno _____ a las indicaciones delSanto Padre. Y a todo obispo, por ser miembro delcolegio apostólico, le compete no solamente eltrabajo en su diócesis, una porción de la Iglesiauniversal, sino el interés, la preocupación y lacolaboración con toda la Iglesia universal que dejóel Señor toda ella a todo el colegio apostólico.

Comunión con los demás obispos.Formamos un colegio, somos los apóstoles del

Señor y debemos amarnos unos a otros, ayudarnos,respetarnos, defendernos unos a otros. Para que asíel amor de Cristo se derrame hasta el pueblo de Diosy seamos ejemplo ante la comunidad cristiana.Cuando se habló de la relación del obispo con lossacerdotes en el sínodo, se dijo que fuera muycercano a los sacerdotes, que fuera su amigo, suhermano, su maestro, su padre, su protector en todo.Que estuviera atento siempre a las necesidades desus sacerdotes. Que apreciara su ministerio, eseministerio que en un mundo dominado por los tresídolos del poseer, del placer y del poder, hace aveces la misión del sacerdote tan difícil, porque elsacerdote a veces no encuentra en su nivel espiri-tual, resonancia en el mundo que lo rodea.

El obispo debe animarlo para que sea el sacer-dote, el presbítero, un válido pregonero del evan-gelio con la palabra y con la vida. Se le recomiendaal obispo, así dice el mensaje, que dimos en elsínodo, que ore por sus sacerdotes. Que, como dijoCristo en la última cena, él se santifique por ellos,para que ellos también sean santos. El obispo debehacer oración por sus sacerdotes. Pedirle a Diosnuestro Señor la gracia que es la única que nos


pág. 72 Bol-241

salva, sin la gracia de Dios nadie, nadie puedeestar en pie.

Las relaciones del obispo con los religiosos, conla vida consagrada, que es tan bien representada ennuestra diócesis como bendición de Dios, que elobispo debe estimar grandemente los carismas de lavida consagrada, porque son testigos privilegiadosdel evangelio. La verticalidad del seguimiento deCristo, la ponen en práctica, dejan todo y entregantodo por tal de quedarse solamente con el Señor yson ejemplo del pueblo cristiano y el obispo debeestimar grandemente este carisma de la vida consa-grada y promoverlo en sus comunidades.

El Señor nos dejó una hermosa partitura. Es unacomparación de San Francisco de Sales. Una her-mosa partitura en el evangelio y generalmente lamayoría de los cristianos no la ejecutamos, ahí estápero no la ejecutamos. Y San Francisco de Salesdice, quienes ejecutan esta partitura, cantan himnosgozosos al Señor según esta letra del evangelio, sonlos religiosos. Por lo tanto el obispo los debe fomen-tar, apreciar grandemente como una bendición ensus comunidades.

La relación del obispo con el pueblo santo deDios, con los laicos. Los laicos tienen carismas,tienen el Espíritu Santo también, son testigos obli-gados del evangelio. Debe estimar la ayuda que loslaicos prestan a las labores intraeclesiales. Cuántonos ayudan los laicos en la catequesis, en los minis-terios, en la liturgia, en losservicios de la caridad. Todoeso se debe estimar y estimu-lar. Pero también se debe ani-mar a los laicos, prepararlos,instruirlos, para que sean tes-tigos en el mundo y ejerzan elapostolado que les es propio,el de transformar con la leva-dura del evangelio la masa deeste mundo, y llevar a todaspartes con su presencia, consu ejemplo, la luz del Señorpara transformar el mundo yhacerlo Reino de Dios.

Entre los laicos, los jóve-nes son –dijo el Papa– centi-nelas del mañana, en ellos secifra la esperanza de un mun-

do mejor y de una iglesia que florece. No podemosninguno de nosotros, ni obispo ni sacerdotes des-cuidar el apostolado de la familia y de los jóvenes.Son apostolados claves, son fundamentales en lavida del pastor. Si alguno de nosotros no tieneninterés y no atiende a los jóvenes y a la familia, estáfaltando gravemente. Y que no se diga que notenemos edad, porque no vamos a jugar fútbol conlos jóvenes, vamos a ser sus guías y sus consejeros.Ejemplo más luminoso que el del Papa no lo hay, nose puede mover físicamente casi y congrega a losjóvenes, a miles, dos millones estuvieron en Romahace dos años con él en el encuentro. Dentro de unasemana estarán en Toronto miles y miles de jóvenesdel mundo congregados por el Papa. No necesita-mos un cuerpo joven: Un corazón joven. Un cora-zón joven para sentir con los jóvenes y poderlosorientar en el camino de la vida en esta sociedadactual que está tan llena de oscuridades y peligrospara ellos, todos lo sabemos.

Queridos obispos electos, Jesucristo es el sumosacerdote. Ustedes son sacerdotes de Jesucristo,sean ustedes todos siempre para Jesucristo nuestroSeñor.

Pueblo santo de Dios, gratitud a nuestro PadreDios que es bueno con nosotros y nos manda susministros y oración por ellos para que se entreguensin medida al cuidado de este pueblo santo de Dios,se santifiquen y nos santifiquen, que así sea.


pág. 73Bol-241

Mensaje Finaldel Sr. Nuncio Giusepe Bertello

Excelencia, gracias por esta invitación acompartir con usted y con los señores obisposde la Iglesia de Guadalajara estos momentosde fe y de alegría con motivo de la ordenaciónepiscopal de dos nuevos colaboradores que elSanto Padre le ha confiado. Yo quisiera feli-citarle, a usted eminencia, pero a toda laIglesia de Guadalajara y de manera particulara los dos nuevos obispos. Y llevar a ellos laexpresión del cariño, del afecto del SantoPadre, su recuerdo y su bendición para elministerio episcopal que comienzan hoy. Fe-licitaciones a sus familiares también y si mepermiten, de una manera particular a la mamádel Sr. Obispo José María de la Torre.

Monseñor Rafael, Monseñor José María,hoy que se sienten unidos de una maneraparticular sobre todo los obispos que hemospuesto nuestras manos sobre ustedes invo-cando el Espíritu Santo, que la alegría, que laesperanza de este día les acompañe durante suministerio episcopal, les deseamos que sealargo, que sea fructuoso, que sean lleno debendiciones del Señor. Como hemos celebra-do en la Eucaristía, que estos mismos frutosque han recibido de la bondad del Señor hoycon el don del Espíritu Santo. Ad multosannos.


pág. 74 Bol-241

«C«C«C«C«CONFESIOONFESIOONFESIOONFESIOONFESIO F F F F FIDEIIDEIIDEIIDEIIDEI»»»»»

1.- «In Verbo autem tuo». He decidido sellar miministerio episcopal con estas palabras, por unadoble razón: -porque en este texto del evangelistaSan Lucas se inspira el Papa Juan Pablo II, en sucarta apostólica sobre el Tercer Milenio, titulada«Novo Millennio Ineunte»; -y porque refleja muybien a la vez, mi desconcierto, mi gratitud.

