etienne wenger comunidades de practica

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  • 8/10/2019 Etienne Wenger Comunidades de Practica

    1/29

    omunidades

    de

    prctica

    Aprendizaje

    significado

    identidad

  • 8/10/2019 Etienne Wenger Comunidades de Practica

    2/29

    Biblioteca

    COGNICiN

    Y DESARROLLO HUMANO 38

    Coleccin dirigida por Csar ColI

    Ttulos publicados

    1. S. Moscovici - PsicologJa social, 1

    2. S. Moscovici - Psicolog(a social,

    2

    3.

    J. Bruner - El habla

    del

    nio

    4,

    S. A.

    Hampson

    -

    La

    construccin da

    la

    personalidad .

    5.

    D.

    A.

    Norman

    - Perspectivas de la ciencia cognitiva

    6.

    K Kaye

    - LB

    vida

    mental

    y

    social del b&b

    7. R Schank yR

    p

    Abeison

    - Guiones, planes, metas

    y

    entendimiento

    8, R. J. Sternberg

    InteligencIa

    humana,

    1.

    a

    naturaleza de

    la

    inteligencia y

    su

    medicin

    9. R. J. Sternbsrg -

    Inteligencia

    humana,

    2.

    Cognicin. personalidad

    e inteligencia

    10.

    R.

    J. Slemberg -IntelIgencia humana, 3. Sociedad, cu/fura e nteligsnca

    11.

    R J.

    Sternberg

    Inteligencia humana, 4. Evolucin

    y

    desarrollo de

    la

    inteligencia

    12.

    R.

    E.

    Mayer Pensamiento, resolucin de problemas

    y

    cognicin

    ,

    3. R. ase El desarrollo inlelectual;

    del nacimiento a

    la

    edad madura

    14. U. Bronfenbranner La eaolog{a

    del desarrollo humano

    15. H,

    Garclner

    - La nueva ciencia

    de

    la mente. Historia de

    la

    revolucin cognitiva

    16. M. J. Mahoney y A. Freeman - Cognicin

    y

    psicoterapia

    17. J. V. Wertsch -

    Vygotsky y

    la

    formacin

    social de la

    mente

    18. J. Dewey

    Cmo

    pensamos

    19. R. Harr,

    D.

    Clarke yN. De Cano - Motil'08 y

    mecanismos.

    Introduccin

    El

    la

    psicologa de la accin

    20. J. Bruner

    yH. Hasta -

    La

    elaboracin

    del sentido. La

    construccin del mundo

    por

    el nio

    21. P N. Johnson-Laird -

    El

    ordenadory la mente. Introducc;n la

    ciencia cognitiva

    22. M. Wertheimer - l

    pensamiento productivo

    23.

    J. Lave -

    La

    cognicin en la prctica

    24. D Middlelon

    y

    D Edwards -

    Memoria compartida

    25.

    M. Hewstone

    - La

    atribucin

    causal

    26.

    D.

    eohen y

    S.

    A,

    Mackeith

    El desBrrollo de la imaginacin

    27. B. Aogoff.

    Aprendices del pensamiento

    28.

    J. Pemar Comprender

    la

    mfmte representacional

    29. H.

    Gardner -

    Inteligencias

    mltiples,

    La

    teora en

    la prct,'ca

    30. L, Vygotsky

    Pensamiento y lenguaje

    31.

    J. A.

    Fodor

    - f l olmo y

    el experto

    32.

    B. lnhelc1er y

    G.

    Cellerier . Los senderos de

    los

    de9Cubrimientos del nio

    33.

    M.

    C.

    Witlrock y E. L. Baker - Test y

    cognicin

    34. J. P Das yotros

    Planificacin cognitiva

    35. A. Clark - Estar

    ahf

    36. W. A. Frawley - Vygotsky y la ciencta cognitiva

    37. A.

    Kozulin Instrumentos pedaggicos

    3B.

    E.

    Wenger Comunidades

    de

    prctica

    ETIENNE WENGER

    COMUNIDADES

    DE

    PRCTICA

    Aprendizaje,

    sgnificado identidad

    arcabna

    . l = : ~ ~ ? < 2 x ~

  • 8/10/2019 Etienne Wenger Comunidades de Practica

    3/29

    TitulO

    original: Communl ies

    of praclicfi L6arnlng.

    meaning.

    and idsnlity

    Publicado

    en

    ingl$.

    en 199B, par The

    Press Syndioate

    oltha

    Unlllersity 01 Cambridge.

    Cambridge, Reino Unido

    Traduccin

    da

    Gen f

    s

    Snchez

    Barbern

    Cubierta Hman Caries

    y

    Montse Plass,

    Quedan rigurosamente

    prol1lbldas.,

    eln la autorizacin

    9scnla

    de

    los ~ t u l r e s del copyright.

    bajo

    laa sanciones

    eslable.:ldaa

    en 183 leyea la reproduccll1

    total

    o pardal de ssta obra por cuaKuler medio

    Opr1l'l8dimlenlo, comprendidos

    la reprogralla

    V9 tratamiento mlorrnlico,

    y a distribucin de

    ejemplares

    de ella

    m&diiilnte

    alquilero

    prstamo

    pblicos.

    @ 1996 Cambridge

    Universily

    Press

    @ 2001 de la traduccin, Genle Snchel. BarberAn

    e

    .2001

    de

    lodas

    las

    ediciones

    en

    castellano,

    Ediciones

    Paids Ibrica, S.A

    ..

    Mariano Cubl.

    92.

    08021 Barcelona

    y

    Editorial

    Paid5, $AICF,

    Delensa.

    599 Buenos Aires

    hllp:ftwww.paJd06.com

    SBN:

    644931111X

    Depsito legal: B28.36512001

    Impreso en Grafie. S.L.

    Oa130 Santa Perpetua de la

    MQgoda (Barcelona)

    Impreso en Espa'la - Prinleclln Spain

    Pauta Jad

    Sheena

    y

    Kehan

    http:///reader/full/hllp:ftwww.paJd06.comhttp:///reader/full/hllp:ftwww.paJd06.com
  • 8/10/2019 Etienne Wenger Comunidades de Practica

    4/29

    ntroduccin

    una

    teora social del aprendizaje

    Nuestras instituciones

    en

    la medida

    en que

    abordan explcitamente

    cuestiones

    relacionadas con

    el

    aprendzaje se basan principalmente en el supuesto de

    que

    aprender es un proceso individual que tiene un principio y un final que

    es

    mejor

    separarlo de nuestras restantes actividades y

    que es

    el resultado de la

    enseanza.

    De ah que organicemos aulas donde

    los

    estudiantes

    libres

    de las distracciones

    de

    su participacin

    en

    el mundo exterior puedan prestar atencin a un profesor

    o centrarse en unos ejercicios. Diseamos

    programas

    de instruccin asistidos por

    ordenador

    que

    conducen a los estudiantes por sesiones ndvidualizadas

    que

    abar-

    can

    grandes

    cantidades de informacin y de ejercicios prcticos. Para evaluar el

    aprendizaje empleamos pruebas a las que ellos

    se

    enfrentan en un combate indvi

    dual

    donde el conocimiento

    se

    debe demostrar

    fuera de

    contexto donde se

    considera que colaborar es hacer trampa. El

    resultado

    es que gran parte de nuestra

    enseanza

    y nuestra

    formacin

    institucionalizada

    es

    percibida por

    muchos estu-

    diantes como irrelevante y la mayora de ellos

    sale

    de este tratamiento sintiendo

    que

    aprender

    es

    algo aburrido y arduo y que realmente no

    estamos hechos

    para ello.

    Dicho

    esto qu

    ocurrira

    si

    adoptramos

    una

    perspectiva diferente

    que

    co-

    locara

    l

    aprendizaje

    en

    l

    contexto

    de

    nuestra propia experiencia

    de

    participa

    cin en

    l

    mundo? Qu ocurrira si supusiramos

    que

    el aprendizaje es una par-

    te

    de

    nuestra naturaleza humana igual

    que

    comer o dormir

    que

    es sustentador

    de la vda y

    l

    mismo tiempo inevitable y que

    s i

    se

    nos

    da la

    oportundad-

    somos

    bastante buenos

    en

    l? Qu ocurrira s

    adems

    supusiramos que el

    aprendizaje es

    un

    fenmeno fundamentalmente social

    que refleja

    nuestra propia

    naturaleza profundamente

    social

    como seres humanos capaces de conocer?

    Qu tipo

    de

    comprensin acerca de

    cmo

    se produce el aprendizaje producira

    una perspectiva

    como

    sta y qu hara falta para

    apoyarla?

    En este libro intenta-

    r

    desarrollar esta

    clase

    de perspectiva.

    1

    ji

  • 8/10/2019 Etienne Wenger Comunidades de Practica

    5/29

    20 Contextos

    Una

    perspectiva

    conceptual

    teora prctica

    Hay muchos tipos distintos de teoras del aprendizaje. Cada una destaca as-

    pectos diferentes

    del

    mismo y en consecuencia,

    cllda

    una es til para

    unos

    fines

    diferentes. En

    cierta

    medida, estas diferencias

    reflejan un

    enfoque deliberado

    en

    un

    aspecto del problema multidimensional del aprendzaje y tambn

    reflejan

    diferencias de carcter

    ms

    fundamental en cuanto a

    los

    supuestos sobre la natu

    raleza del conocimiento, de conocer y

    del

    conocedor

    y,

    en

    consecuencia, sobre lo

    que es importante en

    el

    aprendizaje. (Para quienes estn interesados, en

    la

    pri

    mera nota se detallan varias de estas teoras con una breve descripcin de su

    en-

    foque.J1

    1 COIl esto

    110

    quiero decir que

    una

    perspectiva social

    del

    tipo aqu propuesro

    diga

    todo

    lo que se puede decir sobre el aprendizaje. No se deben olvidar los desarrollos biol6gicos, neu

    rofsiolgicos. culturales,

    linglstC'os

    e histricos que han hecho posible nuestra experiencia

    humana. Tampoco quiero decir que los supuestos que

    subyacen

    a

    mi

    enfoque sean incompati

    bIes

    con los

    de

    otras teoras. No

    hay esplcio

    aqu para abordar esta cuestin a fondo, pero para

    facilitar el contraste

    ser til

    mencionar los temas y enfoques pedaggl:os de otras teoras con

    el

    fin

    de esbozar

    el

    panorama

    en

    el

    que se

    sita este libro.

    El aprendizaje tiene

    un inters

    natural

    para

    los estudiosos de las funciones

    neurolgicaJ:

    las

    teoras

    rteurojio16giclIs

    se centran en

    los mecanismos

    biolgicos del aprendizaje.

