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LAS MORADAS

FILOSOFALES

Fulcanelli

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ÍNDICE GENERAL

PREFACIOSPrefacio a la primera Edición Francesa ........................................ 3Prefacio a la segunda Edición Francesa ........................ .............. Prefacio a la !ercera Edición Francesa ....................................... 1LIBRO PRIMERO"is!oria # monumen!o ............................................................... $3Edad Media # Renacimien!o ..................................................... $%La al&uimia medie'al ................................................................. 33El la(ora!orio legendario ............................................................ 3)*u+mica # filosof+a ..................................................................... ,1La c-(ala erm/!ica ................................................................... 0

Al&uimia # espagiria ................................................................... 0)LIBRO SEGUNDOLa salamandra de Lisieu2 .......................................................... 3El mi!o al&u+mico de Ad-n # E'a .............................................. %)Lous d4Es!issac5 go(ernador del Poi!ou # de la Sain!onge5gran oficial de la corona # filósofo erm/!ico ..............................10El om(re de los (os&ues5 eraldo m+s!ico de 6iers ................. 130El mara'illoso grimorio del cas!illo de Dampierre ....................... 1,%Los guardias de escol!a de Francisco II5 du&ue de 7re!a8a ........ $1El relo9 del sol del palacio "ol#rood de Edim(urgo ................... $,3Parado9a del progreso ilimi!ado de las ciencias ........................... $01

El reinado del om(re................................................ $0$El dilu'io .................................................................. $0$La A!l-n!ida............................................................... $00El incendio ............................................................... $0La edad de oro ......................................................... $0)

PREFACIO A LA PRIMERA EDICIÓN FRANCESA

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Considerada largo tiempo como una quimera, la alquimia interesa cada día más al mundo científico. Los trabde los sabios acerca de la constitución de la materia y sus recientes descubrimientos prueban con toda evidencposibilidad de disociación de los elementos químicos. Ya no se duda ahora de que los cuerpos tenidos por simsean, por el contrario, compuestos, y la hipótesis de la insecabilidad atómica apenas encuentra ya partidariosinercia decepcionante desaparece del niverso, y lo que ayer se consideraba herejía se ha convertido hoy en dogCon una uniformidad de acción impresionante, pero en grados diversos, la vida se pone de manifiesto en losreinos de la !aturale"a, netamente separados anta#o, y entre los cuales ya no se hace distinción. $l origenvitalidad son comunes al triple grupo de la antigua clasificación. La sustancia bruta se revela animada y los selas cosas evolucionan y progresan en transformaciones y en renovaciones incesantes. %or la multiplicidad decambios y de sus combinaciones, se alejan de la unidad primitiva, mas para recuperar su simplicidad original el efecto de las descomposiciones. &ublime armonía del gran 'odo, círculo inmenso que el $spíritu recorre eactividad eterna y que tiene por centro la (nica parcela viviente emanada del )erbo creador. *sí, tras habalejado del recto camino, la ciencia actual trata de volver a +l adoptando, poco a poco, las concepciones antigula manera de las civili"aciones sucesivas, el progreso humano obedece a la ley indudable del perpetuo recomenespecto a todos y en contra de todos, la )erdad acaba siempre por triunfar, pese a su lento avance, penotortuoso. $l buen sentido y la simplicidad se sobreponen, tarde o temprano, a sofismas y prejuicios. -%uestonada hay escondido ense#a la $scritura que no deba ser descubierto, ni nada secreto que no deba ser conoci

(Mateo, X, 26.)&in embargo, sería erróneo creer que la ciencia tradicional cuyos elementos ha reunido 0ulcanelli se hapuesto, en la presente obra, al alcance de todos. $l autor no ha pretendido eso en absoluto, y se enga#aría dtodo quien esperara comprender la doctrina secreta tras una simple lectura. -!uestros libros no son escritos patodos 1repiten los viejos maestros, si bien todos son llamados a leerlos./ $n efecto, cada uno debe aportar esfuer"o personal, absolutamente indispensable si desea adquirir las nociones de una ciencia que jamás ha cesade ser esot+rica. %or ello, los filósofos, con objeto de esconder sus principios al vulgo, han cubierto el antigconocimiento con el misterio de las palabras y el velo de las alegorías.$l ignorante no es capa" de perdonar a los alquimistas que se muestran tan fieles a la disciplina rigurosa que haceptado libremente. 2i maestro, lo s+, no escapará al mismo reproche. *nte todo, le ha sido preciso respetar voluntad divina, dispensadora de la lu" y de la revelación. *sí mismo, ha debido obediencia a la regla filosófic

que impone a los iniciados la necesidad de un secreto inviolable.$n la *ntig3edad, y sobre todo en $gipto, esta sumisión primordial se aplicaba a todas las ramas de las cienciasde las artes industriales. Ceramistas, esmaltadores, orfebres, fundadores y vidrieros trabajaban en el interior detemplos. $l personal obrero de los talleres y los laboratorios formaba parte de la casta sacerdotal. 4esde la +pomedieval hasta el siglo 565, la 7istoria nos ofrece numerosos ejemplos de organi"ación parecida en caballería ,las órdenes monásticas, la 2asonería, las corporaciones, las cofradías, etc. $sas m(ltipasociaciones, que guardaban celosamente los secretos de la ciencia o de los oficios, poseían siempre un caráctmístico o simbólico, conservaban usos tradicionales y practicaban una moral religiosa. &e sabe cuánta era consideración de que go"aban los gentileshombres vidrieros cerca de los monarcas y los príncipes, y hasta qpunto esos artistas llevaban sus precauciones para evitar la difusión de los secretos específicas de la nobindustria del vidrio.$stas reglas e8clusivas tienen una ra"ón profunda. &i se me preguntara cuál es, respondería, simplemente queprivilegio de las ciencias debería ser patrimonio de los sabios de +lite. *l caer en el ámbito popular, distribuidsin discernimiento entre las masas y e8plotados ciegamente por ellas, los más hermosos descubrimientos evidencian mas perjudiciales que (tiles. La naturale"a del hombre lo empuja voluntariamente hacia lo malo ypeor. Lo más frecuente es que aquello que pudiera procurarle el bienestar, se vuelva contra +l, y en definitiva, convierta en el instrumento de su ruina. Los m+todos de guerra modernos son, por desgracia, la más palpabletriste prueba de ese funesto estado de espíritu. Hoo !o"#" $%&%'.%or el hecho de haber empleado un lenguaje demasiado oscuro, no sería justo, en presencia de peligros tgraves, enterrar la memoria de nuestros grandes antepasados bajo una reprobación que no merecen.

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94ebemos condenarlos a todos y despreciarlos porque han abusado de las reticencias: *l envolver sus trabajos silencio y al rodear sus revelaciones de parábolas, los filósofos act(an con sabiduría. espetuosos de linstituciones sociales no estorban a nadie y aseguran su propia salvación.%ermítaseme, a este respecto, una simple an+cdota.n admirador de 0ulcanelli conversaba un día con uno de los mejores químicos franceses, y le preguntaba opinión acerca de la transmutación metálica.La creo posible dijo el sabio, aunque de reali"ación muy dudosa.. , Y si alg(n testigo sincero le diera fe haberla visto y le aportara la prueba formal replicó el amigo del maestro, 9qu+ pensaría usted: %ensarrepuso el químico que un hombre así debería ser despiadadamente perseguido y suprimido como un malhechpeligroso.Como se ve, la prudencia, la e8trema reserva y la absoluta discreción aparecen plenamente justificadas. 9;ui+despu+s de esto, sería capa" de reprochar a los adeptos por el estilo particular que han empleado en sdivulgaciones: 9;ui+n, pues, osaría arrojar la primera piedra al autor de este libro:2as no debería llegarse a la conclusión de que nada hay que descubrir en las obras de los filósofos %or lo qpudiera pensarse de una ense#an"a en la que el lenguaje claro permanece prohibido. 2uy al contrario.

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PREFACIO A LA SEGUNDA EDICIÓN FRANCESALa' Moaa' F"$o'o*a$e', que tenemos el honor de prologar de nuevo, no debía ser el (ltimo libro de 0ulcanelliCon el título de F"#"' G$o"ae M%#" @$l fin de la gloria del mundoA, e8istía una tercera parte que emprendió autor y que hubiera elevado la obra didáctica a la más e8traordinaria trilogía alquímica. $n aquella +poca hacya seis a#os que nuestro viejo maestro había conseguido la elaboración de la P"ea *"$o'o*a$, de la que se ignoordinariamente que se divide en Me"0"#a %#"1e'a$ y en Po$1o ta#'%tato"o. na y otra aseguran al ae&totriple patrimonio conocimiento, salud y rique"a que e8alta la estancia terrestre a la absoluta felicidad d%araíso del B+nesis. &iguiendo el sentido del vocablo latino adeptus, el alquimista ha recibido desde emomento, el 4on de 4ios, o, mejor a(n, el Pe'e#te en el juego cabalístico de la doble acepción, '%-aa#o 3a &at" e e#to#0e', 4o5a e $a %a0"# "#*"#"ta e $o a0t%a$7 -*deptos se dice en el arte químico/ 8Ae"0%#t% "# ate 0!""0a8, precisa 4u Cange , que anali"a tambi+n el sinónimo M'te' (M'tae), que desig

e9a0tae#te a $o' 3%e !a# a$0a#5ao $a :' e$e1aa "#"0"a0"# ("o epoptai ).-%ues esta rica materia declara 7enri de Linthaut en su Coe#ta"e '% $e ;'o e' ;'o'8 comprende sí el misterio de la Creación del mundo y de las grande"as y maravillas de 4ios, y es un verdadero sol que da lupor cierto, a las cosas tenebrosas./$l Cosmopolita D nos habla de un espejo que le mostró !eptuno en el jardín de las 7esp+rides, y en el que vtoda la !aturale"a al descubierto. &in duda, se trata del mismo espejo que vemos representado en una de lhermosas pinturas herm+ticas que adornan la sacristía del santuario de Cimie", cuya divisa latina apenrecuerda el ligero velo e8tendido por el aliento sobre el objeto ordinario de los tocadoresE

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FLAUS IRRIUS ODI7 %# 1a#o a$"e#to $o e&a

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grabado del &%' M%#" esa liebre que el árbol esconde a medias y que roe la escasa hierba del prado abierto afondo. &e podrá, a continuación, entre las moradas filosofales reunidas por 0ulcanelli, relacionar con chimenea, suntuosamente adornada, de Louis d$stissac, quien fue, con mucha verosimilitud, alumno 0ranMois abelais. &e meditará acerca de la sorprendente relación cabalística establecida por nuestro maestentre la liebre y la materia bruta de la Bran >bra, e'0ao'a, negra, dura y seca/ cuya bola crucífera, proliferar en el seno del follaje revelador, llevada hasta su esquema lineal, da el símbolo gráfico propio de antiguos tratados. $s, entonces, la indicación de la "ea, ya se trate, como hemos dicho, del Caos primordial la Creación alquímica o del globo macrocósmico que forma parte de los siete planetas del C"e$o de los astrólogo)uelto sobre su cru", el signo de la 'ierra se convierte en el de )enus, de esa A*o"ta a la que los adeptdesignan, con más precisión, como su sujeto mineral de reali"ación. $n ese mismo y tan e8tra#o &%' M%#laquinta imagen nos muestra al *mor haciendo girar, con ayuda de una correa de piel de anguila, sobre la ramvertical que le sirve de eje, la bola del mundo, al que amena"a, por otra parte, la 4iscordia con su cabellera y sulátigo formados por serpientes que se retuercen irritadas y dispuestas a morder de todas manerasERANSI EPWS IN EPIS&ería un error sorprenderse de que hici+ramos tanto caso al muy valioso peque#o volumen que 0ulcanelli tenen tan gran estima y que aquí tengamos la ocasión de atraer, muy en especial, la atención del investigador sob

el luminoso capítulo relativo a Louis d$stissac y ya evocadoK es decir, más e8actamente, sobre el pasaje que esfuer"a por disipar toda confusión, casi inevitable, con el r+gulo de la espagiria. *simismo, bueno serelacionar esas indicaciones con lo que el maestro observa a(n respecto al mismo globo, -reflejo y espejo dmacrocosmos/, en su estudio de la deliciosa mansión de la &alamandra, en Lisieu8, que por desgracia fdestruida en HII.>4igamos sin rodeos que la materia de los trabajos alquímicos se presenta, e incluso se impone, con tanevidencia que no hay autor, aun el más sincero, que no se haya mostrado -deseoso/, que no haya callado, velao falseado la selección, hasta escribir el nombre vulgar de este sujeto, muy realmente predestinado, para declaral fin, que no es aqu+l.$l alquimista debe unirse a esta )irgen en cuerpo y alma, en el matrimonio perfecto e indisoluble, a fin de

recobrar con ella el andrógino primordial y el estado de inocenciaEE'ta-a# a-o' e'#%o', A:# '% %e, '"# a1e4o#5a'e e e$$o  $rat autem uterque scilicet et u8or ejuet non erubescebant .$l artista recibe mucho, si no todo, de esta unión radical, de esta íntima armonía, espiritual y física, con materia, canónicamente reservada, que lo inspira mediante intercambios fluídicos que guían su b(squecuando, al igual que el caballero de las novelas medievales, se consagra al servicio de su dama y se e8pone, pella, a los mayores peligros. %asión superior, a la ve", mágica y natural, sobre la que no deja de ser interesanque el neófito escuche discurrir al conde de Babalis, concediendo, desde luego, su parte e8acta a la hip+rbopara dejar a la compa#era de carne la parte considerable que le corresponde y que proclaman las imágenes dM%t%' L"-e7-&í, hijo mío, admirad hasta dónde llega la felicidad filosófica para mujeres cuyos frágiles encantos pasan pocos días y son seguidos de arrugas horribles. Los sabios poseen belle"as que no envejecen jamás y que eltienen la gloria de hacer inmortales. ?u"gad el amor y el reconocimiento de esas amantes invisibles, y con cuántardor tratan de complacer al filósofo caritativo que se esfuer"a en inmortali"arlas/...enunciad a los in(tiles e insípidos placeres que pueden hallarse con las mujeres. La más bella de entre ellases horrible junto a la más insignificante de las sílfidesK ning(n desagrado sigue jamás a nuestros sabios abra"os2iserables ignorantes, cuánto sois de compadecer por no poder gustar las voluptuosidades filosóficas./*lejándose del ámbito cabalístico, donde ha presentado a la mujer &alamandra como la más bella, pues esconstituida por el fuego universal, -principio de todos los movimientos de la !aturale"a/, en cuya esfera eleva