2.- «Duc in altum» («Con Cristo, mar adentro»Lc 5, 4), es la apremiante invitación que nos dirigeel Papa Juan Pablo II, para que afrontemos valien-temente los desafíos de la evangelización nueva enel tercer milenio, apenas iniciado; y hagamos asífructíferos tantos dones derramados sobre nuestroscorazones, durante el año santo, en la memoria vivadel dos mil aniversario de la encarnación del Hijode Dios.

3.- «In verbo autem tuo» («¡Por qué tú me lodices!» Lc 5, 5). Son las mejores palabras que se meocurren para expresar mi confusión y a la vez miconfianza. Las palabras humildes del apóstol Pe-dro, son ahora las mías, porque explican mi fragili-dad y mis torpezas: «Maestro, estuvimos toda lanoche intentando pescar sin conseguir nada... perosólo porque tú lo dices, echaré las redes». ¡Sí! Sóloporque tú me lo dices, regresaré sin vacilar a Gua-dalajara e incansablemente pescaré con las redes deDon Juan Sandoval. ¡Porque tú me lo dices!, subiréa la barca y echaré las redes con Trino, Benjamín,Miguel y Rafael!. Confiaré una vez más en tupalabra. ¡Tengo la certeza de que no quedaré de-fraudado!

«C«C«C«C«CONFESIOONFESIOONFESIOONFESIOONFESIO L L L L LAUDISAUDISAUDISAUDISAUDIS»»»»»

4.- Gracias te doy por todos aquellos que, a lolargo de mi vida, con su «sí», han sido para mí«lámparas para mis pasos y luz para mis caminos»;aquellos que sin llegar, las más de las veces, aentender tus designios amorosos, dijeron «sí» sinreservas, con entereza y generosidad, como María,como José, santos patronos, cuyos nombres tengola dicha de llevar.

5.- Gracias por mis amigos los santos cuyosejemplos estimulan siempre mi caminar: San Fran-cisco de Asís, San Juan de Avila, San Juan MaríaVianney, San Juan Bosco y San MarcelinoChampañat; San José María Robles, San Tranqui-lino Ubiarco, Santo Toribio Romo y San PedroEsqueda. Gracias por el testimonio valiente detantas gentes de nuestras tierras alteñas, que fueronsacrificados inocentemente, durante la persecucióncristera; por aquellos que derramaron su sangredefendiendo su fe y sus convicciones, perdonandoa sus enemigos y proclamando vivas a Cristo Rey ya Santa María de Guadalupe. Gracias por el celoapostólico y la gallardía del Sr. Obispo Orozco yJiménez y la generosidad creativa y desbordantedel «Maistro» Anacleto González Flores.

Alocución Final de Mons.José María de la Torre Martín


pág. 75Bol-241

6.- Gracias por mis padres, mis hermanos, mishermanas, mis cuñadas, mi cuñado, mis tíos, misprimos, mis amigos, mis vecinos. Gracias por mishermanos sacerdotes, mis superiores, mis feligre-ses, mis bienhechores. Gracias por los tantos her-manos y hermanas que multiplicados al ciento poruno, ahora me das. ¡Cólmalos siempre de tus ben-diciones!

«C«C«C«C«CONFESIOONFESIOONFESIOONFESIOONFESIO V V V V VITITITITITAEAEAEAEAE»»»»»

7.- Padre, Padre de Jesús, Padre Nuestro. ¡En-sancha mi corazón con tu palabra, guíame por tussenderos, derriba los obstáculos que impidan laobra de tu gracia! ¡Lava todas mis inmundicias,purifícame de todos mis pecados! ¡Infunde siempreen mí tu Santo Espíritu! Modela mi corazón con lossentimientos mismos de tu Hijo Jesucristo, el BuenPastor, que conoce, ama, guía, alimenta, defiende yda la vida por sus ovejas. «Dame entrañas de

misericordia ante toda miseria humana, inspírameel gesto y la palabra oportuna frente al hermano soloy desamparado, ayúdame a mostrarme disponibleante quien se siente explotado y deprimido». Que laIglesia que ahora serviré, «sea un recinto de verdady de amor, de libertad, de justicia y de paz, para quetodos encuentren un motivo para seguir esperan-do».

8.- Padre. ¡Cuenta conmigo! ¡Estoy en tus ma-nos, haz de mí lo que quieras! Enséñame a sergeneroso, a servirte como mereces, a dar con gene-rosidad, a combatir sin temor mis flaquezas, atrabajar sin buscar descanso, a entregarme sin espe-rar otra recompensa, que la de saber que así cumplotu santa voluntad. Amén.

«¡Por tu limpia concepción y belleza sin igual,cúbreme, cúbrenos con tu manto, Madre mía de SanJuan!»

IOANNES PAULUS EPISCOPUS SERVUS SERVORUM DEI, dilecto Filio IosephoMariae De la Torre Martín, e clero dioecesis Sancti Ioannis a Lacubus ibidemque curaepastoralis Ecclesiae Cathedralis moderatori, archidioecesis Guadalaiarensis Praesulis Episcopoelecto Auxiliari, Panatoriensis episcopalis Ecclesiae addito titulo, salutem et ApostolicamBenedictionem.

Spectabilis Guadalaiarensis Ecclesia, quae clara exstat inter Mexicanas communitates,nunc mentem Nostram sollicitam requirit, cui operam Nostram commodare ultro properamus,ut inibi quam prosperrime spiritalis cursus procedat. Quandoquidem Venerabilis FraterNoster Ioannes S.R.E. Cardinalis Sandoval Iñiguez, illius Sedis Archiepiscopus, alterumsocium in apostolico ministerio postulavit, qui opem pastoralibus necessitatibus ferret, ad te,dilecte Fili, magna cum fiducia decurrimus hoc munus concredituri, quem scimus congruentidoctrina exornatum et pastorali usu bene execitatum. Ideo, consilium excipientesCongregationis pro Episcopis, Apostolica Nostra ex auctoritate, te Episcopum destinamusAuxiliarem Archiepiscopo Guadalaiarensi itemque titulo honestamus Panatoriensi, cunctissimul additis iuribus et officiis iniunctis quae cum tua destinatione tuoque statu cohaerent, adsacrorum canonum praescripta. Ante proinde ordinationem episcopalem quam a quoviscatholico sacrorum Antistite extra urbem Romam recipere poteris, oportet fidei professionemfacias ac fidelitatis nuncupes ius iurandum in Nos ad Congregationem pro Episcopismittendas curabis.