    Es-

    tudialllos

    l f m i t ~ s

    y105 ritmos

    fisiolgicos

    y cuestiones relacionadas con In estimuladn y

    la

    op

    timizacin

    de los procesos de

    la

    memoria (Edelman, 1993; Sylwester, 1995).

    Tradicionalmente, el aprendzRje ha sido objeto de

    las

    teoras

    psirolgicllfi:

    las t e o r i ~

    conducttas

    se centl'lU1

    en la modificacin

    de la conducUI por

    medio

    del

    par

    estmulo-respuesta y del refuerzo selectivo. Su enfoque pedaggico se centra en el control y en

    la adaptacin de la respuesta.

    Como

    ignoran por completo

    las

    cuestiones relacionadas

    con

    el

    significado, su utilidad se

    limita

    a los casos donde no es posible o pertinente abordar cuestio-

    nes de

    significado

    social, como los automatismos, la disfundonlllidad social grave

    o

    el entrena

    miento de animales

    (Skinner,

    1974);

    las teoras

    rognitivas se

    centran

    en

    las estructuras

    cognitivas

    internas

    yven e!

    aprendiza

    je como tl'lU1sformadones

    de

    estas estructuras

    cognitivas.

    Su

    enfoque pedaggico

    se

    centra

    en

    el procesamiento y

    la

    transmisin

    de

    informacin por

    medio de la

    comunicacin.

    la

    explica-

    cin,la recombinacin. el contraste. la

    inferencia

    y II resolucin

    de

    problemas.

    Soo

    tiles para

    disear secuencias de material conceptual que se basen en estructUras

    de

    informacin

    ya

    exis-

    tentes (J. R. Anderson, 1983: Wenger, 1987; Hutchns, 1995);

    las teonas

    cOl Sfr ltiv{tas

    se centran en los procesos por los que los estudiantes constru

    yen

    sus propias estructuras mentales

    al

    interaccionar con un entorno. Su enfoque pedaggico

    se centra en las

    tareas.

    Favorecen

    las

    actividades prcticas y autodirigdas orenudas

    hada

    el

    diseo

    y

    el descubrimiento. Son tiles para estructurar entornos de aprendizaje, como mundos

    simulados, para facilitar la construccin de ciertas esrructuras conceptuales mediante el com-

    promiso

    en

    tareas

    autodirigidBs

    (Piaget,

    1954; Paperr, 1980);

    las teoras opr( I'/di1.flje

    social

    tienen en cuenta las interacciones sodales, pero siguen

    adoprando una perspeCtiva bsicamente

    psicolgica.

    Desracan las

    relaciones

    interpersonales

    Introduccin:

    una teora social del

    aprendizaje 21

    Aunque

    ]a

    teoria

    social

    del aprendizae que aqu

    t>topongo

    no sustituye a

    otras teoras

    que

    abordan distintos aspectos del problema, posee

    su

    propio

    con-

    junto de

    supuestos

    y

    su propIO enfoque. Dentro de

    este

    contexto, constituye un

    nivel de

    anlisis

    coherente; proporciona

    un

    marco conceptual del

    que

    deducir

    un conjunto coherente de principios

    y

    recomendaciones generales

    para

    com-

    prender

    y

    posibilitar

    el

    aprendizaje.

    Mis

    supuestos sobre

    lo

    importante de aprender

    y

    sobre

    la

    naturaleza

    del co-

    nocimiento, de conocer y de

    los

    conocedores se pueden resumir sucintamente

    como sigue. Parto

    de

    cuatro premisas:

    1) somos

    seres sociales.

    Este hecho,

    leos

    de ser una verdad trivial, es u as-

    pecto esencial

    del

    aprendizaje;

    2) el conocimiento es una cuestin de competencia en

    relacn con

    ciertas

    empresas valoradas como, por ejemplo, cantar afinando. descubrir he

    chos cientficos, arreglar mquinas, escrbir poesa, ser cordial, crecer

    como un muchacho o una muchacha, etc,;

    3) conocer es cuestin de

    particpar

    en la consecucin de estas empresas, es

    decir,

    de comprometerse de una manera activa en el mundo;

    que

    intervienen en la

    imitacin Y

    el

    modelado

    y

    que, en

    consecuenda,

    se

    centran

    en

    el e lmdio

    de los

    proce'los cognitivos por los que la observacin se puede convertir en fuente

    de

    aprend,

    zaje.

    Son

    tiles

    para comprender los detallados mecanismos de procesamiento

    de

    informacin

    por los que las interacciones sociales influyen

    en la

    conducta (Bandura, 1977).

    Algunas teoras se apartan de un enfoque exclusivamente psicolgico. aunque siguiendo

    una lnea distinta a la ma:

    las teorias de la actividad se centran en la estructura de las actvdade,

    como

    entidades

    hist6ricamente constituidas. Su enfoque pedaggico se centra en

    el

    establecimiento de puen

    tes que

    salven la

    distancia

    entre el estado histrico de

    una

    actividad ye! nivel de desarrollo de

    una persona en relacin con esa actividad (por ejemplo, entre el estado actual

    de

    un lenguae y

    la

    capacidad

    de un

    nio para hablar ese

    lenguaje). Su

    objetivo

    es

    definir

    una zona de

    desarro

    llo

    prmo en

    la

    que

    los

    estudiantes que reciben

    ayuda

    puedan realizar una

    actividad

    que

    no

    podran realizar por su cuenta

    (Vygotsky,

    19)4; Wertsch. 1985; Engestrom, 1987);

    las teoras de la socializacin se centran en la adquisicin de afiliacin por parte de los

    principiantes dentro

    de

    un marco de referencia

    fundonrui.sta,

    donde

    adquirir afiliacin

    se defi,

    ne como nteriorizacin de las notmas de un grupo

    social..

    (Patsons,

    1962).

    Como argumen-

    tar, existe una sutil diferencia entre la imitacin o la interiorizaci6n

    de

    normas por parte

    de

    los individuos

    y

    la construccin

    de

    identidades dentro de comtmiddes

    de

    prctica.

    las teoras de la orgnnt acin se ocupan tanto del aprendizaje

    que llevan

    a cabo los indi-

    viduos dentro de las organizaciones

    como

    de! aprendizaje de

    las

    organizaciones

    como

    rales.

    Su

    enfoque pedaggico se centra en los sistemas, las estruCturas las polticas de las organizacio-

    nes y

    en

    las

    formas de

    memoria institudol1l!les (Argyris y

    SchOn,

    1978; Senge, 1990: Brown.

    ]991; Brown y Dugud.

    1991;

    Hoclc, 1995; Leonard-Barton, 1995; Nonaka y Takeuch, 1995;

    Snyder, 1996).

    http:///reader/full/foque.J1http:///reader/full/foque.J1
  • 8/10/2019 Etienne Wenger Comunidades de Practica

    6/29

    22

    Contextos

    4)

    el significado nuestra capacidad de experimentar l mundo nuestro

    compromiso con l como algo signficativo- es,

    en

    ltima instancia) lo

    que debe producir el

    aprendizaje.

    Como reflejo de estos supuestos l principal centro de

    inters

    de esta teora

    reside en el aprendizaje

    como

    participacin social. Aqu, la participacin no

    slo

    se

    refiere a los

    eventos locales de

    compromiso con ciertas

    actividades

    y

    con

    de-

    terminadas personas sino tambin a un proceso

    de

    mayor

    alcance

    consistente en

    participar de una manera activa en las

    prcticas

    de

    las

    comunidades sociales y

    en

    construir identidades en relacin con estas

    comunidades.

    Por

    ejemplo,

    formar

    parte

    una pandilla

    durante el recreo o formar parte de

    un

    equipo

    de

    trabajo

    es l mismo tiempo u tipo

    de

    accin y una forma de

    afiliacin.

    Esta participa

    cin no

    slo da

    forma a lo

    que

    hacemos,

    sino que tambin

    confonna quines

    so-

    mos

    y

    cmo interpretamos lo que hacemos.

    En consecuencia, una teora social del aprendizaje debe integrar los compo-

    nentes necesarios para caracterizar la participacin social como un proceso de

    aprender

    y

    de conocer, Estos componentes que se muestran en la figura 0.1 son

    los

    siguientes:

    1) significado:

    una

    manera

    de

    hablar

    de

    nuestra capacidad

    (cambiante)

    en

    el

    plano

    individual

    y colectivo- de experimentar nuestra vida y el mundo

    como algo significativo;

    2) prctica: una manera de hablar de los recursos rustricos y sociales, los

    marcos

    de

    referencia

    y las perspectivas

    compartidas que pueden sustentar

    el compromiso

    mutuo

    en la accin;

    3)

    comunidad: una manera

    de

    hablar de las configuraciones sociales donde la

    persecucin

    de

    nuestras empresas se define como valiosa y nuestra parti

    cipacin es reconocible

    como

    competencia;

    4)

    identidad: una manera de hablar del cambio que produce el aprendizaje

    en quines

    somos y de cmo crea historias personales

    de

    devenir en

    el

    contexto de nuestras comunidades.

    Es

    evidente

    que

    estos elementos estn profundamente interconectados y se de

    finen mutuamente. En realidad, mirando

    la

    figura 0.1, podramos intercambiar

    cualquera de

    los cuatro

    componentes perifricos por

    el

    aprendizaje

    y

    colocarlo en

    el

    centro como el

    principal

    tema de nter&; y

    la

    figura seguira teniendo sentido.

    En consecuencia, cuando empleo l concepto

    de

    comunidad de prctica

    en

    el

    ttulo

    este

    libro en realidad lo utilizo como un punto de entrada a un mar-

    co de referenda conceptual ms amplio del cual es un

    elemento constitutivo.

    poder analtico

    de

    este concepto reside precisamente en que integra

    los

    compo-

    nentes de la figura

    0.1 al tiempo

    que hace referencia a una

    experiencia

    familiar.

    Introducoin: una teoria social

    del

    aprendizaje

    23

    FIGURA 0,1.

    Componentes de una

    teora

    sodal

    del aprendizaje:

    inventado inicial,

    Las comunidades de prctica estn

    p r

    todas

    partes

    Todos

    pertenecemos

    Il comunidades de

    prctica. En

    casa, en el trabajo

    en

    la

    escuela, en

    nuestras

    afidones: pertenecemos a varias

    comunidades

    de prctica

    en

    cualquier momento

    dado.

    Y las comunidades de prctica a las que pertene

    cemos cambian

    en

    l

    curso

    de

    nuestra vida. En realidad, las c o m u l i d a d ~ de

    prctica estn por todas

    partes.

