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Revista Forestal Número Especial

REALIDADES Y PERSPECTIVASDE LAS PROPIEDADES DE LA MADERA,

SU CONSERVACIONY SECADO

CarlosSOSA Suárez,JUAN Manuel G a r c í a DELGADO, ALBERTO IbañezDrakeY PEDRO PABLO HENRY T o r r i e n t eInstituto de Investigaciones Forestales

Como consecuencia de ser la made-ra un material expuesto a la degra-dación por agentes físicos, químicosy biológicos, desde tiempos remotos el hombre se ha visto en la necesi-dad de conservarla mediante diferen-tes medios y métodos; en un princi-pio solo por un interés económicomultiplicando su vida; sin embargo,hoy se adiciona el enfoque conser-vacionista de la naturaleza y espe-cificamentela sostenibilidaddel bosque.

Por ser la madera un producto reno-vable, por su belleza y otros atríbu-tos, es un material constructivo dealta competitividad, de ahí que seapreciso'conocer sus propiedades fisi-co-mecánicas, así como las diferen-tes tecnologías para su conservaciónfisico-químicay secado. Sus realida-des y perspectivas en Cuba se reco-gen en apretada síntesis.

nes: como combustible para cocer los alimentos, en las construcciones, etc. Aun con el desarrollo alcanzado en laépoca contemporánea, continúa sien-doun productomuyapreciado por toda la sociedad, no solo por sus caracte-rísticas que la hacen insustituible, sino que es un recurso multipropósitocon un carácter renovable.

Johnson (1996),al referirse a la ma-dera, puntualiza: «Lasnumerosas cla-ses de madera que se pueden utilizaren las edificaciones reúnen junto auna gran variedad de colores y tonaii-dades, una textura orgánica que leses propia y que ningún material crea-do por el hombre puede igualar; sinembargo, en muchas ocasiones no seha logrado aprovechar al máximo los resultados que brindan losestudios de las propiedades físicas y mecánicasen función de un uso determinado, loque trae consigo pérdidas de madera

DESARROLLO que obligan a remplazarla en un pe-

delasnodo corto aumentando la presión so-

y de la bre los bosques.

Desde la antigüedad l a madera se ha La utilizaciónde la madera adecua-venido empleando con diferentes fi- da, en el objetivo Propuesto, implica

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Carlos Sosa Suárez et al.

mayor durabilidad del producto o lainstalación, ya que los esfuerzos a que se encuentran sometidas res-ponde a las características de la es-pecie maderable que se trate.

venientes como la necesidad de es-tudiar profundamente especie por especie para poder conocerla; pero sobre todo una gran ventaja, que esla de disponer de una gran gama deoferta de-propiedades, ante la cual elindustrial puede elegir para obtenerel producto con la calidad, fun-cionalidad y belleza que requiere)).

Con la creación del Instituto de In-vestigacionesForestales (IIF)en 1969mediante un proyecto de la FAO, co-mienzan a realizarse en Cuba ensa-yos con toda la profundidad requeri- Situación actuald a en la determinación de laspropiedades físicas y mecánicas, conel principal objetivo de propiciar eluso más consecuente de las especiesmaderables cubanas y otras introdu-cidas que por su adaptabilidadformanparte de nuestros bosques.Existían como antecedentes peque-ños estudios realizados por algunasinstituciones, pero todos fueron diri-gidos a objetivos bien determinados,sin darle toda la amplitud que requie-re la gama de empleos en que puedeutilizarse la madera.

Cuba cuenta en su flora con ungran número de especies madera-bles de importancia económica, alas que es necesario conocer suscaracterísticas para encontrar la racionalidad adecuada en el usoque se le asignen.Los resultados de Ibáñez et al.(1985) resaltan la importancia delestudio de las propiedades físicas,mecánicas y tecnológicas de la ma-dera para su utilización como baseen la elección de las especies quehan de plantarse en los planes de

Fors (1975),en su libro Maderas cu-banas describe las Características dela madera de árboles nativos e intro-ducidos, y enfatiza un solo aspecto

reforestáción de la actividad fores-tal en Cuba. Los principales resul-tados en este período se agrupan de la forma siguiente.

físico, la densidad, y otros tecnológi-cos como la durabilidad y la facilidadde trabajo. Si bien este artículo re-flejaba los posibles usos de la made-ra con un nivel empírico,no daba unainformación amplia de las propieda-des físicas y mecánicas, lo que limi-ta la amplitud de empleos en la que puede ser utilizada.

Investigaciones realizadas sobre seis especies maderables en 1974.Informe sobre nueve especies ma-derables en 1975.Compendio de 56 especies made-rables cubanas, africanas y otrasregiones tropicales en 1978, en laque se incluyen 28 especies cuba-nas.

Sobre esta cuestión en particular, Vignote et al. (1988) señalaban que«lagran variación de características que presentan la madera de diferen-tes especies supone grandes incon-

Informe tecnológico de 10especiesmaderables de Guyana. Informe técnico sobre maderas deSurinam a partir de una solicituddel CEATM.