Ceterum, dilecte Fili, quae antea sustinuiste officia multum valent. Quocirca posthac,superno iuvamine flagitato, prorsus te esse paratum arbitramur ad altiora patranda, ipsopraegrediente Ordinario, ut ibidem fides pietasque roborentur itemque probanda operamultiplicentur.

Datum Romae, apud S. Petrum, die undevicesimo mensis Iunii, anno Domini bismillesimosecundo, Pontificatus Nostri quarto et vicesimo.


pág. 76 Bol-241

La presencia de dos nuevos obispos auxiliares enGuadalajara amplía los horizontes del trabajo pas-toral, en una comunidad de 6 millones de habitan-tes. Su servicio no será, como lo dijo el CardenalJuan Sandoval, para disminuir la carga de los obis-pos ya asignados a esta Arquidiócesis, sino para daruna mejor atención de los fieles.

Este trabajo, como auxiliares del arzobispotitular, se distingue en tres áreas: enseñar, santifi-car y gobernar, y tienen como denominador co-mún procurar el bien espiritual de los feligreses.Cada uno de estos Ministerios (servicios) presentadificultades singulares al momento de ponerlos enpráctica, tanto por las limitaciones de quien losejerce como de quienes se ven afectados por estasfunciones, es decir, todos los bautizados. Pero almismo tiempo, a través de este triple servicio,fieles y obispos pueden encontrar caminos derealización y santificación, finalidad de este ejer-cicio basado en la fe. La enseñanza, la administra-ción de los Sacramentos y el gobierno de la dióce-sis, suponen que se tiene fe, pues sin ella la personano cree, y menos realiza, ninguno de estos tresbeneficios en sí misma.

El obispo es la persona elegida por el Papa paradirigir o, en este caso, auxiliar, a una Iglesia local oparticular, delimitada por un territorio, y se consi-dera sucesor de los Apóstoles. Sabemos, en efecto,que Jesús eligió a doce discípulos para que demanera especial fueran los servidores de la comu-nidad (Mc 10, 42-45; Mt 20, 25-28). Del mismoEvangelio se deduce la triple encomienda dada a losApóstoles (Mt 28, 19-20): ellos tienen la misión deenseñar a todos los hombres; de buscar su santifica-ción por los Sacramentos, y hacerlos cumplir losMandamientos de Dios (gobernar). Cada uno de losobispos recibe esta misión, común con los demásobispos del mundo, especialmente cuando se tratade la presencia de varios prelados en un mismoterritorio, como es el caso de Guadalajara, dondeuno es el titular y los demás son, precisamente,

auxiliares, y todos están en unión con el PontíficeRomano (cfr. Lumen gentium, «Luz de las gentes»,n. 22). Pero, insistimos, este ejercicio supone la fe.Quien no cree, puede incluso encontrar en estetrabajo un motivo de burla.

¿En qué consiste la triple misión del obispo? ElCatecismo de la Iglesia Católica nos da la respuesta(nn. 888, 893, 894): los obispos con sus colaborado-res, los presbíteros, «tienen como primer deberanunciar a todos el Evangelio de Dios»; son «lospredicadores del Evangelio que llevan nuevos dis-cípulos a Cristo, y son también los maestros autén-ticos del mensaje del Reino».

La segunda misión del obispo es santificar. Esdecir, él es «administrador de la Gracia» de Cristo,en particular, en la Eucaristía. El obispo santifica laIglesia con su oración y su trabajo, por medio de lapalabra y de los Sacramentos. La santifica con suejemplo, «no tiranizando a quienes les ha tocadocuidar, sino siendo modelos» (1Pe 5, 3).

La misión de gobernar, la realizan en la diócesisque se les encomienda, y la ejercen con autoridadsagrada, gracias a sus proyectos, consejos y ejem-plo. Así, el obispo tiene que ser alguien con creati-vidad e iniciativa.

Lo importante es que, para el creyente, el trabajobien llevado del obispo se vuelva necesario para suvida. Se hace necesaria la presencia del obispo si,con esmero, dedicación y buen ánimo, lleva a caboeste triple servicio. Los tiempos y las circunstanciasvan haciendo que los fieles no esperen menos de losprelados, y ellos, a su vez, se ven impulsados aactuar bajo estas exigencias.

Otra de las expectativas que existen en torno a unobispo, es que tenga capacidad de diálogo conquienes no comparten nuestro credo, quienes en-grosan el espacio cada vez más plural de la sociedady están inmersos en ella con buena voluntad. Conlos agresores directos –que también los hay–, defi-nitivamente no se puede dialogar, pero las iniciati-

El Obispo tieneuna Triple manera de Servir


pág. 77Bol-241

vas que se toman en este sentido, con personas quecomparten el deseo de mejorar a la persona demanera integral, son siempre bien vistas por pro-pios y extraños.

La presencia de dos nuevos obispos auxiliares enla Arquidiócesis de Guadalajara renueva nuestra fe,aviva la esperanza e impulsa a la caridad.

Mons. José Ma. de la TorreCon mucho trabajo por delante

• Arnold Omar Jiménez RamírezLa Arquidiócesis de Guadalajara es una de las

más grandes e importantes no sólo de México, sinodel mundo. Su gobierno y pastoreo no son laborfácil, por eso el obispo diocesano, en este caso elCardenal Juan Sandoval Íñiguez, se apoya en losobispos auxiliares para desempeñar el gobiernoarquidiocesano, quienes lo ayudan a realizar efec-tivamente su labor. Los nuevos obispos auxiliares,sugeridos por la arquidiócesis y elegidos por SuSantidad Juan Pablo II, se harán cargo de tareasmuy precisas que el arzobispo les ha designado:Monseñor Rafael Martínez tendrá a su cargo acom-pañar a las comunidades de Vida Consagrada, tareaimportante si consideramos que nuestra Iglesialocal es una de las que albergan más congregacio-nes a nivel mundial; mien-tras que Monseñor JoséMaría de la Torre tendrá asu cargo la Vicaría de Pas-toral, reto que le fue pro-puesto dada su experien-cia previa en este campo,dentro de su diócesis ante-rior.

¿Qué es la Vicaría dePastoral?

La Vicaría Episcopal dePastoral es el organismodel obispo que, en su nom-bre y con su autoridad, pro-mueve, anima y coordinala acción pastoral globalen la diócesis.

