2 Posta Data

mue s t r a r i omu e s t r a r i omu e s t r a r i omu e s t r a r i omu e s t r a r i o

Consejo Editorial

M. Laura FloresLeandro IbáñezSoledad Linale

Colaboradores

Emiliano CosenzaGermán BruscoCristian FigueroaSilvina FoppianoEugenia HadenackNatalia ParadisoCristina PassarelliLelia Fabiana PerezRomán RoncolatoGrupo Aquelarre

Arte de tapa

Julián Crigna

Diseño web

Leandro Ibáñez

Revista TemáticaBimestral

Se permite la reproduccion total o par-Se permite la reproduccion total o par-Se permite la reproduccion total o par-Se permite la reproduccion total o par-Se permite la reproduccion total o par-cial de las notas, aunque agradecería-cial de las notas, aunque agradecería-cial de las notas, aunque agradecería-cial de las notas, aunque agradecería-cial de las notas, aunque agradecería-mos se cite fuente y autor. Esta publi-mos se cite fuente y autor. Esta publi-mos se cite fuente y autor. Esta publi-mos se cite fuente y autor. Esta publi-mos se cite fuente y autor. Esta publi-cación sí se hace cargo de la opinióncación sí se hace cargo de la opinióncación sí se hace cargo de la opinióncación sí se hace cargo de la opinióncación sí se hace cargo de la opiniónque viertan los autores.que viertan los autores.que viertan los autores.que viertan los autores.que viertan los autores.

Agradecimientos:A los que escribieron. A los quedemoramos en la entrega, aunquehaya valido la pena. A Leo por empu-jar este número. A nuestros amigospor aguantarnos y estar. Y esta vez aAmy Winehouse por acompañarnossobre el cierre de la revis. Por último,a Benedetti, porque existió.

Página web www.revistapostadata.com.ar Para contactarnos contacto@revistapostadata.com.ar Para publicar publicidad@revistapostadata.com.ar

«DOSSIER»

4- «Cómo despertar la lucidez»

6- «El emblema mediático de lalucha docente»

7- «Etiquetas autoadhesivas»

8- «Apuntes sobre la línea de fue-go»

9- «Muestrame cómo hablas y tediré quien eres»

10- «Hacia una educación liberadora»

11- «Nosotros, los vagos, paramos todos»

13- «La extraña razón de mi vida»

14- «Versos en el márgen»

15- Entrevista imaginaria a Kafka

16- Aguafuertes

17- + Poemas Cuento Cuento

18- Cuánto darías por La Razón

19- Cuento

3Posta Data

EDITORIALPostaData fue pensada para sentir las letras entre las manos, paraoler ideas, para ser llevada al rincón más recóndito y leerla con elviento pegando en la cara o con el sol entibiando la piel. Entonces,¿cuál es el camino a recorrer cuando una revista que se pensó enpapel cambia de formato y se vuelve digital, virtual, intangible? Nohay respuesta sencilla.El recorrido que transitamos en los dos números previos nos sirviópara comprender que una modesta tirada de ejemplares erainsuficiente para llegar a todos aquellos puntos desde donde nosvisitaron en el blog, y por ello con este formato digital deseamosgenerar ideas en aquellos lugares donde ansían recibirlas ydebatirlas.Cierto también es que editar en papel tiene costos y limitaciones, ycreemos que la digitalización nos ayudará a saltearlas. Con esterenacimiento multimedia ampliamos los límites del papel y así escomo agregamos videos, convocamos artistas, invitamos a debatiren el foro, mantenernos actualizados entre número y número yfundamentalmente, seguir escribiendo, opinando y señalando conla pluma allí donde pocos quieren ver. Y para aquellos que gustande sentir las palabras entre los dedos, seguiremos produciendoPostaData para descargar e imprimir.

En todos los momentos de la vida tenemos algo para aprender ycomo seres inteligentes y sociales es que nos educan. La educaciónes un fenómeno social, mediante el cual nos corrigen, nos limitan,borran nuestra impronta más animal; pero también nos abre almundo, nos da palabras para defendernos, para reclamar, nospermite valorarnos y comenzar a elegir lo que aprender. Es asíque como herramienta social limita y engrandece. Engrandececuando nos enseñan a pensar pero limita cuando nos enseñanqué pensar. Engrandece cuando nos educan con libertad y limitacuando no nos permiten discutir cómo educar.La Educación es un derecho de todos los individuos y son losEstados quienes tienen el deber de brindar la oportunidad a todaslas personas a recibir una correcta y auténtica formación; es decir,ofrecer las mejores condiciones físicas y sociales para que estosea posible. No es fácil educar con frío, como no es fácil aprendercon hambre. Entonces cuando las condiciones son limitadas, laeducación es limitante; cuando solo algunos reciben enseñanzaadecuada es que el Estado superpone el derecho de algunos porsobre el de unos cuantos, y así las brechas sociales cada vez sonmayores y los márgenes se estrechan más, permitiendo que elpoder de decisión sea empuñado solo por la manos de los «bieneducados».Este tercer número procura aportar algo nuevo sobre educación ycomo creemos que la única manera de aprender es hablando yescuchando, les proponemos que nos escuchen y nos contesten;que con seguridad este ida y vuelta colaborará a un nuevo saber.

4 Posta DataD

ossie

r

Cómo despertar lalucidez

Variables para un mismo sistema

1

«Me preocupa que tengansiempre presente que enseñarquiere decir mostrar. Mostrar no

es adoctrinar, es darinformación pero dandotambién, enseñando también, elmétodo para entender, analizar,razonar y cuestionar esainformación. Hay una misión oun mandato que quiero quecumplan. Es una misión quenadie les ha encomendado,pero que yo espero de ustedes,como maestros, se la impongana sí mismos: despierten en sus

alumnos el dolor de la lucidez.Sin piedad. Sin límites».Las palabras pertenecen aFernando Robles, un profesorde pedagogía ficticio que

interpreta FedericoLuppi en la película«Lugares comunes».Sabias palabras las delguionista, lindaspalabras para poner enboca de un profesor queapela e interpreta a laeducación como unaherramienta de critica, yno como una meraacción de transmisiónde conocimientos.La pregunta es intrépiday maleducada ¿cómopretender enseñar arazonar en las escuelasargentinas de estecomienzo de siglo? ¿esposible pensar con laspanzas cuasi vacías?¿es posible laenseñanza del razonarcon docentes quecorren para llegar de uncolegio a otro? (por sihay que aclarar: con unsolo cargo no alcanza).Las preguntas puedenser miles, lasrespuestas también,pero la realidad es una,es tangible, y esincomoda.

2Hernán Bernal era profesor dematemáticas, se desempeñabacomo rector de la «EscuelaTécnica Javier Tapié» deGeneral Rodríguez y comoDirector de la E.S.B. N° 4 (quecomparte edificio con la E.P.B.N°21) del mismo distrito.Hernán hace una denuncia -unamás- por venta de drogas

dentro de la escuela E.S.B. Nº4, y porque un alumno ingresóarmado. Luego de la denuncia,balean la escuela y la casa deHernán.La noche del jueves 4 ymadrugada del viernes 5 dejunio de 2009, entran a su casay le quiebran las muñecas, lasfalanges y el tabique nasal, loqueman con cigarrillos y ledesprenden parte del cuerocabelludo. Como si fuera poco,le disparan tres balazos. Hernántenía 33 años.Los medios de comunicacióndifundieron que Hernán Bernalfue encontrado muerto con unbalazo en el abdomen y aludena un crimen pasional.Nada dicen de la denuncia quedos días antes realizó elprofesor en la comisaría sobreventa de drogas en el colegio,y posteriormente en el ConsejoEscolar. Caso cerrado. Losmedios, respetuosos de la únicafuente de información de la cualbeben, dijeron que habíanhallado el culpable e hicierondesaparecer la noticia, y lasociedad recibe, aliviada, lacerteza de que la injusticia tienesu castigo.¿Cuándo fue que los maestrosse nos cayeron de las manos?¿Cuándo fue que nosdescosieron los bolsillos y losdejamos resbalar? ¿en quemomento del mundo nosvolvimos sujetos tan críticospara algunas cosas y paraotras, tan ciegos?.Hay un tiempo irreconocible enestas letras, un abecedario queno deja leerse, un pizarrónborrado cien veces, mil veces,tantas veces como maestros enel mundo.Un borrador que pasó pornuestra historia tan rápido que

Posta DataD

ossier5

apenas pudimos leer; comoesas fechas de batallas, queleímos y aprendimos por unosdías, pero después, el vacío delpor qué.Hernán tenía clara su funcióndocente. Él quería enseñarmatemáticas, pero las políticassociales trajeron susconsecuencias y Hernán lasasumió, como tantos maestros.No sólo enseñaba las tablas detres simples o las fracciones…sino que se preocupaba por susalumnos, no como alumnos,sino como personas. Por esodenunció la venta de drogas ensu colegio, por eso insistió ygolpeó puertas y ventanas, peronadie había –ni abría- del otrolado. Primero lo mató laindiferencia de la altacomunidad educativa, despuéslo mató esa persona con variosdisparos en el abdomen, y porúltimo, lo mataron los medios,que callaron creyendoingenuamente que se habíahecho justicia, con la únicafuente policial como verdadera.

