sartre, j p_la trascendencia del ego (doc)

8/19/2019 Sartre, J P_La Trascendencia Del Ego (Doc)

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J. P. S a r t r eLa Trascendencia del Ego

Traducción de Oscar Masotta

ediciones

C a l d e nLibera los Libros


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Indice

INTRODUCCION..............................................................................................................3

L TRSCENDENCI DEL E!O........................................................................................ "

CONSTITUCI#N DEL E!O..............................................................................................$"

CONCLUSI#N................................................................................................................ %%


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INTRODUCCION&or SIL'IE LE (ON

El ensayo sobre La trascendencia del Ego es la primer obra deSartre. Las dos únicas publicaciones que la precedieron no pueden,en efecto, ser consideradas como investigaciones losócas

propiamente dicas. !na es un art"culo sobre la teor"a realista deldereco de #uguit, aparecida en $%&'( la otra, titulada La l)gendede la *)rit)+ donde Sartre e)pon"a sus ideas ba*o la forma de uncuento, apareció en $%+$ en la revista (i,ur.on este ensayo Sartre inaugura el traba*o de e)ploración que

culminar- en El Ser - la Nada. or otra parte la cronolog"a conrmala innegable unidad de sus preocupaciones losócas de esta/poca0 puede decirse que todas sus obras de ese entonces fueron,si no redactadas, por lo menos concebidas al mismo tiempo. Elensayo sobre La trascendencia del Ego fue escrito en $%+1, en

parte durante la permanencia de Sartre en 2erl"n, mientrasestudiaba la fenomenolog"a de 3usserl. En $%+45$%+6 escribió a lave7 La iaginación y Lo iaginario 8publicadas respectivamente en$%+6 y $%19:, despu/s, en $%+'5$%+;, La Ps-c/) de la cual ten"a

ya la idea en $%+1. #e La Ps-c/) separa lo que deviene el Esbo0ode una teor1a de las eociones y que fue publicado en $%+%.


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r"as m-s recientes de 3usserl, la relación del >o con la conciencia(entre la conciencia y la &siuis establec"a una distinción que mantu5vo siempre( mientras la conciencia es una inmediata y evidente

presencia de uno, la psiquis es un con*unto de ob*etos que no se

apreenden por una operación re?e)iva y que, como los ob*etos dela percepción, sólo se dan por perles0 el odio, por e*emplo, es unatrascendencia que se apreende a trav/s de las erlebnissen y cuyae)istencia es solamente probable. Mi Ego es en s" mismo un ser deotro mundo, as" como el Ego a*eno. @s" Sartre fundaba una de suscreencias m-s antiguas y m-s tercas0 ay una autonom"a de laconciencia irre?e)iva( la relación al >o, que, según La


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L TRSCENDENCI DEL E!O

(osue4o de una descri&ción ,enoenológica

ara la mayor parte de los lósofos el Ego es un =abitante= de laconciencia. @lgunos arman su presencia formal en el seno de las=Erlebnisse=, como un principio vac"o de unicación. Otros 2

psicólogos en su mayor parte2 piensan descubrir su presenciamaterial, como centro de los deseos y los actos, en cada momento

de nuestra vida ps"quica. Auisi/ramos mostrar aqu" que el Ego noest- ni formalmente ni materialmente en la conciencia0 est- afuera,en el undo5 es un ser del mundo, como el Ego del otro.


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L TRSCENDENCI DEL E!O

EL 6o 6 EL 6o 78oi9

9 Beor"a de la presencia formal del >o.

Es necesario conceder a :ant ue ;el 6o Pienso debe poder aco&a Parece ue ser1a ,or0ar el &ensaiento de :ant. El

&roblea de la cr1tica es un &roblea de derec/o+ :ant no a?ranada sobre la e=istencia de /ec/o del >o pienso. Por el contrario+&arece ue /a *isto &er,ectaente ue /a- oentos de laconciencia sin ;6o;+ &uesto ue dice@ ;Debe &oder aco&a


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su&erior+ de una /i&erconciencia constitu-ente. La concienciatrascendental &ara )l es solaente el con4unto de condicionesnecesarias &ara la e=istencia de una conciencia e&1rica. Enconsecuencia+ reali7ar el 6o trascendental+ /acer de )l el

co&a


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conciencia+ nos encontrareos con la ,enoenolog1a de Fusserl.G

La ,enoenolog1a es un estudio cient1?co - no cr1tico de laconciencia.H Su &rocediiento esencial es la intuición. La intuición+segn Fusserl+ nos &one en &resencia de la cosa.; Es necesario enB

tonces entender ue la ,enoenolog1a es una ciencia de eco y ue los &robleas ue &one son &robleas de eco %+ coo+ &orotra &arte+ se lo &uede co&render si se considera ue Fusserl lallaa una ciencia descriptiva.$9 Los &robleas de la relación del 6o ala conciencia son+ &ues+ &robleas e=istenciales. Fusserl encuentra- a&resa la conciencia trascendental de :ant &or interedio de laepo*e.$$ Pero esta conciencia no es -a un con4unto de condiciones

6 EnL'lmagination (P. U. F., 1936), Sartre, a propósito del problema singular de la

imagen, extrae los rasgos generales de la revolución filosófica que significó la apariciónde la fenomenología. Como aquí, él insiste sobre la fecundidad de un método que quiere

sea descriptivo, aun cuando los "hechos" que le ofrece la intuición sean esencias. "La

fenomenología es una descripción de las estructuras de la conciencia trascendental

fundada en la intuición de las esencias de tales estructuras": J. P. Sartre,La

Imaginación,Ed. Sudamericana, Buenos Aires, 1967, cap. IV, "Husserl", p. 113.7 Husserl desarrolla este proyecto enLa filosofía como ciencia estricta(1911).8 "En los actos de intuición inmediata intuimos un "ello mismo" ".Ideas relativas a una

fenomenología pura y una filosofía fenomenología(en adelanteIdeas I).Ed. Fondo de

Cultura Económica, México, 1962, parágrafo 43, p. 98. Husserl dice tam bien que la cosa

nos es dada "en carne y hueso", y también "originalmente", "en el original".9 Husserl diría: una ciencia de esencias. Pero para el punto de vista en que nos

colocamos, quiere decir lo mismo.10 "Ciencias de hechos" y "ciencias de esencias" —o aún "ciencia eidética", estas

expresiones se refierenaquía lo mismo. Efectivamente, Sartre no se refiere, por el

momento, a la oposición —que es, por otra parte, esencial— entre hecho empírico y esen-

cia, sino a aquella —más global— que existe entre problemas de hecho y problemas de

derecho. Ahora bien, hecho y esencia aparecen en bloque como algodado, ylo esencial

(aquí) es, precisamente, que la fenomenología sea la ciencia de lo dado (material o ideal,

poco importa entonces) frente a la perspectiva kantiana que plantea la cuestión de puro

derecho.Es porque apunta a un dado, a un conjunto de hechos, que la fenomenología es

una cienciadescriptiva.Por otra parte, si bien es verdad que Husserl quiso fundar una

"ciencia de esencias" o "eidética", es necesario considerar, especialmente aquí, que esas

esencias son libradas con certeza, en una visión inmediata, exactamente como lo serían

los objetos. Desde este punto de vista son hechos (Ideales).

"La esencia(eidos)es un objeto de una nueva índole. Así como lo dado en la intuición

individual o empírica es un objeto individual, lo dado en la intuición esencial es una

esencia pura (...). También la intuición esencial es rigurosamente intuición, como el

objeto eidético es rigurosamente objeto",Ideas I,parágrafo 3, p. 21.11 Laepojé,la reducción fenomenológica, es la puesta entre paréntesis de la actitud

natural, que siempre es la marca de un realismo espontáneo; también Sartre designa,

después de Husserl, esta conciencia natural con la expresión "conciencia in-

tramundana". Con respecto a la o las reducciones, verIdeas I,cap. IV de la II sección,


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lógicas+ es un /ec/o absoluto. No es ta&oco una /i&óstasis dederec/o+ un inconsciente otando entre lo ideal - lo real. Es unaconciencia real accesible a cada uno de nosotros desde ueo&eraos la ;reducción;. Pero es e=actaente ella la ue

constitu-e nuestra conciencia e&1rica+ esta conciencia ;en elundo;+ esta conciencia con su ;-o; 7oi9 &s1uico - &sico,1sico.Creeos+ &or nuestra &arte+ en la e=istencia de una concienciaconstitu-ente. Seguios a Fusserl en cada una de las adirablesdescri&ciones$ en las ue /a ostrado a la conciencia trascendenBtal constitu-endo el undo - a&risionAndose en la concienciae&1rica5 estaos &ersuadidos+ coo )l+ de ue nuestro -o&s1uico - &sico,1sico es un ob4eto trascendente ue debe caer ba4oel gol&e de la epo*e.$+ Pero nos &lanteaos la cuestión siguiente@

no es su?ciente con el -o &s1uico - el -o &sico,1sico> Es neBcesario ue se lo du&liue en un 6o trascendental+ estructura de laconciencia absoluta> % Se *e la consecuencia de la res&uesta. Siella es negati*a+ resulta@

K9 ue el ca&o trascendental se /ace i&ersonal+ o+ si se lo&re?ere+ ;&re&ersonal;+ sin 6o.

$K9 ue el -o no a&arece As ue al ni*el de la /uanidad - ueno es As ue una ,ase del 6o 78oi9+ la ,ase acti*a."

parágrafos 56 a 62. Y lasMeditaciones Cartesianas,parágrafo 812 Principalmente aquellas deIdeas I13 "Para mí, el yo que medita, el yo que encontrándose y permaneciendo en laepojése

pone a sí mismo exclusivamente como fundamento del valorde todos los fundamentos y

valores objetivos, no hay, pues, ni yo psicológico, ni fenómenos psíquicos en el sentido de

la psicología, esto es, como partes integrantes de seres psicofísicos humanos".Medi-

taciones Cartesianas,Ed. El Colegio de México, México, 1942, parágrafo 11, p. 43-44.14 El problema se encuentra planteado por Husserl en el parágrafo 11 de lasMeditaciones

Cartesianasque ya hemos citado y titulado "El yo psicológico y el yo trascendental". En

efecto, al pasaje citado en la nota 10, Husserl agrega inmediatamente: "Mediante laepojé

fenomenológica, reduzco mi yo humano natural y mi vida psíquica —el reino de mi

propia experiencia psicológica — a mi yo feno-menológico-trascendental,al reino de la

experiencia fenomenológica trascendental del yo". Ahora bien, de ese yo trascendental, él

afirma que nunca se lo puede reducir.15 Sartre designa con el concepto de "Yo" (Je) a la personalidad en su aspecto activo; por

"Yo" (Moi) entiende la totalidad concreta psico-física de la misma personalidad.

Entendiendo bien que el Yo (Je) y el Yo (Moi) no son sino uno, que constituyen elEgo,del

cual sólo son dos faces. Cf. nota 52.

El estatus del Ego que aquí se discute está adquirido enEl Ser y la Nada,Ed. Ibero-

Americana, Buenos Aires, 1948, Tomo I, p. 232 y sgts.


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3K9 ue el 6o Pienso &uede aco&a


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intencionalidad.M Por la intencionalidad ella se trasciende a s1 isBa+ se uni?ca esca&Andose.$ La unidad de las il concienciasacti*as &or las cuales /e agregado+ agrego - agregar) dos a dos&ara /acer cuatro+ es el ob4eto trascendente ;dos - dos son cuatro;.