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habita, el abad 2ontfaucon de )illars e8pone pronto la manera de subyugar a esta criatura elemental por trueque del ata5 *"$o'*"0o, ya se mire desde el e8terior la evidente conve8idad de su vientre, ya se contemple el interior el misterio de su cóncava redonde".-$s preciso purificar y e8altar el elemento del fuego, que está en nosotros, y elevar el tono de esta cueraflojada. &ólo hay que concentrar el fuego del mundo mediante espejos cóncavos en un globo de vidrio, y +se esartificio que todos los antiguos han ocultado religiosamente y que el divino 'eofrasto ha descubierto. &e forma ese globo un polvo solar el cual se purifica de sí mismo y de la me"cla de los otros elementosK se prepara seg(n arte, y en muy poco tiempo se convierte en soberanamente apropiado para e8altar el fuego que hay en nosotrosnos hace, por así decirlo, de naturale"a ígnea./!o dejaremos de se#alar en este punto el paralelismo que se impone entre este pasaje de E#tet"e#' '% S0"e#0e' Se0;te' del 0o#e e Ga-a$"' con el de E$ oto %#o7 $o' E'tao' e $a Luna, donde Cyrano bra, en ocasiones con una o varias de las preciosas medicinintermediarias, no sería capa" de alcan"ar, sin embargo, de manera absoluta y soberana, la facultad de penetren el porvenir y tampoco, por supuesto, la de leer en el pasado.O 

%ero no es uno de los más legítimos timbres de gloria de nuestro maestro 0ulcanelli el haber desvelado, primero, la verdadera personalidad de Cyrano *CC6%6' ;6 !>! L$B6'62$ C$'*)$6'.!adie la recibe que no haya combatido seg(n las reglas.&i no hubiera todo esto, junto con el pasaje sobre el f+ni8, en la misma H"'to"a e $o' &:aos, habría tambi+entre otras cien cosas que revelan claramente la pura esencia alquímica de E$ oto %#o, la máquina qarrebata a nuestro h+roe hasta el 6mperio del &ol. La pie"a principal y motri" es una 1a'"a e 0"'ta$ que toma forma poli+drica del cuadrante solar del palacio 7olyrood de $dimburgo, el e8tra#o edificio escoc+s del queocupa el (ltimo capítulo de La' oaa' *"$o'o*a$e'7-$l recipiente estaba construido a propósito con muchos ángulos, y en forma de icosaedro, a fin de que cafaceta fuera conve8a y cóncava, y mi bola produjera el efecto de un espejo ardiente./!ada coincide mejor, despu+s, con el te8to de 0ulcanelli que demuestra que el icosaedro simbólico es ese cristaldesconocido llamado 1"t"o$o e $o' *"$'o*os, que es el espíritu o el fuego e#0a#ao, que con anterioridad hem

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visto que no quema las manos. %or lo que repite u %ascal PapataE car il nimporte guere;ue %ascal soit devant ou %ascal soit derriere./$l lector deberá adivinar que La' oaa' *"$o'o*a$e' se abren con el frontispicio de la Sa$aa#a, y quecierran con el S%#"a$ de $dimburgo a manera de epílogo. $sos dos emblemas e8presan la misma sustancia cuyestudio profundo, disperso en todo el volumen, constituye la e8presión meticulosa del enorme esfuer"o qprodujo a nuestro maestro su invención, de las inauditas dificultades que e8igió de +l para su perfecpreparación.!o tendremos la pretensión de completar la ense#an"a que 0ulcanelli ha dispensado con abundancia en el cursde sus páginas, sin e8ceptuar nada de ello, seg(n le permitían sus conocimientos de especialista de primera lín

y, en cuanto al peligro de divulgación, su habilidad de retórico herm+tico familiari"ado con los autores antigu&in embargo, el privilegio de que hemos go"ado de hallarnos por tanto tiempo cerca del maestro como testimaravillado de sus incansables manipulaciones junto a la boca del horno, nos autori"a a anotar algunrecuerdos que los aficionados, sin duda sabrán apreciar como es debido.!o pensamos cometer ninguna imprudencia al publicar que 0ulcanelli nos confió que había estado más veinticinco a#os buscando ese Oo e $o' Sa-"o' que sin cesar tenía junto a sí, bajo la mano y ante los ojos. $staconfesión, te#ida de sinceridad y de humildad en la que asomaba casi el arrepentimiento, nos dejó, por momento, confundidos. * decir verdad, su ejemplo no constituía una e8cepción. !a8ágoras, de quien leíamjunto al maestro, La a$3%""a e'1e$aa, en una muy fiel traducción francesa manuscrita del siglo 5)6despu+s de haber buscado durante más de treinta a#os aquel cuerpo misterioso que tenía en sus manos caddía, e8clama, de pronto transportadoE-N>h, gran 4ios= N$n qu+ ceguera nos ten+is hasta donde sab+is, por vuestra misericordia infinita, que esta >brno nos perderá=/Comentaba entonces el maestro, con su grave y noble rostro cubierto por sus largos cabellos grises e inclinasobre nuestro hombroE-*sí, el oro filosófico, todo lleno de impure"as, rodeado de espesas tinieblas y cubierto de triste"a y de duelo, deser considerado, sin embargo, como la verdadera y (nica materia prima de la >bra, al igual que sucede conla verdadera y (nica materia prima, el mercurio, de donde ese oro invisible, miserable y desconocido ha nacido.$sta distinción, que no se acostumbra hacer precisaba es de una importancia capital, pues facilita muchísimocomprensión de los te8tos y permite la resolución de las primeras dificultades./

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La conversación proseguía, y a ella eran a menudo convidados como testigos, bajo la suave lu" de una grlámpara de petróleo, los autores reunidos en muchedumbre en la biblioteca vecinaE-4esde el principio, el resultado de la coagulación del agua se presenta de tal forma que a menudo no se inclina recha"arla sin tan siquiera tomarse la molestia del más modesto e8amen./$n nuestra e8plicación de la escena macabra que ilustra la 0%ata 0$a1e de ro perfecto amenos, de manera vulgar, &o3%e e' #e0e'a"o a #%e'to ate, a *"# e 3%e 'ea #%e'to Oo 6 >!o deja de tener lógica, subrayaba 0ulcanelli, que los sabios hayan dado a nuestro precioso cuerpo los nombrde los planetas Sat%#o y e#%'7-N4ichoso e8clamaba 0ilaleteo aquel que puede saludar ese planeta de marcha lenta @tardambulonemA= uea 4ios, hermano, a fin de que seas digno de esta bendición, porque no depende de quien la busca y, con mayra"ón, de quien la desea, sino sólo del %adre de la Lu"./$n cuanto a )enus, los autores no lo hacen intervenir en la operación más que para indicar el a"ufre negro. lector verá, con 0ulcanelli, que ese agente filosófico nace del mar herm+tico, y aparece en lo más fuerte de agitación de las aguas, bajo la forma de una espuma que se eleva, sobrenada, se espesa y flota en la superficie.

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Comprenderá entonces cuán grave sería su error si adoptara el plomo para la materia mercurial, y el cobre pael dispensador del a"ufre.2as 9cuál puede ser el promotor mineral, aislado o doble, de la putrefacción del mercurio, generadora de ea"ufre negro, fluido y viscoso, de reflejos metálicos irisados como el plumaje del cuervo, de tal manera que recibel nombre del volátil negro que los latidos llamaban %hoebeius ales, e$ &:ao e A&o$o, desvelando la idea del oscuro y del oro volátil: &í, 9cuál es ese catali"ador químico que con tanta frecuencia fue objeto de nuestrasconversaciones con el maestro:%ensamos que sea ahora oportuno revisar, ra"onándolas, y dirigidas a nuestros hermanos detenidos en atolladero, las consideraciones que, implica el mismo problema, las cuales fueron continuadas por 0ulcanelli a largo de su segunda obra.$ntre las sales que se muestran idóneas para formar parte de la composición del fuego secreto y filosófico,salitre parece que debería ocupar un lugar importante. *l menos, así permite presumirlo su etimología. $n efecel griego nitron nítron, que designa el a"otato de potasa y vulgarmente el nitro toma su origen de niptnípto o nizw ní"o, $a1ar, y se sabe que los filósofos recomiendan lavar con el fuego, 'odas sus purificaciony todas sus sublimaciones se hacen con ayuda de lavados ígneos, con $a1e%es, seg(n escribe !icolas 0lamel %or otra parte, el salitre, cuando act(a en contacto con las materias en fusión, en -fundente/, se transformparcialmente en carbonato de potasioK -se alcali"a/. $l carbonato era llamado anta#o 'a$ e t:tao, y el tárta

se dice en griego trux try8 con el significado de he" de 1"#o, e'0o"a, 'e"e#to. $ste sustantivo deriva dverbotrugw trygo, e'e0a, 'e0ar, que e8presa la acción misma del fuego, y, se podría, por a#adidura, comparardemodo muy sugestivo, a nuestro familiar truco, en el sentido de procedimiento escondido, de medio astuto o su$l t%0o e $a O-a residiría así en la aplicación de la sal de tártaro procedente del ataque del nitro, consideradcomo la sustancia o como uno de los componentes del fuego secreto que los alquimistas reservaron trigurosamente en sus tratados.&eg(n el abate $spagnolle, (LO"4"#e % Fa#a"'), la palabra t%0 TtrucoJ  procedería de trucw trych4o$&ea %e4o e &a'a8&a'a. %ero trucw significa, sobre todo, e'4a'ta &o e$ *ota"e#to, a4ota, *at"4!o't"4a, atoe#ta. &e puede, pues, derivar de esos dos vocablos todas las ideas que deciden la elección d

fuego secreto y que determinan su modo de utili"ación y de actividad sobre la materia filosofal. *tormentan+sta el fuego la deseca, la calcina y la escorifica.%or lo demás, formulamos a(n algunas refle8iones acerca de la sal a la que la fusión da la consistencia vítrparticularmente apta para impregnarse del color y retenerlo, aunque sea el más precioso y el más fugitivo. %uesque el color es la manifestación específicamente visible del a"ufre secreto, el artista conoce por +l el origen de stintes. $ntre +stos, el espíritu universal ocupa un lugar importante, en la base misma de la gama policroma de Bran >bra. $se spiritus rnundi disuelto en el cristal de los filósofos produce aquella misma esmeralda que desprendió de la frente de Lucifer en el momento de su caída, y en la cual fue tallado el Braal. $s la gemherm+tica que orna el anillo de %iel de *sno, como el del papa alquimista ?uan 5566 en su tumba, y que vuelve a encontrar en los arcos pintados de la capilla del convento de Cimie", ocupando el sello de una sortijaensal"ada por la leyenda yu8tapuesta en lengua italianaE

NE LA ERRA NE IL CIELOIS HA PIU BELLA.!i la tierra ni el cielo han visto otra más bella.>Con el coadyuvante salino, hemos abordado ese otro gran problema que es el de la sublimación y que &ethon CosmopolitaA e8aminó muy ampliamente hasta modelar con +l la resolución química sobre la gran cohobación los (ltimos tiempos. $n el pasaje que tomamos del adepto escoc+s (De S%$&!%e, p. R y GA, se encontraráconfirmación de la teoría de 0ulcanelli, en el lugar de las dos catástrofes suscitadas para castigar y purificar 'ierra, pero no para destruirla y e8terminar a sus habitantesE