3Pasan los años, dictaduras ydemocracias, atentados ymínimas revoluciones, sesuceden los ministros yavanzan las nuevastecnologías, pero el deseo(¿vocación?) de ser docentessigue latiendo en muchos denuevos habitantes. A pesar detodas las circunstanciaspolíticas de nuestro país, ahíestán ellos, los docentes dehace años, y los nuevos, con lasganas de cambiar algo, con elsueño de enseñar.Aquellos maestros de haceaños no son los mismos de hoy,y los de hoy no serán losmismos que los que vendrán.Ninguna nueva hipótesis heformulado, pero es preciso

realizar un mínimo análisis detransformación y cambio.Los factores que contribuyeron–y siguen haciéndolo- amodificar el tradicional roldocente se generaron a la luzde ciertos cambios políticos ysociales que son de público ygeneral conocimiento.Si tuviéramos que hacer hoy unlistado de las características deldocente, quizás distaría muchode aquellas que poseían –deberían poseer- los docentesde hace 40 años atrás: valoresque el docente debe poseer ytransmitir a sus alumnos, lascompetencias que debedesarrollar para facilitar elaprendizaje (además de lascompetencias para podercomunicarse con padres,colegas, alumnos y toda lacomunidad educativa), lacapacidad para actualizarseconstantemente y para revisarsus prácticas diarias. Apenas unmínimo listado de acciones ocapacidades que el docentedebe poseer, pero sipensáramos que el nuevodocente de hoy en Argentinadebiera reunir todas estasvirtudes más el nuevo rol deasistente social, el resultadosería tan complejo como casiimposible de realizar en lapráctica.Cuando los docentes de hoyrealizan «paros», no solamenteestán reclamando por sussalarios, sino también por unincremento del presupuestoeducativo. Y en estepresupuesto educativo, ya casino prima el pedido de materialdidáctico o mejor infraestructuraedilicia, sino el pedido dealimentos para las escuelas-comedores o comedores-escuelas. Y justamente es aquídonde se plantea el dilema

¿enseñar o dar de comer?.Los directores de estoscolegios se sienten en unaencrucijada y expuestosante una comunidad queno solo demanda, sino quecontrola y juzga.Si se atiende sólo elfortalecimiento exclusivodel rol docente como tal, se viveuna especie de traición desdela ética y la solidaridad. Pero asu vez, si se privilegia cubrir lasdeficiencias de otros sistemas,se descuida su misión primaria.Cierto es que el logro de estasescuelas-comedores reside enla disminución de la deserciónescolar y el nivel deinasistencias, y esto le sirve alEstado para sus estadísticaseducativas anuales, pero hastaqué punto son válidas lasmatriculas cuando sabemosque en las «escuelas públicascomedores», los chicos asistenprimero para comer, despuéspara aprender (la prueba estáen que esas escuelas abren suspuertas en fechas nolaborables). Hay una pirámideque se está cayendo, y unEstado que no sabe o no quierebuscar materiales para sureconstrucción.

¿Cómo despertar el dolor de lalucidez en una escuela dondese vende droga? ¿cómodespertar el dolor de la lucidezen adolescentes armados,embarazados? ¿cómodespertar la lucidez enestómagos vacíos? ¿condocentes mal pagos y cansados?¿con una sociedad a la cual le esmás fácil renegar queacompañar?.¿A partir de que letra olvidamos elabecedario?

M. Laura Flores

6 Posta DataD

ossie

r

Surgida en laé p o c aN e o l i b e r a lMenemista, larepercusión deuna trinchera de resistencia germinó en elcontexto de demonización extrema del Estadoy, por ende, el énfasis de la educación privadacomo salvadora de los males de la sociedad.Se trata del símbolo más contundente de lasluchas docentes que se materializó con la«Carpa Blanca».El reflejo más estigmatizante que la televisión,la radio y la gráfica proporcionaron fue la ayunadocente que puso al descubierto, y ante los ojosde la sociedad, el entumecimiento de laeducación. Significó el clamor respecto de laverdadera gravedad de la crisis deempobrecimiento, fragmentación y desigualdaden la que se estaba sumiendo a los educadoresy a la escuela pública argentina. Comocontrapartida, la década menemista celebrabasus últimos años a pura fiesta.«Los malestares sociales sólo tienen existenciavisible cuando los medios hablan de ellos, esdecir, cuando los periodistas los reconocencomo tales. Ahora bien, no se reducen a losmeros malestares mediáticamente constituidosni, sobre todo, a la imagen que los medios dande ellos cuando los perciben», explicita PatrickChampagne en «La visión mediática de losprocesos sociales».Logrando captar la atención de los 3 millonesde argentinos que la visitaron, la Carpa Blancainstalada durante 1.003 días frente al Congresode la Nación, se convertía en un escenario paralos reclamos docentes de todo el país. Larepresentación que los medios de comunicaciónhicieron sobre los conflictos docentes, en sumayoría refirió a simbologías que pocoaclararon el verdadero cuestionamiento de laeducación en nuestro país. De este modo, elcontraste aulas vacías/educación pública setornó una peligrosa postal, reiterada trasseguidos días de paros.La apelación cuantitativa en los informesperiodísticos aún suele abordar númerossalariales, cantidad de días perdidos, matrículatotal de alumnos que no asistieron a clase; perono parece una variable adecuada pararepresentar la dimensión completa de la calidadeducativa y de cómo mejorar el estado desituación.El concepto de tal construcción noticiosa podíaclaramente remitir a la pauperización de laeducación pública, sumiéndolo en la

característica de ineficaz. Las asimetrías quelos docentes debieron enfrentar no sólo seefectuaron en el salario, también en losmateriales didácticos y en la situación social delos alumnos. El empobrecimiento de losargentinos ensanchó la asistencia a comedoresescolares y el docente además incrementó supresencia en situaciones de contención social.Como si el educador fuera demonizado porefectuar la medida de fuerza, la crudeza delayuno de un docente del interior se contraponíadesde el relato periodístico al estereotipadoretrato. La ausencia del cuestionamiento sobrela problemática de fondo motivó que laeducación privada se posicionara en las clasesmedia/alta que ya no toleraban las continuasmedidas de fuerza. El Estado daba la espalday se pronunciaba incompetente de administraren pos de un mayor presupuesto paraeducación pública.En tiempos de la crisis de 2001 no promoviócambios positivos para el área y la herencia delneoliberalismo acentuó sus consecuencias. Losconflictos y las luchas no desaparecieron yfueron plasmadas por los medios. El rol que losconglomerados comunicacionales ocuparon nofomentó la instalación en la agenda de la calidadeducativa, con la carencia de un debate queconsiga incluir a la sociedad en un tema que lepertenece.Entre el pasado y el futuro, el presente seimpone todavía con una mínima dimensiónsobre la problematización de la educación. Sesitúa en los medios como tema del día, sinproporcionar mayores ámbitos que canalicenpropuestas, contextualicen y aporten solucionespara proyectar más allá de un incrementodocente que, inflación mediante, será tan sóloun parche más en detrimento de la calidadeducativa.Convertida en el mayor símbolo de protestasocial en defensa de un mercado interno,sustitución de importaciones y la suspensióndel pago de la deuda externa; la carpadocente es la lucha más emblemática queconsiguió su espacio en los medios y en lahistoria argentina.

Román Roncolato

1234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890123456789012345678901212345678901234567890

El emblemamediático de lalucha docente

Posta DataD

ossier7

Etiquetas autoadhesivas

Quisiera diferenciar entre la educaciónformal y la no formal, que es la que analizaremos acontinuación. Esta consiste en el conjunto de cosasque nos enseñan a lo largo de nuestra vida aquellaspersonas que nos rodean. Al nacer, nos insertamosen un núcleo familiar, en una micro sociedad, yaconformada con reglas, leyes, premios y castigos.Nos van enseñan qué cosas hacer, cuáles no, lasconsecuencias de no hacer lo correcto, losbeneficios de sí hacerlo. En términos psicológicos,diríamos que la educación es lo que formará nuestro«Súper Yo», que no es otra cosa que aquella partede nuestro inconsciente que nos permite distinguirentre lo que esta bien y lo que está mal, nos indicalas reglas a seguir, es nuestra moral y pujapermanentemente con nuestro «Ello», quien intentasatisfacer nuestros deseos independientemente detoda moral o regla.