Sin la &eranencia de esta *erdad eterna ser1a i&osible concebiruna unidad real+ - /abr1a tantas o&eraciones irreductibles cooconciencias o&eratorias. Es &osible ue auellos ue creen ue ;dos- dos son cuatro; es el contenido de i re&resentación+ se *eanobligados a recurrir a un &rinci&io trascendental - sub4eti*o deuni?cación+ ue ser1a entonces el 6o. Pero+ &recisaente+ Fusserl notiene necesidad. El ob4eto es trascendente a las conciencias ue loa&resan - es en )l ue se encuentra su unidad. Se dirA ue+ sinebargo+ es necesario un &rinci&io de unidad en la duración &ara

ue el u4o continuo de las conciencias sea susce&tible de &onerob4etos trascendentes ,uera de )l. Es necesario ue las concienciassean s1ntesis &er&etuas de las conciencias &asadas - de laconciencia &resente. Lo cual es e=acto. Pero es signi?cati*o ueFusserl+ uien /a estudiado en La conciencia interna del tiempoesta uni?cación sub4eti*a de las conciencias+ no aya recurrido

*am-s a un &oder sint)tico del 6o. Es la conciencia la ue se uni?caa s1 isa - concretaente &or un 4uego de intencionalidades;trans*ersales; ue son retenciones concretas - reales de lasconciencias &asadas. s1+ la conciencia reen*1a &er&etuaente a s1

19 Para Sartre la hipótesis de un Yo trascendental como núcleo personal unificador y

fundador de toda conciencia, es supérflua. Para él solamente hay un campo

trascendental pre-personal o impersonal.Trascendente y trascendentalno son tomados

por él en un sentido kantiano, sino más bien en un sentido husserliano, tal como se los

define, por ejem plo, en el parágrafo 11 de las Meditaciones Cartesianas.Es

trascendental el campo que constituyen las conciencias originarias dadoras de sentido.

Es necesario señalar que Sartre abandonará este término (¿muy kantiano?), el cual ya no

se encuentra más enEl Ser y la Nada.En éste la conciencia es considerada según que

sea irreflexiva o reflexiva, posi-cional o no-posicional de sí. No hay más Ego y ni siquiera

campo trascendental. Por el contrario, latrascedenciadel Ego permanece como una tesis

fundamental. Las nociones de trascendencia y de intencionalidad son, en efecto,

correlativas. "La trascendencia es estructura constitutiva de la conciencia", dice enEl Ser

y la Nada, vale decir que de golpe la conciencia se arranca a sí misma para llevarse hacia

los objetos. Es lo que significa la famosa afirmación "Toda conciencia es conciencia de

algo"". Correlativamente son llamadostrascendentesa la conciencia el mundo y sus

objetos (físicos, culturales, etc), en tanto que ellos están, por definición, fuerade la

conciencia, y son el Otro absoluto para ella.20 Sobre la intencionalidad verIdeasI,, parágrafo 84, "La intencionalidad, tema

fenomenológico capital", p. 198; también el artículo de Sartre aparecido en:El hombre y

las cosas,Ed. Losada, Buenos Aires, 1965. titulado "Una idea fundamental de la filosofía

de Husserl: la intencionalidad" p. 25.


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isa5 decir ;una conciencia; es decir toda la conciencia+ - esta&ro&iedad singular &ertenece a la conciencia isa cualesuieraue sean+ &or otra &arte+ sus relaciones con el 6o.$ Parece ueFusserl+ en las Meditaciones artesianas, /a uedado enteraente

?el a esta conce&ción de las conciencias ue se uni?can en eltie&o.$$ Por otra &arte+ la indi*idualidad de la conciencia &ro*iene+e*identeente+ de la naturale0a de la conciencia. La conciencia no&uede estar liitada 7coo la sustancia de S&ino0a9$3 as ue &orella isa. Ella constitu-e+ &ues+ una totalidad sint)tica e indi*iBdual enteraente aislada de las otras totalidades del iso ti&o+ -el 6o no &uede ser+ e*identeente+ As ue una e)presión 7- nouna condición9 de esa incounicabilidad - de esa interioridad de lasconciencias. Nosotros &odeos+ &ues+ res&onder sin *acilar@ la conB

ce&ción ,enoenológica de la conciencia con*ierte al rol uni?cantee indi*iduali0ante del 6o+ en algo totalente intil. Es la conciencia+&or el contrario+ la ue /ace &osible la unidad - la &ersonalidad dei 6o. El 6o trascendental no tiene+ &ues+ ra0ón de ser.

Pero+ &or otra &arte+ ese 6o su&eruo es &er4udicial. Si e=istieraarrancar1a a la conciencia de s1 isa+ la di*idir1a+ se desli0ar1a encada conciencia coo una lAina o&aca. El 6o trascendental es lauerte de la conciencia. En e,ecto+ la e=istencia de la conciencia esun absoluto+ &orue la conciencia es conciencia de s1 isa. Esdecir+ ue el ti&o de e=istencia de la conciencia es ser conciencia des1.$% 6 toa conciencia de s1 en tanto que es conciencia de un ob*eto

21 Sobre la auto-constitución del tiempo fenomenológico ver laFenomenología de la

conciencia del tiempo inmanente,Ed. Nova, Buenos Aires, 1959, parágrafo 39, "La doble

intencionalidad de la retención y la constitución de la corriente conciencia!", p. 129,

donde Husserl explica que "el flujo de la conciencia constituye su propia unidad".22 Cf. la 4a. de lasMeditaciones Cartesianas,parágrafo 37, "El tiempo como forma

universal de toda génesis egológica", p. 134.23 "Por sustancia entiendo lo que es en sí y es concebido por sí, es decir aquello cuyo

concepto no tiene necesidad del concepto de otra cosa para ser formado",Etica,1a. parte,

definición ni.

Sartre dice: "Pero la conciencia es conciencia en todas sus partes. Ella no podría

entonces ser limitada sino por ella misma."El Ser y la Nada,ler. Tomo, Introducción, p.

24.24 “Mas, precisamente porque se trata ahora de un absoluto de existencia y no de

conocimiento, escapa a la famosa objeción según la cual un absoluto conocido no es ya

un absoluto, porque deviene relativo al conocimiento que se tiene de él. De hecho, lo

absoluto no es aquí el resultado de una construcción lógica sobre el terreno del

conocimiento, sino el sujeto de la más concreta ds las experiencias. Y él no esrelativoa

esta experiencia, puesto que es esta experiencia. También es un absoluto no sustancial",

El Ser y la Nada, Tomo I, p. 26.


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trascendente.&4 Todo es entonces claro - lcido en la conciencia@ elob4eto estA ,rente a ella con su o&acidad caracter1stica+ &ero ella+ella es &ura - si&leente conciencia de ser conciencia de eseob4eto+ tal la le- de su e=istencia. Es necesario agregar ue esta

conciencia de conciencia 2,uera de los casos de concienciaree=i*a en los ue insistireos en su oento2 no es posicional,es decir+ ue la conciencia no es ella isa su ob4eto. $G Su ob4etoestA &or naturale0a ,uera de ella+ - es &or eso ue+ &or un isoacto+ lo pone - lo toma. Ella isa no se conoce a s1 isa+ sinocoo interioridad absoluta. una see4ante conciencia lallaareos@ conciencia de &rier grado o irre?e)iva. Nos &reBguntaos@ /a- lugar &ara un >o en see4ante conciencia> Lares&uesta es clara@ e*identeente+ no. En e,ecto+ ese 6o no es ni un

ob4eto 7&uesto ue es interior &or /i&ótesis9 ni ta&oco de laconciencia, &uesto ue es alguna cosa para la conciencia, no unacualidad traslcida de la conciencia+ sino+ de alguna anera+ un/abitante. En e,ecto+ el 6o con su &ersonalidad+ &or As abstracto -,oral ue se lo &iense+ es coo un centro de o&acidad. Es al -o7oi9 concreto - &sico,1sico lo ue el &unto es a las tresdiensiones@ es un 6o 78oi9 in?nitaente contractado. Si+ &ues+ seintroduce esta o&acidad en la conciencia+ se destru-e esa de?nicióntan ,ecunda ue dios de ella+ se la oscurece+ ella no es As unaes&ontaneidad+ - lle*a en ella isa un geren de o&acidad. Pero+- al iso tie&o+ ser1a &reciso abandonar ese &unto de *ista&ro,undo - original ue /ace de la conciencia un absoluto nosustancial. Una conciencia &ura es un absoluto si&leente &oruees conciencia de s1 isa. Peranece siendo+ &ues+ un ;,enóeno;en el sentido u- &articular en ue ;a&arecer; - ;ser; no /acenAs ue uno.$H Una conciencia es toda ligere0a+ toda traslucide0. 6

25 "La conciencia es concienciadealguna cosa: esto significa que la trascendencia es

estructura constitutiva de la conciencia; es decir, que la conciencia nacedirigidasobre

un ser que no es ella(...) la conciencia implica en su ser, un ser no consciente y

transfenomenal (...),la conciencia es un ser para el cual se da en su ser la cuestión de su

ser en tanto que este ser implique otro ser diferente de él." El Ser y la Nada, Tomo I, p.32-

33.26 "...toda conciencia posiclonal del objeto es al mismo tiempo consciencia posicional de

sí misma"El Ser y la Nada, Tomo I, p. 21.27"... no existe en el dominio psíquico ninguna diferencia entre fenómeno y ser (...). estos

mismos fenómenos (que el psicólogo por cierto hace depender de lo psíquico) no

constituyen un ser que aparecería a su vez por medio de fenómenos...", Husserl,La

filosofía como ciencia estricta,Ed. Nova; Buenos Aires, 1962, p. 35.

"El pensamiento moderno ha realizado un progreso considerable al reducir la existencia a

la serie de apariciones que la manifiestan (...). El dualismo del ser y del parecer no podrá


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es en esto ue el Cogito de Fusserl es tan di,erente del Cogitocartesiano. Pero si el 6o es una estructura necesaria de laconciencia+ ese 6o o&aco ueda ele*ado al iso tie&o al rangode absoluto. 6 /e au1 ue estar1aos en &resencia de una

ónada. Tal es+ desgraciadaente+ la orientación del nue*o&ensaiento de Fusserl 7*er las M. C.9$ La conciencia se /a *ueltoAs &esada+ /a &erdido ese carActer ue /ac1a de ella el e=istenteabsoluto a fuer7a de ine)istencia. Es &esada - ponderable. Todos losresultados de la ,enoenolog1a entonces uedar1an arruinados si el

6o no es+ al iso t1tulo ue el undo+ un e=istente relati*o+ esdecir+ un ob4eto para la conciencia.$M

(9 El ogito como conciencia re?e)iva.

El ;6o Pienso; antiano es una condición de &osibilidad. El Cogito deDescartes - de Fusserl es una co&robación de /ec/o. Se /a/ablado de la ;necesidad de /ec/o; del Cogito+ e=&resión ue e&arece 4usta. Porue no se &uede negar ue el Cogito es &ersonal.En el ;>o &ienso; /a- un >o ue &iensa. lcan0aos au1 al 6o en su&ure0a+ - si se uiere construir una ;Egolog1a; se debe &artir delCogito. El /ec/o de ue &uede ser*ir de &artida es )ste@ cada *e0ue a&resaos nuestro &ensaiento+ sea &or una intuición

en lo sucesivo hallar derecho de ciudadanía en filosofía (...). Porque el ser de algo

existente es precisamente su apariencia. Así llegamos nosotros a la idea de fenómeno, tal

como puede encontrarse por ejemplo, en la "Fenomenología" de Husserl o de Heidegger, el

fenómeno o lo relativo-absoluto (...). El fenómeno no puede ser estudiado y descripto en

cuanto tal, porque él es absolutamente indicativo de sí mismo".El Ser y la Nada, Tomo I,

pags. 11 y 12.28 Orientación que señalan la 4a. de lasMeditaciones Cartesianas,que trata de "la

plenitud concreta del Yo como Mónada", y la 5a. Meditación,titulada "Determinación del

dominio trascendental como intersubjetividad monadológica" (en la citada publicación

en castellano no aparece la 5a. Meditación).29 Las dificultades que entrañan la concepción husserliana de la conciencia

trascendental como archi-región han sido recordadas recientemente en un artículo de J.

