historia del trotskismo no

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  • 8/14/2019 Historia Del Trotskismo no

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    Archivo James P. Cannon

    JAMES P. CANNON

    (1942) Historia del Trotskismo norteamericano

    Escrito: En 1942.Versin castellana: Ediciones Rebelin, Partido de Trabajadores por el Socialismo, BuenosAires, Argentina, 1993.Esta Edicin: Marxists Internet Archive, 2006.Fuente: Versin digital de la traduccin del PTS publicada por elCentro de Estudios,Investigaciones y Publicaciones "Leon Trotsky", Argentina, en 2003.

    NDICE:

    Cap. 1 Los Primeros das del Comunismo Norteamericano Cap. 2 Los primeros das del movimiento comunista en

    Estados Unidos Cap. 3 Inicio de la Oposicin de Izquierda en el PartidoComunista de EE.UU. Cap. 4 La Oposicin de Izquierda en Estados Unidos bajo elfuego Cap. 5 Los 'das caniculares' de la Oposicin de Izquierda Cap. 6.- La ruptura con la KOMINTERN Cap.7.- El viraje hacia el trabajo de masasCap. 8.- Las grandes huelgas de Minneapolis Cap. 9.- La fusin con el AWP de Muste Cap. 10.- La lucha contra el sectarismo Cap. 11.- El 'viraje francs' en Estados Unidos

    Cap. 12.- Trabajo comunista dentro del PS

    Indice

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    JAMES P. CANNON (1942)

    Historia del Trotskismo norteamericano

    Conferencia I:Los Primeros das del Comunismo Norteamericano

    Me parece bastante apropiado camaradas, dar una serie de conferencias sobre la historia detrotskismo norteamericano en este Labor temple (Templo del Trabajo). Fue aqu mismo, en eauditorio, en el comienzo de nuestra lucha histrica en 1928 que hice el primer discurso pblidefensa de Trotsky y de la Oposicin Rusa. El discurso fue dado no sin algunas dificultades,

    que los stalinistas trataron de romper nuestro acto por la fuerza fsica. Pero nos las arreglamohacerlo. Nuestra actividad oral pblica como trotskistas reconocidos comenz realmente aqueste Labor temple, trece, casi catorce aos atrs. Sin duda, al leer la literatura del movimientotrotskista en este pas ustedes frecuentemente habrn notado repetidas afirmaciones de que notenemos ninguna nueva revelacin: el trotskismo no es un movimiento nuevo, una nueva docsino la restauracin, el renacimiento del verdadero marxismo como fue expuesto y practicadorevolucin Rusa y en los primeros das de la Internacional Comunista.

    El bolchevismo mismo fue tambin un renacimiento, una restauracin del verdadero marxismdespus de que esta doctrina haba sido corrompida por los oportunistas de la SegundaInternacional, quienes culminaron su traicin al proletariado apoyando a los gobiernosimperialistas en la 1ra. Guerra Mundial de 1914-1918. Cuando uno estudia el perodo particu

    del que voy a hablar en este curso -los ltimos trece aos- o cualquier otro perodo desde lostiempos de Marx y Engels, se puede observar una cosa: La continuidad ininterrumpida delmovimiento marxista revolucionario. El marxismo nunca ha dejado de tener autnticosrepresentantes. A pesar de todas las perversiones y traiciones que han desorientado al movimde tanto en tanto, siempre ha surgido una nueva fuerza, un nuevo elemento ha salido adelante ponerlo otra vez en la senda correcta, es decir, en la senda del marxismo ortodoxo. Tambin afue en nuestro caso. Estamos enraizados en el pasado. Nuestro movimiento, al que llamamostrotskismo, ahora cristalizado en el Socialist Workers Party, no surgi totalmente maduro de lnada. Surgi directamente del Partido Comunista de los EE.UU. El Partido Comunista mismosurgi del movimiento precedente, el Partido Socialista y en parte, de los IWW (IndustrialWorkers of the World). Surgi del movimiento de los obreros revolucionarios de Norteamricel perodo de la preguerra y la guerra. El Partido Comunista, que tom forma organizada en 1era originalmente el ala izquierda del Partido Socialista. Fue del Partido Socialista de dondevinieron los contingentes comunistas ms grandes. En realidad, el lanzamiento formal del Paren setiembre de 1919 fue simplemente la culminacin organizativa de una pelea prolongada ddel Partido Socialista. All se haba trabajado el Programa y all, se formaron los primeros cuEsta pelea interna en su momento, llev a la divisin y a la formacin de una organizacinseparada, el Partido Comunista. En los primeros aos de la consolidacin del MovimientoComunista -es decir, como ustedes diran, desde la Revolucin Bolchevique en 1917 hasta laorganizacin del Partido Comunista en este pas dos aos ms tarde, y an por un ao ms dede ello- la principa1 tarea fue la lucha fraccional contra el socialismo oportunista, entonces

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    representado por el Partido Socialista. Este es casi siempre el caso cuando una organizacin poltica obrera se deteriora y al mismo tiempo da nacimiento a un ala revolucionaria. La peleala mayora, por 1a consolidacin de fuerza dentro del partido, casi invariablemente limita laactividad inicial del nuevo movimiento a una pelea casi estrecha, intrapartidaria, que no finalcon la separacin formal.

    El nuevo partido contina buscando adherentes en el viejo. Le lleva tiempo al nuevo partidoaprender cmo pararse firme sobre sus propios pies. As, an despus de que la separacin fohaba ocurrido en 1919, por la fuerza de 1a inercia y el hbito, y tambin porque la pelea no hterminado realmente, la lucha fraccional continu. Qued gente en el Partido Socialista que nestaba decidida y que eran candidatos ms que probables para la nueva organizaci6n partidariPartido Comunista concentr su actividad en el primer ao a la lucha por clarificar la doctrinaganar fuerzas adicionales del Partido Socialista. Por supuesto como es casi invariablemente een tales desarrollos histricos, esta fase fraccional dio en su momento lugar a la actividad direen la lucha de clases, para reclutar nuevas fuerzas y para el desarrollo de la nueva organizacisobre bases enteramente independientes.

    El Ala Izquierda del Partido Socialista, que ms tarde se convirti en el Partido Comunista, fuinspirada directamente por la Revolucin Bolchevique de 1917. Antes de ese momento, losmilitantes norteamericanos haban tenido muy poca oportunidad de adquirir una genuinaeducacin marxista. Los dirigentes del Partido Socialista no eran marxistas. La literatura delmarxismo publicada en ese pas era ms bien magra y confinada casi exclusivamente al aspececonmico de la doctrina. El Partido Socialista era un cuerpo heterogneo; su actividad poltiagitacin y enseanzas programticas eran una terrible mezcolanza de todo tipo de ideas radicrevolucionarias y reformistas. En esos das antes de la ltima guerra, y an durante ella, a los jvenes militantes que llegaban al partido buscando una clara gua programtica, les costencontrarla. No la podan tener de la direccin oficial del partido que careca de un conocimieserio de tales cosas. Las cabezas prominentes del Partido Socialista, eran la contrapartenorteamericana de los dirigentes oportunistas de los partidos socialistas de Europa, slo que mignorantes y ms despreciativos de la teora. Consecuentemente, a pesar del impulso y el esprevolucionario, la gran masa de jvenes militantes del movimiento norteamericano, pudieronaprender muy poco de marxismo; y sin el marxismo es imposible tener un movimientorevolucionario consistente.

    La Revolucin Bolchevique en Rusia cambi todo casi de cuajo. All fue demostrada en la acconcreta la conquista del poder por el proletariado. Como en casi todos los otros pases, eltremendo impacto de esta victoria revolucionaria del proletariado sacudi hasta sus cimientosnuestro movimiento en Norteamrica. La sola inspiracin de la hazaa fortaleci enormemenala revolucionaria del partido, dio a los trabajadores nuevas esperanzas e hizo emerger un nueinters en esos problemas tericos de la revolucin que no haban recibido un reconocimientoapropiado hasta entonces.

    Pronto descubrimos que los organizadores y dirigentes de la Revolucin Rusa no eran slorevolucionarios de accin. Eran genuinos marxistas en el campo de la doctrina. A parte de Rurecibimos de Lenin, de Trotsky y de los otros dirigentes, por primera vez, serias exposiciones poltica revolucionaria del marxismo. Aprendimos que haban estado enfrascados en largos ade lucha por la restauracin del marxismo no falsificado en el movimiento obrero internacionAhora, gracias a la gran autoridad y al prestigio de su victoria en Rusia, eran finalmente capade ser escuchados en todos los pases. Todos los militantes genuinos se agruparon a su alredecomenzaron a estudiar sus escritos con un inters y un apasionamiento desconocidos antes. L

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    doctrina que ellos exponan tena una autoridad diez veces mayor porque haba sido verificadla prctica. An ms, mes a mes, ao a ao, a pesar de todo el poder que el capitalismo mundmovilizaba contra ellos, mostraban la capacidad de desarrollar la gran revolucin, crear el EjRojo, mantenerse y avanzar. Naturalmente, el Bolchevismo se convirti en la doctrina autorizentre los crculos revolucionarios de todos los movimientos polticos obreros del mundo, inclen nuestro pas.

    Sobre esa base fue formada el Ala Izquierda del Partido Socialista. Tena publicaciones propitena organizadores, oradores y escritores propios. En la primavera de 1919 -es decir cuatro ocinco meses antes de que el Partido Comunista se organizara formalmente, tuvimos en NuevaYork la primera Conferencia Nacional del Ala Izquierda. Yo fui delegado a esa conferencia,viniendo en ese momento de la ciudad de Kansas. Fue en esta conferencia que la fraccin tomcuerpo virtualmente como partido dentro de un partido, en preparacin para la posterior ruptuEl rgano oficial del Ala Izquierda fue llamado "Revolutionary Age" ("La Era RevolucionariEste peridico llev a los trabajadores de Norteamrica la primera explicacin autntica de ladoctrinas de Lenin y Trotsky. Su editor fue el primero en el pas en exponer y popularizar lasdoctrinas de los dirigentes bolcheviques. Por lo tanto debe ser reconocido histricamente comfundador del comunismo norteamericano. Este editor era un hombre llamado Louis C. Frainacorazn no era tan fuerte como su cabeza. Sucumbi en la pelea y se transform en un convertrasnochado de la democracia burguesa en el medio de su agona. Pero esa es slo su mala for personal. Lo que hizo en esos tempranos das mantiene toda su validez y an ni l ni ningn o pueden deshacerlo.

    Otra figura prominente del movimiento en esos das fue John Reed. El no era un dirigente ni poltico, pero su influencia moral era muy grande. John Reed fue el periodista socialistanorteamericano que fue a Rusia, tom parte en la revolucin, la relat verdicamente y escribgran libro sobre ella, "Diez das que conmovieron al Mundo".