Podríamos decir entonces que mediante laeducación no formal se imprimen las «etiquetas»que debemos llevar en nuestra frente: «soyloca»,»soy vago»,»soy rara»,»soy inútil», etc.Rótulos que también son aprendidos, y que nosacompañaran el resto de nuestra vida casi sin saberque allí están. Solemos asimilar estos «soy»generando una falsa auto imagen en muchos casos,y olvidándonos que lo único que realmente «somos»es «Ser personas», el resto de las etiquetascorresponden a estados, «estoy vago»,»estoyindeciso», «estoy triste»; lo cuál nos da másposibilidades de cambio.

Terminando la adolescencia, aprendemosque debemos tomar una serie de decisiones queya vienen prefabricadas: ¿Estudiar o trabajar?¿Estudiar algo que sea redituable económicamenteo algo que nos de placer? ¿Seguir el legado de mispadres u oponerme a ellos? En este punto cabedestacar que el permiso para oponernos, en muchoscasos también forma parte de la educación, a veceslos padres suelen dar un quantum de vía libre parala rebeldía, y los hijos la desplegamos creyéndonospoderosos… que ilusos. Podremos ver en ejemploscotidianos, que aquéllos hijos que se han rebeladosin ese «permiso» tácito, tienden a no poderrecomponer el vínculo parental, y así vemospersonas adultas que manifiestan tener relacionesconflictivas con sus padres ya anciano. El vínculoquedó detenido en la etapa adolescente del hijorebelde.

Atravesada ya la etapa de decisionesprofesionales nos enfrentamos con aquellaselecciones que hacen a nuestra vida afectiva¿Casarnos o no? ¿Casarnos con el más bueno ocon el desgraciado que nos rompe la cabeza?¿Cuantos hijos tendré? ¿A que edad? ¿Antes odespués de recibirme? ¿Y si mejor no tengo hijosni me caso y me dedico a ejercer una profesión o aviajar?

Finalmente, llegada la adultez y con partede esas decisiones ya tomadas, comenzamos atransitar lo que supuestamente sería el logro de lasmetas, ya me recibí, ya estoy trabajando, ya mecasé, ya tuve un hijo… ¿Y? Entonces, quizásnos atrevamos a preguntarnos si algo de todoeso fue verdaderamente una elección osimplemente no nos quedó otra opción queelegir entre las no muy variadas posibilidadesque nos vinieron mostrando y enseñandodesde pequeños. El tema es que no todostenemos el valor para respondernos esaspreguntas, y como también nos han enseñadoa evadirnos de los cuestionamientos queponen en duda las enseñanzas recibidas pornuestros padres y maestros, seguramentesigamos cumpliendo reglas como divorciarnos,o tener al segundo hijo para darle unhermanito al primero, cambiar de trabajo,comprarnos el auto, veranear donde todos lohacen y finalmente trasmitirle todas esasenseñanzas a nuestros descendientes.

¿Qué pasaría si desde pequeños solonos enseñaran a elegir? ¿Si todo,absolutamente todo, depende de nuestro librealbedrío? Si solo estuviésemos regidos pornuestro «Ello», si la mamá le preguntara a suhijo: ¿Queres ir al colegio? ¿Querés cepillartelos dientes? ¿Querés estudiar una carrera? Enfin, si todo, todo fuese nuestra mera elección,si nadie nos ofreciera esa gama deposibilidades poco variada para poderseleccionar alguna de sus opciones, quizá cadafamilia sea un caos, y en consecuenciatambién la sociedad, pero sin duda existiríaotro problema bastante desconcertante parael ser humano: ¿A quién culparíamos denuestros fracasos?

Natalia Paradiso

8 Posta DataD

ossie

r

Apuntes sobre la linea de fuegoApuntes sobre la linea de fuegoApuntes sobre la linea de fuegoApuntes sobre la linea de fuegoApuntes sobre la linea de fuego

Entre los muros es más que un registro fílmico deun recortado escenario de crisis socio- educacionalacotado a cierto sitio de la Francia actual. Entre losmuros suena y se ve a experimentación, a pruebade laboratorio en un espacio transgenérico, entredocumental y ficción, sobre la huella de un guiónsurgido de la propia experiencia vivida por quienejecuta uno de los roles protagónicos en el filme.Se trata de François Bégaudeau, que interpreta alprofesor de lengua francesa, uno de quienesapuestan a experimentar encerrado entre los murosde un aula. Sitio espacial y discursivo claustrofóbico,demasiado pequeño para tan expansivo choque desubjetividades. Las tomas transcurren en interioresde escuela ensamblados en largas secuencias decuadros comprimidos, en planos medios, y pingpong de primeros planos. El movimiento fílmico hacefoco en las partes del cuerpo más móviles y activasen un escenario áulico, los rostros y torsos dealumnos detrás de los bancos. Roces yenfrentamientos entre las tantas etnias queconfiguran el amplio y difícilmente conciliableconglomerado poblacional de algún suburbioparisino. Encuentros entre las diferencialescosmovisiones, de quienes detentan el poder queotorga el saber disputado en las aulas, y quienes,del otro lado del muro, de ese más numeroso de laclase, se resisten a creer que indefectiblemente esesaber es poder. Pero además no se trata tan sólo de subjetividadesy posicionamientos generacionales y de poder enpugna, sino de una mirada, traducida en unenunciador cinematográfico que en ningún momentotoma parte en las pequeñas grandes luchas en laarena realista-ficcional. Un ojo objetivo se limita amoverse con los nerviosos movimientos y sonidospropios del convulsionado ambiente de un aula, sinninguna música incidental, sólo los ritmos de rocesen constante estado de ebullición. Un profesorbusca en contrapartida que la atención en los temasde la lengua, en sus formas y gramáticas ortodoxasno decaigan. Aplicaciones teóricas anquilosadasante un colectivo de alumnos que no encuentrarazones para conocer las diferencias entre elpretérito imperfecto del indicativo y el del subjuntivo,cuando ya ni sus abuelas usan éste último extrañomodo verbal para comunicarse. Los chicos noparecen interesados en cuestionarse algún futuroconjugando el «si yo supiera», porque para ellos sedesdibuja la segunda parte que completaría laproposición, el lugar de un potencial desarrollo trasla conquista del saber.La relación autoridad docente-alumno tambalea alritmo de las tensiones de una clase de chicos a losque en algún momento les cuesta trabajo creer quepuedan ser capaces de realizar la incómoda tareade escribir al menos algunas pocas palabras, quemerezcan la pena escribirse, acerca de sí mismosy sus propias vidas. Al profesor no le queda másque intentar la titánica tarea de remontar toda unaestructura subjetiva en contexto de crisis, y no ya

tan sólo de educación, para lograr al menos de cadauno de ellos, un breve atisbo de letra elaborandoalgún proyecto de autorretrato. «Si lo que tienes quedecir es menos importante que el silencio, cállate»enuncia y anuncia el tatuaje en el brazo de uno deesos chicos de origen africano, quien irónicamentesorprende con un trabajo que encuentra en unaserie de fotografías la mejor forma de hablar de símismo. Pero será allí la imagen visual la quehablará, y la palabra en rol secundario será un pocomás que una mera justificación. Como si elaprendizaje escolar de la lengua fuese terreno deun capital simbólico casi inabordable, aunque nopor ello incuestionable. Decadencia de un sistema educacional,impotencia frente al casi imposible establecimientode una situación comunicacional positiva, hipocresíaen la aparente solución de conflictos, roles que estánsiempre en situación de borde, una miradarecortando en tomas, registros de acciones, vocesy sonidos una realidad que altera, sin cortes nipausas. Una continuidad que se prolonga enconsecuencias que no terminan con el último minutodel filme. Porque ninguna puesta ni apuesta retórica,temática o enunciativa demuestra en estaproducción cinematográfica desarrollar un relato deprincipio, desarrollo, nudo y desenlace. Es esta másaún, una muestra de laboratorio, la exhibición deun síntoma actual y real llevado por efecto de laficcionalidad a una intensidad que lo coloca en unsitio de percepción desnaturalizada, aunqueparadójicamente se muestre como un escenario delos más cotidianos de nuestras actuales culturas.Es esta una historia de esas a las que les interesamás que el fin quedarse en el nudo, mostrarlo,señalarlo, porque para desatarlo harían falta muchomás que 125 minutos de proyección fílmica.

