El vagabundo del tren

Daniela Rodriguez Jerez

Esta es la historia de un buen hombre….

En la época de la edad media cuando recién se estrenaba los carriles de majestuoso tren, la gente se asombraba por tan bella y perfecta obra, ya que éste solucionaría la movilidad de los habitantes, era un proyecto prometedor

Del cual estaba a cargo el ingeniero más reconocido de la ciudad, Raúl Mendieta,un señor adinerado, con una reputación prestigiosa, el soltero más deseado por las mujeres

Un mes antes de que se le diera apertura al servicio, Raúl junto a sus compañeros se encontraban celebrando el su magnífica labor y el hecho de que todo estuviese saliendo de maravilla

De la nada apareció una joven muy hermosa, una trenza caía sobre su hombro derecho, su cabellera castaña oscura, ojos color miel, y una sonrisa encantadora, Raúl sintió una fuerte atracción por ella y sin dudarlo fue tras ella

Se dirigió hacia ella preguntándole su nombre, pero ella se alejo sin pronunciar palabra

El tomo su brazo e insistió por una respuesta, y ella contestó tartamudeando –Mi nombre señor, ¿Por qué quiere saberlo?-Tienes usted la mejor sonrisa que jamás vi en la vida-Debo irme, que pase buena noche caballero

Deslumbrado y pensativo por tan bella mujer, hizo hasta lo imposible por encontrarla

Una vez la encontró, deseo jamás perderla de vista otra vez.

Tiernamente empezó a volverse el dueño de los insomnios de la joven y de sus suspiros también, cuando estaba junto a él ya no sabia de tristezas. Salían en el tiempo que Raúl no estaba en la constructora, luego de dos años de que se inaugura el ferrocarril se celebra la boda de tan bonita pareja. Pero la joven sabía que no podría ocultarle por muchotiempo la verdad.

De pronto un dia llego a su casa con la intención de invitarla a cenar,

pero se llevó la sorpresa de que esta muy grave en el hospital, al llegar al lugar

se entera de que su amada esposa padece un cáncer terminal, el cual había

estado en su cuerpo desde su adolescencia, y por lo cual está muy avanzado

los médicos no dan muchas esperanzas.

Después de 38 días su esposa muere, y la felicidad de este buen hombre parte con ella, destrozado y desconsolado, encontrando como único refugio el alcohol, le entrega su vida a este mal vicio, no paraba de tomar todo el tiempo lo hacía. Después de un largo tiempo perdió toda su fortuna, no le importaba nada del mundo, solo recordaba a su dulce Alicia.

En ocasiones la gente murmuraba acerca de su demencia, se reían y le decían loco, dejó de cuidarse no se bañaba ni se afeitaba, todas las noches habitaba el tren que tanto éxito le dio y aun para él no significa gran cosa. Cada vez que llegaba a la estación, solo podía ver a su hermosa Alicia bajando de allí del brazo de un hombre apuesto y enamorado.

Vivio asi por mucho tiempo, llegó a ser un conocedor de calles, un llamado vagabundo.