Derrida aparecido enLes études philosophiques (1963): "Phánomenologische Psy-

chologie. Vorlesungen Sommersemester 1925, par Ed. Husserl". J. Derrida escribe: "Mi

Yo trascendental es radicalmente diferente, precisa Husserl, de mi Yo natural y humano;

y sin embargonose distingue ennadade él (...). El Yo (trascendental) no es otro. No es,

sobre todo, el fantasma metafísico o formal del yo empírico. Lo que conduciría a

denunciar la Imagen teorética y la metáfora del Yo espectador absoluto de su propia

psique, todo este lenguaje analógico del cual a veces debe poder servirse para anunciar

la reducción trascendental y para describir ese 'objeto' insólito que es el yo psíquico

frente al Ego trascendental absoluto".


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inediata+ sea &or una intuición a&o-ada en la eoria+a&resaos un 6o ue es el 6o del &ensaiento a&resado - ue seda+ &or otra &arte+ coo trascendiendo este &ensaiento - todoslos otros &ensaientos &osibles. Si &or e4e&lo uiero recordar tal

&aisa4e &ercibido en el tren+ a-er+ e es &osible /acer *ol*er elrecuerdo de ese &aisa4e en tanto ue tal+ &ero tabi)n &uedorecordar ue yo *e1a ese &aisa4e. Esto es lo ue Fusserl+ en Laconciencia interna del tiempo, llaa la &osibilidad de re?e)ionar enel recuerdo.+9 Dic/o de otro odo+ &uedo sie&re o&erar unareeoración cualuiera sobre el odo &ersonal - el 6o a&arece enseguida. Tal es la garant1a de eco de la a?ración de derecoDantiana. s1 se da ue no /a- una de is conciencias ue -o noa&rese coo &ro*ista de un -o.

Pero es &reciso recordar ue todos los autores ue /an descri&to alCogito lo /an dado coo una o&eración ree=i*a+ es decir+ coouna o&eración de segundo grado. Este Cogito es o&erado &or unaconciencia dirigida sobre la conciencia, ue toa la concienciacoo ob4eto. EntendAonos@ la certidubre del Cogito es absoluta+&ues+ coo lo dice Fusserl+3 /a- una unidad indisoluble de laconciencia ree=ionante - de la conciencia ree=ionada 7al &untoue la conciencia ree=ionante no sabr1a e=istir sin la concienciaree=ionada9. Con todo+ sin ebargo+ nosotros estaos ,rente auna s1ntesis de dos conciencias+ de las cuales la una es laconciencia de la otra. s1+ el &rinci&io esencial de la ,enoenolog1a+;toda conciencia es conciencia de algo;+ &eranece sal*aguardado./ora bien+ i conciencia ree=ionante no se toa ella isa &orob4eto cuando -o reali0o el ogito. Lo ue ella a?ra concierne a laconciencia ree=ionada. En tanto ue i conciencia ree=ionantees conciencia de s1 isa+ es conciencia no5posi5cional. No de*iene&osicional As ue a&untando a la conciencia ree=ionada ue+ ellaisa+ no era conciencia &osicional de s1 antes de ser ree=ionada.s1+ la conciencia ue dice ;6o &ienso; no es &recisaente auellaue &iensa. O As bien@ no es su &ensaiento ue &one &or esteacto t)tico. Fa- entonces cierto ,undaento &ara /acernos esta&regunta @ si el >o ue &iensa es con a las dos concienciassu&er&uestas+ o si )l no es As bien el de la concienciaree=ionada. Toda conciencia ree=ionante es+ en e,ecto+ ella

30 Por ejemplo en el Anexo XII: "La conciencia interna y la aprehensión de viviencias", p.

193.31 Con el "Yo soy" aprehendo una evidencia apo-díctica, dice Husserl todavía en las

Meditaciones Cartesianas.


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isa irree=i*a+ - es necesario un acto nue*o - de tercer grado&ara &onerla. No /a- au1+ &or otra &arte+ reen*1o al in?nito+ &uestoue una conciencia de ningn odo tiene necesidad de unaconciencia ree=ionante &ara ser conciencia de ella isa.

Si&leente ue ella no se &one a s1 isa coo su ob4eto.3$

Pero no ser1a &recisaente el acto ree=i*o ue /ar1a nacer al 6o78oi9 en la conciencia ree=ionada> Se e=&licar1a as1 ue todo&ensaiento a&re/endido en la intuición &osee un 6o+ sin caer enlas di?cultades se Lo

esencial del cabio no serA la a&arición del -o> Es necesarioe*identeente recurrir a la e=&eriencia concreta+ - esta &uede&arecer i&osible+ &uesto ue+ &or de?nición+ una e=&eriencia deese g)nero es ree=i*a+ es decir+ &ro*ista de un 6o. Pero todaconciencia irree=i*a+ siendo conciencia noBt)tica de s1 isa+ de4aun recuerdo noBt)tico ue se &uede consultar.3% Para eso basta contratar de reconstituir el oento co&leto en ue a&arece estaconciencia irree=i*a 7lo cual+ &or de?nición+ es sie&re &osible9.Por e4e&lo+ /ace un oento -o estaba totalente absorto en ilectura. 'o- a tratar de recordar las circunstancias de i lectura+ iactitud+ las l1neas ue le1a. 'o- de ese odo a resucitar nosolaente esos detalles e=teriores sino un cierto es&esor deconciencia irree=i*a+ &uesto ue los ob4etos no /an &odido ser

32 Para resumir, un análisis fenomenológlco de la conciencia discernirá tres grados de

conciencia:

1°)un primer gradoal nivel de la conciencia Irreflexiva, no posicional de sí, porque es

conciencia de sí en tanto que conciencia de un objeto trascendente.

Con el cogito:

2°)un segundo grado:la conciencia reflexionante es no-posicional de sí misma, pero po-

sicional de la conciencia reflexiva.

3°)un tercer grado,que es un acto tético en un segundo grado, por el cual la conciencia

reflexionante deviene posicional de sí.

Dicho de otra manera, al nivel del segundo grado hay actos Irreflexivos de reflexión.

En cuanto a la autonomía de la conciencia Irreflexiva, ella está firmemente señalada en

la Introducción aEl Ser y la Nada.33 En la introducción aIdeas I,Husserl declara que para la fenomenología "es necesaria

una nueva forma de actitud completamente distintade las actitudes de la experiencia y el

pensamiento naturales", p. 9; y en el parágrafo 31, titulado "Cambio radical de la tesis

natural...", p. 69, explícita esta afirmación.34 Husserl recurre a recuerdos no-téticos de conciencias no-téticas, en laFenomenología

de la conciencia del tiempo inmanente.


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&ercibidos As ue por esta conciencia - ue ellos le &eranecenrelati*os. No es necesario &oner a esta conciencia coo ob4eto deree=ión+ es necesario ue -o diri4a i atención sobre los ob4etosresucitados+ &ero sin perderla de vista, guardando con ella una

suerte de co&licidad e in*entariando su contenido de anera noB&osicional. El resultado no es dudoso@ ientras le1a ten1a concienciadel libro+ de los /)roes de la no*ela+ &ero el >o no /abitaba esaconciencia+ ella era solaente conciencia del ob4eto - conciencianoB&osicional de s1 isa. Puedo /acer a/ora de esos resultados+toados at)ticaente+ el ob4eto de una tesis - declarar@ no /ab1a>o en la conciencia irree=i*a. No es necesario considerar estao&eración coo arti?cial - concebida &or las necesidades de lacausa@ es e*idente ue gracias a ella Titc/ner3" &udo decir en su

Be)5booD of sycology ue a enudo el 6o 78oi9 estaba ausente desu conciencia. No ir1a As le4os sin ebargo - no tratar1a declasi?car los estados de conciencia sin 6o.

Se e uerrA ob4etar ue esta o&eración+ esta toa noBree=i*a deuna conciencia &or otra conciencia+ no &uede e*identeente o&eBrarse As ue &or el recuerdo - ue en ella no /a- bene?cio &ara lacertidubre absoluta in/erente al acto ree=i*o. Nosencontrareos entonces en &resencia@ por una parte, de un actocierto ue e &erite a?rar la &resencia del 6o en la concienciaree=ionada5 - por otra parte de un recuerdo dudoso ue tender1a a/acer creer ue el 6o estA ausente de la conciencia irree=i*a.Parece ue no teneos derec/o de o&oner esto a auello. Peroin*ito a ue se considere ue el recuerdo de la conciencia irree=i*ano se o&one a los datos de la conciencia ree=i*a. Nadie &retendenegar ue el 6o a&arece en una conciencia ree=i*a. Se tratasi&leente de o&oner el recuerdo ree=i*o de i lectura 7;-ole1a;9+ ue es+ )l tabi)n+ de naturale0a dudosa+ a un recuerdo noBree=i*o. El derec/o de la ree=ión &resente+ en e,ecto+ no see=tiende As allA de la conciencia ca&tada &resenteente. 6 elrecuerdo ree=i*o+ al ue nos *eos obligados a recurrir &ararestituir las conciencias transcurridas+ a&arte del carActer dedudoso ue debe a su naturale0a de recuerdo+ &eranece sus&ectoen la edida ue+ segn lo con?esa el iso Fusserl+ la ree=iónmodica la conciencia es&ontAnea. Puesto ue todos los recuerdos35 Titchener (1867-1927) es un psicólogo angloamericano. Alumno de Wundt, que se

consagra a la psicología experimental, y en especial ejerce influencia sobre la psicología

anglo-sajona.

Se pueden citar de él: An outline of psychology (1896); Lehrbuch der psychologie (aquí

citado) (1910-12); Experimental psychology (1927).


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noBree=i*os de conciencia irree=i*a e uestran una concienciasin >o, &uesto ue &or otra &arte las consideraciones teóricasbasadas en la intuición de esencia de la conciencia nos /anobligado a reconocer ue el 6o no &od1a ,orar &arte de la

estructura interna de las ;Erlebnisse;+ debeos concluir@ no /a- 6osobre el &lano irree=i*o. Cuando corro &ara toar un tran*1a+cuando iro la /ora+ cuando e absorbo en la conte&lación de unretrato+ no /a- 6o. Fa- conciencia de tranv"a5debiendo5ser5alcan7ado, etc.+ - conciencia noB&osicional de la conciencia. Ene,ecto+ entonces -o esto- suergido en el undo de los ob4etos+son ellos ue constitu-en la unidad de is conciencias+ ue se&resentan &ro*istos de *alores+ de cualidades atracti*as -re&ulsi*as+ &ero -o 7oi9 /e desa&arecido+ e /e ani/ilado

7an)anti9. No /a- lugar &ara m" a este ni*el+ - esto no &ro*iene dela0ar+ de una ,alta de atención oentAnea+ sino de la estructuraisa de la conciencia.

