misioneros nº 156

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EDITADA POR LAS OBRAS MISIONALES PONTIFICIAS Nº 156 JUNIO AÑO 2015 TERCER MILENIO

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Page 1: Misioneros Nº 156

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ITA

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NA

LES P

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TIF

ICIA

SNº 156 JUNIO AÑO 2015

T E R C E R M I L E N I O

Page 2: Misioneros Nº 156

Se ha celebrado en Bangui, capital

de la República Centroafricana, un

foro de reconciliación. Toda una

iniciativa para que este país deje

atrás décadas de caos y violencia.

14

en este número...

y además...

EDITA OBRAS MISIONALES PONTIFICIASC/ Fray Juan Gil, 5 28002 - Madrid Tfno: 91 590 27 80 Fax: 91 563 98 33 E-Mail: [email protected]://www.omp.eshttp://www.domund.org

Nº 156. JUNIO, 2015

AGUSTINOS RECOLETOSPaseo de La Habana, 167. 28036 Madrid.Tel. 91 345 34 60 COMPAÑÍA DE JESÚSAvda. de la Moncloa, 6. 28003 Madrid. Tel. 91 534 48 10 COMPAÑÍA MISIONERA DEL SAGRADO CORAZÓNEstocolmo, 9. 28022 Madrid. Tel. 91 313 56 40 FRANCISCANAS MISIONERAS DE MARÍACardenal Marcelo Spínola, 38. 28016 Madrid.Tel. 91 302 61 99 MISIONERAS DE NUESTRA SEÑORA DE ÁFRICA(HERMANAS BLANCAS)Asensio Cabanillas, 39. 28003 Madrid. Tel. 91 553 82 60 MISIONEROS CLARETIANOSClara del Rey, 6. 28002 Madrid. Tels. 91 415 23 61 y 91 415 21 99 INSTITUTO ESPAÑOL DE MISIONES EXTRANJERASFerrer del Río, 17. 28028 Madrid. Tel. 91 726 84 27 MERCEDARIAS MISIONERAS DE BÉRRIZFereluz, 2. 1ª A 28039 Madrid. Tel. 91 571 63 03MISIONERAS CRUZADAS DE LA IGLESIAMadre Nazaria, 7. 28044 Madrid. Tel. 91 525 32 04 MISIONERAS DE CRISTO JESÚSPeñuelas, 18. 5º A. 28005 Madrid. Tel. 91 517 41 78 MISIONERAS DOMINICAS DEL ROSARIOGeneral Kirkpatrick, 44. 28027 Madrid. Tel. 91 367 36 71 MISIONEROS ESPIRITANOSSanta Engracia, 149. 1º B. 28003 Madrid. Tel. 91 554 21 57 Olivos, 12. 28003 Madrid. Tel. 91 553 36 16 MISIONEROS DE MARIANNHILL Arturo Soria, 249. 28033 Madrid. Tel. 91 359 07 40 MISIONEROS DEL VERBO DIVINO Corazón de María, 19. 5º B. 28002 Madrid. Tel. 91 415 43 55 MISIONEROS OBLATOS DE MARÍA INMACULADA Diego de León, 36. 28006 Madrid. Tel. 91 411 12 12 Pozuelo de Alarcón, Madrid. Tel. 91 352 34 16 PADRES BLANCOSLiebre, 25. 28043 Madrid. Tel. 91 574 04 00SOCIEDAD DE MARÍA - MONFORTIANOSGarabay, 7. 2º. 28850 Torrejón de Ardoz(Madrid). Tel. 91 677 69 11 SOCIEDAD DE MISIONES AFRICANAS Asura, 34. 28043 Madrid. Tel. 91 300 00 41

coeditores

T E R C E R M I L E N I O

IGLESIA A FONDO

PRIMER PLANO

De un tiempo a esta parte, el catolicismo

mira cada vez más fijamente al otro lado

del Atlántico, a América. Muchas son las

esperanzas evangelizadoras depositadas en

el llamado "continente de la esperanza".

INFORME

Oceanía está lejos en la distancia. Y, sin

embargo, está sembrada de huellas españo-

las, muy próximas y cercanas, en todas par-

tes. También en el seno de una Iglesia

católica que se muestra firme y pujante.

7 TRIBUNA Colegio Misionero Internacional San Pablo

10 EL OBSERVADORCHILE - ARGENTINA

20 ASÍ VA EL MUNDOBURUNDI - COLOMBIAMALÍ - PALESTINA

36 ENTREVISTAMons. Charles Sampa Kasonde, obispo de Solwezi (Zambia)

40 ANIMACIÓN MISIONERA

43 CARISMASHermanas Oblatas del Santísimo Redentor

46 CULTURAEl pueblo que se tatúa la cruz en la muñeca

52 EN EL OBJETIVO

54 MISIÓN VIVAMaría Raquel Gil Mas, Misionera Dominica del Rosario

24

30

Page 3: Misioneros Nº 156

En la pasada Asamblea

General de las Obras

Misionales Pontificias

(OMP), celebrada a co-

mienzos de junio, el papa Francis-

co dirigió un discurso crucial a los

directores nacionales de OMP allí

presentes. Una significativa inter-

vención, en la que el Santo Padre

quiso destacar la importante labor

que les corresponde desarrollar a

las OMP de todo el mundo y a sus

responsables. Una tarea que el

propio Pontífice calificó de “difí-

cil”, “esencial” y “privilegiada”.

“Difícil”, porque, si bien es cier-

to que “la actividad misionera si-

gue siendo todavía el mayor desa-

fío para la Iglesia”, no menos real

es que vivimos en el seno de unas

sociedades en las que reina un cli-

ma social y cultural en el que no

siempre es fácil encontrar palabras

e iniciativas que contribuyan a

“alentar una etapa evangelizadora

más fervorosa, alegre, generosa,

audaz, llena de amor hasta el fin y

de vida contagiosa”.

Se trata, sin embargo, de una

dificultad que se debe superar sin

escatimar esfuerzos, porque lo que

anda en juego es “esencial”. Esta-

mos hablando de lo que constituye

“la primera y constante preocupa-

ción de la Iglesia”: el anuncio del

Evangelio. En esta misión, la fe y el

amor de Cristo son primordiales,

porque nos proporcionan la capaci-

dad de empujarnos a todas partes

para anunciar la Buena Nueva de la

libertad, la justicia, el amor, la fra-

ternidad y el perdón. Un anuncio

que rechaza de plano toda forma

de proselitismo, “caricatura de la

evangelización”, como ya en otra

ocasión lo calificó el Papa; un anun-

cio que se realiza, sobre todo, “con

la oración, con la valentía evangéli-

ca y con el testimonio de las biena-

venturanzas” y de su fuerza revolu-

cionaria, que proclama como bien-

aventurados a quienes en nuestras

sociedades son descartados y consi-

derados como débiles y perdedores,

y que, además, promociona un mo-

delo de felicidad opuesto al que ha-

bitualmente nos ofertan los medios

de comunicación y la opinión públi-

ca dominante.

No es extraño, por tanto, que,

como se señala en la Evangelii gau-

dium, la salida misionera sea para-

digma, modelo, de toda obra de la

Iglesia. En ello radica, de hecho,

parte de la esencialidad de la mi-

sión evangelizadora. Y en la cir-

cunstancia de que de su “intensi-

dad y eficacia deriva también la

verdadera renovación de la Iglesia,

de sus estructuras y de su activi-

dad pastoral”. “Sin la inquietud y

el ansia de evangelización –añade

el Papa– no es posible desarrollar

una pastoral creíble y eficaz”.

