publicado en …...corria el ana 1975 y oteiza ya habia traji-nado bastante, yaqui hallo el espacio...
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ESTELA FUNERARIA AL
AITA DONOST!. 1958.
MONTE AGINA. LESAKA.
ongevo, intenso, polemista, investigador, genial,humanista ...Jorge Oteiza Embil (Orio, 1908 -Donostia, 2003) es considerado por muchos elpadre de la escultura vasca y estatal recientes,como pudimos ver hace un ano en CulturalCor on d{; 13. rgos, en una exposicion sobre losperiodos creativos del artista. Para su amigo yarquitecto Juan Manuel Fullaondo, la culturapeninsular tenia una "inmensa deuda" con elviajado y multifacetico creador, cuya produc-cion respondia a una permanente sed intelec-tual e inconformismo. Oteiza, que reivindicaba"museos para el hombre" dimdose energicos gol-pes en el pecho, vio su obra constreiiida cuandoel Guggenheim Bilbao la mostro en 2004: susbusquedas y hallazgos no respiraban como ensu Museo de Altzuza (Nafarroa), donde se con-gracian con su amigo arquitecto Francisco JavierSaenz de Oiza, quien ideo un espacio con precio-sas vistas y tenues luces, en el que se despliegabuena parte de la infinita produccion del autor.Que comprendia de su propio vigor y vehemen-cia al afirmar "No soysolo uno, almenos soydos".
A veces como una hormiguita, lasmas con arre-batadora potencia, Oteiza fue creador, pensador,etitico, filologo y escritor, ademas de experimen-tador en musica, cine, antropologia y politica. Suvasta produccion se despliega, como d, como unMar Cantabrico, con fuerza, arrogancia, melo-dias y silencios, especial mente en el museo dela Fundacion Oteiza, pero tambien en el BellasArtes de Bilbao, el Guggenheim, el Reina Sofia,el
Macba y,ahora, en SanTelmo.Y en fundaciones,museos, colecciones particulares, universidadesy plazas de pueblos y ciudades detoda EuskalHerria y,mas alIa, de Madrid, Barcelona, Paris,Brasil 0 Nebraska, por citar algunos destinos. Eramuy grande como para no expandirse de estamanera. Su presencia publica es notable y prolon-gada en el tiempo, y cada proyecto esta marcadopor las circunstancias del creador. £1 trabajabaa menudo con formatos minimos (reivindicabaque la grandeza debia caber "en el hueco de unamano"), pero en sus ultimos anos de vida reali-zo bastantes ampliaciones; algunas, ex pro/eso, yotras, como reconocimiento a su carrera.
Piedra, hierro, porcelana, alabastro, acero, bron-ce, cemento, tiza...fueron losmateriales que traba-jo Oteiza en su nutrida trayectoria. Sin embargo,el siempre explorador y humanista oriotarra con-centro en un periodo de 27 anos su extraordinariaproduccion escultorica, y en la ultima etapa de suvida yano se reconocia escultor. Habia ido despo-jando a lamateria de simisma,buscando la esenciadel vacio, realizando obras mlnimas, que no mini-malistas: "Creo con nadas que son nadas", llego aafirmar. Siguiendo el analisis del presidente de laFundacion Museo Jorge Oteiza, Pedro Manterola,el trepidante autor mostraba su "desprecio" por lamateria, y su desarrollo intelectual va mucho masalIa de su relacion con la escultura. £1 mismo sedeclaraba un "conspirador metafisico", que emu-laba los cromlech al "volar contra la Naturaleza".£1, decia, la traspasaba (Quosque tandem ...', 1963).
VARIANTE OVOIDE DE
LA DESOCUPACION DE
LA ESFERA. 2002. PlAZA
ERKOREKA. BILBAO.
"t."-o- etl\. ~"J ru,t, JtI\. ~"J"
t1I
acido bfi el seno de una familia numerosa deOrio; jo~ge abandon6 la carrera de Medicina,onsci~tte de que 10 que Ie llamaba era el Arte.~ IIor razqnes laborales, su padre tuvo que trasla-
\ 'M% d'd 11' , 1 .,~rse t· an, y a 1arranco a preocupaClOnid~n~i~:aiiavasca en el controvertido genio, que10 a}om~anaria siempre. De 1935 a 1948, vivinien C~ll~ y Buenos Aires, donde se entrelaza
MIRADOR MIRANDO.
1958. CAJA METAFislCA EN
El EXTERIOR DEL MUSED
ARTIUM. GASTEIZ.
con la comunidad que promueve el nuevo arteeuskaldun, no tanto el folklore como una nece-sidad de renovaci6n. AlIi estrechara lazos conBalenciaga y se casani con Itziar Carreno.