Es el instrumento quepermite al obispo discernirlas problemáticas presen-tes y dar a ellas las res-

puestas pastorales adecuadas, con sus directrices ydeterminaciones para la vida pastoral de la Iglesiaque le ha sido confiada. Al frente de esta Vicaríaestá el vicario episcopal de Pastoral, quien estáíntimamente ligado a la persona del obispodiocesano.

El ámbito de acción de la Vicaría de PastoralDel vicario episcopal de Pastoral dependen di-

rectamente las comisiones diocesanas con sus sec-ciones; el Instituto Diocesano de Pastoral; el CentroDiocesano de Pastoral y la librería, así como losdemás institutos bíblico-teológicos existentes en ladiócesis, lo mismo que aquéllos que las necesida-des del tiempo aconsejaran instituir.

Las tareas del vicario de PastoralEl vicario de Pastoral tiene a su cargo tres tareas:

promover, animar y coordinar la acción pastoral.Promover la Pastoral integral y orgánica, consis-

te en recoger la realidad diocesana y analizarla a laluz de la fe, así como detectar los vacíos de la laborpastoral en los diferentes niveles, ambientes y ser-vicios: entre los agentes de Pastoral, en las estruc-turas, tareas fundamentales, destinatarios priorita-rios y recursos. También, esta promoción implicaproponer caminos que respondan de manera ade-


pág. 78 Bol-241

cuada a los vacíos más apremiantes detectados enlos diferentes niveles, ambientes y servicios pas-torales.

Animar la Pastoral en la diócesis significamantener informado al obispo sobre la realidadpastoral; asegurar la difusión oportuna de infor-mación pastoral en los diferentes niveles y res-ponsabilidades; cuidar y programar la capacita-ción específica de los responsables de las diferen-tes instancias y servicios pastorales, e implantar yfortalecer el proceso pastoral, con las orientacio-nes que da el Magisterio y las aportaciones deacontecimientos eclesiales supradiocesanos.

Coordinar la acción pastoral requiere vigilarque todas las instancias y servicios diocesanos dePastoral realicen fielmente su encomienda, apo-yando directa o indirectamente la misión de lasparroquias; instrumentar la aplicación del PlanDiocesano de Pastoral, con la programación anualen las diferentes instancias y organismos de pas-toral; realizar encuentros periódicos con los coor-dinadores y asesores de las comisiones, paraasegurar la existencia de criterios comunes, pro-piciar la interrelación y el apoyo mutuo; promo-ver la unidad de criterios y la complementaciónen los diferentes centros e institutos de formaciónpastoral, y preparar la realización de las jornadaso asambleas diocesanas de Pastoral, en coordina-ción con los vicarios episcopales de zona.

Los retos de su misiónLa Vicaría de Pastoral debe garantizar el traba-

jo integral y orgánico de cada una de las comisio-nes, secciones e institutos, logrando una mayorcomunicación e interrelación y cuidando la capa-citación específica de los coordinadores de cadauna de ellas. Asimismo, le corresponde buscarrespuestas, por medio de la Pastoral Profética, ados grandes desafíos actuales: la inculturacióndel Evangelio en la cultura emergente, y la inva-sión de las sectas o de los nuevos grupos ymovimientos religiosos.

En consonancia con los tiempos modernos,también corresponde a esta vicaría afrontar concreatividad y visión, desde la Comisión de Lai-cos, los retos positivos y negativos que represen-tan los medios masivos de comunicación social,además de buscar formas adecuadas para evange-lizar el mundo estudiantil y universitario.

Mons. Rafael Martínez coordinará la Vicaría deVida Consagrada

Por la unidad y el testimonio

• Jesús Carlos Chavira CárdenasTras casi un año de que Mons. José Luis Chávez

Botello fuera nombrado Obispo de Tuxtla Gutiérrez,Chiapas, la coordinación vacante de la Vicaría deVida Consagrada de la Arquidiócesis de Guadalajaraserá ocupada por el Obispo Electo Rafael MartínezSáinz, el cual tendrá la encomienda de ser «el enlaceentre el obispo titular y los consagrados», segúnexplicó Cristina Ventura González, quien desde hace5 años colabora con esta Vicaría y es, además, Presi-denta de la Conferencia Mexicana de los InstitutosSeculares (COMIS) y Legionaria de María Inmacu-lada.

La entrevistada conoce a Mons. Martínez desdehace 25 años, cuando en Ocotlán, Jalisco, ella trabajódurante 2 años con un grupo de seminaristas. Por ello,manifiesta que el obispo electo reúne el perfil que serequiere para coordinar la Vicaría de Vida Consagra-da: «El obispo que esté al frente de ella debe ser unauténtico pastor; debe conocer a profundidad la VidaConsagrada para amarla y animarla. Cuando Mons.Rafael Martínez era párroco de Ocotlán, siempreestuvo abierto a integrar en su equipo de trabajo a losconsagrados, pues tiene un gran espíritu de unidad ycolegialidad, además de ser muy comprometido yabierto. Al paso de los años, ha de haber crecido enexperiencia, por lo que sabrá animar a las congrega-ciones e institutos para que vivan profundamente sucarisma y lo proyecten en beneficio del Pueblo deDios».

Cristina Ventura añadió que el nuevo obispo auxi-liar velará por la integración de los religiosos a laPastoral diocesana, por sus necesidades y retos.

Realidad y desafíosGuadalajara es considerada un centro de oportuni-

dades para la formación de los consagrados y laproyección pastoral de su carisma, tanto en la vidaparroquial como en la educación, la catequesis o lacaridad. Esto motiva que cada año lleguen comunida-des nuevas a la diócesis, de las que, en la actualidad,30% son extranjeras. Además, cabe indicar que másde 4 mil 500 consagrados misionan en Guadalajara.No obstante, «esto no quiere decir que estemos traba-jando a satisfacción», señala la titular de la COMIS.


pág. 79Bol-241

Indica que gran parte de las congregaciones einstitutos de Vida Consagrada está en los sectoresHidalgo y Juárez de la «Perla Tapatía», mientrasque en el Sector Libertad y la periferia tienen pocapresencia. Esto lo atribuye Cristina Ventura a que50% de los consagrados estén en etapa formativa,de manera que su labor pastoral no se ha podidoextender. No obstante, la Vicaría de Vida Consa-grada contempla esta situación como un reto: «Debetenerse en cuenta que se necesita mucho el testimo-nio del consagrado, sobre todo en la periferia y enlos lugares donde hay menos presencia sacerdotal»,apuntó.

Cristina Ventura incluye, entre los desafíos, laactualización de las personas consagradas en loscambios tecnológicos e ideológicos, para que pue-dan realizar unarelectura vigente delEvangelio y de suspropios carismas. Deesta manera, estimaque el consagrado po-drá dar respuestasmás adecuadas a lasnecesidades de todocristiano.