Curiosamente, es de este carác-

ter esencial de la tarea desempeña-

da por las OMP de donde nace su

“privilegiada” posición; aquella que

les permite extender su mirada e

interés “a los amplios y universales

horizontes de la humanidad, a sus

fronteras geográficas y, sobre todo,

humanas”. A las OMP les corres-

ponde acompañar “la vida de las

Iglesias jóvenes esparcidas por el

mundo” y animar “al Pueblo de

Dios para que viva plenamente la

misión universal”. “Son instrumen-

tos de comunión entre las Iglesias”

y favorecen el intercambio de per-

sonas y recursos económicos. “Son,

por tanto, protagonistas de una re-

novada evangelización, dirigida a

todos y, en especial a los pobres, a

los últimos, a los marginados”.

Y entre tanto “privilegio”, una

advertencia: no convertirse en una

ONG, en una oficina de distribu-

ción de dineros, en meros funcio-

narios; no dar nunca por supuesto

Quién mueve la misión.

E D I T O R I A L

EDITA: Obras Misionales Pontificias DIRECTOR NACIONAL DE OMP: AnastasioGil DIRECTOR Alfonso Blas DISEÑO Antonio Aunés COLABORADORES RosaLanoix, Rafael Santos, Francisco José Pérez Valero, Dora Rivas, José Beltrán, Jo-sé Carlos Rodríguez, José Ignacio Rivarés, Fernando Redondo, Israel Íñiguez,

Modeste Munimi, José Ramón Carvallada, María Jesús Sahagún, Carmina Sofía Fernández, Juana Gómez, JoaquínMartínez, Juan Lázaro Sánchez, Vicente Marqués Ruiz ARCHIVO FOTOGRÁFICO Antonio Aunés, Rafael SantosFOTOGRAFÍAS Efe, Missio SUSCRIPCIONES Roberto Murga DEPÓSITO LEGAL M-48558-1999 ISSN 1695-1034 IMPRESIÓN Gráficas Dehon. PP. Reparadores. C/ La Morera, 23-25. Torrejón de Ardoz, Madrid. Tfno: 91 675 15 36

T E R C E R M I L E N I O

La esencial tarea de las OMP

Las OMP son instrumentos de comuniónentre las Iglesias y favorecen el intercambio

de personas y recursos económicos.

Page 4: Misioneros Nº 156

De un tiempo a esta parte,el catolicismo mira cada vez

más fijamente al otro ladodel Atlántico, a América. Mu-chas son las esperanzas evan-gelizadoras depositadas en el"continente de la esperanza",

en el que viven el 40% de loscatólicos de todo el mundo.En mayo, América Latina ha

acogido dos importantesacontecimientos eclesiales: la

asamblea general del ConsejoEpiscopal Latinoamericano

(CELAM) y la beatificación demonseñor Romero. En los

próximos meses, el foco me-diático seguirá puesto allí,

pues el papa Francisco visitaen julio Ecuador, Bolivia y Pa-raguay, y en septiembre Cuba

y los Estados Unidos.

14 misioneros NÚM. 156, JUNIO DE 2015

I G L E S I A A F O N D O

AMÉRICA LATINA,AMÉRICA LATINA,

La Iglesia en América Latinaestá en marcha. Y no soloporque el 13 de marzo de2013, y por primera vez en

la historia, uno de sus pastores, elarzobispo de Buenos Aires, fueraelegido para la cátedra de Pedro.Que también. Se ve que está enmarcha porque ha asumido que esa

elección conlleva, además de un“legítimo orgullo”, un plus de res-ponsabilidad hacia la Iglesia uni-versal; porque desde la V Conferen-cia General del CELAM, celebradaen Aparecida (Brasil) en 2007, estaIglesia se dice “en salida”, al en-cuentro de quienes aún no conocena Cristo; y, por último, porque goza

UNA IGLESIAEN MARCHA

Page 5: Misioneros Nº 156

NÚM. 156, JUNIO DE 2015 misioneros 15

de una vitalidad menos visible enlas Iglesias de otros continentes,unas veces porque la evangeliza-ción está aún en fase temprana, yotras porque la fe ha quedado re-ducida –en el mejor de los casos–a la esfera interior y privada.

Esta fue la clase de reflexionesque se hicieron el pasado mes demayo en la trigésima quinta asam-blea general ordinaria del CELAM,celebrada en Santo Domingo (Re-pública Dominicana). El encuentro,que congregó a unas 80 personas,deparó la elección como nuevopresidente, para los próximos cua-

tro años, del arzobispo de Bogotá,cardenal Rubén Salazar. Se tratadel cuarto prelado colombianoque ocupa el puesto desde la crea-ción en 1955 de esta institucióneclesial, que agrupa a 22 episco-pados de América Latina y el Cari-be. Los otros fueron los cardenalesLópez Trujillo (1979-1983) y DaríoCastrillón (1987-1991), y el arzo-bispo Jorge Enrique Jiménez Car-vajal (1999-2003).

Monseñor Salazar sustituye enel CELAM a monseñor CarlosAguiar, quien al comienzo de lostrabajos presentó el balance de sus

cuatro años de gestión. El arzobis-po mexicano recordó en su informelas varias visitas realizadas en esetiempo a los papas Benedicto XVIy Francisco; los frutos de los en-cuentros de la Presidencia salientecon los responsables de la Pontifi-cia Comisión para América Latina ycon las Conferencias Episcopalesde Estados Unidos y Canadá; la“muy fluida” relación con la Confe-deración Latinoamericana de Reli-giosos (CLAR); las entrevistas man-tenidas con los embajadores lati-noamericanos acreditados antela Santa Sede, a los que se ha

Page 6: Misioneros Nº 156

querido concienciar del dramamigratorio que se da en el conti-

nente, etc. Monseñor Aguiar quisosubrayar también de manera espe-cial dos acontecimientos: el I Con-greso Latinoamericano de Agentesde Pastoral Familiar, que tuvo lu-gar en Panamá en agosto de 2014,por un lado, y el V Simposio Lati-noamericano de Teología India, ce-lebrado en San Cristóbal de las Ca-sas, en el estado mexicano deChiapas, en octubre de ese mismoaño, por otro. El CELAM, que fijólas directrices de su Plan Globalpara el período 2015-2019, ha pro-movido asimismo una nueva tra-ducción del Nuevo Testamento –lade la Biblia de la Iglesia en América

(BIA)– y ha puesto en marcha unorganismo para responder a losdesafíos de la Amazonía: la RedEclesial Pan-Amazónica (REPAM).

El mensaje final de la asam-blea afirma que la Iglesia en Amé-rica Latina quiere ser, “cada vezmás”, una Iglesia “misionera, mi-sericordiosa y samaritana”, unaIglesia “que acoge y sirve a todoslos que la sociedad descarta y dese-cha”, y una Iglesia “en salida, cen-trada en Cristo y descentrada parair al encuentro de las periferias”.

Romero, beatoSi importante ha sido este en-

cuentro, la beatificación, unos díasdespués, del arzobispo Óscar Ro-mero, asesinado el 24 de marzo de1980 mientras celebraba la euca-ristía, supone un hito para la Igle-sia de todo el continente, y aununiversal. Doscientas ochenta milpersonas se dieron cita el 23 demayo en la plaza Divino Salvadordel Mundo de San Salvador paraelevar a los altares al “profeta delpecho herido”, como lo califica elhimno a él dedicado y entonadodurante la ceremonia. Fue Romero,

en palabras de los propios obispossalvadoreños, un hombre de Dios yde Iglesia que fue “asesinado poramar a los pobres a ejemplo de suMaestro, Jesús de Nazaret”. “A ellos–destacó en un mensaje la Confe-rencia Episcopal– prestó su voz deprofeta y por ellos entregó la vida,renunciando a la cómoda situaciónde abandonar el rebaño y huir co-mo hacen los mercenarios”.

La ceremonia fue presididapor el cardenal Amato, prefecto dela Congregación para las Causasde los Santos, y en ella participa-ron otros cuatro cardenales (Mara-diaga, Brenes, Lacunza y Ortega),decenas de obispos, unos 1.400sacerdotes y el postulador de laCausa, el arzobispo italiano Vicen-zo Paglia. Entre las autoridades ci-viles hubo dos presidentes (los deEcuador y Panamá), varios vicepre-sidentes y delegaciones de una do-cena de países. Fue una fiesta de lafe, en la que se reivindicó a Rome-ro no como “un símbolo de divi-

La Iglesia en América Latina quiereser cada vez más una Iglesia ensalida, misionera y samaritana.