Lelia Fabiana Perez

Entre Les murs – Francia 2008Dirección: Laurent CantetIntérpretes: François Bégaudeau,Nassim Amrabt, Laura Baquela,Cherif Bounaïdja Rachedi, JulietteDemaille y Dalla Doucoure.Guión: Laurent Cantet, FrançoisBégaudeau y Robin CampilloFotografía: Pierre Milon, CatherinePujol, Georgi Lazarevski.Edición: Robin Campillo, StéphanieLégerPresentada por Primer PlanoDuración: 125 minutos

9Posta DataD

ossierMuéstrame comohablas y te diré

quien eresCuando hablamos nuestraspalabras dicen más de nosotrosque lo que nosotros queremosdecir con nuestras palabras.

En historia de Cronopios y deFamas, Cortazar nos mostrómagistralmente que cuandosubimos una escalera hay unacantidad de operaciones querealizamos casi maquinalmente,sin pensarlo. Subir una escaleraestá en el orden de las cosas, nolo cuestionamos demasiado y leprestamos poca atención. En lascosas sociales pasa algo similar,la educación, los medios decomunicación, la economía y lapolítica, por mencionar algunosejemplos, muchas veces laspensamos con la familiaridad y laosadía con que subimos unaescalera. Cuando hablamos sonpocas las veces que prestamosatención a las palabras queusamos. Sin embargo, el lenguajey las formas del habla son objetossociales, tienen una historia. Lacultura se esconde y se asoma sinque lo percibamos cada vez quenos comunicamos. Hablamos conpalabras, pensamos con palabras,conocemos el mundo con laspalabras que lo nombran,insultamos con palabras, amamoscon palabras, cuando morimosdejamos nuestras últimaspalabras. El significado y el pesode las palabras nos trasciende,detrás del lenguaje hay sistemasde ideas; en última instancia, enel fondo de las palabras está lacultura de un pueblo, una Nacióno un grupo. No está demás decirque en la interacción cotidiana elhabla nos ubica en un espacio másextenso y complejo que el quenuestros ojos pueden escrutar deuna mirada. Las formas queadquiere el habla nos sirven paraidentificarnos con nuestro grupo yclasificar a los «otros». Laidentidad se juega también en ellenguaje. Muchas vecesimpugnamos a las personas porlas maneras en que hablan o

callan, podemos ser categóricos eimpiadosos con los «otros».La escuela ha sido la institucióndonde hemos modelado nuestrolenguaje a fuerza de ensayo yerror. Esto que en aparienciasupone una operación gramática,es más que eso; la «correcciónlingüística» es también undispositivo político. A partir una deuna amplia paleta cultural,producto de la inmigración, laescuela argentina de fines del sigloXIX intentó (y logró) formarciudadanos con los «colores de lapatria». Para tal fin se apeló unaserie de estrategias pedagógicasque buscaron el «aplanamiento»de las diferencias y lahomogenización cultural. Ellenguaje fue uno de los aspectosque se cuido con mayor celo a lahora de educar al alumno delcentenario. Esto significa que loslenguajes de otros pueblos yculturas (extranjeros y vernáculos)quedaron relegados como formasde comunicación no legítimas. Laconstrucción del lenguaje no es unproceso neutro. La imposición devisiones del mundo y formas dehablar es otra manera de ejercerel poder y la «coacción psíquica».Se ejerce la violencia tambiéncuando se impugnan y recortan laspalabras de los «otros». Laescuela argentina homogeneizó ellenguaje en búsqueda delciudadano. Toda forma del hablaque no se ajustara a los criteriosde legitimidad fueron reducidos ajergas o lunfardos; palabras que nopodían transponer las puertas delas «escuelas-templos» de la«civilización».Queda claro que la palabraautorizada es la palabra delmaestro. Los llamados al orden yla corrección lingüística son suprerrogativa, sobre su sancióndescansa la uniformidad. Si sepiensa más de cerca, esta relaciónentre el niño y su maestro suponeuna relación vertical: la educaciónnecesita de una autoridadpedagógica. La palabra autoridad

tiene la rara virtud de provocarcierta comezón, sin embargo, esun hecho estructural que laeducación descansa sobrerelaciones de dominación. Hoy díase discute acerca de lahorizontalidad en las relacionespedagógicas: educaciónmulticultural, educación en ladiversidad, etc., son palabras quea todos nos suenan muy bien y alas cuales adherimos, a veces demanera muy rápida. Sin embargo,por debajo de estasconsideraciones culturales haytensiones sociales que no seresuelven con palabras. Estosprocesos plantean el interrogantede si enseñar en la diversidadsupone también perder de vista lacohesión e integración social ycultural; o por el contrario, siatender a las necesidades deintegración termina por olvidar lasparticularidades de grupossociales, culturales o étnicosdistintos a la «cultura escolar». Entérminos sociológicos, se planteala disyuntiva de si recuperar laspropias palabras no significatambién alejarse de la culturacomún de la escuela. De ningunamanera esto significa que en lasaulas argentinas hayadesaparecido la discriminación y laimpugnación del habla de losextranjeros, los «excluidos» o losgrupos con otras culturas. Jugandocon las palabras podemos decirque la frase: «muéstrame comohablas y te diré quien eres», es enmuchos casos la divisa de ladiscriminación.

Germán Brusco

10 Posta DataD

ossie

r

Hacia una educación liberadora(o apuntes sobre el último gran pedagogo)

Cuando falleció su esposa, Elza, Paulo Freire la lloróen público, en actos y conferencias donde él era elhomenajeado. Más tarde, cuando se enamoró deNita y volvió a casarse, compartió su alegría y suamor con quienes lo oían, relatando experienciasde su nuevo matrimonio (dicen que muchas veceshizo ruborizar al público, sobre todo en EstadosUnidos, donde se espera que un intelectual presenteun discurso objetivo y despersonalizado). Pero ladespersonalización era imposible con él, todos susdiscursos, libros y trabajos estaban teñidos por sussentimientos.Freire sabía que contar anécdotas e historiassuponía un método eficaz cuando las teoríaselaboradas fracasaban, y así creaba un vínculoentre orador y público, generando una mínimacomplicidad para fortalecer ese lazo; porque sonen las historias, en el reconocimiento con el otro,donde los vínculos se fortalecen. Esa era lapedagogía del amor que el brasileño Paulo Freiredifundía e intentaba expandir.

IPaulo Freire fue un pedagogo brasileño, nacido enlas puertas de la década del 20. Conoció la pobrezay el hambre durante la crisis de 1929, experienciaque formaría sus preocupaciones por los excluidosy le ayudaría a construir su perspectiva educativa.Para poder comprender lo que significa Freire y loque propone como educación, quizás seafundamental conocer el contexto que ha vivido, yaque es a partir de él que surgen sus propuestas. Novoy a extenderme realizando una biografía de Freire,pero sí decir que su obra contiene las nuevas yrevolucionarias ideas que surgen en la AméricaLatina en los años ‘60.Sus primeros trabajos tienen que ver con laeducación de las poblaciones pobres de su país.Freire contempla los traumas y dificultades por losque atraviesa la gran mayoría de los hombrescampesinos del norte de Brasil, producto de unaeducación alienante que lleva al pueblo a vivir sucondición de miseria y explotación con una gran

pasividad y silencio. Ante esta realidad, Freireplantea que el hombre debe ser partícipe de latransformación del mundo por medio de una nuevaeducación que le ayude a ser crítico y lo lleve a vivirsus experiencias como algo completo de valor.Paulo Freire fue un hombre capaz de vivirintensamente su época y actuar en consecuencia.Logró descubrir el misterio que encierra el hombreen su compleja dinámica, siempre en búsqueda yautoconstrucción. Tuvo la claridad para reconocerque, a pesar de su capacidad personal, el hombreno está sólo en el mundo, sino que es un sereminentemente relacional.

II«María ha visto una planta de lechuga». Para Freire,no basta con que el alumno sepa leer esta frase, elestudiante (educando) debe conocer el contexto deMaría, descubrir quién ha trabajado para cosecharesa planta, y quién se ha beneficiado con esetrabajo. Freire supone que los educandos debenconocer y entender su propia realidad en el procesode aprendizaje. «Mi visión de la alfabetización vamás allá del ba, be, bi, bo, bu. Porque implica unacomprensión crítica de la realidad social, política yeconómica en la que está el alfabetizado».Su proyecto educativo apunta a crear humanización,a liberar al hombre de todo aquello que no lo dejaser verdaderamente. Freire era consciente de quela sociedad que le tocaba vivir (y aun nos toca)posee una dinámica estructural que conduce a ladominación de las conciencias, lo que se traduceen una pedagogía que responde a los intereses delas clases dominantes. Así las cosas, este tipo depedagogía con sus consabidos métodos, no puedeservir a la liberación de los oprimidos, sino que másbien impartirá la conocida ley del temor.Paulo Freire apuntaba a una pedagogía critica, dela misma manera que apuntaba al amor como únicaforma para que los educandos puedan contribuir ahumanizar sus comunidades. En la pedagogía delamor, en fin, asume un gran papel el educador y suinnegable influencia sobre el educandoSólo a partir de una comunidad fuerte podemosreflexionar de manera critica sobre las estructurassociales que nos dominan –donde el educandopadece pasivamente la acción de su educador-, yde esa manera movilizarnos para superarlas. Tales la esencia de la pedagogía freireana, el modelopedagógico –y sobre todo humano- que Paulo Freirenos legó.