La evangelizacióny la catequesis de losbautizados tambiénson un reto. «Si bienGuadalajara es unaciudad religiosa, entérminos generales,los católicos no da-mos una respuestamadura. Nuestra fe esinfantil, de adolescen-tes acaso, y necesita-mos crecer hasta unafe adulta, madura, yen esto los consagrados podemos aportar bastante».Para ello, explicó, se requiere el trabajo conjunto ycolegiado de todos los organismos de vida consa-grada, lo cual es también una meta a alcanzar.

En espera de indicacionesDurante el tiempo que la coordinación de la

Vicaría de Vida Consagrada estuvo vacante, eltrabajo continuó con base en el plan anual de

objetivos y estrategias que se había planteado conoportunidad, bajo la tutela del Padre Rafael SalazarCárdenas, Misionero del Espíritu Santo.

Ahora, con el nombramiento de Mons. RafaelMartínez, la comisión está en espera de nuevasindicaciones, sobre la decisión de nombrar unnuevo equipo o continuar con el mismo: «Yoespero que el señor obispo se auxilie con represen-tantes de la Vida Consagrada; esto lo ayudará atener un mayor acercamiento en calidad con estarealidad».

Cabe mencionar que esta vicaría estaba formadapor representantes de los diferentes tipos de la vidaconsagrada que conviven en la arquidiócesis: vidacontemplativa y activa; institutos seculares, de De-recho Pontificio y Diocesano.

Cristina Ventura subraya su agrado por el hechode que el obispo electo, incluso antes de ser consa-grado, comenzó a informarse sobre la vicaría y larealidad de la Vida Religiosa en la diócesis.

En tanto, entre la alegría y la espera, la comisiónse prepara para dar la bienvenida a Mons. MartínezSáinz, la cual está programada para la primerasemana de septiembre.


pág. 80 Bol-241

Monseñor José MaríaMonseñor José MaríaMonseñor José MaríaMonseñor José MaríaMonseñor José Maríade la Torre Martín,de la Torre Martín,de la Torre Martín,de la Torre Martín,de la Torre Martín,

Obispo Titular de Panatoriay Auxiliar de Guadalajara

DESCRIPCIÓN

En un campo de plata con bordura en color oro,aparecen dos figuras: al centro, una cruz de Jerusa-lén en gules -color rojo vivo-, símbolo de Jesucris-to; en segundo lugar, en el cantón superior unaestrella esmaltada en azur (azul claro) con centro deplata. Acolado (colocado detrás del escudo) comoinsignia episcopal, el cayado de Jesucristo BuenPastor.

SIMBOLISMO

El fondo esmaltado enplata simboliza las virtudesnecesarias para ejercer el mi-nisterio: humildad, inocen-cia, felicidad, templanza, y

las cualidades de la franqueza, limpieza, integridady elocuencia.

La cruz de Jerusalén hace referencia a la evange-lización de estas tierras, realizada por los francisca-nos, y alude a la tierra natal del obispo, Pegueros,Jalisco. Es en gules por los mártires que fecundaronla tierra de Los Altos, que además guarda en susentrañas ese color rojizo de la fidelidad.

La estrella en azur y plata simboliza la presenciay guía de María, en su advocación de Lucero de laEvangelización.

El báculo es una insignia episcopal que recuerdael cayado de Jesucristo, Buen Pastor.

LEMA

In Verbo Autem Tuo,«(Confiando) en tu palabra»(Mt 5, 5) con letras esmalta-das en sable (negro) sobreoro.

Los Escudosde los nuevos Obispos Auxiliares


pág. 81Bol-241

Monseñor RafaelMonseñor RafaelMonseñor RafaelMonseñor RafaelMonseñor RafaelMartínez Sáinz,Martínez Sáinz,Martínez Sáinz,Martínez Sáinz,Martínez Sáinz,

Obispo Titular de Janey Auxiliar de la Arquidiócesis

de Guadalajara.

DESCRIPCIÓN

En un campo de gules, con bordura en color oro,aparecen dos figuras ubicadas en palo; en la partesuperior hay una silueta de perfil en forma descen-dente del Espíritu Santo, a manera de paloma y deflama, ambos símbolos clásicos de la Tercera Per-sona de la Santísima Trinidad, fileteada en oro y alcentro, gules. En la parte inferior aparece una letra«M» en mayúscula, esmaltada en azur.

Acolado como insignia episcopal, el cayado deJesucristo es cruzado por un elemento horizontal,formando así una cruz latina.

SIMBOLISMO

El fondo esmaltado en gules simboliza las virtu-des necesarias para realizar la misión episcopal:fidelidad, fortaleza, osadía, valentía, nobleza, mag-nanimidad, atrevimiento y alegría. También es em-blema de la caridad de Cristo.

El Espíritu Santo en oro simboliza su acción, quenos recuerda las enseñanzas de Jesucristo condu-ciéndonos al Padre Celestial.

La letra «M» esmaltada en azul simboliza lapresencia e intercesión de la Virgen María. Elbáculo es una insignia episcopal que recuerda elcayado de Cristo Buen Pastor, que al ser cruzadocon un elemento horizontal a manera de cruz latina,recuerda que el obispo participa de la misión deJesucristo.

LEMA

Pro Hominibus Constitutus, «Constituido en fa-vor de los hombres» (Hb 5, 1) con letras esmaltadasen sable sobre oro.


pág. 82 Bol-241

23 Obispos nacidosen la Región de los Altos.

(Actualmente Diócesis de San Juan de los Lagos)

1.- Excmo. Sr. D. Fray Francisco José García-DiegoMoreno (OFM). Nació en Lagos de Moreno, Jal. el 17 deSeptiembre de 1785. Ordenación Sacerdotal 14 de Noviem-bre de 1808. Consagración Episcopal 4 de octubre de 1840,en la Basílica de Guadalupe en México, por el AbadAntonio María de Jesús Campos Moreno. Primer Obispo deCalifornia (27 de abril de 1840). Murió en Santa Bárbara,Ca.(hoy Estados Unidos) el 30 de Abril de 1846.

2.- Excmo. Sr. D. Pedro Barajas Moreno. Nació en(Hacienda “La Daga”) Lagos de Moreno, Jal. el 1 deNoviembre de 1795. Ordenación Sacerdotal 25 de febrerode 1824. Consagración Episcopal 18 de marzo de 1855, enla Catedral de Guadalajara, por el Sr. Obispo Pedro EspinozaDávalos. Nombrado I Obispo de San Luis Potosí (30 denoviembre de 1854-1868). Murió en San Luis Potosí el 30de diciembre de 1868.