16 misioneros NÚM. 156, JUNIO DE 2015

Card. Rubén Salazar, nuevo presidente del CELAM.

Page 7: Misioneros Nº 156

sión”, sino de “paz, armonía y her-mandad”. “Romero –dijo monse-ñor Amato– pertenece a la Iglesia,pero también a la humanidad. Esnuestro, pero también de todos,porque es el profeta del amor deDios, del amor al prójimo...”. “Paramí –ha dicho en este sentido elespañol monseñor Kike Figaredo,misionero en Camboya– monseñorRomero es una inspiración, y enBattambang (Camboya), mi sede,nuestro centro pastoral lleva sunombre. En su figura, en mi caso,Asia y América se unen desde lafe, desde el amor a los pobres ydesde la lucha por una justicia pa-ra la gente más sencilla, para losmás pequeños”.

La ceremonia, celebrada bajoun sol de justicia, transcurrió sinincidentes. (¡Qué distinto del fune-ral celebrado en la explanada de lacatedral el 30 de marzo de 1980,en el que la explosión de tres bom-bas y el caos generalizado causa-ron 40 muertos y unos 200 heri-dos! Por cierto, que la que fueraasistenta de monseñor Romero,Juana Portillo, perdió ese día a unode sus hijos en medio de aquel tu-multo, según ha contado al diarioEl Mundo. Juana, de 86 años y exi-

liada en Madrid, acudió con él adespedirse de su arzobispo, y no loha vuelto a ver desde entonces).Durante la misa, para la que esta-ban acreditados más de 1.200 pe-riodistas de todo el mundo, se lle-vó al altar, a hombros, una urnaque contenía la camisa que llevabaRomero cuando fue tiroteado du-rante la consagración, reliquia queva a peregrinar ahora por todas lasparroquias de El Salvador. Duranteel ofertorio se presentó, ademásdel pan y el vino –evocadores tam-bién de esa eucaristía inconclusa–un ramo de flores, una réplica desu mitra (regalada posteriormenteal papa Francisco, en señal de

agradecimiento) y una canasta conalimentos básicos de El Salvador,como signo del compromiso delnuevo beato con los pobres.

Lo dicho: fue una verdaderafiesta de la Iglesia salvadoreña, pe-ro también de la Iglesia continen-tal y universal. En América Latina,miles de personas participaron deella a través de eucaristías de ac-ción de gracias –8.000 fieles asis-tieron a la celebrada en el santua-rio mexicano de Guadalupe–, vigi-lias y encuentros de oración en ca-si todos los países. La representa-ción española corrió a cargo del P.José María Gil Tamayo, secretariogeneral de la Conferencia Episco-pal, que acudió en nombre de losobispos españoles. Por todo ello,sorprende que aún haya quien seempeñe en calificar a esta comouna “beatificación política”.

Congreso de la CLARLos religiosos latinoamerica-

nos no pasaron por alto este even-to, e hicieron público un mensajeen el que afirman que la beatifi-cación de Romero “constituye unacontecimiento de revitalizaciónsin precedentes para la Iglesia deAmérica Latina y el Caribe, y detodo el mundo”.

La Confederación Latinoa-mericana de Religiosos también

NÚM. 156, JUNIO DE 2015 misioneros 17

Page 8: Misioneros Nº 156

está de actualidad, pues del 18al 21 de junio celebra en Bogotá

un Congreso de Vida Consagrada.Se trata de un encuentro que seenmarca en el Año de la Vida Con-sagrada y en el que participan en-tre 1.200 y 1.400 religiosos y reli-giosas de aquellas tierras, así co-mo unos pocos delegados de Espa-ña, Italia, Japón, Estados Unidos yFilipinas. En el momento de escri-bir estas líneas, los países más re-presentados eran la anfitriona Co-lombia (con 495 inscritos), México(71), Perú (67), Brasil (56) y Ecua-dor, Chile y Argentina, con unos 45cada uno. Estaba confirmada lapresencia de dos cardenales: el ar-zobispo de Bogotá, monseñor Sa-lazar, y el brasileño Braz de Aviz,prefecto de la Congregación paralos Institutos de Vida Consagraday las Sociedades de Vida Apostóli-ca. El tema del congreso es: “Hori-zontes de novedad en la vivenciade nuestros carismas hoy; escu-chemos a Dios donde la Vida Con-sagrada clama”.

El papa Francisco aludió a me-diados de mayo al papel que losreligiosos deben jugar en el mun-do moderno. Lo hizo en una au-diencia con los consagrados y con-sagradas de la diócesis de Roma, alos que dijo que ningún religioso,ni siquiera las monjas de clausura,puede enajenarse del mundo. Lavocación –afirmó Francisco– no esun refugio, sino un campo de ba-talla. La persona consagrada, portanto, debe tener siempre las “an-tenas levantadas” para intuir lossufrimientos de los demás. “Lasonrisa de las monjas sacia más alas personas que vienen a pedirque el pan que se les da”, remató.

Viajes papalesEl protagonismo eclesial de

América Latina no se detiene ahí,pues en los próximos meses el pa-

pa Francisco emprende dos viajespastorales al continente. El prime-ro, en julio, le lleva a Bolivia, Ecua-dor y Paraguay; el segundo, enseptiembre, a Cuba y a EstadosUnidos. Serán la segunda y terceravez que regrese a América, tras elprimero de sus viajes internacio-nales, que le condujo, pocos mesesdespués de ser elegido Papa, aBrasil, con ocasión de la JornadaMundial de la Juventud de Río.

Pero vayamos por partes. Fran-cisco visita Bolivia, Ecuador y Para-guay del 5 al 13 de julio. En Ecua-dor, el primero de sus destinos,permanece tres días. Su agenda esapretada: celebra dos eucaristías(en el parque Los Samanes de Gua-yaquil y en el parque del Bicente-nario de Quito); visita al presiden-

te Rafael Correa; se reúne con losobispos; acude a la Pontificia Uni-versidad Católica; se encuentra conrepresentantes de la sociedad civil;con los sacerdotes, religiosos y se-minaristas (en el santuario nacio-nal mariano de El Quinche); y visi-ta la iglesia de la Compañía de Je-sús y una casa de reposo atendidapor las Misioneras de la Caridad.

En Bolivia, segunda etapa delrecorrido, permanece del 8 al 10de julio. Allí los actos se centransobre todo en Santa Cruz de la Sie-rra, pues en La Paz permanece me-nos de 24 horas. Además de loshabituales encuentros con autori-dades civiles y religiosas, Francis-co celebra una única eucaristía alaire libre –en la plaza de Cristo Re-dentor de Santa Cruz–, a la que se

18 misioneros NÚM. 156, JUNIO DE 2015

IGLESIA A FONDO

La beatificación de Mons. Romerofue una fiesta de la fe y un hito

para la Iglesia de todo el continente.

Sacerdotes portan a hombros una urna con la camisa

que llevaba Mons. Romero en el momento de su muerte.

Page 9: Misioneros Nº 156

espera que asistan dos millones depersonas. Las notas distintivas dela estancia boliviana, en cualquiercaso, son la visita a la cárcel dePalmasola (donde hay unos 5.000presos), y la asistencia, también enSanta Cruz, al II Encuentro Mun-dial de Movimientos Populares, enel que participan personas que tra-bajan por la erradicación de la po-breza y la exclusión social. Se tra-ta del segundo viaje de un Papa aBolivia, tras el efectuado por sanJuan Pablo II hace 25 años.