Todo esto ser1a e4or co&rendido &or nosotros si e,ectuAraosuna descri&ción del Cogito. Se &uede decir ue el acto ree=i*oa&re/ende a un iso grado - de la isa anera al 6o - a laconciencia &ensante> FusBserl insiste sobre el /ec/o de ue lacertidubre del acto ree=i*o &ro*iene de ue en )l se alcan0a laconciencia sin ,acetas+ sin &er?les+ entera 7sin ;absc/attungen;9.3G

Es e*idente. Por el contrario+ el ob4eto es&acio te&oral se entregasie&re a tra*)s de una in?nidad de as&ectos - en el ,ondo )l no esAs ue la unidad ideal de esa in?nitud. En cuanto a las sigBni?caciones+ a las *erdades eternas+ ellas a?ran su trascendenciaen la edida en ue se dan+ desde ue a&arecen+ cooinde&endientes del tie&o+ en tanto ue la conciencia ue losa&re/ende+ estA+ al contrario+ rigurosaente indi*iduali0ada en laduración. /ora bien+ nosotros nos &reguntaos@ cuando una

36 Sartre se refiere aquí a la teoría fenomenoló-gica de la percepción por "cortes" o

"esbozos", en alemán "Abschattungen", cf.Ideas I,parágrafo 41: "Con necesidad esencial

corresponde a la conciencia empírica omnilateral, que se confirma a sí misma en una

unidad continuada, de la misma cosa, un complicado sistema de multiplicidades

continua de apariencias, matices y escorzos, en las cuales se matizan o escorzan en

continuidades bien determinadas todos los factores objetivos que caen dentro del campo

de la percepción con el carácter de lo que se da en su propia persona", p. 93.

Sartre opone pensamiento y percepción, por ejemplo en Lo Imaginario,Ed. Ibero

Americana, Buenos Aires, 1948; "Se trata de fenómenos radicalmente distintos: uno es

saber consciente de sí mismo que se coloca de golpe en el centro del objeto; el otro, es

unidad sintética de una multiplicidad de apariencias, que lentamente realiza su

aprendizaje," p. 19.


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conciencia ree=i*a a&re/ende al >o ienso a&re/ende acaso unaconciencia &lena - concreta recogida 7raass)e9 en un oentoreal de la duración concreta> La res&uesta es clara@ el 6o no se dacoo un oento concreto+3H coo una estructura &erecedera de

i conciencia actual5 a?ra &or el contrario su &eranencia AsallA de esta conciencia - de todas las conciencias - si bien no se&arece a una *erdad ateAtica 2su ti&o de e=istencia se acercaal de las *erdades eternas As ue al de la conciencia. Es e*identeue &or /aber cre1do ue el >o - el pienso estAn sobre el iso &laBno+ Descartes /a &asado desde el Cogito a la idea de sustancia&ensante. Feos *isto ue Fusserl+ si bien As sutilente+ cae enel ,ondo en lo iso. Entiendo ue reconoce al 6o unatrascendencia es&ecial ue no es auella del ob4eto - ue &odr1a

llaarse una trascendencia ;&or encia;. Pero+ con u) derec/o>6 cóo e=&licar ese trataiento &ri*ilegiado del 6o sin suirse en&reocu&aciones de orden eta,1sico o cr1tico ue nada tienen ue*er con la ,enoenolog1a> Seaos As radicales - a?reos sinteor ue toda trascendencia debe caer ba4o la epo*e,+; lo ue nose*itarA tal *e0 el escribir ca&1tulos tan ebara0osos coo el&arAgra,o G de las Cdeen. Puesto ue el 6o se a?ra a s1 isocoo trascendente en el ;6o Pienso;+ no es de la isa naturale0aue la conciencia trascendental.

37 Husserl parece haberlo presentido, pero no se detiene en esta intuición. Sin embargo

en el parágrafo 54 de lasIdeas I,escribe: "Con seguridad es concebible una conciencia

sin cuerpo, y, por paradójico que suene, también una conciencia sin alma, no personal,

es decir, una corriente de vivencias en que no se constituyen las unidades intencionales

de experiencia, cuerpo, alma, sujeto-yo empírico, o en que todos estos conceptos

empíricos, y por ende también el devivencia en sentido psicológico(vivencia de una

persona, de un yo animado) no tengan apoyo alguno, ni en todo caso validez alguna", p.

128.38 Es lo que nunca reconocerá Husserl.

"Entre las peculiaridades esenciales y universales del dominio trascendentalmente

purificado de las vivencias compete en verdad un primer lugar a la referencia de toda

vivencia al yo "puro". Todo"cogito",todo acto en un sentido señalado, se caracteriza por

ser un acto del yo, "procede del yo", que "vive" en él "actualmente"(...). .. .no hay des-

conexión capaz de borrar la forma delcogito yel sujeto "puro" del acto: el 'estar dirigido

a', 'estar ocupado con', 'tomar posición relativamente a', 'experimentar, padecer" algo,

encierra necesariamente en su esencia esto: ser, justo, un 'desde el yo', o, en un rayo de

dirección Inversa, 'hacia el yo', y este yo es el puro,al que no puede hacerle nada ninguna

reducción",Ideas I,parágrafo 80, p. 189-90.

Igualmente en la 1a. de lasMeditaciones Cartesianas,parágrafo 8, después de la

reducción "me obtengo a mi mismo como elegopuro con la corriente de mis

cogitaciones",p. 38.


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Seo, a?raos uc/o As delo ue sabeos. No es adecuada &uesto ue el -o se &resentacoo una realidad o&aca cu-os contenidos ser1a &reciso desarrollar.Es cierto ue se &resenta coo la ,uente de la conciencia+ &ero esoiso deber1a /acernos ree=ionar@ en e,ecto+ &or ello a&arececoo *elado+ di,1cil de distinguir a tra*)s de la conciencia+ coo uncAntaro en el ,ondo del agua+ 2&or eso iso+ enga


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nobrarlo+ del inconsciente@ &ara )l el aor &ro&io se disimula ba4olas ,oras As di*ersas. Es necesario des&istarlo antes dea&resarlo.% De una anera general se /a aditido ue el 6o 78oi9+si no estA &resente a la conciencia+ estA escondido detrAs de ella -

ue es el &olo de atracción de todas nuestras re&resentaciones - detodos nuestros deseos. El 6o 78oi9 busca &rocurarse entonces el obB 4eto &ara satis,acer su deseo. Dic/o de otro odo@ es el deseo 7o sise lo &re?ere el 6o Q8oi+ deseante9 el ue se da coo ?n+ - elob4eto deseado coo edio.

Esta tesis interesa en la edida ue &one de relie*e un error u-,recuente en los &sicólogos @ la con,usión de la estructura esencialde los actos ree=i*os con la de los actos irree=i*os.%$ Se ignora

ue /a- sie&re dos ,oras &osibles de e=istencia &ara unaconciencia5 - cada *e0 ue las conciencias obser*adas se dan cooirree=i*as se les su&er&one una estructura ree=i*a+ la ue se&retende+ aturdidaente+ ue &eranece inconsciente.

6o tengo &iedad de Pedro - lo socorro. Para i conciencia una solacosa e=iste en ese oento@ PedroBdebiendoBserBsocorrido. Estacualidad de ;debiendoBserBsocorrido; se encuentra en Pedro. ctasobre 1 coo una ,uer0a. ristóteles lo /ab1a dic/o@ es lo deseableue ue*e a lo deseante. este ni*el el deseo %3 es dado a laconciencia coo centr1,ugo 7se trasciende a s1Biso+ es concienciat)tica de ;debiendoBser; - conciencia noBt)tica de s1 iso95 es+tabi)n+ i&ersonal 7no /a- 6o Q8oi@+ esto- ,rente al dolor dePedro coo ,rente al color de este tintero. Fa- un undo ob4eti*ode cosas - de acciones+ /ec/as o a /acer+ - las acciones *ienen aa&licarse coo cualidades sobre las cosas ue las reclaan9.Luego+ este &rier oento del deseo 2su&oniendo ue no /a-a

41 "El amor propio es el amor de sí mismo y de todas las cosas por sí; vuelve a los

hombres idólatras de sí mismos y si la fortuna les diera los medios los volvería tiranos de

los otros; nunca descansa fuera de sí y no se detiene en los sujetos extranje-jeros sino

como las abejas en las flores, para extraer de ellos aquello que les es propio. Nada más

impetuosos que sus deseos, nada másocultoque sus proyectos, nada tan hábil como sus

conductas: sus flexibilidades no pueden representarse, sus transformaciones superan

las de las metamorfosis y sus refinamientos los de la química. No se puede sondear la

profundidad, ni atravesar las tinieblas de sus abismos", La Rochefoucauld,Máximes,

Supple-raents de 1963.42 Sobre la doble forma de existencia siempre posible para una conciencia y que garantiza

la autonomía de lo prereflexivo, cf.El Ser y la Nada,Introducción.43 La descripción fenomenológlca del deseo es desarrollada enEl Ser y la Nada,III Tomo,

p. 213 y sgtes.


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esca&ado totalente a los teóricos del aorB&ro&io2 no esconsiderado &or ellos coo un oento co&leto - autónoo. Faniaginado+ &or detrAs de )l+ otro estado ue &eranece en la&enubra@ &or e4e&lo+ si socorro a Pedro es &ara /acer cesar el

estado desagradable en ue e /a suido la *ista de sussu,riientos. Pero este estado desagradable no &uede ser conocidocoo tal - no se &uede tratar de su&riirlo sino ediante un actode ree=ión. En e,ecto+ un desagregaiento sobre el &lanoirree=i*o se trasciende de la isa anera ue la concienciairree=i*a de &iedad. Es la toa intuiti*a de una cualidad deBsagradable del ob4eto. 6 en la edida en ue &uede ir aco&a Lo irree=i*o no se de?necoo debiendo ser &uesto &or una conciencia> Pero+ &or otra &arte+cóo aditir ue lo ree=i*o es &riero con res&ecto a loirree=i*o> Sin duda ue se &uede aditir ue una concienciaa&are0ca inediataente coo ree=i*a+ en ciertos casos. Peroan entonces lo irree=i*o tiene &rioridad ontológica sobre loree=i*o+ &uesto ue no /a- de ninguna anera necesidad del serree=i*o &ara e=istir - ue la ree=ión su&one la inter*ención deuna conciencia de segundo grado.

Llegaos entonces a la siguiente conclusión@ la concienciairree=i*a debe ser considerada coo autónoa.%G Es una totalidad

44 De la misma manera la emoción es una conducta irreflexiva, no inconsciente sino

consciente de si misma no-téticamente, y su manera de ser téticamente consciente de sí

misma consiste en trascenderse y aprehenderse sobre el mundo como una cualidad de

las cosas. La emoción es una "transformación del mundo", según elEsbozo de una teoría

de las emociones,Ed. Facultad de Filosofía y Humanidades, Córdoba, 1959.45 Respecto al problema que plantea el inconsciente freudiano, ver enEl Ser y la Nadael

capítulo titulado "La mala fe", Tomo I, capítulo II, p. 100; y la 4a. parte, cap. II, I, Tomo III,

p. 187, "El psicoanálisis existencia!'. Ver la nota 74.46 Sartre siempre insistirá sobre esta autonomía de la conciencia irreflexiva, que


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ue no tiene necesidad de ser co&letada+ - debeos reconocersin teor ue la cualidad del deseo irree=i*o es la detrascenderse+ a&resando sobre el ob4eto+ la cualidad de deseable.