Tambien march6, tras la guerra civil, a Paris,en busca de libertad y de campos en los queinvestigar. Antes de partir a America, ya habiaexpuesto en el Kursaal donostiarra, y en elnuevo continente desarrollara una intensa
actividad artistic a, en la que mas tarde des-tacara su Gran Premio de Escultura en la IVBienal de Sao Paulo (1957).
A su vuelta de Sudamerica, empieza su cons-piraci6n contra la materia, como vemos enCoreano (1950), pieza de la que realizaria unaampliaei6n en bronce que, desde 1999, se alzaen la Plaza del Conde Rodezno de Irunea, frenteal homenaje a los caidos de la guerra civil. Enella ya plasma sus elucubraciones sobre la des-trucci6n y la desesperaci6n humana.
Pera, sin duda, su estatuaria de la Basilicade Arantzazu (Onati) sup one una inflexi6n ensu trayectoria. Hablamos de los prolific os anos50 del siglo xx, en el arte moderno vasco y enla producci6n oteiziana en particular. En elproyecto de Saenz de Giza participan NestorBasterretxea, Joaquin Lucarini, Carlos Pas-cual de Lara y Agustin Ibarrola. Oteiza ya estaechando un pulso indisimulado a la materia,ademas de que su friso contendra 14ap6stoles,segun el, "porque no cabian mas".
Este vanguardista proyecto no estara exento depresiones, y el Obispado de Donostia interrumpelas obras escult6ricas. Dicha censura inspirara aOteiza a publicar Androcanto y sigo (1954), unode sus libros celebres. Mientras tanto, recibe elPremio Nacional de Arquitectura y es seleceio-nado en el concurso internacional para el Monu-menta al Prisionero Politico Desconocido. Contodo, el osado escultor logra retar alas figurasantropom6rficas, creando el hiperboloide, des-tripando a los ap6stoles -como ya hieiera conCoreano-, haciendolos c6ncavos. Estos tuvieronque aguardar a elevarse a la Basilica, tumbados,en la carretera, censurados, hasta 1968.
Mater:j alesmetatislCOS
Pues si, cuando fue premiado en Sao Paulo,Oteiza afirmo: "No busco en este conceptode la estatua 10 que tenemos, sino 10 que nosfalta". Son palabras de su famoso PropositoExperimental (1957), que recoge el espiritudel proyecto reconocido internacionalmenteen Brasil. El vacio iba ganando terreno ensus prioridades, y las formas geometric as vandesterrando alas figurativas, concentrandoseel creador en los volumenes de la esfera y elcubo. Su Monumento al prisionero politicodesconocido (1952), que se colocaria en la pla-za de Felix Huarte irunarra en 2000, aun tiene
referencias figurativas. En el Museo Oteizapodemos ver sus estudios de paredes luz, enrelieve, y sus Formas lentas cayendose y levan-tandose en ellaberinto (1957).
De lahiperbola al plano Malevitch, como su pri-mera herramienta "desocupadora": un cuadrado 0
trapecio irregular que bromea con las perspectivas.La desocupacion obsesiona aOteiza, quien quierehacer esculturas con el vaciomismo como materialmetafisico. La Variante ovoide de fa desocupaci6n defa es/era, situada frente alAyuntamiento de Bilbaodesde 2002, constituye un buen ejemplo de esteperiodo de investigacioningravida.Esta basado ensuDesocupaci6n de fa es/era de 1958.Tambien de eseano de experirnentacion con el "espacio sagrado"es la CajaMeta/isica, cuya ampliacion en acero lucedesde 2003 enfrente del Artium gasteiztarra.
DETALLE OEl FRISO DE
LOS APOSTOlES DE LABASILICA DE ARANlZAZU.
ONATI.
~~~tleJ-•• iT
CoREANo. '950. PlAZA
DEl CONDE RODEZNO.
IRUNEA.
Es en ese 1958 prolifico cuando el geniodecide no ser ya escultor, cuando idea la Estela/uneraria al Aita Donosti, ubicada en el monteAgina (Lesaka), en un paisaje de cromlechs,sagrado y silencioso, esencia del alma vasca.EI espiritu vencio a la materia.