El punto final de este primerperiplo americano es Paraguay, endonde Francisco visita un hospitalpediátrico, celebra dos misas (unaen la plaza aledaña al santuariomariano de Caacupé, la otra en elcampo grande de Ñu Guazú), sedesplaza a Bañado Norte (uno delos barrios más pobres de Asun-ción) y se reúne con los jóvenesantes de regresar a Roma. Las Igle-sias de los tres países esperan alPapa con impaciencia.

El segundo de los viajes ame-ricanos de Francisco tiene lugaren septiembre. Del 19 al 22, Fran-cisco visita Cuba como “Misionerode la Misericordia”; tal es el lemaescogido para la visita. (El 8 de di-ciembre, fiesta de la Inmaculada,comienza en la Iglesia el JubileoExtraordinario de la Misericordia,convocado mediante la bula Mise-

ricordiae vultus). Juan Pablo II acu-dió a la isla en 1998 como “Men-sajero de la Verdad y la Esperan-za” y Benedicto XVI lo hizo en2012 como “Peregrino de la Paz”.Francisco viaja en esas tres jorna-das a La Habana, Holguín, el san-tuario de la Virgen de la Caridaddel Cobre y Santiago de Cuba, des-de donde partirá rumbo a los Es-tados Unidos. El Pontífice, comose recordará, recibió el 10 de ma-yo a Raúl Castro en el Vaticano.Tras ese encuentro, el presidentecubano elogió “la sabiduría, mo-destia y virtudes” que atesora elPapa y afirmó: “Yo me leo todos

sus discursos. Si continúa hablan-do así, les aseguro que volveré arezar y regresaré a la Iglesia. Y nolo digo en broma”.

En Estados Unidos, el SantoPadre participa en el EncuentroMundial de las Familias, que tienelugar en Filadelfia; pronuncia undiscurso ante la Asamblea Generalde la ONU en Nueva York; hablatambién al Congreso, en Washing-ton; se entrevista con Obama, cu-yo mandato presidencial está apunto de expirar; y canoniza alfranciscano mallorquín JuníperoSerra. El nuevo santo, al que Fran-cisco define como “uno de los fun-dadores de los Estados Unidos”,llegó a California en 1767 (tras laexpulsión de los jesuitas de Espa-ña y de las posesiones de Ultra-mar) y a partir de 1769 fundó nue-ve misiones a lo largo de la costa.Bautizó a más de 6.000 indígenasy fue beatificado por Juan Pablo IIel 28 de septiembre de 1988.

JOSÉ IGNACIO RIVARÉS

NÚM. 156, JUNIO DE 2015 misioneros 19

El Papa Francisco y Raúl Castro en su encuentro en El Vaticano.

Page 10: Misioneros Nº 156

De repente, el país quehabía caído más bajoen los fondos de labrutalidad, el fanatis-

mo y la pobreza extrema, se levan-ta y se erige en ejemplo de recon-ciliación para el mundo. Esta po-dría ser la conclusión del Foro deBangui, una conferencia nacionalde diálogo que se celebró en la ca-pital de la República Centroafricanadel 4 al 11 de mayo. Entre los par-ticipantes había milicianos de gru-pos armados, representantes delGobierno y del Ejército, líderes dela sociedad civil, religiosos de va-

rias denominaciones, mujeres, jó-venes, jefes tradicionales..., proce-dentes de todos los rincones delpaís, y también de los campos derefugiados en países vecinos y de ladiáspora. Hay que recordar que laRepública Centroafricana tiene aúnmedio millón de desplazados y otromedio millón de refugiados en elexterior, una cifra altísima para unpaís de apenas cuatro millones ymedio de habitantes.

Aunque no faltaron los mo-mentos de tensión y planean nu-merosas dudas sobre si las con-clusiones del Foro se pondrán en

24 misioneros NÚM. 156, JUNIO DE 2015

El mes pasado se cele-bró en Bangui un foronacional de reconcilia-ción, que reunió a cer-

ca de 700 participan-tes. Poner en prácticasus conclusiones, so-

bre el desarme de losgrupos armados, el fin

de la impunidad y elbuen gobierno, será,durante los próximosmeses, el reto princi-

pal de la RepúblicaCentroafricana, paraque este país pueda

dejar atrás décadas decaos y violencia.

EN BUSCA DE LA RECONCILIACIÓN

P R I M E R P L A N O

FORO DE BANGUI

Page 11: Misioneros Nº 156

práctica, nadie puede negar elgran esfuerzo que han hecho loscentroafricanos. Durante algo másde una semana, personas que has-ta hace muy poco se habían bus-cado para matarse, se sentaron enla misma sala para hablar –a ve-ces a gritos, pero hablar, al fin yal cabo–, comieron juntos y llega-ron a algunos compromisos. En al-gunos momentos cumbre, algunosde ellos incluso se abrazaron. Notodas las sociedades que han pa-sado por conflictos violentos pue-den decir lo mismo.

La gestaciónLa génesis de esta conferencia

hay que buscarla en julio del añopasado, cuando, bajo una fuertepresión internacional, los principa-les grupos armados firmaron inextremis un acuerdo de alto el fue-go en Brazzaville. Aunque tuvo po-co seguimiento y los enfrenta-mientos continuaron en el país, enaquella reunión en la capital de laRepública del Congo se acordó lacelebración de un foro nacional dediálogo previo a las elecciones.Previsto inicialmente para enero,fue retrasado varias veces parapermitir que estuviera precedidode consultas populares.

Una de las cosas que hanaprendido los centroafricanos desu historia reciente es que inicia-tivas anteriores de diálogo hanfracasado por centrarse demasia-do en actores políticos. Esta vez eltono lo marcó la sociedad civil, yfueron las voces de las víctimaslas más escuchadas. También re-sonaron las voces de numerososgrupos religiosos. Son muchas lasparroquias que han servido de re-fugio a miles de musulmanes quehuyeron del acoso de las miliciasanti-balaka, y tanto el arzobispode Bangui, monseñor Dieudonné

Nzapalainga, como numerosos

sacerdotes han hecho de mediado-res en momentos críticos.

Durante ocho días, todos estosgrupos –sobre todo, de las basespopulares– discutieron sobre cua-tro grandes temas: paz y seguri-dad, justicia y reconciliación, go-bierno y desarrollo económico. Hu-bo también numerosos represen-tantes de la comunidad interna-cional como observadores, sobretodo de la MINUSCA, la misión dela ONU en el país, que, durante losdías del Foro, cumplió su primer

aniversario y que tiene desplega-dos 12.000 soldados y policías, alos que apoyan 1.800 soldadosfranceses, que han empezado a re-tirarse gradualmente.

Durante los últimos días, loscuatro grupos temáticos presenta-ron sus recomendaciones a la ple-naria, para ser adoptadas formal-

mente. Una de ellas se refiere a laprolongación del Gobierno actualde transición, ya que las eleccionesno podrán celebrarse en agosto,como estaba previsto, debido aproblemas financieros y logísticos.Hay que recordar que, desde quelos rebeldes de la Seleka tomaronel poder por las armas el 24 de

Cuatro fueron los grandes temas atratar: paz, justicia y reconciliación,

gobierno y desarrollo económico.

NÚM. 156, JUNIO DE 2015 misioneros 25

Page 12: Misioneros Nº 156

marzo de 2013, Centroáfrica notiene un Gobierno reconocido co-

mo legítimo por la comunidad in-ternacional. El líder de la Seleka,Michel Djotodia, fue obligado a di-mitir en enero de 2014 y, desde en-tonces, dirige el país Catherine

Samba-Panza, como presidenta deun Gobierno de transición, cuyo finestaba previsto para febrero de es-te año. Ante la imposibilidad de ce-lebrar elecciones por la falta defondos, el final de la transición seprolongó seis meses más, hastaagosto, y ahora el Foro ha decididodar algo más de margen. No ha cal-mado mucho los ánimos esta deci-sión. Sobre Samba-Panza pesangraves acusaciones de corrupción yel impopular Gobierno que dirige–y que apenas controla la capital yun exiguo puñado de ciudades enel interior– está lleno de muchosde sus familiares y personas másallegadas. Muchos, sin embargo, sehan resignado a aceptar esta solu-ción como un mal menor.

