ContenidoIntroducción

El paisaje como recurso

El complejo entramado del paisaje

El paisaje, un activo dinámico

Los paisajes de nuestra comarca❒ Alto Asón y Sierra del Hornijo❒ Valle de Soba❒ Valle de Ruesga❒ Matienzo❒ Valle medio del Asón❒ Valle de Udalla❒ El bajo Asón❒ La Marisma❒ Valle de Liendo❒ Valle de Guriezo❒ Alto de las Nieves y cabecera del Remendón❒ Valle de Aras

❒ Trasmiera

Lugares para disfrutar de nuestros paisajes

Muchas gracias a Javier López (Seo-Castro Urdiales) por la cesión

de algunas de sus fotografías para la elaboración de esta guía.

Edita: Grupo de Acción LocalAsón - Agüera - TrasmieraAntiguas Escuelas de UdallaUdalla • Cantabria942 67 68 50ason@cantabriainter.net

Impresión y maquetación: Asongraf, S.L.39815 Valle de Ruesga • Cantabria942 61 90 80mape17@telefonica.net

Depósito legal: SA-00-0000

IntroducciónSi preguntáramos a los habitantes de nuestra comarca por una definicióndel paisaje, nos saldrían múltiples respuestas y, es más, si esta encuestala hiciésemos al azar entre todos los habitantes de la comunidad deCantabria, sin discriminación entre la costa o el interior, las ciudades o lospueblos, las respuestas serían todavía más variopintas. Con lo cual, yadeducimos que la apreciación del paisaje depende de la sensibilidad, de lacultura y de la forma de vida de cada observador. Esta diferencia deapreciaciones sobre el paisaje ha hecho que debamos poner unas bases encomún para considerar sus valores y de esta manera comenzar aprotegerlo.

El paisaje es un término moderno, que no ha existido ni en todas lasépocas ni en todas las culturas y admite muchísimas definiciones, desdelas más sencillas como «composición de formas naturales y formasconstruidas por el hombre» hasta definiciones más complejas como la queencontramos en la Guía para la elaboración de Estudios sobre el MedioFísico, que lo califica como «la manifestación externa, imagen, indicador oclave de los procesos que tienen lugar en el territorio, ya correspondan alámbito natural o humano» o bien la dada en el Convenio Europeo delPaisaje «área tal como la percibe la población, el carácter de la cual es elresultado de la interacción de factores naturales y/o humanos»

Brenarromán y Pico Colina.Parque Natural de los Collados del Asón.

La Unesco también aporta su definición dándole una prioridad cultural al paisaje.«Representa el trabajo conjunto de la naturaleza y el hombre, siendo ilustrativode la evolución humana bajo la influencia de las condiciones naturales, sociales,económicas y culturales». De esta manera en 1992 esta organización reconociópor primera vez una figura legal de protección del paisaje.

La influencia del ser humano, por tanto, se encuentra en la práctica totalidadde todas las definiciones del paisaje, dejándose ver sobre todo en el medio ruraldonde los espacios se han ido transformando en función de sus pobladores,dotando a los paisajes de un fuerte componente cultural y etnográfico yconstituyendo por tanto, un legado de sus tradicionales modos de vida.

En el año 2000, España firma el Convenio Europeo del Paisaje, adoptadopor el Consejo de Europa en la ciudad de Florencia (Italia). Dicho convenioentró en vigor el 1 de marzo de 2004, una vez que fue ratificado por másde 10 Estados. España acaba de ratificarlo hace pocas semanas.

El Convenio supone un antes y un después en las políticas sobre el paisajeya que se trata del primer tratado internacional dedicado exclusivamenteal conjunto de dimensiones del paisaje europeo.

Sus principales contenidos son:

Considera tanto los espacios naturales, como los rurales, urbanos yperiurbanos, además no contempla sólo los paisajes excepcionales, sinotambién los cotidianos o degradados.

Cordillera Cantábricadesde Herada.

Propone unas medidas generales encaminadas a definir y aplicarpolíticas dirigidas a la protección, gestión y ordenación del paisaje através de la creación de una figura jurídica y de su integración en laspolíticas de ordenación Territorial y Urbanística, así como, en todasaquellas que puedan tener un impacto directo o indirecto sobre elpaisaje: cultural, medioambiental, agrícola, social, económica, etc.

Plantea también el trabajo y la participación de la población local,siendo necesario realizar actuaciones de sensibilización de la poblaciónrespecto al paisaje, en la formación y educación de profesionales en lamateria, identificación y calificación de los propios paisajes de cadaterritorio, definición de objetivos de calidad paisajística y aplicación depolíticas en materias de paisaje.

Debido a la distribución de las competencias en España, las ComunidadesAutónomas tienen una clara responsabilidad en la aplicación de estaspolíticas del paisaje que establece el Convenio, lo que hace que se estétrabajando en la materia.

En Cantabria, sólo 160.000 has de nuestro territorio o lo que es lo mismo el30% de nuestra superficie, están defendidas con alguna de las figuras queexisten de protección, de hecho la Ley 4/2006 de Conservación de laNaturaleza que el Gobierno Regional aprobó en el año 2006, protege el paisajede forma parcial afectando sólo a las zonas declaradas de parque natural. Estoha hecho que el Gobierno cántabro se proponga redactar una normativaespecífica de ordenación y gestión del paisaje que abarque su totalidad.

El paisaje como recursoLa nueva visión del paisaje nos ha llevado a entender que estamos ante unrecurso natural, social, económico y cultural que necesita una correctagestión para asegurar un desarrollo sostenible y la permanencia de lapoblación en un territorio. La conservación del paisaje en general, no sólomantiene riqueza y diversidad paisajística, sino que además, contribuye ala preservación de valores ambientales -protegiendo ecosistemas, fauna yflora- conserva patrimonios culturales -siendo testigos de actividadeshumanas del pasado -, aumenta la calidad de vida de sus habitantes -através de su salud y de su bienestar-, y además supone un indiscutiblerecurso económico a través de numerosas actividades: turismo,urbanismo,etc.

Cuando protegemos un paisaje estamos protegiendo todo lo natural y lohumano que hay en él, cuando deterioramos un paisaje estamos perdiendoparte de lo humano y natural que hay en él.

Por todo ello, los valores del paisaje hoy en día constituyen uno de losprincipales activos del medio rural, pudiéndose desarrollar en base a élactuaciones o proyectos de desarrollo rural integral, puesto que el paisajerefleja a menudo técnicas concretas de utilización sostenible del territorioen función de las características del medio natural. Sin embargo, enmuchas ocasiones se encuentra en situación de infravaloración o peligro dedegradación que compromete la puesta en valor y aprovechamiento delmismo para el desarrollo de estas zonas.

Ogarriodesde Mentera.

La importancia del paisaje la refleja muy claramente el Observatorio delPaisaje de Cataluña, el cual otorga una serie de valores al paisaje:estéticos, ecológicos, productivos, históricos, de uso social, mitológicos eincluso religiosos y espirituales. Como se ha comentado con anterioridad,el paisaje refleja la evolución de una sociedad junto con el territorio queha habitado.

Todos estos valores llevan a la creación de la figura del paisaje comorecurso, desarrollando, con su conservación, un motor económico de lasáreas rurales relacionado con el turismo, actividades recreativas ydeportivas, uso residencial, etc y contribuyendo además de manera directae indirecta a la creación de nuevos empleos:

Actividades profesionales de alta cualificación (planificación paisajística,estudios de impacto ambiental, etc.)

Empleos relacionados con la puesta en valor e interpretación delpaisaje.

Empleos relacionados con la restauración o rehabilitación de espaciosdegradados.

Empleos relacionados con el mantenimiento de espacios de relevanciapaisajística.

Empleos relacionados con la gestión de paisajes agroganaderostradicionales.

Marismas del Asónen Limpias.

El complejo entramado del paisajeComo bien sabemos, los paisajes que encontramos en la comarca no sontodos iguales, sino que en ella podemos diferenciar zonas con paisajesdistintos, todos ellos en función de los elementos que componen cada paisaje.De esta manera, y como veremos más adelante con mayor profundidad, loselementos que dan carácter a un paisaje pueden ser de índole natural yantrópico-cultural, si bien, en un territorio tan humanizado como el nuestro,estos elementos que componen el paisaje se encuentran en estrecha relacióndesde el comienzo de la ocupación del espacio por el ser humano.

De los elementos que componen el paisaje, comenzaremos hablando delos naturales. Entre esos elementos naturales podemos encontrar quepueden ser abióticos (no vivos) o bióticos (vivos).