La obra publica oteiziana es muy intensa y,en opinion del critico de arte y profesor dela UPV-EHU Xabier Saenz de Gorbea, las pri-meras piezas que hizo son las mejores. De suultima etapa "desocupadora", es memorablesu Construccion Vacia del Paseo Nuevo donos-tiarra, que proyecto en 1957, en Sao Paulo, ydialoga con el Peine del Viento de Chillida des-de 2002, ante el batir del oleaje. Si se acercanpor Barcelona, los 3,7 metros en aluminio de
La ala se despliegan frente al Museu d'ArtContemporani de Barcelona (Macba). Mascerca, en Tolosa, destacan Atauts, en la Plazadel Triangulo, y Par movi£ en Benta Haundi,ambas en hierro e inauguradas en 1994. Para elcritico de arte Edorta Kortadi, ''Atauts es unaobra esplendida, quiza la mayor construccionde Oteiza del pais y del Estado". No exentasde polemicas, pues el autor oriotarra queriaque una cadena humana uniera Par movil,
homenaje al miembro de ETA Txabi Etxeba-rrieta, con la placa en Zizurkil en recuerdo delguardia civil que Etxebarrieta mato.
Precursor de Moore, se convirtio en revul-sivo cultural vasco con su Quosque tandem ...' alanalizar el alma vasca con su peculiar y apa-sionado prism a, y con su participacion en losgrupos de la Euskal Eskola Gaur, Emen, Orainy Danok. Mientras Gabriel Aresti publicabaHarri eta hem y fallecia Jose Antonio Aguirre.
Sus reconocimientos pasaran aun por elPompidou parisino, la Bienal de Venecia y elEuzkadi Saria, y sera nombrado doctor Hono-ris Causa por la UPV-EHU. En tan solo cuatroanos habia desarrollado la parte mas importan-te de su pensamiento teorico. Genio y Figura.
HOMENAJE A GALINDEZ.
1999. BOULEVARD
DE EUSKAL HERRIA.
GASTEIZ.
5iempre apasionado y atormentado, enarbolando la escultura comovia de provocaci6n, elogiando el fracaso para ser "feliz", el intensoJorge Oteiza era amigo de sus amigos, invitaba a 105 artistas a su
casa y compartfa con ellos sus desvelos y logros. Especialmente cascarra-bias ala vejez, el hipercrftico autor se reconcili6 con Chillida y con Saenzde Oiza, con 105 que habfa tenido sus roces. Con Nestor Basterretxeaconvivi6 en Irun y este guarda un hondo recuerdo de eI.Cuando anunci6 que la escultura se Ie quedaba corta, Oteiza se volc6en nutridos poemarios, como Elogio del fracaso e Itziar elegfa y otros
poemas, asf como ensayos siempre atrevidos y polemicos. Se Ie conocecomo escultor, pero la filosoffa fue la gran constante de su laureada tra-yectoria. Asf, en su ultima etapa creativa, el Laboratorio de tizas y maclas10 condujo desde el "mueble metaffsico" que era la estatua para el hastala simplicidad maxima. "Una 16gica pura", defini6. De ahf nacieron, porejemplo, la Estela a Madol de 1972 y el Homenaje 01caserfo vasco deBiarritz. A Itziar la IIor6 mediante sonadas esculturas, y siempre mantuvoque "Ia sensibilidad del artista sale del pueblo y vuelve con su pueblo,donde el hombre entero y el arte entero se hacen con 105 demas".
~ AL FIN,EL ESPACIO SAG __ADOPARA EL
os acercamos al pre-Pirineo navarro en unosdias piimaverales pero de luminosidad veranie-ga.La naturaleza, por ello, nos acoge exuberantey abraza con mimo el magico edificio ideadopor Saenz de Oiza, que se yergue, con elegante,repos'o, en el pueblo de Altzuza, con el Valle deEgiies en su regazo. Jorge Oteiza y su esposa,Itziar G: rreno, escogieron este lugar de encuen-tro con mil musascuando solo era unrincon abandonado.Corria el ana 1975 yOteiza ya habia traji-nado bastante, yaquihallo el espacio parasu anunciada voluntadde alejamiento. En elcubo de hormigon rojoconcebido por Saenzde Oiza, que integra lacasa-taller del artista,nada esta dispuesto alazar, y expresa muy bienel caracter reflexivo,creativo e investigadordel polifacetico escul-tor guipuzcoano. Y sugran ideacion estetica, sus textos analiticos, susinagotables escritos ...
El subdirector del Museo']uan Pablo Huerca-nos, se sumerge en su papel de cicerone incitadopor estas paredes que invitan a la metafisica. No
en vano envue1ven 1amorada del creador. Paredesde suave color salmon y algo desgastadas, comolas esculturas oteizianas que luego influirian enartistas como Jesus Lizaso. Amplios ventanales
de formato apaisado hablan de naturaleza viva,como si fueran cuadros de Jesus Mari Lazkano.Estamos viajando par el Universo Oteiza ...