    En los comienzos, el grueso de los miembros del Ala Izquierda del Partido Socialista eranextranjeros. En esos momentos, ms de veinte aos atrs, una gran parte del proletariado en Norteamrica era extranjero. Antes de la guerra las puertas de la inmigracin haban sido abieampliamente, ya que acumular un gran ejrcito de reserva serva a las necesidades del capitalnorteamericano. Muchos de esos inmigrantes llegaron a Norteamrica con las ideas socialistadesde sus pases nativos. Bajo el impacto de la Revolucin Rusa el movimiento socialista delengua extranjera creci a pasos agigantados. Los extranjeros se organizaron en federacionessegn su idioma, prcticamente cuerpos autnomos afiliados al Partido Socialista. Haba tantcomo ocho o nueve mil miembros en la Federacin Rusa; cinco o seis mil entre los polacos; tcuatro mil ucranianos; casi doce mil fineses, etc. -una enorme masa de miembros extranjeros partido. La gran mayora se concentraron bajo la consigna de la Revolucin Rusa y despus ddivisin del Partido Socialista constituyeron el grueso de los miembros del Partido Comunist

    Los dirigentes de estas federaciones aspiraban a controlar al nuevo partido y de hecho locontrolaron. En virtud de estos bloques los obreros extranjeros a quienes representaban, ejercuna influencia inesperada en los primeros das del movimiento comunista. Esto era bueno enalgunos aspectos porque en su mayor parte eran comunistas apasionados y ayudaron a inculcadoctrina del bolchevismo.

    Pero su dominacin era muy mala en otros aspectos. Sus mentes no estaban realmente en losEstados Unidos sino en Rusia. Le dieron al movimiento un tipo de formacin no natural y locontagiaron desde el comienzo con un sectarismo extico. Los dirigentes dominantes del part

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    dominantes en el sentido de que ellos tenan el poder real gracias a los bloques que tenan detsuyo- era gente absolutamente no familiarizada con la escena poltica y econmicanorteamericana. No entendan la psicologa de los obreros norteamericanos y no les prestabanmucha atencin. Como resultado, el movimiento en sus comienzos sufri de exceso de irrealiy tuvo un tinte de romanticismo que puso al partido en muchas de sus actividades y pensamiefuera de la real lucha de clases de los Estados Unidos. Lo ms extrao es que muchos de esto

    dirigentes de las Federaciones Extranjeras, estaban convencidos de su misin mesinica. Estadeterminados a controlar el movimiento para mantenerlo en la fe pura.

    Desde su comienzo en el Ala Izquierda del Partido Socialista y ms tarde en el Partido Comuel movimiento comunista norteamericano fue zozobrado por tremendas peleas fraccionales,"peleas por el control" se llamaban. La dominacin de los dirigentes extranjeros cre una situ paradjica. Ustedes saben que normalmente, en la vida de un gran pas imperialista como stobreros inmigrantes extranjeros ocupan una posicin de una minora nacional y tienen que libuna lucha permanente por la igualdad, por sus derechos, sin conseguirlos por completo nuncaPero en el Ala Izquierda del Partido Socialista y en los comienzos del Partido Comunista, estrelacin estaba dada vuelta. Cada uno de los idiomas eslavos estaba fuertemente representadorusos, polacos, lituanos, letones, fineses, etc., tenan la mayora. Eran la mayora abrumadoranosotros, los norteamericanos nativos, que pensbamos que tenamos algunas ideas de cmo que ser dirigido el movimiento obrero, estbamos en minora. Desde el comienzo estuvimos e posicin de una minora perseguida. En los primeros tiempos tuvimos muy poco xito.

    Yo perteneca a la fraccin, primero en el Ala Izquierda del Partido Socialista y ms tarde en movimiento comunista independiente, que quera una direccin norteamericana para elmovimiento. Estbamos convencidos de que era imposible construir un movimiento en este psin una direccin ms ntimamente ligada y conocedora del movimiento nativo de los obrerosnorteamericanos. Muchos de ellos por su parte estaban igualmente convencidos de que eraimposible para un norteamericano ser un bolchevique realmente puro. Ellos nos queran y nosapreciaban -como su "expresin inglesa"- pero pensaban que tenan que mantenerse en el con para evitar que el movimiento se convirtiera en oportunista y centrista. Durante aos se perdigran cantidad de tiempo dando esa pelea, que para los dirigentes extranjeros slo podra ser u pelea perdida. A la larga el movimiento tena que encontrar una direccin nativa, de otra manno podra sobrevivir.

    La pelea por el control asumi la forma de lucha sobre cuestiones organizativas. Deberan logrupos extranjeros organizarse en federaciones, o deberan organizarse en ramas locales sin uestructura nacional o derechos autnomos? Deberamos tener un partido centralizado, o un partido federado? Naturalmente, la concepcin de un partido centralizado era una concepcin bolchevique. Sin embargo, en un partido centralizado los grupos extranjeros no podran ser movilizados tan fcilmente en bloques slidos, mientras que en un partido federado era posib para los dirigentes de la Federacin enfrentar al partido con bloques slidos de votantes que l

    apoyaran en las convenciones, etc.Esta lucha desbarat la Conferencia del Ala Izquierda en Nueva York en 1919. Cuando llegamChicago en septiembre de 1919, es decir, en la Convencin Nacional del Partido Socialista dotuvo lugar la divisin, las fuerzas del Ala Izquierda estaban divididas entre s. Los Comunistael momento de su ruptura con el Partido Socialista eran incapaces de organizar un partido uni propio. Anunciaron al mundo unos das despus que haban organizado no un Partido Comunsino dos. El que tena la mayora era el Partido Comunista de los Estados Unidos, dominado plas Federaciones Extranjeras; el otro era el Partido Obrero Comunista, representando a la frac

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    minoritaria que ya he mencionado, con su mayor proporcin de nativos y extranjerosnorteamericanizados. Naturalmente, haba variaciones y fluctuaciones individuales, pero estala lnea principal de demarcacin.

    Tal fue el poco auspicioso comienzo del Movimiento Comunista Independiente -dos partidos terreno, con programas idnticos, batallando fieramente el uno contra el otro.

    Para hacer las cosas peor, nuestras divididas filas se enfrentaron a una persecucin terrorficaao, 1919, era el ao de la gran reaccin en este pas, la reaccin de la postguerra. Despus qu patrones terminaron la guerra para "hacer el mundo seguro para la democracia" decidieron esun captulo suplementario para hacer a los Estados Unidos seguro para el mercado abierto.

    Comenzaron un giro patritico furioso contra todas las organizaciones obreras. Miles de obrefueron arrestados a escala nacional. Los nuevos Partidos Comunistas sufrieron los embates deataque. Casi todas las organizaciones locales de costa a costa fueron allanadas; prcticamentedirigente del movimiento nacional o local fue puesto bajo arresto, procesado por una u otra coDeportaciones masivas de militantes extranjeros tuvieron lugar. El movimiento fue perseguidtal punto que fue llevado a la clandestinidad. Los lderes de ambos partidos pensaron que eraimposible continuar el funcionamiento abierto, legal. As, en el mismsimo primer ao delComunismo norteamericano no slo tuvimos la desgracia, el escndalo y la catstrofe organizde dos partidos Comunistas separados y rivales, sino que tambin tuvimos a ambos partidosdespus de unos pocos meses, funcionando en grupos y clulas ilegales.

    El movimiento permaneci ilegal desde 1919 hasta comienzos de 1922. Despus de que el prshock de las persecuciones pas y los grupos y clulas se acostumbraron a su existencia ilegaelementos en la direccin que tendan al irrealismo ganaron fuerza, en tanto y en cuanto elmovimiento estaba entonces completamente aislado de la vida pblica y de las organizacioneobreras del pas.

    La disputa fraccional entre los dos partidos continuaba consumiendo una cantidad enorme detiempo; los refinamientos de la doctrina, los quisquilleos, se convirtieron casi en un pasatiemEntonces yo, por mi parte, me di cuenta por primera vez de la completa malicia de la enfermedel ultraizquierdismo. Parece ser una ley peculiar que cuanto mayor es el aislamiento de un partido de la vida del movimiento obrero, cuanto menor es el contacto que tiene con elmovimiento de masas, y cuanto menor es la correccin que ste puede ejercer sobre el partidotanto ms radical se vuelve en sus formulaciones, su programa, etc. Quien desee estudiar lahistoria del movimiento cuidadosamente, debera examinar algo de la literatura del partidoimpresa durante esos das. Ustedes ven, no costaba nada ser ultrarradical, porque de todasmaneras, nadie les prestaba atencin. No tenamos reuniones pblicas, no tenamos que hablalos obreros o ver cules eran sus reacciones a nuestras consignas. As, los que gritaban ms fuen nuestras reuniones cerradas se convirtieron en ms y ms dominantes en la direccin del

    movimiento. La fraseologa del "radicalismo" tuvo su da de fiesta. Los aos iniciales delmovimiento comunista en este pas estuvieron ms que consagrados al ultraizquierdismo.

    Durante las elecciones presidenciales de 1920 el movimiento era ilegal y no pudo implementalguna forma de tener su propio candidato. Eugene V. Debs era el candidato del Partido Socia pero estbamos envueltos en una terrible lucha fraccional con este partido y pensbamoserrneamente que no podamos apoyarlo. Por lo tanto el movimiento se decidi por un programuy radical: Emiti una proclama altisonante llamando a los obreros a boicotear las eleccionUstedes podrn pensar que podramos haber dicho simplemente "no tenemos candidato, no

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    podemos hacer nada al respecto". Ese fue el caso, por ejemplo, con el Socialist Workers Partytrotskistas en 1940, debido a dificultades tcnicas, financieras y organizativas, no pudimos participar en las elecciones. No encontramos posible apoyar a ningn candidato, entonces sldejamos pasar el asunto. Sin embargo, el Partido Comunista en esos das, nunca dej pasar alsin emitir una proclama. Si yo a menudo muestro indiferencia a las proclamas, es porque vimuchas de ellas en los das iniciales del Partido Comunista. Abandon enteramente la idea de

    cada ocasin debe tener una proclama. Es mejor pasarla con pocas; emitirlas en las ocasionesimportantes. Entonces tiene mayor peso. Bueno, en 1920 se sac un volante llamando a boicolas elecciones pero no logramos nada de eso.

    Una fuerte tendencia antiparlamentaria creci en el movimiento. Una falta de inters en laselecciones que llev aos y aos superar. Mientras tanto leamos el folleto de Lenin "Elultraizquierdismo, enfermedad infantil del comunismo". Todos reconocan -tericamente- lanecesidad de participar en las elecciones, pero no haba disposicin para hacer algo al respectvarios aos tuvieron que pasar antes de que el partido desarrollara alguna actividad electoral

    Otra idea radical gan predominancia en el inicial movimiento comunista ilegal: la concepcique mantenerse clandestino es un principio revolucionario. Durante las dos dcadas pasadashemos disfrutado las ventajas de la legalidad. Prcticamente todos los camaradas del SWP noconocido otra forma de existencia que la del partido legal. Es muy posible que una predisposilegalista haya crecido entre ellos. Esos camaradas pueden sufrir fuertes golpes en tiempos de persecucin ya que el partido tiene que ser capaz de realizar sus actividades sin importar la acde la clase dirigente. Es necesario para un partido revolucionario saber cmo operar an enformaciones ilegales. Pero esto slo debe realizarse por necesidad, nunca por eleccin. Despuque una persona experimenta tanto la organizacin poltica ilegal, como la abierta, se puedeconvencer a s mismo fcilmente que la ms econmica, la ms ventajosa es la abierta. Es la ms fcil de entrar en contacto con los obreros, la forma ms fcil de captar. Consecuentemenun bolchevique genuino, an en tiempo de mayor persecucin, trata siempre de atrapar y utilicada posibilidad de funcionar abiertamente; si no puede decir todo lo que quiere libremente, dlo que pueda y completar la propaganda legal por otros mtodos.