3.- Excmo. Sr. D. José Homobono de la Merced AnayaGutiérrez. Nació en Pegueros, Jal. (Tepatitlán) el 10 denoviembre de 1836. Ordenación Sacerdotal 3 de marzo de1860. Consagración Episcopal 12 de febrero de 1899, en laCatedral de Guadalajara por el Sr. Arz. Jacinto LópezRomo. Nombrado Tercer Obispo de Sinaloa (28 de noviem-bre de 1898-1902) y V Obispo de Chilapa (22 de agosto de1902-1906). Murió en Chilapa, Gro. el 10 de Diciembre de1906.

4.- Excmo. Sr. D. Fray José Guadalupe de Jesús AlbaFranco (OFM). Nació en Unión de San Antonio, Jal. (Ríode Vázquez) el 5 de Octubre de 1841 (su nombre eraAtilano). Ordenación Sacerdotal 7 de agosto de 1864.Consagración Episcopal el 26 de febrero de 1899, en laIglesia de la Profesa, de México, por el Sr. Obispo NicolaAverardi, visitador apostólico.

Obispo de Yucatán 28 de noviembre de 1898-1900 (nofue efectivo). IV Obispo de Zacatecas (24 de diciembre de1899-1910). Murió Zacatecas, Zac. el 11 de Julio de 1910.

5.- Excmo. Sr. D. Ignacio de Alba Hernández. Nació enSan Juan de los Lagos, Jal. el 30 de Octubre de 1890.Ordenación Sacerdotal 28 de Octubre de 1915. Consagra-ción Episcopal 28 de mayo de 1939, en la Catedral deGuadalajara, por el Sr. Arz. José Garibi Rivera. ObispoCoadjutor (con derecho a sucesión) de Colima (29 de abrilde 1939-1976). V Obispo de Colima el 30 de junio de 1949.Obispo emérito 18 de enero de 1976. Murió en Guadalajara,Jal. el 25 de Mayo de 1978.

6.- Excmo. Sr. D. Everardo López Alcocer. Nació enTototlán, Jal. el 7 de Febrero de 1916. Ordenación Sacer-dotal el 4 de abril de 1942. Consagración Episcopal 29 de

septiembre de 1967, en el Seminario de Autlán, por elEmmo. Sr. Card. José Garibi Rivera. Nombrado II Obispode Autlán 25 de julio de 1967. Murió en trágico accidenteautomovilístico en su diócesis, el 21 de diciembre de 1968.

7.- Excmo. Sr. D. Lino Aguirre García. Nació en Mex-ticacán, Jal. el 23 de Septiembre de 1895. OrdenaciónSacerdotal 9 de noviembre de 1919. Consagración Episcopal12 de marzo de 1944, en la Catedral de Guadalajara, por elArz. José Garibi Rivera. VII Obispo de Sinaloa (22 de enerode 1944-1969) y de Culiacán (31 de diciembre de 1970).Murió en Guadalajara, Jal. el 20 de febrero de 1975.

8.- Excmo. Sr. José de Jesús Angulo (del Valle) Nava-rro. Nació en San Francisco de Asís, Jal. (Hacienda de “ElValle”) el 24 de Junio de 1888. Ordenación Sacerdotal 11de noviembre de 1916. Consagración Episcopal 29 de juniode 1945, en la Basílica de Guadalupe, México, por el Sr.Arz. Luis María Rodríguez Martínez. Nombrado VIII Obis-po de Tabasco (2 de junio de 1945-1966). Murió en Villa-hermosa, Tab., el 19 de Septiembre de 1966.

9.- Excmo. Sr. D. Salvador Quezada Limón. Nació enYahualica, Jal. el 7 de Enero de 1909. Ordenación Sacer-dotal 25 de junio de 1933. Consagración Episcopal el 8 dediciembre de 1951, en la Catedral de Aguascalientes, por elSr. Arz. José Garibi Rivera. Nombrado IV Obispo deAguascalientes, Ags. (20 de obctubre de 1951-1984). Re-nunció el 28 de enero de 1984. Murió el 20 de noviembre de1993, en Aguascalientes, Ags.

10.- Excmo. Sr. D. Francisco del Refugio OrozcoLomelín. Nació en Lagos de Moreno, Jal. el 4 de Julio de1917. Ordenación Sacerdotal el 27 de octubre de 1940.Consagración Episcopal 20 de junio de 1952, en la Basílicade Guadalupe, México por el Sr. Arz. Luis María RodríguezMartínez. Nombrado Obispo Auxiliar de la Arquidiócesisde México (19 de marzo de 1952 hasta 1986). Murió en laCiudad de México, el 16 de Octubre de 1990.

11.- Excmo. Sr. D. José Guadalupe Padilla Lozano.Nació en San Miguel el Alto, Jal. el 12 de Diciembre de1920. Ordenación Sacerdotal 20 de abril de 1946. Consa-gración Episcopal 19 de marzo de 1963, en la nuevaCatedral de Veracruz, por el Emmo.Sr. Card. José GaribiRivera. Nombrado I Obispo de Veracruz, Ver. (nuevaDiócesis con sede en el Puerto) (15 de enero de 1963 hasta2002). Renunció el 18 de febrero de 2002. Vive en Vera-cruz, Ver.

12.- Excmo. Sr. D. Salvador Martínez Aguirre S. J.Nació en Arandas, Jal. el 25 de Noviembre de 1897.Ordenación Sacerdotal 28 de julio de 1929. Consagración


pág. 83Bol-241

Episcopal el 9 de septiembre de 1858, en Sisoguichi, por elSr. Arz. Luigi Raimondi, Delegado Apostólico. NombradoI Vicario Apostólico de Tarahumara (el 4 de julio de 1958-1973). Renunció a Vicario Apostólico de Tarahumara el 25de mayo de 1973. Murió el 4 de Diciembre de 1987.

13.- Excmo. Sr. D. Adolfo Hernández Hurtado. Nació enArandas, Jal. (El Nopal) el 18 de Diciembre de 1920.Ordenación Sacerdotal 26 de diciembre de 1943. Consagra-ción Episcopal el 11 de mayo de 1958, en Tapachula, Chis. porel Sr. Arz. José Garibi Rivera. Nombrado I Obispo de Tapa-chula, Chis. (13 de enero de 1958-1974), VIII Obispo deZamora (6 de septiembre de 1970). Auxiliar de Guadalajara(12 de diciembre de 1974). Renunció a Auxiliar de Guadala-jara el 20 de marzo de 1997. Vive en Guadalajara, Jal.