Para el arquitecto amigo, este buscaba ser un"espacio sagrado para el arte". Sin luces deslum-brantes, y atravesando ramp as inspiradas en LeCorbusier, se van desplegando ante nuestros ojos1.690esculturas, 2.000 piezas de su trabajo expe-
rimental incluidas en suLaboratario de Tizas yuna extensa presenciade dibujos y collages.
Tras fallecer su com-paiiera Itziar,}orge cedioal pueblo de Nafarroagran parte de su obra ylibros, que el Patronatode la Fundaci6n Oteizagestiona. La bibliotecadel escultor habla de etnada menos que 6.000libros y 5.500 publica-ciones diversas,en cuyolomos destacan MenchuGal, Malevitch, poesia:temas cientificos, etno-graficos, filologicos...La
antropologia, lafilologiay la arqueologia que tantoIe movieron y que en ocasiones provocaban hila-ridad entre los profesionales de esos ramos. Latemas vascos que Ie obsesionaban ...Una coloristamesa ideada por Saenz de Oiza se rodea de tanros
Unpresos energlcos, como fo fuera su propletario.Su creacion fue muy consciente y muy medida.
Nada era gratuito. Su evocacion del silencio y delvacio,en medio de susbusquedas deconstructivas,
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T,ZAS DELLABORATORIO
EXPERIMENTAL E IMAGEN
DEL INTERIOR DEL MU-
SED OTEIZA. AlTZUZA.
se dan la mana can una vida de austeridad. No hay
mas que ver el rincon de su estudio, can una senci-
lla mesa de madera. El museD trata de plasmar su
proyeccion sabre 10 social, pues el arte, para Otei-
za, en si mismo no era nada: "La que me interesaes el hombre", auUaba, agitando sus brazos, como
enfurecido. Y era cririco can el mercado artistico.
-IALGUNOS UBROS IMPRESONDIBLES: I
LA ESCULTURA DEJORGE OrEIZA. UNA INTERPRETACION. Pedro Manterola. Fundaci6n Museo Oteiza, 2006.JORGE OrEIZA.JENIO HLJTSA. Nere Lujanbio. Elkar, 2008.OrE,ZA.LABORATORIO EXPERIMENTAL. Angel Bados. Fundaci6n Museo Oteiza, 2008.OrEIZA: UN GENIO PROTEICO, UN ARnST A POUEDRICO. Edorta Kortadi. Erein, 2005.QUOSQUETANDEM ••• !ENSAYO DE LA INTERPRETACIONEST"EnCADELALMA VASCA.Jorge Oteiza.Aunamendi, 1963. Pamiela, 1993.EsrtnCA DEL HUEVO. MENTAUDADVASCA YLABERINTO. A FULLAONDO EN MEMORIA Y HOMENAJE.Jorge Oteiza. Pamiela, 1995.ExISTE DIOSAL NOROESTE. Jorge Oteiza. Reeditado por Pamiela, 1993.
Jesus Lizaso sena/a 10 ironico de un polemista que
no creo tantas polemic as como habia pretendido ...
Cuando el Museo iba tomando forma, el ancia-
no Jorge, ya residente en Zarautz, se emocionaba
como un nifio. En eI podemos ver hoy esos escritos
anarquicos, con notas en los margenes, sin espa-
cios, abigarrados ...El Erisooriginal de los apostoles,
en escayola, reposa a media luz. Sus cajas metafi-
sicas invitan a la reflexion. En la planta baja, una
exposicion temporal de Palazuelo casa con el alma
del creador guipuzcoano, que danza por todas las
estancias. Curiosamente, los ninos, uno de losobjetivos del escu/tor, entienden a la prirnera sus
estudios del espacio y el vacio ...
Al salir del Universo Oteiza, s6lo el canto
de 10s pajaros interrumpe el suave silencio. El
sol sigue siendo generoso, y las vistas resultan
esplendidas desde el entorno del museo. En
Huarte la parada es tranquila, en comunion
con el espiritu que envuelve la visita, y ya en
lrunea la gente pasea, distendida, por sus par-
ques y plazas. Al tratar de partir de Nafarroa,
sus sierras imponentes nos acompanan con
insistencia, infatigables, kilo metro a kilometro,
como recordandonos que echaremos de menos
la esplendorosa belleza navarra, la que escogio
el Maestro para componer su musica creativa.
CRISTINA M. SACRISTAN
(BILBAO, 1968)
JORGE MORENO
(IRUNEA. 1967)