    En los inicios del movimiento comunista, antes de que hubiramos asimilado apropiadamenteescritos y enseanzas de los lderes de la Revolucin Rusa, creci una tendencia a considerar partido ilegal como un principio. En tanto el tiempo pas y la ola de reaccin retrocedi, las posibilidades de actividades legales se abrieron. Pero fueron necesarias tremendas peleasfraccionales antes de que el partido tomara el ms leve paso en la direccin de legalizarse. Laabsolutamente increble idea de que un partido no puede ser revolucionario a menos que sea ifue en realidad aceptada por la mayora en el movimiento comunista en 1921 y comienzos de1922.

    En la cuestin sindical el "radicalismo" tambin se mantuvo dominante. El ultraizquierdismo

    virus terrible. Prospera mejor en un movimiento aislado, lo van a encontrar ustedes msdesarrollado en un movimiento que est aislado de las masas, que no tiene ningn correctivo stas. Ustedes lo ven en estas divisiones en el movimiento trotskista -nuestros propios "aspeclunticos". Cuanto menos gente los escucha, cuanto menos efectos tienen sus palabras sobre ecurso de los eventos humanos, ms extremos, irracionales e histricos son en sus formulacion

    La cuestin sindical estaba en la agenda de la primera convencin ilegal del movimientocomunista. Esta convencin proclam una separacin y una unificacin al mismo tiempo. Unfraccin encabezada por Ruthemberg se haba separado del Partido Comunista, dominado por

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    grupos extranjeros. La fraccin Ruthemberg se reunin en una convencin conjunta con el PaObrero Comunista para formar una nueva organizacin llamada el Partido Comunista Unificaen Mayo de 1920 en Bridgeman, Michigan (esta no debe confundirse con otra convencin enBridgeman en agosto de 1922 que fue allanada por la polica). El Partido Comunista Unificadgan la superioridad y se fusion con la restante mitad del Partido Comunista original un aotarde.

    La Convencin de 1920, recuerdo con precisin, adopt una resolucin sobre la cuestin sindBajo la luz de lo que se ha aprendido en el movimiento trotskista, les hara poner los pelos de punta. Esta resolucin llam al boicot de la American Federation of Labor (AFL). Establecisi un miembro del partido est "obligado por necesidad de trabajo" a pertenecer a la AFL, debtrabajar ah de la misma manera que un comunista trabaja en un Congreso burgus, no paraconstruirlo sino para hacerlo explotar desde adentro. Esa estupidez fue ms tarde corregida jucon otras cosas. Mucha gente que cometi estas estupideces ms tarde aprendi y se desenvomejor en el movimiento poltico.

    Siguiendo a la Revolucin Rusa, la joven generacin, revelndose contra las traicionesoportunistas de los socialdemcratas, tom demasiada dosis de radicalismo. Lenin y Trotskydirigieron el "Ala Derecha" -as es como ellos demostrativamente llamaron a su tendencia- enIII Congreso mundial de la Internacional Comunista en 1921. Lenin escribi su folleto, "Elultraizquierdismo, enfermedad infantil del comunismo", dirigido contra los izquierdistas alemtomando las cuestiones del parlamentarismo, sindicalismo, etc. Este folleto, junto con lasdecisiones del Congreso, hicieron mucho en el curso del tiempo para liquidar la tendenciaizquierdista en los inicios de la Comintern.

    No quiero para nada pintar la fundacin del Comunismo Norteamericano como un circo, comhacen los filisteos que se mantienen al margen. No lo fue de ninguna manera. Hubo lados positivos en el movimiento, y estos predominaron. Estaba compuesto de miles de revolucionavalientes y devotos. A pesar de todos sus errores, construyeron un partido como nunca antes shaba visto en este pas, es decir, un partido fundamentado en un programa marxista, con unadireccin profesional y militantes disciplinados. Aquellos que pasaron el perodo del partidoilegal, adquirieron hbitos de disciplina y aprendieron mtodos de trabajo que iran a jugar unrol en la historia siguiente del movimiento. Nosotros estamos construyendo sobre esos cimien

    Aprendieron a tomar el programa seriamente. Aprendieron a sacarse para siempre la idea de qun movimiento revolucionario, que tenga como objetivo el poder, puede ser dirigido por gent practica el socialismo como un pasatiempo. El tpico dirigente del Partido Socialista era unabogado que practicaba leyes, o un predicador o un escritor, o un profesional de un tipo u otroasentan en venir y hacer un discurso cada tanto. Los funcionarios de tiempo completo eranmeramente caballos de tiro que hacan el trabajo sucio y no tenan influencia real en el partid brecha entre los obreros de base, con sus aspiraciones e impulsos revolucionarios, y los

    chapuceros pequeoburgueses en las alturas era tremenda. El joven Partido Comunista rompitodo eso y fue capaz de hacerlo fcilmente porque ninguno de los antiguos dirigentes se pusotodo corazn a apoyar la Revolucin Rusa. El partido tuvo que sacar nuevos dirigentes de lasy desde el mismo comienzo se sent el principio de que esos dirigentes deberan ser obreros profesionales para el partido, deberan poner todo su tiempo y toda su vida a disposicin del partido. Si uno piensa en un partido que tiene como objetivo dirigir a los obreros en una lucha por el poder, entonces no tiene sentido considerar cualquier otro tipo de direccin.

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    En la ilegalidad el trabajo de educacin, de asimilacin de los escritos de los dirigentes rusoscontinu. Lenin, Trotsky, Zinoviev, Radek, Bujarin, esos eran nuestros maestros. Comenzamoser educados en un espritu totalmente distinto al sentimentaloide del Partido Socialista, en elespritu de revolucionarios que se toman las ideas y el programa muy en serio. El movimientouna vida interna muy intensa, tanto ms cuanto estaba aislado y vuelto hacia s mismo. Las pefraccionales eran feroces y largamente extenuantes.

    El movimiento comenz a estancarse en el callejn sin salida de la ilegalidad. Unos pocos denosotros en la direccin comenzamos a buscar una salida, una forma de aproximarnos a losobreros norteamericanos por medios legales. Estos esfuerzos fueron resistidos con firmeza.Formamos una nueva fraccin. Lovestone estaba fuertemente asociado conmigo en la direcciesta fraccin. Ms tarde se nos uni Ruthemberg al salir de prisin en la primavera de 1922.

    Por un ao y medio, dos aos, esta lucha continu sin descanso. La pelea por la legalizacin dmovimiento tuvo un resultado positivo de nuestro lado; aunque por el otro hubo una resistencigualmente determinada por gente convencida hasta la mdula de que esto significaba algn tde traicin. Finalmente, en diciembre de 1921, teniendo una leve mayora en el Comit Centrnos comenzamos a mover, dando un paso cuidadoso por vez, hacia la legalidad.

    No pudimos legalizar al partido como tal, la resistencia en la base era todava muy fuerte, perorganizamos algunos grupos legales para charlas. Despus llamamos a una convencin parafederar estos grupos en un rgano central llamado American Labor Alliance, que convertamouna organizacin de propaganda. Entonces, en diciembre de 1921 recurrimos al plan de organal Partido Obrero como una organizacin legal, abierta, junto con el Partido Comunista ilegal podamos prescindir de ste. No era posible conseguir una mayora para acordar con esto, perefectu un compromiso por el cual mientras mantuviramos al partido ilegal, levantaramos ePartido Obrero como una extensin legal. Dos o tres mil cabezas duras clandestinos se rebelacontra este movimiento de cambio hacia la legalidad, rompieron y formaron sus propiasorganizaciones.

    Continuamos con dos partidos -uno legal y otro clandestino. El Partido Obrero tena un progrmuy limitado, pero se convirti en el medio a travs del cual toda nuestra actividad pblica lese llevaba a cabo. El control yaca en el Partido Comunista clandestino. El Partido Obrero noencontr persecucin. La ola reaccionaria haba pasado y prevaleca un tono poltico liberal eWashington y en el resto del pas. Podamos celebrar encuentros pblicos y conferencias, pub peridicos, participar en campaas electorales, etc. Entonces surgi la cuestin Necesitbameste estorbo de dos partidos? Queramos liquidar la organizacin clandestina y concentrar todnuestra actividad en el partido legal y correr el riesgo de una ulterior persecucin. Encontramuna renovada oposicin. La lucha continu ininterrumpidamente hasta que finalmente llevamasunto a la Internacional Comunista en el IV Congreso en 1922. En ese congreso yo era elrepresentante de la fraccin "liquidacionista", como nos llamaban. Este nombre viene de la

    historia del bolchevismo. En un determinado momento, despus de la derrota de la Revoluci1905, una seccin de los mencheviques se adelant con la posicin de liquidar el partidoclandestino en Rusia y confiar toda la actividad a la "legalidad" zarista. Lenin pele salvajemcontra esta propuesta y sus sostenedores, porque significaba renunciar al trabajo y la organizarevolucionarias. Los denunci como "liquidacionistas". Entonces naturalmente cuando nosotrnos vinimos con la propuesta de liquidar el partido clandestino en este pas, los izquierdistas su mente puesta en Rusia mecnicamente transfirieron la expresin de Lenin y nos denunciarcomo "liquidacionistas". Entonces nos fuimos a Mosc ante la Internacional Comunista. Esa primera oportunidad en que me encontr con el camarada Trotsky. En el curso de nuestra luch

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    tratamos de obtener el apoyo de miembros individuales de la direccin rusa. En el verano y fide 1922 pas muchos meses en Rusia. Por bastante tiempo era como un paria debido a que escampaa acerca de los "liquidacionistas", haba llegado ms arriba de nosotros y los rusos noqueran tener ms que ver con los liquidadores. Sin conocimiento de la situacin en Norteamtendan a tener prejuicios contra nosotros. Asuman que el partido haba sido realmente ilegaly cuando la cuestin fue puesta ante ellos estaban inclinados a decir de antemano: "Si ustedes

    pueden hacer su trabajo legalmente, hganlo ilegalmente, pero ustedes deben hacer su trabajo". Pero no era as como quedaran las cosas. La situacin poltica en los Estados Unidos haca posible un Partido Comunista legal. Esa era nuestra discy toda la experiencia posterior lo ha probado. Finalmente algunos otros camaradas y yo nosencontramos con el camarada Trotsky y le expusimos nuestras ideas por casi una hora. Despuhacer algunas preguntas, cuando habamos terminado nos dijo "Es suficiente, voy a apoyar a "liquidacionistas" y hablar con Lenin. Estoy seguro que los apoyarn, entonces la autoridad predominante y la influencia, naturalmente se transferira a ese partido. Es slo una cuestin entender la situacin poltica. Es absurdo encorsetar en el chaleco de fuerza de la ilegalidadcuando no es necesario. No hay cuestin alguna en ello".