14.- Excmo. Sr. D. José Trinidad Sepúlveda Ruiz Velaz-co. Nació en Atotonilco el Alto, Jal. el 30 de Marzo de1921. Ordenación Sacerdotal 27 de marzo de 1948. Consa-gración Episcopal el 25 de julio de 1965, en la Iglesia deNtra. Señora de Guadalupe en Tuxtla Gutiérrez, Chis. porel Emmo. Sr. Card. José Garibi Rivera. Nombrado I Obispode Tuxtla Gutiérrez, Chis. (1 de junio de 1965-1988), IIIObispo de San Juan de los Lagos (12 de febrero de 1988hasta el 21 de marzo de 1999). Renunció el 20 de enero de1999. Vive en Guadalajara, Jal.

15.- Excmo. Sr. D. Luis Rojas Mena. Nació en Jalpa deCánovas, Gto. el 21 de Junio de 1917. Ordenación Sacer-dotal el 31 de marzo de 1945. Consagración Episcopal el 16de julio de 1968, en la Catedral de Guadalajara, por elEmmo. Sr. Card. José Garibi Rivera. Nombrado ObispoAuxiliar de Culiacán, Sin. (el 6 de mayo 1968-1993). VIIIObispo de Culiacán, Sin. 20 de agosto de 1969. Renunció el4 de octubre de 1993. Vive en Guadalajara, Jal.

16.- Excmo. Sr. D. Jacinto Ricardo Guerre-ro Torres. Nació en Arandas, Jal. el 6 deSeptiembre de 1934. Ordenación Sacerdotal el3 de mayo de 1964. Consagración Episcopal el6 de enero de 1991, en Roma, en la Basílica deSan Pedro, por el Papa Juan Pablo II. Nombra-do Obispo Coadjutor y Administrador Apostó-lico “Sede Plena” de Tlaxcala el 5 de diciem-bre de 1990, II Obispo de Tlaxcala el 10 defrebrero de 2001. Vive en Tlaxcala, Tlax.

17.- Emmo. Sr. Card. D. Juan SandovalIñiguez. Nació en Yahualica, Jal. el 28 deMarzo de 1933. Ordenación Sacerdotal el 27de octubre de 1957. Consagración Episcopalel 30 de abril de 1988, en Ciudad Juárez, por elExcmo. Sr. Manuel Talamés Camandari. Nom-brado Obispo Coadjutor de Cd. Juárez el 3 demarzo de 1988, II Obispo de Ciudad Juárez el11 de julio de 1991, IX Arzobispo de Guada-lajara 21 de Abril de 1994. Creado Cardenal el26 de Noviembre de 1994, en Guadalajara,Jal., por el Papa Juan Pablo II.

18.- Excmo. Sr. D. José Guadalupe Octavio MartínRábago. Nació en San Miguel el Alto, Jal. el 12 de Octubrede 1935. Ordenación Sacerdotal el 22 de julio de 1962.Consagración Episcopal el 5 de junio de 1992, en el Audi-torio “Benito Juárez” (Zapopan, Jal.), por el Emmo. Sr.Card. Juan Jesús Posadas Ocampo. Nombrado ObispoAuxiliar de Guadalajara el 15 de Abril de 1992, Adminis-trador Diocesano de Guadalajara el 24 de Mayo de 1993 a21 de Abril de 1994, X Obispo de León, Gto., a partir del 23de Agosto de 1995. Vive en León, Gto.

19.- Excmo. Sr. D. José Luis Chávez Botello. Nació el8 de Febrero de 1941, en Tototlán, Jal. Ordenación Sacer-dotal el 8 de diciembre de 1969. Consagración Episcopal el19 de marzo de 1997, en el Auditorio “Benito Juárez”(Zapopan, Jal.), por el Emmo. Sr. Card. Juan SandovalIñiguez. Nombrado Obispo Auxiliar de Guadalajara el 21de febrero de 1997; III Obispo de Tuxtla Gutiérrez, Chis(Agosto 2001). Vive en Tuxtla Gutiérrez, Chis.

20.- Excmo. Sr. D. José Trinidad González Rodríguez.Nació el 12 de septiembre de 1943, en Jesús María, Jal.Ordenación Sacerdotal el 2 de abril de 1972. Consagrado el19 de marzo de 1997, en el Auditorio “Benito Juárez”(Zapopan, Jal.), por el Emmo. Sr. Card. Juan SandovalIñiguez. Nombrado Obispo Auxiliar de Guadalajara (21 deFebrero de 1997). Vive en Guadalajara, Jal.

21.- Excmo. Sr. D. Francisco Ramírez Navarro. Nacióel 24 de julio de 1939, en Tepatitlán, Jal. OrdenaciónSacerdotal el 15 de agosto de 1969. Consagrado el 22 defebrero de 2001, en la Catedral de Tlalnepantla, por el Sr.Arz. Ricardo Guísar Díaz. Nombrado Obispo Auxiliar deTlalnepantla, Edomex. (27 de Diciembre de 2002). Vive en

Tlalnepantla, Edomex.22.- Excmo. Sr. D. Rafael Martínez

Sáinz. Nació en Arandas, Jal., el 29 deseptiembre de 1935. Ordenación Sacer-dotal el 25 de octubre de 1959. Consagra-do el 16 de julio de 2002, en el Auditorio“Benito Juárez” (Zapopan, Jal.), por elEmmo. Sr. Card. Juan Sandoval Iñiguez.Nombrado Obispo Auxiliar de Guadala-jara (19 de junio de 2002). Vive en Gua-dalajara, Jal.

23.- Excmo. Sr. D. José María de laTorre Martín. Nació en Pegueros, Jal.(Tepatitlán), el 9 de septiembre de 1952.Ordenación Sacerdotal el 1 de junio de1980. Consagrado el 16 de julio de 2002,en el Auditorio “Benito Juárez” (Zapopan,Jal.) por el Emmo. Sr. Card. Juan SandovalIñiguez. Nombrado Obispo Auxiliar deGuadalajara (19 de junio de 2002). Viveen Guadalajara, Jal.