    Las

    familias

    se

    esfuerzan por establecer un estilo

    de vida

    viable. Desarrollan

    sus propias

    prctCas,

    rutinas,

    rituales,

    artefactos, smbolos, convenciones, his-

    torias y

    relatos. Los miembros de las familias se odian

    y

    se aman mutuamente;

    estn

    de

    acuerdo

    yen desacuerdo. Hacen

    lo necesario para

    seguir

    adelante. In-

    cluso cuando una familia

    se va

    a pique sus

    miembros crean

    maneras de tratarse

    mutuamente.

    Sobrevivir

    conjuntamente

    es

    una

    empresa importante indepen

    dientemente de

    que sobrevivir

    consista en la bsqueda de alimento y

    refugio

    o

    en

    la bsqueda de una identidad viable.

    Los trabajadores organizan su vida con sus compaeros y dientes inmediatos

    para

    llevar

    a

    cabo su

    trabajo. Con

    ello

    desarrollan o mantienen un sentido de s

    mismos con

    el

    que poder vivir, divertirse

    un poco

    ycumplir las

    exigencias

    de sus

    patronos

    y

    clientes. Independientementede cul pueda

    ser

    la descripcin oficial

    de

    su

    trabajo,

    crean una prctica para hacer 1

    que es

    necesario

    hacer. Aunque

    los

    trabaadores puedan estar contratados por una gran institucin en la prcti

    ca diaria trabajan con

    -y

    en cierto sentido para un conjunto mucho

    ms

    pe

    queo

    de personas y

    comunidades.

  • 8/10/2019 Etienne Wenger Comunidades de Practica

    7/29

    4

    r Contextos

    Los estudiantes

    van

    a la

    escuela

    y cuando se renen para tratar a su modo la

    agenda que les impone la

    nstltucin y

    los

    perturbadores misterios de la

    juven-

    tud brotan comunidades de prctica por

    todas

    partes: en

    el

    aula o en el patio

    recreo, de una man,era oficial o espontnea. Y a pesar

    del

    currculo. la disci-

    plina y la

    exhortacin el

    aprendizaje que es ms

    transformador en el plano per-

    sonal

    es el

    aprendizaje

    que

    se

    deriva de

    la

    afiliacin

    a

    estas comunidades

    de

    prctica.

    En un

    garaje,

    una banda

    ensaya

    las

    mismas

    canciones para el concerto de

    otra boda. En un desvn, un

    radioaficionado

    entusiasta forma parte de

    grupos

    de comunicadores de alcance mundial. En una glesia, unos alcohlicos en

    fase de

    recuperacin acuden a

    sus

    reuniones

    semanales

    para encontrar

    el

    valor

    necesario para estar sobrios.

    En

    un laboratorio. OIlOS cientficos mantienen co-

    rrespondencia con

    sus

    colegas, cercanos y lejanos, para avanZar en

    sus

    investi-

    gaciones.

    A travs de una red mundiitl de ordenadores la gente se

    congrega

    en

    espados

    virtuales

    y desarrolla maneras compartidas de profundizar

    en sus inte-

    reses comunes.

    En una

    oficina,

    los trabajadores que manejan

    un

    ordenador

    cuentan

    con los dems para enfrentarse a las complejidades

    de

    esos oscuros sis-

    temas.

    En

    la

    calle, los jvenes se

    agrupan

    para configurar su vida y su sentido de

    s

    mismos.

    Las

    comundades

    de

    prctica son

    una

    parte integral

    de

    nuestl a

    vida diaria.

    Son tan

    informales y omnipresentes que rara vez son un centro de inters

    expl-

    cto, pero por

    las mismas

    razones tambin son muy familiares. Aunque el trmi-

    no

    puede ser nuevo, la experienca no Jo es.

    La mayora

    de

    las

    comunidades de

    prctica no tiene nombre y

    no

    expide carns a sus miembros. Sin embargo,

    s

    durante un momento

    consideramos

    nuestra propia vida desde esta perspectiva

    todos

    podremos construir

    una imagen

    bastante buena

    de

    las comunidades

    de

    prctica a las

    que

    pertenecemos ahora. de aqudlas a las que pertenecimos en

    el

    pasado yde aquellas a las que nos gustara pertenecer en el futuro. Tambin te-

    nemos W 3 idea bastante buena sobre quin pertenece a nuestras comunidades.

    prctica y por qu, aunque esta afiliacin

    rara

    vez

    se

    explcita en una lista o

    en

    una

    rdacin

    de

    criterios

    que cumplir. Adems,

    es

    probable

    que

    podamos

    distinguir

    aquellas

    comunidades prctica de

    las que

    somos

    unos

    miembros

    bscos de muchas otras comunidades de las que somos unos miembros ms pe-

    rifricos.

    En todos

    estos sentidos. el concepto de comunidad

    de

    prctica no nos es

    desconocido,

    Al

    explorarlo una

    manera

    ms sistemtica en

    este libro

    slo de-

    seo

    afinado. hacerlo

    ms

    til como instrumento del pensamiento. Para este fin,

    su familiardad me

    servir.

    Expresar Un fenmeno familiar es

    una

    oportunidad

    para ampliar

    nuestras intuiciones:

    para profundzarlas y expandirlas para exa-

    minarlas y volverlas a plantear. La perspectiva resultante no

    nos

    es ajena

    y

    puede

    arrojar nueva

    luz

    a nuestro

    mundo.

    En este sentido el concepto de

    comunidad

    Introduccin: una teorfa social del aprendizaje I 5

    de prctica no

    es

    nuevo

    ni viejo. TIene al mismo tiempo

    el

    carcter sorprenden-

    te

    de la

    novedad

    y

    la

    familiaridad olvidada lo

    evidente, aunque

    quiz

    sea

    sta

    la marca de

    nuestras

    intuiciones

    ms tiles.

    eplantear

    l

    aprendizaje

    Como

    argumentar

    con

    ms

    detalle

    a

    lo

    largo

    de

    este

    libro centrar

    el

    inters

    en la participacin tiene unas profundas repercusiones para

    10 que significa

    comprender yapoyar el

    aprendizaje:

    para los indviduoJ

    significa

    que el aprendizaje

    consiste

    en participar y

    contribuir a las prcticas de sus

    comunidades;

    para las comunidades

    significa que

    el aprendizaje consiste

    en

    refinar

    su

    prctica

    y

    garantizar nuevas generadoaes de miembros;

    para las

    organiwciol1es

    significa que

    el

    aprendizaje consiste en sostener in-

    terconectadas

    las comunidades

    de prctica a travs de

    las cuales

    una orga-

    nizacin sabe lo que sabe y en

    consecuencia,

    llega

    a ser eficaz y valiosa

    como organizacin.

    El

    aprendizaje,

    en este sentido no es una

    actividad separada. No

    es algo que

    hacemos cuando no hacemos nada mis o

    que

    dejamos de

    hacer

    cuando

    hacemos

    otra

    cosa. Existen momentos en nuestra vida en los que aprender se intensfica:

    cuando las

    situaCones

    hacen tambalear nuestro sentido de

    la

    familiaridad, cuan-

    do nos vemos

    d e s f i d o ~

    ms all

    de nuestra capacidad

    de

    respuesta cuando

    deseamos

    comprometernos

    con nuevas prcticas

    e intentamos unirnos a

    nuevas

    comundades.

    Tambin

    hay

    momentos

    en los que la sociedad nos coloca expl-

    citamente

    en

    situaciones donde la cuestin del

    aprendizaje

    es ms problemtica

    y exge nuestra atencin: asistimos a

    clases,

    memorizamos, pasamos exmenes y

    recibimos un

    diploma.

    Y hay

    m o m e n t o ~ ~ n los

    que

    el

    aprendizaje cuaja: un

    beb dice la primera palabra

    tenemos

    una sbita intuicin cuando el

    comenta-

    rio alguien nos ofrece un eslabn perdido finalmente nos reconocemos

    como

    miembros de pleno derecho de una comunidad. Pero las situaciones que

    traen

    el

    aprendizaje a un primer plano no son necesariamente aquellas en

    las

    que aprendemos ms o

    con mayor

    profundidad. Los eventos de aprendizaje

    que podemos sealar quiz se parezcan

    ms

    a erupciones volcnicas

    cuyos

    aro

    dientes

    estallidos

    revelan durante un dramtico instante la labor continua de la

    tierra. Aprender

    es

    algo que podemos

    asumir:

    tanto

    si 1 vernos como si

    no,

    tan-

    to si nos gusta la manera en que se produce como

    si

    no, tanto

    si lo

    que estamos

    aprendiendo es repetir

    el

    pasado como s es deshacerse de l. Incluso

    dejar

    de

    aprender lo

    que se

    espera

    en una

    situacin dada normalmente supone aprender

    otra cosa en su

    lugar.

  • 8/10/2019 Etienne Wenger Comunidades de Practica

    8/29

    6

    I Contextos

    Para muchos

    de

    nosotros,

    el

    concepto

    de

    aprendizaje evoca inmediata-

    mente imgenes

    de

    aulas

    sesiones de nslruccin,

    profesores,

    libros

    de

    texto,

    de-

    beres

    y ejercicios.

    Sin

    embargo,

    en

    nuestra experiencia, aprender

    es

    una parte n-

    tegral

    de

    nuestra vida cotidiana. Forma parte

    de nuestra participacin

    en

    nuestras comunidades y

    organizaciones. El

    problema

    no es que no

    sepamos

    esto,

    sino que no tenemos maneras sistemticas de hablar de esta experiencia familiar.

    Aunque

    el tema

    de

    este libro

    abarca principalmente cosas que todos

    sabemos en

    ciertos

    aspectos,

    tener

    un

    vocabulario

    sistemtco

    para hablar

    de

    ellas

    supone

    una gran diferencia. Un vocabulario adecuado

    es

    importante porque los concep-

    tos que empleamos para comprender el mundo dirgen nuestra percepcin y

    nuestras acciones. Prestamos

    atencin a

    lo que esperamos ver escuchamos 1

    que podemos stuar en nuestra comprensin y actuamos segn nuestra visin

    del

    mundo. .

    Es ndudable que

    el

    aprendizaje

    se

    produce, pero

    las sociedades

    modernas

    han llegado a verlo de muchsimas maneras y por una multitud de razones

    distntas, como un motivo

    de

    preocupacin. Desarrollamos curnculos naciona-

    les ambiciosos programas de formacn empresarial, complejos sistemas de

    en-

    ,

    seanza. Deseamos prqvocar el

    aprendizaje

    hacemos cargo de l

    dirigirlo ace-

    I

    i "

    , 1

    lerarlo, exigirlo o simplemente, dejar de interferir

    en

    l.