Entre los elementos abióticos se encuentran el relieve y el sustratolitológico o el tipo de material del que se compone el relieve. Un relieveque puede estar basado en cadenas montañosas, sierras, fondos devalle,…etc. Además, también están la altitud, la orientación del relieve, elagua o el clima, por ejemplo. Todos ellos, de una manera u otra, poseeninfluencia y capacidad de modelado de un determinado paisaje. Todossabemos distinguir que no es igual un paisaje de alta montaña (relieveabrupto, altas precipitaciones, temperaturas bajas...) que uno de marismapróximo a la costa.

Entre los elementos bióticos tenemos la vegetación y la fauna. Sin duda, yespecialmente el primero por ser el más visible, son elementosfundamentales de un paisaje. No es igual un paisaje de un hayedo que unoen el que dominen los brezales, por poner un ejemplo que se da en nuestracomarca.

Por otro lado tenemos los elementos antrópico-culturales, que son elresultado de la intervención del ser humano sobre el territorio. El paisajede nuestra comarca, y prácticamente de toda Europa Occidental, es elfruto de la interacción entre el hombre y los recursos naturales que lerodean: el paisaje es fruto del paisanaje. Las diferentes actividades que sehan venido dando sobre el territorio desde la prehistoria han idomodelando nuestros paisajes: actividades agrarias y ganaderas(construcción de mieses, prados, zonas de pastoreo en zonas altas,extracción de leñas, deforestación...), actividades industriales clásicas(molinos, ferrerías, fraguas...) y modernas (polígonos industriales,canteras...), obras públicas (puentes, carreteras...), tipo de poblamiento(por ejemplo el pasiego es un claro ejemplo en nuestra comarca) yarquitectura tradicional (como por ejemplo la sobana o la indiana ennuestro territorio) e incluso las actividades de culto o creenciales (ermitade las Nieves, Iglesia de Santa Marina en Udalla, por poner algún ejemplo)son elementos fundamentales de nuestros paisajes comarcales, elementossin los cuales nos sería imposible comprender y observar nuestro territorio.

Como se ha comentado, todos estos elementos (naturales y antrópicos) poseenfuertes interacciones entre ellos. Lo que si que se puede asegurar es que entodas las posibles interacciones, la mano del hombre va a estar presenteineludiblemente. Es interesante conocer como interactúan unos elementos conotros sobre el territorio llegando así a definir el paisaje. Un ejemplo es lainteracción entre clima y relieve. En función del sustrato que tienen las montañasy los valles la acción del clima configurará un tipo de paisaje u otro. Vegetacióny relieve es otra de las relaciones interesantes a analizar pues la orientación yaltitud de una montaña puede limitar el desarrollo de unas especies devegetación frente a otras, lo que determina un tipo de paisaje u otro, comosucede con el encinar de nuestra comarca, desarrollado fundamentalmentesobre suelos calizos. Otro ejemplo es la localización de los primerosasentamientos medievales en la comarca (por ejemplo Socueva o Mentera-Barruelo), ubicados en laderas sobre el río, siempre con una buena orientación.La localización de las actividades agrarias también se ve condicionada por loselementos naturales del paisaje, puesto que las mieses, los terrenos de cultivomás productivos, se localizan en zonas llanas de fondos de valle próximas a losríos, mientras que los prados quedan en las laderas y las zonas de pastoreoextensivo del ganado en las áreas de cumbre, las de mayor altitud. Como vemos,estos elementos constitutivos del paisaje no son compartimentos estancos, sinoque el paisaje es un complejo entramado de relaciones entre ellos.

Del análisis de estos elementos en nuestro territorio comarcal, y en funcióndel peso de cada uno de ellos, su presencia, su grado de intervención, etc,hemos podido identificar diferentes áreas de paisaje, que no son más quepartes de nuestro territorio con un carácter propio, caracterizadas por unconjunto de elementos, que como se ha comentado, contribuyen a hacerque un paisaje sea diferente uno de otro. Las características de las áreasde paisaje que hemos determinado vienen dadas por la combinación de lasformas de relieve y el clima, la vegetación, los usos del suelo, laorganización del espacio y sus factores históricos; en definitiva, de lasrelaciones que se han dado entre el medio natural de ese espacio y los

habitantes que ha tenido a lo largo de los tiempos.

Montaña OrientalCostera.

El paisaje, un activo dinámicoA lo largo de todo este guía se ha venido haciendo hincapié en la capacidadque el ser humano posee para intervenir y modelar un paisaje. De estamanera, el paisaje de la comarca no es una foto fija que podamos hacerahora y seguirá de la misma manera dentro de 50 años, si no que elpaisaje se encuentra en constante evolución. Si nos remontamos a épocasprehistóricas, el paisaje de la comarca era muy distinto al actual, hasta elpunto que si pudiéramos observar una imagen de la época veríamos comoel bosque cubría la práctica totalidad del territorio. Con el aumentopoblacional y la aparición de los primeros ganaderos-agricultores comenzóa intervenirse al paisaje, roturándose pequeñas áreas de bosque paraobtener zonas de cultivo y pasto. Un buen ejemplo de esto lo tenemos enlos Ilsos (menhires) presentes en la zona del Alto de Las Nieves, queservían para delimitar zonas de pasto de diferentes clanes.

Si continuamos avanzando en la historia, en laEdad Media se producen también importantestransformaciones del paisaje, debido alensanchamiento de los terrazgos agrariosligados a las pequeñas aldeas que ibanapareciendo por todo el territorio, si bien lospoderosos monasterios que dominaban estazona, el de Oña fundamentalmente, aseguraronla conservación de extensas áreas de bosquecomo reservorio de caza. Es en esta épocacuando comienza el proceso de construcción delos suelos de las mieses que conocemos hoy endía, elemento tan característico y amenazadopor los procesos de expansión urbana denuestro paisaje. Estas mieses se instalaronsobre los fluvisoles, suelos llanos de fondo devalle originados por la deposición de la materiaorgánica que los ríos llevan en suspensión.Sobre ellos fue construyéndose una fértil capade suelo, fruto de la descomposición de lamateria orgánica (matorral, brezales, etc)obtenida en los procesos de «rozas» de losmontes para su conversión en prados. De estamanera se obtuvieron terrenos muy fértilesdonde cultivar todo tipo de legumbres, hortalizasy cereales. Este paisaje de mieses cultivadashoy en día prácticamente ha desaparecido denuestra comarca, fruto del abandono del campoy de la cada vez mayor presión urbanística,quedando las mieses existentes como zonas deprados de siega para el ganado.

Villaverde yHazas de Soba.

A partir del S. XVI y posteriores también se da un fuerte proceso de cambiode nuestro paisaje, ligado sobre todo a la aparición de las primerasindustrias, en forma de ferrerías y de fábricas, como la de anclas deMarrón o la Real Fábrica de armas de La Cavada y al fuerte desarrollo delos astilleros de la región. Estas fábricas y astilleros requerían una grancantidad de madera, para la obtención de carbón como combustible lasprimeras y como materia prima para la construcción de barcos lossegundos. Ello origina cambios drásticos en el paisaje, llevando a unaprofunda desaparición de las masas boscosas comarcales.

Este fenómeno, junto con la expansión de la colonización pasiega puededecirse que han sido dos de los grandes modeladores del paisaje comarcal.El otro lo ha constituido la gran especialización en ganadería bovina lecherade la comarca, que contribuyó a construir el paisaje de prados tandominante en nuestra comarca.

Hoy en día, con el abandono de las prácticas ganaderas tradicionales elpaisaje también se encuentra en proceso de cambio, donde los prados, enocasiones, están perdiendo terreno en beneficio de bosque autóctono enlas zonas más altas y de cultivos industriales intensivos, como el eucalipto,en las más bajas.

Los paisajes de nuestra comarca

Alto Asón y Sierra del Hornijo

Esta área paisajística se localiza en la zona más interior de la comarca,al sur de la misma, correspondiéndose, en gran medida, con el área dela Cordillera Cantábrica que separa nuestra comarca de la de LasMerindades, en Burgos.

El paisaje de esta zona se encuentra claramente influenciado por elrelieve y las condiciones climáticas que se dan en ella. Si hay algodesde el punto de vista natural que defina el paisaje de esta zona sonlos glaciares y la roca caliza. Los primeros se desarrollaron en la épocacuaternaria en los valles de Bustalveinte y Hondojón, dentro del ParqueNatural de los Collados del Asón, siendo elementos que marcanineludiblemente el paisaje de esta zona los elementos heredados deesta glaciación, como los circos, cubetas, umbrales y morrenasglaciares. Entre los circos destacan el de Bustalveinte y el de Hondojón,mientras que entre las morrenas hay que reseñar la del Alto de laPosadía, en la confluencia de estos dos glaciares, y la del Collado delAsón, situada a poco más de 600 metros sobre el nivel del mar, lo queindica que estos glaciares fueron los que se desarrollaron a menoraltitud en la Península Ibérica.