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Realidadesy perspectivas...

Estudio sobre 20 especies africa-nas con posibilidades de sustituira maderas cubanas. Estudio comparativo de propieda-des físico-mecánicas de Pinuscanbaeade pequeñas y grandes di-mensiones.Ficha técnica de 152 especies maderables, fundamentalmenteafricanas.

Ibáñez et al. (2002) elaboraron uncompendio en el que se incluyen 50especies maderables de las más im-portantes de Cuba, que en muchosde los casos son objeto de la reforestación o existen en los bosquesnaturales. El material cuenta con losestudios básicos de las propiedadesfisico-mecánicas y usos de especiesconíferas y latifolias para las que nose contaba con datos científicamen-te fundamentados. Igualmente per-mite poner en manos del usuario ycomercializador de la madera de pro-ducción nacional los necesarios ele-mentos técnicos que coadyuven a suempleo satisfactorio en aquellos usosen los cuales pueda responder con eficiencia.Dentro de los estudios realizados re-saltan las cuatro especies de pinossobre los que descansan el mayor por-centaje de la producción de madera aserrada en el país. Estos tienen den-sidades de más de 700 kg/m3 y unacontracción media que las hacen te-ner disímiles usos que van desde lautilización como envases, palletshasta la marquetería.Otra especie maderable que por suimportancia es bueno distinguir esla Swetenia mahagoni (L.)Jack. (cao-ba cubana),con una densidad media

de 600 kg/m3 y una relación tan-gencial radial muy favorable. Estasyotras propiedades mecánicas y tec-nológicas la hacen ser una de Iasmaderas mejores del mundo.PerspectivasContinuar profundizando en el estu-dio de las propiedades fisicas y me-cánicas de las especies ya estudia-das, con la principal vía de darles unuso final acorde con la calidad de sumadera y de los objetivos propuestos.Se debe ahondar en el conocimientode los estudios básicos de estas es-pecies a partir de su comportamien-to, dentro de la misma especie, a unadeterminada edad, influenciadas pordiferentes tratamientos silvícolas yen diferentes sitios.

Se deben estudiar las propiedades fi-sicas y mecánicas de las especiesmenos conocidas con el objetivo deaumentar las opciones de maderaspara diferentes usos y así disminuirla presión sobre los bosques. Conservaciónquímicade la maderaSituación actualSi bien desde 1830 se preserva ma-dera industrialmente en Europa yen Norteamérica, en Cuba la pri-mera actividad industrial en esesentido se logró exactamente unsiglo después con la instalación deu n a planta en Minas de Mata-hambre, con el fin de tratar con sa-les hidrosolubles las bocaminas demadera de pino. Las característicasde cada una de las unidades de im-pregnación existentes en Cuba sonlas siguientes:

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Diámetro Longitud Capacidad útil autoclave autoclave anualaproximada

(m) (m) (m3)

unidadde impregnacíon Observaciones

Minas deMatahambre(1930-1935)

Guane (1962)

IIF (1973)

Boucherie (1974)ECOI-3 (1997)

La situación real de la preservación de la madera en Cuba en el año2004 es la siguiente:Volumen de madera preservable (madera

aserrada conífera y blanda, traviesas deferrocarril y rolliza)

355 800 m3

Lleva más de2 8 5 000 cinco añossin

producir3 27 15 000 En producción

0,60 3,60 250 Sin producirDescontinuada

1 12 2 500 No ha producido

Plan de producción de madera preservada(postes de servicio público y para el tapadodel tabaco, traviesas de ferrocarril yhorcones)

Capacidad instalada de plantaspara la preservación de la madera

6 230 m3

22 750 m3

Total

Por ciento de la madera preservableque se preserva según plan 2004

1,75%

22 750

Por ciento de la madera preservable que sepuede preservar según la capacidadinstalada los desarrollados tratan

6,39%, similar al de los países subdesarrollados;

más del 50%

PerspectivasDesarrollar la industria de la pre-servación de la madera en Cuba esun imperativo económico-ambien-tal, y a que se multiplica la dura-118

bilidad de la madera en tres y másveces, y con ello contribuye signi-ficativamente a la sostenibilidad del bosque.

Realidadesy perspectivas...

La propuesta de ubicación de las plantas de impregnación y valor delas inversiones es:

El número de plantas y s u s capaci- exigencias del mercado territo-dades pueden variar en conformidad rialmente. El periodo de recupera-con las instalaciones industriales de ción de la inversión es de dos años transformación de la madera y las Y medio.