    En

    cualquier caso

    queremos hacer

    algo

    al

    respecto.

    En

    consecuencia,

    nuestras

    perspectivas

    del

    aprendizaje

    son

    importantes: lo que pensamos

    del

    aprendizaje influye

    en nues-

    tra manera de reconocerlo y en 1 que hacemos cuando decidimos que debemos

    :1

    hacer

    algo al

    respecto como ndivduos. como comunidades y como

    organiza-

    \

    dones.

    1

    I

    Si avanzamos sn reflexonar sobre nuestros supuestos fundamentales acerca

    de la naturaleza

    del

    aprendizaje, corremos

    el

    riesgo cada vez mayor de que nues-

    :

    tras concepciones tengan ramificaciones engaosas. En un mundo que cambia y

    que

    cada

    vez

    est

    interconectado con

    ms

    complejidad

    y a

    un

    ritmo

    cada vez

    ms

    acelerado,

    es indudable

    que

    la

    preocupacin por el aprendiza

    e

    est justificada.

    Pero ms que el aprendizaje en

    s

    quiz

    sea

    nuestra on ep in del

    aprendzae

    1

    '1

    lo que necesita una atencin

    ms urgente

    cuando decidimos inmiscuirnos en

    l

    a

    ,1

    la escala en

    que

    1

    hacemos

    ahora. En

    realidad

    cuanto

    ms

    nos ocupamos

    de

    :1

    cualquier tipo de diseo

    ms

    profundos son los efectos de nuestro discurso

    : \

    sobre el tema que queremos abordar. Cuanto ms lejos apuntemos ms impor-

    ,

    tancia tendr cualquier error indal. Cuanto

    ms

    ambiciosos sean nuestros

    11

    esfuerzos por organizar nuestra vida

    y

    nuestro entorno, mayores sern

    las

    reper-

    cusones de nuestras perspectivas teonas y creencias. Cuanto ms responsables

    seamos de nuestro futuro a una escala

    cada

    vez mayor

    ms

    necesario ser

    que

    re-

    flexionemos sobre las perspectivas que fundamentan nuestras

    empresas.

    Una

    repercusin fundamental

    de

    nuestros intentos de organizar el aprendizaje

    es

    que debemos reflexionar sobre nuestros propios dscursos acerca de

    l y

    sobre

    Introduccin; una teora social del aprendizaje I

    7

    los

    efectos de estos discursos en nuestras maneras de disear

    el

    aprendizaje. Al

    proponer un marco de referencia que considera el aprendizaje en trminos

    sociales espero contribuir a esta urgente necesidad de reflexin y replantea-

    miento.

    a utilidad de la

    teora

    Una

    perspectiva no

    es

    una

    receta; no

    nos dice

    qu

    debemos

    hacer. Ms

    bien

    acta como una gua que

    nos

    dice a qu prestar atencin, qu dificultades

    es-

    perar

    y cmo

    abordar los problemas:

    por

    ejemplo s

    creemos que el conocimiento consta explcitamente de

    fragmentos de

    informacin almacenados en el cerebro. entonces tiene

    sentido

    empaquetar

    esta informacin en unidades bien diseadas, reunir

    a

    los

    futuros destinatarios de sta nformacin en un

    aula

    donde estn

    perfectamente quietos

    y aislados de cualquier dstracCn y

    entregar esta

    informacin de la manera

    ms

    sucinta y artculada

    posible.

    Desde esta

    perspectiva. lo que ha llegado a simbolizar el eptome de un evento de

    aprendizaje tiene sentido: un

    profesor

    que

    diserta

    ante una clase

    sea

    en

    una

    escuela,

    en

    un centro

    de

    formacin empresarial o

    en

    el

    cuarto

    trasero

    de una biblioteca.

    Pero,

    si creemos

    que

    la

    nformacin

    almacenada de

    maneras

    explcitas

    slo es una parte pequea de conocer y que conocer supone principalmen-

    te una participacin activa en

    comunidades sociales

    entonces

    el

    formato

    tradicional no parece tan productivo. Lo

    que

    s parece prometedor

    son

    las

    maneras

    inventivas de

    hacer

    que

    los estudiantes participen en prcticas

    signrncativas de

    propordonar acceso a recursos

    que

    refuercen su

    partici-

    pacin, de ampliar sus

    horizontes

    para que se puedan

    situar

    en

    trayectoras

    de aprendizaje con las

    que

    se puedan dentficar y de hacer que particpen

    en acciones

    discusiones

    y

    reflexiones que

    influyan en las

    comunidades que

    valoran;

    de

    manera

    similar

    s

    creemos

    que

    las

    personas que son

    productivas

    en

    una

    organizacin son las que ejecutan de una manera diligente los

    procesos

    de

    esa organzacin y que, en consecuencia, la

    clave

    del

    rendimiento

    de la or-

    ganizacin

    es

    la

    deHnicin

    de procesos

    cada vez ms

    eficaces y detallados

    para prescrit>ir

    las

    acdones de

    la

    gente, entonces tiene sentido disear y re-

    disear estos procesos de una manera abstracta para luego ponerlos

    en

    prctica.

    Pero, si

    creemos que quienes

    trabajan en

    una organizacin contribuyen

    a los

    objetivos

    de

    la misma participando con inventiva

    en

    prcticas que

    nunca pueden ser totalmente reproducidas por procesos institucionaliza-

  • 8/10/2019 Etienne Wenger Comunidades de Practica

    9/29

    28 I Contextos

    dos,

    entonces minimizaremos la prescripcin sospechando que un

    exceso

    de la misma entorpecer la misma inventiva que hace que las prcticas

    sean eficaces. Deberemos aseguramos

    de que nuestras organizaciones

    sean

    contextos dentro

    de los

    cuales puedan prosperar

    las

    comunidades

    que de-

    sarrollan

    estas

    prcticas. Tendremos

    que

    valorar d trabajo de construccin

    de comunidades y procurar que los participantes tengan

    acceso

    a los re-

    cursos necesarios

    para aprender

    lo

    que

    necesitan

    aprender

    con

    el fin

    de

    ac-

    tuar y tomar dedsiones que involucren por

    completo

    su

    propio conoci-

    miento.

    Si todo esto

    nos

    parece de sentido comn, entonces

    deberemos

    preguntarnos

    por qu ocurre tan a menudo que nuestras instituciones, adems de parecer

    inca-

    paces

    de

    provocar estos resultados,

    tambin parecen actuar contra ellos con

    un

    celo

    implacable. NatllraImente, parte

    de

    8 culpa se puede atribuir, con toda ra

    zn,

    fl

    conflictos de

    inters, a luchas

    de

    poder e incluso

    l

    la maldad humana.

    Pero esta respuesta es demasiado simple e innecesariamente

    pesimista.

    Tambin

    debemos recordar que

    nuestras

    instituciones

    son

    diseos y que nuestros diseos

    son consecuencia de nuestra comprensin, nuestras pers.pectivas y nuestras teo-

    rias.

    En

    eSte

    sentido,

    nuestras

    teoras

    son

    muy

    prcticas

    porque

    no

    slo

    enmarcan

    nuestras

    maneras

    de

    actuar,

    sino tambin y

    quiz

    sea ms importante cuando

    el

    diseo supone sistemas sodale - nuestras maneras

    de

    justificar

    nuestras accio-

    nes

    ante

    nosotros

    mismos yante

    los

    dems.

    En

    un contexto

    institucional,

    es difcil

    actuar sin justificar nuestras acd ones en

    l

    discurso de la

    institucin.

    En consecuencia,

    una reo

    ra

    social del

    aprendizaje no es una empresa ex-

    clusivamente acadmica. Aunque

    es

    cierto que

    su

    perspectiva puede sustentar

    nuestras investigaciones acadmicas, tambin e; importante para nuestras accio-

    nes

    cotidianas

    y nuestras polticas y para los sistemas tcnicos, orgnicos yedu

    cativos

    que diseamos. Por

    lo

    tanto,

    un nuevo marco de referencia

    conceptual

    para concebir

    el aprendizaje

    no slo tiene valor para

    Jos

    tericos, sno tambin

    para aquellos de nosotros -profesores, estudiantes, padres, jvenes, cnyuges,

    profesonales

    de

    la

    salud,

    pacientes, directivos, trabajadores,

    polftcos, ciudada-

    nos que, de una u otra manera, debemos dar pasos para fomentar el aprendi

    zaje el nuestro yel de los dems) en nuestras relaciones, en nuestras comunida-

    des

    y en

    nuestras organizaciones. De

    acuerdo con

    este espritu, este libro est

    escrito teniendo presentes al terico y al profesional en ejercicio.

    ontexto intelectual

    Como

    intento servir a

    un pblico

    muy

    diverso,

    me esforzar en proponer una

    perspectiva sinttica en lugar

    de

    entrar a fondo

    en

    los

    argumentos,

    los tecnids-

    Introduccin: una teora social del aprendizaje

    29

    mos y las controversias de una comunidad acadmica dada. En realidad, siempre

    que haga

    referenda a la literatura rcladonada con estos debates,

    lo

    har por me

    do de notas. Con todo, sigue siendo til dedicar

    algunos

    prrafos a perfilar las

    tradiciones intelectuales que han influido en mi pensamiento y cuya influencia

    he intentado entretejer esperando que esta obra

    haga

    algunas aportaciones. Si

    al-

    gn lector no est interesado, l hecho de saltarse este apartado

    no

    menoscabar

    su

    capacidad para

    seguir

    mi

    argumento.

    En

    un

    lbro

    anterior, la

    antroploga lean Lave y yo intentamos destilar

    8

    partir de varios

    estudios

    etnogrficos del aprendzaje-Io que estos estudios

    podran aportar a una general del aprendizaje.

    Nuestro

    propsto

    era ex-

    presar qu haba en el aprendizaje que

    lo

    haca parecer tan absorbente como

    proceso.

    Con

    este fin empleamos el concepto de participacin perifrica legti-

    ma para caracterizar el

    aprendizaje.

    Queramos

    ampliar

    las connotaciones

    tra-

    dicionales

    del

    concepto

    aprendizaje. desde

    la relacin profesor/estudiante o

    maestro/apreIldiz hasta la relacin participacin cambante

    y

    de transforma

    cin de

    identidad

    de

    comunidades

    de

    prctica. As pues,

    los

    conceptos

    de

    .identidad yde comunidad de prctica eran importantes pata nuestro argu

    mento, pero

    no

    fueron

    el

    centro

    de

    interes

    y

    en su

    mayor

    parte, se quedaron

    sin

    analzar.