M. Laura Flores

Posta Data 11

NOSOTROS

«LOS VAGOS»...

PARAMOS TODOS

El verbo parar se puede

interpretar de diferentes formas:

me paro (me pongo de pie), me

paro (apareció la suerte y mi vida

será fructífera hasta

el final),

estoy de paro (porque protesto,

porque necesito que me

escuchen), paro mis actividades

para llamar la

atención de los

responsables, o de los que dicen

llamarse

responsables de la

educación de nuestro país.

Dossier

123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012

YO PARO, TU PARAS, EL PARA, PARAMOS TODOS!

Y la gente se molesta con esto de que los docentes paran, y comentan por ahí:¿Qué quieren? ¿Cuánto quieren ganar?¿Qué pretenden, acaso los demás ganamos sueldos cuantiosos?¿Acaso los jubilados cobran todo en blanco?¿Acaso los médicos trabajan en condiciones dignas?¿Acaso nuestros hijos tienen el derecho de recibir una educación gratuita en este país dondetodo está dado vuelta?¡¿Acaso nosotros los ciudadanos tenemos el derecho de tener un pueblo inteligente y conoportunidades?! ¿Acaso, acaso, acaso...??? éstas son las preguntas que siempre quedan sinresponder, es por esto que me pareció muy enriquecedor utilizar este espacio para informarsobre «algunas cosillas» que suceden y que no terminan de aclararse.Tristemente, por otra vía aparece un representante de la ciudad diciendo, «¡Esos vagos quese vayan a trabajar!», qué bárbaro! Vagos pasó a ser un sinónimo de docentes.Pronunciado en labios de la oligarquía más extrema y la hipocresía más devastadora, suenacomo una amenaza a la integridad de las personas que componen esta sociedad (ya que eldocente es y será el máximo exponente del trabajo), mal que le pese a muchos.

¿Qué entendemos por educación?Para qué necesitamos que un pueblo sea educado.En las mentes inteligentes de nuestros antepasados más gloriosos, surgía la idea, que lasociedad debía acceder a una educación sin límites, amplia y gratuita para que todos dispusierande herramientas que les proporcionaran la formación de ideales de libertad, lucha y trabajo,para gozar de una vida con calidad.Con el transcurso del tiempo esto fue cambiando y surgieron intereses de las grandes empresasglobalizadoras del saber.La educación como tantas otras cuestiones fue el último motivo para incluir en sus planes,privilegiando el manejo de grandes capitales sobre grandes ideas, así es que los planes deeducación se fueron poniendo al servicio de unos pocos y descartando cada vez más a unoscuantos.Bajo la sombra de algunos discursos solapados como «vamos a otorgar becas de comedorespara que los chicos mas necesitados puedan tener un plato de comida caliente y saludabletodos los días», en vez de decir «vamos a generar mas puestos de trabajo para que los masnecesitados puedan llevar a sus casas el alimento diario» siempre se elige el mal menor, y nosvamos conformando y hasta creyendo que la idea de los comedores escolares tal como estánfuncionando es la mejor, pero ¿quién controla la calidad de esos alimentos? ¿Quién seleccionaal personal que debe verificar la comida de nuestros pibes?Esto me trae a la memoria, cuando iba a visitar a mi tía Lola, era la gordita cariñosa de la familiay por supuesto la que cocinaba más rico. Entrar a la cocina de la tía era deleitarse con olores ysabores de lo más exquisitos. En realidad tengo que agradecerle a mi mente que ha guardadoestos recuerdos, ya que cuando ingreso al comedor de algunos colegios puedo establecer unacomparación por descarte siendo los nuevos olores muy distantes de los de la tía Lola.Sin embargo los padres agradecen que al menos sus hijos comen en la escuela. Me encantaríahacer extensiva la invitación a comer de alguno de los políticos, y por un día deberíamos

12 Posta DataD

ossie

rD

ossie

r12345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012

aplicar la teoría de reemplazo, donde en vez de llenar sus platos con sushi o caviar se disponena comer guisos de papa y fideos con mucho pan y agua¿Quiénes se estarán enriqueciendo con las subvenciones de los comedores escolares aexpensas de los estómagos de nuestros chicos?Los mismos discursos políticos que atienden a las políticas educacionales son los que nopueden dar respuesta a las tantas anomalías que componen nuestra realidad. Los subsidiospara educación, y su destino, siempre llegan tarde o nunca.No se disponen de micros de transporte escolar para realizar salidas didácticas.Los edificios escolares que se van cayendo de a poquito, no disponen del mantenimientoadecuado en tiempo y forma. El agua que fluye desde lo alto de los techos de chapa moja lasescaleras que conducen a salones de clase, o torrentes de agua que caen en los pupitres omesitas de los alumnos y que la maestra va corriendo de lugar a diario. Los ventiladores que secaen por colocación en mal estado y sin ningún tipo de seguridad para los alumnos y maestrosde esos cursos.Pero gracias a esos «vagos» de la educación pública, en los peores momentos se han hecho«barquitos de papel al mejor estilo Serrat» y han dejado que la imaginación de los chicos fluyapor el patio transformado en un gran lago que desaparecerá cuando el clima y el tiempo así lodispongan, y no cuando las autoridades designadas para modificar esas penosidades, lodispongan.El invierno tampoco es molestia para «los vagos y sus secuaces alumnos» ya que al mejorestilo gasolero con un poco de suerte, algunas estufas funcionarán, o se abrigarán más y en loposible aprenderán a escribir con guantes para que los dedos no se congelen, a esto le llamoyo, juegos y estrategias de subsistencia.No podemos dejar de mencionar que los más pequeños han recibido colchonetas para sudescanso, estas vienen infladas, pero no de goma espuma.La escuela es una de las pocas instituciones que conservan en sus bases los más altos valoresde igualdad, respeto por el otro, compromiso con los demás, y educación.La escuela ha pasado a ser la gran contenedora de esta debastante realidad social.Solo por esto algunos políticos equivocados y arrogantes deberían pensar antes de abrir susbocotas y agradecer a los docentes que día a día seguimos manteniendo las escuelas en pie yen funcionamiento con solo la imaginación, y la creatividad de transformar lo más ínfimo enalgo maravilloso, en sacar a nuestros pibes adelante con el solo hecho de lograr que nosescuchen en esta sociedad que ha olvidado escucharse.No hay mas ciego que el que no quiere ver ni más sordo que el que no quiere escuchar.Por todo esto Yo PARO, TÚ PARAS, EL PARA, NOSOTROS PARAMOSA los grandes señores les incomoda que el 90% de los educadores de la Argentina, vayan agritar a la casa de gobierno. Por supuesto, se han encargado muy bien de desprestigiar nuestronombre, pero no cuentan en qué condiciones estamos educando y en qué condiciones estánnuestros chicos que según sus discursos, «son los más privilegiados» y los «más perjudicados»(a la hora de hacer paro y perder clases, por culpa de los docentes).Lo que estos señores no saben es que somos muchos los que nos levantamos cada mañana yla peleamos, que somos muchos que vamos al frente de diferentes formas, desde diferenteslugares, algunos mejores y otros peores, pero la meta es la misma y es una sola, mientrasseamos docentes, mientras tengamos la posibilidad de hablar, mientras sigamos viendo lo queocurre todos los días en las aulas y en las escuelas, no nos vamos a callar y seguiremoshaciendo PARO PARO PARO.

Cristina Pasarelli

De una « vaga» para el que tenga ganas de escuchar...En representación de todos mis colegas que en mi voz han puesto estas palabras y con los quecomparto el día a día.