El Foro aprobó también la crea-ción de una Comisión de Verdad,Justicia, Reconciliación y Repara-ción, que excluye toda amnistíapara los autores de crímenes deguerra y de genocidio, y prevé laexistencia de Comisiones Localesde Reconciliación. La RepúblicaCentroafricana, uno de los paísesmás inestables del mundo, ha su-frido más de diez golpes de Esta-do desde su independencia en1960. La última crisis, que culminócon la toma del poder por parte delos rebeldes musulmanes de la Se-leka en marzo de 2013, derivó ha-cia un conflicto interreligioso trasel levantamiento de milicias anti-balaka, que emprendieron una ver-dadera caza al musulmán. De he-cho, el imán Kobine Layama estu-vo un año refugiado con su fami-lia en la residencia del arzobispode Bangui, Dieudonné Nzapalain-

ga. “Antes de la guerra, las relacio-nes entre líderes religiosos cristia-nos y musulmanes eran bastanteteóricas y a menudo no sabíamosde qué hablar, pero el sufrimientoque hemos pasado juntos nos haunido”, dijo el arzobispo Nzapa-lainga hablando del trabajo de laplataforma interreligiosa de paz.En enero del año pasado, el arzo-bispo de Bangui, el imán Oumar

Kobine y el reverendo Nicolas Gue-

rekoyame se encontraron con va-rios líderes mundiales para abogarpor el despliegue de una fuerza depacificación de la ONU en el país.

Acuerdo de desarmeEl momento culminante del

Foro lo marcó la firma, el 10 demayo, de un acuerdo de desarme ydesmovilización por parte de diez

grupos armados. Dos de ellos, laSeleka (escindida, desde el año pa-sado, en cuatro facciones) y la mi-licia anti-balaka, controlan aúngrandes zonas del país, donde im-ponen su ley. El nuevo acuerdo

prevé que los excombatientes quequieran incorporarse a las fuerzasarmadas podrán hacerlo si cum-plen los requisitos establecidos. Suaplicación dependerá de la finan-ciación que se reciba por parte de

26 misioneros NÚM. 156, JUNIO DE 2015

Fue esta vez la sociedad civil –y enespecial las víctimas– la auténticaprotagonista del Foro de Bangui.

Page 13: Misioneros Nº 156

la comunidad internacional, quedesconfía del actual Gobierno, so-bre el que pesan acusaciones gra-ves de corrupción, y parece quepreferirá esperar a ver qué diri-gentes saldrán elegidos en los co-micios de finales de este año.

Llegar a este acuerdo fue unatarea ardua. El moderador del Foro,el veterano político e historiadorsenegalés Abdoulaye Bathily

–nombrado por el secretario gene-ral de Naciones Unidas, Ban Ki-

moon, representante especial paraÁfrica Central– utilizó, entre basti-dores y durante varias semanas,todas sus buenas artes de hábilmediador para convencer a los lí-deres de los grupos armados deque se comprometieran a alcanzarun desarme voluntario. Cuandopor fin llegó el momento de la fir-ma, dos de los líderes de las prin-cipales facciones de la Seleka seecharon atrás y se enzarzaron en

una violenta discusión con suscompañeros de armas presentes enla sala, de donde salieron echandobufidos ante la mirada incrédulade los diplomáticos y periodistaspresentes. Tras unos momentos dedesconcierto, el resto de los otrosocho grupos firmaron y, cuandoparecía que todo se había acabado,los dos líderes que se habían ne-gado a firmar entraron por sorpre-sa en la sala para estampar su rú-brica en el último minuto... Eso sí,seguidos por otros miembros de

sus mismos grupos que les grita-ban para que no lo hicieran.

Extraña poco, visto lo visto,que a los dos días, el líder más po-tente de la Seleka –el general Nou-

reddine Adam, acusado de nume-rosos crímenes de guerra– declara-ra desde su bastión de Birao, en elnorte del país, que no aceptaba elacuerdo. Ya el último día del Foro,el 11 de mayo, durante la ceremo-nia final, cientos de personas semanifestaron en el exterior parapedir la dimisión de la presidenta.Los organizadores de la protestaeran milicianos anti-balaka y Sele-ka que –ironías de la vida–, des-

pués de dos años de matarse entreellos, estaban ahora juntos paramanifestar su descontento común.Aquel día y el siguiente hubo ba-rricadas y tiros en varios puntos deBangui. Y el 16 de mayo, dos fac-ciones rivales de los anti-balaka –afavor y en contra del Foro– se en-frentaron a muerte en su baluartetradicional del barrio de Boy Rabe.

Antes de este acuerdo de de-sarme cogido por los pelos, hubo,no obstante, un gesto muchomás esperanzador. El mismo día

NÚM. 156, JUNIO DE 2015 misioneros 27

P R I M E R P L A N O

Page 14: Misioneros Nº 156

que comenzaba el Foro, los diezgrupos armados firmaron un

acuerdo con UNICEF por el que secomprometían a liberar a todos losmenores soldado que se encontra-ban en sus filas. El 14 de mayo,tres de estos grupos –los anti-ba-laka, y dos facciones de la Seleka–remitieron a la UNICEF, en la ciu-

dad de Bambari, a 357 de sus jó-venes excombatientes, algunos deellos de apenas 12 años de edad.

Mientras tanto, el ambienteen Bangui durante esos días estu-vo marcado por la calma y un op-timismo moderado. La capital, en-galanada de pancartas que reza-ban: “Dialoguemos, reconciliémo-

nos”, tenía un aspecto vibranteque hacía meses que no conocía,aunque algunos de sus barrios si-guen siendo aún “zona roja”. Gasi,un taxista que tenía cuatro cochesantes de la crisis y que actual-mente solo cuenta con uno, des-pués de que los milicianos de laSeleka le robaran los otros tres, in-tenta rehacer su vida y ve, en lallegada de los numerosos expatria-dos que sirven con Naciones Uni-das y varias ONG, una oportunidadque no se puede desaprovechar.“Hasta hace muy pocas semanas,

28 misioneros NÚM. 156, JUNIO DE 2015

El Foro hizo realidad la firmade un acuerdo de desarme

por parte de diez grupos armados.

oy particularmen-te sensible a to-do lo que vues-

tras comunidades hanhecho en favor de lasvíctimas de la violenciay de los refugiados".Con estas palabras, elpasado 15 de mayo,agradecía el papaFrancisco a los obis-pos centroafricanos sulabor callada por la

paz. Los prelados seencontraban en Romapara su visita adlimina. El Papa les re-cordó que ha seguidosiempre con muchaatención los aconteci-mientos vividos en laRepública Centroafrica-na, país que muy pro-bablemente podría vi-sitar –junto con Ugan-da– antes de final de

año, en el que sería suprimer viaje a África.

"Vuestra tarea es difí-cil, pero, cuando pare-ce que el mal y lamuerte triunfan, apare-ce la esperanza de unarenovación fundada enCristo", añadió el Pontí-fice al final de este en-cuentro, en el que re-cordó a los obispos delas nueve diócesis del

país que la "difícil eineludible misión de laIglesia" consiste en cal-mar los ánimos, aliviary curar las heridas dela división: "No os sin-táis desanimados porla tormenta que atra-vesáis, sino, al contra-rio, encontrad en la es-peranza y la fe la fuen-te de un dinamismorenovado", concluyó.

S“

"No os desaniméis en medio de la tormenta""No os desaniméis en medio de la tormenta"

Page 15: Misioneros Nº 156

había barrios de Bangui dondeningún taxista nos atrevíamos aentrar por miedo a las milicias”,cuenta mientras intenta no perderdetalle por la radio de la retrans-misión en directo del Foro.