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-*sí, pues, el Creador de todas las cosas es el destilador, y en su mano está ese destilatorio a cuyo ejemplo hsido descubiertas por los filósofos todas las destilaciones. Lo que, sin duda, ha inspirado a los hombres, el mismo4ios, muy alto y misericordioso, podrá, cuando sea su santa voluntad, e8tinguir el fuego central o quebrarvaso.Y +se será el fin de todas las cosas. %ero como la bondad de 4ios tiende a lo mejor, e8altará cada día su msanta majestad, y elevará ese fuego, el más puro de todos, que en el firmamento está más alto que las aguas de lcielos, y aumentará un grado el fuego central, a fin de que todas las aguas sean volatili"adas en aire, y la tierserá calcinada. 7asta tal punto, que el fuego, tras haber consumido todo lo impuro, devolverá a la tierpurificada las aguas sutili"adas que habrán circulado en el aire. Y de esta manera @si, por lo demás, espermitido filosofarA, 4ios hará un mundo mucho más noble./ecordemos las palabras de san ?uan

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$n cuanto a ese fuego que el adepto de

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N"0o$a' F$ae$ (8), *a#0;', *%e e$ a3%"te0to e $a "4$e'"a &a"'"e#'e e St. ?a03%e', e '"-o$"'!e;t"0o e $a 3%e '$o 3%ea '% *ao'a toe. E't%"a#o $%e4o e$ a#%'0"to a$e4"0o e A-a!a?%o, $$e4 a 0o#1et"'e e# %# a%te#t"0o ae'to e$ At o1a$ $%e4o, e# e$ '"4$o X, *%e %#o e $a$3%""'ta' 3%e ao "#*$%e#0"a ee0"eo#. !. del '. Cee#0"a, 0a'" ta# a#t"4%a 0o#o e$ 0"'t"a#"'o, e# e$ &eoo e "$ a

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>%ara nosotros, que trabajamos por vía seca en el horno, la oaa *"$o'o*a$, a la ve" la más humilde y la mopulenta, es la caverna de

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$n tan nefastas condiciones, la justicia cesa de reinar en el seno de las sociedades humanas, que %ublio >vidio!asón encarnó en la diosa, hija de ?(piter y de 'emis, y descendida del >limpo sobre la 'ierra en el comien"o la edad de oroELa &"ea a0e 1e#0"a, $a 1"4e# A'tea, $a ao e $o' 0"e$o', a-a#o#a $o' &a'e' "#%#ao' &o $a 'a#4e $a ata#5a =.%ublio )irgilio 2arón se#aló tambi+n ta partida de la diosa que, hasta entonces, se había refugiado entre ljóvenes de los camposE... e#te e$$o' $a ?%'t"0"a et":#o'e e $a' 0oa0a', "o '%' K$t"o' &a'o' 6.>4e la ?usticia, ?ean %err+al, gracias al escultor 2ichel Colombe, nos dejó la estatua admirable y femenina parala tumba sin par que proyectó por encargo de la reina *na, deseosa de dar a los restos de sus bienamados padresel duque 0rancisco 66 de

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Da%$te &at "e te 0et"**"eEt e 0o"5 3%" '%"' e'&e"tPe'o##e #e't 3%" 1e"*"eA%te 3%e o $a1o" e'0"&tR"e# #e't #e *%t 3%" o#0 $e 1e"tIe $a *a"t &o% to 3%" $e &e#'S" t% $e#te#' -"e# t% a&&e#' .?ean %err+al no sigue a !icolas 0lamel, y de +ste, el libro famoso de *braham el ?udío, cuando nos confía, cuanto al mencionado librito de la Complainte de !ature, que lo descubrió en un agujero sobre el que estabpintada una calavera que -il estoit fort vieil/ y que lo escribió -ung esperit de terre et soub" terre/. Lo leyó, -maa grant peine a cause de la vielle lettre et ancienne mode descripre qui estoit en latin/, consecuentementeimitación de 0lamel, que descifró el suyo al precio de largos esfuer"os. Cinco siglos despu+s, 0ulcanelli elucien su segunda obra, dirigi+ndose a los amantes de la ciencia, el e8tra#ísimo libro dorado, muy viejo y mamplio, al mismo tiempo que el inverosímil viaje que en +l se relata en la peregrinación a &antiago Compostela.!os hallamos, entonces, muy lejos del e8travagante empirismo que con toda evidencia preocupó a ?ean %err+aunque quedara netamente distinguido de la alquimia tradicional. Ya reinaba la confusión, en su +poca, entre la

obra de naturale"a @opus naturaeA y el trabajo mecánico @opus mechanicaeA. $l filósofo o alquimista y el soplado espagirista utili"an un fuego muy diferenteK +ste, elemental y producido por los combustibles ordinariosaqu+l, filosófico y nacido de la inagotable fuente celeste. $s ese fuego de la madre !aturale"a el principartesano de la Bran >braK es el que Cristo ha venido a poner en las cosas y que desea obstinadamente que aren el atanor. *llí donde puede ser tallada la piedra del ángulo, que el 'odopoderoso conserva a disposición de lhombres de buena voluntad.La %iedra, sobre la que ?es(s edificó la 6glesia, está incluida en la base de toda oaa *"$o'o*al, mas, pdesgracia, se convierte en ocasiones en causa de tropie"o y de escándalo.-Y así, por este tratado, he querido indicar y abrir la %iedra de os antiguos, que nos ha venido del cielo para salvación y el consuelo de los hombres en este valle de lágrimas, como el más alto tesoro terrestre concedido,para mí, Ncuán legítimo=/

7e aquí lo que nos dice

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$n la introducción de nuestra *lchimie hemos indicado, po+ticamente, qu+ clase de ondas son las agusuperiores, tan consideradas por los antiguos. $n este sentido, 0ulcanelli a menudo se ha detenido en esta fuenta4#;t"0a, en la fuente de a4#e'"a, en particular, siguiendo a 0ilaleteo y viendo con claridad en el capítulo de su E#taa a-"eta a$ &a$a0"o 0eao e$ e el imán de los filósofos que constituye, para el alquimista, base, simultáneamente espiritual y física, de la reali"ación en el laboratorioEA1"ete, ae:', 3%e #%e'to ":# &o'ee %# 0e#to e'0o#"o 3%e a-%#a e# 'a$, $a 0%a$, e# $a e'*ea e$%#a, e' e$ e#'t%o 3%e t"e#e e$ &oe e 0a$0"#a e$ Oo .>$n este punto capital de la elaboración, nos parece oportuno ir un poco más lejos de lo que consintió el maesty,por tanto, atraer la atención de algunos sobre la ayuda que pueden esperar de las reservas cósmicas.!ada más que para la detección de los rayos ultravioleta, Nqu+ aparatos, qu+ t+cnicas infinitamente complicadfuera de los receptores químicos, bajo los auspicios de la electricidad= *sí, en los laboratorios de físicaquímicaha podido reconocer que entre las fuentes siderales del rayo a la ve" invisible y químico, se sit(a el firmamentonocturno que, en tiempo claro y sereno, irradia poderosamente en el seno del fluido violeta. &in duda queda posibilidad de imaginar hasta dónde llegan a cambiar la naturale"a y el comportamiento del rayo que formfranjas en el espectro en su e8tremidad oscura y fría cuando, habiendo partido del &ol, llega a la 'ierra trhaber sufrido los efectos de la Luna. $n efecto, es entonces cuando a pesar de la habilidad que requieren, l

-ligere"as de manos/ del alquimista aparecen con esta grande y sorprendente simplicidad, propia siempre de lfenómenos de la !aturale"a.$s cierto que los sabios de hoy se hallan en grave inferioridad respecto a la universal y natural magia. %or otparte, no es verdad que hayan reali"ado nunca la trasmutación metálica, que entendemos debe ser proporciones amplias y no imperceptiblemente infinitesimales. %ara entonces, la atomística parece ilustrar mbien la inmensa cadena de monta#as que, luego de no menos ilimitados dolores, d+ a lu" una chispa camicroscópica.>&i hubiera que investigar las ra"ones de la audiencia, completamente favorable y sin cesar creciente, que alquimia encuentra hoy, habría que tener en cuenta, además del innegable efecto de irresistibles universales, más importante, sin duda, que es el fracaso de una ense#an"a desligada de preocupaciones espirituales y mu

pró8ima a abandonar del todo las Letras y las 7umanidades a las que teme tanto como desprecia. &e ve proscrtodo esfuer"o que trate de convertir en noción intelectual la intuición fecunda y la emoción del *bsoluto slímites de espacio y de duración.'ambi+n la menor veleidad de una resolucidn cualquiera se ve desmorali"ada por adelantado. La más modestentativa de una apro8imación, inevitablemente indefinida, que hiciera florecer el alma del hombre en el seno dalma uníversal, es reprimida de. inmediato. *hí reside alquímicamente la indispensable toma de conciencia, ese fenómeno de armonía que nace del contacto de dos ritmos e8tra#os y gracias al cual el alma humana ponesuyo seg(n el diapasón del del niverso y se libera de la estrecha esfera del individuo.Como lo proclamaba ya 0ulcanelli pronto hará medio siglo, no se ata perpetuamente el espíritu con los vínculde un positivismo ilusorio y est+ril. &+pase bien, a#adiremos nosotros, que los juegos, los encantamientos y lsortilegios del decepcionante análisis han envejecido ya ahora. Las trascendentes certidumbres se infiltran nuevo y se instalan con firme"a en las almas que nufren contra la ciencia el amargo reproche de que no hayconseguido satisfacer la creencia, así como justificar la fe.

Sa1"4#"e', e#eo e /6=..

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NOAS7 D%a#te $a Ea Me"a e$ Re#a0""e#to, $a K#"0a *oa e o&ea ea $a $$aaa 1a !Kea, 0%&o0e'o %a-a %#o' 0%ae#ta a' &aa $o' 3%e 'e e3%ea#, ae:', amne nefasE tugere pudor verumque fidesqueK6n quorum subiere locum fraudesque dolique6nsidique et vis et amor sceleratus habendi.(O1""" Metao&!o'es, libro primo. Q%at%o Aetate'. 8 Las 2etamorfosis de >vidi o, $"-o &"eo. La' 0%aeae'.)= )icta jacet pietas, et virgo coede madentes,ltima clestum, terras *stra reliquit.(I-"e, in loco citato supra.A

6 ... e8trema per illos?ustitia e8cedens terris vestigia fecit.@Beorgicoru, $"-e 'e0%#%'8$"-o 'e4%#o e La' 4e4"0a'.)  La Lumiere sortant par soy mesme des 'enebres ou )eritable 'heorie de ta %ierre des %hilosophes escrite vers 6taliens, Z amplifi+e en Latin par un *uteur *nonyme, en forme de CommentaireK le tout traduit e0ranMais par

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Pa', Q%"$$a%, . La 0oo#a e$ ae&tao 1"e#e e $a e$ &e3%e

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LAS MORADAS FILOSOFALESLIBRO PRIMERO

I. HISORIA MONUMENO

Paradó9ica en sus manifes!aciones # desconcer!an!e en sus signos5 la Edad Media propone a la sagacidad de susadmiradores la resolución de un singular con!rasen!ido. :;ómo conciliar lo inconcilia(le< :;ómo armoni=ar el!es!imonio de los ecos is!óricos con el de las o(ras medie'ales<Los cronis!as nos pin!an es!a desdicada /poca con los colores m-s som(r+os. Por espacio de mucos siglos5 no a#m-s &ue in'asiones5 guerras5 am(res # epidemias. >5 sin em(argo5 los monumen!os ?fieles # sinceros !es!imoniosde a&uellos !iempos ne(ulosos? no e'idencian la menor uella de seme9an!es a=o!es. Mu# al con!rario5 parecen a(ersido cons!ruidos en!re el en!usiasmo de una poderosa inspiración de ideal # de fe por un pue(lo dicoso de 'i'ir5 en

el seno de una sociedad florecien!e # fuer!emen!e organi=ada.:De(emos dudar de la 'eracidad de los rela!os is!óricos5 de la au!en!icidad de los acon!ecimien!os &ue regis!ran #creer5 con la sa(idur+a de las naciones5 &ue los pue(los felices no !ienen "is!oria< A menos &ue5 sin refu!ar en(lo&ue !oda la "is!oria5 se prefiera descu(rir5 en una ausencia rela!i'a de inciden!es5 la 9us!ificación de la oscuridadmedie'al.Sea como fuere5 lo &ue se man!iene innega(le es &ue !odos los edificios gó!icos sin e2cepción refle9an unaserenidad5 una e2pansi'idad # una no(le=a sin igual. Si se e2amina de cerca la e2presión de la es!a!uaria5 enpar!icular5 pron!o se sen!ir- uno edificado por el car-c!er apaci(le # la !ran&uilidad pura &ue emanan de a&uellasfiguras. 6odas es!-n en calma # sonrien!es5 # se mues!ran afa(les # (ondadosas. "umanidad lapidaria5 silenciosa #de (uena compa8+a. Las mu9eres poseen esa lo=an+a &ue re'ela (as!an!e5 en sus modelos5 la e2celencia de unaalimen!ación rica # sus!ancial. Los ni8os son mofle!udos5 llenos5 desarrollados. Sacerdo!es5 di-conos5 capucinos5ermanos in!enden!es5 cl/rigos # can!res mues!ran un ros!ro 9o'ial o la agrada(le silue!a de su dignidad 'en!ruda.