CUMPLEAÑOS

3 Agosto 1984 ......... SR. PBRO. BENITO CORONA ELIZARDE

7 Agosto 1995 ......... SR. CURA RAFAEL ALDRETE MUÑOZ

24 Agosto 1998 ......... SR. PBRO. RAMÓN DE J. GUZMÁN ESCOBAR

ANIVERSARIOS DE DEFUNCION

pág. 84

VIDA DIOCESANA

2 agosto 1972 ......... SR. CURA ALBERTO GUZMAN GUZMAN3 agosto 1930 ......... SR. CANGO. ROBERTO CORONA CORONA

1963 ......... SR. PBRO. GABRIEL GONZALEZ PEREZ1970 ......... SR. PBRO. JOSE GAMALIEL REYES MENDOZA

4 agosto 1945 ......... SR. CURA IGNACIO RAMOS PUGA6 agosto 1962 ......... SR. PBRO. JOSE DE JESUS LOMELI GUTIERREZ

1920 ......... SR. CANGO. GABRIEL VELAZQUEZ MIRAMONTES1916 ......... SR. PBRO. FELICIANO MACIAS MENDOZA

7 agosto 1916 ......... SR. PBRO. ALBERTO CALDERON UREÑA1963 ......... SR. PBRO. IGNACIO BARBA PALOS1967 ......... SR. PBRO. JAVIER ROJAS BANDA

8 agosto 1958 ......... SR. CURA RAMON MAGAÑA CURIEL9 agosto 1965 ......... SR. PBRO. JOSE LUIS GONZALEZ PEREZ

12 agosto 1963 ......... SR. PBRO. CELEDONIO MARTINEZ SOTELO1963 ......... SR. PBRO. RUBEN SEPULVEDA CABRERA

16 agosto 1953 ......... SR. CURA RAMON PEREZ MATA1969 ......... SR. PBRO. ANDRES SAINZ MARQUEZ

18 agosto 1966 ......... SR. PBRO. LUIS FLORES VILLA19 agosto 1918 ......... SR. CANGO. LUIS NAVARRO ROMERO

1965 ......... SR. PBRO. JOSE LUIS ALDANA WARIO21 agosto 1933 ......... SR. PBRO. JUAN FRANCISCO GUTIERREZ RODRIGUEZ22 agosto 1940 ......... SR. CURA FRANCISCO CASTAÑEDA JIMENEZ25 agosto 1970 ......... SR. PBRO. DAVID PEGUERO PEREZ

1971 ......... SR. PBRO. ALVARO LOMELI PULIDO26 agosto 1961 ......... SR. PBRO. JAVIER RODRIGUEZ OROZCO27 agosto 1935 ......... SR. CURA EFREN PEDROZA FRANCO

1961 ......... SR. PBRO. JOSE ANTONIO VAZQUEZ MONTAÑO

ANIVERSARIOS DE ORDENACION2 agosto 1972 ......... SR. PBRO. VICENTE MONTERO GONZALEZ

15 agosto 1997 ......... SR. PBRO. ADRIAN ACOSTA LOPEZ1977 ......... SR. PBRO. PEDRO PEREZ LA TORRE (BODAS DE PLATA SACERDOTALES)1978 ......... SR. CURA JUAN DAVID RAMIREZ PEREZ

16 agosto 1998 ......... SR. PBRO. GUILLERMO ARIAS1976 ......... SR. CURA JAIME ENRIQUE GUTIERREZ GUTIERREZ1976 ......... SR. CURA J. JESUS GUTIERREZ JIMENEZ1976 ......... SR. CURA ANTONIO MARQUEZ LOZANO1976 ......... SR. CURA ANASTACIO ULLOA AMEZQUITA

19 agosto 1976 ......... SR. PBRO. J. JESUS VASQUEZ RUIZ21 agosto 1992 ......... SR. PBRO. FEDERICO ALBERTO PONS ARENAS

AGENDA DE AGOSTO 2002

J. 1-D. 4 .... Preseminarios (Jalos y Atotonilco)

L. 5 .... Reunión de Consejos decanales

Mi. 7 .... Inicio de servicio del Sr. Cura J. Jesús Melano González. Parroquia SagradaFamilia. 12:00 Hrs. (Tepatitlán, Jal.)

L. 5-V. 9 .... EJERCICIOS ESPIRITUALES PARA SACERDOTES (Casa JPII)

S. 10 .... Reunión del Equipo diocesano de Evangelización y Catequesis (Capilla)

S. 10 .... Reunión del Equipo diocesano de Adolescentes y Jóvenes (Arandas)

L. 12 .... Día del párroco

J. 15 .... BODAS DE PLATA SACERDOTALES DEL SR. PBRO. PEDRO PEREZ DELA TORRE (Jalostotitlán, Jal.

.... S. 17-D. 18 Encuentros conyugales (Casa JPII)

.... Reunión del EDP

L. 26-S. 31.. Reunión del CDP (Casa JPII)

Excmo. Sr. D. Rafael Martínez Sáinz. Na-ció en Arandas, Jal., el 29 de septiembre de1935. Ingresó al Seminario a los 12 años deedad. Su internado lo vivió en la antigua casadonde hoy es el Instituto de Teología, tambiénen “Santa Tere”. En Roma recibió la Ordena-ción Sacerdotal el 25 de octubre de 1959. Enla Ciudad Eterna obtuvo la licencia en Teolo-gía Dogmática y en Doctrina Social de laIglesia en la Pontificia Universidad Gregoria-na. Estuvo ocho años en Tecoaltitán, pueblode Zapotlán del Rey. Fue párroco de la Parro-quia del Señor de la Misericordia, en Ocotlán.Posteriormente fue designado a San Migueldel Espíritu Santo por cinco meses. Actual-mente era párroco de la Madre de Dios desde1998. Con 42 años como sacerdote y 67 deedad, es el mayor de los Obispos Auxiliares.Consagrado el 16 de julio de 2002 comoObispo Auxiliar de Guadalajara.

Excmo. Sr. D. José María de la Torre Martín. Nacióen Pegueros, Jal., el 9 de septiembre de 1952. Es el últimode ocho hermanos, de los cuales tres se consagraron aDios, uno en el clero secular y dos como hermanosmaristas. Estudió en el Colegio Morelos de los hermanosmaristas. A la edad de once años ingresó al SeminarioDiocesano de Guadalajara a la sección Secundaria,conocida como San Martín. Recibió el Orden del Diaco-nado el 15 de abril de 1979 y la Ordenación Sacerdotalel 1 de Junio de 1980. En 1982 fue enviado a Roma aespecializarse en Pastoral Juvenil en la Universidad Sale-siana, y permaneció en la Ciudad Eterna hasta 1985. A suregreso, ha desempeñado varios cargos en la Diócesisde San Juan de los Lagos: fue Vicario en la Parroquia deSan Juan Bautista (de 1985 a 2001); fue Asesor delPresbiterio y de los agentes de pastoral, Vicario Diocesa-no de Pastoral, miembro del Consejo Diocesano deConsultores y en diciembre del año 2001 se le encomen-dó la Dirección de la Pastoral en la Catedral Basílica deSan Juan de los Lagos. Consagrado el 16 de julio de 2002como Obispo Auxiliar de Guadalajara.

1972 año santo de pastoral - diócesis de san juan de los ... · oremos al pastor de pastores, por...

Documents