13Posta Data

Dossier

La extraña razónde mi vida

Dossier

A lo largo de su existencia los diferentesgobiernos han «invertido» mucho tiempo -ydinero- para idear un método de coerción ycoacción que no resulte tanobvio a los ojos de la gente,un método que logre instauraren el inconciente colectivo laideología de turno y que, decierta forma, legitime un pocomas su poder sobre el pueblo.Se ha utilizado durante estearduo camino de búsqueda deun cáliz sagrado -llamadopoder- innumerables técnicasy mecanismos, desdepomposas y extravagantescampañas políticas hasta lasmás inimaginables promesasde dólares y felicidad. Pero sinduda alguna, la técnica quemejor ha funcionado cuentacon actores tan sigilosos queresultan casi imperceptibles y, lógicamente,mucho mas efectivos.Desde siempre el ser humano ha sentido lanecesidad de vivir en sociedad, de crearorganismos que regularicen su conducta yfaciliten dicha vida social.Con el paso del tiempo y la evolución de lasciudades el estado se fortaleció y comenzó aocupar el lugar perteneciente a la religión,relegando a la Iglesia -que fue la primerainstitución de la historia en actuar como si fueseun estado- coordinando la vida en sociedad,sancionando leyes, encargándose de laeconomía y sobre todo, educando a un segundoplano, tomando de ella los tan efectivosmétodos de dominación que la hicieron ama yseñora de gran parte del mundo durante largossiglos y dándole lugar así a los AparatosIdeológicos del Estado. En palabras de LouisAlthusser, uno de los principales exponentes dela teoría, los AIE son un serie de instrumentosque siguen una línea que representa a éste,utilizando para ello diferentes institucionesreproductoras de la ideología oficial, la religión,la política, la familia, lo jurídico, entre otras, yde las cuales se destaca la educación, portratarse de una formula masiva, progresiva ypor ser, además, aquella que trabaja con los

seres mas vulnerables con los que nospodemos encontrar: los que carecen deconocimiento.

Desafortunadamente y siendouna «nación tan joven» hemossido testigos de varios casos enlos cuales se puede observarde manera mas que clara lacerteza de la teoría deAlthusser, pero solo noscentraremos en el mas claro ynotorio.

Evita amaba a todos. Perón esmuy bondadosoDurante el primer gobierno dePerón, un excelente estratega,tal vez producto de suformación militar, la educaciónprimaria se masificó y grandessectores accedieron porprimera vez a la escuela.

Siendo testigo de esto, el General advirtió laspotencialidades que le permitían la educacióny sobre todo los libros de texto para inculcar laideología oficial. A partir de ello se escribieron,específicamente, una serie de libros paraescuela primaria que reemplazaron a los tanqueridos manuales de texto; entre algunos delos títulos podemos destacar: La Argentina dePerón, Pueblo feliz, Patria justa, Obreritos, ElHada Buena, entre otros. Luego de un tiempode puesta en práctica esta «campaña» yadvirtiendo la efectividad del sistema, se creaen el año 1949 la colección Biblioteca InfantilGeneral Perón, editada por Peuser que contabaademás de con los ya mencionados libros delectura, con algunos de los siguientes: Cuentosheroicos argentinos, Cuentos del 17 de Octubre,Una mujer argentina: Doña María Eva Duartede Perón.A partir del año 1952, con la muerte de Evita,nuevos temas se incorporan a la bibliotecaoficial y desde entonces «La Razón de mi vida»pasa a ser el estandarte de la ideologíaperonista y se convierte en texto de lecturaobligatorio en todas las escuelas primarias dela Republica, logrando así cumplir con su claroobjetivo, ideologizar desde los primeros años.

Silvina Foppiano

14 Posta DataD

ossie

r

Versos en el margenVersos en el margenVersos en el margenVersos en el margenVersos en el margen

Carlos Fuentealba. Maestro. 43 años.Asesinado.Luego de cinco horas en terapia intensiva sedecidió retirarle el respirador artificial cuandose le declaró «muerte cerebral». La bala fuerecibida por Fuentealba de manos de la policíaprovincial en la ruta 22 en Neuquén. Se retirabade una marcha de docentes en la que el reclamodejó de ser la nota. Iba dentro de un auto cuandola bala de gas lacrimógeno, rompió el vidrio delFiat 147 en el que viajaba, y le dio en su cabeza.Una vida vale lo mismo que buscar un poco dedignidad.Todos conocemos la historia. O al menos todosdeberíamos conocerla.Tanto Aylen como Lisandro la conocieron, y nosólo la conocieron, sino que la sintieron, y enalgún lugar de su cuerpo, seguramente lapadecieron. O al menos eso muestran susletras, su regalo para él, para Carlos.Aylen tiene sólo 12 años, y escribió esta poesíael mismo día del asesinato. Pertenece a un taller

literario llamado ALMA, ubicado muy lejos dedonde Carlos fue asesinado, en Del Viso, Prov.de Buenos Aires. A Lisandro lo encontré en unapágina de Internet compartiendo sus letras.No importa quién, no importa dónde, todosdebemos recordar, pero por sobre todo, nadiedebe ser asesinado con tanta impunidad.La poesía en ascuas. Siempre urgente ypresente. Haciéndonos erizar la piel.Cómo no sentir como ellos sintieron. Si supresencia nos conmina a reflejarnos, aponernos por un segundo en el lugar del otro. Asentir que nuestra nuca fue la que recibió esabala. A entender que todos somos maestros,que todos somos hombres, y que en algúnmomento del día, aunque más no sean cincominutos, todos somos Carlos.Nuestros derechos exigidos, reclamados,puestos en poesía.

Soledad Linale

Solo maestro

A Carlos Fuentealba

¿Quién va a matarmesi sólo soy un docente?¿Quién va a matarmesi uso sólo guardapolvo?¿Quién va a matarmesi sólo soy un padre?¿Quién va a matarmesi educo a la esperanza?¿Quién va a matarmesi sólo soy un obrero?¡Quién mierda va a matarme!

Aylen Catania

El criminal se cobró otra víctimaEl asesino de trabajadoresSe llevó un maestroEl judas se llevó a CarlosEn un viernes santo cargado de sangreLa sangre de todos los cristos,Estudiantes, maestros y obreros. Carlos era un tipo peligrosoNo usaba armasNo era violentoEl trabajo era su trincheraLos estudiantes sus compañeros deluchaY eso lo hacía enemigo de la muerteEl enemigo más peligroso. Lisandro Romero

15Posta Data

Así hablaba KafkaA Max Brod, por su hermosa y generosa desfachatez

Diciembre de 1923

«Andá con cuidado», me habían dicho, «si nocontesta, no lo apures, va a estar absolutamentemetido en su mundo». Y tenían razón.Había preparado algunas preguntas de maneramuy meticulosa, cuidando bien las palabras paratratar de que con cada pregunta él pudieraexplayarse y yo no tuviera necesidad derepreguntar o idear otros cuestionamientos. A decirverdad, me asustaba la idea de estar frente Kafka.Me habían dicho que era muy silencioso, queprobablemente me contestara con monosílabos yque seguramente se mostraría indiferente a mipresencia.Entré a su estudio, él estaba de espaldas a lapuerta, mirando por una pequeña ventana como lalluvia mojaba los árboles en ese atardecer en Praga.Dije ‘permiso’, y se dio vueltas con una serenidadque estremecía, propia de un tipo llamada Samsa.Su escritorio estaba bastante revuelto, cantidad depapeles esparcidos, una pila de libros señaladosque aparentaban no haberse terminado de leer, yun increíble polvillo que se esparcía por todo elterritorio kafkiano.Caminé los seis pasos que me separaban de él, leestreché la mano flaca y con una sonrisa disimuladay un dudoso alemán me dijo ‘estás mojada’(interiormente agradecí ese gesto y casi sentí quepude relajarme). Era pequeño, flaco -flaquísimo-,y a decir verdad, poco atractivo. Tenía puesto untraje marrón, algo arrugado pero limpio, una barbade tres o cuatro días y el rostro horrorosamenteconsumido, cuando lo miré a los ojos reconocí unatristeza y una concentración que ciertamente medejaron paralizada. Por un momento pensé enofrecerle un cigarrillo, pero pronto deseché laposibilidad. Él me miró fijo a los ojos, con unamirada oscura y tan penetrante que creí intuía loque yo estaba pensando, me invitó a sentarme.- Leí algunas de sus obras, ¿de dónde provienesu inspiración?. Pregunté casi sin pensar (enrealidad, pensando que cada vez llovía más fuertey no sabría como salir de ahí).- La vida, hay que hallarle un sentido a la vida. Aesta vida donde soy mas extranjero que unextranjero.Y en ese momento mis preguntas minuciosamenteelaboradas se extinguieron. La hoja dondereposaban mis preguntitas pareció deslizarse pormis piernas para ir a parar junto a unos bollitos depapel que dormían en el suelo.- El mundo es un absurdo, el desorden del mundoes un absurdo. Eso me inspira principalmente. Lavida y sus preguntas, el mundo y sus respuestas.- ¿Encuentra respuestas en el mundo?- No, no siempre... hay preguntas que torturan alhombre desde el comienzo del mundo, y hay queprobar las posibilidades, estudiar las hipótesis,especular en todos los sentidos. Todos tenemostambién un mundo interno... por eso creamos.