    Le preguntamos si arreglara para que nosotros viramos a Lenin. Nos dijo que Lenin estabaenfermo, pero si era necesario, si Lenin no estaba de acuerdo con l, arreglara para que loviramos. En unos pocos das el nudo comenz a desatarse. Una comisin del congreso fueencargada para la cuestin norteamericana y nos presentamos ante una comisin para debatir.haba corrido la voz de que Trotsky y Lenin estaban a favor de los "liquidacionistas" y la correstaba cambiando a nuestro favor. En la discusin en la audiencia de la comisin, Zinoviev hiun brillante alegato sobre el trabajo legal e ilegal, trayendo la vasta experiencia de los bolcheviques rusos. Nunca he olvidado ese discurso. La memoria del mismo pone a nuestro partido en un buen lugar hasta nuestros das y lo har en el futuro, estoy seguro. Radek y Bujhablaron en el mismo sentido. Ellos tres eran en esos das los representantes del PartidoComunista Ruso en el Comintern. Los delegados de los otros partidos, despus de un comple profundo debate, dieron apoyo por completo a la idea de legalizar el Partido Comunista Norteamericano. Con la autoridad del Congreso Mundial de la Comintern detrs de las decisila Oposicin en los Estados Unidos pronto decreci. El Partido Obrero que haba sido creado1921 como una extensin legal del Partido Comunista, tuvo otra convencin, adopt un progrms claro y reemplaz por completo a la organizacin clandestina. Toda la experiencia desdeha demostrado la sabidura de esa decisin. La situacin poltica

    aqu justificaba la organizacin legal. Hubiera sido una terrible calamidad, prdida y mutilacila actividad revolucionaria el mantenerse clandestinamente cuando no era necesario. Es muyimportante que los revolucionarios tengan el coraje de correr esos riesgos cuando no se puedeevitar. Pero tambin es igualmente importante tener la prudencia suficiente para evitar sacrifiinnecesarios. Lo principal es lograr que se haga la tarea de la forma ms econmica y expedit

    posible.Una observacin final sobre esta cuestin: un pequeo grupo se mantuvo irreconciliable con llegalizacin del partido. Iban a mantenerse clandestinos a pesar de nosotros. No iban a traicioal comunismo. Tenan sus cuarteles en Boston y una rama en Cleveland. Cada tanto, a travs los aos, escucharamos de este grupo clandestino una proclama de algn tipo. Siete aos mtarde, despus de que habamos sido expulsados del Partido Comunista y estbamos organizael movimiento trotskista, escucharnos que este grupo en Boston era de alguna manera simpatide las ideas trotskistas. Esto nos interes ya que estbamos muy necesitados de toda la ayuda

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    pudiramos obtener. En una de mis visitas a Boston los camaradas locales arreglaron unaconferencia con ellos. Eran muy conspirativos y nos llevaron a la vieja manera clandestina aldel encuentro. Un comit formal nos recibi. Despus de intercambiar saludos, el dirigente di"ahora, camarada Cook, dganos cul es vuestra proposicin". Camarada "Cook" era el seud por el que me conocan en el partido clandestino. El no iba a revelar mi nombre legal en unencuentro clandestino. Le expliqu por qu habamos sido expulsados, nuestro programa, etc

    dijo que estaban deseosos de discutir el programa trotskista como base de la unidad en un nue partido. Pero queran acordar primero en un punto: el partido que bamos a organizar tendra qser una organizacin clandestina. Entonces intercambi algunos chistes con ellos y volv a NuYork. Supongo que todava son clandestinos.

    Ahora, camaradas, todo esto es algo as como el fondo, una introduccin a la historia de nuesmovimiento trotskista. La semana que viene tratar lo del desarrollo posterior del PartidoComunista en los aos iniciales antes de nuestra expulsin y la reconstruccin del movimient bajo la bandera del trotskismo.

    Indice

    JAMES P. CANNON (1942)

    Historia del Trotskismo norteamericano

    Conferencia II:Las luchas fraccionales en el viejo Partido Comunista

    La semana pasada hice un esbozo sobre las primeras pocas del comunismo norteamericano. pesar de que omit muchas cosas, tocando solo algunos puntos importantes, no podemos pasaalto el ao 1922, el Cuarto Congreso de la Internacional Comunista, la legalizacin delmovimiento comunista clandestino y el comienzo del trabajo abierto. Habl sobre los aspectonegativos en los primeros tiempos del movimiento y de las enfermedades infantiles que padecomo ocurre casi siempre con los movimientos jvenes, particularmente la virulenta e infantienfermedad del ultraizquierdismo. Pero estos aspectos negativos, el irrealismo de la mayor padel trabajo, fueron ampliamente opacados por el lado positivo - la creacin por primera vez eEE.UU. de un partido poltico revolucionario basado en las doctrinas bolcheviques. Esa fue lacontribucin del comunismo pionero. Un grupo de gente organiz un nuevo partido poltico.Asimilaron algunas de las enseanzas bsicas del comunismo. Se habituaron a proceder en fodisciplinada, lo que es un prerrequisito para la construccin de un partido poltico de trabajadserio. Esto no haba ocurrido antes en los EE.UU. Crearon el instrumento de una direccin profesional, como uno de los ms elementales requerimientos de un partido revolucionario seEl incipiente movimiento comunista demostr de una manera poderosa, la predominanteinfluencia de las ideas sobre cualquier otra cosa. Esto fue demostrado notablemente en la luch

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    por la supremaca entre los IWW (Industrial Workers of the World) y el joven Partido ComunEn los das de pre-guerra, la IWW era un movimiento obrero militante bastante grande. Entrguerra incuestionablemente como la organizacin que agrupaba a la mayora del proletariadomilitante. No obstante, el ncleo del Partido Comunista provena del Partido Socialista. Un gnmero de ellos eran de origen pequeo-burgus, un alto porcentaje eran jvenes sin experienen la lucha de clases. Miles de ellos eran hijos de obreros inmigrantes que nunca haban sido

    realmente asimilados en la lucha de clases de Norteamrica. En lo que a material humanoconcierne, las ventajas estaban todas del lado de la IWW. Sus militantes haban sido probadosmuchas luchas. Tenan cientos y cientos de miembros en prisin y solan mirar con ciertomenosprecio a este incipiente movimiento que hablaba tan confiadamente en trminosrevolucionarios. La IWW imaginaba que sus acciones y sus sacrificios pesaban mucho ms qmeras pretensiones doctrinarias de este nuevo movimiento revolucionario y que nada tenan qtemer de ste en trminos de rivalidad. Estaban muy equivocados.

    En unos pocos aos hacia 1922 se demostr muy claramente que el Partido Comunista habadesplazado a la IWW como organizacin lder de la vanguardia. La IWW con su magnficacomposicin de militantes proletarios, con todas sus heroicas luchas detrs, no pudo correr pa No haban ajustado su ideologa a las lecciones de la guerra y de la Revolucin Rusa. No habadquirido el suficiente respeto por la doctrina, por la teora. Esta es la razn por la que suorganizacin degener, mientras que esta nueva organizacin con su pobre material, su inexp juventud, que ha valorizado el mantener las ideas vivas del bolchevismo, sobrepascompletamente a la IWW y la dej atrs en poco tiempo. La gran leccin de esta experiencia insensatez de tomar superficialmente el poder de las ideas o imaginar que se puede encontrar algn sustituto de las ideas correctas en la construccin de un movimiento revolucionario.

    Despus de dar por terminada la pelea con los ultraizquierdistas sobre la legalizacin, el partisali abiertamente. Haba adquirido ya como dije, completa hegemona sobre la vanguardia proletaria del pas. Era considerado en todos lados y propiamente, como el grupo ms avanzarevolucionario del pas. EI partido comenz a atraer a sus filas a algunos sindicalistas nativosWilliam Z. Foster, desgastando despus la gloria de su trabajo en la huelga del acero, y otrossindicalistas, un grupo considerablemente grande, ingresaron en el un poco extico, pero dinPartido Comunista. Toda la orientacin del partido comenz a cambiar. De la querella subterrlas disputas fuera de la realidad y los ajustes en la doctrina el partido se volc al trabajo sobremasas. Los comunistas comenzaron a ocuparse de los problemas prcticos de la lucha de clas partido comenz gradualmente a volverse "sindicalizado" y dio sus primeros pasos vacilantesFederacin Americana del Trabajo (AFL), la dominante, prcticamente la nica organizacintrabajadores en ese momento.

    Mientras llevbamos adelante la batalla por la legalizacin del partido, pelebamos tambin pcorregir su poltica sindical. Esta batalla fue exitosa tambin; la posicin sectaria original fuerechazada. Los comunistas pioneros revisaron sus tempranos pronunciamientos sectarios, que

    haban favorecido al sindicalismo independiente. Ahora dirigan toda la fuerza dinmica delPartido Comunista, dentro de los sindicatos reaccionarios. El principal crdito para estatransformacin provena tambin de Mosc, de Lenn, de la Comintern. El gran escrito de Le"La enfermedad infantil del comunismo", aclar esta cuestin de manera decisiva. Por el ao1922-23, el partido estaba bien encaminado hacia la penetracin sobre el movimiento sindicay rpidamente empez a adquirir una seria influencia sobre algunos sindicatos en varias parte pas. Esto se dio particularmente en el sindicato del carbn y en ms lugares el partido tambihizo sentir su influencia.

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    Pero simultneamente con este trabajo prctico y progresivo, el partido cay en algunas avenoportunistas. Aparentemente ningn partido puede corregir totalmente una desviacin, pero dhacer un verdadero esfuerzo por corregirla. La vara est torcida hacia atrs. De este modo el j partido que poco antes se haba dedicado al refinamiento de la doctrina en el aislamientosubterrneo, alejado, sin tener nada que ver con el movimiento sindical -sin causarle molestiamovimiento poltico, a la pequeo burguesa y a los farsantes, este mismo partido se sumerga

    ahora en una serie de aventuras alocadas en el campo de la poltica obrero y campesina. El inde la direccin del partido, a travs de una serie de maniobras y combinaciones, para formar ugran partido obrero-campesino de la noche a la maana, sin el suficiente apoyo en el movimiede masas trabajadoras, sin la suficiente fuerza de los propios comunistas, sumi al partido en desorden. Una nueva lucha interna se precipitaba.