    En

    este

    libro

    he

    dado protagonismo a

    estos conceptos,

    los

    he

    explora-

    do en detalle y

    los

    he empleado como principales puntos

    de

    acceso una teora

    social dd aprendizaje.

    E ~ t a teora del aprendizaje

    es

    pertinente

    para

    varias disciplinas nduyendo

    la antropologa, la

    sociologa,

    la psicologa cognitiva y

    social, la

    filosofa y

    la

    teo-

    ra

    y

    la prctica de

    las organizaciones y

    la educacin.

    Pero

    la tradicin principal

    a

    la

    que

    creo

    que pertenece este trabajo en cuanto a influencias y aportacio-

    n s

    es

    la teora social,

    un campo de investigacin

    conceptual no muy bien de-

    finido que se encuentra

    en

    la interseccin entre

    la

    filosofa, las

    ciencias

    sociales y

    las humanidades.)

    En este contexto,

    considero que esta teora social del

    aprendi

    zaje se encuentra

    en

    la

    interseccin

    de dos

    ejes

    principales

    formados por

    varias

    tradiciones intelectuales, como se ilustra

    eIl la

    figura 0.2. En las notas ir deta-

    llando,

    para

    cada una

    de las

    categoras, algunas

    de

    las

    teoras

    cuya

    influencia

    se

    refleja en mi propio trabajo.)

    2.

    }. Las e

    la teora

    sodal se

    remontan

    a los argumentos

    de

    Plat6n sobre la

    naturaleza

    de una repblica,

    Esta

    tradicin

    continu

    con la filosofa poltica europea. Segn

    el

    soc!ogo

    Anthony Giddens,

    que

    ha hecho mucho para establecer

    la

    teora social como tradicin intelec-

    ruallegtma y coherente, las races

    de

    la

    versi6n

    moderna de

    la

    teora

    social

    se encuentran

    en

    el

    trabajo del economista poltco Karl Marx y de los

    socilogos

    mile Durkheim y Max

    Weber

    (Giddens,

    1971). Pero la teora

    social es miS amplia que

    la mera

    sodologia

    aponaciones

    de campos como la

    antropologa,

    la

    ~ e o g r a f a la

    historia, la

    lingulSl!Ca.

    !ieraria,

    la filosofa. la economa lila pscologJa.

  • 8/10/2019 Etienne Wenger Comunidades de Practica

    10/29

    30 I

    Contextos

    lBorlas

    dEt la

    e ~ t r u c t u r sOCial

    leorla

    taorla

    da

    8

    prctica

    de

    la

    l d e n ~ d d

    teorlas

    da

    la

    IlKperlencia

    situada

    FIGURA 0.2. Los dos ejes principales de tradiciones relevantes.

    En la tradicin la teoria social, el eje vertical es fundamental.

    Refleja

    una

    tensin entre las teoras

    que

    dan primada a la estructura

    social y

    las que dan pri

    mada a la accin. Existe un corpus de trabajo muy grande que se centra en los

    choques entre estas perspectivas yen los intentos de conciliadas:

    las

    teoras de la estructura social dan primaca principalmente a

    las

    institu

    ciones,las nonnas las

    reglas.

    Destacan

    los sistemas

    culturales, los discur

    sos

    y

    la historia, Buscan las estructuras explicativas subyacentes que acla.

    ran las pautas sociales

    y

    tienden a ver la accin como

    una

    mera realizacin

    de estas estructuras en

    unas

    circunstancias especfficas. Los

    mls extrems

    tas niegan

    la

    agencia o

    e!

    conocimiento a

    los

    actores indivduales4

    teoras de la experiencia situada dan primada a la dinmica de la exis

    tencia

    cotidiana, la improvisacin, la coordinacin la coreografa de la

    in

    4.

    Dar

    primada

    a

    la estructura

    ofrece un

    gran poder analtico porque pretende explicar

    una gran variedad de casos mediante una estructura

    subyacente

    unificadora. Naturalmente,

    ste es el

    enfoque metodolgico

    del estructuralismo (LvStrauss, 19'8),

    aunque

    el

    inrers

    en

    la

    estructura por

    encima

    de unas

    acciones

    y tillOS

    actores

    concretos

    tambin

    es

    una

    caracteristi

    el de muchos enfoques que

    no

    se proclaman

    seguidores del

    estructurali.smo (Blau, 197.5).10'

    duso

    el

    historiador Michd Foucault (1966),

    que se distancia

    enrgicamente

    del

    estructurelis

    mo, acaba dando primada a los discursos histricos

    hasta

    el

    punto de poner en duda

    la

    relevancia misma de los sujetos individuales.

    Resolver

    la

    dicotomia

    entre

    estructUra

    y

    accin

    es

    la

    motivacin

    subyacente

    a

    la

    teora de

    la

    estructul'llcin

    de

    Giddens.

    que

    se basa

    en

    la idea

    de

  • 8/10/2019 Etienne Wenger Comunidades de Practica

    11/29

    32

    Contextos

    nizan y coordinan

    sus

    actividades, sus mutuas y sus interpreta-

    dones del

    mundo;b

    las teoras

    de

    la identid d se ocupan de la formacin

    social

    de

    la

    persona,

    la

    interpretacin cultural

    del

    cuerpo y la

    creacin

    y

    l

    empleo de

    marcas

    de

    6. El

    inters

    por cuestiones relacionadas con

    la

    prctica se remonta al

    empleo

    que hada

    Knrl

    Marx de la nodn

    de "'praxis

    como contexto sociohistrico para una explicacin materia

    lista

    de la

    condencia

    yla

    creacin de

    la

    historia (Marx,

    1844).

    Desde entonces,

    el

    inters

    por

    la

    prctica

    ha

    aparecido de muchu fonnas distintas para abordar la

    constitucin

    tanto de la cultu

    r

    en

    general

    como de las ctvidades locales, Mi propio inters en el concepto de la

    prctica tie

    ne

    su

    origen

    en

    mi

    trabajo

    con la antroplogaJean Lave, que lo habia empleado como

    aJ'gumen

    tO

    central

    en

    su

    crtica de los enfoques

    cognitivos y

    en su argumentacin

    de

    que la

    priktica

    sodal

    es la clave para

    captar

    la

    verdadera

    complejidad del

    pensamiento

    humaDO cuando

    se pro

    duce

    en la vida

    real

    (Lave, 1985; Lave, en

    preparacin)

    _ El socilogol

    antroplogo Pierre Bour

    dieu

    quiz

    sea l terico de la pncticlI ms

    destllcado. Emplea el concepto

    de prctica

    para

    oponerse a las el plicaciones puramente estructuralistlls o funcionalistas de la cultura y para des

    tacar l carcter generativo de la estructura por la que las

    culturales

    encarnan

    las rela

    dones de clese (Bourdieu. 1972,1979, 19S0),

    El

    crtico

    social Michel

    De

    Certeau (1984) emplea

    el

    concepto

    de "prctica para teorizar lo

    cotidiano

    como resistencia a estructuras hegemnicas

    y

    el

    consumo como talla de espados de produccin local.

    El

    crtico literario Stanley Fish (1989)

    emplea el concepto

    de prctica,.

    para explicar la

    interpretacin autoritaria

    de

    tel(tos

    en el

    con

    texto de

    lo

    que

    l llama

    comunidades

    interprerarvlIS.

    (V

    anse tambin,

    en

    Ormer,

    1984,

    una

    revisin de los usos dd concepto de prctica en la antropologfa como una manera

    de

    hablar

    de

    la

    estructura y del sistema sin suponer que tengan

    un

    efecto determinista en lo accin; en

    Chaildin y

    Lave, 1996, una recopilacin de perspectivas sobre la prctica;

    y

    en

    Turner,

    1994,

    una

    crtica

    del

    uso del concepto.) Adems, mi comprensin

    de

    este

    concepto

    ha recibido la influen

    cia de

    autores

    que no son

    tericos

    declarados de la prctica, pero cuyas teorias abordan cuestio

    nes

    relacionadas con ella. Estos autores son

    los

    siguientes (por orden alfabtico);

    1

    el

    cientfico

    informtico

    Pelle Ehn

    (1988)

    d diseo

    de

    sistemas infonnticos como

    creador de instmmentos para prcticas profesionales;

    2)

    el

    terico de la

    actividad Vejo

    Engestri:im

    (1987) -una

    perspectiva

    evolutiva de

    activi

    dades

    constituidas

    histricamente;

    3) el

    crtico

    social Jrgen Habermas (1984) e l mundo vivo y no el sistema como fondo

    para un racionalidad de la comunicacin;

    4) la

    gegrafa urbana Jane

    .1acobs (1992)

    -los distintos sistemas morales

    que

    gobiernan

    las

    prctcas

    econmicas

    y

    polticas;

    5)

    el

    socilogo de

    la

    ciencia Bruno Latour (Latour Woolgu, 1979)

    la

    ciencia como

    prctica, la factualidad como movililacin;

    6)

    el

    ilfIrroplogo Julian Orr 996)

    la

    prctca como memoria comunitaria por medio

    de narraciones compartidas;

    7) El

    socilogo

    de la ciencia Leigh

    Star

    (1989)

    ---

  • 8/10/2019 Etienne Wenger Comunidades de Practica

    12/29

    34

    Contextos

    teoras de

    la

    estructura

    social

    leoras

    de

    la

    teoras

    da la Identidad

    experl nca

    situada

    FIGURA

    OJ Interseccin

    n:flnada

    de las

    tradiciones intelectuales,

    las

    teoras de

    la colectividad

    abordan la fonnacin de diversos tipos de

    con-

    figuraciones sociales,

    desde las configuraciones locales

    (familias, comuni-

    dades,

    grupos, redes)

    hasta

    las

    globales

    (estados, clases sociales, asociacio-

    nes,

    movimientos

    sociales,

    organizaciones), Tambin

    intentan describir

    los

    mecanismos

    de

    cohesin

    social

    por

    medio de los cuales estas

    configuracio-

    nes

    se producen, se mantienen y se reproducen en

    el

    tiempo (soJidardad,

    compromiso, intereses comunes, afinidad);8

    8.

    Desde

    los primeros das de la teorl social, uno de los objetiv05 principales ha sido defi-

    nir tipos bsicos de configuracin social y analizar

    la

    fuente de su cohesin de sus lmites.

    Corno eemplos cabe

    mendonlU'

    las

    clases sociales

    (Marx, 1867); las sociedades y las

    comuni,

    dades (Tonaies, 1887); los

    grupos formados I?or medio

    de

    una

    solidaridad

    mecnica

    ba. 1ada

    en

    la

    simUitud,

    en

    lugar de

    una

    solidaridad

    orgnica

    basada en

    la

    complememariedad;

    los

    grupos

    profesionales

    (Durk:heim,

    UI93); los grupos abiertos y cerrados; los g r u p o ~ de nters (We-

    ber,

    1922).