Sus in!/rpre!es ?esos mara'illosos # modes!os imagineros? no nos enga8an # no ser+an capaces de enga8arse. 6omansus !ipos de La 'ida corrien!e5 en!re eL pue(lo &ue se agi!a en !orno a ellos # en medio del cual 'i'en. @na grancan!idad de esas figuras5 !omadas al a=ar de la calle9uela5 de la !a(erna o de la escuela5 de la sacris!+a o del !aller5 !al'e= es!-n recargados o en e2ceso acusados5 pero en la no!a pin!oresca5 con la preocupación por el car-c!er5 por elsen!ido alegre # la forma amplia. ro!escos si se &uiere5 pero gro!escos alegres # llenos de ense8an=a. S-!iras degen!es a las &ue gus!a re+r5 (e(er5 can!ar # darse (uena 'ida. O(ras maes!ras de una escuela realis!a5 profundamen!eumana # segura de su maes!r+a5 conscien!e de sus medios5 ignorando5 en cam(io5 lo &ue es el dolor5 la miseria5 laopresión # la escla'i!ud. Eso es !an cier!o &ue por m-s &ue se (us&ue # se in!errogue la es!a!uaria o9i'al5 9am-s sedescu(rir- una figura de ;ris!o cu#a e2presión re'ele un sufrimien!o real. Se reconocer-5 con noso!ros5 &ue loslatomi se an !omado un !ra(a9o enorme para do!ar a sus crucificados de una fisonom+a gra'e sin conseguirlosiempre. Los me9ores5 apenas demacrados5 !ienen los o9os cerrados # parecen reposar. En nues!ras ca!edrales5 las

escenas del Buicio Final mues!ran demonios ges!iculan!es5 con!raecos # mons!ruosos5 m-s cómicos &ue !erri(lesCen cuan!o a los condenados5 maldi!os anes!esiados5 se cuecen a fuego len!o en su marmi!a5 sin lamen!os 'anos nidolor 'erdadero.Esas im-genes li(res5 'iriles # sanas5 prue(a as!a la e'idencia &ue los ar!is!as de la Edad Media no conocieron ena(solu!o el espec!-culo deprimen!e de las miserias umanas. Si el pue(lo u(iera sufrido5 si las masas u(ierangemido en el infor!unio5 los monumen!os nos u(ieran conser'ado !es!imonio de ello. Pero sa(emos &ue el ar!e5 esae2presión superior de la "umanidad ci'ili=ada5 no puede desarrollarse li(remen!e sino a fa'or de una pa= es!a(le #segura. Al igual &ue la ciencia5 el ar!e no ser+a capa= de re'elar su genio en el am(ien!e de sociedades en desorden.

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6odas las manifes!aciones ele'adas del pensamien!o umano es!-n en /lC re'oluciones5 guerras # re'uel!as le sonfunes!as. Reclaman la seguridad nacida del orden # de la concordia5 a fin de crecer5 florecer # fruc!ificar. Ra=onesigualmen!e de peso nos inclinan a acep!ar con reser'a los acon!ecimien!os medie'ales consignados por la "is!oria.> confesamos &ue la afirmación de una sar!a de calamidades5 desas!res # ruinas acumulados duran!e cien!o cua?ren# seis a8o s» nos parece en 'erdad e2cesi'a. "a# en ello una anomal+a ine2plica(le5 pues 9us!amen!e es duran!ea&uella desgraciada guerra de cien a8os5 &ue se e2!iende del a8o 133 a 1,03 cuando fueron cons!ruidos los m-sricos edificios de nues!ro estilo flamíger o. Es el pun!o culminan!e5 el apogeo de la forma # de la audacia5 la fasemara'illosa en &ue el esp+ri!u5 llama divina5 imprime su sello a las l!imas creaciones del pensamien!o gó!ico. Es la/poca de !erminación de las grandes (as+licas5 pero !am(i/n se ele'an o!ros monumen!os impor!an!es5 colegiales oa(aciales5 de la ar&ui!ec!ura religiosa las a(ad+as de Solesmes5 de ;lun#5 de Sain!?Ri&uier5 la car!u9a de Di9on5Sain!?Gulfram de A((e'ille5 Sain!?E!ienne de 7eau'ais5 e!c. Se 'e surgir de la !ierra no!a(les edificios ci'iles5desde el ospicio de 7eaune as!a el palacio de Bus!icia de Ru-n # el A#un!amien!o de ;ompiHgneC desde las masiones cons!ruidas un poco por !odas par!es por Bac&ues ;oeur as!a las a!ala#as de las ciudades li(res como7/!une5 Douai5 Duner&ue5 e!c. En las grandes ciudades francesas5 las calle9uelas siguen su curso es!reco en!re laaglomeración de los rema!es api8onados5 de las !orrecillas # de los (alcones5 de las casas de madera esculpida5 delos edificios de piedra con facadas delicadamen!e ornadas. >5 en !odas par!es5 (a9o la sal'aguarda de lascorporaciones5 los oficios se desarrollanC en !odas par!es los compa8eros ri'ali=an en a(ilidadC en !odas par!es la

emulación mul!iplica las o(ras maes!ras. La @ni'ersidad forma (rillan!es alumnos5 # su renom(re se e2!iende por el'ie9o mundoC c/le(res doc!ores e ilus!res sa(ios e2panden # propagan las (ondades de la ciencia # de la filosof+aC losespagiris!as amasan5 en el silencio del la(ora!orio5 los ma!eriales &ue m-s !arde ser'ir-n de (ase a nues!ra &u+micaCgrandes adep!os dan a la 'erdad erm/!ica un nue'o esplendor... J*u/ ardor desplegado en !odas las ramas de laac!i'idad umanaKJ> &u/ ri&ue=a5 &u/ fecundidad5 &u/ poderosa fe5 &u/ confian=a en el por'enir alen!a(an (a9o ese deseo de edificar5de crear5 de in'es!igar # de descu(rir en plena in'asión5 en es!e misera(le pa+s de Francia some!ido a la dominacióne2!ran9era # &ue conoce !odos los orrores de una guerra in!ermina(leKEn 'erdad5 no comprendemos...6am(i/n se e2plicar- por &u/ nues!ra preferencia sigue cen!rada en Ia Edad Media !al como nos la re'elan losedificios gó!icos5 m-s &ue en esa misma /poca5 !al como nos la descri(en los is!oriadores.

> es &ue resul!a cómodo fa(ricar5 con !odas las pie=as5 !e2!os # documen!os5 'ie9as car!as de c-lidas p-!inas5pergaminos # sellos de aspec!o arcaico5 # algn sun!uoso li(ro de oras5 ano!ado en sus m-rgenes # (ellamen!eiluminado de orlas5 cenefas # minia!uras. Mon!mar!re proporciona a &uien lo desea5 # segn el precio ofrecido5 elRem(rand! desconocido o el auténtico 6eniers. @n -(il ar!esano del (arrio des "alles la(ra5 con una inspiración #una maes!r+a asom(rosas5 pe&ue8as di'inidades egipcias de oro # (ronces maci=os5 mara'illas de imi!ación &ue sedispu!an cier!os an!icuarios. *ui/n no recuerda5 si no5 la !an famosa !iara de Sai!afernes... La falsificación # laimi!ación fraudulen!a son !an 'ie9as como el mundo5 # la "is!oria5 &ue !iene orror al 'ac+o cronológico5 enocasiones a !enido &ue llamarlas en su au2ilio. @n sapien!+simo 9esui!a del siglo II5 el padre Bean "ardouin5 no!eme denunciar como apócrifas una can!idad de monedas # medallas griegas # romanas acu8adas en la /poca delRenacimien!o5 en!erradas con o(9e!o de colmarN amplias lagunas is!óricas. Ana!ole de Mon!aiglon 1 nos ilus!ra de&ue Bac&ues de 7ie pu(licó5 en 13%5 un 'olumen en folio acompa8ado de l-minas # !i!ulado  Les Familles deFrance, illustrées par les monuments des médailles anciennes et modernes5 &ue5 segn dice5 !iene m-s medallasin'en!adas &ue realesN. ;on'engamos en &ue para suminis!rar a la "is!oria la documen!ación &ue le fal!a(a5 Bac&uesde 7ie u!ili=ó un procedimien!o m-s r-pido # económico &ue el denunciado por el padre "ardouin. ic!or "ugo $ 5ci!ando las cua!ro "is!orias de Francia m-s repu!adas acia 1)3 ?las de Duplei25 M/=era#5 /l# # la del padreDaniel?5 dice de es!a l!ima &ue el au!or5 9esui!a famoso por sus descripciones de (a!allas5 a eco en 'ein!e a8osuna is!oria &ue no !iene o!ro m/ri!o &ue la erudición5 # en la cual el conde de 7oulain'illiers apenas encon!ra(am-s de die= mil erroresN. Se sa(e &ue ;al+gula mandó erigir el a8o ,5 cerca de 7oulogne?sur?Mer5 la !orre de Odrepara enga8ar a las generaciones fu!uras so(re un pre!endido desem(arco de ;al+gula en la ran 7re!a8aN3 .;on'er!ida en faro (turris ardens) por uno de sus sucesores5 la !orre de Odre se derrum(ó en 1,0.

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:*u/ is!oriador nos e2plicar- la ra=ón ?superficial o profunda? in'ocada por los so(eranos de Ingla!erra para9us!ificar la calidad # el !+!ulo de re#es de Francia &ue conser'aron as!a el siglo III< >5 sin em(argo5 la monedainglesa de es!a /poca con!ina lle'ando el sello de seme9an!e pre!ensión , .An!a8o5 en los (ancos de la escuela se nos ense8a(a &ue el primer re# franc/s se llama(a Faramundo5 # fi9a(a en ela8o ,$ la feca de su e2al!ación. "o#5 la genealog+a real empie=a en ;lodión el Velloso5 por&ue se a reconocido&ue su padre5 Faramundo5 9am-s a(+a reinado. Pero5 en a&uellos !iempos le9anos del siglo 5 :se es!- (ien seguro dela au!en!icidad de los documen!os rela!i'os a los ecos # ges!as de ;lodión< :o ser-n a&u/llos # /s!as im?pugnadoalgn d+a5 an!es de ser relegados al -m(i!o de las le#endas # de las f-(ulas<Para "u#smans5 la "is!oria es la m-s solemne de las men!iras # la m-s infan!il de las enga8ifasN.Los acon!ecimien!os ?dec+ase?5 para un om(re de !alen!o5 no son m-s &ue un !rampol+n de ideas # de es!ilo5pues!o &ue !odos se mi!igan o se agra'an con arreglo a las necesidades de una causa pol+!ica o segn el!emperamen!o del escri!or &ue los mane9a. En cuan!o a los documen!os &ue los apun!alan5 !ienen menos 'alor an5por&ue ninguno de ellos es irreduc!i(le # !odos son impugna(les. ;uando no resul!an apócrifos5 se desen!ierran m-s!arde o!ros5 no menos cier!os5 &ue los calumnian5 en espera de &ue a su 'e= los des'alore la e2umación de o!rosarci'os no menos segurosN0 . Las !um(as de persona9es is!óricos son asimismo fuen!es de información su9e!as acon!ro'ersia. Lo emos compro(ado m-s de una 'e= . Los a(i!an!es de 7/rgamo se encon!raron en 1%$$ con unaempresa desagrada(le. :Pod+an creer &ue su cele(ridad local5 a&uel ardoroso condo!!iere5 7ar!olomeo ;oleoni5 &ue