- O sea que es en nuestro mundo interno dondeencontramos las respuestas y desde ahí surgenuestra fuente de creatividad.Franz mira hacia la ventana al tiempo que toma unamoneda y mientras juega con ella, dice:- El artista hace y crea para salvarse de la muerte yde la locura. La muerte está ahí, en cada paso y encada cosa... si en la propia vida no encontramoslas respuestas del mundo, hay que buscarlasadentro... y para encontrarlas hay que crear, ya seadesde la mente, desde el corazón, desde lo quepasa afuera y llega a nuestro interior. De la locuracreo que podemos salvarnos, de la muerte no... yhay que dejar registro de nuestro intento porencontrar respuestas...- Las creaciones son entonces una forma detrascender, de no morir...- Si, creo que en realidad las creaciones son unaforma de sanar la realidad. Lo que está quebradoen la realidad se rearma en la obra artística.- ¿Cuántos quebrantamientos hay en su vida?Él se para, se acerca a la ventana y se queda unosminutos mirando la lluvia con las manos en losbolsillos. De pronto se da vuelta, me mira y aun consus manos guardadas, apunta:- Hace un tiempo empecé a escribir algunas líneas,quizás sea una novela, o un cuento, no sé aun...creo que se llamará «El Castillo»... Hace ya variosmeses que no veo a Milena...Kafka seguía de pie, junto a la ventana, pero ahoramirándome a mi. Parecía un chiquito angustiado ysolitario, creo que en verdad lo era. No supe quépalabras murmurar, pero recordaba a aquellos queme habían dicho que «probablemente responda conmonosílabos». Franz estaba otra vez dándome laespalda, mirando como las gotas dibujaban extrañosgarabatos en el vidrio. Había prendido un cigarrillo.Me quedé sentada como si me hubiesen dado unanoticia triste, como si un temblor de golpe se hubiesesentido en esas tierras checas. Sin saber qué hacer,o qué decir, tomé un libro que estaba en su escritorio«Iluminaciones», de un tal Rimbaud y leo «Soy elsabio en el sillón sombrío. Las ramas y la lluviagolpean la ventana de la biblioteca.Soy el caminante de la ancha carretera entre losbosques enanos; el rumor de las esclusas cubremis pasos. Por largo tiempo veo la melancólica lejíadel poniente».La entrevista no fue lo que pensaba, quizás fuemejor. Me levanté despacio, le dije que volveríacuando la nota fuesepublicada, le agradecíy me fui rumbo a lapuerta. Cuando estabapor agarrar elpicaporte, la puerta seabre y se siente la vozronca del flaco quesaluda, ‘hola Max’.

M.Laura Flores.

16 Posta Data

Aguafuertes

«De la cama al livingsientes el encierro».Estoy casiconvencida queCharly Garcíaescribió esta canciónluego de haberexperimentado algúndía de muchísimoaburrimiento (porquesin ánimo de ofender,pienso que debeh a b e rexperimentado algomás que drogas ensu vida estehombre). ¡Quésensación másespantosa que es

estar aburrido! ¡Qué sentimiento más parecido a lainfelicidad! Todos los que leen esto deben estarpensando qué estupidez que estoy diciendo, y loque es peor, qué estupidez tan grande me mortifica.Pero en algún punto si se ponen a pensar en estoun segundo no es algo tan insignificante.Uno se cansa de leer y de escuchar acerca del amor,del desamor, acerca del dolor, de la felicidad. Peropocas veces ronda el tema del aburrimiento enreflexiones profundas o baratas (como esta) perosin embargo, es una sensación, un sentimiento tancotidiano como el resto de los tan trillados siempre.Hablemos alguna vez del aburrimiento. Cuando seesta aburrido uno pasa por diferentes estadíos quecasi siempre persiguen este orden:

A) uno empieza a buscar qué hacer… y repiensa… porque algo se debe poder haceraunque en ese momento nada parecesurgir.

B) Se llama a todos sus contactos con la ilusión(porque es esa la palabra) que alguiencercano esté pasando por el mismomomento que uno. Frente a la negativa.(Aquí podría aparecer un ítem más en lafamosa ley de Murphy que siempre funciona«nunca nadie allegado a ti comparte elaburrimiento contigo en el mismo tiempo yespacio») pasas al estadio…

C) vuelves a tu PC y chequeas por vigésimoquinta vez en el rango de 15 minutos tucorreo electrónico, facebook, blog, blag,http, miras fotos viejas, miras el facebook,blog, blag y http de cualquier amigo tuyo. Yte das cuenta recién ahí que tenés quehacer algo de tu vida porque todo el mundopareciera tener una vida mas divertida que

la tuya, te deprimes un poco mas,entonces…

D) Prendés el televisor esperando encontrarun estreno o algo que todavía no hayas vistoy que te entretenga un rato aunque seahasta ver qué podés hacer

E) Apagás el televisorF) Abrís la heladera porque crees tener

hambre de nuevo aunque hayas comidohace algo menos de una hora. Loschocolates suelen apalear unos instantesel aburrimiento, porque además decomerlos uno puede leer en ingles, enportugués y en castellano todo lo quecontiene el alimento ingerido, de dóndeproviene y conocer también el 0800 al quese puede llamar para hacer algún reclamoalgún otro día de aburrimiento

G) Cuando uno ya esta harto de estar hartopiensa en salir un rato a dar una vuelta, peropara ese entonces ya carga con muchashoras de aburrimiento y se comienza aevaluar costo y beneficio de la salida a solascon uno mismo. Para qué, cuál va a ser elfin, si es invierno se evalúa el frío y si esverano lógicamente el calor con elagravante de la humedad porteña. Pero lomas difícil de vislumbrar en esos momentosde desasosiego es a dónde cuernos ir y noparecer un loser que esta solo y aburrido.Salir solo y aburrido es además sumamenteperjudicial para la economía hogareña.

H) Finalmente existen dos opciones: una, irsea dormir una siesta y después a la nocherogar por lograr conciliar el sueño, y dos,volver a repetir la operatoria antesmencionada.

Conclusión: para evitar lo más posible elaburrimiento, siempre es preferible en losmomentos en que se está ocupado organizar ycoordinar eventos que luego cuando se estáaburrido nunca parecieran existir.

Eugenia Hardenack

Ese tedioso aburrimiento

17Posta Data

+ Poemas

Ahogar el resto

Hoyun ahogo es un símbolo de locura

llorar hasta ahogarsepara esconder el recuerdo y su forma

ahogar la infanciaresucitarla para seguir llorando y nada más

una mueca para salvar al delirio

esa locura está mal vista¿cómo llorar en medio de tu vida?.

M. Laura Flores

Espanto

un brote umbilicalde súbita existenciaun pétalo de ángeldesea

lo hemos visto marchitarse

fetalmente

antes de la primavera

Cristian Figueroa

Pena mayor,piedad sin temor,soledad, vacío,augurio delativo,manera sin tiempo,un perro de caza,soñando despierto,tal vez encontrarte,futuro existente,tomando una gota,muriendo por verte,las olas crecientes,murmullo entre ellas,que dicen que vuelven,y se marchan de vuelta,contacto asesino,granitos de arena,mofando mi pena,saltando mil vallas,llegará el ocaso,y el viento azotará,como a una bandera,lo poco que tengo,esperando por ella.

Soledad Linale

Canto de Isis

me vieron ofrecerla semilla al borde de los campos

fui mujer hermana veladora ante todoy el templo solamente mío

vestida de origencon la inocencia negadavendí espejo y desmemoria

otra vezme vieron escampar la vidapero humanizada en un río deangustia

sin flores que adorarsin fruta frescacon ardory tiempo amortajado.

Evangelina Arroyo

○

○

○

○

○

○

○

○

○

○

○

○

○

○

○

○

○

○

○

○

○

○

○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○

○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○

18 Posta Data

Teatro Teatro

Cuánto darías porLa Razón

El lector pone el precio y ellos le entregan el vespertino La Razón, dedistribución gratuita. Son chicos de la calle, menores de edad, quese instalan en los lugares de más tránsito de pasajeros de trenes ysubtes.