    Desde una tradicin

    tericoprctica, el concepto de

    comunidad

    de

    prctica

    se

    centra

    en lo que las

    personas

    hacen

    coojuntamente

    y en los

    recursos culturales

    que as produ

    cen. En

    distntas tradiciones.

    las

    siguientes

    categoras

    estn

    muy

    relacionadas con

    las mas,

    aunque

    con U l enfoque

    distinto:

    en el interoccioni smo

    la

    teora de los mundos sociales desarrollada por

    el

    socilogo

    Anselm

    Stmuss

    y sus colahoradores (Strauss,

    1978;

    Star,

    1989)

    se ocupa de las configuraciones

    sociales creadas por un nters compartido: el mundo de las artes, el

    mundo

    del ftbol, el mun'

    do de los negocios. Esta teorla

    comparte

    mi nters por las perspectivas, los

    lrmites

    y la identi,

    dad, aunque mi nfasis

    en

    la prctica como fuente de

    cohesin

    coloca el aprendizaje en el centro

    del anlisis 1 da como resultad" un enfoque de textura

    ms

    fina. (Muchos mundos

    sociales

    son

    lo

    que

    yo llamo

    constelaciones

    de

    prcticas;

    vase

    el captulo 5.)

    La

    tradicin

    del imeracdonis-

    mo

    sodal destaca

    los

    grupos sociales y sus

    interacciones

    en la

    formacin de

    sociedades y

    lugares

    de identidad. En consecuencia,

    la

    pertenencia a mundos sociales

    es

    una

    cuesn de

    afiliacin

    y

    IntroduCCin:

    una

    teorra social del aprendizaje I

    3S

    las teoras

    de la

    subjetividad abordan la naturaleza

    de la

    individualidad

    como una experiencia de agenda. En lugar

    de

    dar por sentada una nocin

    de la agenda asodada con

    el

    sujeto

    individual

    como entidad autosuficien-

    te, intentan explicar cmo

    surge

    la experiencia de la subjetividad a partir

    del compromiso en el mundo sociaP

    El

    otro eje diagonal coloca el poder ent1'e la estructura

    social

    y

    la

    identidad;

    el

    significado, entre

    la

    ptctc3

    y

    la

    e:cperiencia.

    Como da

    a

    entender

    este

    eje, la

    conexin

    entre

    el

    poder

    y

    la produccin de

    significado es

    otro de los temas que

    subyacen a

    este

    libro:

    teoras de poder: la cuestin del poder

    es fundamental

    en la teora

    social.

    El reto consiste en encontrar conceptuaciones del poder

    que eviten

    unas

    la identidad es una cuestin de categoras sociales, En cambio, as teoras

    de

    la

    prctica destacan

    lo

    que

    hacen las personas y cmo otorgan significado a sus a c c i o n ~ y al mundo

    por

    medo

    del

    compromiso cotidiano. As

    pues,

    la afiliacin es una cuestin de

    participacin

    y

    de

    aprendiz,l1je

    la identidad supone

    maneras de

    relacionarse con

    el

    mundo, Con la nocin

    de prctica

    C'omo

    punto de partida,

    se

    hace necesario prestar atencin a

    los

    mecanismos de pertenencia

    ms all

    de

    ( afiliacin y as categoras sociales destacadas no son

    ms

    que una parte de

    la

    historia;

    en

    la psicologa sociol,

    la teorll

    de

    las

    redes (Wellman

    y

    Bel'kowtz,

    1988)

    rambin

    aborda

    un nivel de

    estructura

    nformal

    ddndo

    en funcin

    de relaciones

    nterpersonales,

    En

    las comunidades

    ele

    prctica se podran ver

    como

    nodos de vnculos fuertes en redes nter-

    personales, pero

    el

    nfasis

    vuelve a ser difereme. Lo

    que

    me

    interesa

    mI no es tanto la natu-

    ralez.a

    de

    las relaciones

    imerpersona es

    por medio de las cuales

    fluye

    la informacin como

    la

    naturaleza de lo

    que se

    comparte,

    se

    aprende

    y

    se convierte

    en

    fuente de

    cohesin, es decir,

    la

    estruc[Ura

    y

    el contenido de

    la

    pricdca;

    en

    la

    investigacin

    de las

    organi1.l1C1ones

    la perspectiva de

    las

    comunidades

    profesionales

    se contrasta con la de

    la

    estructura de

    la organizacin

    plU'lI expUclIl' la formacin de identi-

    dades en

    prctica. Aunque es

    ndudable que

    el aprendizaje

    es

    uno

    de

    sus intereses funda-

    mentales, estos estudios se centran principalmente en

    cuestiones

    de lIutocontrol profesional,

    de eliminacn de puestos especializados y de carrera

    profesional

    en relacin con situaciones

    laboraJes

    (Van

    Maanen y ~ r l e y 1984).

    9. La reladn del

    sujeto con

    el

    objeto de

    su candencia es una

    cuestin

    ya muy antigua

    que

    tradicionalmente se ha formulado

    como

    una

    relacin

    didica, pero que

    la teora sodal ha

    in

    tentado

    situar

    en

    un

    contexto

    goda ,

    La

    nocin de

    sujeto individual

    incluso

    ha

    llegado

    a

    ser

    puesta en duda por

    ciertos

    intentos realizados desde el posestructuralismo y

    el femnismo

    en-

    c:am.inados

    a descentrar

    al

    sujeto.

    es

    decir, a apartarse de

    un

    sujeto autosostenido como fuell-

    te de agencia y de

    significado.

    Los posestructuralistas descentran a

    la

    persona dando prima-

    ca 9 las

    formas

    de discurso o a estructuras semiticas histricamente constituidas donde la

    presencia,. del individuo

    es

    un epifen6meno. La subjetividad

    DO es

    mis que

    encontrar una

    posicin

    ..

    en este

    discurso

    (Foucault, 1966, 1971; Derrida, 1972; pero vanse algunas crticas

    constructivas en Giddens, 1979 en Lave y otros, 1992), El femnismo descentra la persona

    proponiendo

    nociones ms amplias de

    la

    subjetvdad

    (GWigan, 1982) y replanteando dicota-

    m[as

    clsicas

    como la

    vida pblica la

    privada

    o

    la

    produccin

    y 18

    reproduccin (Fraser, 1984)

    o el trabajo visible

    y el

    invisible (Daniels, 1987; Star, 1990b). Henriques otros (1984)

    y

    Ben-

    habb

    (1992) ofrecen dos interesantes intentos de unificar muchas_de estas perspectvas.

  • 8/10/2019 Etienne Wenger Comunidades de Practica

    13/29

    36

    Contextos

    perspectivas simplemente

    basadas

    enel conflicto (el poder

    como domina

    cin, opresinoviolencia) ymodelos simplemente basadosen el consenso

    poder

    como

    alineamiento contractual o

    como

    acuerdo

    colectivo que

    confiere

    autoridad,por

    ejemplo, a

    unos

    ce.rgos

    elegidos);Hl

    las teorias

    del

    significado

    intentanexplicar

    cmo las personas

    producen

    sg

    nincadospor

    su

    cuenta. (Estas teoras son diferentes

    de

    las teoras de signi

    ficado

    de

    la ftlosofB

    del

    lenguaje

    ode

    la

    lgica,

    dondeel inters

    principal

    se

    centra

    en la correspondencia

    entrelas

    afirmacones yla realidad.)

    Como

    esta nocin de produccnde

    significado

    tiene que ver con nuestra capa

    cidadde poseer significados, suponecuestiones de

    participacin

    social y

    de relaciones de poderde una

    manera

    fundamental. En

    efecto,

    muchas teo

    ras

    deesta categora se han ocupado

    de

    cuestiones de

    resistencia al

    poder

    institucional

    o colonial mediante la produccincultural local. I

    El

    objetivo

    de este libro

    no

    es proponeruna

    sntesis

    presuntuosade

    e ~ t a s tra

    dciones

    intelectualeso

    una resolucin

    los

    debates que reflejan; mi objetivo

    es

    mucho ms modesto. No obstante,

    el hecho

    de que cada una de stas tradiciones

    tenga

    algo

    cnlcial

    que aportaralo que

    yo llamo

    una

    teora

    social

    del

    aprendizaje

    es

    interesante

    en s

    mismo,

    Muestra

    que

    desarrollar

    una

    teoria

    como

    sta

    se

    pare

    ce mucho adesatrollar

    una

    teorfa

    del

    orden

    social basada

    en

    el aprendizaje.

    En

    otras

    palabras,

    el aprendizaje

    es

    tan fundamentalpara

    el

    ordensocial de

    acuerdo

    con el

    cual

    vivimos,

    queteorizar

    sobre

    uno

    equivale

    ateorizarsobreel

    otro.

    lO

    Cualquier

    intentodeabordarel mundo sodalse debeenfrentar

    JI

    cuestiones

    relacio

    nadas

    con el

    poder(Giddens,

    1984). Mi

    intentodedesarrollar

    un

    conceptodepoder centra

    do en

    IR

    nocin de

    identidad (captulo

    9)

    no abordadirectamentelas

    cuestiones relaciona

    das con el

    poderinstitucionalizado

    en trminos eCQnmcos y

    polticos

    en las que

    se han

    interesadolas teoras tradicionales como, porejemplo, la propedadprivada

    y

    las relaciones de

    dHse (Marx, IB67),

    la radonalizadn i n ~ t i t u r : i o n l l l

    (Weber, 1922; LukPcs,

    1922; Latour, 1986)

    oe1apnato ~ t u l

    con

    legitimacin de autoridad

    y

    uso de la

    fuerza

    (Pilnons,

    1962;

    Althusser,

    1984; Giddens, 1995). M propiaconcepcin estl ms en lnea con las teoras que se

    interesan

    por las relaciones

    de

    poderen el mbto simblico: deologa y hegemona (Gramsc, 1957); ca

    pital simblico

    o

    cultural (Bourdieu,

    1972,

    1(79)

    formas

    omnipresentes

    de disciplina

    susten

    tadas

    pordiscursos que

    definen

    conocimiento y

    verdad

    (Foucault, 1971, 1980 . Naturalmente,

    las

    distintas f o r m ~ s

    de

    poderen una sociedad interaccionan entre

    s,

    a

    veces reforzndose mu

    tuamentey veces creando espacios de resistencia,

    li

    La

    constitucin social

    del

    significado

    ha

    sido abordada desde varias perspectivas

    (Lvi-Strauss,1958; Luckman,

    Bourdieu, 1972;

    Lave, 1988; Eclcen

    y MeCon

    nelI-Gnet,

    1992;

    Gee,

    1992;

    1995). Tambin abundaen la antropologala Iitel'atura so

    brela resistencia que estudialas que emplean las personas para producir sus pro

    pios

    significados

    en

    condiciones

    de opreiiin, sobre todo

    bajo

    el colonialismo (Comaroff. 1985;

    Ong.

