Fortaleza y EscudoTe ha pasado a ti, a mí y a todo el mundo. Y no es agradable. Cuando el temor se apodera de nosotros, el mundo se torna gris, y hasta se nos va el sueño.Esta debe haber sido la experiencia de Abram (a quien Dios luego llamaría Abraham) después de liberar a Lot.

Ya conoces la historia. Los reyes de Sodoma y Gomorra junto con otros dos reyes, se rebelaron contra el yugo que durante 12 años Quedorlaomer, rey de Elam, le había puesto. En la batalla que siguió, en el valle de Sidim, Lot fue tomado cautivo. Abram se entero de las malas nuevas, armó sus 318, y gracias a un ataque sorpresa, logro rescatar a Lot.

Entonces sucedió algo muy común en nosotros los humanos. En el momento de crisis, cuando los niveles de adrenalina están altos, somos capaces de hacerle frente a lo que venga. Después que pasa el susto, entonces nos invaden los temores a pesar en lo que podría haber sucedido o podría suceder.

Esta debe haber sido la experiencia de Abram. Lo imagino pensando: ¿y si estos reyes deciden atacar a mi familia, como represalia?.

Por supuesto Abram podría haber razonado que si Dios lo había protegido al derrotar a Quedorlaomer, también ahora podría protegerlo. Pero cuando nos asaltan los temores, de nada sirven los mejores razonamientos para ahuyentarlos. Y es que donde entra en juego nuestro buen Padre celestial: después de esto, el Señor le hablo a Abram en una visión y le dijo: “no tengas miedo, Abram, por que yo soy tu protector”.

En otras versiones de la biblia dice “yo soy tu escudo”. Estas palabras tienen que haberle sonado como música celestial al patriarca. Cuando nos asalta el temor ¿puede haber mejor escudo que el mismo Dios?

¿Podría pensar ahora en cual es tu mayor temor?¿fracasar en tus estudios?¿ser rechazado por tus amigos?¿hablar en público? Cualquier que sea tu temor, nunca olvides que el Señor es tu escudo y fortaleza.

Versículo: El Señor es mi poderoso protector; en el confié, y el me ayudo. Salmo 28:7

Reflexión: Padre mío, que tú presencia en mi vida sea hoy mi fortaleza y mi escudo protector.