La roca caliza es elemento también imprescindible en estos dosmacizos calizos (Collados del Asón y Sierra del Hornijo), puesto que laacción del agua sobre la misma ha modelado toda una serie de formas(lapiaces, dolinas) que caracterizan el paisaje que en ellosencontramos. En este sentido, y dentro de la Sierra del Hornijo,podemos citar, por su gran belleza paisajística el poljé del HoyoMasayo. Pero esta zona no solo se caracteriza por el paisaje exterior,sino también por el que no vemos a simple vista el subterráneo, frutotambién de la acción del agua sobre la roca, que ha dado lugar aimportantes desarrollos de cuevas, simas y torcas.

Pero este paisaje no solo se caracteriza por estos rasgos, sino quetambién es resultado de la adaptación del ser humano al medio y delaprovechamiento tradicional de los recursos naturales. De gran bellezaes este paisaje construido por el ser humano, derivado de lacolonización pasiega que se dio en estas montañas, que ha dado lugara zonas en las que aparece un mosaico de gran belleza compuesto porprados, cabañas, muros y callejas que tanto distinguen a esta culturaancestral. Especialmente bello es el paraje de Rulao, debajo del Puertode La Sía, en el Parque Natural de los Collados del Asón, uno de losmejores ejemplos del paisaje de colonización pasiega de todo estaárea. No debemos olvidar tampoco los pueblos pasiegos de Calseca yValdició, que si bien se encuentran ubicados en el valle del río Miera,pertenecen a nuestra comarca. Ambos constituyen también unaexcelente muestra del paisaje pasiego en nuestro territorio. La

influencia humana en el paisaje también se deja sentir en las zonasaltas, en las que encontramos brezales, fruto del pastoreo que se vienedando sobre ellos desde hace siglos.

La convivencia de las actividades humanas y el medio natural enarmonía ha posibilitado que en este paisaje aparezcan hoy en díaimportantes extensiones de bosque autóctono, la mayor parte de elloshayedos, que hacen que el otoño en estas montañas sea unespectáculo multicolor, aunque la primavera no lo es menos debido a laexplosión de vida que se da en ellos. Los encinares, debido al caráctercalizo también se desarrollan siendo un elemento que contribuye alcarácter del paisaje, fundamentalmente en la Sierra del Hornijo.

No debemos olvidarnos de la fauna, especialmente de la avifauna,parte también esencial de este paisaje, la cual se encuentra ligada a laroca caliza y la tradicional ganadería extensiva de la zona. De estamanera, buitres leonados, alimoches, águilas reales o halconesperegrinos son algunas de las especies que aves que aquí podemosencontrar. Más difíciles de observar son los diferentes mamíferos quepueblan estos bosques, si bien tampoco es infrecuente tener unencuentro con algún corzo o jabalí.

Brenavinto.Parque Natural de los Collados del Asón.

Valle de Soba

El valle de Soba constituye, desde el punto de vista geográfico, paisajístico,humano y natural un área con un carácter propio dentro de nuestroterritorio. El paisaje de este valle se encuentra claramente caracterizado porla ocupación histórica que ha tenido este territorio desde épocas medievales,en donde la familia noble de los Velasco tuvo un papel protagonista,quedando hoy en día como elemento simbólico del paisaje sobano en estesentido la Torre de Quintana, que fue habitada por esta familia.

Se trata de un valle eminentemente de origen fluvial, donde el río Gándaralo divide en dos laderas claramente diferenciadas: la ladera norte, que secorresponde con la ladera sur de la Sierra del Hornijo, y la ladera sur, quees la vertiente norte de la Cordillera Cantábrica, que separa este valle delos vecinos burgaleses. Este relieve, junto con el clima, han condicionadofuertemente la ocupación histórica del lugar, y por tanto, el paisaje, demanera que los pueblos del valle se distribuyen por ambas laderas, en laszonas más favorables, si bien no todos poseen las mismas condiciones,recibiendo, por ejemplo, algunos más horas de sol que otros.

De esta manera en el paisaje actual del vallehay que destacar el complejo paisajísticoformado por los pueblos tradicionales sobanos,los espacios para la agricultura, los prados deorientación ganadera y los espacios forestales.En cuanto a los primeros, los pueblos sobanosson elemento que le dan carácter propio a estepaisaje, pues la arquitectura popular sobana esúnica del valle, siendo las casas con «patín»(una especie de porche) y galería lascaracterísticas mas definitoria de estaarquitectura. Entre estas casas, y dentro delconjunto del pueblo, podemos aún encontrar loshuertos tradicionales donde se cultivabanalimentos para toda la familia, cerrados por lastípicas tapias de piedra. Sin duda, merece lapena darse un paseo y disfrutar de este paisajede núcleos rurales sobanos por cualquiera de lospueblos del valle: Rozas, San Pedro, Regules,Aja, Hazas, Villaverde, San Martín...

Las zonas más cercanas a los pueblos, vegas ymieses, siempre han constituido las áreas con unaprovechamiento agroganadero más intenso,siendo los espacios donde se cultivaba paraobtener alimentos tanto para el ser humano comopara los animales.

El entramado del paisaje sobano lo completan los bosques autóctonos, quetambién son un elemento destacable del hermoso paisaje sobano,intercalándose, en muchas ocasiones con los prados para el ganado, lo queaumenta la diversidad paisajística y la belleza del mismo. Estos bosquesen ocasiones son mixtos, otras veces robledales y en las zonas dondeaflora más la caliza, domina el encinar.

Por último, un hecho a destacar del paisaje sobano, que no se dio en elvalle principal de Soba, el del Gándara, si no mayoritariamente en lazona de Soba perteneciente al valle del Miera fue la deforestación delbosque autóctono durante los siglos XVII y XVIII para el abastecimientode combustible para la Real Fábrica de armas de La Cavada y materiaprima para los Reales Astilleros de Guarnizo. Esto, junto con laocupación pasiega en siglos pasados, modificó por completo el paisajeexistente, construyendo el paisaje pasiego, desprovisto de arboladoautóctono, que en esta zona podemos contemplar en la actualidad.Elementos heredados de este proceso y que marcan rasgosfundamentales de este paisaje son la actual finca y casa conocidas comola «Casa del Rey», desde donde se realizaban las tareas administrativasde tala de estos montes y el resbaladero de troncos de Lunada, pordonde descendían los troncos hasta el río Miera camino de Liérganes yLa Cavada.

La Gándara de Soba.

Valle de Ruesga

El Valle de Ruesga se localiza en el curso medio-alto del río Asón. Ocupaun amplio y llano valle de origen fluvial, flanqueado por dos importantessierras calizas que cierran el valle al norte y el sur: al norte la Sierra de laAlcomba y Pico Rubrillo y al sur la imponente Sierra del Hornijo.

El paisaje es el propio de un fondo de valle fluvial, donde los fértiles suelosde originados por la deposición fluvial y el trabajo constante de construcciónde suelo a base de «rozas» en los montes próximos y su deposición comomateria orgánica en estas zonas de fondo de valle, ha hecho que sobre ellosse hayan dado históricamente intensos aprovechamientos agrícolas yganaderos. Hoy en día el paisaje que podemos observar en estas mieses seencuentra caracterizado por su dedicación casi exclusiva a praderas para elganado. Si echáramos la vista varias décadas atrás, a mediados del siglo XXeste paisaje cambiaría significativamente, puesto que estas mieses estabanocupadas por amplias extensiones de cultivos, como la alubia, la patata oel maíz. Como se dice, hoy en día esto ha desaparecido, siendo el paisajedominante el de las mieses dedicadas a praderas.

El poblamiento también define el paisaje del valle, puesto que éste se produce de manera concentrada en pequeños pueblos (Valle, Riba, Ogarrio), quedando alrededor de éstos una orla de terrenos agrícolas que en la mayor parte de los casos se corresponden con las pocas huertas aún existentes.

El paisaje del valle queda completado por lasladeras de los macizos que lo flanquean. Laladera de la Sierra del Hornijo queda ocupadaprácticamente en su totalidad por el espacioforestal correspondiente con el encinarcantábrico, lo que produce un gran contrastecon las praderas y mieses del fondo de valle.Estos encinares siempre tuvierontradicionalmente una gran importancia comopara la economía local del valle, siendo fuentede leñas para calentar las casas, además deser una madera muy apreciada como materiaprima para la realización de distintos enseres yutensilios para el campo. La aparición del gascambió la fisonomía de estos bosques, y portanto del paisaje, puesto que debido alabandono que se produjo en ellos (la leña yano era tan necesaria) pasaron de ser unbosque abierto y accesible a la actualconfiguración de monte bajo, enmarañadoe inaccesible que posee este elemento del

paisaje del Valle de Ruesga en particular y de la comarca en un sentidomás amplio.