Fuera del gran edificio de laAsamblea Nacional, donde se cele-braron las deliberaciones, teníanlugar todos los días cientos de fo-ros más informales: los de los co-rrillos formados en las tabernasal aire libre y en los mercados po-pulares, donde la gente seguía lasintervenciones, debatía y, muy amenudo, expresaba su alegría porlas decisiones que acababan detomarse. A alimentar este inter-cambio de ideas contribuyeronlas cuatro compañías de telefoníamóvil de Centroáfrica, que todoslos días enviaban mensajes desms a sus abonados en francés ysango: “Este es el Foro de la últi-ma oportunidad”, “El diálogo esel camino hacia la paz”, “En lagran reunión hay sitio para todoslos centroafricanos”. Sin dudabuenos deseos, que los meses ve-nideros dirán si se han podidorealizar para ayudar a los centro-africanos a pasar página.

JOSÉ CARLOS RODRÍGUEZ

uy respeta-do por losdistintos

grupos armados,políticos, actoresinternacionales ylos centroafricanosde a pie, el arzo-bispo de Bangui,Dieudonné Nzapa-lainga, ha sidouna de las figurasclave del Foro dela reconciliación.Nacido en 1967en un hogar mo-desto en Bangas-sou, de padre ca-tólico y madreprotestante, entrómuy joven en lacongregación delos Misioneros Es-piritanos. Tras li-cenciarse en Teo-logía en París, tra-bajó en Marsella,entre 1998 y2005, como cape-llán de un orfana-to y vicario parro-quial, hasta quevolvió a Centroá-frica como supe-rior provincial delos Espiritanos, ta-rea que compagi-nó con la de pá-rroco de NôtreDame d'Afrique,en la capital. Na-da podía prepa-rarle para la fortí-sima crisis que sa-cudió a la Iglesiacentroafricana en2009 y que él tu-vo que vivir enprimera persona,cuando, tras la

destitución del en-tonces arzobispode Bangui, Pauli-no Pomodimo, ydel presidente dela ConferenciaEpiscopal porcomportamientoescandaloso, fuenombrado admi-nistrador apostóli-co de la capital.Se encontró conun clero dividido,

muchos de cuyosmiembros llegarona amenazar conuna huelga comoprotesta por sunombramiento.

Con mucha ma-no izquierda ydiálogo discreto,Nzapalainga supoganarse a sus ad-versarios y calmarlas aguas. Tras sernombrado arzo-bispo de Banguien julio de 2012,tuvo que enfren-tarse a una crisismucho más grave:la que asoló elpaís desde finalesde ese año, con laofensiva de los re-

beldes musulma-nes de la Seleka.Él y sus amigos–el reverendo Ni-colas Guerekoya-me y el imán Ko-bine Layama– fun-daron una plata-forma interconfe-sional por la pazque, desde enton-ces, se ha distin-guido por su la-bor de mediación

y de presencia enforos internacio-nales para pediruna intervenciónque salve Centroá-frica del caos. Ennumerosas ocasio-nes, monseñorNzapalainga haejercido tambiénde negociador encasos delicados,como ocurrió enenero de este año,cuando consiguióque las miliciasanti-balaka libera-ran a varios rehe-nes en su poder;entre otros, unacooperante fran-cesa y un ministrodel Gobierno.

M

NÚM. 156, JUNIO DE 2015 misioneros 29

El apóstol de la pazEl apóstol de la paz

Page 16: Misioneros Nº 156

Oceanía es, de todos, el más ignoto y singular de los conti-

nentes. También, el más pequeño: 9 millones de km². Y el me-

nos poblado: 34 millones de habitantes, tantos como los que

tiene Marruecos ahora. Paradojas de la vida: Oceanía está le-

jos, muy lejos, lejísimos; es "lo más", en distancia; y, sin em-

bargo, está sembrada de huellas españolas, muy próximas y

cercanas, por todas partes. También en el seno de su Iglesia.

I N F O R M E

es que españoles fueron

los primeros marinos occi-

dentales que arribaron a

Oceanía. Allí llegaron el

portugués, nacionalizado español,

Fernando de Magallanes y el bur-

galés, de las norteñas Merindades,

Gonzalo Gómez de Espinosa, y el

guipuzcoano, de Guetaria, Juan Se-bastián Elcano, en 1521. En Ocea-

nía están las islas Carolinas, así

nombradas en honor de Carlos IIde España. Pero antes, cuando fue-

ron descubiertas por Toribio Alon-

so de Salazar, que también era

norteño, de Las Encartaciones viz-

caínas, y Álvaro de Saavedra, pri-

mo de Hernán Cortés, les pusieron

otros nombres. Que se llamaban Is-

las de las Hermanas, de los Hom-

bres Pintados y de Los Jardines... Y

las Marianas, así nombradas por

Diego Luis de San Vitores en ho-

menaje a Mariana de Austria, la

esposa de Felipe IV. O Papúa-Nue-

va Guinea, que debe su nombre al

explorador español Íñigo Ortiz deRetes. En 1545, este marino alavés

tomó posesión de esas tierras, a las

que bautizó como Nueva Guinea,

por el parecido que notó entre sus

habitantes y los nativos africanos

de la costa de Guinea. Durante sus

singladuras, avistó varias islas a

las que bautizó como Sevillana, Ga-

llega, de los Mártires...

Pioneros de la misiónPero no solo la soldadesca, ma-

rinos y comerciantes formaron par-

te de las expediciones de las naves

españolas por Oceanía. También los

30 misioneros NÚM. 156, JUNIO DE 2015

Y

Page 17: Misioneros Nº 156

misioneros solían acompañar a las

tripulaciones de los galeones. Pero

tardaron más tiempo en establecer-

se en la multitud de islas oceánicas

porque los intereses mercantiles

(porcelana, seda, especias...), y tam-

bién misioneros, estaban en las Fili-

pinas, antes que en las islas lejanas

de los mares del Sur.

En este sentido, es bien ejemplar

el caso de Diego Luis de San Vitores

(o Sanvitores). Este castellano viejo,

bautizado en la burgalesa iglesia de

San Gil, a la vera de la gótica cate-

dral castellana, era de familia noble.

Sus padres estaban empeñados en

que el muchacho hiciera la carrera

de las armas. Pero les salió rana: a

Diego, la música militar nunca le

supo levantar. Y dijo que nones. Op-

tó por la vida religiosa. A su padre

tampoco le cayó en gracia que su

hijo fuera religioso. Tanto es así que

le sacó del colegio. Pero se empeci-

nó. Y, al cabo, se hizo jesuita. El jo-

ven Diego tomó el hábito y, en

1662, partió, como misionero, hacia

las “Felipinas”, que así llamaba ya a

las “islas del Poniente” desde que,

en 1542, el explorador malagueño

Ruy López de Villalobos bautizó de

ese modo las islas de Leyte y Sámar

en honor al, entonces, Príncipe de

Asturias. Luego, por extensión, se

llamó así a todo el archipiélago.

En su camino hacia Manila, San

Vitores hizo una escala en la isla de

Guam. Entonces, junio de 1662, to-

davía se llamaba Guaján. Allí, pudo

comprobar el estado de abandono

en el que se encontraba la pobla-

ción nativa. Es entonces cuando

Diego, que ya se hace llamar Diego

Luis, por su devoción a san LuisGonzaga, conmovido por lo que

han visto sus ojos, decide hacer to-

do lo posible para regresar y poder

ocuparse de ellos. Su vida, enton-

ces, se torna en lucha contra la bu-

rocracia, para obtener los permisos

necesarios para establecerse en

Guaján. Las autoridades de Manila

se lo deniegan. Pero Diego no se

rinde. Erre que erre y, con ayuda de

su padre, que tenía vara alta en la

Corte (era administrador del Tesoro

Real en Sevilla), y, sobre todo, del

confesor de la reina, Everardo Ni-thard, que también era jesuita, con-

sigue su objetivo. Felipe IV da su

plácet al proyecto de San Vitores.