llenó en el siglo los anales i!alianos con sus capricos (elicosos5 no fue sino una som(ra legendaria< Sinem(argo5 an!e una duda del re#5 de 'isi!a en 7/rgamo5 la municipalidad mandó !rasladar el mausoleo5 adornado conla c/le(re es!a!ua ecues!re5 a(rir la !um(a5 # !odos los asis!en!es compro(aron5 no sin es!upor5 &ue es!a(a 'ac+a... EnFrancia5 al menos5 no se Ile'a !an le9os la audacia. Au!/n!icas o no5 las sepul!uras de es!e pa+s encierran osamen!as.Am/d/e de Pon!ieu narra &ue el sarcófago de Franois M#ron5 edil parisiense de 1,5 fue allado a ra+= de lasdemoliciones de la casa nmero 13 de la rue d4Arcole5 inmue(le erigido so(re los cimien!os de la iglesia de SainMarine5 en la cual a(+a sido inumado. El f/re!ro de plomo ?escri(e ese au!or? !iene la forma de una elipsees!rangulada... El epi!afio es!a(a (orrado. ;uando se le'an!ó la !apa del a!ad no se encon!ró m-s &ue un es&uele!orodeado de una especie de oll+n negru=co me=clado con pol'o... ;osa singular5 no se descu(rieron ni las insigniasde su cargo5 ni su espada5 ni su anillo5 e!c.5 ni !an si&uiera !ra=as de su escudo de armas... Sin em(argo5 la ;omisiónde 7ellas Ar!es5 por (oca de sus e2per!os5 declaró &ue con seguridad era el gran edil parisiense5 # sus ilustres

reliquias fueron !rasladadas a la crip!a de o!re?Dame.N @n !es!imonio de seme9an!e 'alor lo se8ala Fernand7ournon en su o(ra Paris-Atlas. o a(laremos m-s &ue para memoria ?dice? de la casa si!a en el *uai au2 Fleurs5del &ue lle'a los n+uneros % # 115 # &ue una inscripción5 sin som(ra de au!en!icidad ni !an si&uiera de 'erosimili!udse8ala como la an!igua residencia de Elo+sa # A(elardo en 111)5 # recons!ruida en 1),%. Seme9an!es afirmacionesgra(adas en m-rmol cons!i!u#en un desaf+o al (uen sen!ido.N Apresur/monos a reconocer &ue5 en sus deformacionesis!óricas5 el padre Lori&ue! mues!ra menos audacia.Perm+!asenos a&u+ una digresión des!inada a precisar # definir nues!ro pensamien!o. ;ons!i!u#e un pre9uicio mu#enrai=ado a&uel &ue5 duran!e largo !iempo5 i=o a!ri(uir al sa(io Pascal la pa!ernidad de la carre!illa 'ol&ue!e. >aun&ue la falsedad de es!a a!ri(ución es!/ o# demos!rada5 no es menos cier!o &ue la gran ma#or+a del pue(lopersis!e en considerarla fundada. In!errogad a un escolar # os responder- &ue ese pr-c!ico 'e+culo5 por !odosconocido5 de(e su concepción al ilus!re f+sico. En!re las indi'idualidades en re'esadas5 al(oro!adoras #5 a menudo5dis!ra+das del mundillo escolar5 el nom(re de Pascal se impone a las 9ó'enes in!eligencias so(re !odo a causa de es!apre!endida reali=ación. Mucos escolares primarios5 en efec!o5 ignorar-n &ui/n es Descar!es5 Miguel Qngel5 DenisPapin o 6orricelli5 pero no dudar-n un segundo en lo referen!e a Pascal. Ser+a in!eresan!e sa(er por &u/ nues!rosni8os5 en!re !an!os admira(les descu(rimien!os cu#a aplicación co!idiana !ienen an!e Los o9os5 conocen me9or aPascal # a su 'ol&ue!e &ue a los om(res de !alen!o a &uienes de(emos el 'apor5 la pila el/c!rica5 el a=car deremolaca # la (u9+a es!e-rica. :Es acaso por&ue la carre!illa 'ol&ue!e los afec!a m-s de cerca5 les in!eresa m-s o lesresul!a m-s familiar< Puede ser. Sea como fuere5 el error 'ulgar &ue propagaron los li(ros elemen!ales de "is!oriapod+a ser f-cilmen!e desenmascarado5 pues (as!a(a5 !an sólo5 con o9ear algunos manuscri!os iluminados de lossiglos III # I5 en los &ue mucas minia!uras represen!an a campesinos medie'ales u!ili=ando la carre!illa ) . E

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incluso5 sin emprender !an delicadas (s&uedas5 una o9eada lan=ada so(re los monumen!os u(iera permi!idores!a(lecer la 'erdad. En!re los mo!i'os &ue decoran una ar&ui'ol!a del a!rio sep!en!rional de la ca!edral de7eau'ais5 por e9emplo5 un 'ie9o rs!ico del siglo aparece represen!ado empu9ando su carre!illa5 de un modeloseme9an!e a las &ue u!ili=amos en la ac!ualidad l-m. I. El mismo u!ensilio se ad'ier!e asimismo en escenasagr+colas &ue forman el !ema de dos misericordias esculpidas5 proceden!es de la siller+a del coro de la a(ad+a deSain!Lucien5 cerca de 7eau'ais 1,%$?10% . Por a8adidura5 si la 'erdad nos o(liga a negarle a Pascal el (eneficiode una in'ención mu# an!igua5 an!erior en mucos siglos a su nacimien!o5 ello no ser+a capa= de disminuir en nadala grande=a # el 'igor de su genio. El inmor!al au!or de los Pensamientos5 del c-lculo de pro(a(ilidades5 e in'en!or de la prensa idr-ulica5 de la m-&uina de calcular5 e!c.5 arras!ra nues!ra admiración median!e o(ras superiores #descu(rimien!os de en'ergadura dis!in!a a la de la carre!illa. Mas lo &ue impor!a des!acar5 lo &ue cuen!a !an sólopara noso!ros es &ue5 en la (s&ueda de la 'erdad5 es preferi(le apelar al edificio an!es &ue a las relacionesis!óricas5 en ocasiones incomple!as5 a menudo !endenciosas # casi siempre su9e!as a reser'a.A una conclusión paralela a llegado Andr/ eiger cuando5 sorprendido por el ine2plica(le omena9e rendido por Adriano a la es!a!ua de erón5 ace 9us!icia a las acusaciones inicuas formuladas con!ra ese emperador # con!ra6i(erio. Al igual &ue noso!ros5 niega !oda au!oridad a los rela!os is!óricos5 falsificados a propósi!o5 concernien!es aa&uellos presun!os monstruos umanos5 # no duda en escri(ir Me f+o m-s de los monumen!os # de la lógica &ue delas "is!orias.N

Si5 como emos dico5 la impos!ura de un !e2!o # la redacción de una crónica no e2igen m-s &ue un poco dea(ilidad # de sa(er acer5 en con!rapar!ida es imposi(le cons!ruir una ca!edral. ol'amos nues!ra mirada5 pues5 alos edificios5 &ue ellos nos proporcionar-n m-s serias # me9ores indicaciones. En ellos5 al menos5 'eremos a nues!rospersona9es re!ra!ados a lo 'i'o5 fi9ados en la piedra o en la madera con su fisonom+a real5 su 'es!ido # sus ges!os5 #afiguren en escenas sagradas o compongan !emas profundos. 6omaremos con!ac!o con ellos # no !ardaremos enamarlos. 6an pron!o in!errogaremos al segador del siglo III &ue al=a su o= en la por!ada de Par+s5 como al(o!icario del &ue5 en el coro de Amiens5 macaca no se sa(e &u/ droga en su mor!ero de madera. Su 'ecino5 el(orraco de la nari= florida5 no es un desconocido para noso!ros5 pues nos recuerda a(ernos encon!rado5 al a=ar denues!ras peregrinaciones5 con ese alegre (e(edor. Acaso fuera nues!ro om(re el &ue e2clamara en pleno mis!erioN5an!e el espec!-culo del milagro de Bess en las (odas de ;an-!i scavo"e faire ce qu#il f aict,

$oute la mer de %alilée!eroit ennu"t en vin muée&'t amais sus terre n#auroit %outte d#eau, ne pleuveroit ien du ciel que tout ne fut vin 1 .> a ese mendigo escapado de la cor!e de los milagros5 sin o!ro es!igma de miseria &ue sus andra9os # sus pio9os5!am(i/n le reconocemos. Es a /l a &uien los *ofrades de la Pasi+n ponen en escena a los pies de ;ris!o # &ue5lamen!a(le5 pronuncia es!e solilo&uioe regarde sus mes drapeau!on " a ecté quelque maille&#ou.s tantost/ 0aille lu", 0aille1-2 n#" a dernier ne dem"3334n povre omme n#a poinct d#am" 11 .Pese a !odo cuan!o a#a podido escri(irse5 de(emos5 de (uen o de mal grado5 acos!um(rarnos a la 'erdad de &ue5 alcomien=o de la Edad Media5 la sociedad se ele'a(a #a a un grado superior de ci'ili=ación # esplendor. Buan deSalis(ur#5 &ue 'isi!ó Par+s en 115 e2presa a es!e respec!o en su Pol#cra!ion el m-s sincero en!usiasmo.;uando 'e+a ?dice? la a(undancia de su(sis!encias5 la alegr+a del pue(lo5 el (uen aspec!o del clero5 la ma9es!ad #la gloria de la Iglesia # las di'ersas ocupaciones de los om(res admi!idos al es!udio de la filosof+a5 me a parecido'er esa escala de Baco( cu#o coronamien!o alcan=a(a el cielo # por la &ue los -ngeles su(+an # (a9a(an. Me e 'is!ofor=ado a confesar &ue5 en 'erdad5 el Se8or es!a(a en ese lugar # &ue #o lo ignora(a. 6am(i/n acudió a mi esp+ri!u

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es!e pasa9e de un poe!a 5Feli6 aquel a quien se asigna este lugar por eilioKN 1$ .

O6AS1 Ana!ole de Mon!aiglon. Prefacio de las *uriosite6 de Paris5 reimpresas segn la edición original de 11. Pa1))3.$ ic!or "ugo. Littérature et Pi7osopie melées. Par+s5 Furne5 1),15 p. 31.3 An!#me Sain!?Paul., Segn los is!oriadores ingleses5 los re#es de Ingla!erra lle'aron el !f!ulo de re"es de Francia as!a 1,03. 6al '!ra!a(an de 9us!ificarlo por la posesión de ;alais5 &ue perdieron en 100). o o(s!an!e5 con!inuaron a!ri(u#/ndoas!a la Re'olución5 la cualidad de so(eranos Franceses. Busserand dice de Enri&ue III5 nom(rado defensor de ta

por el papa León I5 en 10$15 &ue ese pr+ncipe 'olun!arioso # poco escrupuloso &ue considera(a &ue lo que e0ueno de tomar era 0ueno de conservar. Es un ra=onamien!o &ue a(+a aplicado al reino de Ingla!erra mismoconsecuen!e al cual a(+a despose+do5 encarcelado # ma!ado a su primo Ricardo IN. 6odos los monarcas ingleprac!icaron ese principio por&ue !odos profesa(an el a2ioma ego+s!a  Lo que me gusta, me lo qued o5 # ac!ua(anconsecuencia.0 B. T. "u#smans5 LU?(as. Paris5 Plon5 1)%15 cap. II. . del 6. Los p-rrafos reproducidos los emos !omado de!raducción espa8ola de la edi!orial Prome!eo5 &ue apareció con el !+!ulo de All8 leos.. *ue los aman!es de los recuerdos ist+ricos se !omen el !ra(a9o5 para su propia edificación5 de reclamar a la alcalde Dourdan Sena # Oise un e2!rac!o del regis!ro ci'il5 con indicación del folio5 del ac!a de defunción de Rous!aPaca Rous!an Mameluco de apoleón I5 Rous!an murió en Dourdan en 1),05 a los cincuen!a # cinco a8os. Am/d/e de Pon!ieu5 Légendes du Vieu-Paris. Par+s5 7acelin?Deflorenne5 1).) ;f. 7i(lio!eca nacional de Par+s mss. $%5 $%1 # 1%$ fondos franceses. Esos !res !omos forma(an en principuna sola o(ra &ue fue ofrecida en 131 al re# Felipe el Largo por illes de Pon!oise5 a(ad de Sain!?Denis. A&ueiluminaciones # minia!uras se reproducen en negro en la o(ra de "enr# Mar!in titulada Légende de !aint-9enis5 Pa;ampion5 1%).% Esos si!iales5 conser'ados en el museo de ;lun#5 lle'an las co!as 7.3%% # 7.,1,.1 Si supiera acer lo &ue /l ace V !odo el mar de alilea V ser+a o# con'er!ido en 'ino5 V # 9am-s en la !ierra a(r+go!a de agua5 ni llo'eria V nada del cielo &ue no fuera !odo 'ino.N11 Miro (a9o mis andra9os V si me an ecado alguna moneda. V Luego oigo Jen!r/galo5 en!r/galoK V ? o a#medio dinero... V @n om(re po(re no !iene amigos.N

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1$ Parisius cum 'iderem 'ic!ualium copiam5 lW!i!iam populi5 re'eren!iam cleri5 e! !o!us ecclesiW ma9es!a!emgloriam5 e! 'ariam occupa!iones pilosopan!ium5 admira!us 'elu! illam scalam Baco(5 cu9us summi!as coel!ange(a!5 era!&ue 'ia ascenden!ium e! descenden!ium angelorum5 coac!us sum profi!eri &uod sera Dominus es! in loipso5 e! ego nescie(am. Illud &uo&ue poe!icum ad men!em redii! feli2 e2ilium cui locus is!e da!urKN.