Todo ocurre coo si *i*i)raos en un undo en ue los ob4etos al

iso tie&o ue sus cualidades de calor+ olor+ ,ora+ etc.+ tu*ieBsen las de rec/a0ante+ atra-ente+ encantador+ til+ etc.+ - coo siesas cualidades ,ueran ,uer0as ue e4ercen sobre nosotros ciertasacciones. En el caso de la ree=ión+ - en ese caso solaente+ laa,ecti*idad es &uesta &or ella isa coo deseo+ teor+ etc.Solaente en el caso de la ree=ión &uedo &ensar ;6o odio a Pedro;;6o tengo &iedad de Pablo;+ etc)tera. Contrariaente a lo ue se /asostenido+ es entonces sobre este &lano ue se coloca la *idaego1sta - en el &lano irree=i*o ue se sita la *ida i&ersonal 7lo

ue no uiere decir ue toda *ida ree=i*a es ,or0osaente ego1sta- toda *ida irree=i*a ,or0osaente altruista9. La ree=ión;en*enena; el deseo.%H Sobre el &lano irree=i*o socorro a Pedro&orue Pedro es ;debiendoBserBsocorrido;. Pero si i estado setrans,ora re&entinaente en estado ree=i*o+ /e au1 ue esto-en tren de irare actuar en el sentido en ue se dice de alguienue se escuc/a /ablar. No es As Pedro uien e atrae+ es miconciencia caritati*a ue se e a&arece coo debiendo ser&er&etuada. un si &ienso solaente ue debo &roseguir i acción&orue ;eso estA bien;+ el bien cuali?ca mi conducta+ mi &iedad+etc. La &sicolog1a de La Roc/e,oucauld reencuentra su lugar. 6 sinebargo no es verdadera0 no es &or i cul&a ue i *ida ree=i*aen*enena ;&or esencia; a i *ida es&ontAnea+ - &or otra &arte la*ida ree=i*a su&one en general la *ida es&ontAnea. ntes de ser;en*enenados; is deseos /an sido &uros5 es el &unto de *ista ue/e toado sobre ellos ue los /a en*enenado. La &sicolog1a de LaRoc/e,oucauld no es *erdadera As ue &ara los sentiientos&articulares ue e=traen su origen de la *ida ree=i*a+ es decir uese dan &riero coo mis sentimientos, en lugar de trascenderse&riero /acia un ob4eto. De este odo el e=aen &uraente&sicológico de la conciencia ;intraundana; nos lle*a a las isasconclusiones ue nuestro estudio ,enoenológico@ el 6o 78oi9 no

encuentra su fundamento en la intencionalidad esencial de las conciencias. Esta

concepción de la prioridad ontológica de lo irreflexivo sobre lo reflexivo quedará como

algo central en sus obras ulteriores, en particular enLa imaginación(la imagen es una

evidencia an-ti-predicativa), en laTeoría de las emociones, Lo imaginario yEl Ser y la

Nada,porque ella constituye el único medio radical de eliminar todo idealismo.47 De la misma manera el perverso, al sustituir con su deseo como deseable a este-objeto-

deseable, de inmediato lo envenena. En todo caso lo hace sufrir una alteración

fundamental en la relación al deseo ingenuo.


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debe ser buscado en los estados irree=i*os de conciencia ni detr-sde ellos. El 6o 78oi9 no a&arece As ue con el acto ree=i*o -coo correlato noeAtico% de una intención ree=i*a.Coen0aos a entre*er ue el 6o - el 6o 78oi9 no /acen As ue

uno. Intentareos ostrar ue ese Ego+ del cual el 6o - el 6o 78oi9no son As ue dos ,ases+ constitu-e la unidad ideal 7noeAtica9 eindirecta de la serie in?nita de nuestras conciencias ree=i*as. El 6oes el Ego coo unidad de las acciones. El 6o 78oi9 es el Ego coounidad de los Estados - de las cualidades. La distinción ue seestablece entre esos dos as&ectos de una isa realidad nos&arece si&leente ,uncional+ &or no decir graatical.

48 Los términos "noema" (noemático) y "nóesis" vienen de la fenomenología de Husserl. Ver

Ideas I,Sección tercera, cap. III. Sartre da una misma definición voluntariamente

simplificada enLa imaginación, 4,p. 122, "El fenomenólogo, en efecto, habiendo puesto al

mundo 'entre paréntesis', no lo ha perdido por eso. La distinción conciencia-mundo ha

perdido su sentido. Ahora el corte se hace de otra manera. Se distingue el conjunto de

los elementosrealesde la síntesis consciente (la hylé y los diferentes actos intencionales

que la animan) y, por otra parte, el 'sentido' que habita esa conciencia. La realidad

psíquica concreta será denominadanóesis y el sentido que viene a habitarlanóema.Por

ejemplo 'árbol-en-flor-percibido' es el nóema de la percepción que tengo en este momento.

Pero este 'sentido noemático' que pertenece a cada conciencia real no es en sí mismo

nada real".


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CONSTITUCI#N DEL E!O

El Ego no es directaente la unidad de las conciencias ree=i*as.E=iste una unidad inmanente de esas conciencias+ ue es el u4o dela Conciencia ue se constitu-e )l iso coo unidad de s1 iso%M 2- una unidad trascendente0 los estados - las acciones. ElEgo es la unidad de los estados - de las acciones2,acultati*aente de las cualidades. Es unidad de unidadestrascendentes - trascendente )l iso. Es un &olo trascendente deuna unidad sint)tica+ coo el &oloBob4eto de la actitud irree=i*a.Solaente ue ese &olo no a&arece As ue en el undo de laree=ión. Tratareos de e=ainar sucesi*aente la constitución delos estados, de las acciones - de las cualidades, - la a&arición del

6o 78oi9 coo &olo de esas trascendencias."

9 Los ESTDOS como unidades trascendentes de las conciencias.

El estado a&arece a la conciencia ree=i*a. Se da a ella - constitu-eel ob4eto de una intuición concreta. S1 odio a Pedro+ i odio dePedro es un estado ue &uedo a&resar &or la ree=ión. Este estadoestA presente ante la irada de la conciencia ree=i*a+ es real. Es&reciso concluir &or eso ue es inanente - cierto> E,ecti*aenteno. No debeos /acer de la ree=ión un &oder isterioso ein,alible+ ni creer ue todo lo ue la ree=ión alcan0a es indubitable

porque es alcan0ado &or la ree=ión. La ree=ión tiene l1ites dederec/o - de /ec/o. Es una conciencia ue &one a una conciencia.

Todo lo ue a?ra sobre esa conciencia es cierto - adecuado. Perosi otros ob4etos le a&arecen a tra*)s de esta conciencia+ no /a-

ra0ón &ara ue esos ob4etos &artici&en de los caracteres de laconciencia. Considereos una e=&eriencia ree=i*a de odio." 'eo aPedro+ siento coo un sacudiiento &ro,undo de re&ulsión - decólera &or su &resencia 7esto- -a sobre el &lano ree=i*o9@ la&erturbación es conciencia. No &uedo enga


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siento en este oento una *iolenta re&ulsión &or Pedro. Pero elodio+ es esta e=&eriencia de re&ulsión> E*identeente no. Por otra&arte+ no se da coo tal. En e,ecto+ odio a Pedro desde /ace tie&o- &ienso ue lo odiar) sie&re. 8i odio+ entonces+ no &odr1a ser una

conciencia instantAnea de re&ulsión. Si an la liitara a lo ue es+una instantaneidad+ no &odr1a ta&oco /ablar de odio. Dir1a@ ;Tengore&ulsión &or Pedro en este momento= - de tal anera+ noco&roeter1a el &or*enir. Pero+ &recisaente+ &or este rec/a0o deco&roeter el &or*enir+ cesar1a de odiar.

/ora bien+ i odio se e a&arece al iso tie&o ue ie=&eriencia de re&ulsión. Pero a&arece a trav/s de esa e=&eriencia.Se da &recisaente coo no liitAndose a esa e=&eriencia. Se da

en - por cada o*iiento de disgusto+ de re&ulsión - de cólera+&ero al iso tie&o no es ninguno de ellos5 se les esca&aa?rando su &eranencia. ?ra ue -a a&arec1a a-er cuando&ens)+ con tanto ,uror+ en Pedro+ - ue a&arecerA a


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uedarA sie&re dudoso ue lo odie."3 Esta a?ración desbordain?nitaente+ en e,ecto+ el &oder de la ree=ión. No /a- uee=traer de au1 la conclusión de ue el odio sea una si&le/i&ótesis+ un conce&to *ac1o@ es un ob4eto real ue alcan0o a tra*)s

de la ;Erlebnis;+ &ero este ob4eto estA ,uera de la conciencia - lanaturale0a isa de su e=istencia i&lica su dubitabilidad. Laree=ión entonces+ &osee un doinio de certe0a - otro de duBbitabilidad+ una es,era de e*idencias adecuadas - una es,era dee*idencias inadecuadas. La ree=ión &ura 7ue no es ,or0osaentela ree=ión ,enoenológica9 se atiene a lo dado sin le*antar&retensiones /acia el &or*enir. Esto se &uede co&render cuandoalguien+ des&u)s de /aber dic/o durante el estado col)rico@ ;6o lodetesto;+ se retoa - dice@ ;No es *erdad+ no lo detesto+ di4e eso

durante la cólera;. Se *en au1 dos ree=iones@ una i&ura -có&lice+ ue o&era un &asa4e al in?nito sobre el ca&o - ueconstitu-e bruscaente el odio a tra*)s de la ;Erlebnis; coo suob4eto trascendente+ 2la otra+ &ura+ si&leente descri&ti*a+ uedesara a la conciencia irree=i*a de*ol*i)ndole su instantaneidad.Esas dos ree=iones /an a&re/endido los isos datos ciertos+&ero una a?ra m-s de lo ue sabe - se dirige a tra*)s de laconciencia ree=i*a sobre un ob4eto situado ,uera de la conciencia.

Desde ue se de4a el doinio de la ree=ión &ura o i&ura - seedita sobre sus resultados+ e=iste la tentación de con,undir elsentido trascendente de la ;Erlebnis; con su ati0 inanente. Estacon,usión conduce al &sicólogo a dos ti&os de errores. Coo ocurrea enudo ue e enga


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ue la /e tenido+ se trans&orta entonces esta certidubre sobre elsentiiento@ se conclu-e ue el odio &uede ser encerrado en la inBanencia - en la adecuación de una conciencia instantAnea.

El odio es un estado. 6 &or ese t)rino /e tratado de e=&resar elcarActer de &asi*idad ue le es constituti*o. Sin duda se dirA ue elodio es una ,uer0a+ una i&ulsión irresistible+ etc. Pero la corrienteel)ctrica o la ca1da del agua son tabi)n ,uer0as teibles5 acasouita algo a la &asi*idad - a la inercia de la naturale0a> De4an &ortanto de recibir su energ1a desde afuera La &asi*idad de una cosaes&acioBte&oral se constitu-e a &artir de su relati*idad e=istencial.Una e=istencia relati*a no &uede ser As ue &asi*a &uesto ue laenor acti*idad la liberar1a de lo relati*o - lo constituir1a en

absoluto. Lo iso el odio@ e=istencia relati*a a la conciencia reeB=i*a+ es inerte. 6 naturalete ue /ablando de la inercia del odio nouereos decir sino ue a&arece coo tal a la conciencia. No sedice en e,ecto ;8i odio ,ue des&ertado;. ;Su odio era cobatido &orel *iolento deseo de...;+ etc.> Las luc/as del odio contra la oral+ lacensura+ etc.+ no /an sido ?guradas coo conictos de ,uer0asf"sicas, /asta el &unto ue (al0ac - la a-or &arte de los no*elistas7a *eces Proust iso9 a&lican a los estados el &rinci&io de lainde&endencia de las ,uer0as> Toda la &sicolog1a de los estados 7- la&sicolog1a noB,enoenológica en general9 es una &sicolog1a de loinerte.