    I987).

    Una lnea paralela de trabajo aborda cuestiones similares bajo diversos rdenes

    nsltucionales de las

    sociedades

    capitalistas: en la calle (Whyte, 1943: Hebdige.1979; DeCer

    teau, 1984).

    en

    el trabajo

    (Hocbschild,

    1983: Van

    Maanen,

    1991;

    Orf.

    1996) y

    en

    la escuela

    (Willis,

    1977;

    Eckert.

    1989;

    Mendoza-Denton,

    1997),

    Introduccin:

    una leora

    social

    del aprendizae I 37

    structura

    del libro

    Estelibro

    se divide

    en cuatro

    secciones:

    1) el prlogoestablece algunos

    contextos

    para

    el

    libro,

    2)

    la parte,tituladaPrctica abordala mitad izquierdade la figura

    0.1

    y

    3) la

    segunda

    parte,tituladaIdentidad aborda

    la

    mitad derecha

    de

    la

    figura

    0.1

    y

    0:3).

    4) el eplogo explora las implicaciones parael diseo

    de

    las partesprimeray

    segunda.

    Cada

    parteincluye una breveintroduccinquepresentael tems de

    la

    seccin

    y perfila su estructuracon

    sinopsis

    de cada captulo, adems de unacoda,

    un breve ensayo que cierra la seccin

    empl(iando

    sus contenidos para abordar

    un tema

    concreto.

    Prologo:

    vietas

    El resto este prlogo contiene

    dos vietas que

    describen uns

    comundad

    de

    prctica.

    Entre

    1989

    y

    1990 realic algunos

    estudios

    etnogrficos

    de

    campo

    en

    un centro

    de

    tramitacin de solictudes

    mdcas

    pertenecientea

    una gran

    compa

    a

    de

    seguros

    estadounidenseala que me referir con el seudnimo de Alinsu.

    Los empleados de este

    centro

    tramitaban solicitudes de

    seguros

    mdicos enviadas

    por personas que estaban cubiertasporun

    plan

    contratadoporsu empresa:

    IZ

    12,

    Todos

    los nombres empleados en mi discusin del centro

    de

    tramitacin

    de solicitudes

    son

    seudnimos.

    Se

    pueden encontraranlisis

    y

    descripciones de

    carlCter

    emogrfico

    ms

    det ll -

    dos en

    1990).

    M trabajo de campo dur aproximadamente un ao.

    Empec

    asistiendo a

    cursillos

    de incluyendo exmenes yuna entrevista

    de

    trabajo

    simulada.

    Luego me in

    un

    IlIBar de

    trabajo real

    integrndome

    en

    una

    unidad

    de

    tramitacin como

    observador

    pmtc:lpa:nte, Trl!ll.t

    solicitudes

    en mi propia mesa y

    particip

    en

    las

    conversaciones y

    en

    los even

    tos de la unidad. Adems deesta partcipscin directa.

    entrevst

    a

    VllriOS

    principiantesy

    tramitadores. algunos porseparado

    y

    otros

    en

    grupos pequeos. Siempre que era

    posible intenta

    ba recibir

    toda

    mi

    informaci6n

    por

    los

    mismos

    canales

    que los

    aprendices

    y

    los

    tramitadores con

    Jos que trabajaba. Y, aunque Iltent teneruna experiencia lo mls autntica posible, nunca ocult

    mi identidad;

    todos

    los

    implicados

    supieron

    en

    todo momento

    que era

    un

    investigador.

    El

    centro

    empleaba aunas 200 penonasagrupadas en unidades de 1 5 a25 trabajadores. Las

    solicitudes se envaban porcorreo. Eran recibidas porel departamento

    administrativo

    y luego

    eran clasificadas

    y

    remddas a

    las

    unidades

    de

    tramitacin. Los tramitadores nunca pagaban a

    los

    dientes,Cuando tramitaban una solicitud, Il!roducan

    toda

    la informacin en d

    sstema in

    formtico. esta informacin era enviada auna sede centralizada desde donde se envia

    ban los cheques aclientes oalos

    proveedores

    de servicos, Nadie

    espel'llba

    que los tramitadores

    de

    solicitudes de Alinsu

    pusieran

    en dudaninguna cuestin de

    carcter

    mdico. El objetivo de

    la tramitacin no era llegar aun

    acuerdo,

    como en el caso ms complejo de

    los

    seguros de acci

    dente

    (fuego y trfico). El

    prop6sitoeraevaluar lo razonable de

    los

    gastos mdicos, verificar

    la

    cobertuNl

    del seguro del pacienteycalcular les prestaciones con mayor

    diligencia posible.

  • 8/10/2019 Etienne Wenger Comunidades de Practica

    14/29

    39

    38

    Contextos

    la viet

    1es una descripcin muy detallada de una jornada de trabajo

    ca de un tramitador de solicitudes.

    Su

    objetivo

    es

    proporcionar una ima

    gen

    de

    una

    comunidad de prctica desde el punto de vista de una parti-

    cpante, a la que llamar Ariel,

    y

    que,

    si

    bien

    es

    representatva

    de

    estos

    tramitadores, en realidad es un personaje compuesto. La jornada

    que

    des

    cribo es representativa de una jornada real y presenta una coleccin de

    eventos

    reales, aunque los observ todos en

    el mismo da;

    la

    viet I

    describe

    el

    de un impreso creado por

    Alinsu

    para

    facili

    tar

    un

    clculo. Este CaSO ilustra

    el

    tipo de problemas que puede surgir

    cuando se

    pide a

    Jos

    trabajadores que apliquen un procedimiento sin que

    tengan

    una comprensin adecuada de la naturaleza

    de

    las actividades ln-

    la cod

    resume las vietas introduciendo una perspectiva

    la

    com

    prensin.

    Incluyo

    estas vietas para dar un poco de vitalidad a

    mi

    desarrollo tetco y

    con

    frecuencia me referir a los tramitadores de soldtudes para ilustrar lo que

    I

    ,

    yo digo, Sin

    embargo, estos ejemplos son

    muy

    fciles

    de

    comprender

    y

    no

    es in

    dispensable leer

    las

    vietas.

    La.

    vieta es ms til para

    l

    captulo 9 y aunque

    las

    vetas

    no se

    lean,

    ser

    conveniente mirar

    la

    figura

    0.4

    porque

    me

    referir

    en

    1

    muchas

    ocasiones

    al

    impreso para calcular

    que se

    muestra en

    ella.

    '11

    :I

    Las prcticas

    estadounidenses modernas

    de la

    tramitacin de solicitudes mdicas son

    el

    resultado

    de la

    historia concreta

    de los seguros mdicos en

    Estados Unido"

    Sus orgeoes

    se

    remontan

    al siglo

    XIX, cU8l'1do, despus de

    la

    transformadn de la

    econornfa

    domstica en

    1

    una economa

    basada en trabajos asalariados, algunos Estados europeos pusieron en marcha

    vatios

    programQS de seguridad social en respuesta al malestn de Jos trabajadores, para

    ase

    gurarse la

    lealtad

    de la clase

    obrera.

    Sin

    emblirgo, Estados Unidos tom

    un

    camino

    diferente

    que. desemboc en un sistema principalmente privatijado.

    Los

    seguros mdicos comerciales

    se imentaron implantar (sin xito al principio)

    ya

    a medados

    del

    siglo

    XIX.

    Diversas mutuas

    ysndicatos tllffibin

    haban

    estado

    ofreciendo

    algunas formas de cobertura.

    Pero

    no fue has

    tll

    principios del siglo

    XX

    cuando

    el

    debate sobre

    cmo

    debera

    abordar

    la

    nacin

    el

    proble-

    ma

    de los

    seguros

    sanitarios

    se

    convirti

    en

    un importante problema pblico,

    aunque

    este

    debate nunca condujo a

    un

    sistema nacional parecido Iadoptado por algunos pases euro-

    los seguros mdicos comercales

    empezaron

    a

    tomar

    forma

    en

    Jos aos

    treinta,

    cuando

    xito

    de los

    experimentos

    de la Cruz

    Azul original convenci a las compaas comerciales

    para que

    ofrecieran unas formas Iimtadas

    de

    cobertura sanitaria. Desde aquellos das,

    los se

    guros sanitarios han

    desarrollado una gran industria que

    en

    el momento de mi estudio haba

    crecido

    hasta

    proporconu una cobertura muy

    amplia,

    en su

    mayor

    parte

    mediante

    seguros

    colec1.lvos pagados

    por las

    empresas del

    tipo que administraba

    Alinsu. Se puede

    encontrar

    una

    explicadn accesible de

    la

    historia

    de la

    industra

    de

    los seguros mdicos en

    el

    libro

    es

    crito

    por el socilogo Paul Starr (1982) sobre la transformacin soal de

    la

    medicina esta

    dounidense.

    IntroduccIn: una

    teora social

    del aprendizae

    Primera parte prctica

    En la primera parte se ofrece una serie caracterizaciones

    concepto de

    comunidad de prctica, incluyendo:

    1) el nivel de anlisis en el que es til l concepto prctica,

    2) las caracterstica.s que definen una comunidad practIca,

    3) la

    evolucin

    de las

    comunidades

    de

    prctica a

    10

    largo del tiempo,

    4) los

    lmites

    y

    las

    relaciones

    entre comunidades

    de

    prctica,

    5) las constelaciones formadas por comunidades de prctica relacionadas

    entre

    s.

    La primera parte finaliza con un ensayo sobre conocer

    en

    la

    egunda parte identidad

    La

    segundil

    parte

    se

    centra en

    la

    identdad. Este cambio

    de

    enfoque de la

    prctica a la identdad desde la

    misma

    perspectva analtica tiene las siguientes

    consecuencias:

    1) inyecta la nocin de (persona en

    la

    teora

    sin

    tener que po:;tular, para

    empezar,

    un

    sujeto individual;

    2) ampla l mbito de investigacin a configuraciones sociales distintas de

    las definidas por

    la

    ya

    los

    mecanismos por los que

    estas

    configu

    raciones se convierten en contextos para la formacin

    de

    la identidad;

    3)

    requiere una teora del poder para caracterizar

    la

    formacin

    de la

    identi-

    dad en

    la

    prctica

    como

    la

    de

    negociar una experiencia de

    nficado,

    En consecuencia,

    la

    segunda parte complementa

    la

    primera. Aboga por

    Ufll do

    ble rehlcin entre

    la

    prctica

    y

    la identidad

    y

    algunas limitaciones dd

    con

    cepto de comunidad de prctica situndolo

    en un

    marco de referencia

    ms am-

    La segunda fmaliza con

    un

    ensayo

    sobre

    comunidades de aprendizaje.