    La serie de nuevas luchas fraccionales que empezaron en el ao 1923, seis mesesaproximadamente de la liquidacin de la vieja discusin sobre la legalizacin continuaron tiedespus casi ininterrumpidamente hasta que los trotskistas fueron expulsados del partido en 1La lucha se encarniz hasta la primavera de 1929 cuando la direccin Lovestone, que nos habexpulsado, fue expulsada tambin. Luego, la stalinizada Comintern fren las luchas fraccionaexpulsando a todo aquel que tuviera una actitud independiente y eligiendo una nueva direccique saltara cada vez que sonara la campana. Lograron as un pacfico monolitismo en el partitravs de medidas burocrticas. Lograron la paz del estancamiento ideolgico y la decadencia

    Las Iuchas fraccionales que convulsionaron al partido en todo este tiempo, no impidieron a laorganizacin hacer grandes trabajos en la lucha de clases, desarrollando sus actividades en mcampos. Fundaron por primera vez en el pas un peridico revolucionario. Esto fue un gran lo para un partido de no ms de diez o quince mil miembros. El trabajo propagandstico fuedesarrollado a gran escala. El trabajo de defensa obrera fue organizado con una extensin yfundamento nunca conocidos anteriormente. Muchas innovaciones de naturaleza progresivafueron introducidas dentro del movimiento obrero por el Partido Comunista en ese perodo.Virtualmente, cada huelga que estallaba caa bajo la direccin del partido. Notablemente, la ghuelga de Passic en 1926, que atrajo la atencin de todo el pas, estuvo completamente bajo ldireccin de los comunistas, que se volvieron cada vez ms los lderes sin rival de toda tende progresiva y militante que surgiera en ei movimiento obrero norteamericano.

    Un gran cantidad de comentaristas y observadores expertos, complementados por unos pocosrenegados desilusionados, tratan de mostrar este histrico perodo, el de las primeras pocas dcomunismo norteamericano, como nada ms que una mezcla de estupideces, errores, fraudes corrupcin. Esta es una falsa y absurda apreciacin de ese perodo. La explicacin sobre las lufraccionales en la primera poca del Partido Comunista reside en causas mas serias que en la voluntad de algn individuo. Creo que si uno estudia el desarrollo cuidadosamente, con algnconocimiento sobre los hechos, puede deducir ciertas leyes de la lucha fraccional que puedenayudarlo a comprender el estallido del fraccionalismo en otras organizaciones polticas obrera

    especialmente en las nuevas. Y por supuesto, vale la pena mencionar- aunque los sabiondos presumidos nunca lo hacen- que las luchas fraccionales no eran el monopolio del PartidoComunista. Desde los inicios de la poltica, cada organizacin ha sido presa de luchasfraccionales. Los problemas fraccionales de los primeros comunistas llamaban la atencin,algunos aspectos negativos de ellos, las bribonadas practicadas, fueron escritas y contadas cosemejantes cosas no hubieran ocurrido nunca en ninguna otra parte. Perversiones de la historila especialidad de entrometidos como Eugene Lyons, Max Eastman y otros frvolos que nunc pusieron un pie en las luchas reales de la clase obrera. Recientemente se han unido con renegcomo Benjamn Gillow, quin se desilusion y frustr tanto que corri a los brazos de la mism

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    democracia norteamericana, contra la que empez a pelear como un joven rebelde. Qu lastimescena realiza un hombre- abrazando las doctrinas de los maestros que quebraron su espritu.

    Ellos representan estas luchas fraccionales como algo monstruoso. Se entusiasman especialmcuando encuentran algo no exactamente recomendable desde un punto de vista moralista. Nisiquiera se detienen a considerar, al menos mencionar, la tica y la moral de Tammany Hall o

    Partido Republicano o de las totalmente deshonestas, corruptas e hipcritas luchas de camarilfraccionales que vemos en el Partido Socialista. Slo cuando encuentran algo "fuera de foco"temprana historia del Partido Comunista, alzan sus manos horrorizados.

    No se dan cuenta que, inconscientemente, estn haciendo homenaje al Partido Comunista porsiguiente: uno tiene el derecho de esperar algo mejor del Partido Comunista, incluso de sus precoces das de juventud y raquitismo, que de las organizaciones polticas estables de la burguesa y pequeo-burguesa. En esto est mucho ms que el ncleo de la verdad. Los meddeben servir a los fines. Todo lo que viole la verdad o la conducta honorable en el movimientrevolucionario proletario, est en contradiccin con los grandes fines del comunismo, est fuelugar, sobresale como una pstula. Estas caractersticas en las organizaciones polticas burgue pequeo burguesas - todos ellos sistemticamente mentirosos, ladrones y tramposos- son propde estas organizaciones como parte de un todo.

    Las luchas fraccionales que marcaron el curso entero del movimiento comunista durante sus primeros diez aos tuvieron varias causas. No eran un bando de facinerosos que se juntaron ycomenzaron a pelearse por los despojos; de ninguna manera. No haba despojos. La gran mayde la gente lleg al comunismo pionero con propsitos y motivos sinceros de organizar unmovimiento por la emancipacin de los trabajadores de todo el mundo. Estaban preparados prealizar sacrificios y arriesgarse por sus ideales y lo hicieron. Esta es la verdad de aquellos qutomaron las banderas de la Revolucin Rusa de 1917 y construyeron el gran movimiento, queel momento de la Convencin de Chicago de 1919, tena entre cincuenta y sesenta mil miembEsto es especialmente verdad para aquellos que despus que comenzaron las tremendas persecuciones permanecieron en el partido a pesar de los arrestos, las deportaciones, la durezlas privaciones de la clandestinidad y las dificultades econmicas. Todos esos llorones que permanecieron al margen porque eran incapaces de realizar tales sacrificios o arriesgarse de emanera, tratan de demostrar a los comunistas pioneros como elementos moralmente corruptoEllos simplemente dieron vuelta el cuadro. Los mejores elementos fueron captados por el paren sus inicios. Ms adelante pasaron la prueba de las persecuciones y de la dureza de los tiemde clandestinidad. No, las luchas fraccionales tuvieron detrs algo ms que la mala intencin algunos individuos. Haba, en mi opinin, algunos bribones, pero eso no prueba nada. Se pueencontrar una o dos manzanas podridas en cualquier barril. Las causas de la larga lucha fraccfueron ms profundas.

    En mi primer conferencia expliqu las tremendas contradicciones implcitas en la composici

    partido. Por un lado se mantenan los miembros, predominantemente extranjeros, con suaproximacin irreal sobre el problema de construir un movimiento en un pas donde todava nestaban asimilados; con su fantica concepcin que tenan para controlar el movimiento, no pganancia personal sino para preservar la doctrina que pensaban que slo ellos comprendan. Potro lado, haba un grupo numricamente ms pequeo de norteamericanos que, si bien noentendan las doctrinas del comunismo tanto como los extranjeros -y eso tambin ocurra-, esconvencidos de que el movimiento deba tener una orientacin norteamericana y una direccinativa de ese pas. Esta gran contradiccin aument la lucha fraccional. Despus haba otro fala falta de una direccin experimentada y con autoridad. El movimiento se desarroll de la no

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    la maana, luego de la victoria de 1917 en Rusia. Todos los dirigentes del Partido Socialistarechazaban el bolchevismo y permanecan en los canales seguros del reformismo. Hillquit yBerger, todos los grandes nombres del partido, le dieron la espalda a la Revolucin Rusa y a laspiraciones de los jvenes revolucionarios en el movimiento. Incluso Debs, quin expressimpata, permaneci en el partido de Hillquit y Herger a la hora de decidirse. El nuevomovimiento tena que encontrar nuevos dirigentes; aquellos que llegaban a la primera fila era

    mayormente hombres desconocidos, sin gran experiencia y sin gran autoridad personal. Serequirieron muchas y prolongadas luchas fraccionales para ver quines eran los lderes mscalificados y quines las figuras accidentales. Las administraciones cambiaban rpidamente dconvencin a otra. Temporariamente, gente de paso era arrojada a un lado, atropellada en esasferoces luchas fraccionales, donde el que no lograba mantenerse en pie era dormido de un golMuchos que parecan tener habilidad para dirigir un ao, y eran elegidos de acuerdo a esto, sehechos a un lado el 2do. ao reemplazados por hombres desconocidos hasta el momento. Todesto fue un proceso de seleccin de lderes en medio de las luchas internas. Haba otra formahacerlo? No lo s. Un cuerpo de lderes con autoridad, capaces de mantener una continuidad el firme apoyo del partido. No se cmo o dnde esa clase de dirigentes puede ser consolidadaes a travs de luchas internas. Engels escribi una vez que los conflictos internos eran una ley propia del desarrollo de todo partido poltico. Ciertamente fue la ley del desarrollo del movimcomunista norteamericano de los primeros tiempos. Y no slo del joven partido comunista, sitambin de los primeros das de su autntico sucesor, el movimiento trotskista.

    Una vez que un movimiento se ha desarrollado a travs de la experiencia y de la lucha y confinternos, hasta el punto de consolidar un ncleo de dirigentes que gocen de amplia autoridad,capaces de trabajar juntos y ms o menos homogneos en sus concepciones polticas, las luchfraccionales tienden a disminuir. Se vuelven mas raras y menos destructivas. Toman diferenteformas, con ms contenido ideolgico y son ms instructivas para los militantes. La consolidde una direccin como la antedicha, se convierte en un poderoso factor para mitigar y a veces prevenir las luchas fraccionales futuras. Nosotros en el incipiente movimiento comunista,consolidamos eventualmente una direccin estable, pero de estructura peculiar que de nuevoreflejaba la contradiccin en la composicin del partido. Luego dc cuatro o cinco aos de darvueltas, qued bien en claro quienes eran los lderes del movimiento comunista norteamericano era la gente que haba dirigido en 1919/20. Muy pocos integrantes del viejo staff dirigentesobrevivieron en estas batallas internas. La direccin que finalmente se erigi en el jovenmovimiento Comunista -y este es un aspecto muy interesante de su historia- no se consolid cun grupo homogneo. Esto era as porque el partido mismo no era homogneo. A pesar de serdireccin unificada, con autoridad e influencia sobre todo el partido, los principales lderes ersu vez, lderes de fracciones, que reflejaban las contradicciones dentro del partido. La nueva lfraccional que comenz en 1923, principalmente sobre la cuestin del aventurerismo en elmovimiento obrero- campesino, y luego extendida a todos los problemas de nuestro trabajo prctico, nuestra aproximacin a los trabajadores norteamericanos, mtodos de trabajo sindiceran un reflejo claro de las contradicciones en la composicin social del partido y los distintoorgenes e historias de cada grupo.

    La lucha estuvo organizada por Foxter y yo, contra lo que era en ese momento la mayora,Ruthenberg, Lovestone, Pepper, etc. Pronto fue evidente que la composicin de nuestro grupola de una fraccin sindical proletaria. Apoyndonos, estaba la gran mayora-prcticamente todde los sindicalistas, trabajadores norteamericanos experimentados militantes y los extranjerosnorteamericanizados.