II. EDAD MEDIA RENACIMIENO

adie discu!e en nues!ros d+as el al!o 'alor de las o(ras medie'ales. Mas5 :&ui/n podr- ra=onar 9am-s el e2!ra8odesprecio de &ue fueron '+c!imas as!a el siglo I< :*ui/n nos aclarara por &u/5 desde el Renacimien!o5 la /li!e delos ar!is!as5 de los sa(ios # de los pensadores considera(a de (uen !ono afec!ar la m-s comple!a indiferencia acialas creaciones audaces de una /poca incomprendida5 original en!re !odas # !an magn+ficamen!e e2presi'a del geniofranc/s< :;u-l fue5 cu-l pudo ser la causa profunda del !ras!orno de la opinión #5 luego5 del apar!amien!o # de lae2clusión &ue pesaron por !an!o !iempo so(re el ar!e gó!ico< :De(emos culpar a la ignorancia5 el caprico # laper'ersión del gus!o< o lo sa(emos. @n escri!or franc/s5 ;arles de R/musa! 1 cree descu(rir la ra=ón primera de

es!e in9us!o desd/n en la ausencia de literatur a5 lo &ue no de9a de sorprender. El Renacimien!o ?nos asegura? adespreciado la Edad Media por&ue la 'erdadera li!era!ura francesa5 la &ue a seguido5 a (orrado las l!imas uellas>5 sin em(argo5 la Francia de la Edad Media ofrece un sorprenden!e espec!-culo. Su genio era ele'ado # se'ero.us!a(a de las gra'es medi!aciones # de las in'es!igaciones profundas5 # e2pon+a5 en un lengua9e sin gracia # sin(rillan!e=5 'erdades su(limes # su!iles ipó!esis. "a producido una li!era!ura singularmen!e filosófica. Sin duda5a&uella li!era!ura a e9erci!ado m-s al esp+ri!u umano de lo &ue lo a ser'ido. En 'ano om(res de primer orden loan ilus!rado sucesi'amen!e5 pues para las generaciones modernas sus o(ras no cuen!an. > es &ue tenían ingenio eideas5 mas no el !alen!o de (ien decir en una lengua &ue no fuera pres!ada. Esco!o Er+gena recuerda en cier!osmomen!os a Pla!ón. Apenas se a lle'ado m-s le9os &ue /l la li(er!ad filosófica5 # se ele'a auda=men!e en esa regiónde las nu(es en la &ue la 'erdad sólo (rilla en rel-mpagos. Pensa(a por su cuen!a en el siglo I. San Anselmo es unme!af+sico original cu#o idealismo sa(io regenera las creencias 'ulgares5 # a conce(ido # reali=ado el auda=

pensamien!o de alcan=ar direc!amen!e la noción de la di'inidad. Es el !eólogo de la ra=ón pura. San 7ernardo !anpron!o es (rXllan!e e ingenioso como gra'e # pa!/!ico. M+s!ico como F/nelon5 recuerda a un 7ossue! ac!uan !e #popular &ue domina en el siglo por la pala(ra # manda a los re#es en lugar de ala(arlos # ser'irlos. Su !ris!e ri'al5 suno(le '+c!ima5 A(elardo5 a lle'ado en la e2posición de la ciencia dial/c!ica un rigor desconocido # una lucide=rela!i'a &ue a!es!iguan un esp+ri!u ner'ioso # fle2i(le5 eco para comprenderlo !odo # e2plicarlo !odo. Es un granpropagador de ideas. Elo+sa a for=ado una lengua seca # pedan!e a refle9ar las delicade=as de una in!eligencia de/li!e5 los dolores del alma m-s orgullosa # !ierna # los !ranspor!es de una pasión desesperada. Buan de Salis(ur# esun cr+!ico clari'iden!e a &uien el esp+ri!u umano le sir'e de espec!-culo # al cual descri(e en sus progresos5 en susmo'imien!os5 en sus re!rocesos5 con una 'eracidad # una imparcialidad prema!uras. Parece a(er adi'inado ese

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!alen!o de nues!ro !iempo5 ese ar!e de colocar an!e s+ la sociedad in!elec!ual para 9u=garla... San!o 6om-s5 a(arcandode una 'e= !oda la filosof+a de su !iempo5 en algunos momen!os a so(repasado la nues!ra. "a con!enido !oda laciencia umana en un perpe!uo silogismo # la a 'aciado en!era al filo de un ra=onamien!o con!inuo5 reali=ando as+la unión de un esp+ri!u 'as!o # de un esp+ri!u lógico. Finalmen!e5 erson. erson5 el !eólogo en &uien el sen!imien!ose dispu!a con la deducción5 &ue comprend+a # deses!ima(a la filosof+a5 supo some!er la ra=ón sin umillarla5cau!i'ar los cora=ones sin ofender los esp+ri!us5 imi!ar5 en fin5 al Dios &ue ace &ue se crea en Yl am-ndolo. 6odosesos om(res5 # no nom(ro a !odos sus iguales5 eran grandes # sus o(ras5 admira(les. Para ser admirados5 paraconser'ar una inffuencia cons!an!e so(re la li!era!ura pos!erior5 :&u/ les a fal!ado5 pues< o a sido la ciencia5 ni elpensamien!o ni el genio5 # me !emo &ue sea una sola cosa el es!ilo.La li!era!ura francesa no 'iene de ellos. o se remi!e a su au!oridad ni u!ili=a sus nom(res. 6an sólo se agloriado de (orrarlos.NDe ello podemos concluir &ue si a la Edad Media le correspóndió el espírit u5 el Renacimien!o go=ó del malignoplacer de encarcelarnos en la letr a...Lo &ue dice ;arles de R/musa! es mu# 9uiciosoC al menos5 en lo !ocan!e al primer per+odo medie'al5 a&uel en el&ue la in!elec!ualidad aparece some!ida a la inffuencia (i=an!ina # an es!- im(uida de las doc!rinas rom-nicas. @nsiglo m-s !arde5 el mismo ra=onamien!o pierde gran par!e de su 'alor. o puede discu!irse5 por e9emplo5 en las o(rasdel ciclo de la !a(la redonda cier!o encan!o desligado de una forma #a m-s cuidada. 6eo(aldo5 conde de ;ampa8a5

en sus *ansons du roi de :avarr e5 uillaume de Lorris # Bean ;lopinel5 au!ores del oman de la ose # !odos los!ro'eros # !ro'adores de los siglos III # I5 sin !ener el genio al!i'o de sus an!epasados sa(ios filósofos5 sa(enser'irse de forma agrada(le de su lengua # se e2presan a menudo con la gracia # la fle2i(ilidad &ue carac!eri=an lali!era!ura de nues!ros d+as.o 'emos5 pues5 por &u/ el Renacimien!o 9u=gó duramen!e la Edad Media # sen!ó pla=a de su pre!endida carenciali!eraria para proscri(irla # arro9arla al caos de las ci'ili=aciones nacien!es5 apenas salidas de la (ar(arie.En cuan!o a noso!ros5 es!imamos &ue el pensamien!o medie'al se re'ela como de esencia cien!+fica # no de o!raespecie. El ar!e # la li!era!ura no son para /l sino los umildes ser'idores de la ciencia !radicional. 6ienen por misióne2presa !raducir sim(ólicamen!e las 'erdades &ue la Edad Media reci(ió de la An!igZedad # de las &ue se man!u'ofiel deposi!aria. Some!idos a la e2presión puramen!e alegórica # man!enidos (a9o la 'olun!ad impera!i'a de lamisma par-(ola &ue sus!rae a lo profano el mis!erio cris!iano5 el ar!e # la li!era!ura !es!imonian una preocupación

e'iden!e # acen alarde de cier!a rigide=5 pero la solide= # la simplicidad de su fac!ura con!ri(u#en5 pese a !odo5 ado!arlos de una originalidad indiscu!i(le. ;ier!amen!e5 el o(ser'ador 9am-s allar- seduc!ora la imagen de ;ris!o !alcomo nos la presen!an las por!adas rom-nicas5 en las &ue Bess5 en el cen!ro de la mandorla m+s!ica5 aparece rodeadode los cua!ro animales e'ang/licos. os (as!a &ue su di'inidad 'enga su(ra#ada por sus propios em(lemas # seanuncie as+ re'eladora de una ense8an=a secre!a. Admiramos las o(ras maes!ras gó!icas por su no(le=a # por laaudacia de su e2presión. Si carecen de la perfección delicada de la forma5 poseen en grado supremo el poder inici-!ico de una filosof+a doc!a # !rascenden!e. Se !ra!a de producciones gra'es # aus!eras5 # no de ligeros mo!i'osgraciosos # placen!eros como los &ue el ar!e5 desde el Renacimien!o5 se a complacido en prodigarnos. Peromien!ras &ue es!os l!imos sólo aspiran a alagar la 'is!a o a su(#ugar los sen!idos5 las o(ras ar!+s!icas # li!erarias dela Edad Media se apo#an en un pensamien!o superiorC 'erdadero # concre!o5 piedra angular de una ciencia inmu?!a(l(ase indes!ruc!i(le de la religión. Si !u'i/ramos &ue definir es!as dos !endencias5 una profunda # la o!rasuperficial5 dir+amos &ue el ar!e gó!ico se manifies!a por en!ero en la sa(ia ma9es!ad de sus edificios5 # &ue elRenacimien!o lo ace en la agrada(le decoración de las 'i'iendas.El coloso medie'al no se a derrum(ado de un solo golpe con el declinar del siglo . En mucos lugares5 sugenio a sa(ido resis!ir an por largo !iempo a la imposición de las nue'as direc!i'as. emos su agon+a prolongarseas!a la mi!ad5 m-s o menos5 del siglo siguien!e5 # 'ol'emos a encon!rar en algunos edificios de a&uella /poca elimpulso filosófico5 el fondo de sa(idur+a &ue generaron duran!e !res siglos !an!as o(ras imperecederas. Asimismo5sin !ener en cuen!a su edificación m-s recien!e5 nos de!endremos en esas o(ras de impor!ancia menor5 pero designificación seme9an!e5 con la esperan=a de reconocer en ellas la idea secre!a5 sim(ólicamen!e e2presada5 de susau!ores.

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Esos refugios del eso!erismo an!iguo5 esos asilos de la ciencia !radicional5 o# rar+simos5 sin !ener en cuen!a sudes!ino ni su u!ilidad5 los clasificamos en la iconolog+a erm/!ica5 en!re los guardianes ar!+s!icos de las ele'adas'erdades filosofales.:Se desea un e9emplo< "e a&u+ el admira(le !+mpano $ &ue decora(a5 en el le9ano siglo II5 la puer!a de en!rada deuna an!igua casa de Reims l-m. . El !ema5 mu# !ransparen!e5 podr+a prescindir con facilidad de la descripción.7a9o una gran arcada &ue inscri(e o!ros dos geminados5 un maes!ro ense8a a su disc+pulo # le mues!ra con el dedo5en las p-ginas de un li(ro a(ier!o5 el pasa9e &ue comen!a. Encima5 un 9o'en # 'igoroso a!le!a es!rangula a un animalmons!ruoso ?!al 'e= un dragón?5 del &ue sólo se 'e la ca(e=a # el cuello. Bun!o a /l a# dos 9o'enci!os es!recamen!eenla=ados. La *iencia aparece as+ como dominadora de la Fuer6a # del Amor5 oponiendo la superioridad del esp+ri!ua las manifes!aciones f+sicas del poder # del sen!imien!o.:;ómo admi!ir &ue una cons!rucción animada de seme9an!e pensamien!o no a#a per!enecido a algn filósofodesconocido< :Por &u/ a(r+amos de negar a ese (a9o relie'e la manifes!ación de una concepción sim(ólica &ueemana de un cere(ro cul!i'ado5 de un om(re ins!ruido &ue afirma su gus!o por el es!udio # predica con el e9emplo<os e&ui'ocar+amos5 pues5 de medio a medio si e2clu#/ramos esa 'i'ienda5 de fron!ispicio !an carac!er+s!ico5 deen!re las o(ras em(lem-!icas &ue nos proponemos es!udiar (a9o el !+!ulo general de Las moradas filosofales.

O6AS1 ;arles de R/musa!5 ;ri!i&ue e! E!udes li!!/raires..$ Ese !+mpano se conser'a en el museo lapidario de Reims5 ins!alado en los locales del ospi!al ci'il an!igua a(ad+a Sain!?Remi5 en la rue Simon. Se descu(rió acia 1)05 al cons!ruirse la prisión5 en los cimien!os de la casa llamadala *rétienté de eims5 si!uada en la place du Par'is5 # &ue lle'a(a la inscripción  Fides, !pes, *aritas. Esa cper!enec+a al cap+!ulo.