Planta impregnación Santiago de Cuba

Valor de la producciónde madera pre-servada hasta el 2015:

Volumen madera preservable m m3

377,65 413,24 475,24

Volumen madera preservada m m3

5,30 47,90 72,90

Madera preservada (%)1,4 11,59 15,33

-

Secado de la madera

Situación actual

En Cuba, desde que se inició la ex-plotación maderera con la coloniza-ción, se practica el secado natural yutilizan diferentes métodos para elapilamiento hasta tanto se alcancela humedad de equilibrio higros-

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370.0


cópico (heh),al hablarse del secado natural y hasta el contenido de hu-medad idóneo cuando se emplea el artificial. Este proceso es decisivopara la elaboración y uso de la made-ra al mejorar de forrna general suspropiedades de resistencia.

La heh para Cuba fue determinadapor Sosa et al. (1998) con la informa-ción meteorológica, humedad ytemperatura del aire, acumulada durante veinte años y más en 52estaciones de todo el país. Los pro-gramas de secado natural para dife-rentes especies y vitolas se han es-tado estudiando desde la creación del IIF [García et al., 1998, 2004].

La primera referencia del secado ar-tificial con sistemas importados enCuba data de la décadade 1940,cuan-do se instaló un horno en el aserra-dero Babún, en Santiago de Cuba, de120 m3 de capacidad, que funciona-ba con los residuos de la propia in-dustria. Antes de esta fecha existie-

ron otras tentativas, como la reali-zada por el antiguo propietario del aserradero Inclán, en Pinar del Río,quien montó una pequeña instala-ción a fin de secar el almácigo utili-zado para la fabricaciónde tablillas de conservas, de queso crema, etc. Estesecador era por convección, sin ven-tilación forzada de aire, y utilizaba elresiduo de la propia industria.

Al principio de la revolución se ins-talaron dos cámaras de secado enBatabanó para secar madera paralápices. En las décadas del setentay ochenta se montaron secadores enManicaragua y Luyanó, y en Guan-tánamo y Camagüey, respectiva-mente, en que se trabajaba con com-bustibles fósiles. Al finalde la décadadel noventa -y en lo que va del pre-sente siglo- el país ha hecho cuan-tiosas inversiones en la instalación de secadores en Pinar del Río, Ma-tanzas y Cienfuegos. Los organismoscon hornos de secado y sus capaci-dades son:

r . . .,

organismo Volumen de secado ciclo

Cubatabaco(Cienfuegosy Luyanó) 75

MINIL(Guantánamo,Muebles 380Habana, Batabanó)

CIMEX 60

Otrasentidades 60

Realidades y perspectivas...

Perspectivas 3. Para la producción de la energía

En el plan de desarrollo hasta el año2015 se preve continuar con las in-versiones en el secado artificial dela madera aserrada. Con este objeti-vo se considera secar madera de ca-lidad A y B de diferentes especies, gruesos y usos. En la capacidad de secado por instalar, el planes aumen-tar en 650 m3 de madera aserrada elsecado por ciclo, con un valor de lasinversiones que sobrepasan el millónochocientos mil dólares [GEAM,2004].

Del total de secado por ciclo, la dis-tribución en el país es como sigue:19% para la parte occidental inclui-da la Isla de la Juventud, 18% parael centro del país y el 63% para la parte oriental.

Las consideraciones técnicas quedeben tenerse en cuenta para la com-pra de determinada marca de seca-dores artificiales de madera aserra-da son:

1.El sistema de control de secadodebe realizarse a partir de la hu-medad en la madera, y no del tiem-po como hasta ahora prevalece enlas inversiones realizadas por el sector forestal, el cual inter-nacionalmente se utiliza cuandose van a secar maderas muy co-nocidas y de fácil secado.

2. El equipo para el control del seca-do debe ser por gradiente de seca-do, sistema menos engorroso queel de sicrómetro, y que en estosmomentos es el utilizado por losprincipales productores de secado-res artificiales de madera aserra-da en Europa.

calórica debe seguir prevalecien-do el de agua caliente con calde-ras de quemadores de sólidos de lapropia industria.

4. Los deflectores, que tan importan-te papel juegan en dirigir los vien-tos dentro del secador, deben serfundamentalmente de aluminio yque sea desplazable para no serdeteriorado en el momento del car-gue del secador.

El secado artificialde la madera aserra-da debe continuar siendo uno de losprincipales sistemas para alcanzarun uso mas adecuado de la maderaaserrada en el país.

CONCLUSIONESLos estudios de las propiedades dela madera deben ser la vía funda-mental para emplear la especieadecuada en las dimensiones re-queridas como un principio de suconservación.A corto plazo la preservación qui-mica de la madera en todos sussurtidos debe recibir un fuerte pro-ceso inversionista que la elevenacionalmente a los planos que se requiere.Debecontinuar las inversionesenel secado artificial de la madera aserrada, priorizando aquellos as-pectos tecnológicos de la instala-ción que más se adecuen a las con-diciones de Cuba y que son definidos en el presente trabajo.

ALBERTO: Maderascubanas, INRA,La Haba-na, 1965.

Carlos Sosa et al.

JUANM.; CARLOS

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