El estado se da de algn odo coo interediario entre el cuer&o7la ;cosa; inediata9 - la ;Erlebnis;. Solaente ue no se da cooactuando de la isa anera del lado del cuer&o ue del lado dela conciencia. Del lado del cuer&o su acción es ,rancaente causal.Es causa de i 1ica+ causa de is gestos@ ;Por u) /as sido tandesagradable con Pedro>; =orque lo detesto;. Pero no es lo iso7sal*o en las teor1as construidas a &riori - en conce&tos *ac1os+coo el ,reudiso9 del lado de la conciencia. En ningn caso+ ene,ecto+ la ree=ión &uede enga


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uicos inertes a las es&ontaneidades de la conciencia. La re&ulsiónse da+ de alguna anera+ coo &roduci)ndose a s1 iso enocasión del odio - a costa del odio. El odio a&arece a tra*)s de ellacoo auello de lo cual eana. Reconoceos con gusto ue la

relación del odio a la ;Erlebnis; &articular de re&ulsión+ no es lógico.Es un la0o Agico+ seguraente."% Pero solaente /eos ueridodescribir5 e inediataente+ en cabio+ se *erA ue es necesario/ablar de las relaciones del -o a la conciencia en t)rinose=clusi*aente Agicos.

(9 onstitución de las CCIONES.

No tratareos de establecer una distinción entre la concienciaactiva - la conciencia si&leente es&ontAnea. Lo ue nos &arece+&or otra &arte+ constituir uno de los &robleas As di,1ciles de la,enoenolog1a. Desear1aos se


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Esta abigedad+ lo /eos *isto+ &uede ser la ,uente de gra*eserrores.

C9 Las cualidades como unidades facultativas de los estados.

El Ego es+ directaente+ lo *ereos+ la unidad trascendente de losestados - de las acciones. Sin ebargo+ &uede e=istir un intereBdiario entre unos - otras@ la cualidad. Cuando /eos sentido *arias*eces odio ,rente a di,erentes &ersonas+ o rencores tenaces o largascóleras+ uni?caos esas distintas ani,estaciones intencionandouna dis&osición &s1uica de &roducirlas. Esta dis&osición &s1uica

7-o so- u- rencoroso+ so- ca&a0 de odiar *iolentaente+ so-col)rico9 naturalente es algo As - otra cosa ue un si&leedio. Es un ob4eto trascendente. Re&resentan el sustrato de losestados coo los estados re&resentan el sustrato de las ;Erlebnis;.Pero su relación con los sentiientos no es una relación deeanación. La eanación no une sino las conciencias a las&asi*idades &s1uicas. La relación de la cualidad al estado 7o a laacción9 es una reali0ación de actuali0ación. La cualidad se da coo&otencialidad+ coo una *irtualidad ue+ sin inuencia de otros,actores+ &uede &asar a la actualidad. Su actualidad es&recisaente el estado 7o la acción9. Se *e la di,erencia esencialentre cualidad - estado. El estado es una unidad noeAtica dees&ontaneidades+ la cualidad es unidad de &asi*idades ob4eti*as.En ausencia de toda conciencia de odio el odio se da cooe=istente en acto. l contrario+ en ausencia de todo sentiiento derencor la cualidad corres&ondiente contina siendo una&otencialidad. La &otencialidad no es la si&le &osibilidad@"" se&resenta coo algo ue e=iste realente+ &ero el odo de sue=istencia es de ser en &otencia. De este ti&o son naturalente las,altas+ las *irtudes+ los gustos+ los talentos+ las tendencias+ losinstintos+ etc. Esas uni?caciones son sie&re &osibles. La inuenciade las ideas &reconcebidas - de los ,actores sociales es au1 &re&onderante. l contrario+ no son 4aAs indis&ensables+ en laedida en ue los estados - las acciones &ueden encontrardirectaente en el Ego la unidad ue reclaan.

55 Lo imposible, cf.El Ser y la Nada:"El para sí y el ser de los posibles", Tomo I, p. 164; y

"Cualidad y cantidad, potencialidad y utensilidad", ídem, p. 279 y sgtes.


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D9 onstitución del Ego como polo de las acciones, de los estados y de las cualidades.

Feos a&rendido entonces a distinguir lo ;&s1uico; de laconciencia. Lo &s1uico es el ob4eto trascendente de la concienciaree=i*a"G+ es tabi)n el ob4eto de la ciencia llaada &sicolog1a. ElEgo a&arece a la ree=ión coo un ob4eto trascendente ue reali0ala s1ntesis &eranente de lo &s1uico. El Ego estA del lado de lo&s1uico."H Se


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el sentido de un co&le4o cualuiera+ de una liga0ón cualuiera delos &redicados. Debe ser necesariaente distinguido de ellos+aunue no se &ueda &onerlo de lado ni se&ararlo de ellos. Sonentonces sus &redicados@ i&ensables sin )l - ue /a- ue distinB

guir de )l;."

De ese odo Fusserl entiende se


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todos los estados ue uni?ca+ &ero no coo una abstracta cu-aisión es solaente la de uni?car@ As bien es la totalidad in?nitade los estados - de las acciones ue no se de4a 4aAs reducir a unestado o a una acción. Si buscAseos un anAlogo &ara la conciencia

irree=i*a de auello ue es el Ego &ara la conciencia de segundogrado+ entendeos ue /abr1a ue &ensar en el Mundo, concebidocoo la totalidad sint)tica in?nita de todas las cosas. De esteodo+ en e,ecto+ alcan0aos el 8undo As allA de nuestro conBtorno inediato coo una *asta e=istencia concreta. En tal caso lascosas ue nos rodean a&arecen coo el e=treo &unto de ese 8unBdo ue las sobre&asa - las engloba. El Ego es a los ob4etos&s1uicos lo ue el 8undo es a las cosas. Solaente ue laa&arición del 8undo en el /ori0onte de las cosas es bastante raro5

se necesitar1an circunstancias es&eciales 7bastante bien descri&tas&or Feidegger en Sein una Ieit: &ara ue se ;de*ele;.G El Ego encabio a&arece sie&re en el /ori0onte de los estados. Cadaestado+ cada acción se da coo no &udiendo ser+ sin abstracción+se&arada del Ego. 6 si el 4uicio se&ara al 6o de su estado 7coo enla ,rase@ >o esto- enaorado9+ no &uede /acerlo sino &ara ligarloinediataente5 el o*iiento de se&aración conducir1a a unasigni?cación *ac1a - ,alsa si no se diera a s1 iso cooinco&leto - si no se co&letara &or un o*iiento de s1ntesis.

Esta totalidad trascendente &artici&a del carActer dudoso de todatrascendencia5 es decir+ ue todo lo ue nuestras intuiciones delEgo nos entregan+ &uede ser contradic/o &or intuiciones ulteriores -se da coo tal. Por e4e&lo+ &uedo *er con e*idencia ue esto-col)rico+ celoso+ etc.+ - sin ebargo &uedo enga


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del ;!enio 8aligno; se e=tiende /asta a/1.

Sin ebargo+ si &ertenece a la naturale0a del Ego el ser un ob4etodudoso, de ello no se des&rende ue sea ipot/tico. En e,ecto+ el

Ego es la uni?cación trascendente es&ontAnea de nuestros estados- de nuestras acciones. De este odo+ no es una /i&ótesis. 6o noe digo ;Tal *e0 -o tengo un Ego;+ coo &uedo dec1r e ;Tal *e0odio a Pedro;. No busco au1 un sentido uni?cador de is estados.Cuando uni?co is conciencias ba4o la rbrica ;Odio;+ les agrego uncierto sentido+ las cuali?co. Pero cuando incor&oro is estados a latotalidad concreta 6o 78oi9+ no les agrego nada. En e,ecto+ es ue larelación del Ego a las cualidades+ estados - acciones+ no es ni unarelación de eanación 7coo la relación de la conciencia al

sentiiento9+ ni una relación de actuali0ación 7coo la reali0aciónde la cualidad al estado9. Es una relación de &roducción &o)tica 7enel sentido de poiein: o si se &re?ere+ de creación.

Reiti)ndose a los resultados de su intuición+ cualuiera &uedeco&robar ue el Ego se da coo &roduciendo esos estados.E&rendereos au1 una descri&ción de ese Ego trascendente talcoo se re*ela a la intuición. Partios &ues de este /ec/oinnegable@ cada nue*o estado estA ligado directaente 7o inBderectaente &or la cualidad9 al Ego coo a su origen. Ese odode creación es e,ecti*aente una creación e=Bni/ilo en el sentidoue el estado no se da coo /abiendo sido+ antes+ en el 6o 78oi9.un si el odio se da coo la actuali0ación de una cierta &otencia derencor o de odio+ &eranece coo alguna cosa nue*a en relación ala &otencia ue actuali0a. s1 el acto uni?cador de la ree=ión ligacada estado nue*o+ de una anera u- es&ecial+ a la totalidadconcreta 6o 78oi9. No se liita a toarlo coo uni)ndose a a esatotalidad+ coo ,undi)ndose con ella@ intenciona una relaciónue atra*iesa el tie&o al en*erso - ue da al 6o 78oi9 coo la,uente del estado. Ocurre lo iso naturalente &ara las accionesen relación al 6o. En cuanto a las cualidades+ si bien es cierto uecualican al 6o 78oi9+ no se dan coo algo &or lo ue )l e=istir1a7coo es el caso+ &or e4e&lo+ &ara un agregado@ cada &iedra+ cadaladrillo e=iste &or s1 iso - su agregado e=iste &or cada uno deellos9. Sino+ &or el contrario+ el Ego antiene sus cualidades &oruna *erdadera creación continua. Sin ebargo+ no a&resaos alEgo coo si ,uera ?nalente una ,uente creadora &ura As acA delas cualidades. No nos &arece ue &odr1aos encontrar un &oloesuel)tico si uitAraos una des&u)s de otra todas las cualidades.