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    Pepper, Ruthenberg y Lovestone tenan mayormente intelectuales y trabajadores extranjerosmenos asimilados. Los lderes tpicos de esa fraccin, incluyendo a su tpica segunda Inea delderes, eran chicos de colegio, jvenes intelectuales sin experiencia en la lucha de clases.Lovestone era el ejemplo ms sobresaliente de esto. Eran tipos muy inteligentes. Sin duda algtenan ms conocimientos tericos que los lderes de la otra fraccin y saban cmo aprovechmximo sus ventajas. Eran duros de tratar. Pero nosotros sabamos una o dos cosas. Incluyen

    cosas nunca aprendidas en los libros, y les creamos muchos problemas. Esta lucha por el contdel partido fue feroz., sin nada que callarse por parte de ambos sectores, llevndola de un aootro sin consideraciones sobre quin tena la mayora en ese momento. A veces, la lucha sefocalizaba en lo que se presentaba como cuestiones sin importancia. Por ejemplo: dnde debestar el centro de operaciones nacional del Partido? Nuestra fraccin deca Chicago, la otra NYork y pelebamos sobre eso. Pero no porque furamos tipos tan estpidos, como nos presenlos chismosos. Pensbamos que si podamos trasladar nuestro cuartel general a Chicago, estotendera a darle al Partido una orientacin ms norteamericana, estando cerca de las minas, cedel centro del movimiento obrero norteamericano. Queramos proletarizar y norteamericanizaPartido. Su insistencia sobre Nueva York tena motivaciones polticas tambin. Nueva York tfuertes elementos pequeo-burgueses en el Partido; los intelectuales jugaban un rol mayor allEstaban ms cmodos en ese lugar - quiero decir, en un sentido poltico-. Y por lo tanto, la pe por la ubicacin del cuartel central del partido es realmente comprensible si se va al fondo de

    Esta larga y fastidiosa lucha puede ser descripta aproximadamente -y creo que as ser- por lohistoriadores objetivos y honestos del futuro, como una lucha entre las tendencias pequeo- burguesas y proletarias en el Partido,

    con la tendencia proletaria sin la suficiente claridad de programa para desarrollar la pelea, contodas sus implicancias. Ahora, no deben olvidar, ramos prcticamente novatos, slo noshabamos familiarizado -y no muy bien familiarizado- con las doctrinas del bolchevismo. Notenamos ningn bagaje de experiencia en poltica; no tenamos a nadie que nos enseara; tuvque aprender todo en la lucha a travs de golpes en la cabeza. La tambaleante fraccin proletacometi un montn de errores e hizo muchas cosas contradictorias al calor de la lucha. Pero lesencia de su direccin era, en mi opinin, histricamente correcta y progresiva.

    A medida que la lucha se desarrollaba, las dos fracciones principales -Foster y Cannon de un y Ruthenberg, Lovestone y Pepper del otro, produjeron divisiones posteriores. De todos mododivisin estaba implcita desde el comienzo porque haba tambin estratificaciones dentro de fraccin Foster-Cannon. El grupo vinculado a m mas cercanamente era el de los comunistas pioneros, hombres del partido desde los inicios, quienes haban adoptado los principios delcomunismo antes que el ala de Foster. El ala de Foster era ms sindicalista en su experiencia,limitada en sus concepciones, menos aplicada en las cuestiones polticas-tericas. En el cursolucha fraccional, esta divisin implcita se formaliz. As, en el Partido se enfrenta con tresfracciones: la fraccin de Foster, la de Lovestone (Ruthenberg muri en 1927) y la de Cannon

    Esta divisin continu hasta que nos expulsaron del Partido, en 1928.Todas estas fracciones lucharon interminablemente por ideas que no estaban completamente c para ellos como dije antes, lo nuestro eran insinuaciones; sabamos perfectamente lo quequeramos, pero carecamos de experiencia poltica, de educacin doctrinaria y del conocimieterico para formular nuestro programa con suficiente precisin, como para llevar las cosas a solucin apropiada. Recuerden la gran batalla que tuvimos contra la oposicin pequeo-burguen el Socialist Workers Party (Partido Socialista de los Trabajadores - SWP) un par de aos aSi estudian esa batalla para ver como se desarroll, vern de que manera sacamos provecho d

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    experiencia de la ms antigua pelea entre la fraccin pequeo-burguesa y la proletaria en el vPartido Comunista. Desde ese momento, ganamos ms experiencia, estudiamos varios libros adquirimos un conocimiento poltico-terico ms profundo. Esto nos permiti ver las cuestionclaramente y prevenirnos en la lucha contra Burnham, Schatman y compaa, de caer en unembrollo sin principios, sin solucin a la vista, como suceda en los viejos tiempos.

    Ahora, estos lderes que mencion -Ruthenberg, Lovestone, Cannon, Foster- esas cuatro persestaban siempre en el Comit Poltico del Partido. Fueron siempre dirigentes del Partidoreconocidos y con autoridad; es decir, eran dirigentes de fracciones, que se hicieron parte de ldireccin del partido.

    Cada fraccin era tan fuerte, el peso estaba distribuido con tanta igualdad entre las fraccionesninguna de ellas poda ser quebrada o eliminada. Mucha gente estaba aferrada a cada uno de muchos de los funcionarios capaces del Partido. Esto se vio, por ejemplo, cuando la gente deLovestone obtuvo la mayora del Partido con la ayuda y el garrote de la Comintern: no podanhacer lo que queran, hacernos a un lado, particularmente desde que el trabajo gremial y de mestaba virtualmente monopolizado por las otras fracciones. Muchos de los organizadores delPartido, escritores y funcionarios, estaban ntimamente conectados conmigo, y no podan ser reemplazados. La fraccin de Foster era igualmente poderosa, especialmente en el campo sin No podan deshacerse de nosotros sin romper el Partido.

    De esta forma, podra decirse que el Partido estuvo dividido virtualmente en tres provincias, pdecirlo de algn modo. Cada fraccin obtuvo la suficiente solidez para trabajar en ciertos camcon una autoridad prcticamente ilimitada y bajo un control mnimo. La fraccin de Foster ocel territorio del trabajo sindical en forma total. Nosotros organizamos la International Labor Defense y la manejamos virtualmente a nuestro antojo. Esto fue cuando la gente de Lovestontenia una leve mayora. Estaban en el control del aparato del partido pero no tenan la fuerzasuficiente como para prescindir de nosotros; por lo tanto, este peculiar equilibrio del poder continu durante varios aos. Naturalmente no era un Partido realmente centralizado, en el se bolchevique de la palabra. Haba una coalicin de tres fracciones. En el fondo, eso era el Part

    No podamos solucionar el problema por cuenta propia. Ninguna fraccin poda vencer a las odecisivamente, ninguna abandonara el Partido, ninguna era lo suficientemente capaz de formsu programa, como para obtener una real mayora en el Partido. Estbamos ante un estancamiun empate, una lucha fraccional desmoralizante, sin fin, sin solucin a la vista. Eran dasdesalentadores. Para cualquier revolucionario normal, era extremadamente angustiante sostenno slo semanas y meses, sino durante aos y aos una lucha fraccional. Hay gente que gustalas luchas fraccionales; en todas las fracciones haba gente que slo despertaba cuando la luchfraccional comenzaba. As se mantenan vivos. Cuando llegaba el momento de hacer algn trconstructivo - demostraciones, piqueteos, circulacin en mayor medida de nuestra prensa, ayulos prisioneros por la lucha de clases -ellos no tenan inters en esa rutina. Pero en cuanto se

    anunciaba la realizacin de un encuentro de la fraccin, ellos estaban siempre ah, en los primasientos.

    Hay ciertas personas anormales en todos los movimientos. Estbamos llenos de ellos. Podraescribir algunos captulos biogrficos bajo el titulo "Los luchadores profesionales de fraccinyo conoc". Esta clase de gente nunca puede liderar un movimiento poltico. Cuando elmovimiento finalmente se toma un respiro y retoma el camino ms claramente, los luchadore profesionales fraccionales, quedan fuera del lugar en la direccin. En ltima instancia, losdirigentes se construyen. Estos lderes de nuestras viejas fracciones no eran ngeles, debo

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    admitirlo, no lo eran en absoluto. Eran peleadores muy duros, polticamente hablando. Peleabcon todo lo que tenan a su alcance.

    Pero, eran canallas egostas como los que representaban los diletantes como Eugene Lyons yEastman, y toda esa gente quisquillosa que se mantuvo a un lado del movimiento, y lo midi cuestiones de moralidad abstractas? Para nada. Ni siquiera Gitlow, quien ahora tardamente, a

    esta tesis, era un canalla desde el comienzo. Creo que algunos de ellos eran defectuosos denacimiento, pero la gran mayora de los cuadros dirigentes de las fracciones eran hombres quingresaron en el movimiento por razones y propsitos honestos e idealistas.

    Esto incluye, tambin, a quienes ms tarde degeneraron, convirtindose en stalinistas ychovinistas. Su degeneracin fue un largo proceso de evolucin, presin, desacuerdos,decepciones, desilusin, etc. Aquellos que ingresaron en el movimiento en los duros das de 1o incluso quienes se agruparon alrededor de la revolucin rusa en los das de guerra, fundaron partido en 1919 y soportaron las persecuciones y las corridas en los das de clandestinidad - eeran muy superiores desde un punto de vista moral a los polticos de Tammany Hall o del ParRepublicano o de cualquier otro movimiento poltico burgus o pequeo- burgus que puedanombra.

    Podramos haber solucionado nuestro problema si hubiramos tenido la ayuda que necesitbaEs decir, la ayuda de gente con mayor experiencia y autoridad. El problema era muy grande pnosotros. Puede pasar, y pasa en los ms avanzados movimientos polticos, que los grupos locremovidos del centro, caigan en querellas que se desarrollan en luchas fraccionales y formacicamarillas, hasta que la situacin se vuelve, a causa de su inexperiencia, insoluble por sus profuerzas. Si tienen una direccin nacional sensata, honesta y madura, capaz de intervenir inteligentemente y de manera justa, en el 90% de lo casos, estos atolladeros, pueden ser resuelos camaradas pueden encontrar las bases de una unificacin en el trabajo conjunto. Ahora, sinosotros, en todos estos aos, hubiramos tenido la ayuda de la Internacional Comunista, la ade los lderes rusos, a la que echbamos de menos, a la que buscbamos, incuestionablementehubiramos resuelto nuestros problemas. Todas las fracciones tenan buena gente en ellas. Totenan gente talentosa En condiciones normales, con una direccin correcta y la ayuda de laComintern, la gran mayora de los lderes de las fracciones se hubieran desarrollado juntos yconsolidado una direccin nica. Las direcciones de estas tres fracciones, unidas y trabajando juntas bajo la supervisin y direccin de lderes internacionales con ms experiencia, hubiera producido una fuerza poderosa para el comunismo. El Partido Comunista hubiera pegado un salto hacia adelante. Fuimos a la Comintern buscando ayuda, pero el real origen de los probleestaba all, a pesar que en ese momento no lo sabamos. La Comintern, sin conocimiento nuecomenzaba su proceso de degeneracin. La honesta y capaz ayuda que tuvimos por parte de LTrotsky y toda la Comintern en 1921 y 1922, en la discusin sobre sindicalismo, y sobre lacuestin de clandestinidad y legalidad, nos capacitaron para solucionar nuestros problemas yliquidar la vieja lucha fraccional. En lugar de obtener esa ayuda, en los aos siguientes, nos

    encontramos con la degeneracin de la Comintern, el comienzo de su stalinizacin. La direccde la Comintern se diriga a nuestro Partido como a cualquier otro, no con la intencin de aclalos problemas, sino para mantener la cuestin al rojo vivo. Planteaban sacarse de encima a togente independiente, a los peleadores, a los tercos, de manera que pudieran crear, a partir de emomento, un dcil partido stalinista. Estaban preparando la creacin de esa clase de partido, y en todos lados, sin pensar en utilizar a ninguno de los lderes de las fracciones. Solamos ir Mosc cada ao. La "Cuestin Norteamericana" estaba siempre en la agenda del da. Siemprehaba una "Comisin Norteamericana" en la Comintern. Nos vean peleando ante las comisiorpidamente se convencieron de que iba a ser algo duro acoplar a esta gente al esquema que t

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    en mente. Estaban desarrollando planes para deshacerse de la mayora de los dirigentes mssobresalientes de todas las fracciones, y cocinar una nueva fraccin que sera un instrumento Stalin.