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III. LA ALQUIMIA MEDIEAL

De !odas las ciencias cul!i'adas en la Edad Media5 ninguna conoció m-s fa'or ni m-s onor &ue la al&uimia. 6al

es el nom(re (a9o el &ue se disimula(a en!re los -ra(es el  Arte sagrado o sacerdotal &ue a(+an eredado de losegipcios5 # &ue el Occiden!e medie'al de(ia5 m-s !arde5 acoger con !an!o en!usiasmo.Mucas con!ro'ersias se an desarrollado a propósi!o de las di'ersas e!imolog+as a!ri(uidas a la pala(ra al&uimia.Pierre?Bean Fa(re5 en su A0régé des !ecrets c"miques5 pre!ende &ue se relacione con el nom(re de ;am5 i9o deo/5 &ue a(r+a sido el primer ar!esano5 # escri(e alcamie. El au!or anónimo de un curioso manuscri!o 1 piensa &ula pala(ra alquimia deri'a de al s5 &ue significa sal5 # de quimia5 &ue &uiere decir fusi+n. > as+ es!- (ien dico5por&ue la sal5 &ue es !an admira(le5 es!- usurpada.N Pero si la sal se dice alz en lengua griega5 ceimeia5 en lugar de cumeia, alquimia5 no !iene o!ro sen!ido &ue el de ugo o umor. O!ros descu(ren el origen en la primera

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denominación de la !ierra de Egip!o5 pa!ria del Ar!e sagrado5  ;"mia o *emi. apoleón Landais no alla ningunadiferencia en!re las dos pala(ras química # alquimia5 # se limi!a a a8adir &ue el prefi9o al no puede ser confundidocon el ar!+culo -ra(e # significa !an sólo una 'ir!ud mara'illosa. *uienes sos!ienen la !esis in'ersa sir'i/ndose delar!+culo al # del sus!an!i'o quimia &u+mica5 en!ienden designar la química por ecelencia o iperquímica de losocul!is!as modernos. Si de(emos apor!ar a es!e de(a!e nues!ra opinión personal5 diremos &ue la c-(ala fon/!icareconoce un es!reco paren!esco en!re las pala(ras griegas ceimeia5 cumeia # ceuma5 el cual indica lo &ueflu"e, discurre, mana, # se refiere de modo par!icular al metal fundid o5 a la misma fusi+n # a !oda o0ra eca de unmetal fundid o. Ser+a /s!a una (re'e # sucin!a definición de la al&uimia en !an!o &ue !/cnica me!alrgica $ . Perosa(emos5 por o!ra par!e5 &ue el nom(re # la cosa se (asan en la permutaci+n de la forma por la lu=5 fuego o esp+ri!u6al es5 al menos5 el sen!ido 'erdadero &ue indica el lenguae de los p8aros.acida en Orien!e5 pa!ria del mis!erio # de lo mara'illoso5 la ciencia al&u+mica se a e2pandido por Occiden!e a!ra'/s de !res grandes '+as de pene!ración (i=an!ina5 medi!err-nea e isp-nica. Fue5 so(re !odo5 el resul!ado de lascon&uis!as -ra(es. Es!e pue(lo curioso5 es!udioso5 -'ido de filosof+a # de cul!ura5 pue(lo ci'ili=ador por e2celencia5cons!i!u#e el '+nculo de unión5 la cadena &ue relaciona la an!igZedad orien!al con la Edad Media occiden!al.Desempe8a5 en efec!o5 en la is!oria del progreso umano5 un papel compara(le al &ue correspondió a los fenicios5mercaderes en!re Egip!o # Asiria. Los -ra(es5 disc+pulos de los griegos # de los persas5 !ransmi!ieron a Europa laciencia de Egip!o # de 7a(ilonia5 aumen!ada por sus propias ad&uisiciones5 a !ra'/s del con!inen!e europeo '+a

(i=an!ina5 # acia el siglo III de nues!ra Era. Por o!ra par!e5 la influencia -ra(e se e9erció en nues!ros pa+ses a la'uel!a de las e2pediciones de Pales!ina '+a medi!err-nea5 # son los cru=ados del siglo II &uienes impor!an lama#or par!e de los conocimien!os an!iguos. Finalmen!e5 m-s cerca de noso!ros5 en la aurora del siglo III5 nue'oselemen!os de ci'ili=ación5 de ciencia # de ar!e5 surgidos acia el siglo III del Qfrica sep!en!rional5 se e2!ienden por Espa8a '+a isp-nica # 'ienen a acrecen!ar las primeras apor!aciones del foco greco(i=an!ino.Al principio !+mida e indecisa5 la al&uimia !oma poco a poco conciencia de s+ misma # no !arda demasiado enafirmarse. 6iende a imponerse5 # es!a plan!a e2ó!ica5 !rasplan!ada a nues!ro suelo se aclima!a en /lmara'illosamen!e5 # se desarrolla con !an!o 'igor &ue pron!o se la 'e e2pansionarse en una e2u(eran!e floración. Sue2!ensión # sus progresos son prodigiosos. Apenas se la cul!i'a ?# !an sólo a la som(ra de las celdas mon-s!icas? enel siglo II. En el I5 se propaga a !odas par!es5 irradiando so(re !odas las clases sociales5 en!re las &ue (rilla conel m-s 'i'o fulgor. 6odos los pa+ses ofrecen a la ciencia mis!eriosa una mul!i!ud de fer'ien!es disc+pulos5 # cada

es!amen!o se esfuer=a en sacrificarle. o(le=a # al!a (urgues+a se en!regan a ella. Sa(ios5 mon9es5 pr+ncipes # pre?ladacen profesión5 # las gen!es de oficio # pe&ue8os ar!esanos5 orfe(res5 gen!ilom(res5 'idrieros5 esmal!adores# (o!icarios5 !ampoco de9an de e2perimen!ar el irresis!i(le deseo de mane9ar la re!or!a. Si no se !ra(a9a a la lu= deld+a ?la au!oridad real persigue a los sopladores # los Papas fulminan con!ra ellos 3 ?5 no se de9a de es!udiar aescondidas. Se (usca con a'ide= la sociedad de filósofos5 'erdaderos o pre!endidos. Es!os emprenden largos 'ia9es5con in!ención de aumen!ar su pa!rimonio de conocimien!os5 o corresponden en lengua9e cifrado de pa+s a pa+s # dereino a reino. Se dispu!an los manuscri!os de los grandes adep!os5 los del panopoli!a oriano5 de >aría la Profetisa # los fragmen!os de"ermes se negocian a precio de oro. La fie(re se apodera de los in!elec!uales #5 con las fra!ernidades5 las logias # loscen!ros inici-!icos5 los sopladores crecen # se mul!iplican. Pocas familias escapan al pernicioso a!rac!i'o de la&uimera dorada5 # mu# raras son las &ue no cuen!an en su seno con algn al&uimis!a prac!ican!e5 con. algnperseguidor de lo imposi(le. La imaginación se lan=a al galope. El auri sacra fames arruina al no(le5 desespera al'illano5 de9a am(rien!o a &uien&uiera &ue se de9e prender en /l # no apro'eca m-s &ue al carla!-n. A(ades5o(ispos5 m/dicos5 soli!arios ?escri(e Lengle!?Dufresno# , ?5 !odos con'ir!ieron la al&uimia en ocupación. Era la locudel !iempo5 # se sa(e &ue cada siglo !iene una &ue le es propia5 pero por desgracia a&u/lla a reinado m-s !iempo&ue las o!ras # ni si&uiera a pasado del !odo.NJ;on &u/ pasión5 con &u/ alien!o5 con &u/ esperan=as la ciencia maldi!a en'uel'e las ciudades gó!icas adormecidas(a9o las es!rellasK JFermen!ación su(!err-nea # secre!a &ue5 en cuan!o cae la noce5 pue(la con e2!ra8as pulsacioneslas cue'as profundas5 se escapa de los !ragaluces en claridades in!ermi!en!es # asciende en 'olu!as sulfurosas a los-pices de los rema!esK

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Despu/s del nom(re c/le(re de Ar!efio acia 1135 la nom(rad+a de los maes!ros &ue lo suceden consagra larealidad erm/!ica # es!imula el ardor de los aspiran!es al adep!ado. En el siglo III5 'i'e el ilus!re mon9e ingl/sRoger 7acon5 a &uien sus disc+pulos llaman 9octor admira0ilis 1$1,?1$%$ # cu#a enorme repu!ación se aceuni'ersal. A con!inuación5 'iene Francia con Alain de l4Isle5 doc!or por Par+s # mon9e del ;+s!er muer!o acia1$%)C ;ris!ó(al el Parisiense acia 1$ # Arnaldo de ilano'a 1$,01315 mien!ras &ue en I!alia (rillan 6om-sde A&uino -9octor angelicus? 1$$0 # el mon9e Ferrari 1$).El siglo I 'e surgir a !oda una pl/#ade de ar!is!as. Raimundo Lulio -9octor illuminatus?5 franciscano espa8ol1$30?1310C Buan Daus!in5 filósofo ingl/sC Buan ;remer5 a(ad de Ges!mins!erC Ricardo5 llamado Ro(er!o el 7nglés5au!or del *orrectum alc"miae acia 133C el i!aliano Pedro 7on de Lom(ard+aC el papa franc/s Buan II 1$,131C uillermo de Par+s5 pa!rocinador de los (a9o relie'es erm/!icos del a!rio de o!re?Dame Bean de Meun5llamado ;lopinel5 uno de los au!ores del oman de la ose 1$)13,C rasseo5 llamado "or!ulano5 comen!aris!ade la $a0la de esmeralda 130)C #5 finalmen!e5 el m-s famoso # popular de los filósofos franceses5 el al&uimis!aicolas Flamel 133?1,1.El siglo 2' marca el per+odo glorioso de la ciencia # so(repasa an los preceden!es5 !an!o por la 'al+a como por elnmero de los maes!ros &ue lo an ilus!rado. En!re /s!os con'iene ci!ar en primer lugar a 7asilio alen!+n5 mon9e(enedic!ino de la a(ad+a de San Pedro5 en Erfur!5 elec!orado de Maguncia acia 1,135 el ar!is!a m-s considera(le5!al 'e=5 &ue el ar!e erm/!ico a#a producido nuncaC a su compa!rio!a el a(ad 6ri!emioC a Isaac el ?olandés 1,)C

a los dos ingleses 6omas or!on # eorge Riple#C a Lam(sprincC a Borge Aurac5 de Es!ras(urgo 1,10C almon9e cala(r/s Lacini 1,0%C # al no(le 7ernardo 6re'isan 1,?1,%5 &ue empleó cincuen!a # seis a8os de su'ida en la prosecución de la O(ra5 # cu#o nom(re &uedar- en la is!oria al&u+mica como un s+m(olo de !esón5 decons!ancia # de irreduc!i(le perse'erancia.A par!ir de es!e momen!o5 el erme!ismo cae en descr/di!o. Sus mismos par!idarios5 amargados por la fal!a de/2i!o5 se 'uel'en con!ra /l. A!acado por !odas par!es5 su pres!igio desaparece5 el en!usiasmo decrece # la opinióncam(ia. Operaciones pr-c!icas5 recogidas5 reunidas # luego re'eladas # ense8adas5 permi!en a los disiden!es sos!enerla !esis de la nada al&u+mica5 # arruinar la filosof+a ecando las (ases de nues!ra &u+mica. Se!on5 Genceslao La'iniode Mora'ia5 [acar+as # Paracelso son5 en el siglo I5 los nicos erederos conocidos del eso!erismo egipcio del&ue el Renacimien!o a renegado !ras a(erlo corrompido. Rindamos5 de pasada5 un supremo omena9e al ardien!edefensor de las 'erdades an!iguas &ue fue Paracelso. El gran !ri(uno merece por nues!ra par!e un e!erno

reconocimien!o por su l!ima # 'alien!e in!er'ención &ue5 aun&ue 'ana5 no por ello de9a de cons!i!uir uno de susme9ores !im(res de gloria.El ar!e erm/!ico prolonga su agon+a as!a el siglo II #5 por fin5 se e2!ingue5 no sin a(er dado al mundoocciden!al !res '-s!agos de gran en'ergadura L-scaris5 el presiden!e d4Espagne! # el mis!erioso Ireneo Filale!eo5enigma 'i'o cu#a personalidad 9am-s pudo descu(rirse.

