frankenstein: arteterapia en tiempos de covid19...la técnica del collage permite decidir...

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Nada es tan doloroso para la mente humana como un gran y repentino cambio.” Mary Shelley (Frankenstein). En el inicio del confinamiento, como en otros inicios de mi vida, estrené un nuevo cuaderno de notas y me centré en ese libro que siempre me ha tenido fascinada, Frankenstein de Mary Shelley. “Nada contribuye a tranquilizar la mente como un propósito firme, un punto en el que pueda el alma fijar sus ojos intelectuales.“ Mary Shelley (Frankenstein). Necesitaba tranquilizar mi mente, gestionar mejor la ansiedad y olvidarme por un momento de esa constante incertidumbre que bom- bardeaba las noticias y la realidad. De repente encontré un propósito firme, un punto de partida del cual tirar; había encontrado un paralelis- mo entre el Coronavirus del 2020 y el libro de Frankenstein que tenia entre manos. En abril del 1815, tuvo lugar la potentísima erupción del volcán Tambo- ra, en la isla de Sumbawa, en la actual Indonesia. Sus efectos fueron mucho más allá en el espacio y el tiempo, desencadenando una serie de fenómenos naturales que afectaron drásticamente a todo el planeta. En 1816, el tiempo se había tornado extrañamente frío y lluvioso en el hemisferio norte, Suiza incluida. Ese año acabaría conociéndose como “el año sin verano”. A mediados de junio, la lluvia caía sin tregua sobre el lago Lemán donde pasaban sus vacaciones Lord Byron y sus invita- dos. Aquel clima adverso les imposibilitaba navegar o dar paseos, obligándoles a permanecer en la mansión; en ella pasaron confinados tres noches. Resguardados de los aullidos del viento y los rugidos de los truenos, al calor de la chimenea de la Villa Diodati, pasaban las horas entre charlas y lecturas. Ese enclaustramiento revolucionó la literatura de horror. Lord Byron, Percy Shelley, Mary Shelley y John William Polidori tras varios días confinados, propusieron un concurso de relato de terror, para distraer al aburrimiento. De aquel encuentro nacieron dos de los grandes iconos de la literatura gótica, el monstruo de Frankenstein de Mary Shelley y El Vampiro de John William Polidori, germen del Drácula de Bram Stoker (1897). Nightmare, 1781. Johann Heinrich Füssil Villa Diodati Frankenstein: Arteterapia en tiempos de COVID19 1. Idea: Paralelismo entre el coronavirus y la erupción del volcán Tambora en 1815.

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Page 1: Frankenstein: Arteterapia en tiempos de COVID19...La técnica del collage permite decidir constan-temente que mostrar y que omitir en la obra y eso resulta realmente interesante y

Nada es tan doloroso para la mente humana como un gran y repentino cambio.” Mary Shelley (Frankenstein).

En el inicio del confinamiento, como en otros inicios de mi vida, estrené un nuevo cuaderno de notas y me centré en ese libro que siempre me ha tenido fascinada, Frankenstein de Mary Shelley.

“Nada contribuye a tranquilizar la mente como un propósito firme, un punto en el que pueda el alma fijar sus ojos intelectuales.“

Mary Shelley (Frankenstein).

Necesitaba tranquilizar mi mente, gestionar mejor la ansiedad y olvidarme por un momento de esa constante incertidumbre que bom-bardeaba las noticias y la realidad. De repente encontré un propósito firme, un punto de partida del cual tirar; había encontrado un paralelis-mo entre el Coronavirus del 2020 y el libro de Frankenstein que tenia entre manos.

En abril del 1815, tuvo lugar la potentísima erupción del volcán Tambo-ra, en la isla de Sumbawa, en la actual Indonesia. Sus efectos fueron mucho más allá en el espacio y el tiempo, desencadenando una serie de fenómenos naturales que afectaron drásticamente a todo el planeta. En 1816, el tiempo se había tornado extrañamente frío y lluvioso en el hemisferio norte, Suiza incluida. Ese año acabaría conociéndose como

“el año sin verano”. A mediados de junio, la lluvia caía sin tregua sobre el lago Lemán donde pasaban sus vacaciones Lord Byron y sus invita-dos. Aquel clima adverso les imposibilitaba navegar o dar paseos, obligándoles a permanecer en la mansión; en ella pasaron confinados tres noches. Resguardados de los aullidos del viento y los rugidos de los truenos, al calor de la chimenea de la Villa Diodati, pasaban las horas entre charlas y lecturas. Ese enclaustramiento revolucionó la literatura de horror. Lord Byron, Percy Shelley, Mary Shelley y John William Polidori tras varios días confinados, propusieron un concurso de relato de terror, para distraer al aburrimiento.

De aquel encuentro nacieron dos de los grandes iconos de la literatura gótica, el monstruo de Frankenstein de Mary Shelley y El Vampiro de John William Polidori, germen del Drácula de Bram Stoker (1897).

Nightmare, 1781. Johann Heinrich Füssil Villa Diodati

Frankenstein: Arteterapia en tiempos de COVID19

1. Idea: Paralelismo entre el coronavirus y la erupción del volcán Tambora en 1815.

Page 2: Frankenstein: Arteterapia en tiempos de COVID19...La técnica del collage permite decidir constan-temente que mostrar y que omitir en la obra y eso resulta realmente interesante y

Tomando como referencia ese momento histórico de 1816, donde el aislamiento propició la creación de criaturas excepcionales. Me propu-se hacer un proyecto en donde la esperanza y la creatividad tuvieran gran protagonismo, en donde el aislamiento obligatorio gestara algo nuevo, en donde la negatividad quedara atrás y viéramos esta nueva situación como una gran oportunidad para reflexionar sobre nuestras emociones, miedos, monstruos y lazos familiares.

La figura de Mary Shelley, escritora que en una época en la que las mujeres tenían muchos menos derechos y era complicado que pudiesen publicar novelas, escribió uno de los libros más famosos de la historia y dio vida a un personaje que mayores y pequeños conocemos, Frankens-tein; esa criatura creada a partir de diferentes partes de individuos en donde la ciencia y la soberbia humana son protagonistas, me llevó a desarrollar un proyecto de arteterapia con imágenes creadas a partir de fotografías de familiares y amigos.

A través de la figura de Frankenstein, del monstruo; se establece un dialogo muy interesante entre el autor y la obra. Por experiencia sé que este tipo de proyectos con consignas, resulta un fantástico punto de partida para colectivos poco comunicativos como aquellos que sufren Trastornos de Alimentación, ya que invitan a un dialogo interesante del autor con su obra a través de la metáfora. Temas tan importante como los miedos, la familia, los vínculos y las emociones salen a la luz

de un modo muy natural. La técnica del collage permite decidir constan-temente que mostrar y que omitir en la obra y eso resulta realmente interesante y fascinante. En muchas ocasiones lo que se omite tiene más relevancia que aquello que se muestra.

La figura resultante es una obra, un Frankenstein, un monstruo, un espía ciego, realizado a través de recortes de fotos de familiares que se encuentra en dialogo permanente con el autor.

2. Proyecto: Crea tu Monstruo

MARIA SOUTULLO CASANUEVALicenciada en Bellas Artes. Máster en Arteterapia. Psicoterapia por el arte y formación psicosocial.

Universidad Pompeu Fabra de Barcelona. E-mail: [email protected]

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