La otra ladera, del macizo de La Alcomba y Pico Rubrillo también estádominada por la caliza y la presencia de encina en sus zonas más altas yagrestes, si bien en la zona más próxima al valle encontramos un paisajecaracterizado por la presencia del asentamiento más antiguo del valle, elde Mentera-Barruelo. Éste se localiza en una pequeña loma, bien soleada,lugares donde, por lo general, se produjeron los primeros asentamientosmedievales de la comarca. Aquí la diversidad paisajística es mayor,alternándose un mosaico de prados cerrados por pequeñas orlasforestales, que se entrelazan con pequeñas manchas de bosque mixto,donde especies como el roble o el castaño son frecuentes de ver.

Sin duda el lugar conocido como La Sota, entrelos pueblos de Valle y Mentera-Barruelo, esdigno de ser visitado y poder pasear por algunode los caminos rurales tradicionales quecomunicaban estos dos núcleos.

Amanecer invernal en elvalle de Ruesga.

Matienzo

El valle de Matienzo, perteneciente al municipio de Ruesga, se localiza acaballo entre el valle del río Asón, los valles de Aras y la zona trasmerana.Se trata de uno de los mejores ejemplos de poljé que poseemos enEspaña, habiendo sido declarado Punto de Interés Geológico. Poljé es unapalabra serbocroata que significa campo cultivado, no siendo más que unvalle rodeado de paredes calizas, formado por la disolución de éstas comoconsecuencia de la acción del agua. Como bien cita el acerbo serbocroata,los poljés suelen ser terrenos muy aptos para la agricultura, puesto queson suelos muy ricos en minerales a causa de la disolución de la caliza.Debido a esta singularidad, Matienzo puede considerarse como un áreageográfica y paisajística diferenciada en nuestra comarca. Su paisaje nodifiere en demasía de lo que podemos observar en el valle de Ruesga, sibien en Matienzo la encina aparece con mucha menor frecuencia.

El fondo de valle se encuentra ocupado por los diferentes pueblos queencontramos en el poljé, si bien en términos paisajísticos lo que más llamala atención son las amplias praderas que encontramos en él. Sin duda las condiciones favorables del relieve (un fondo devalle prácticamente llano) y el clima apropiado,unido a la gran humedad del lugar, debido a losnumerosos ríos y arroyos que por él discurren,han contribuido a que el uso ganadero del vallehaya sido y sea aún muy intenso. Se trata de un entramado de prados, donde el color verde intenso domina la mayor parte del año,tanto de diente como de siega, destinados a laalimentación de la ganadería bovina deespecialización lechera, la más abundante enMatienzo. Este entramado paisajístico donde elprincipal protagonista son los prados se completacon pequeños bosquetes mixtos de arboladoautóctono (robles, avellanos, fresnos...),asociándose a los ríos y arroyos pequeñas hilerasde bosque de ribera. Precisamente estosriachuelos, y debido al carácter permeable delsustrato calizo, desaparecen en sumideros trasun breve recorrido, para modelar otro paisaje enMatienzo, el paisaje que no vemos, elsubterráneo. De nuevo ligado a la caliza,Matienzo es conocido por la gran cantidad decuevas y simas que alberga, siendo uno de los sistemas subterráneos más conocidos el Sistema de los Cuatro Valles, que Matienzocomparte con los municipios de Solórzano yVoto.

Volviendo a la superficie, el paisaje de las laderas calizas de este valle estádominado por la roca desnuda de vegetación, si bien en las zonas másbajas y menos agrestes de las mismas tampoco es infrecuente encontraralguna que otra mancha de encinar.

Un elemento más del paisaje de Matienzo lo constituye la niebla, nadainfrecuente en este valle, especialmente en días despejados. En un díadespejado, y desde el mirador del puerto de Alisas, por ejemplo, podremosobservar como una densa niebla cubre todo el fondo de valle de este poljéhasta el mediodía, debido al carácter tan cerrado del mismo y a lahumedad en él concentrado. Un gran espectáculo paisajístico constituye elobservar al anochecer cómo el aire húmedo del mar se va introduciendopor el alto de Fuente Las Varas hasta cubrir el valle en su totalidad.

Niebla sobre Matienzo.

Valle medio del Asón

Esta área paisajística se corresponde fundamentalmente con el municipiode Ramales de La Victoria, que separa el valle del bajo Asón del curso altodel río. Se trata de una zona intensamente transformada por la ocupaciónhumana que ha venido dándose desde la prehistoria, siendo esta zona muyconocida por los importantes yacimientos prehistóricos presentes en ella:cuevas de Covalanas, Mirón, La Haza, etc.

Desde el punto de vista del relieve, el paisaje se encuentra marcado por elvalle fluvial modelado por el río Asón y su afluente, el Gándara. Este haceque encontremos un típico paisaje de valle con fondo más o menos llano yterrenos fértiles, flanqueado por laderas que contribuyen a dar carácter aeste paisaje. Por un lado, y separando esta zona del valle de Sobaencontramos la Sierra del Hornijo, macizo calizo tapizado por extensosencinares cantábricos, que, al presentar una hoja perenne, siempre dancolor verde al paisaje. Sin duda, un icono paisajístico de primer ordenrelacionado con el relieve de esta zona lo marca el Pico San Vicente, queperteneciente al vecino municipio sobano, se erige majestuoso sobre elpueblo de Ramales de La Victoria. Éste paisaje calizo encuentra sucontinuidad en el paso de la Pared del Eco, otro elemento paisajístico deenorme importancia en esta área, debido a la cantidad de yacimientosarqueológicos que concentra y citados con anterioridad. Sin duda, y debidoa su carácter estratégico como lugar de paso unido al dominio de todo elvalle que se tiene desde este paso hicieron de este recodo un lugar muyapropiado para el asentamiento de comunidades prehistóricas. Como se hadicho, aquí continúa el paisaje de la caliza y la encina, que se extienden alo largo de todo el monte del moro. Para poder apreciar bien la belleza deeste paisaje conviene acercarse hasta el barrio de Guardamino, un espléndido mirador de toda esta zona, desde donde puede apreciarse la Sierra del Hornijo con el Pico de San Vicente al frente, el paso de la Pared del Eco y el Monte del Moro, además del río Asón y la otra sierra que cierra el valle, conocida popularmente por los ramaliegos como «la sierra». Además, el alto del castillo, en Guardamino en un paisaje con un gran significado histórico, puesto que un pequeño monumento recuerda la batalla que durante la I Guerra Carlista aquí tuvo entre los días 17 de abril y 12 de mayo de 1.839. Al frente de las tropas liberales se encontraba el general Espartero, mientras que las carlistas eran comandadas por el general Maroto. Después de una cruenta batalla, las tropas Liberales obtuvieron el triunfo, quedando el pueblo arrasado por el fragor bélico. Desde entonces, Ramales es conocido como Ramales de la Victoria, debido a la importancia

de esta batalla, que supuso para los Carlistas tener que abandonar el valle deCarranza, perder la fundición de cañones de Guriezo y abandonar Cantabria,perdiendo de esta manera la oportunidad de invadir Asturias y extender laguerra hasta Galicia. Todo ello culminaría, más tarde, el 31 de agosto de1.839, con el famoso abrazo de Vergara entre los generales Espartero yMaroto, que sellaba la paz entre los dos bandos y ponía fin a la guerra.

El paisaje de las demás laderas que cierran el valle, la de Guardamino y «lasierra» posee el carácter ganadero y forestal que el aprovechamiento que se hadado sobre ellas les ha conferido. El entramado de prados y pequeños bosquetesmixtos es lo más característico del mismo, si bien en la zona donde el río seencaja algo más y el fondo de valle se encuentra ocupado únicamente por el ríoAsón, después del barrio de Cubillas y en dirección a Gibaja, las laderas aparecenocupadas prácticamente solo por eucaliptos. Después de esto nos adentramosen el valle de Gibaja, modelado por el Asón y uno de sus principales afluentes,el Carranza. Es un valle muy similar al anterior, cubierto por prados para elganado, apareciendo las encinas en las áreas más calizas, mientras que eleucalipto también se encuentra muy presente en las laderas del valle.

Sin duda esta área paisajística es, junto con las más próximas a la costa,una de las más transformadas por la acción del hombre, y donde los fenómenos urbanísticos también poseen gran influencia en el paisaje de la misma.

Vegacorredor.Ramales de la Victoria.

Valle de Udalla

El valle de Udalla se erige como una zona de transición, encontrándosesituada a caballo entre los municipios de Ampuero y Rasines. Se trata deun área no demasiado grande, que aparece flanqueado por laderas dependientes suaves y formas alomadas, extendiéndose por el tramo mediodel valle del Río Asón. Precisamente este río, que cruza de sur a norte estepequeño valle, junto con el trabajo de construcción de suelos desarrolladopor el ser humano, ha contribuido a la formación de uno de los elementosnaturales más llamativos del paisaje, las mieses.