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O6AS1 L#7nterruption du !ommeil ca0alistique ou le 9évoilement des $a0leau de l#Antiquité333 Mss. con figuras del siIII5 (i(lio!eca del Arsenal Par+s n.\ $0$ 10 S.A.F. ? 7i(lio!eca nacional de Par+s5 an!iguo fondo franc/s5 n.\ 1$305 siglo II. 7i(lio!eca Sain!e?ene'iH'e5 n.\ $$5 !ra!ado II5 siglo III.$ Es!a definición con'endr+a me9or a la arquimia o voarcadumia5 par!e de la ciencia &ue ense8a la !rasmu!ación de me!ales unos en o!ros5 an!es &ue a la al&uimia propiamen!e dica.3 ;f. la (ula !pondent pariter lan=ada en 131 con!ra los al&uimis!as por el papa Buan II5 &uien5 sin em(argo5 aescri!o su mu# singular Ars transmutatoria metallorum., Lengle!?Dufresno#5 ?istoire de la Pilosopie ermétique. Par+s5 ;ous!elier5 1,$.

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I. EL LABORAORIO LEGENDARIO

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;on su cor!e9o de mis!erio # de desconocido5 (a9o su 'elo de iluminismo # de mara'illoso5 la al&uimia e'oca !odoun pasado de is!orias le9anas5 de narraciones mir+ficas # de !es!imonios sorprenden!es. Sus !eor+as singulares5 suse2!ra8as rece!as5 la secular nom(rad+a de sus grandes maes!ros5 las apasionadas con!ro'ersias &ue susci!ó5 el fa'or de &ue go=ó en la Edad Media # su li!era!ura oscura5 enigm-!ica # paradó9ica nos parecen desprender o# el !ufo delmoo # del aire rarificado &ue ad&uieren5 al correr de los a8os5 los sepulcros 'ac+os5 las flores marci!as5 las'i'iendas a(andonadas # los pergaminos amarillen!os.:El al&uimis!a< @n anciano medi!a(undo5 de fren!e gra'e # coronada de ca(ellos (lancos5 de silue!a p-lida #acacosa5 persona9e original de una "umanidad desaparecida # de un mundo ol'idadoC un recluso !es!arudo5encor'ado por el es!udio5 las 'igilias5 la in'es!igación perse'eran!e # el desciframien!o o(s!inado de los enigmas dela al!a ciencia. 6al es el filósofo a &uien la imaginación del poe!a # el pincel del ar!is!a se an complacido enpresen!arnos.Su la(ora!orio ? só!ano5 celda o crip!a an!igua ? apenas se ilumina con una lu= !ris!e &ue a#uda a difundir lasml!iples !elara8as pol'orien!as. Sin em(argo5 a+5 en medio del silencio5 se consuma el prodigio poco a poco. Lainfa!iga(le a!urale=a5 me9or &ue en sus a(ismos rocosos. se afana (a9o la pruden!e 'igilancia del om(re5 con elsocorro de los as!ros # por la gracia de Dios. JLa(or ocul!a5 !area ingra!a # ciclópea5 de una ampli!ud de pesadillaKEn el cen!ro de es!e in pace5 un ser5 un sa(io para &uien ninguna o!ra cosa e2is!e #a5 'igila5 a!en!o # pacien!e5 lasfases sucesi'as de la ran O(ra...

A medida &ue nues!ros o9os se a(i!an mil cosas salen de la penum(ra5 nacen # se precisan. :Dónde es!amos5Se8or< :6al 'e= en el an!ro de Polifemo o acaso en la ca'erna de ulcano<;erca de noso!ros a# una fragua apagada cu(ier!a de pol'o # de 'iru!as de for9a5 # la (igornia5 el mar!illo5 laspin=as5 las !i9eras # las !ena=asC moldes o2idados # los !iles rudos # poderosos del me!alrgico an ido a caer all-.En un rincón5 gruesos li(ros pesadamen!e errados ?como an!ifonarios ? con cin!as selladas con plomos 'e!us!osCmanuscri!os ceni=osos # grimorios amon!onados me=clados unos con o!rosC 'olmenes cu(ier!os de no!as # defórmulas5 maculados desde el incipit al eplici!. Redomas 'en!rudas corno (uenos mon9es # reple!as de emulsionesopalescen!es5 de l+&uidos glaucos errum(rosos o encarnadinos e2alan esos relen!es -cidos cu#a aspere=a anuda lagargan!a # pica en la nari=.En la campana del orno se alinean curiosas 'asi9as o(longas5 de cuello cor!o5 selladas # encapucadas con ceraCma!races de esferas irisadas por los depósi!os me!-licos es!iran sus cuellos unas 'eces delgados # cil+ndricos5 # o!ras

a(ocinados o incadosC las cucr(i!as 'erdosas5 # las re!or!as de cer-mica aparecen 9un!o a los crisoles de !ierraro9a # llameada. Al fondo5 colocados en sus mon!ones de pa9a a lo largo de una cornisa de piedra5 unos ue'osfilosóficos ialinos # e elegan!es con!ras!an con la maci=a # a(ul!ada cala(a=a5 praegnans cucur0it a.J;ondenaciónK "e a&u+ aora pie=as ana!ómicas5 fragmen!os es&uel/!icos cr-neos ennegrecidos5 desden!ados #repugnan!es en su ric!us de ul!ra!um(aC fe!os umanos suspendidos5 desecados # encogidos5 misera(les desecos&ue ofrecen a la mirada su cuerpo minsculo5 su ca(e=a apergaminada5 desde8a(le # las!imosa. Esos o9os redondos5'idriosos # dorados son los de una lecu=a de pluma9e marci!o5 &ue !iene por 'ecino a un cocodrilo5 salamandragigan!e5 o!ro s+m(olo impor!an!e de la pr-c!ica. El espan!oso rep!il emerge de un rincón oscuro5 !iende la cadena desus '/r!e(ras so(re sus pa!as reconcas # dirige acia las arcadas la sima ósea de sus !emi(les ma2ilares.Esparcidos sin orden5 al a=ar de las necesidades5 en la placa del orno5 se 'en (o!es 'i!rificados5 aldeles osu(lima!oriosC pelicanos de paredes espesasC infiernos seme9an!es a grandes ue'os de los &ue se 'iera una de lascala=asC recipien!es oli'-ceos undidos de lleno en la arena5 con!ra el a!anor de umaredas ligeras &ue asciendenacia la (ó'eda o9i'al. A&u+ es!- el alam(i&ue de co(re -omo galeatus?5 maculado de (a(as 'erdesC all-5 losdescensores # los dos ermanos o gemelos de la coo(aciónC recipien!es con serpen!inesC pesados mor!eros defundición o de m-rmolC un anco fuelle de flancos de cuero ra+do 9un!o a un mon!ón de garrucas5 de !e9as5 decopelas5 de e'apora!orios...JAmasi9o caó!ico de ins!rumen!os arcaicos5 de ma!eriales e2!ra8os # de u!ensilios caducos5 almoneda de !odas lasciencias5 (a!i(urrillo de faunas impresionan!esK > planeando so(re ese desorden5 fi9o en la cla'e de (ó'eda5 comopendien!e con las alas desplegadas5 el gran cuer'o5 9erogl+fico de la muer!e ma!erial # de sus descomposiciones5em(lema mis!erioso de mis!eriosas operaciones.

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;uriosa !am(i/n la muralla o5 al menos5 lo &ue de ella &ueda. Inscripciones de sen!ido m+s!ico llenan los 'ac+os?ic lapis est su0tus te, supra te, erga te et circa t eC 'ersos mnemónicos se acen un l+o5 gra(ados al caprico deles!ile!e en la piedra (landaC predomina uno de ellos5 !ra=ado en cursi'a gó!ica/ A6ot et ignis ti0i sufficiun!5carac!eres e(raicosC c+rculos cor!ados por !ri-ngulos5 en!reme=clados con cuadril-!eros a la manera de lassigna!uras gnós!icas. A&u+5 un pensamien!o5 fundado so(re el dogma de la unidad5 resume !oda una filosof+a =mniaa0 uno et in unum omnia. Apar!e5 la imagen de la o=5 em(lema del decimo!ercer arcano # de la casa na!uralC laes!rella de SalomónC el s+m(olo del ;angre9o5 o(secración del mal esp+ri!uC algunos pasa9es de [oroas!ro5!es!imonios de la al!a an!igZedad de las ciencias maldi!as. Finalmen!e5 si!uado en el campo luminoso del !ragalu=5 #m-s legi(le en ese d/dalo de impre'isiones5 el !ernario erm/!ico !al, !ulpur, >ercurius...6al es el cuadro legendario del al&uimis!a # de su la(ora!orio. isión fan!-s!ica5 despro'is!a de 'eracidad5 salida dela imaginación popular # reproducida en los 'ie9os almana&ues5 !esoros del co!illeo.:Sopladores5 magis!as5 (ru9os5 as!rólogos5 nigroman!es<?JAna!ema # maldiciónK.

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. QUÍMICA FILOSOFÍA

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La &u+mica es5 indiscu!i(lemen!e5 la ciencia de los ecos5 como la al&uimia lo es de las causas. La primera5limi!ada al -m(i!o ma!erial5 se apo#a en la e2periencia5 en !an!o &ue la segunda5 !oma de preferencia sus direc!ricesen la filosof+a. Si una !iene por o(9e!o el es!udio de los cuerpos na!urales5 la o!ra in!en!a pene!rar en el mis!eriosodinamismo &ue preside sus !ransformaciones. Es es!o lo &ue de!ermina su diferencia esencial # nos permi!e decir &uela al&uimia5 comparada a nues!ra ciencia posi!i'a5 la nica admi!ida # ense8ada o#5 es una &u+mica espiri!ualis!apor&ue nos permi!e en!re'er a Dios a !ra'/s de las !inie(las de la sus!ancia.Por a8adidura5 no nos parece suficien!e sa(er reconocer # clasificar los ecos con e2ac!i!ud. Es preciso5 an5in!errogar a la a!urale=a para aprender de ella en &u/ condiciones # (a9o el imperio de &u/ 'olun!ad se operan susml!iples producciones. El esp+ri!u filosófico no ser+a capa=5 en efec!o5 de con!en!arse con una simple posi(ilidad deiden!ificación de los cuerpos5 sino &ue reclama el conocimien!o del secre!o de su ela(oración. En!rea(rir la puer!adel la(ora!orio donde la a!urale=a me=cla los elemen!os es!- (ien5 pero descu(rir la fuer=a ocul!a (a9o cu#ainfluencia se efec!a su la(or5 me9or. os allamos le9os5 e'iden!emen!e5 de conocer !odos los cuerpos na!urales #sus com(inaciones5 #a &ue cada d+a descu(rimos o!ros nue'os5 pero sa(emos lo suficien!e como para renunciar pro'isionalmen!e al es!udio de la ma!eria iner!e # dirigir nues!ras in'es!igaciones acia el animador desconocido5agen!e de !an!as mara'illas.Decir5 por e9emplo5 &ue dos 'olmenes de idrógeno com(inados con un 'olumen de o2+geno dan agua es anunciar una !ri'ialidad &u+mica. >5 sin em(argo5 :&ui/n nos ense8ar- por &u/ el resul!ado de esa com(inación presen!a5 con

un es!ado especial5 carac!eres &ue no poseen en a(solu!o los gases &ue la an producido< :;u-l es5 pues5 el agen!e&ue impone al compues!o su especificidad nue'a # o(liga al agua5 solidificada por el fr+o5 a cris!ali=ar siempre en elmismo sis!ema< Por una par!e5 si el eco es innega(le # es!- rigurosamen!e con!rolado5 :de dónde procede el &uenos resul!e imposi(le reproducirla por simple lec!ura de la fórmula encargada de e2plicar su mecanismo< Pues fal!a5en la no!ación "$O el agen!e esencial capa= de pro'ocar la unión +n!ima de los elemen!os gaseosos5 es decir5 elfueg o. Pero desafiamos al m-s -(il &u+mico a &ue fa(ri&ue agua sin!/!ica me=clando el o2+geno con el idrógenoen los 'olmenes indicados am(os gases reusar-n siempre com(inarse. Para !ener /2i!o en la e2periencia5 esindispensa(le acer in!er'enir el fuego5 #a sea en forma de cispa o en la de un cuerpo en ignición o suscep!i(le deser pues!o en incandescencia espon9a de pla!ino. Se reconoce5 as+5 sin &ue se pueda oponer a nues!ra !esis el menorargumen!o serio5 &ue la fórmula &u+mica del agua es5 si no falsa5 al menos incomple!a # !runcada. > el agen!ein!ermediario fueg o5 sin el cual ninguna com(inación puede efec!uarse5 al es!ar e2cluido de la no!ación &u+mica5

ace &ue la ciencia en!era se manifies!e como lagunar e incapa= de suminis!rar5 median!e sus fórmulas5 unae2plicación lógica # 'erdadera de los fenómenos es!udiados. La &u+mica f+sica ?escri(e A. E!ard 1 ? arras!ra a lama#or+a de los esp+ri!us in'es!igadores. Ella es la &ue !oca m-s de cerca las 'erdades profundas5 # ser- ella la &uenos re'ele len!amen!e las le#es capaces de cam(iar !odos nues!ros sis!emas # nue