Se los empieza a ver antesde las siete de la tarde,

mezclados entre lamultitud que va y

viene por la EstaciónRetiro. Deben tener

menos de 15 o 16 años,pero sus caras revelan

que fueron criados por lacalle, que crecieron de

golpe. La multitud semueve en forma de

bloque, si se la pudieraver desde arribarecordaría a unamancha de petróleosobre el mar. Y ellosestán en medio de esamancha, con un puñadode ejemplares de LaRazón dormidos sobreel antebrazo izquierdo,entre la gente que sedesespera por un lugaren el subte Línea C o enalguna de las tres líneas

d e trenes que recibe laestación. La multitudsimula que no los ve, peroellos saben llamar laatención a los gritos:«¡La Razón avoluntad!»

Si bien todas lasvoluntades sondistintas, hacia lanoche estos chicoshabrán juntadosuficiente voluntad

para sobrevivir, y para regresara la tarde siguiente con una

nueva edición del diario, queen realidad se distribuye

g ra tu i t amen tedesde 1994 enlos principalesnúcleos delt r a n s p o r t emetropol i tano,

entre las cuatro y las seis de la tarde. Según uninforme preparado en 2006 por la central demedios Brand Conection, La Razón es el únicodiario de Buenos Aires que tiene más lectoresque cantidad de ejemplares editados. Se estimaque cada ejemplar es leído por dos o trespersonas. Quizá por pura intuición, losrepartidores de La Razón a voluntad encontraronen este fenómeno una oportunidad comercial. Lafórmula parece simple: la tirada diaria esinyectada en trenes y subtes, y cada ejemplar esentregado en forma gratuita a un lector. Pero muypocos lectores se lo llevan consigo para recortarpersonitas tomadas de la mano o cualquier otracosa, muchos ejemplares terminan en el tachode basura de alguna estación o simplemente sonabandonados. Una picardía, si se piensa que aúnquedan varias horas pico de pasajeros, es decir,de potenciales lectores.

De modo que, desde que comienza a distribuirseLa Razón, los repartidores a voluntad salen a lacaza de las sobras que dejaron los primeroslectores. Y, si están de suerte, incluso lograránque muchos lectores les donen el ejemplar queno les interesa o que han terminado de leer.Finalmente, se mezclarán entre la multitud quelos trenes y subtes derramaron sobre la EstaciónRetiro, y los diarios recolectados seránconvertidos en monedas o en lo que quiera lavoluntad de los segundos lectores.

En 103 años de historia, el vespertino La Razónretrató las vicisitudes del pueblo que engendró aestos chicos, pero nunca habló de ellos en formadirecta. José Cortejarena, el primer director deldiario, dijo en 1910: «Un diario no debe ser eleco de una voluntad; no es un instrumento dedominación; no es ni puede ser la enseña de unpartido. Los diarios no son ya de sus directores,se deben y pertenecen al pueblo». Nunca imaginóque aquel diario cumpliría un siglo, pasaría a estaren manos de un holding gigante de medios decomunicación señalado de monopolista, y seríadistribuido gratuitamente. Sobre todo, nuncaimaginó que la supervivencia de unos cuantoschicos, casi un siglo después, necesitaría de lavoluntad de algunos de sus lectores.

Emiliano Cosenza

19Posta Data

Cuento

Historia de una persona ala que el día no le alcanza

Suena el despertador a las seis de lamañana. Me levanto y mientras preparo el desayunocertifico la dirección marcada en el diario de ayer.Pienso: me tomo el bondi, luego el subte, y ya está,en una hora estoy ahí. Tendría que llegar puntual ala entrevista, parece ser una buena oportunidad.

Ya se hicieron las siete. Me cambio en unsantiamén y decido partir. No he terminado de bajarlas escaleras cuando oigo que comienza a sonar elteléfono. Apuro el paso y regreso a casa. Levantoel tubo y del otro lado: mamá, que por favor vayaenseguida a lo de la abuela que se descompuso, yque ninguno de mis hermanos está disponible. Lomismo de siempre. Le digo que no puedo, que tengouna entrevista para un laburo y no puedo faltar. Mepide por favor que vaya, que está retrasada y mevuelve a repetir que mis hermanos no están, parahacerme sentir mal obviamente, logrando sucometido. Mamá suele tener la mala costumbre desiempre salirse con las suyas. A las puteadas salgorápido para lo de la abuela, olvidándome delrecorrido planeado anteriormente.

A las 8:30 llego a lo de mi abuela. Me cuentaque se siente un poco mareada pero que no es nadagrave. Seguramente le cayó algo mal de lo quecomió la noche anterior. Le digo que no se preocupey mientras la recuesto en su mecedora y le alcanzoun vaso de agua, me suena el celular. Pedro,compañero de Semiótica, me avisa que el profe estájusto en éste mismo momento firmando libretas yse queda en la facu una hora más solamente.Tendría que ir para allá urgente, es mi últimaoportunidad de engancharlo. Me aseguro que miabuela esté bien y le digo que me tengo que ir, quese quede tranquila, que ya debe estar por caermamá. Mucho no le gustó mi actitud, pero no teníaotra alternativa.

Tomo el subte y en media hora estoy en lafacultad. Ya son las diez, y cuando estoy por ingresarme vuelve a sonar el celular. Esta vez no es unllamado, sino la alarma recordándome que a lasonce tengo turno con el odontólogo. Me apuro ysubo corriendo las escaleras en búsqueda del auladonde supuestamente se encuentra el profesor deSemiótica dejando su gancho en las libretas.Cuando llego, algunos chicos me dicen que hacecinco minutos se había ido, por un problemitafamiliar. No lo podía creer, por cinco minutos nadamás. Igual ya no había tiempo para lamentos sinoiba a llegar tarde al dentista también. Me despidode los compañeros y tomo un taxi.

Increíblemente a tan solo cinco cuadras delconsultorio, un colectivo de la línea 39, en unamaniobra digna de Cupido Motorizado, roza la partedelantera del taxi en el que viajaba, produciendo elenojo automático del tachero que en menos de unminuto, adelantándose, cruza el auto por delantedel bondi, y se baja a increpar al chofer.Aprovechando la situación, yo también me bajo. Letiro unos mangos por la ventanilla en el asiento

delantero, le deseo buena suerte en la pelea y mevoy corriendo.

Por suerte llegó a tiempo, todavía no mecitaron. Me quedo sentado en la sala de espera,cuando de repente me llaman al celular de nuevo.Del otro lado, la voz de un cana, suboficial Rodríguezmás precisamente. Si no me podía acercar lo másrápido posible hasta la comisaría 5° porque lohabían detenido al joven Marco Di Génova – mihermano menor– por un altercado en la vía públicacon resistencia a la autoridad. Agregando quedisculpara la incidencia pero que entendiera queéste fue al único número al que pudieron acceder.Qué le habrá pasado, pensé, en qué se habrámetido. Y pidiéndole disculpas a la secretaria deldentista, me retiré raudamente, emitiendo garabatospor lo bajo.

Ya eran las doce del mediodía, y yo firmandopapeles en la comisaría, intentando la libertad demi hermano. Muchas explicaciones no me dieron.Marco argumentaba que no había hecho nada, quesólo se había peleado con un taxista hacía mediahora, en defensa del colectivero que lo llevaba a ély a treinta personas más. Pero nada más que eso.Y que no había querido molestar a mamá, por esoles pasó a los canas mi celular. Todo muycoincidente, pensé por un momento. Pero no mequedaba otra que hacerme cargo. Lo cierto fue queno lo querían largar hasta el día siguiente, y ya bienentrada la noche, todavía seguíamos ahí adentro.Mi hermano en el calabozo y yo en la sala contiguasobre un mísero y frío banco de madera, esperando.

Ya estaba muy cansado y de mal humor,pensando en qué era lo que había hecho maldurante día, para estar a esa hora encerrado enuna comisaría junto a Marco, sin saber bien porqué.

De golpe me acordé que a las diez teníaque verme con Sabrina. La última vez la habíadejado plantada y ahora no podía volver a ocurrir lomismo. Por eso lo llamé desesperado a Luca — miotro hermano — para que me venga a cubrir.

Cuando Luca llega, me tomo el 60 hacia lacasa de Sabrina, pero de tan cansado que estaba,me quedo dormido, pasándome de largo en lasparadas de su casa y terminando en la terminal delmicro, en los talleres del barrio Victoria. Porsupuesto, ya era muy tarde para volver. A las oncela llamo, y le intento explicar, pero lo único que logroes que corte bruscamente el teléfono, sin la menorintención de escucharme.

Maldigo la cotidiana vida que me tocó ensuerte. Desde que me levanté no pude hacer nada,más que deambular de aquí para allá. El tiempo nome alcanza para hacer todo lo que se presenta. Mepregunto si los días no tendrían que tener un par dehoras más, aunque sea.

Cristian Figueroa

Cuento