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Si el Ego a&arece coo As allA de cada cualidad o an de todas+es &orue es o&aco coo un ob4eto@ ser1a &reciso &roceder a undesnudaiento in?nito &ara uitarle todas sus &otencias. 6 al ?nalde ese desnudaiento+ no uedar1a As nada+ el Ego se /abr1a

des*anecido. El Ego es creador de sus estados - sostiene suscualidades en la e=istencia &or una suerte de es&ontaneidadconser*adora. No /abr1a ue con,undir esta es&ontaneidadcreadora o conser*adora con la Res&onsabilidad+ ue es un casoes&ecial de &roducción creadora a &artir del Ego. Ser1a interesanteestudiar los di*ersos ti&os de &rocesión del Ego a sus estados. Setrata+ las As de las *eces de una &rocesión Agica. Otras *eces&uede ser racional 7en el caso de la *oluntad ree=i*a9. Perosie&re con un ,ondo de ininteligibilidad del cual tratareos+ en su

oento+ de in*estigar la ra0ón. Con las di,erentes conciencias7&relógica+ in,antiles+ esui0o,r)nicas+ lógicas+ etc.9 *ar1a el ati0 decreación+ &ero se trata sie&re de una &roducción &o)tica. Un casou- &articular &ero de un inter)s considerable es el de la &sicosisde inuencia. u) uiere decir el en,ero con estas &alabras@ =seme /ace tener alos &ensaientos;> Tratareos de estudiarlo enotra obra.G$ Se


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asobros clAsicos@ ;Fe &odido 6o /acer esto>; ;Fe &odido 6oodiar a i &adre>;+ etc.+ u1 e*identeente+ el con4unto concretodel 6o 78oi9 intuicionado /asta ese d1a+ recarga a ese 6o &roductor -lo retiene un &oco atrAs de lo ue acaba de &roducir. El la0o del Ego

a sus estados &eranece siendo &ues una es&ontaneidadininteligible.G% Esta es&ontaneidad /a sido descri&ta &or (ergson enlos #atos inmediatos de la conciencia, es a ella a uien toa &or lalibertad+ sin darse cuenta ue describe un ob*eto - no unaconciencia - ue la liga0ón ue establece es &er,ectaenteirracional &orue el &roductor es &asi*o en relación a la cosacreada. Por As irracional ue sea+ esta liga0ón es la ueco&robaos en la intuición del Ego. 6 a&resaos su sentido@ elEgo es un ob4eto a&re/endido+ &ero tabi)n+ constituido &or la

conciencia ree=i*a. Es un ,oco *irtual de unidad+ - la conciencia loconstitu-e en sentido inverso del ue se sigue en la &roducciónreal@ lo ue es &riero+ realmente, son las conciencias a tra*)s delas cuales se constitu-en los estados+ - des&u)s+ a tra*)s de )stosel Ego. Pero coo el orden ueda in*ertido &or una conciencia uese a&risiona en el undo &ara /uirse+ las conciencias se dan cooeanando de los estados - los estados coo &roducidos &or elEgo.G" De lo ue se sigue ue la conciencia &ro-ecta su &ro&ia esB&ontaneidad en el ob4eto Ego &ara con,erirle el &oder creador ue lees absolutaente necesario. Solaente ue esta es&ontan1dad+representada e ipostasiada en un ob4eto+ de*iene unaes&ontaneidad bastarda - degradada+ ue conser*a Agicaentesu &otencia creadora al iso tie&o ue se /ace &asi*a. De a/1 lairracionalidad &ro,unda de la noción de Ego. Conoceos otrosas&ectos degradados de la es&ontaneidad consciente. No citar)As ue uno@ una 1ica e=&resi*a GG y ?na &uede entregarnos ia;Erlebnis; de nuestro interlocutor con todo su sentido+ todos susatices+ toda su ,rescura. Pero nos la entrega degradada, es decir+&asi*a. Estaos de este odo rodeados de ob4etos Agicos ue

64 "Esta ambigüedad es revelada por la teoría de Bergson sobre la conciencia que dura y

que es 'multiplicidad de interpenetración". Lo que Bergson alcanza aquí, es lo psíquico,

no la conciencia concebida como Para-sí".El Ser y la Nada, Tomo I, p. 253.65 Es por esta causa que el Ego desempeña un gran papel en el aprisionamiento de la

conciencia por sí-misma, vale decir en las conductas de la mala fe. Cf.El Ser y la Nada,

Primera parte, cap. II, p. 100 y sgtes.66 Sartre analizará enLo imaginariolas implicaciones de los juegos de la conciencia que

proceden de la reificación del sentido. La mímica expresiva, por ejemplo, puede envolver

una relación de posesión, en un sentido mágico, entre el sentido a ve-hiculizar y la

materia en la que él se desliza (rostro, carne, cuerpo): "...un imitador es un poseído', p.

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guardan coo un recuerdo de la es&ontaneidad de la conciencia+aun siendo ob4etos del undo. Fe a/1 la causa &or la cual el /obrees sie&re un bru4o &ara el /obre. En e,ecto+ esta liga0ón &o)ticade dos &asi*idades+ de las ue una crea es&ontAneaente a la otra+

es el ,ondo iso de la bru4er1a+ es el sentido &ro,undo de la ;&arBtici&ación;. 6 /e a/1 la causa &or la ue nosotros soos bru4os &aranosotros isos cada *e0 ue consideraos nuestro 6o 78oi9.

En *irtud de esta &asi*idad el Ego es suBce&tible de ser afectado.Nada &uede actuar sobre la conciencia+ &orue ella es causa de s1.Pero al contrario+ el Ego &roductor so&orta el c/oue de *uelta de loue se &roduce. EstA ;co&roetido;GH &or lo ue se &roduce. Fa-au1 una in*ersión de la relación@ la acción o el estado se *uel*e

sobre el Ego &ara cuali?carlo. Esto nos lle*a nue*aente a la relaBción de &artici&ación. Todo nue*o estado &roducido &or el Ego ti


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interioridad> Si&leente esto@ ue &ara la conciencia ser -conocerse son una - la isa cosa. Lo ue &uede ser e=&resado dedistintas aneras@ &uedo decir+ &or e4e&lo+ ue &ara la concienciala a&ariencia es lo absoluto en tanto ella es a&ariencia+ o tabi)n

ue la conciencia es un ser cu-a esencia i&lica la e=istencia.G

Estas di,erentes ,órulas nos &eriten concluir ue se vive lainterioridad 7ue se =e)iste interiormente=: , &ero ue no se laconte&la+ &uesto ue &or condición estA As allA de la conteB&lación. Ser1a intil ob4etar ue la ree=ión &one a la concienciaree4a+ - &or a/1+ su interioridad. El caso es es&ecial@ ree=ión - reBe4o no /acen As ue uno+ coo lo /a deostrado Fusserl+GM - lainterioridad de la una se ,unde con el de la otra. Pero &oner delantede s1 la interioridad es darle &eso - /acerla ob4eto. Es coo si ella

se encerrara sobre s1 - no nos o,reciera As ue su e=terior+ coosi /ubiese ue ;darla *uelta; &ara co&renderla. 6 es as1 ue el Egose entrega a la ree=ión@ coo una interioridad cerrada sobre s1 isa. Es interior para /l, no para la conciencia. Naturalente+ setrata toda*1a de un co&le4o contradictorio@ en e,ecto+ unainterioridad absoluta no tiene 4aAs e=terioridad. No &uede serconcebida As ue &or s1 isa - es &or esto &or lo ue no&odeos a&resar las conciencias de los otros 7&or eso solaente -no &orue los cuer&os se se&aren9. En realidad+ esta interioridaddegradada e irracional se de4a anali0ar en dos estructuras u- &arBticulares@ la intimidad - la indistinción. En relación a la conciencia+el Ego se da coo 1ntio. Todo ocurre coo si el Ego ,uese de laconciencia+ con esta sola - radical di,erencia+ ue es o&aco a laconciencia. 6 esta o&acidad es toada coo indistinción. Laindistinción+ de la ue se /ace+ ba4o di,erentes ,oras+ ,recuenteuso en ?loso,1a+ es la interioridad *ista desde a,uera+ o si se&re?ere+ la &ro-ección degradada de la interioridad. Es esta la indisBtinción ue se reencontrar1a &or e4e&lo en la ,aosa;ulti&licidad de inter&retación; de (ergson. Es tabi)n estaindistinción+ anterior a las es&eci?caciones de la naturale0anaturada+ ue se encuentra en el Dios de nuerosos 1sticos. Se la&uede co&render tanto coo una indi,erenciación &riiti*a detodas las cualidades+ tanto coo una ,ora &ura del ser+ anterior atoda cuali?cación. Esas dos ,oras de indistinción &ertenecen alEgo+ segn la anera en ue se lo considere. En la es&era+ &or68 Cf. la "Introducción. A la búsqueda del ser", Tomo I, p. 11 y sgtes., deEl Ser y la Nada.69 En la unidad de una cogitatio concreta, según lasIdeas I,parágrafo 38.

Pero Husserl asimila la tesis de mi vivido personal a la tesis de mi yo puro, como

parejamente necesarias e indubitables, para oponerlas juntas a la tesis contingente del

mundo. Es decir que no coloca el Ego en el dominio de lo trascendente psíquico.


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e4e&lo 7 o cuando 8arcel rland e=&lica ue es necesario unaconteciiento e=traordinario &ara re*elar el 6o *erdadero9 H elEgo se entrega coo una &otencia desnuda ue se ?4arA - se&recisarA al contacto de las aconteciientos.H H$Por el contrario+

des&u)s de la acción &arece ue el Ego reabsorbe el acto /ec/o enuna ulti&licidad de inter&enetración. En los dos casos se tratasie&re de totalidad concreta+ &ero la s1ntesis totalitaria se o&eracon intenciones di,erentes. Tal *e0 se &odr1a llegar a decir ue elEgo+ en relación al &asado+ es ulti&licidad de inter&enetración+ -&or relación al &or*enir+ &otencia desnuda. Pero es necesariodescon?ar au1 de una esueati0ación e=cesi*a.

El 6o 78oi9 &eranece entonces desconocido &ara nosotros. 6 esto

&uede co&renderse con ,acilidad@ )l se da coo un ob4eto. El solo)todo &ara conocerlo es la a&ro=iación+ la es&era+ laobser*ación+ la e=&eriencia. Pero esos &rocediientos+ uecon*ienen &er,ectaente a todo trascendente no5"ntimo, no sontiles au1+ &or el /ec/o iso de la intiida del 6o 78oi9.Peranece deasiado &resente &ara ue se &ueda toar sobre )lun &unto de *ista e=terior. Si uno retrocede &ara toar distancia+nos aco&a 8e decidir1a sinduda si &regunto a uienes e conocen - les &ido su &arecer. Obien+ &uedo coleccionar los /ec/os ue e conciernen - tratar deinter&retarlos tan ob*etivamente como si concernieran a otro. Peroser1a en *ano el dirigire al 6o 78oi9 directaente - tratar dea&ro*ec/ar su intiidad &ara conocerlo. Puesto ue es ella+ alcontrario+ ue nos intercede el caino. s1+ ;conocerse bien;+ es,atalente toar sobre s1 el &unto de *ista del otro+ es decir+,or0osaente un &unto de *ista ,also.H3 6 todos auellos ue /antratado de conocerse lo ace&tarAn@ esta tentati*a de intros&ecciónse &resenta desde el origen coo un es,uer0o &ara reconstituir con&ie0as se&aradas+ con ,ragentos aislados+ lo ue se daoriginariaente de golpe, de una *e0. De este odo la intuición del

70 En un articulo de la N. R. F., tal vez Sur unnouveau Mal du Siècle,aparecido en 1924 y

reproducido enEssais critiques, Gallimard, 1931, p. 14; es un tema familiar a Marcel

Arland, en el mismo libro ver su ensayo sobre Oscar Wilde, p. 118.71 Cf. el análisis del "apasionado" hecho por Si-mone de Beauvoir enPara una moral de la

ambigüedad,Ed. Schapire, Buenos Aires, 1956; y elSer y la Nada."La mala fe", Tomo I,

p. 100.72 Como en el caso, en que el apasionado, queriendo significar que no sabe hasta dónde

será arrastrado por su pasión, dice: "Yo tengo miedo demi".73 Porque "ese como objeto que yo aparezco a otro", tal como lo muestraEl Ser y la Nada.