El clima, al igual que en toda la comarca, en combinación con la forma deaprovechamiento humano de esta zona, nos da un rasgo de paisajecaracterístico, como es el intenso color verde de los prados, tanto de dientecomo de siega. Por tanto tenemos que los elementos que marcan el paisajede este valle son los prados, el río con su bosque de ribera, las mieses juntoa él y las formas suaves y alomadas de las elevaciones adyacentes al fondodel valle, ocupadas por pequeñas manchas de arbolado autóctono, perodonde dominan mayoritariamente los eucaliptos. De esta manera, de nuevovemos como la intervención humana ha definido el paisaje.

Éste también se encuentra determinado por el poblamiento, marcado por lapresencia de pequeños núcleos como Coterillo, la Bárcena de Udalla, Udalla,o Bulco, siendo muy característico del paisaje de los mismos la arquitecturapopular, unido a la presencia de ellos pequeños huertos donde se cultivanalubias, patatas y todo tipo de hortalizas, que hacen que ésta sea de unade las estampas paisajísticas más peculiares de esta zona. Dentro de estepaisaje «urbano» hemos de destacar también la presencia de diferentescasas de indianos, además de la Iglesia de Santa Marina de Udalla, untemplo del S.XIV que combina elementos románicos con góticos.

Pero no debe obviarse que el icono paisajístico de este valle es el río Asón,muy aprovechado por ser lugar donde la pesca de la trucha y el salmón eramuy frecuente y que hoy en día se sigue manteniendo con mucho menoraporte de individuos. En relación con el paisaje fluvial se encuentra lautilización de la fuerza del agua del río para producción de energía eléctrica,existiendo una pequeña central en el barrio de coterillo, además de varios molinos

para moler el cereal abandonados. Este aprovechamiento del río se

hace más evidente si nosfijamos en la estructura del

cauce del mismo. El río Asónaparece jalonado de pequeños

represamientos y presas queantiguamente tuvieron un uso

más importante en cuanto aproducción de energía y que

son elemento distintivo de este paisaje ligado al agua.

El río Asón a su paso por Udalla.

El bajo Asón

Se ubica en el tramo medio-bajo del río Asón aglutinando parte de losmunicipios de Rasines, Ampuero y Limpias. Desde el punto de vista del relieve,como elementos que marcan el paisaje, tenemos las zonas llanas de Rasinesy Ampuero, alineaciones de relieve suave como las que separan a Rasines delrío Asón y las sierras que separan a Ampuero y Rasines de Limpias y Guriezo.

Al igual que otras áreas de la comarca, el paisaje de esta zona ha sidoconstruido por la intensa ocupación humana que se ha dado sobre lamisma. El aprovechamiento agrario queda patente en zonas como Rasines,donde se pueden ver fincas y prados para pasto del ganado y para cultivosde autoconsumo (huertas). De esta manera un elemento más de estemosaico son las explotaciones agrarias que salpican el paisaje cubierto deun manto verde de prados, especialmente en Rasines. El paisaje de lasladeras y zonas más abruptas de este valle se encuentra caracterizado,además de por prados, por masas de encinar cantábrico, en las zonas deOjébar y en lugares como Las Entradas, El perujo y Hoyomenor enAmpuero. Además, la mano del hombre también se deja sentir en formade eucaliptos, marcando éstos grandes porciones de esta área paisajística,debido a las bajas cotas de altitud y la idoneidad del clima.

El aprovechamiento residencial es otro de los que podemos señalar, ya queen este bajo Asón está cobrando una importancia cada vez mayor elaprovechamiento urbanístico-residencial. Esta ocupación humana delterritorio viene dada en este zona, al igual que en todo el conjuntocomarcal, desde épocas inmemoriales, como así lo atestiguan los restosprehistóricos y romanos encontrados en las inmediaciones de Rasines.

La influencia humana en el paisaje se puede contemplar también si nosfijamos en las infraestructuras y en las vías de comunicación: polígonos ynaves industriales como los de Marrón en Ampuero o la vía rápida quecomunica la costa con el interior del valle son dos buenos ejemplos.

El bajo Asón.

La Marisma

Esta área marismeña se localiza en el borde litoral de la comarca del Asón-Aguera-Trasmiera, ocupando espacios de Voto y Limpias, aunque hay quedecir que la mayor parte de superficie correspondiente a espacio demarisma se encuentra limitando con los municipios de Laredo, Santoña,Bárcena de Cicero o Colindres. Dentro de nuestra comarca la marisma seencuentra entre los municipios de Limpias y Voto teniendo a los ríos Asóny Clarín como elementos primordiales que han contribuido a formar esteárea Precisamente las mareas hacen que la configuración del paisaje seacambiante gradualmente en función de las pleamares y las bajamares. Ensituación de pleamar esta área de marisma llega a encontrarse anegadaquedando en la superficie algunas especies de plantas que parecen flotarsobre la superficie. Sin embargo durante las bajamares quedan aldescubierto los fondos del humedal, que son aprovechados por lasdiferentes especies de aves acuáticas para su alimentación, siendo, estemomento, una característica peculiar de este paisaje.

En esta área húmeda la ocupación humana tiende a situarse en los bordesde la marisma. Resulta llamativo en la configuración del paisaje laaparición de grandes llanuras de pastos que fueron ganadas al mar y a lasrías. Los procesos de desecación de este área es uno de los rasgosdefinidores del paisaje. Para desecar esas zonas de marisma se construíanmuros y pequeños diques aislando la zona a desecar del humedal. De estamanera poco a poco se le iba ganando terreno a la marisma. En ocasioneses frecuente encontrar plantaciones de eucalipto que serían utilizadoscomo aceleradores del proceso de desecación. Este proceso de desecacióngenera cambios en el paisaje, aumentando en mayor medida la cantidad de espacios de pastos y disminuyendo la superficie de fangos.

A estos nuevos espacios que se van a unir al paisaje se lesdenomina polders, concepto que hace referencia a zonasigualmente desecadas en lugares de Holanda. Estos terrenos eranutilizados para el cultivo de especies que servían para alimentopara el ganado y para producir alimentos de autoconsumo. Ademásse desecaron áreas para crear nuevas zonas de pasto para lacreciente cabaña frisona que hace unas décadas se dio y que aúnhoy en mucha menor medida existe en la zona. Claros ejemplosde esto los podemos encontrar en el «viar», entre Limpias y elnúcleo de población de Junta de voto conocido como Angustina. Nosólo la actividad agraria encontró acomodo en estos espacios demarisma que configuran esta área paisajística, sino que también laactividad industrial buscó en este entorno su lugar. Sirvan comoejemplo la nave industrial que se puede encontrar en el barrio deCostamar en Limpias, (antigua Magefesa), el pequeño polígonoIndustrial en Angustina, (antigua Reckitt and Coldman) y otras quese localizaron en el pasado con diferentes usos.

A ello hay que unir el antiguo puerto fluvial de Limpias, que marcó elpaisaje urbano de este pueblo, desde donde se sacaban al mar los cerealesprocedentes de Castilla.

Como hemos visto, podemos decir que este paisaje es uno de los quepresentan mayor grado de antropización, siendo también muestra de elloel gran número de molinos de marea que salpican el paisaje. En laactualidad los bordes de esta área son utilizados como lugares deexpansión urbanística. Por tanto queda claro en esta área más que enningún otro lugar la estrecha relación existente entre el factor natural y elfactor humano. El paisaje de la vegetación natural está marcado, enpleamar, por el junco y la espadaña que aparece mezclada con especiesinvasoras introducidas por el hombre como la chilca o el plumero. Estepaisaje no podría entenderse sin la avifauna, característica primordial delmismo, siendo muy característico el paisaje de prados con vacasacompañadas de las garcillas bueyeras. Otra especie muy característicasde estas marismas es la espátula, si bien son cientos las especies quepodemos encontrar en este biodiverso paisaje. Ello ha motivado que esteespacio esté reconocido como Parque Natural, además de estar englobadoen la Red Europea Natura 2000 y sea sitio Ramsar.

Polders en Carasa.

Valle de Liendo

Liendo se encuentra en la zona costera entre municipios como Laredo, CastroUrdiales, Limpias y Guriezo. Se le puede otorgar al municipio la propiedad deser un verdadero área paisajística debido a su paisaje claramenteinfluenciado por las formas de relieve que posee. La configuración del paisajeen esta área responde a una clara relación entre el tipo de material del queestá formado el relieve de la zona y el clima. El clima húmedo-Atlánticocaracterizado principalmente por las altas precipitaciones y su regularidad alo largo del año y el material calizo del que se componen sus principaleselementos del relieve se han combinado para dar como resultado un paisajeúnico en la costa oriental de Cantabria. Esa combinación se explica por ladisolución de la roca caliza en contacto con el agua.