    Cada vez que viajbamos a Mosc, bamos confiados de que esta vez conseguiramos algunaayuda, algn apoyo, porque estbamos en el camino correcto, porque eran correctos nuestros

    propsitos. Y cada vez ramos desilusionados, cruelmente desilusionados. La Cominterninvariablemente apoyaba a la fraccin pequeo burguesa contra nosotros. Cada vez que podagolpeaban a la fraccin proletaria, que en los primeros das estaba en mayora. Dirimimos elconflicto por primera vez en la Convencin de 1923 y logramos una mayora de 2 a 1. Estabaclaro que la mayora de los miembros del Partido queran el liderazgo de la fraccin proletariIncluso ms tarde, luego de la divisin formal de la fraccin Foster-Cannon, seguimos trabajala mayora de las veces, en bloque contra la gente de Lovestone. Cada vez que a los miembroPartido se les daba una oportunidad para expresarse, mostraban que queran que este bloquetuviera la direccin dominante en el Partido. Pero la Camintern deca que no. Queran romper bloque. Y estaban especialmente ansiosos, por una razn u otra, en quebrar a nuestro grupo, egrupo de Cannon. Deberan haber sospechado algo. Tuvieron que desviarse bastante de su cam para quebrarme. Tan lejos como el 5to. Congreso de la Comintern, en 1924 a cielo limpio, noestuve presente en ese momento, me condenaron mediante una resolucin, por algunos erroreyo haba cometido. Cualquiera en la direccin del Partido haba cometido errores similares o peores, pero la Comintern fue ms all y se esmer en citar mi negligencia, con el objetivo dedebilitar mi prestigio.

    Luego, a medida que pasaban aos, la campaa contra el trotskismo creci. El requisito para parte de la direccin de cualquiera de los partidos, el criterio por el cual los lderes eran califien Mosc, era quin gritaba mis contra Trotsky y el trotskismo. No se nos daba ningunainformacin real sobre los fundamentos de la lucha en wl partido ruso. ramos engaados condocumentos oficiales llenos de acusaciones y agravios; nada, o casi nada, sobre la otra cara dcuestin. Abusaban de la confianza de la base del partido. De todas formas, los dirigentes del partido que confiaron en la Comintern, fueron abusados en su confianza, una y otra vez. Cadaque bamos a Mosc, en vez de regresar con una solucin, retornbamos con una resolucindestinada a fomentar la "paz" en el Partido, pero ordenada de tal manera que tomaba la luchafraccional ms caliente que nunca.

    No haba signos de solucin de las luchas. En cuanto era firmada una declaracin de unidad, guerra fraccional la arrojaba por los aires. El cinismo comenz a pervertir las filas del partidola declaracin de un "acuerdo de paz" significara que "ahora la lucha fraccional se pondrrealmente caliente" se convirti en una mxima.

    Las cosas llegaron a un punto tal que uno tena que ser reservado, tenia que vigilar cada paso, porque se trabajaba en una atmsfera hostil. Se volvi necesario actuar con reserva cada vez q

    se acordaba con algo. Un ambiente de baja moral comenz a envolver al Partido, como una nEl hecho de que la degeneracin de la Comintern ejerciera una influencia determinante en nuePartido es citado por mucha gente superficial como una prueba del irrealismo del movimientonorteamericano, de su incapacidad para resolver sus problemas, etc. Esos chismosos solo muque no tienen la menor idea sobre lo que es y debe ser una organizacin revolucionaria. Lainfluencia de Mosc era una cosa perfectamente comprensible y natural. La confianza yexpectativas que el joven Partido norteamericano puso en la direccin rusa, era perfectamente justificable porque los rusos haban hecho una revolucin. Naturalmente, la influencia y autordel partido ruso era ms grande en el movimiento internacional, que ninguna otra. Los ms sa

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    los ms experimentados guan a los nefitos. As ser y as debe ser en cualquier organizacininternacional.

    No hay un desarrollo igual en todos los partidos en una internacional. Habamos visto esto enIV Internacional durante el tiempo en el que el camarada Trotsky estaba con vida; habamosincorporado toda la experiencia de la revolucin rusa y de la lucha contra Stalin. La autoridad

    prestigio de Trotsky eran absolutamente descollantes en la IV Internacional. Su palabra no tenfuerza del comando burocrtico, pero tena un tremendo poder moral. Y no slo eso. Como sedemostr una y otra vez, en cada dificultad y disputa, su paciencia, su sabidura y susconocimientos eran aplicados constructiva y honestamente, y siempre ayudaba a cualquier pao grupo que solicitara su intervencin.

    Nuestra experiencia en el Partido Comunista era de un valor incalculable en nuestro trabajo dy en todas nuestras comunicaciones y relaciones con grupos menos experimentados de la IVInternacional. Es natural que nuestro Partido, precisamente porque asimil una gran experien poltica, probablemente ejerza una influencia mayor en el movimiento internacional, que cualotro partido ahora que el camarada Trotsky no est ms con nosotros. Si una seccin de la IVInternacional enfrentara una situacin revolucionaria en un futuro prximo y demostrara que una direccin del suficiente calibre como para llevar adelante exitosamente una revolucin,entonces la autoridad predominante y la influencia, naturalmente se transferira a ese partido.sentido comn, se convertira en el partido lder de la IV Internacional. Estas son simplementconsecuencias naturales e inevitables del desarrollo accidentado del movimiento polticointernacional.

    Nuestra desgracia, nuestra tragedia a lo largo de la Comintern, era que los grandes dirigentes revolucin rusa, quienes realmente haban incorporado la doctrina del marxismo y haban llevadelante una revolucin, eran apartados a un lado del camino por la reaccin contra la revolucde Octubre y la degeneracin burocrtica del PCUS. El PC en los EE.UU., como los partidoslos dems pases, fall en comprender las complicadas caractersticas de la gran batalla.Pelebamos en la oscuridad, pensando solamente en nuestras cuestiones nacionales. Eso fue lenvenen la lucha fraccional aqu. Fue lo que caus la degeneracin en peleas sin principios yluchas por el control, Slo un programa internacional, comprendido a tiempo, podra haber salvado al viejo PC de Norteamrica de la degeneracin. No comprendimos esto hasta 1928.Entonces, ya era demasiado tarde para salvar ms que un fragmento pequeo dcl Partido, paroriginales fines revolucionarios. Cada una de las tres fracciones que existieron en el Partido d1923 a 1928 tuvieron su propia evolucin. Los cuadros fundadores del movimiento trotskistanorteamericano provenan completamente de la fraccin de Cannon. La totalidad de la direcc prcticamente todos los miembros originales de la Oposicin de Izquierda, provenan de nuesfraccin.

    La fraccin de Lovestone fue expulsada brutalmente por Stalin en 1929. La gente de Lovesto

    desarroll de manera independiente desde 1929 a 1939, y luego se desintegraron yendo hacia burguesa como soporte de la guerra "democrtica". La fraccin de Foster y los dirigentessecundarios de algunas de las otras fracciones se reunieron sobre la base de una incuestionabllealtad a Stalin, en un abandono completo de su independencia. Eran hombres de segunda ytercera lnea. Tuvieron que esperar en las sombras hasta que los reales luchadores fueranexpulsados y les llegara el tiempo de ocupar sus lugares. Se convirtieron en los lderes oficiallos lderes fabricados del PC norteamericano. Luego tuvieron su evolucin natural, hasta logren la actualidad, la vanguardia del movimiento social chovinista.

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    Una cosa importante para recordar es que nuestro moderno movimiento trotskista se origin ePartido Comunista y no en otro lugar. A pesar de los aspectos negativos del Partido en esos a pesar de sus debilidades, su crudeza, sus enfermedades infantiles, enormes; cualquier cosa qudiga retrospectivamente sobre las luchas fraccionales y su eventual degeneracin; cualquier cque se diga sobre la degeneracin del PC en este pas -se debe reconocer que del PartidoComunista surgieron las fuerzas para la regeneracin del movimiento revolucionario. Que de

    en los EE.UU. surgi el ncleo de la IV Internacional en este pas. Podramos decir tambin qlos primeros periodos del movimiento comunista en este pas, provinieron de nosotros queestbamos aliados a l por cadenas indisolubles. Hay una continuidad ininterrumpida desde loviejos das del movimiento comunista, con sus bravas peleas contra las persecuciones, sussacrificios, errores, luchas fraccionales y su degeneracin, en un eventual resurgimiento delmovimiento, bajo la bandera del trotskismo. No debemos rendirnos, no podemos rendirnoshaciendo honor a la justicia, a la verdad, a la tradicin de los primeros aos del comunismonorteamericano. Eso nos pertenece y sobre eso nos hemos construido.