    Eplogo

    diseo

    A modo

    de

    conclusin, tratar algunas cuestiones relacionadas con

    el

    diseo

    yel apreodizae.

    En

    primer lugar utilizar los contenidos de partes primera y

    segunda pata describir

    las

    dimensiones

    y los

    componentes

    de un

    diseo orienta-

    do

    al

    aprendizaje. Luego emplear este marco de referencia para discutir dos

    ti

    pos diseo social:

    1)

    organizaciones

    y

    su relacin con la prctica,

    2)

    la educacin

    y

    la formacin de identidades.

  • 8/10/2019 Etienne Wenger Comunidades de Practica

    15/29

    oda :

    comunidades de

    aprendizaje

    En la

    coda

    1he argumentado

    que

    el aprendizaje supone una interaccin en-

    tre experiencia

    y

    competencia

    En las comunidades de

    prctica

    la definicin de

    competencia

    y la

    produccin de experiencia mantienen una estrecha

    interac-

    cin. Por lo tanto

    el

    compromiso mutuo

    en

    una prctica compartida puede ser

    un proceso

    intrincado

    de ajuste

    constante entre

    experiencia

    y

    competencia.

    Como

    este proceso es bidireccional

    las

    comundades

    de

    prctica no slo son un

    contexto

    para

    l

    aprendizaje

    de

    los

    principiantes sino

    tambin

    y por las

    mismas

    razones

    un

    contexto para transformar nuevas

    vsiones en conocimiento.

    1

    I

    por

    un

    lado

    una

    comunidad de

    prctica

    es un contexto

    viviente

    que puede

    ofrecer a los principiantes acceso a

    la

    competencia yque tambin pue-

    de provocar una experiencia personal de compromiso

    por

    la que incorpo-

    rar

    esa competenca

    a

    una

    identidad de participacin. Cuando estas condi-

    dones

    se

    cumplen las

    comunidades

    de prctica

    son

    un lugar privilegado

    para la

    dquisicin de

    conocimiento;

    i

    por otro lado

    una

    comunidad de prctica que funcione bien es un

    contex-

    I

    to

    adecuado

    para explorar

    visiones

    radicalmeme

    nuevas

    sin

    convertirnos

    n tontos ni

    atascarnos

    en

    un callejn

    sin salida. Una historia de compro-

    \

    miso mutuo

    en

    torno a una empresa conjunta es un contexto ideal para

    I

    1. De nuevo debo insistir

    en

    que ver las comunidades de prcuca como lugares privilegia-

    1

    dos

    de aprendizaje

    no implica que pertenecer a

    una sea algo absolutamente positivo.

    La afilia

    I

    cn no es

    necesariamente

    un

    proceso positivo. elevado

    o

    potencador.

    La

    palabra aprendizaje

    I

    tiene

    connotadones positivas; es

    ms

    fcil decir que un vecino estl aprendiendo con xito a

    ejercer la medicina que dedr que nuestro primo est aprendiendo con xito a delinquir

    en

    la

    1

    calle.

    La

    afiliacin con

    xito

    a

    una comunidad

    de

    prctica supone

    aprendizaje

    pero el hecho

    de

    que

    esto sea bueno o malo

    es

    otra

    cuestin.

    I

    I

    I

    I

  • 8/10/2019 Etienne Wenger Comunidades de Practica

    16/29

    26 I Identidad

    este tipo

    de aprendizaje

    avanzado,

    que

    requiere

    un fuerte vnculo

    de

    com-

    petencia

    comunitaria

    junto

    con un

    profundo respeto por

    la

    particularidad

    de

    la

    experiencia. Cuando estas condiciones se cumplen,

    las

    comunidades

    de prctica son un lugar privilegiado para

    la

    creacin de conocimiento.

    Esta

    estrecha interaccin

    entre experiencia y

    competencia

    es

    un

    terreno

    frtil

    para el aprendizaje, pero he

    insistido

    en que los dos

    deben permanecer

    en ten-

    sin. Si se acomodan en un estado congruencia

    cerrada

    el aprendizaje se ir

    reduciendo

    y

    la

    prctica

    se estancar.

    Los conceptos presentados

    en

    la

    segunda

    parte pueden ayudar a describir Jos

    medios

    por

    los

    que

    una

    comunidad

    de prc-

    tica puede mantener

    viva

    esta

    tensin

    y ser

    as

    una comunidad de

    aprendizaje.

    Esta comunidad no slo incluye el aprendizaje :omo norma

    en

    la historia de

    su

    prctica, sino que tambin lo incluye en el centro mismo de

    su

    empresa. Para

    construir

    una caracterizacin de una

    comunidad de aprendizaje, repetir breve-

    mente los

    temas

    de cada

    captulo

    de

    la segunda parte.

    Aprendizaje

    identidad en la prctica

    Como

    el

    aprendizaje

    transforma quines somos

    y

    lo

    que

    podemos hacer,

    es

    una experiencia

    de

    identidad.

    No

    es slo

    una acumulacin

    de

    detalles

    e informa-

    cin,

    sino

    tambin

    un

    proceso de

    llegar a

    ser, de convertirse en una

    persona

    de-

    terminada

    o,

    a

    la

    inversa, de evit ar

    convertirse

    en

    determinada

    persona. Incluso

    l aprendizaje que tealizamos

    totalmente por nuestra cuenta

    acaba contribuyen-

    do

    a convertirnos en una

    clase

    especfica de persona. Acumulamos capacidades

    e

    informacin,

    pero

    no

    en abstracto como

    un fin

    en s

    mismo,

    sino al servicio de

    una identidad.

    En esa formacin de una

    identidad el aprendizaje

    se

    puede con-

    vertir

    en una

    fuente de

    significado

    y de energa

    personal

    y

    social.

    Visto como una experiencia de identidad el

    aprendizaje

    supone tanto

    un

    pro-

    ceso como un lugar.

    Supone

    un proceso de transformacin de

    conocimiento

    ade-

    ms de un

    contexto en

    el que definir una

    identidad

    de participacin. En conse

    cuencia, apoyar el

    aprendizaje no slo supone apoyar el proceso de

    adquirir

    conocimiento, sino tambin ofrecer un lugar

    donde

    se

    puedan plasmar

    nuevas

    maneras de

    conocer

    en

    la

    forma de esa

    identidad.

    En consecuencia, si

    alguien

    no

    aprende

    como

    se

    espera,

    puede

    ser necesario considerar, adems de los

    posibles

    problemas

    que pueda tener

    el proceso, la

    falta

    de un

    lugar

    como

    el mencionado y

    la

    competicin de

    otros lugares.

    Pata redirigir el

    aprendizaje, con

    frecuencia pue-

    de

    ser

    necesario

    ofrecer a

    los aprendices formas alternativas de

    participacin

    que

    sean una fuente de

    identidad

    en la misma medida que las fuentes que

    encuentran

    en otros lugares.

    La

    prctica

    transformadora

    de una comunidad de aprendizaje

    ofrece

    un

    contexto ideal para desarrollar

    nuevas

    comprensiones porque la comu-

    nidad sustenta el cambio

    como

    parte de

    una

    identidad

    de participacin.

    Coda : comunidades

    de

    aprendizaje

    261

    Como tnyectora una identidad debe incorporar

    un pasado

    y

    un futuro.

    Las

    comunidades de

    aprendizaje se

    convertirn

    en lugares

    de identidad

    en la medida

    en que

    posibiliten

    trayectorias, es

    dedr

    en la medida en que ofrezcan un

    pasado

    y

    un

    futuro

    que

    se puedan experimentar

    como una trayectoria personal.

    A este

    respecto,

    una comunidad puede fortalecer

    la

    identidad de participacin de

    sus

    miembros

    de

    dos maneras relacionadas

    entre s:

    1} incorporando a su historia el pasado de

    sus

    miembros, es

    decir,

    permi-

    tiendo que

    lo

    que han sido, lo que

    han

    hecho y

    1

    que saben

    contribuya

    a

    la

    constitucin de su prctica;

    2)

    abriendo

    trayectorias de

    participacin

    que coloquen el compromiso con

    su

    prctica en

    el

    contexto de

    un

    futuro valorado.

    De

    manera

    similar,

    he

    argumentado

    que

    la experiencia

    de multiafiliacin pue-

    de llegar

    a ser

    tan privada

    que

    ya no encaje en la empresa

    de

    ninguna comunidad.

    El trabajo

    potencialmente

    dificil de la conciliacn

    puede

    ser facilitado

    por

    comu-

    nidades

    que

    intenten abarcar, dentro de

    su

    propia prctica,

    una

    porcin cada

    vez

    mayor del

    nexo de multiafiliacin de sus

    miembros. Por ejemplo,

    algunos

    traba-

    jos

    estn tomando medidas para

    redudr

    la

    diferencia entre

    las responsabilidades

    familiares

    y

    las laborales. En

    otras

    palabras, el

    trabajo

    de conciliacin se

    puede

    in

    tegrlu

    en la empresa de la

    comunidad para que

    as, en cierta medida, se convierta

    en

    parte

    de

    una

    prctica

    compartida de aprendizaje. Estas comunidades no slo

    obtendrn

    la

    lealtad de

    sus

    miembros,

    sino

    que tambin enriquecern sus propias

    prcticas.

    Partcpacin y no participacin: periferia y margina idad

    Cuando una comunidad hace del aprendizaje

    una

    parte fundamental

    de

    su

    empresa, la

    sabidura

    til

    no se concentra

    en

    el

    ncleo de su

    prctica.

    Existe una

    sabiduria

    perifrica, una visin de la

    comunidad

    que

    puede pasar desapercibida

    para los

    pandpantes

    de

    pleno

    derecho

    y que

    incluye sendas

    no

    seguidas, cone-

    xiones pasadas por alto,

    opciones

    dadas por sentadas_ Pero este tipo de sabidu-

    ra

    suele permanecer invisible incluso para

    quienes mantienen su

    potencial

    por-

    que

    es

    fcil que acabe

    siendo marginada

    dentro de

    los

    regmenes

    establecidos de

    competencia. Obsrvese que aqu

    intervienen

    dos tipos

    de

    marginalidad

    que

    re-

    flejan la

    dualidad comunidad-identidad:

    1) marginalidad de

    la

    compete