Desde el punto de vista natural podemos destacar en esta área tienen unfuerte presencia las elevaciones calizas que se disponen sobre el espacio demanera circular dejando en el centro un fondo plano en el que se asienta elpoblamiento y los espacios dedicados a actividades estrechamente ligadasal medio natural como la actividad agrícola y agraria, aunque no con muchaimportancia en la actualidad. Si tenemos en cuenta la formas de relieve deeste paisaje podemos decir que se trata de una formación denominada«poljé», siendo la principal seña de identidad de esta zona.

Entre los elementos que marcan el paisaje tenemos el imponente macizode Candina, famosa por su buitrera, una de la pocas que podemosencontrar a la orilla del mar, que sobresale sobremanera en el paisaje. Setrata de un elemento singular que llega casi a los 500 metros de altitud encontrándose sobre la misma línea de costa. Su aspecto es abrupto y con vegetación difusa debido a los diferentes grados de erosión que ha ido experimentando y de su exposición a los vientos. Además del Macizo de Candina existen una serie de elevaciones o anillo de colinas de relieve más alomado que Candina que rodean el fondo del valle con una altitud comprendida entre los 100 y 150 metros, Estas elevaciones también de sustrato calizo tienen laparticularidad de que sobre ellas seasientan tupidas formaciones vegetales representadas por el encinar cantábrico, testigos inseparables del devenir de la evolución de esta área desde la época de la última glaciación, hace unos 15.000 años.

Ese encinar cantábrico aparece de forma contínua y tupida, siendo unelemento paisajístico de primer orden en Liendo. Eso es así debido a quea partir de la generalización del uso del gas en las casas se dejó de extraermaterial del encinar que antaño servía para mantener calientes loshogares. Al dejar de recoger madera del suelo de estos encinares esto hapropiciado el enmarañamiento en el interior de estas formacionesvegetales, con su característico aspecto de monte bajo.

Dejando de lado el medio natural, no hay que olvidar que la configuraciónde este paisaje se explica principalmente por la acción del ser humano enel territorio. Como en el caso del poljé de Matienzo la erosión de la calizaha formado suelos muy productivos desde el punto de vista agrario. Estosupone que sobre estos suelos ricos el hombre haya desarrollado unaintensa actividad agrícola (tradicionales mieses) encontrando en estefondo de valle también prados para el ganado. La combinación del medionatural y el factor humano han tenido como consecuencia un paisaje en elque se describen con gran armonía prados, cultivos y las zonas habitadascaracterizadas por edificios de no más de tres alturas en su mayoría. Elpoblamiento se caracteriza por organizarse en pequeños barrios deedificios bajos y comunicados a través de carreteras que ponen encontacto unos barrios con otros.

Liendo.

Valle de Guriezo

Este valle se localiza en el extremo más oriental de la comunidad deCantabria, ubicado a su vez entre los municipios de Castro Urdiales por eleste y municipios como Liendo y Ampuero por el oeste, siendo el pico deLas Nieves el centinela de este área . Se extiende casi desde la costa zonaen donde desemboca el río Aguera hasta el límite con Vizcaya por el sur.

En cuanto al paisaje, tenemos una unidad que presenta un claro fondo devalle, fruto del modelado fluvial, flanqueado por al este por la Sierra deHoz, una alineación montañosa que separa el valle de Guriezo del núcleode Sámano, perteneciente al municipio de Castro Urdiales. Al oesteaparecen una sucesión de crestas calizas de los cuales destaca el alto delas Nieves. En esta área encontramos también una zona dedesembocadura del río Aguera, que aunque está también en territorio deCastro Urdiales (Oriñón), no se puede separar de lo que conforma estaárea paisajística. Paisajes de marisma en la zona de El Pontarrón, sierrasque cierran el valle, el fondo del mismo y el río Agüera que lo atraviesa,junto con las actividades agrarias que se han desarrollado confieren alpaisaje de esta área unos rasgos característicos de los que se puedenextraer la suavidad en las formas del relieve con pequeñas elevacionesalomadas que contrastan, en ocasiones, con abruptas de calizas.

Pero si por algo hay que identificar a este paisaje, esas son lasrepoblaciones de eucaliptos. Gran parte de las laderas de este valle seencuentran ocupadas por este árbol originario de Australia, quedando elfondo de valle definido por un paisaje agrario en el que los prados son elactor principal. Además el río Agüera, junto con el bosque de Ribera quelleva aparejado, también son un elemento notable que imprimen caráctera este paisaje.

Valle de Guriezo.

Alto de las Nieves y cabecera del Remendón

Esta zona localizada en las cumbres que separan los municipios deGuriezo, Ampuero y Rasines, y en la que se puede incluir también almunicipio de Valle de Villaverde, ha de distinguirse como un áreapaisajística plenamente diferenciada del resto de la comarca debido a lagran carga cultural, histórica y etnográfica que posee. Sin lugar a dudas,y como veremos a continuación, se trata de uno de los paisajes culturalesmás asentados de nuestro territorio.

Para entender el paisaje actual de esta zona hemos de remontarnos a laprehistoria, concretamente al Neolítico. En esta época el hombre comienza adesarrollar labores de pastoreo con el ganado, apareciendo el fenómeno delmegalitismo. En esta zona se encuentran las expresiones megalíticas (ilsos ómenhires) más antiguas de la Península Ibérica (5.490 a.c.), asociado a lamarcación y delimitación del espacio y el dominio simbólico del territoriovinculado con los difuntos. Se trataba de un territorio tribal en el que ya aparecíael sentido de la propiedad, delimitándose zonas que en ocasiones generabanconflicto por los pastos para ganado ovino y posteriormente bovino y porcino.

Este paisaje, desde estos tiempos, ha venido poseyendo un alto sentidoespiritual, como así lo atestiguan estos menhires que salpican todo elpaisaje, siendo uno de los más conocidos el Ilso de Lodos, que junto con sutúmulo próximo, se sitúan en el entorno del Alto de Las Nieves, cuya ermitaalberga a la patrona del Valle de Guriezo, la virgen de Las Nieves, siendo lafestividad, una preciosa romería, el 5 de agosto. Esta ermita, situada sobreun farallón calizo, se ha convertido en uno de los principales referentespaisajísticos de toda la comarca, puesto que debido a su estratégicasituación, es posible observarla desde prácticamente todos los lugares de lazona, además de ser un excelente mirador de la misma. Guarda esta ermitauna interesante leyenda sobre su ubicación, que cuenta que ésta iba a serconstruida al pie del farallón, en un pequeño llano cubierto de prados, peroque los materiales que por el día se transportaban hasta éste, por la nocheun mancebo con forma de ángel los transportaba hasta el alto calizo, demanera que se consideró que era voluntad de la virgen que la ermita sehiciese en el alto, y no en el lugar previsto en el principio. Como vemos, elcarácter místico y espiritual de la zona se ha trasladado hasta nuestros días.

Además de por estos rasgos, y en relación con ellos, este paisaje seencuentra caracterizado por el pastoreo extensivo que desde el Neolítico seha venido dando en él con una de las pocas razas de ganado prerromano quequedan aún en España: la monchina, tanto en vaca como en yegua. Se tratade una raza preparada para aguantar condiciones de vida nada favorables,capaces de resistir en épocas de escasez de alimentos y debido a su régimenextensivo y poco contacto con el hombre, conocidas por su bravura. Esteganado lo podemos encontrar por todos estos montes, incluidos los del Vallede Villaverde, donde además del bosque Tejea, son elemento definitorio de

su paisaje las plazas de toros, en las que se realizaban espectáculos con lasbravas vacas y toros monchinos. Precisamente en este Valle de Villaverde,como en la zona de las Nieves y el Remendón, el paisaje también se ha vistomodelado por las actividades de carboneo que se han dado en estosespacios, con objeto de suministrar combustible a las numerosas ferrerías,lo que supuso modificación en el paisaje, desapareciendo manchas dearbolado autóctono, principalmente robledal. Hoy en día, y con ladesaparición del carbón como principal combustible este bosque autóctonoestá en expansión, de manera que, por ejemplo, en la cabecera del arroyoRemendón, debajo de la Peña del Cuadro, el paisaje que podemos observarestá dominado por una amplia masa forestal.

En este espacio la fauna también es un elemento a considerar en elpaisaje, puesto que la tradicional ganadería extensiva que aún se da haposibilitado la existencia en la zona de buenas poblaciones de avescarroñeras, como por ejemplo el buitre leonado o el alimoche.