Así las cosas, el 23 de marzo de

1668, zarpó desde Acapulco con

otros cinco jesuitas, que serán los

fundadores de la nueva misión.

Llegaron a Agaña, en la isla de

Guam, el 16 de junio de 1668.

San Vitores aprende el chamo-

rro –que está sembrado de voces

españolas en un 50%; por tener,

hasta la españolísima eñe tiene en

su alfabeto– con ayuda de un fili-

pino, náufrago en Guam. Los nati-

vos le reciben sin resistencia, pero

un chino llamado Choco, hizo co-

rrer el bulo de que el agua del bau-

tismo causaba la muerte. Esa

habladuría desató las hostilida-

NÚM. 156, JUNIO DE 2015 misioneros 31

Page 18: Misioneros Nº 156

32 misioneros NÚM. 156, JUNIO DE 2015

des y algunos de los misioneros

resultaron heridos. A fines de

1669, los misioneros hablan de un

total de 13.000 bautizados y

20.000 catecúmenos. Fueron des-

cubiertas más islas además de las

tres conocidas: Guam, Saipan y Ti-

nian. Gracias a la ayuda de Maria-

na de Austria, que se materializó

en una aportación económica de

3.000 pesos anuales, el equipo de

San Vitores pudo poner en marcha

un sistema educativo que perdura-

rá durante toda la presencia espa-

ñola. Fundado en 1669, el colegio

masculino de San Juan de Letrán

impartía formación religiosa, tra-

bajos manuales y música. En la es-

cuela de niñas, radicada, primero

en Fina y, poco después, en Agalla,

comenzó enseñando religión y ta-

reas domésticas...

En 1671, la sequía trajo la ame-

naza de hambre. El pueblo retomó

sus creencias abandonadas. Diego

les prometió lluvia si volvían al Dios

cristiano. La lluvia llegó. Y los “ma-

canas”, una especie de hechiceros

que vieron amenazada su autori-

dad, decidieron librarse de los es-

pañoles, a comenzar por los misio-

neros. Varios fueron asesinados an-

tes de que se restaurara la paz.

En 1672, camino de Agaña, Die-

go se detuvo para bautizar una ni-

ña recién nacida y a punto de mo-

rir, a petición de la madre, pero

contra la voluntad de su padre.

Enfurecido, Matapang, que así se

llamaba, mató a San Vitores y a su

compañero de fatigas, Pedro Ca-lungsod, que era seglar.

Diego Luis de San Vitores puso

en pie la primera iglesia de Ocea-

nía: dedicada al Dulce Nombre de

María, fue inaugurada el 2 de fe-

brero de 1669. Era una humilde ca-

pilla, que se levantaba en lo que

hoy es la Plaza de España. La nue-

va catedral, reconstruida, ahora se

yergue a un paso de ese lugar. San

Juan Pablo II beatificó al jesuita

burgalés el 6 de octubre de 1985.

Y una década después, en 1995, en

Nueva Guinea, beatificó al heroico

catequista Peter To Rot, quien dio

su vida como testimonio de su fe

durante la ocupación japonesa, en

la última guerra mundial.

Pero esos mártires no son los

únicos. San Pedro Chanel, marista

francés, muerto en 1841, es el pri-

mer santo y el patrono de Oceanía.

El beato Juan Mazzucconi, italiano,

en 1855. El padre Damián de Veus-ter, belga, murió leproso, en 1889, a

la edad de 48 años, entre los lepro-

sos que curaba en la isla de Molokai.

Gracias al admirable y heroico

empeño de aquellos pioneros de la

misión que hicieron suyo el texto

de Isaías y marcharon “a las islas

lejanas que nunca oyeron hablar de

INFORME IGLESIA DE OCEANÍA

Retrato de san Damián de Molokai

Page 19: Misioneros Nº 156

Mí...”, hoy podemos decir que la

Iglesia católica de Oceanía es una

Iglesia bien arraigada, firme y pu-

jante. Cuenta con más de 8 millo-

nes de católicos: 8.564.000. El 25%

de su población lo es. El 42%, 12,5

millones, son protestantes. Y orto-

doxos, el 2,2%: 675.000.

La aventura misionera“La aventura de la misión no es

un camino de rosas. Sí, una ruta

sembrada de alegrías. Quien lo

probó, lo sabe”. Firma y rubrica

esta triple afirmación un tal Anto-

nio. Antonio sabe mucho de estas

andaduras. Antonio López García-Nieto, que tal es su nombre com-

pleto, también sabe, aunque las

más de las veces calla –y se ciñe a

rumiarlo para sus adentros–, que

esa su opción por acompañar a los

más necesitados de la tierra tam-

bién entraña, en ocasiones, no po-

cos sustos, sinsabores y sorpresas.

Solamente lo admite cuando la

charla sucede en petit comité. O

cuando no queda más remedio, co-

mo ha sucedido bien recientemen-

te por obra y desgracia de un ex-

traordinario fenómeno celeste.

Antonio es extremeño: natural

de Don Benito, allá en la comarca

de las Vegas Altas que se asoman

al generoso Guadiana, que riega

las tierras de Badajoz. Pero su lu-

gar de trabajo no está en las de-

hesas extremeñas. Tampoco en

Mérida, la romana capital. Ni si-

quiera en la manchega Madrid. Es-

tá donde da la vuelta el aire: a

17.379 kilómetros de distancia.

¡Ahí es nada! Está, justamente, en

la otra punta del planeta. En las

antípodas. Sí, en Oceanía; concre-

tamente en el archipiélago de Va-

nuatu, que es otra de las 14 na-

ciones que forman ese continente,

tan distante, distinto, dispar y,

también, desconocido para los

más de los españoles. Al sur de ese

pequeño país, la isla de Tanna. Allí

gasta sus días el bueno de Antonio.

Antonio, además de extremeño,

es misionero de los Hermanos del

Sagrado Corazón. Hace ya más de

60 años que los Hermanos –funda-

dos en Lyon por André Coindre(1787-1826)– llegaron a Nueva Ca-

ledonia. Eso fue el 12 de octubre de

1954. Antonio aterrizó, en ese des-

tino, en 1977. En 2001, inició su

apostolado en la misión católica de

Montmartre, en la isla de Efate. Du-

rante dos años, fue profesor del co-

legio y del Liceo. Allí enseñaba

francés y español. Desde 2003,

ejerce su apostolado en la misión

católica de Lowanatom, en esa isla

de Tanna, al sur de Vanuatu.

Los Hermanos tienen, en Tan-

na, un colegio de enseñanza gene-

ral y técnica. Los alumnos, además

de las asignaturas generales, pue-

den estudiar carpintería, cocina y

costura. Con el apoyo y la colabo-

ración de la Fundación Corazonis-

tas de la provincia de España, han

podido poner en marcha diversos

proyectos: becas de estudio, equi-

pamiento de talleres, construcción

de módulos prefabricados...

Ante el crecimiento de la po-

blación estudiantil y el reto de las

nuevas necesidades educativas, en

2009 los Hermanos decidieron

abrir un liceo que permitiera a ni-

ños y jóvenes de Tanna continuar

su bachillerato en la isla sin tener

que desplazarse a Port Vila, la ca-

pital del país. Para muchos, eso

equivalía a tener que abandonar

los estudios, porque sus familias

no podían hacer frente a gastos

tan excesivos. Además, para los

NÚM. 156, JUNIO DE 2015 misioneros 33

Antonio López García-Nieto

Page 20: Misioneros Nº 156

más pudientes, también era un

riesgo muy grande: a esa edad,

en que son tan vulnerables, po-

dían dejarse influir por una socie-

dad urbana masificada donde la

delincuencia y la droga empiezan

a hacer estragos entre la juventud.