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Ego es un mirage &er&etuaente dece&cionante+ &ues a la *e0+entrega todo - no entrega nada. Cóo &odr1a ser de otro odo+ &orotra &arte+ &uesto ue el Ego no es la totalidad real de lasconciencias 7esta totalidad ser1a contradictoria coo todo in?nito

en acto9+ sino la unidad ideal de todos los estados - de todas lasacciones. Siendo ideal+ esta unidad &uede naturalente abra0aruna in?nidad de estados. Pero se entiende bien ue lo ue seentrega a la intuición concreta - &lena es solaente esta unidad entanto ue ella se incor&ora al estado &resente. &artir de estencleo concreto+ una cantidad As o enos grande de intenciones*ac1as 7de derec/o una in?nidad9 se dirigen /acia el &asado - /aciael &or*enir - a&untan los estados - las acciones ue no se dancoo &resentes. uienes cono0can algo de ,enoenolog1a

co&renderAn sin di?cultad ue el Ego sea a la *e0 una unidadideal de estados+ ausentes en su a-or1a+ - una totalidad concretadAndose enteraente a la intuición@ eso signi?ca si&leente ueel Ego es una unidad noeAtica - no noeAtica. Un Arbol o unasilla no e=isten de otro odo. Naturalente+ las intenciones *ac1as&ueden llenarse sie&re - cualuier estado o cualuier acción&uede sie&re rea&arecer a la conciencia coo siendo o /abiendosido &roducida &or el Ego.

En ?n+ lo ue i&ide radicalente aduirir conociientos realessobre el Ego+ es su anera u- es&ecial de darse a la concienciaree=i*a. En e,ecto+ el Ego no a&arece As ue cuando no se loira. Es necesario ue la irada ree=i*a se ?4e sobre la ;Erlebnis;+en tanto ue ella eana del estado. Entonces+ detrAs de losestados+ en el /ori0onte+ el Ego a&arece. Nunca es 4aAs *isto Asue de ;reo4o;. Desde ue *uel*o i irada /acia )l - &retendoalcan0arlo sin &asar &or la ;Erlebnis; - el estado+ se des*anece. Esue+ en e,ecto+ tratando de a&resar al Ego &or s1 iso - cooob4eto directo de i conciencia+ recaigo sobre el &lano irree=i*o -el Ego desa&arece con el acto ree=i*o. De a/1 esa i&resión deincertidubre irritante+ ue traducen uc/os ?lóso,os al &oner al-o As acA del estado de conciencia - al a?rar ue la concienciadebe *ol*erse sobre ella isa &ara a&ercibir al 6o ue estA detrAsde ella. La causa no es esa@ es ue+ por naturale7a el Ego es/u-ente. Es cierto sin ebargo ue el 6o a&arece sobre el &lanoirree=i*o. Si se e &regunta ;u) estAs /aciendo>;+ - res&ondoientras esto- ocu&ado ;6o trato de colgar este cuadro;+ o ;6ore&aro el neuAtico trasero;+ estas ,rases nos trans&ortan sobre el&lano de la ree=ión5 las &ronuncio sin cesar de traba4ar+ sin cesar


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de a&untar nicaente las acciones en tanto ue son /ec/as o a/acer+ no en tanto ue -o las /ago. Pero este ;6o; del cual se trataau1 no es sin ebargo una si&le ,ora sintActica. Tiene unsentido5 es si&leente un conce&to *ac1o - destinado a

&eranecer *ac1o. Lo iso ue &uedo &ensar una silla enausencia de toda silla - &or un si&le conce&to+ lo iso &uedo&ensar al 6o en su ausencia. Es lo ue /ace e*idente la consiBderación de ,rases tales coo ;u) /aces des&u)s de ediod1a>;+;6o *o- a la o?cina; o ;6o e encuentro con i aigo Pedro;+ ;Esnecesario ue -o le escriba;+ etc. Pero el 6o+ al caer del &lanoree=i*o al iree=i*o no se *ac1a si&leente. Se degrada @ &ierdesu intimidad. El conce&to no &odr1a 4aAs ser llenado &or los datosde la intuición &uesto ue a/ora a&unta a otra cosa ue a ellos. El

6o ue encontraos au1 es de alguna anera el so&orte de lasacciones ue 7-o9 /ago o debo /acer en el undo en tanto ueellas con cualidades del undo - no unidades de conciencias. Pore4e&lo@ la adera debe ser cortada en &eue


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Planoree=i*o

Concienciaree=ionada+inanencia+

interioridad. Egointuiti*o+trascendencia+

intiidad+ 7doiniode lo &s1uico9

Plano

irree=i*o

6oBconce&to7,acultati*o9+ *ac1otrascendental+ sin

;intiidad;. Cuer&o

coo cu&liBiento ilusorio del 6oBconce&to.

7doinio de lo &sicoB,1sico9

E9 El >o y la conciencia en el ogito.

Se &odr1a &reguntar &or u) el 6o a&arece en ocasión del Cogito+&uesto ue el Cogito+ si se o&era correctaente+ es a&re/ensión deuna conciencia &ura sin constitución de estado ni de acción. Paradecir la *erdad+ el 6o no es necesario au1+ &uesto ue 4aAs esunidad directa de conciencias. Se &uede aun su&oner unaconciencia ue o&erase un acto ree=i*o &uro ue la librar1a a s1 isa coo es&ontaneidad noB&ersonal. Solaente es necesarioatender a ue la reducción ,enoenológica no es 4aAs &er,ecta.u1 inter*ienen una cantidad de oti*aciones &sicológicas.Cuando Descartes e,ecta el Cogito lo /ace en liga0ón con la dudaetódica+ con la abición de ;/acer a*an0ar la ciencia;+ etc.+ estoes+ con acciones y estados. De este odo el )todo cartesiano+ laduda+ etc.+ se dan &or naturale0a coo las e&resas de un 6o. Esnatural ue el Cogito+ ue a&arece al t)rino de esas e&resas y que se da como lógicamente ligado a la duda metódica, *eaa&arecer un 6o sobre el /ori0onte. Ese 6o es una ,ora ideal de liBga0ón+ un odo de a?rar ue el Cogito /a sido a&resado tan biencoo la duda. En una &alabra+ el Cogito es i&uro+ es unaconciencia es&ontAnea+ sin duda+ &ero ue ueda ligadasint)ticaente a las conciencias de los estados - de las acciones.


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CONCLUSI#N

uisi)raos coo conclusión &resentar las tres indicacionessiguientes@

K9 La conce&ción del Ego ue &ro&oneos nos &arece reali0ar laliberación del ca&o trascendental al iso tie&o ue su &uriB?cación.

El ca&o trascendental+ &uri?cado de toda estructura egológica+recobra su li&ide0 &riera. En un sentido es una nada &uesto ue

todos los ob4etos ,1sicos+ &sicoB,1sicos - &s1uicos+ todas las*erdades+ todos los *alores+ estAn ,uera de )l+ &uesto ue i 6o78oi9 /a cesado de ,orar &arte de )l. Pero esa nada es todo,&uesto ue es conciencia de todos esos ob4etos. No /a- As *idainterior en el sentido en ue (runsc/*icg HG o&one ;*ida interior; -;*ida es&iritual;+ &orue no /a- nada ue sea ob *eto - ue &ueda&ertenecer al iso tie&o a la intiidad de la conciencia. Lasdudas+ los reordiientos+ las &retendidas ;crisis de conciencia;+etc.5 bre*eente+ toda la ateria de los diarios 1ntios secon*ierten en si&les representaciones. 6 tal *e0 se &odr1a e=traerde au1 algunos sanos &rece&tos de discreción oral. Pero+ &or otra&arte+ es necesario notar ue+ desde este &unto de *ista+ issentiientos - is estados+ i Ego iso+ cesan de ser i&ro&iedad e=clusi*a. 6 &ara ser As &recisos @ /asta au1 se /ac1auna distinción radical entre la ob4eti*idad de una cosa es&acioBteB&oral o de una *erdad eterna - la sub4eti*idad de los ;estados;&s1uicos. Pareciera ue el su4eto tu*iese una &osición &ri*ilegiadacon res&ecto a sus &ro&ios estados. Cuando dos /obres+ segnesta conce&ción+ /ablan de una isa silla ellos /ablan de unamisma cosa+ esta silla ue el uno toa - le*anta es la misma ue elotro *e+ - no sólo /a- si&le corres&ondencia de iAgenes+ /a- unsolo ob4eto. Pero &arecer1a ue cuando Pablo trataba deco&render un estado &s1uico de Pedro+ no &od1a alcan7ar eseestado+ cu-a a&re/ensión intuiti*a &ertenec1a solaente a Pedro.No &od1a As ue a&untar un eui*alente+ crear conce&tos *ac1os

76 León Brunschvigc,Vie intérieure et Vie spi-rituelle.Comunicación al Congreso

Internacional de Filosofía de Napoles (mayo de 1924), reproducido en laRevue de

Métaphysique et de Morale,abril-junio de 1925, y después recogido en Ecrits

philosophiques, Tomo II, P. U. F., 1954.


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ue tratar1an *anaente de alcan0ar una realidad sustra1da &oresencia a la intuición. La co&rensión &sicológica se /ac1a &oranalog1a. La ,enoenolog1a en cabio nos /a enseo 8Moi:, unatoa intuiti*a enos clara &ero no enos intuiti*a &or otrasconciencias. En una &alabra+ el 6o 78oi9 de Pedro es accesible a iintuición coo a la de Pedro - en los dos casos es el ob4eto de unae*idencia inadecuada. Si es as1+ no ueda As nada ;dei&enetrable; en Pedro+ ue no sea su conciencia isa. Pero )stalo es radicalmente. uereos decir ue ella+ no es solaente reB,ractaria a la intuición+ sino al &ensaiento. No &uedo concebir laconciencia de Pedro sin /acer de ella un ob4eto 7&uesto ue no laconcibo coo siendo mi conciencia:. No &uedo concebirla &oruetendr1a ue &ensarla coo interioridad &ura - trascendencia a lave7, lo ue es i&osible. Una conciencia no &uede concebir a otraconciencia ue no sea ella isa. Podeos as1 distinguir+ gracias anuestra conce&ción del 6o 78oi9+ una es,era accesible a la&sicolog1a+ en la cual+ el )todo de obser*ación e=terna - el)todo intros&ecti*o tienen los isos derec/os - se &restan unaa-uda utua 2- una es,era trascendental &ura solaente77 TodaErlebnises accesible a la reflexión: esta afirmación explica la renovación de la

psicología a causa del método descriptivo fenomenológico. En efecto, ella funda los

estudios reflexivos de lo irreflexivo, como los de la emoción, de lo imaginarlo o, inclusive,

los deEl Ser y la Nada.Estos últimos no son, en efecto, sino la puesta en práctica de las

conclusiones del ensayo sobreLa trascendencia del Ego.Lo mismo podemos decir de su

estudio no publicado sobreLa Psyché.


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accesible a la ,enoenolog1a. Esta es,era trascendental es unaes,era de e=istencia absoluta, es decir+ de es&ontaneidades &uras+ue no son nunca ob4etos - ue se deterinan &or s1 isas ae=istir. En tanto ue el 6o 78oi9 es ob4eto+ resulta e*idente ue

4aAs &odr1a decir mi conciencia+ es decir+ la conciencia de i >o8Moi: 7sal*o en un sentido &uraente designati*o coo &or e4e&locuando digo@ el d1a de i bautiso9. El Ego no es el &ro&ietario dela conciencia+ es su ob4eto. Ciertaente+ nosotros constituios esB&ontAneaente nuestros estados - nuestras acciones coo&roducciones del Ego. Pero nuestros estados - acciones sontabi)n ob4etos. No teneos 4aAs intuición directa de laes&ontaneidad de una conciencia instantAnea coo &roducida &orel Ego. Esto ser1a i&osible. Solaente en el &lano de las

signi?caciones - de las /i&ótesis &sicológicas+ &odeos concebirsee4ante &roducción 2- este

sartre, j p_la trascendencia del ego (doc)

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