La mano del hombre también se deja sentir sobre este paisaje en forma deobras públicas e infraestructuras, destacando en este sentido el embalse delJuncal, un embalse construido por D. Álvaro Villota a comienzos del S. XX.Se trata de un complejo entramado de canales que, desde el macizo de LasNieves y por la falda del Alto de Lodos, llevan el agua de toda esa cuencahasta el embalse del Juncal. Éste también se abastece de otro canalprocedente de tierras vizcaínas, el canal de cuetos. Todos ellos, junto con elembalse, son un elemento que marca este paisaje. Desde el Juncal, el aguase transporta por un canal hasta la central de La Queveda, desde donde selleva al embalse de piruquito para desde éste transportarse hasta la centralhidroeléctrica de Trebuesto. Sin duda el paraje en el que se asienta elembalse del Juncal, en pleno macizo de los Jorrios, es uno de los más bellosde la comarca. Si se puede, conviene disfrutar de un atardecer en esteprecioso paisaje, será una experiencia inolvidable. Embalse del Juncal con

Las Nieves al fondo.

Valle de Aras

El valle de Aras, que se corresponde con el municipio de Voto, se encuentracerca de la costa, limitando con municipios como Limpias, Ampuero,Ruesga o Solórzano, estando el paisaje caracterizado por amplios vallesagrícolas-ganaderos que podemos encontrar en este municipio. Desde elpunto de vista paisajístico, encontramos varios accidentes topográficos quemarcan este área, como la Sierra de Breñas, que separa al valle de Limpiasy Ampuero, el Alto de Campo La Cruz, que marca la frontera entre el Vallede Aras y Solórzano y la Sierra de Fuente Las Varas, que divide Voto deRuesga. En el interior del valle también podemos encontrar pequeñaselevaciones calizas tapizadas por encinar cantábrico como en el Monte delCastigo en San Miguel de Aras, referencia en el paisajística de este valle.

Uno de los elementos que más marcan este paisaje son las mieses, que seextienden desde Llueva, pasando por San Miguel de Aras, San Pantaleón, yBádames, llegando hasta Rada. Otro elemento que define el paisaje es el tapizque forman los prados, resultado del trabajo del hombre de roturación debosques y montes para obtener estas zonas de pastos para el ganado, siendolas vacas frisonas y holandesas un elemento más de este paisaje. Ese tapiz deprados, junto con un adecuado relieve, dibujan un paisaje de suaves formasacompañadas de praderas de un color verde muy intenso, donde, en ocasiones,se intercalan pequeñas manchas de bosquetes autóctonos, apareciendopequeños encinares allí donde la caliza se hace más frecuente, mientras que enlos fondos de valle, a la orilla de los ríos Clarín y Clarón, el paisaje se encuentracaracterizado por los bosques de ribera, donde dominan los alisos y sauces. Laocupación humana ha estado ligada tradicionalmente a la actividad agraria, conuna gran capacidad de transformación del paisaje, puesto que hoy en día sesitúan praderas allí donde en épocas pasadas dominaban el roble, y, en menormedida, la encina. La influencia humana en este paisaje también se deja sentiren la amplia presencia de eucaliptales, que marcan el paisaje del municipio máspróximo a la costa, como es el caso de la zona de Rada, Nates y Vidular. Estainfluencia humana en el paisaje se deja notar también en la forma de ocupar elespacio, pequeños núcleos conformados por conjuntos de tradicionales casastrasmeranas. Si por algo es conocido Voto es por los maestros canteros,afamados en todo el territorio peninsular, y cuya obra es elementoimprescindible para la comprensión de este paisaje. Edificios religiosos comoermitas, iglesias (cada pueblo del valle cuenta con la suya, siendo dignas devisitar todas ellas) y humilladeros, junto con arquitectura civil unida a la industrial, en forma de molinos, ferrería y fraguas, además de obras públicas como puentes o edificios municipales, constituyen el legado de una larga lista de maestros canteros con cuna en el Valle de Aras.

Monte del Castigo ypradera en Voto.

Trasmiera

La antigua Merindad de Trasmiera se encuentra ubicada en el extremonoroccidental de la comarca, quedando dentro de ésta los municipios deSolórzano, Ríotuerto y Entrambasaguas, además del de Voto ya comentadocon anterioridad.

El paisaje de esta zona lo podemos denominar como de campiña,asemejándose, en ocasiones, a la por todos conocida campiña inglesa. Enesta zona, las condiciones favorables del relieve, con formas suaves yredondeadas, sin apenas zonas abruptas (a excepción del macizo calizo delMonte Vizmaya, que sobresale en la campiña de Entrambasaguas y la zonamás al sur del municipio de Riotuerto, en las faldas del puerto de Alisas),unidas al clima atlántico de abundantes precipitaciones y temperaturastempladas y la aptitud de los suelos, hacen que sea una zona muy óptimapara el desarrollo de la agricultura y ganadería, encontrando aquí algunade las zonas con mayor productividad de Cantabria, como es el caso de lamies de Solórzano. Ello trajo consigo una gran especialización de la zonahacia el ganado bovino de orientación láctea, lo cual ha marcadoprofundamente el paisaje que encontramos en esta porción del territoriocomarcal. Sin dudas es el paisaje de praderas por excelencia de lacomarca, amplias mieses y prados destinadas a la producción de pastos yforraje para el ganado, entre los cuales se intercalan, en ocasiones,pequeñas bosquetes mixtos, siendo encina si el sustrato es de roca caliza.Este paisaje no se entendería sin las vacas frisonas y holandesas, siendoun elemento más del paisaje las naves de explotación intensiva que lasalbergan, como las que encontramos en zonas como Solórzano, Riaño o elárea de Navajeda, en Entrambasaguas. Si bien en muchas partes denuestro territorio ya se ha perdido, todavía es posible encontrar en estaszonas el paisaje de mieses cubiertas de extensos panojales, como lellamamos aquí a los campos de maíz. Estos prados, sobre todo loslocalizados en zonas de ladera, suelen traer aparejados una cabaña paraguardar aperos de trabajo y ganado que, si bien no es pasiega, si poseerasgos de ésta, debido al proceso de expansión hacia zonas más bajasllevado a cabo por los pasiegos en siglos anteriores. De esta manera,muchas familias pasiegas se instalaron en los municipios de Riotuerto,Entrambasaguas y, en menor medida, en Solórzano.

Pero no solo la ganadería lechera ha modelado este paisaje, sino que laexplotación forestal también es un rasgo a destacar del mismo. Lasadecuadas condiciones climáticas, junto con el abandono la actividadganadera y con ello de los prados, han hecho que sobre esta zonaaparezcan amplios eucaliptales, que junto con los prados, son losprincipales rasgos paisajísticos trasmeranos.

Como estamos viendo a través de toda la publicación, la acción del serhumano ha sido fundamental construyendo los paisajes comarcales, y no

es menos en el caso de Trasmiera, habitada por el hombre desde laprehistoria, como así lo atestiguan los yacimientos prehistóricos de laCueva de la cuesta de la encina ó la Cueva de los Murciélagos, ambas enel pueblo de Navajeda, en el municipio de Entrambasaguas, o el castrocántabro del Monte Vizmaya, en el que también encontramos restos defortificaciones medievales. Además también aparecen en Hoznayo losrestos del antiguo poblado de Cueto Marín.

Si por algo es conocida la zona trasmerana es por sus maestros canteros, loscuales también han dejado su impronta sobre el paisaje. Hay que destacarsobre todo el patrimonio religioso, como el Santuario de Nuestra Señora deFresnedo, Nuestra Señora de la Asunción en Riaño, la iglesia parroquial deSan Juan Bautista en La Cavada o las diferentes iglesias parroquialesdistribuidas por el municipio de Entrambasaguas. Además de este patrimonioreligioso, también es digno de admirar en el paisaje trasmerano elpatrimonio civil, como el Palacio de los Acebedo y la casa y capilla de loscondes de Torrehermosa, ambos en Hoznayo, el palacio de los Fernández deVelasco, en Entrambasguas, el balneario de La Fuente del Francés, el palaciode Campo Solórzano o el palacio de José del Piñal, ambos en Solórzano.

Por último, y para terminar el capítulo destinado al paisaje trasmerano, nodebemos olvidarnos de la gran deforestación que se dio en todo el valle delMiera, incluido Ríotuerto, a lo largo de los siglos XVII y XVIII, que transformóen gran manera el paisaje, como consecuencia de la instalación en La Cavadade la Real Fábrica de Artillería. Esta tenía por objetivo fabricar cañones parala armada española, por lo que requería gran cantidad de combustible parasus altos hornos, los primeros de la Península Ibérica. Esta combustible no eramás que carbón obtenido de la madera de los árboles cortados de los bosquescercanos. Los miles de cañones producidos en el tiempo en el que estuvo enfuncionamiento la fábrica supuso la esquilmación de todos los bosquespróximos a ella, con la radical transformación del paisaje que llevó consigo.

Además en Riotuerto se instaló también la empresa de tejidos MontañesaTextil S.A., la primera de este tipo ubicada en la región. Los restos deambas instalaciones, entre los que destaca la Portalada de Carlos III, queservía de entrada a la Real Fábrica de Artillería son elementos indisolubles del paisaje urbano de Ríotuerto.

Paisaje trasmeranoen Solórzano.