Para conjurar esos riesgos, en

2010 la Fundación Corazonistas

subvencionó la construcción de

una cocina, un laboratorio y cua-

tro aulas. Con su apoyo, el proyec-

to de desarrollo del Colegio Técni-

co San José, de Lowanatom, pudo

crecer hasta completar todos los

estudios superiores. Este tipo de

obras son las que, sin que nadie lo

note, hacen sonreír y llenan de

alegría los días de Antonio López

García-Nieto, el misionero.

Al borde de la tragediaDesde ese perdido y olvidado

rincón del mundo, a mediados del

pasado mes de marzo, el hermano

Antonio saltó a las primeras planas

de todos los medios informativos

por culpa de “Pam”, el devastador

huracán –un ciclón de categoría 5,

la mayor, con vientos que soplaban

a 340 kilómetros por hora–; me-

dios que, de la noche a la mañana,

le convirtieron en “desaparecido”:

“Sin noticias, todavía, sobre el mi-

sionero español desaparecido en

Vanuatu”. De ese tenor eran las

nuevas que pasaban las agencias

de prensa... La tormenta ha costa-

do la vida a 24 personas y ha arra-

sado casas, iglesias, escuelas, clíni-

cas, comercios, árboles y cultivos

de las más de 80 islas que hay en

el país; todo el mundo –es decir,

267.000 personas– se ha visto afec-

tado en mayor o menor grado.

Tras salir a la palestra para de-

cir que seguía vivo y espantar, así,

el miedo y la zozobra de familiares

y amigos que temían por su suerte,

Antonio, que vive en comunidad

con otros tres religiosos –dos nati-

vos y un canadiense–, nos cuenta

su aventura: “Hemos tenido un ci-

clón espeluznante: nueve horas de

viento huracanado y lluvia. En el

colegio, lo hemos perdido todo. En

la comunidad, casi todo. La sala

central se ha salvado. Allí hemos

podido refugiarnos los cuatro her-

manos, hasta que podamos recons-

truir algo. Gracias a Dios, seguimos

con vida. Aquí, en Lowanatom ha

habido tres muertos. Una de nues-

tras alumnas ha salido con la pier-

na rota. Poco a poco, vamos ha-

ciendo limpieza alrededor.

El Pam ha sido el más fuerte de

todos los ciclones conocidos. Nor-

malmente, un ciclón dura una o

dos horas. Este duró nueve. Nos

atacó a las 5:30 de la mañana por

el este y, hasta entonces, la casa

aguantó. Luego viró al norte y, ahí,

hacia las 9:00 de la mañana, voló el

tejado de la vivienda. Yo estaba en

mi habitación. Creí que había llega-

do mi última hora. Pero estaba muy

tranquilo: ya había puesto todo en

manos de Dios. Aguanté casi dos

horas bajo la lluvia y el viento en

un pequeño rincón de la habitación

donde había quedado una mengua-

da porción de madera que me pro-

tegía más menos que más. Al final,

pude salir. Y llegué a la sala central,

donde estaban mis compañeros.

Hacia las 12:00 el ciclón giró al

oeste. Yo temía que se nos iba a lle-

34 misioneros NÚM. 156, JUNIO DE 2015

INFORME IGLESIA DE OCEANÍA

Efectos del devastador huracán Pam.

Page 21: Misioneros Nº 156

var el tejado de la sala. Gracias a

Dios, no fue así. Hacia las 14:30 el

viento comenzó a amainar y pudi-

mos salir. Afuera, en todo reinaba

la desolación: en casa, en la iglesia,

en el colegio y en el poblado... Todo

el mundo lo ha perdido todo.

En la comunidad, ahora, trata-

mos de aprovechar las planchas de

hojalata llevadas por el viento pa-

ra reconstruir, aunque sea de for-

ma precaria, alguna parte del teja-

do y, así, protegernos de la lluvia.

Intentamos reconstruir, poco a po-

co, nuestra vida.

La tarea es realmente exte-

nuante. Al final del día acabo ago-

tado. Gracias a Dios, estoy bien de

salud, con algunos rasguños sola-

mente. Y puedo dormir bien desde

la puesta de sol hasta el amanecer.

Como no disponemos de electrici-

dad, no se puede hacer mucho

cuando el sol se pone. Los demás

hermanos, Amos, Delphino y Di-mitri, también se encuentran bien.

No tenemos electricidad, ni co-

municaciones, ni agua corriente.

Vamos a buscarla a un pozo. He

conseguido enviar este mensaje

porque, en la capital, me han per-

mitido conectarme a Internet. Me

encuentro sano y salvo, gracias a

Dios. Y muy unido a todos, que sé

que rezáis por nosotros. Seguimos

muy unidos por la oración”.

A un mes del desastre, la Igle-

sia católica del archipiélago de las

Vanuatu, con la ayuda de las Cári-

tas Oceanía, incluidas Cáritas Aus-

tralia y Cáritas Nueva Zelanda, ha

distribuido tiendas, lonas y otros

materiales de emergencia a las po-

blaciones afectadas por el paso del

ciclón, porque todavía siguen sin

hogar. Mucha gente vive en la ca-

lle, sin comida, ni medicinas, y tie-

ne que afrontar uno de los más

desastrosos sucesos que jamás ha

sufrido el archipiélago.

La diócesis de Port Vila está lle-

vando a cabo un plan de ayuda a

las comunidades de las islas exte-

riores del archipiélago y para re-

construir refugios y proporcionar

medios de subsistencia. Además,

se ha comprometido a mejorar la

preparación de la comunidad para

futuros desastres.

El ciclón Pam no es el primer

desastre que –¡gracias a Dios!– ha

capeado airoso el hermano Anto-

nio: en febrero de 2013, tras el te-

rremoto ocurrido en Islas Salo-

món, tuvo que espantar la angus-

tia que produce no tener noticias

lanzando este mensaje: “Sigo vivo

y coleando”. Lo hizo a través de

las Obras Misionales Pontificias.

Ahora, esta nueva catástrofe natu-

ral ha empujado a toda la opinión

pública mundial a mirar hacia el

más desconocido de los cinco con-

tinentes que llenan la Tierra.

El lema de Vanuatu es Long God

yumi stanap, que viene a significar:

“Con Dios, saldremos adelante”.

Consigna que, gracias a la callada

labor de los misioneros que allí

gastan sus días, bien puede valer

para Oceanía entera, el más aisla-

do de todos los continentes.

XIMENA DE ANGULO

n la actualidad laIglesia de Oceaníatiene 77 diócesis y

112 obispos. Más de la mi-tad, 74, son nativos. Y algu-nos de ellos, descendientesde los aborígenes. Además,cuenta con 5.000 sacerdotes,11.800 religiosas, 2.152 reli-giosos no sacerdotes, 12.137hermanos, 800 seminaristasmayores, 231 laicos misione-ros y 6.800 catequistas.

Del dinamismo de sus obis-pos dan buena fe los últimospronunciamientos colectivos:"Nosotros –dicen los preladosde Papúa-Nueva Guinea e IslasSalomón– nos oponemos fir-memente al uso de la pena demuerte: este tipo de penas nopueden tener lugar en un paíscristiano, donde debe prevale-cer la verdadera justicia y mi-sericordia. Cuando las ejecu-ciones se llevan a cabo por elEstado, las personas desarro-llan la actitud de que es acep-table responder a la violenciacon violencia. Oramos paraque el rechazo de esta formade violencia pública pueda serun ejemplo y dar lugar al re-chazo de la violencia domésti-ca y todas las formas de vio-lencia en nuestra sociedad",señalan en una reciente cartapastoral. En 1991, Papua-Nue-va Guinea volvió a introducirla pena de muerte.

Además, la Iglesia de Ocea-nía está al frente de 140 hos-pitales, 265 hogares de ancia-nos, 239 orfanatos, 2 leprose-rías, 79 guarderías, 595 es-cuelas primarias, 2.523 escue-las secundarias, 660 centrosde educación superior...

E

NÚM. 156, JUNIO DE 2015 misioneros 35

Una Iglesiaen cifras

El misionero Antonio López, en la escuela.

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