    Indice

    JAMES P. CANNON (1942)

    Historia del Trotskismo norteamericano

    Conferencia II:Las luchas fraccionales en el viejo Partido Comunista

    La semana pasada hice un esbozo sobre las primeras pocas del comunismo norteamericano. pesar de que omit muchas cosas, tocando solo algunos puntos importantes, no podemos pasaalto el ao 1922, el Cuarto Congreso de la Internacional Comunista, la legalizacin delmovimiento comunista clandestino y el comienzo del trabajo abierto. Habl sobre los aspectonegativos en los primeros tiempos del movimiento y de las enfermedades infantiles que padecomo ocurre casi siempre con los movimientos jvenes, particularmente la virulenta e infantienfermedad del ultraizquierdismo. Pero estos aspectos negativos, el irrealismo de la mayor padel trabajo, fueron ampliamente opacados por el lado positivo - la creacin por primera vez eEE.UU. de un partido poltico revolucionario basado en las doctrinas bolcheviques. Esa fue lacontribucin del comunismo pionero. Un grupo de gente organiz un nuevo partido poltico.Asimilaron algunas de las enseanzas bsicas del comunismo. Se habituaron a proceder en fodisciplinada, lo que es un prerrequisito para la construccin de un partido poltico de trabajadserio. Esto no haba ocurrido antes en los EE.UU. Crearon el instrumento de una direccin profesional, como uno de los ms elementales requerimientos de un partido revolucionario seEl incipiente movimiento comunista demostr de una manera poderosa, la predominanteinfluencia de las ideas sobre cualquier otra cosa. Esto fue demostrado notablemente en la luch por la supremaca entre los IWW (Industrial Workers of the World) y el joven Partido ComunEn los das de pre-guerra, la IWW era un movimiento obrero militante bastante grande. Entrguerra incuestionablemente como la organizacin que agrupaba a la mayora del proletariado

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    militante. No obstante, el ncleo del Partido Comunista provena del Partido Socialista. Un gnmero de ellos eran de origen pequeo-burgus, un alto porcentaje eran jvenes sin experienen la lucha de clases. Miles de ellos eran hijos de obreros inmigrantes que nunca haban sidorealmente asimilados en la lucha de clases de Norteamrica. En lo que a material humanoconcierne, las ventajas estaban todas del lado de la IWW. Sus militantes haban sido probadosmuchas luchas. Tenan cientos y cientos de miembros en prisin y solan mirar con cierto

    menosprecio a este incipiente movimiento que hablaba tan confiadamente en trminosrevolucionarios. La IWW imaginaba que sus acciones y sus sacrificios pesaban mucho ms qmeras pretensiones doctrinarias de este nuevo movimiento revolucionario y que nada tenan qtemer de ste en trminos de rivalidad. Estaban muy equivocados.

    En unos pocos aos hacia 1922 se demostr muy claramente que el Partido Comunista habadesplazado a la IWW como organizacin lder de la vanguardia. La IWW con su magnficacomposicin de militantes proletarios, con todas sus heroicas luchas detrs, no pudo correr pa No haban ajustado su ideologa a las lecciones de la guerra y de la Revolucin Rusa. No habadquirido el suficiente respeto por la doctrina, por la teora. Esta es la razn por la que suorganizacin degener, mientras que esta nueva organizacin con su pobre material, su inexp juventud, que ha valorizado el mantener las ideas vivas del bolchevismo, sobrepascompletamente a la IWW y la dej atrs en poco tiempo. La gran leccin de esta experiencia insensatez de tomar superficialmente el poder de las ideas o imaginar que se puede encontrar algn sustituto de las ideas correctas en la construccin de un movimiento revolucionario.

    Despus de dar por terminada la pelea con los ultraizquierdistas sobre la legalizacin, el partisali abiertamente. Haba adquirido ya como dije, completa hegemona sobre la vanguardia proletaria del pas. Era considerado en todos lados y propiamente, como el grupo ms avanzarevolucionario del pas. EI partido comenz a atraer a sus filas a algunos sindicalistas nativosWilliam Z. Foster, desgastando despus la gloria de su trabajo en la huelga del acero, y otrossindicalistas, un grupo considerablemente grande, ingresaron en el un poco extico, pero dinPartido Comunista. Toda la orientacin del partido comenz a cambiar. De la querella subterrlas disputas fuera de la realidad y los ajustes en la doctrina el partido se volc al trabajo sobremasas. Los comunistas comenzaron a ocuparse de los problemas prcticos de la lucha de clas partido comenz gradualmente a volverse "sindicalizado" y dio sus primeros pasos vacilantesFederacin Americana del Trabajo (AFL), la dominante, prcticamente la nica organizacintrabajadores en ese momento.

    Mientras llevbamos adelante la batalla por la legalizacin del partido, pelebamos tambin pcorregir su poltica sindical. Esta batalla fue exitosa tambin; la posicin sectaria original fuerechazada. Los comunistas pioneros revisaron sus tempranos pronunciamientos sectarios, quehaban favorecido al sindicalismo independiente. Ahora dirigan toda la fuerza dinmica delPartido Comunista, dentro de los sindicatos reaccionarios. El principal crdito para estatransformacin provena tambin de Mosc, de Lenn, de la Comintern. El gran escrito de Le

    "La enfermedad infantil del comunismo", aclar esta cuestin de manera decisiva. Por el ao1922-23, el partido estaba bien encaminado hacia la penetracin sobre el movimiento sindicay rpidamente empez a adquirir una seria influencia sobre algunos sindicatos en varias parte pas. Esto se dio particularmente en el sindicato del carbn y en ms lugares el partido tambihizo sentir su influencia.

    Pero simultneamente con este trabajo prctico y progresivo, el partido cay en algunas avenoportunistas. Aparentemente ningn partido puede corregir totalmente una desviacin, pero dhacer un verdadero esfuerzo por corregirla. La vara est torcida hacia atrs. De este modo el j

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    partido que poco antes se haba dedicado al refinamiento de la doctrina en el aislamientosubterrneo, alejado, sin tener nada que ver con el movimiento sindical -sin causarle molestiamovimiento poltico, a la pequeo burguesa y a los farsantes, este mismo partido se sumergaahora en una serie de aventuras alocadas en el campo de la poltica obrero y campesina. El inde la direccin del partido, a travs de una serie de maniobras y combinaciones, para formar ugran partido obrero-campesino de la noche a la maana, sin el suficiente apoyo en el movimie

    de masas trabajadoras, sin la suficiente fuerza de los propios comunistas, sumi al partido en desorden. Una nueva lucha interna se precipitaba.

    La serie de nuevas luchas fraccionales que empezaron en el ao 1923, seis mesesaproximadamente de la liquidacin de la vieja discusin sobre la legalizacin continuaron tiedespus casi ininterrumpidamente hasta que los trotskistas fueron expulsados del partido en 1La lucha se encarniz hasta la primavera de 1929 cuando la direccin Lovestone, que nos habexpulsado, fue expulsada tambin. Luego, la stalinizada Comintern fren las luchas fraccionaexpulsando a todo aquel que tuviera una actitud independiente y eligiendo una nueva direccique saltara cada vez que sonara la campana. Lograron as un pacfico monolitismo en el partitravs de medidas burocrticas. Lograron la paz del estancamiento ideolgico y la decadencia

    Las Iuchas fraccionales que convulsionaron al partido en todo este tiempo, no impidieron a laorganizacin hacer grandes trabajos en la lucha de clases, desarrollando sus actividades en mcampos. Fundaron por primera vez en el pas un peridico revolucionario. Esto fue un gran lo para un partido de no ms de diez o quince mil miembros. El trabajo propagandstico fuedesarrollado a gran escala. El trabajo de defensa obrera fue organizado con una extensin yfundamento nunca conocidos anteriormente. Muchas innovaciones de naturaleza progresivafueron introducidas dentro del movimiento obrero por el Partido Comunista en ese perodo.Virtualmente, cada huelga que estallaba caa bajo la direccin del partido. Notablemente, la ghuelga de Passic en 1926, que atrajo la atencin de todo el pas, estuvo completamente bajo ldireccin de los comunistas, que se volvieron cada vez ms los lderes sin rival de toda tende progresiva y militante que surgiera en ei movimiento obrero norteamericano.

    Un gran cantidad de comentaristas y observadores expertos, complementados por unos pocosrenegados desilusionados, tratan de mostrar este histrico perodo, el de las primeras pocas dcomunismo norteamericano, como nada ms que una mezcla de estupideces, errores, fraudes corrupcin. Esta es una falsa y absurda apreciacin de ese perodo. La explicacin sobre las lufraccionales en la primera poca del Partido Comunista reside en causas mas serias que en la voluntad de algn individuo. Creo que si uno estudia el desarrollo cuidadosamente, con algnconocimiento sobre los hechos, puede deducir ciertas leyes de la lucha fraccional que puedenayudarlo a comprender el estallido del fraccionalismo en otras organizaciones polticas obreraespecialmente en las nuevas. Y por supuesto, vale la pena mencionar- aunque los sabiondos presumidos nunca lo hacen- que las luchas fraccionales no eran el monopolio del PartidoComunista. Desde los inicios de la poltica, cada organizacin ha sido presa de luchas

    fraccionales. Los problemas fraccionales de los primeros comunistas llamaban la atencin,algunos aspectos negativos de ellos, las bribonadas practicadas, fueron escritas y contadas cosemejantes cosas no hubieran ocurrido nunca en ninguna otra parte. Perversiones de la historila especialidad de entrometidos como Eugene Lyons, Max Eastman y otros frvolos que nunc pusieron un pie en las luchas reales de la clase obrera. Recientemente se han unido con renegcomo Benjamn Gillow, quin se desilusion y frustr tanto que corri a los brazos de la mismdemocracia norteamericana, contra la que empez a pelear como un joven rebelde. Qu lastimescena realiza un hombre- abrazando las doctrinas de los maestros que quebraron su espritu.

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    Ellos representan estas luchas fraccionales como algo monstruoso. Se entusiasman especialmcuando encuentran algo no exactamente recomendable desde un punto de vista moralista. Nisiquiera se detienen a considerar, al menos mencionar, la tica y la moral de Tammany Hall oPartido Republicano o de las totalmente deshonestas, corruptas e hipcritas luchas de camarilfraccionales que vemos en el Partido Socialista. Slo cuando encuentran algo "fuera de foco"temprana historia del Partido Comunista, alzan sus manos horrorizados.

    No se dan cuenta que, inconscientemente, estn haciendo homenaje al Partido Comunista porsiguiente: uno tiene el derecho de esperar algo mejor del Partido Comunista, incluso de sus precoces das de juventud y raquitismo, que de las organizaciones polticas estables de la burguesa y pequeo-burguesa. En esto est mucho ms que el ncleo de la verdad. Los meddeben servir a los fines. Todo lo que viole la verdad o la conducta honorable en el movimientrevolucionario proletario, est en contradiccin con los grandes fines del comunismo, est fuelugar, sobresale como una pstula. Estas caractersticas en las organizaciones polticas burgue pequeo burguesas - todos ellos sistemticamente mentirosos, ladrones y tramposos- son propde estas organizaciones como parte de un todo.

    Las luchas fraccionales que marcaron el curso entero del movimiento comunista durante sus primeros diez aos tuvieron varias causas. No eran un bando de facinerosos que se juntaron ycomenzaron a pelearse por los despojos; de ninguna manera. No haba despojos. La gran mayde la gente lleg al comunismo pionero con propsitos y motivos sinceros de organizar unmovimiento por la emancipacin de los trabajadores de todo el mundo. Estaban preparados prealizar sacrificios y arriesgarse por sus ideales y lo hicieron. Esta es la verdad de aquellos qutomaron las banderas de la Revolucin Rusa de 1917 y construyeron el gran movimiento, queel momento de la Convencin de Chicago de 1919, tena entre cincuenta y sesenta mil miembEsto es especialmente verdad para aquellos que despus que comenzaron las tremendas persecuciones permanecieron en el partido a pesar de los arrestos, las deportaciones, la durezlas privaciones de la clandestinidad y las dificultades econmicas. Todos esos llorones que permanecieron al margen porque eran incapaces de realizar tales sacrificios o arr