Lugares para disfrutar de nuestros paisajes

A continuación, y como último capítulo de esta guía, se van a presentar una serie de lugares para observar,contemplar y disfrutar de los magníficos paisajes que

podemos encontrar en nuestra comarca. Si se desea obtener más información turística, lo más apropiado es pasar por el Centro de IniciativasTurísticas, ubicado en los bajos del Ayuntamiento de Ramales de la Victoria.

1. Mirador de los Collados del Asón

Situado en el Collado del Asón, al pie de la carretera que comunicaArredondo con Soba y el Puerto de La Sía, desde este mirador podemoscontemplar el espectacular paisaje del valle alto del Asón, desde sunacimiento en la cascada de cailagua hasta que el río abandona el pueblode Asón. Se trata de uno de los valles más naturales y mejor conservadosde toda la comarca. Sin duda, se trata de una de las paradas obligadas siqueremos conocer este territorio.

2. Mirador de las Cascadas del Gándara

Ubicado en la localidad sobana de La Gándara, este mirador, colgado sobreun espectacular cortado, nos permite disfrutar de la belleza de este parajesobano, con las bellísimas cascadas del río Gándara en primer plano.Además, podemos tener una panorámica de todo el valle de este río,pudiendo contemplar los tradicionales pueblos sobanos de Villaverde yHazas, además de los simbólicos Mazo Grande ó de San Pedro y MazoChico, moles calizas de la Sierra del Hornijo.

Cascadas del Gándara.

3. Mirador de Aja

Antes de acceder a este mirador, es recomendable darnos un paseo por elpueblo de Aja, uno de los pueblos que mejor representación de arquitecturasobana posee. Desde el mirador se posee una excelente panorámica delpaisaje del valle de Soba, pudiendo observar pueblos como Villar. Pero sinlugar a dudas lo más llamativo de este lugar son las excelentes vistas quese pueden apreciar de las cumbres de la Cordillera Cantábrica, observandotodo el cordal desde el Picón del Fraile-Peña Lusa-La Sía-Picón Blanco-Cañoneras hasta prácticamente el puerto de Los Tornos.

4. Mirador de Covalanas

Este mirador,situado en elentorno mágicode las cuevas deCovalanas y ElMirón, unos de losyacimientos pre-históricos másimportantes deEuropa, nos per-mite tener lamisma panorámi-ca del paisaje quetenían estos habi-tantes prehistóri-cos. Se puedeobservar en pri-mer plano elimponente PicoSan Vicente,comienzo de laSierra del Hornijo,además del vallede Ramales de laVictoria y elcomienzo del Vallede Ruesga.Conviene comple-tar nuestro pasopor este lugar conuna visita guiadaa las cuevas deCovalanas.

Pico San Vicente.

5. Mirador del valle de Ruesga

Este mirador lo encontramos en la carretera que une los pueblos deOgarrio y Matienzo. Desde él se posee una excelente visión de todo el vallede Ruesga, el río Asón y la Sierra del Hornijo. Pueblos como Ogarrio, Valley Riba, con sus respectivas mieses son parte del paisaje que podemosobservar, que se completa con los espectaculares encinares de la Sierra delHornijo y la serpiente multicolor del río Asón y su bosque de ribera. Unode los mejores paisajes agroganaderos de la comarca.

6. Mirador de Alisas

Este mirador, situado en el alto del puerto del mismo nombre, al pie de lacarretera que une los pueblos de La Cavada y Arredondo, es uno de los lugaresmás estratégicos para la observación del paisaje no solo de la comarca, si node toda Cantabria. Desde este lugar podemos observar el paisaje del municipiode Riotuerto, el poljé de Matienzo y todo el paisaje, de influencia pasiega, delentorno del pueblo de Bustablao. Además, y si el día despejado acompaña, esposible observar toda la bahía de Santander, con la capital al fondo, en uno delos espectáculos paisajísticos más impresionantes que podemos encontrar entoda la zona oriental de nuestra comunidad autónoma.

7. Alto de Fuente Las Varas

Desde este alto, que separa Matienzo de los municipios de Voto y Solórzano,podemos divisar, hacia el sur el paisaje de Matienzo, mientras que hacia elnorte se abre ante nosotros el paisaje de Trasmiera, con el municipio deSolórzano, representado en el pueblo de Riaño, en primer término. En díasclaros y soleados es posible incluso poder llegar a ver Santander.

Si nos desviamos apenas 500 metros desde el Alto hacia el este por lacarretera que lleva hacia Voto, podremos observar el paisaje del valle deLlueva y San Miguel de Aras.

Paisaje de Trasmiera desde Fuente Las Varas.

8. Vidular.

Desde este estratégico enclave, entre los municipios de Voto y Solórzano,se poseen excelentes vistas del valle de Aras, con los pueblos de Secaduray Bádames. Además, también son magníficas las vistas de toda ladesembocadura del río Asón y las Marismas de Santoña. Sin duda, se tratade uno de los mejores lugares para tener una panorámica completa de esteimportante humedal, pudiendo observar al fondo la villa marinera deSantoña y el macizo calizo tapizado de encinar del monte Buciero

9. Mirador del Monte Vizmaya

Este mirador, rehabilitado recientemente, se ubica en la cima del MonteVizmaya (en el pueblo de Hoznayo), una atalaya que se alza sobre el suaverelieve del municipio de Entrambasaguas. En él encontramos restos de unantiguo castro cántabro, así como vestigios de la actividad industrial queen él se dio en épocas pasadas. Desde este mirador tenemos una preciosapanorámica de todo el paisaje del municipio de Entrambasaguas, marcadopor las praderas entre las que se intercalan pequeños bosquetes mixtos,encinares y algunos eucaliptales. Toda una red de sendas con panelesinterpretativos recorre este entorno, por lo que la visita resultará muygratificante.

Monte Buciero y estuario del Asón desde Vidular.

10. Pico de las Nieves

El pico de las Nieves, situado en el municipio de Guriezo, es el miradorpaisajístico por excelencia de la comarca. Desde el alto en el que se ubicala ermita se poseen unas excelentes vistas de la práctica totalidad denuestro territorio, desde el alto Asón con la Cordillera Cántábrica y la Sierradel Hornijo, hasta las marismas de Santoña, además de el valle de Guriezo,con el impresionante paisaje de la cabecera del Remendón y la Peña delCuadro en primer lugar, acompañado del Embalse del Juncal. También esposible observar la costa en la desembocadura del río Agüera, en elentorno del pueblo de Oriñón. Además, en este entorno es posibleobservar los ilsos prehistóricos que delimitaban el territorio de losdiferentes clanes, además de las vacas monchinas, emblema de este lugar.Es una de las visitas imprescindibles si queremos observar y conocernuestro paisaje.

11. Pico Candiano

El Pico Candiano es otro de los lugares desde el cual podemos admirar elpaisaje de nuestra comarca, especialmente el de la zona próximo a lacosta. Situado en el municipio de Voto, dando sombra al pueblo dePadiérniga, pero también a los municipios de Limpias y Ampuero, desde lacima de este pico es posible observar el paisaje del bajo Asón y ladesembocadura de este río, formando las marismas de Santoña, con estevilla al fondo y como no, el Monte Buciero detrás. También se puedenobservar los pueblos de Colindres y Laredo, además de parte del municipiode Voto.

12. Monte Candina

El monte Candina, situado en plena costa del municipio de Liendo, es unagran mole caliza que se erige 489 metros sobre el nivel del mar, lo que lepermite ser uno de los mejores miradores paisajísticos de la costa orientalde Cantabria. Famoso por poseer una de las pocas buitreras costeras queexisten, hasta él hay que acceder a pie, después de una pequeñaexcursión. Desde su cima tenemos un panorámica excelente de la costa,desde Santoña hasta más allá de Castro Urdiales, pudiendo divisar, si eltiempo acompaña, parte del puerto del Gran Bilbao. El valle de Liendotambién queda en primer plano, con su paisaje de verdes mieses y pradosy sus encinares cantábricos. El valle de Guriezo es otro de los espacios quepodemos observar desde este mirador.

13. Ilsos de Ribacoba (Monte Tejea)

Desde esta cima, al sur del municipio de Valle de Villaverde, podemostener una completa panorámica de este enclave cántabro en territoriovizcaíno. En este lugar se instalan los Ilsos de Ribacoba, restos megalíticosque servían para delimitar territorios. Además, tampoco es infrecuenteencontrar en este lugar algún que otro bando de vacas y/o yeguasmonchinas, puesto que han sido lugar de pastoreo de este ganado desdeépocas milenarias. Para acceder a este lugar lo más adecuado es realizaruna excursión a pie que parte desde el barrio de Mollinedo. Una vez allí,podremos contemplar el bello paisaje del Valle de Villaverde, con el bosquede Tejea en primer término.

Ilsos de Ribacoba.

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